Quebrada Santa Julia
un conjunto acotado de rocas trabajadas, la integridad de los rasgos, el hecho que las evidencias no se superpongan unas a otras y que se encuentren en «el mismo nivel», y la reducida expresión vertical del depósito. Con el propósito de explorar el conjunto lítico en función del espacio se diseñó una estrategia de recuperación de datos que supuso invertir el esfuerzo en el relevamiento unitario de la posición tridimensional de cada pieza (figura 20). La planta permitió estudiar la disposición espacial de cada una de las evidencias líticas, restos óseos, rasgos y otros restos orgánicos. En ella se acopiaron los resultados de todas las campañas de terreno y las referencias principales del análisis del comportamiento espacial de las evidencias arqueológicas surgen de su observación detallada.
Figura 20. Distribución de artefactos y restos orgánicos en la planta excavada en quebrada Santa Julia.
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