ENTRE MARCHAS Y MANCHAS. JÓVENES PERUANOS EN EL NUEVO MILENIO
apostar por la institucionalidad del Consejo Juvenil a partir de los lineamientos señalados por el CONAJU. Posteriormente, el Centro Loyola Ilo ejecutó un nuevo proyecto nacional asumido por Encuentros Casa de la Juventud y la conformación del Consorcio Juventud y País (2003), compuesto por varias ONG pertenecientes a la sociedad jesuita que ejecutaban un trabajo juvenil a nivel nacional. El proyecto se denominó Formación pa-
ra el liderazgo y la participación ciudadana juvenil (2002-2005), que tuvo como objetivo, formar a ciudadanos jóvenes. El Centro Loyola Ilo decidió trabajar con los jóvenes de Moquegua, por cuanto gestionar nuevo financiamiento de la cooperación internacional exigía una carta aval de la municipalidad provincial, donde se compromete a facilitar espacios participativos para los Jóvenes. El ex alcalde de la Municipalidad Provincial de Ilo de ese entonces, Jorge Mendoza, se negó a firmar dicha carta. Sin embargo, Antonio Zeballos, ex alcalde de la Municipalidad Provincial Mariscal Nieto, vio con buenos ojos esa propuesta y firmó la carta aval por lo que el Centro Loyola inició un trabajo integral de formación ciudadana con jóvenes en la capital Moquegua y no en Ilo, como solía ser. b) Otras experiencias de jóvenes organizados Pero no solamente las ONG han estado vinculadas a estas experiencias de promoción de la participación ciudadana juvenil, hubo líderes juveniles con iniciativas que supieron canalizar su sensibilidad social en las décadas siguientes. Los grupos Juveniles Puerto Joven, y Juntos en el 2010 son clara muestra del protagonismo 125