El aura de Manuel Juan Carlos Quiñones Testimonio
Claro está, en mi experiencia lo que voy a tratar de llevar a la ficción son sucesos y elementos que están muy directamente asociados con el personaje literario que yo también soy. Manuel Ramos Otero
E
n el abismo de la superficie que le hace de pantalla a mi tableta levita la foto de portada del libro Invitación al polvo, de Manuel Ramos Otero. Yo la toco, la acaricio, poso la punta de mi dedo índice sobre la pantalla dactilosensitiva de mi ordenador justo sobre el rostro de Ramos Otero. Presiono y oprimo para ampliar, para confirmar aquello que ya sé, pero a lo que siempre regreso en esta foto poderosa a constatar. Mi caricia no está exenta de erotismo, pero ese erotismo, esa enervación perversa implícita en el roce, no lo impone mi deseo. Al menos no del todo. Más de una vez he dicho que me besaría de lengua con Manuel Ramos Otero, después de todo. Pero la carga sexual del contacto repetido de
78 / REVISTA CRUCE: “¿QUÉ MÁS QUIEREN DE MÍ SINO ESTE LIBRO ABIERTO?”