5 La interacción de estas dos tendencias ha engendrado la nueva forma de asentamiento urbano que es la metrópoli. Lo que conocemos por este nombre ya no es aquella institución del pasado, ya no es lo que antes se entendía por “la ciudad”, y, por otro lado, no es tampoco “el campo” precisamente (Blumenfeld, 1967). No se puede negar que el crecimiento de las enormes metrópolis ha planteado serios problemas. Entre estos, los principales son: la congestión de tráfico, la polución del aire por los humos industriales, las basuras domésticas y el humo procedente del carburante de los vehículos. Frente al problema de la ciudad industrial surgen los primeros planteos. La primera familia de ejemplos, son la que denominamos como Urbanismo Crítico parte de un rechazo radical a la ciudad existente y plantea la salvación vinculada con la generación de nuevas comunidades acotadas y reducidas que van a funcionar como ideas de sustitución del caos urbano de la ciudad industrial. En la segunda familia, son lo que denominamos como Urbanismo técnico-burocrático que se sitúan en una posición opuesta a los anteriores ya que por el contrario van a plantear actuaciones concretas en la ciudad existente a los efectos de mejorar sus condiciones de habitabilidad, funcionamiento, y permitir los crecimientos que aparecían como imposibles en la ciudad industrial, etc. Se intenta entender y aceptar la problemática de la ciudad para transformarla. A diferencia de grupos para los que la salvación era abandonar la ciudad existente, estos otros proponían la reivindicación de la ciudad existente (Caballero, 1993). Luego de la Segunda modernidad y su revolución urbana las cuales produjeron modelos y dieron nombre al urbanismo. Se sitúa la tercera modernidad y su revolución urbana están dando lugar a nuevas actitudes frente al futuro, nuevos proyectos, formas de pensar y de actuar diferentes: es lo que llamaremos de ahora en adelante urbanismo o “nuevo urbanismo” (Acher, 2004). Han surgido nuevos inventos, como el vídeo, el teléfono móvil, los ordenadores portátiles o Internet, de gran importancia en la vida urbana. La generalización del segundo automóvil y del AVE ha contribuido a modificar profundamente el territorio (Acher, 2004).