ESTRATEGIAS PARA LA IGUALDAD Concepción Ros Ros Doctora en Psicología
La educación para la igualdad de género ha de incorporarse e impregnar nuestra tarea dentro de la educación no formal de forma integral, y no solo en actividades o jornadas puntuales. Educar para la igualdad implica un proceso por el que se pone en tela de juicio qué enseñamos, cómo enseñamos y por qué enseñamos. Se ha de tener presente en todas las tareas. Para aprender a compartir la vida en igualdad se están desarrollando programas de sensibilización y aprendizaje, desde la educación formal y la educación no formal e informal. El objetivo principal es adquirir un compromiso personal en la construcción de relaciones de respeto, solidaridad y equidad. “El baúl” de actividades que os proponemos en este apartado reseña situaciones concretas de la vida cotidiana, como son el reparto de las tareas domésticas, la historia, el trabajo, la violencia, el lenguaje, entre otras. Las actividades están diseñadas desde el enfoque socioafectivo, en el que el análisis y la percepción de lo que nos ocurre y sucede en nuestro entorno nos lleva a interiorizar nuevas formas de pensar y actuar en coherencia con las ideas que defendemos. La metodología ha de ser lúdica, participativa y cooperativa, fomentando la reflexión y el espíritu crítico. 255