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Ana Isabel Gallego
TODO ES ENERGÍA Y LA ENERGÍA NI SE CREA SE DESTRUYE, SOLO SE TRANSFORMA. Esto es algo que todos hemos oído alguna vez, sin embargo, no llegamos a ser conscientes de esta realidad en nuestras vidas. Estamos siempre enfocados en lo que se puede percibir con los sentidos físicos y a lo que no, ni lo contemplamos ni le damos importancia. Sin embargo, estamos rodeados de ondas de frecuencia, como las ondas de radio, las infrarrojas, las ultravioletas, entre otras, que nuestros órganos sensoriales físicos no son capaces de captar, pero si nos pueden llegar a afectarnos muy seriamente. Hay radiaciones que emiten los aparatos eléctricos, los ordenadores, antenas de telefonía móvil, entre otras, que perturban nuestro propio campo electromagnético.
SOMOS SERES DE LUZ Gracias a las investigaciones del Biofísico Fritz-Albert Popp, podemos saber que las células emiten y se comunican con Luz, con biofotones. Que una célula cancerígena emite una frecuencia lumínica distinta a las que están sanas. Que una célula antes de morir, tiene una emisión de luz como una supernova. Es decir que es un lenguaje biológico frecuencial, de luz, que indica la salud de nuestras células, cuando perdemos nuestra propia frecuencia, por alteraciones, enfermamos. Nuestras células, emiten también fotones y energía electromagnética, ésta una frecuencia biológica, porque es compatible con la vida. Sin embargo, cuando estamos expuestos a otras frecuencias, parasitan las nuestras propias y las perturban, pudiendo llegar a producir mutaciones genéticas y otras alteraciones de nuestra salud. Por eso, en este mundo tan “civilizado”, es muy importante que utilicemos ciertas medidas de prevención para ayudar a nuestro organismo a mantener su propia frecuencia.
CUIDAR NUESTRO ENTORNO PARA CUIDAR NUESTRA SALUD Nosotros, estamos sujetos a la influencia de frecuencias, lumímicas, electromagnéticas, sonoras… hemos de cuidar mucho nuestro entorno, nuestros hogares, para evitar en todo lo posible estar recibiendo de una manera constante este tipo de perturbaciones, que pueden llegar a afectar muy seriamente nuestra salud.
