Las Huellas Que Dejamos

Page 41

37

El Faro Los Morrillos de Cabo Rojo y su entorno (Conferencia ofrecida en El Faro de Cabo Rojo por la Dra. Dafne Javier el 29 de mayo) Preámbulo Desde la antigüedad el ser humano descubrió que se podía flotar en el mar y comenzó a construir flotadores para cargar personas y mercancías. Estos flotadores o embarcaciones podían mover cualquier tipo de producto de manera eficiente. Al hacerlos más grandes se fueron alejando de la costa hacia otros horizontes. Llegando la noche, se hacía difícil ver la tierra o cualquier impedimento que hiciera zozobrar la embarcación. Los faros tuvieron su origen en hogueras encendidas para guiar embarcaciones que llegaban de noche a tierra. Las hogueras se hacían con leña, pero por la dificultad de transportarla, el aceite se convirtió en el combustible principal. Al aumentar las embarcaciones debido al tráfico comercial marítimo, transporte de personas y hasta ejércitos, se hizo necesario más hogueras y hacerlas elevadas para que se viera a distancia. Esto trajo la idea de hacer torres para sostener las hogueras. Dionicio de Bizancio (Siglo I d.c) menciona una torre llamada de Timea en Tracia, en cuya plataforma alta se encendía enorme hoguera (Enciclopedia Universal Ilustrada, p. 295). La etimología de la palabra «faro» proviene del latín «pharus», topónimo de la isla de Pháros, situada en la bahía de Alejandría (Egipto) en la que se construyó una de las Siete maravillas del mundo antiguo: el faro de Alejandría. Las otras seis fueron El coloso de Rodas (posiblemente un faro), La estatua de Zeus, El mausoleo de Halicarnaso, El templo de Artemisa en Efeso, Los jardines colgantes de Babilonia y La gran pirámide de Giza. El faro de Alejandría fue construido en el siglo III a.c. por el arquitecto Sóstrato de Cnido sobre la isla de Pharos, por orden del faraón Ptolomeo II (283-246 antes de Cristo). En ese punto se inauguró el gran puerto de la ciudad, que convertiría a Alejandría en uno de los centros comerciales más importantes de la Antigüedad La descripción más exacta respecto a su forma y apariencia es la realizada por Ibn al-Sayg, escritor árabe de Málaga del Siglo XII: El edificio fue el más alto de la antigüedad. Sobre una torre de planta cuadrangular de cien metros de altura se situaba una pirámide coronada por una estatua de Zeus. Existen otras descripciones de su forma. Edrisi, geógrafo árabe del Siglo XII indica que medía entre 125 y 150 metros de altura. Otros recuentos indican que estaba formado por tres cuerpos, el inferior de estructura cuadrangular, el intermedio adoptaba forma octogonal y el superior cilíndrico. A medida que se elevaba en altura disminuía en superficie. Construido en piedra, estaba forrado con losas de mármol. En el piso superior un juego de espejos reflejaba la luz del sol y orientaba a los barcos de día; por la noche una hoguera de leña y resina hacía lo propio por la noche y su luz podía verse a más de 50 kilómetros de la costa. Una leyenda indica que en el Siglo VII el califa Al-Alid ordenó desmontarlo pensando que bajos sus cimientos se ocultaba el tesoro de Alejandro Magno. Cuando comprendió su error intentó reconstruirlo, pero el sistema de lentes y espejos estaba destruido. Los restos del faro fueron transformados en mezquita que finalmente se derrumbó en 1341 a causa de un terremoto.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.
Las Huellas Que Dejamos by Joaquin Garcia - Issuu