Introducción L
os trabajadores de hogar representan a 67 millones de personas en el mundo. Según los datos de la Organización Mundial del Trabajo, Asia cuenta con el mayor número de estos, aportando 28 millones, seguida por América Latina con 18 millones y África con 9 millones. (cita) En América Latina Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, Granada, Guyana, Jamaica, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y recientemente México han ratificado el protocolo 189 de la OIT. (cita) El Convenio 189 recopila una serie de medidas a la que los Estados se deben de comprometer para cumplir con estándares básicos de derechos humanos y justicia laboral. Entre sus disposiciones se encuentran el derecho efectivo a la negociación colectiva, la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso, la abolición del trabajo infantil, la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación, así como la protección efectiva. (cita) La adopción de este Convenio y su respectiva recomendación (201) marcó un momento histórico, ya que por primera vez se dispuso de instrumentos laborales internacionales aplicables a un segmento de la fuerza de trabajo mundial que está ocupado principalmente en el sector informal. Se ha reconocido así debidamente el sector social y económico del trabajo doméstico. Estos instrumentos son fundamentos jurídicos que permitirán asegurar que las y los trabajadores disfruten del respeto y de los derechos que los trabajadores de la economía formal han conquistado en el curso de muchos decenios de la movilización social. (cita)
Evaluación del programa piloto para la incorporación de las trabajadoras del hogar al Instituto Mexicano del Seguro Social
3