María Donma
Mareya 1
Sin compasión Cada día sin compasión alguna, vas rasgando mis surcos, vas arrancando la piel con ese bronco formón. Sin embargo, las tierras mías, prestas siguen a recibir cuanto quieras dar; ¡qué absurda mi naturaleza no entiendo, por qué? este amor mío, tiene este doliente dulce carisma!
22