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Tita

Cuántos años transcurridos! la memoria repasa encantadores días, chiquilinas éramos, las cocineras, nos llamaban, entonces, infinitud de sueños hilábamos.

Con la blusa blanca, muy blanca saquito azul pastel falda azul noche, pasando la rodilla medias también blancas zapatitos negros y muy bien lustrados impecables, acrisoladas al Manuela Cañizarez presurosas acudíamos

Y los viernes, los sabaditos alegres con los guambras del Mejía, el Montúfar, y más, para socializar como dalias, como hortensias, como florecitas de eterna primavera con los trajes de gasa espumosos coloridos y bellos tacones finos y pulsera

Cuánto candor!! Y nuestros padres, tan querendones, que con la una mano el pan y con la otra el palo. Ahora, ellos han partido ya, quedamos los hijos y los hijos de los hijos, y las amigas sinceras, seres mágicos, como Tita l siempre allí está! con la palabra certera, la sonrisa fervorosa el abrazo cálido un bocadillo! verla, tenerla es una satisfacción plena!.