Artículo
Tiempo malogrado Dr. Gouldbusk Brookesmith, Ph. D. Professor and Dean College of Media & Communications
V
eladas declaraciones perpetraron un incansable reproche mutuo a colación de los acontecimientos nada superfluos que agitaron cual avispero africano las bases dogmáticas en las que cimienta (o cimentaba) la extensa savia orgánica intermateria.
frágil senda de Morfeo. Permitidme algo de presuntuosidad en clave pedante si aclaro el epítome al que pertenezco por obligación y no estudiada decisión. Decisión que si alcancé a ejercitar afectivamente al curso del tiempo malogrando alternativas o costes de oportunidad futuribles pero vagamente atractivos.
A riesgo de elucubrar más de lo correspondiente acusaré sin paliativo subyancente al conglomerado emocional activo que incita a desenhebrar la idiosincrasia exclusiva e inherente de ser una patochada garrafal sin propósito ni función. Conciliadora en parte, lo asumo horizontalmente pues no logro hallar traba alguna en planos dicotómicos específicos ni aberraciones suficientemente generosas para suscitarme un recelo otrora prejuicioso a sabiendas. El logos, ethos y pathos aristoteliano chocan brutalmente y se desintegran por completo renaciendo en un vómito petulante y asqueroso que obnubila ese ente incapaz de asumir de base el hecho por el hecho. Una diarrea de neocortex y cerebelo salpimentada de tronco encefálico. ¡Delectamentum!
La esencia clarificadora maneja aromas embriagadores que perpetran ínfimos cambios sensoriales semejantes a los delirios marineros rebosantes de sirenas. Dulces por fuera pero pútridos de base.
Puentes y caminos tangenciales convergen aleatoriamente sugiriendo progresiones algebraicas y formas positrónicas (citando a la doctora Susan Calvin) no percibidas o imaginadas sin adentrarse en la escurridiza y
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