MERCADO INTERNACIONAL
UniónEuropea:fuerteimpacto del Covid-19
A pesar que la producción agropecuaria comunitaria resistió el embate de las medidas adoptadas por el COVID 19, se espera que su impacto sobre la economía continúe generando efectos negativos, particularmente en los sectores que producen productos de mayor precio. Por sus características inéditas, tendría consecuencias negativas hasta por lo menos mediados de 2021. El mercado de carnes bovinas lo acusó claramente; si bien se observa una gradual mejora, asociada a la normalización de las actividades, es prematuro todavía considerar que esta será la tendencia definitiva. Crisis macroeconómica De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, la economía mundial enfrentaría una crisis mayor que la registrada en 2008-2009: estima una baja del 3 por ciento en 2020, que llegaría al 7.5 por ciento en el área del Euro, con posibilidades de una mejora en 2021, con aumentos del 5.8 y 4.7 por ciento, respectivamente. En consecuencia, la estimación es de una pérdida del PB Global equivalente a 9 billones de dólares, aproximadamente la mitad del PBI en la Unión Europea. Este marco hace prever mayor recesión y desempleo, un panorama poco favorable para la demanda, particularmente, de bienes y servicios que no son esenciales. Las medidas de aislamiento y limitación del contacto físico, adoptadas en los países miembros, determinaron una baja importante en el nivel de gastos de los consumidores, que fue más aguda en los sectores de transporte, servicios, recreación, restaurantes y hoteles, dañando especialmente a aquellas economías en las que el turismo tiene una mayor incidencia. En respuesta a ello fue evidente una disminución del 50 por ciento en la de-
INFORME GANADERO
manda de combustible: muchas aerolíneas suspendieron sus actividades por varias semanas. Paralelamente, los principales productores se enfrentaron a una escasa capacidad de almacenamiento, razón por la cual el precio del petróleo crudo en la segunda mitad del pasado mes de marzo cayó a apenas 25 US$/barril; si bien a través de recortes en la producción se logró atemperar la baja, su valor actual es un 40 por ciento menor al de fines de 2019. Las posibilidades de una recuperación de la macroeconomía dependerán de una normalización sostenida de las actividades, así como también de la eficacia en las estrategias que se implementen para estimular la actividad económica, con la salvedad de que por la evolución de la pandemia esta crisis no tiene ni el mismo timing ni gravedad en todas partes del mundo. Iniciada en China, se expandió después hacia Europa, para pasar posteriormente a América y Africa. Esta asimetría le da un carácter inédito y genera mayor incertidumbre sobre su curso e impacto a nivel global. En líneas generales, todos los países miembros de la UE adoptaron medidas de confinamiento, que generaron un aumento en la demanda hogareña de productos básicos, dependiendo ello de las pautas culturales de cada país, si bien como contrapartida tuvieron una influencia positiva sobre el canal de comercio digital. Este consumo ha tenido características que difieren de las requeridas por la demanda del sector de hostelería e institucional, en términos del tipo, envase y volumen reclamado, lo que afectó la oferta de productos Premium, como algunos cortes bovinos. Asimismo, hubo restricciones desde el punto de vista de la oferta, tanto asociadas con los inconvenientes en el traslado de productos, como por la disponibilidad de trabajadores, aquejados
por la enfermedad. Los precios de las carnes bovinas que ya estaban bajo presión, no soportaron la caída de la demanda provocada por el COVID 19 y continuaron retrocediendo, provocando bajas también en los valores del ganado. Cabe acotar que ante la imposibilidad de canalizar en cadenas de comidas rápidas y restaurantes, hamburguesas y cortes más preciados sufrieron bajas de precios para comercializarlos en el sector minorista. De acuerdo a la Comisión Europea, durante 2020 el consumo per cápita se reducirá a un nivel estimado en 10.6 kg por habitante. Evolución y perspectivas Durante 2019, la producción de carnes bovinas se redujo un 0.9 por ciento en un contexto de precios bajos y reflejando, en primer término, las consecuencias del despoblamiento de los rodeos en algunos países productores importantes, tales como Francia, Italia y los Países Bajos, mientras que posteriormente pesaron las dificultades para exportar por parte de Polonia. Alemania experimentó una mayor producción por un exceso de oferta de vaquillonas, mientras que en el caso de Irlanda se registró un aumento, directamente vinculado con la anticipación de la industria a la implementación del BREXIT. Nuevamente, las medidas adoptadas para reducir el plantel lechero incidirán sobre la disponibilidad de carnes bovinas, lo que se registrará con mayor énfasis en Francia, Alemania, Italia y Polonia. Si bien se ha verificado un aumento de hembras de los rodeos para carne en España, Polonia e Italia, el saldo será negativo, con un total de vacas en los países miembros
10 de julio de 2020
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