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GENTE elCaribe, JUEVES 28 DE ABRIL DE 2022
10 MOMENTOS INOLVIDABLES DE...
Ramona Ureña ACTIVISTA ECOLÓGICA
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“Los problemas hay que enfrentarlos con valentía” Ramona Ureña es fiel protectora de la Microcuenca Haina Duey, ubicada en el Parque Nacional Montaña Humiadora
CULTURA
MARÍA E. PÉREZ ROQUE
Archivo General de la Nación realiza tertulia
FOTO: FUENTE EXTERNA
Embajadores de Italia, Suiza, India, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Argentina, Uruguay, Alemania, Países Bajos, Marruecos, España, Nicaragua, Francia, México, Panamá y de la ONU participaron en la tertulia del Patronato del Archivo General de la Nación (AGN), a quienes su director, Roberto Cassá, les explicó sobre su funcionamiento y los avances logrados. Además, habló de las áreas en las que se requiere intensificar los esfuerzos y a las que se debe apoyar con mayores recursos.
“ENTENDER LAS LEYES DE LA NATURALEZA NO SIGNIFICA QUE SEAMOS INMUNES A SUS OPERACIONES”. David Gerrold ESCRITOR DE CIENCIA FICCIÓN E.U.
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amona Ureña lleva más de cuatro décadas impulsando la producción de agua para garantizar la existencia y la sanidad de los recursos hídricos, la producción sostenible y el progreso humano de las personas de su comunidad Villa Altagracia. Este propósito de vida lo asumió a sus 18 años, cuando comenzó a trabajar por el medio ambiente, movida por la falta de concientización de los agricultores y agricultoras hacia el medio ambiente y por el miedo de las autoridades a que el río desapareciera. Quina, como mejor es conocida en su entorno, sabía que desde la individualidad el desarrollo de la comunidad sería imposible, entonces apostó empíricamente a soluciones sostenibles que contribuyeron al bienestar colectivo. “Para la preservación del agua, la iniciativa que hemos realizado es cambiar una agricultura tradicional por una sostenible, por medio de la forestería análoga que no es más que cambiar un bosque natural por uno productivo, producir sin hacer daño a la naturaleza”, indicó la activista ecológica y protectora de la Microcuenca Haina Duey, ubicada en el Parque Nacional Montaña Humiadora.
1. Comunidad rural
CONVENIO
El Sistema Coca-Cola firma acuerdo con UDIEP El Sistema Coca-Cola, compuesto por la compañía Coca-Cola y su socio embotellador en el país Bepensa Dominicana firmó un acuerdo con la Unión Dominicana de Instituciones Educativas Privadas (UDIEP) para impulsar la educación ambiental para jóvenes del país. El convenio, suscrito en el marco del Día Mundial de la Tierra implementará una plataforma digital para la capacitación del personal docente y administrativo.
Nací en la comunidad rural Zumbador, Provincia Monseñor Noel, Bonao. Soy de las más pequeñas de diez hermanos, cinco hebras y cinco varones, dos murieron hace un tiempo. Cuando niña era muy delgada, no me gustaba mucho comer, siempre guardaba la comida, pero mi hermano Changuito se la comía. Un día que íbamos para la iglesia con mamá, la guardé en un jarro de Leche Nido y lo tiré debajo del fogón de la cocina. Cuando terminó la misa, Changuito salió corriendo para la casa a comerse mi comida, empezó a buscarla y no la encontró. Luego, él mismo contó que se sentó en un pilón que había acostado en el suelo y vio ese jarro, lo tocó con los pies y vio que estaba pesado, entonces lo abrió y se comió mi comida. Cuando fui a buscarla, ya no había nada. Eso me molestó tanto que dije que el que se la comió no es más que un ladrón. Para mi papá esa palabra fue muy grande, entonces le dijo a
Orgullo Mi papá Julio Heredia fue alcalde, él dice que salí a él. Mi mamá Polonia Herrera era una madre ejemplar, ella también ayudaba a mi padre en sus labores en el campo”.
Changuito que cogiera un machete que había en la casa y me diera 20 planazos. Papá decía que él trabajaba mucho para comprar comida para que yo le dijera ladrón a uno de mis hermanos, que si la gente me escuchaba iba a pensar mal de él. Eso fue algo injusto, porque me dieron una pela por la palabra que le dije a mi hermano, pero a él también debieron darle una por comerse mi comida”. 2. Sus padres
Tragedia El paso de las tormentas Noel y Olga por el país destrozó la comunidad, nos mató a 26 miembros, entre ellos mi hermana, su esposo y tres hijos”.
ESTUDIOS
Apec y Colombia “A mis 32 años, después que tuve todos mis hijos, el Departamento de Género del Cuerpo de Paz de los Estados Unidos me otorgó una beca en APEC en la capital, asistía los sábados, ahí me hice bachiller. Después fui a la universidad, pero solo estudié un primer cuatrimestre de Ciencias Sociales, porque los trabajos sociales no me permitían seguir estudiando. En 2019 conseguí una beca para estudiar en Colombia por tres meses, allá me gradué como Técnica Agropecuaria. Fue una experiencia inolvidable, porque ahí me di cuenta que todos los países de Sudamérica tenemos los mismos problemas, ideales y deseos de crecer. Nos enseñaron a vivir de la naturaleza sin hacerle daño, sobre agricultura orgánica, manejo de granjas de grandes y pequeñas y de cómo en áreas cortas tener cerdos. Aprendimos cómo del pipí y el agua después de lavar la granja se puede rehusar como abono líquido. Teníamos como 60 profesores, cada uno nos daba una materia todos los días, había estudiantes de Panamá, México, Honduras y de República Dominicana”.
Mi papá Julio Heredia es un hombre responsable, honesto, de mucho respeto, trabajó muy fuerte para criarnos. Él es agricultor, no nos pudo mandar a la escuela por completo porque era una persona muy pobre, además a él no lo enseñaron a estudiar. Pero por lo menos nos mandó a una escuelita de la comunidad que nada más llegaba hasta cuarto curso. Papá también fue alcalde, dice que salí a él. Mi mamá Polonia Herrera era una madre ejemplar, ayudaba a mi padre también en sus labores, le iba a cocinar a la loma, mientras mis hermanos mayors nos atendían en la casa. Ella murió hace cuatro años, tenía 89. Mi padre está vivo gracias a Dios, tiene 87”. 3. Defendiendo su integridad
Cuando estudiante me gustaba mucho el deporte, pertenecía a un equipo de pelota. Una vez mi equipo le estaba ganando al de unas compañeritas, entonces una de ellas comenzó vociarme que las muchachas de mi comunidad éramos muy pobres, que vestíamos con ropas muy baratas. Recuerdo que me incomodé mucho y le di par de galletas. Cuando vino el director y preguntó qué pasaba, le contesté que ella me estaba humillando, que no tengo culpa de ser pobre, que ella no tiene que decirme delante de la gente que pasamos hambre y que vivíamos mal. En el plantel había una dirección de hembras y una de varones, le aclaré al director que no nos trancara juntas porque le iba a dar más duro y nos puso separadas. Eso para mí fue una humillación, sin tener culpa de nada, solamente porque mi equipo estaba ganando. Yo tenía como trece años”. 4. Matrimonio
Me casé a los 18 años con Melenciano de León. Como su papá acababa de fallecer, nos fuimos a vivir al lado de su mamá en Villa Altagracia, cerca de la Microcuenca Haina Duey. Tene-