Bajo los dias de Concordia: Sangre & CeEnissa's

El Re(a)cuerdo

Basty giró el torso a la derecha sin mover la cadera, un movimiento que disfrutaba porque la torsión movia toda su ropa gracias a los arneses, y considerando el estado actual de su vida romántica, la falsa caricia era un estremecimiento que desesperadamente necesitaba. Sin perder concentración regresó al frente con la mirada perdida mientras ponía todo el peso en la pierna de abajo, sintiendo como cedía su muy endeble apoyo. Pero no cedió, así que para su propio placer, tanto como para acumular fuerza, repitió tres veces el movimiento, y con el último regreso, trasladó todo su peso de la pierna de abajo a la de arriba, despegando en una marometa de giros laterales que le permitieron ascender casi tres metros antes de arquear por completo el cuerpo y caer hacia atrás. En pleno vuelo, giró el bastón en su mano, dandose un momento para golpear el objetivo con toda su fuerza y luego utilizar el impulso del golpe para hacer un salto mortal de espaldas y caer de pie, al menos por un breve instante antes de que la inercia la llevara a caer de bruces.

Ella sonrió su victoria al ver el objetivo golpeado y con fuerza, pero antes de que pudiera celebrar escuchó Maurice recriminar:

¿Por qué la sonrisa si estas muerta?

Solo fue un breve descuido, en el siguiente intento caeré de pie. No hay segundos intentos allá afuera: Te caes, te mueres. No te preocupes por mí contestó enojada.

¡No me prepcupo por ti! Me preocupo porque aposté mi vida en esto, y no voy a dejar que se desperdicie por "un breve descuido".

Usualmente Basty podía soportar todo el abuso que venía de Maurice, pero en este momento no entendía el porque del enojo, si claramente lo había logrado y por encima de la marca, o más bien, si lo entendía, pero le molestaba el reclamo porque él no era el único que se estaba jugando la vida en este proyecto. Así que sin querer, o más bien queriéndolo, abrió la boca de par en par y esperó a capturar los ojos del hombre para reclamarle, pero este nisiquiera le dio tiempo de articular algo pues espetó: ¡Una vez más!

Basty no varió la expresión, en todo caso se levantó enojada pues no era una mujer para dejar tirada en el suelo, y pese que supo que no debía hacerlo exclamó: Supongo que te mataría darme una mano... inmediatamente se arrepintió pero si Maurice no la escuchó o no le importó, resultó un misterio, porque el hombre regresó a su posición. Esperándola

Maurice Conrad traía un batón blanco abierto, claramente al hombre le habían sentado bien los meses de ejercicio. Basty miró la pierna izquierda y el hombro derecho del hombre, solo para encontrar sin sorpresa que las marcas de sus pisadas estaban ahí, y ya que aquel no necesitó decir nada para hacerla sentir recriminada, ella corrió un par de pasos para pisar su pierna y hombro.

Antes de llegar al momento donde enojada como estaba, el roce de la ropa gracias a los arneses era mucho más potente (y cautivador), en el segundo movimiento casi deja salir su enojo en un gemido, por lo que al caer en cuenta que su instructor lo escuchó, no trasladó el peso del cuerpo y con toda la fuerza acumulada sobre la pierna de él; aquel cayó al suelo al igual que ella.

Basty se llevó un buen golpe, pero nada acomparación de lo que le tocó a Maurice, quien pese que ella estaba sonrojada y confundida en el suelo, se paró para regresar a la posición de apoyo.

Ya me cansé dijo ella avergonzada.

No me importa. Te vas a levantar y vas a continuar.

¡No quiero! gritó ella sin verlo a los ojos, lo que lo sacó de sus casillas.

Esto no se trata de ti. Me guste o no, eres la heredera de una tradición que este mundo no puede perder. Y te guste o no, soy la única persona que puede ayudarte a no perderla.

¡Eso dices! ¡Pero tu contribución podría aportarla un costal cualquiera!

Maurice se sintió insultado así que avanzó para regresar la cortesía.

Entrené con una verdadera artista y atleta, y si fui suciente para ella, soy mucho para ti. Ahora recomponte, y continua como...

Ese fue el acaboz, Basty hubiera dejado pasar cualquier otra cosa pero no la comparación, por correcta que fuera.

¡Yo no soy Vassandre! . Reclamó.

¡Claro que no lo eres! ¡Pero yo sí soy el que la ayudó a alcanzar el aire, y si después de estos meses no estas allá arriba es por tu culpa!

¡Estoy harta! ¡Me largo! dijo sin siquiera colocarse los zapatos. Abandonando la arena de entrenamiento descalza. Lamentando no haberlo hecho lo suficientemente rápido.

Bien, baja a la maldita villa y cogete a medio pueblo. Cuando ya te lo hayas acabado, te sientas concentrada y no urgida del amor de un arnés, regresas.

La humillación caló hondo. A ambos los presentaron con la mismas palabras; "a ella le encantan los extranjeros, y él es extranjero", así que desde entonces, todo parecía más personal de lo que era. Y si la morena era capaz de asestar un golpe en el aire, cuanto más podía hacer con un único reclamo.

¡Al menos el arnés puede acariciar!

Maurice se quedó paralizado. En cambio Basty se salió avergonzada del granero que era su centro de entrenamiento. Sin duda era un golpe bajo. Su culpa o no, Maurice había perdido los dos brazos y no solo no se hundió, sino que contiuó con su vida como si nada hubiera pasado. Además tenía razón, por el motivo que fuera, a ella, sin merecerlo se le confió la tradición de la danza áerea, y él había ayudado a la mejor de todos aquellos en el arte. Por lo que sin aquella pródiga, solo Maurice y Basty podían tratar de recuperar la escuela. Se necesitaban, y ninguno de los dos quería admitirlo frente al otro.

Maurice por su parte se quedó adentro. Uso un gancho en la pared de madera en la pared para despojarse de la bata, acto seguido fue a una pileta de agua y sumergió la cabeza, usando fuerza de su marcado abdomen para quitarse el exceso con un movimiento. Seguía furioso, pero tras años de malas decisiones que le costaron dos brazos, podía hacer un mínimo de introspección antes de perder más, y así, lejos en sus pensamientos, como siempre llegó a ella.

Vassandre era todo y más de lo que se podía desea en una mujer. Aún si no fuera deliciosa en todo sentido, tenía esa actitud atrevida-casi coqueta que la hacía dueña de todo a lo que le pusiera la mirada encima. Porque fue eso; ni los labios carnosos ni el cuerpo atletico ni el aroma a flor de laguna por lo que decidió ayudarla a costa de su propia vida, lo hizo porque discretamente le puso la mirada encima, y eso bastó para que Maurice se jugara la vida para tener una oportunidad. Así que aunque nadie, ni él mismo lo creyera, la tuvo. Eso, un beso, una oportunidad, y como la ninfa que era, después de que ella le robó un beso, cuando él la besó de regreso, no la volvió a ver. Así que ahora

solo quedaba esperar que regresara y que la tradición que ella encarnaba, perviviera gracias a Maurice. Eso le recuperaría su oportunidad.

Basty entró apenada.

La morena era suficientemente humilde para saber que se había equivocado en el manejo de toda la situación, pues ella es la que quería ser la heredera de la tradición, y aunque Maurice tuviera otros motivos, la verdadera beneficiaria sería ella.

No va a funcionar sentenció él negando con la cabeza antes de que ella pudiera hablar, y en ese instante cuando ella sintió el temor de perderlo todo, poniéndola en modo pelear o huir, al no haber a donde huir, pues sin esto no era nadie, solo otra mujer en la calle diciendose optimista en espera de su oportunidad. Supo que tenía que pelear.

Avanzó con velocidad, y soltó un excelelnte golpe recto. Aunque Maurice no lo esperaba, la falta de brazos lo había hecho muy perceptivo a su entorno, y por ello, antes de lidiar con el golpe, la barrió con el mismo movimiento con el que le hizo una llave a su pierna de impulso.

Basty cayó de golpe, y la presión sobre la pierna, controlada como era, causaba menos dolor que lo que la ruborizaba por el torcer de los arneses acariciando todo su cuerpo. Maurice nisiquiera se inmutó ante lo sucedido, sabía que ella estaba en el punto de quiebre, y que él la había llevado ahí, por lo que si se quebraba, y todo se perdía, él era el único culpable.

No puede terminar así gimió Basty, mientras salivaba excitada.

No va a funci Maurice fue interrumpido al sentir los muslos de Basty apretando su pierna.

Podemos hacerlo funcionar dijo ella mirándolo desde el otro lado, con el rubor en las mejillas y la boca entre abierta. Justo atrás del mejor ángulo que le pudo dar a su cuerpo posterior.

No Maurice guardó silencio cuando sintió las piernas de ellas extenderse. Pues cuando uno de los pies llegó justo a donde una patada sería demasiado dolorosa, la otra se deslizó acariciando el torso desnudo del hombre. Él trató de hablar, pero ella solo puso los dedos de su pie en el mentón de su captor, usando el apoyo de la pierna prensada entre sus muslos. para incorporarse un poco y poder entablar contacto visual. De ese largo. Silencioso. Incómodo.

El silencio era su poder, así que el pie de Basty jugueteó en la barbilla del muy sorprendido Maurice. El otro pie, mucho más tímido, solo tenía que estar ahí para respaldar lo dicho.

El silencio duró unos momentos en los que Maurice no estaba pensando. Por primera vez en una vida de tejer sueños de grandeza para engañarse a si mismo, no pensó nada. Solo estuvo ahí, en silencio para variar.

Basty en cambio jadeaba. Ella siempre supo sobrevivir, y de paso disfrutarlo. No había pena en ello. Así que en esa posición, mientras los arneses de la pierna continuaban cerrándose en su cuerpo por la tensión, trató de recuperar el aliento. Porque, todo su futuro dependía de la siguiente palabra.

No va a funcionar insistió el instructor.

Basty no contestó, mejor tocó con su lengua el dedo del pie de Maurice, y con mucha suavidad lo capturó con una succión tan fuerte como sugerente, para soltarlo y besarlo. No había más que decir. Así que ofreció su propio dedo a los labios del extranjero, quien pese que vivió toda una vida como esclavo de lo que creía merecer, veía en ese dedo a un milimetro de sus labios, algo real. Algo que sí podía tener. Así, con el

calor que lo embargaba, pese lo que quería y todo lo que imaginó, se levantó con apoyo de ningún brazo pero mucha destreza.

Basty se quedó en el suelo, algo humillada. Algo dignificada para variar. Unos momentos después escuchó el golpe del metal contra el suelo, eran sus tacones de acero lanzados por Maurice, quien tras aclararse la garganta finalmente terminó:

Decía que no va a funcionar... si no portas todo el traje, especialmente los espolones.

La morena tomó el asunto como una rama de olivo y viendo el peligroso calzado completó:

¿Estas loco?, podría destrozarte la pierna.

Yo estoy dispuesto al riesgo, ¿por qué sigues hablando?

Basty se acomodó los espolones. Le encantaban porque además de hacerla sentir alta, la hacían sentir peligrosa, y así, humillada y dignificada al mismo tiempo por ser más valiosa como artista aerea que como amante, se levantó porque quería lastimar a Maurice tanto como hacer funcionar el salto para agradarle, aunque fuera solo lo suficiente para robarselo a Vassandre.

¿Estás seguro? El instructor ya en posición no se molestó en responder, así que queriendolo lástimar, la morena dijo ¿ella lo haría?

Sin preguntar.

Poderosa e invencible, ella saltó sobre él, se hizo a si misma el amor que no le dieron con los arneses, y sangrándolo por obstinado saltó tres metros, para asestar un potente golpe que casí partió al objetivo por la parte más dura, y que tras el mortal de espaldas , no terminó en una caída.

Basty se incorporó. Astura e imprudente, buscando escudarse en la emoción del momento se arrojó a los brazos de Maurice para robarle un beso que podría significar todo para este proyecto.

Excepto que él no tenía brazos, y ahora a merced del recuerdo en vez de la ilusión, ya no estaba. Porque sabía bien el precio de regresar un beso.

La ciudad Global fue un sueño imposible que se hizo realidad con sangre y cenizas, y si bien su grandeza engendró sus propios demonios, estos engendraron héroes que más dispuestos a morir por Ciclesia, estaban dispuestos a vivir por ella.

Uno de esos héroes vivía en una escuela ubicada en la punta tierra, donde tras la Batalla por Ciclesia, la Quean CeEnissa Sasure había mandado a eregir un Liceo en el que los escolares y sabios que pedían financiamiento a la Corona para sus estudios, estaban obligados a dar clases públicas que pudieran estimular el pensamiento crítico en los ciudadanos.

Este héroe fue nombrado rector del Liceo, no porque fuera el más grande maestro posible, sino porque el más grande maestro de Ciclesia, su amigo CeCero, merecía dar clases, pues él sí tenía tanto el talento como el gusto de convertir mentes avídas de conocimiento en pensadores. Así que viendo el patio atiborrado de estudiantes absortos en las palabras del maestro, se alegró de haber tomado el aburrido trabajo de administrador, glorificado con la palabra rector, para que todos pudieran disfrutar de una mente tan brillante como la de su amigo, por el tiempo que les quedaba.

Ataviado con su pesada bata azul, con el rostro maquillado con ceniza de las raíces del Árbol de Mundo como es la costumbre de la Escuela del Secreto Oscuro, caminó por el Liceo, enojado porque así nació, pero satisfecho del progreso, pues que fuera una actividad tediosa no cambiaba que era una actividad que debía atenderse meticulosamente, algo que se le daba a Axcevasis, alguna vez el Campeón del Cristal Oscuro de Fuego que peleó por Ciclesia.

Tampoco le moslestaba el "temor" que causaba en los demás, la mayoría simplemente porque como todos los de la Ecucela a la que pertenecia, era una figura imponente rodeada de misterio, otros tantos porque era el rector del Liceo, pero unos pocos, porque sabían quien era y que hizo: quemar el cielo por una rencilla.

A punto de volver a su oficina para revisar el calendario de maestros del siguiente ciclo escolar, cruzó la biblioteca y un muy extraño movimiento lo obligó a detenerse. Primero se alertó, y hubiera considerado evacuar a todos, más la cobardia no era una característica en él, así que sencillamente fue a encarar al peligro, quien sabe, quizá había una última gran pelea su futuro.

El hombre en la mesa desenrrolló un pergamino con el mentón, y usaba los dientes para ceñir unos ganchos de madera que dejaran extendido el documento. Considerándolo todo, fue bastante hábil en la maniobra, pues con el rostro casi pegado a la mesa, inmediatamente comenzó a leer el texto mientras regresaba a un par de libros abiertos en los que concentrado cotejaba la información.

Estuvo varios minutos así antes de darse cuenta de que lo observaban, y tan pronto lo hizo, levantó la mirada de manera retadora.

Ah, esos ojos. Comenzaba a dudar que fueras tú aclaró el rector retando a su vez con a mirada ¿pero cuantos mancos podría haber?, digo, basta un muñón para que un Samaritano pueda restaurar el brazo. Así que, ¿que clase de estúpido pierde todo el brazo para terminar totalmente manco?

Maurice se incorporó. La perdida de sus brazos seguia siendo un tema sensible, pero al ser inevitable, había aprendido a mezclar su disgusto con el humor negro, así que reviró.

¿No te habrás quedado con un poco? Recuerdo que el último pedazo lo perdí apuñalandote con el hueso, no recuerdo por qué, ah si, porque estabas tratando de destruir el mundo.

Axcevasis sonrió enojado. No era personal, así vivía.

Y entonces ¿a qué debo el placer? ¿Vienes a ver si perdiendo las piernas puedes matarme?

¿Por qué? ¿Estás tratando de destruir el mundo de nuevo, o alguien te hizo enojar otra vez?

Axcevasis sonrió y se acercó retando.

¿Qué pasa Barón FohnKurs? apenas podía despegar la quijada del enojo si realmente quieres morir, espacio sobra, pero yo soy quien le paga a los ayudantes del aseo. De por sí se quejan de que hay mucho trabajo para que además tenga que levantar tus pedazos.

Maurice. ¿Qué?

Ahora voy por el nombre de Maurice Conrad contestó el no bienvenido.

Jajaja. Tiene sentido, no podrías descansar en el Torrente de Jade con un nombre tan estúpido.

Je, si es lo que te preocupa, tambien puedes cambiartelo.

¡¿Qué diantres quieres Conrad?! preguntó furibundo el rector.

Solo estoy estudiando.

Historia del Primer Ciclo y la Orden de la Luz. Fascinante tópico para un traidor, y asesino.

Fui encontrado inocente de ambos cargos por un Tribunal de la Quean

Palabras Conrad. Muchas palabras. Quizá la heredera Sasoria se echó la culpa de todo, y eso funcionó para los libros de historia, pero la sangre corrió, y en lo que a mi concierne, esta información, en tus manos, je je, es un arma, así que podría matarte en el acto, por pura precaución.

Puedes intentarlo retó mientras Axcevasis atrajo energia listo para fulminar a su muy antiguo rival, pero Conrad, concentrado en su tarea comtinuó o puedes dejarme terminar mi lectura en paz.

Axcevasis no se calmó, pero dejó las amenazas.

Pregunta.

Gracias pero prefiero leer.

No eres bienvenido, así que pregunta lo que necesites, largate y no regreses.

¿Creí que el Liceo y su biblioteca eran públicos?

Para los nativos de Ciclesia... los tiranos extranjeros no son cubiertos por nuestra hospitalidad ni por la de la Corona.

Maurice pensó sus opciones, y comenzó a remover los ganchos de madera para volver a enrollar el pergamino y dejar las cosas en su lugar antes de salir, pero para Axcevasis una victoria no lo era si no terminaba algo en llamas.

Te equivocaste de Ciclo dijo Axcevasis mientras se sentaba, Maurice asintió en silencio, pues la realidad es que aún cuando no fuera bienvenido, la gente de Ciclesia siempre era amable, asi que con un par de meses viviendo en silencio con Basty, "El campeón del fuego" resultaba abrumador, por lo que resignado se preparó mentalmente para su hostilidad, pues poner todo en su lugar era una tarea muy dificil sin manos. Aun no habîa terminado de prepararse cuando Axcevasis continuó la gente olvida que al igual que los Samaritanos, los Dracheliers fueron creados por la Orden de Luz, pero en el Primer Ciclo los místicos solo les enseñaron a "resonar" con los dragones advenedizos para aprender de ellos y combatirlos. Fue en el Segundo Ciclo cuando entrenaron wyverns para quitarles la ventaja del cielo. Sin embargo lo que buscas tampoco está ahí, porque fue el Doble Emperador quién envenenó a las monturas que los caracterizaban.

No se de qué hablas respondió Maurice absorto mientras trataba de memorizar las respuestas que vino a buscar.

La megalomania explica casi todas las decisiones de tu vida. Quedarte aquí, en un mundo que desprecia a la gente de tu calaña es un misterio que solo tendría sentido por una mujer sonrió Axcevasis entre el maquillaje negro que lo hacía parecer un vacío aunque considerando la mujer no te culpo. Te compadezco por estúpido, pero no te culpo.

Maurice dudó entre seguir o irse. Esta sí era una lucha para la que no estaba preparado. Sin mucho tiempo para decidir, sabiendo que no lo dejarían volver, se dio la vuelta dispuesto a partir.

La amenaza es seria. Mientras sea Rector no vas a tener permitido volver, y cuando ya no lo sea, aunque por algún triste motivo me sobrevivas, no creo que vaya a importar. Así que aprovecha la cortesía que te ofrezco porque en mi mundo; no somos como tú.

Se quedaron sin monturas voladoras, ¿como reentreenaron los dracheliers?

Axcevasis sonrió que aún tuviera todas sus armas listas.

Estas pensando que fue un evento como ahora; lo que sigue después del fin, pero no fue así, por el contrario, fue primitivo, violento pero sobre todo, preventivo.

¿Se rehicieron antes del "Doble Emperador"?

El Doble emperador sabía que su cruzada sería aerea, así que comenzó neutralizándolos. Pese la falta de monturas, los recuentos tienen a los dracherliers como los combatietes de primera línea.

¿Pero qué puede hacer un caballero dragón, pesadamente armado y sin montura contra enemigos aéreos?... a menos que ya tuvieran entrenamiento para abordar las naves.

Axcevasis entrelazó sus dedos.

Entonces fue en el Ciclo II, antes del Doble Emperador conjeturó Maurice.

El problema ahora es el obvio.

Que no tendré acceso al material.

Además. Aquí bajo Mollis Quadratum, la gente vive una fascinación por el heroismo, de manera que todos, incluidos nuestros sabios e historiadores, ignoran todo aquello que no es "El evento fantasea".

La pelea de cada Ciclo entre el bien y el mal, ¿cierto?

Es creo la única cosa que no puedo culparte por no entender, más bien es el momento donde todo converge para que la inevitable oscuridad, provoque que se engendren los Guerreros de la Luz y la combatan. Es siempre un periodo importante, pero si bien en este el llamado Ciclo III, nuestros valerosos Héroes combatieron a El Vacio encarnado, la guerra de los videntes que pelearon mis compañeros, el Día Petreo y la Batalla por Ciclesia fueron por mucho más relevantes y violentas.

Pero la gente del futuro solo va a recordar a El Vacio Encarnado. Exactamente.

¿Acaso son celos por no recibir tu lugar de héroe lo que escucho?

Ja. La gente me tiene como un héroe pese que casi mato a todos quemando al cielo. No lo soy, nunca he clamado serlo y entiendería si me comparan con basura como tú. No tengo problema alguno en que la historia edite a la gente como tú y yo de su memoria, pero mi maestro, Siondre, Tarso, Ce’zar, IshiSaya e incluso la joven Sasoria dieron sus vidas por un mundo condenado que no disfrutaron, y que los que sobrevivimos no somos capaces de disfrutar...

Maurice tomó nota de todo lo dicho, y sabiendo que solo tenía unos segundos de nostalgia en Axcevasis, empujó una pregunta.

Entonces es el entrenamiento del Drachelier con lo que se aprovecha la armadura y el siard de viento.

Por supuesto, pero un cuarto de la poblaciòn nace afin al viento, y no cualquiera puede hacer la danza aérea.

Entonces hay un secreto gremial ¿Vassandre tuvo algún maestro? Porque me sigue pareciendo raro que no hubiera un compañero o discípulo a quien mostrarle. No recuerdo haber agregado la información de una amiga a este trato.

Ella es la única drachelier que conozco. Si no quieres contestar está bien, pero no finjas que no tiene nada que ver.

Es correcto, es la única drachelier conocida.

¿Quién la entrenó?

Eccecila.

¿La hermana de CeCero? ¿¡Ella era un drachellier?!

No. Durante el Evento Fantasea, mientras los guerreros de la Luz perseguían al mal, el mundo estuvo por irse al trasto, y los Altares convirtieron a Siondre, CeZar, CeCero y Eccecila en Campeones. Fuego, Agua, Tierra y Viento respectivamente, dos de ellos de Luz y dos de Oscuridad. Pero los videntes tenían acceso al futuro, y sabiendo que mas tarde los Cristales crearían a sus contrapartes, trataron de secuestrar a los candidatos desde niños. La Quean Sasure salvó a Ishizaya, Tarso y mi niña Rissa... tú la conoces como Siondre, y mientras que yo tomé el lugar de su padre por ningún mérito excepto estar presente. Vassandre nació en el corazón del enemigo, así que no pudieron salvarla.

Los videntes la entrenaron. Demonios. Ellos tenían acceso a las técnicas perdidas.

Me has visto crear llamas con mover mis manos ¿puedes hacerlo tú? Me refiero ¿Podrias si tuvieras manos?

No, es magia.

Te he visto patear, mientras te acomodas tratas de apuñalar con una espada apretada entre tus dientes ¿crees que yo puedo hacerlo? No soy un combatiente. Llevas meses viviendo con Basty, ¿ella sabe hacerlo?

Dices que no basta con ver la técnica. Debió haber algo más... dijiste que Eccecila la entrenó.

Vassandre fue educada por nuestros enemigos, en una técnica que no conocieramos para matarnos. Lo sabré yo, la primera vez que cruzamos caminos casi lo logra mostró una cicatriz que naciendo en el cuello continuaba a los hombros cuando los demás se lamentaron tener que enfrentarla y matarla, Eccecila dijo que ella se encargaría. Vio algo en ella. Algo oscuro y flexible. Ominoso. Como sabes Eccecila sacrificó su vida para que su hermano obtuviera Iperia, y al hacerlo, le heredó a Vassandre su lugar como Campeón del Cristal Oscuro de Viento. En todo sentido, ambas renacieron. Y de alguna manera, el hacerlo liberó a nuestra Drachelier de la influencia de los videntes.

Renacimiento... ¿Qué es eso?

No tengo idea. Sin duda algo que excede a gente como tú o yo que debemos desaparecer.

No es para mi, es para Basty.

Engañate si quieres, pero no trates de engañarme. Es para ti. Porque crees que Vassandre va a regresar y te va a agradecer que hayas continuado su legado.

Maurice hubiera querido dejarlo ahí, pero necesitaba una última respuesta.

¿Existe o existió alguna especie de combatiente que se especialice en el viento? Puede no ser algo obvio, un especialista como Eccecila al que Vassandre hubiera tenido acceso.

Se me ocurre uno. Creo no lo encontrarías en los libros, y me parece que es justo lo que te falta.

¿Cuál es el PERO?

Pero será la última respuesta antes de que te largues.

Está bien, es un trato.

Sin embargo, ah, estaba pensando algo, puedo contestarte esa importante pregunta que resolverá parte de los problemas de la chica Basty ó... puedo decirte qué opina Vassandre del gran Maurice Conrad que conoció tratando de sacarme de la cárcel.

Conrad no vio venir eso. Nada, literalmente nada le importaba más que esa información, pero tomarla le daría la razón a este hombre delgado, alto, que era un oponente digno de temer como combatiente tanto como entrevistado.

No parece lógico que te haya confiado algo relevante sobre mi.

Por supuesto que le reclamé que te haya involucrado en mi liberación, y sí, entiendo que no soy lo que la gente piensa como confiable, pero los demás campeones confían en mi, y fue Rissa quien le preguntó, Vassandre no es el tipo de mujer que va a mentir o callarse algo solo porque el psicótico de Axcevasis está presente. Así que literalmente tengo la información sobre si realmente lograrás algo haciendo esto.

Para deleite del rector, Conrad maldijo sin poder finigir, y luego se fue por todo.

Dime ¿Quién pudo haberle enseñado a conquistar el cielo?

Axcevasis se sorprendió, no tanto, pero sí lo suficiente para honrar su parte del trato.

Vassandre no es una atleta normal, nació para esto. Pero ahí está el truco: los guerreros de la luz son elegidos por los altares para cumplir un destino, ¿lo entiendes? No.

Ellos existen para lograr su meta, así que el universo de alguna manera está alineado para ese fin. No trato de hacer menos las penas y suplicios que enfrentan ellos para lograr su cometido, se requiere carácter y lo tienen, pero están respaldados por el universo. Nosotros no. Es decir, sí, somos los que representa un campeón elemental. Pero yo no debería ser uno, mi maestro Siondre lo era, yo no, pero lo fuí, teniendo que inmolar al hombre que más respetaba demostré ser "digno" de tomar su lugar. Y cada que miro a su hija, a quien adoro como propia debo pagar por ello.

Aunque era la primera vez que veía algo remotamente humano en Axcevasis, había pagado un muy alto precio por esta respuesta, así que debía llevar la conversación a donde la necesitaba.

¿Entonces Vassandre nació para ser una Drachelier y por eso ellos le pudieron enseñar las técnicas que ellos no comprendían pero que ella sí?

En principio sí, pero te propongo algo ¿ella era un Drachelier? Es decir, la armadura, la lanza, los ataques agiles desde arriba. Ellos querían un oponente que nos matara, pero ni Ce’zar, ni Eccecila, ni CeCero, ni yo, somos Dragones, ¿por qué un Drachelier si lo que ellos buscaban era una asesina?

Maurice claramente se consternó. Eso era una idea que nadie había contemplado.

Ella no fue un Drachelier sino hasta que "renacio" suspiró concentrado entonces sí es posible trazar el punto donde alguien le enseñó o le aprendió. Aún no contestas mi pregunta original reclamó.

Calma, calma. Me conformo con que te quedes con la duda sobre lo que realmente pensaba de ti, y sí, respecto de tu pregunta diré lo que la gente siempre obvia; que La Orden de la Luz fue quien creó a los Dracheliers, pero incluso los Samartianos tambien fueron creados por los verdaderos fundadores, los Místicos, canalizadores vivientes de la energia elemental.

Ella se entrenó después

Ahora largo.

A Conrad no le gustó el tono, pero estaba emocionado. Y aunque tenía muchas preguntas y sin duda la biblioteca le ayudaría, ningún libro le hubiera dado este

conocimiento, así que sin decir mucho se levantó a recoger, pero Axcevasis le tenía guardada una última cortesia.

Solo vete. No te prepcupes por los lbros, yo los recojo, porque ya sabes, no estoy manco como para no poder hacelro.

Así, humillado al tiempo que agradecido, partió.

Basty alcanzó a hacerse a un lado antes de que la flama que derribó al arquero acertara donde estuvo, al tiempo que el guerrero rendia al artista marcial. Habia sido un buen duelo, pero el equipo favorito tuvo en todo momento el control. No porque realmente fueran buenos, sino porque los otros, los destinados a perder, nunca tuvieron hambre de victoria. Tampoco era su culpa. No peleaban por sus vidas, y con la economía de Global, la ciudad que atravesaba el mundo entero, floreciendo, jamás volverían a sentir lo que era perder, y con ello perder la comida del día.

Por eso que ya no le llamaban muchos los duelos. Lo emocionantes que pudieran ser, no valían la nostalgía que le producía recordar como perdió a sus compañeros: los rookies, los perdedores, el grupo más patetético que jamás haya entrado a un duelo, y el mismo que retó a la campeona en un ataque de terror. Era un recuerdo difícil de escapar, no solo porque fueron sus amigos, y porque ahí tuvo un par de amantes, sino porque la gente los recordaba con cariño cuando los disntinguía de cualquier otro perdededor, porque los perdedores que dieron su vida por el mundo en la Batalla por Ciclesia.

En contraste, los ganadores, sin importar lo buenos que fueran no eran realmente ganadores, porque Global tenía una campeona, y sin importar como la decidieran recordar pues fue tanto heroína como villana, CeEnissa Sasoria, Eiress de Ciclesia, exiliada de por vida por sus crímenes a favor del mundo, era la única indiscutible campeona, la única que venció a los Guerreros de la Luz, a los Campeones de los Altares, a su madre y si los que viven en el oeste no exageran; al mismísimo Cyng de los Sagreon. Así que aunque no le quitara los ojos encima al enfrentamiento por comenzar, a Basty ya no le interesaban los duelos, y la única razón por la que Rissa la tomó por sorpresa, fue porque era la más ágil y astuta "rebelde" que haya conocido Ciclesia, y que de paso, era la Campeona del Cristal Luz de Fuego.

Las noticias que traía eran alentadoras, aunque sin decir cómo, porque aseguró que no querría saberlo, Rissa se había hecho de un mapa subterraneo que describía una especie de montaña, y si su inteligencia era correcta,el centro se trataba de Ordalia, el lugar en el que cada Ciclo, los ciclesianos que estuvieran dispuestos a enfrentar sus pruebas, tienen la oportunidad de renacer.

Tras meses de entrenamiento, y después de un bochornoso suceso, Basty solo había logrado aumentar centimetros a su salto, por lo que Maurice la abandonó en su granja, al menos hasta que regresó hablando de "renacimiento". Conrad, quien ayudó a romper el límite original de los Drachelier, estaba claramente comprometido con la causa, sin embargo, su auxilio tenía una traba, había que hablar de Vassandre, su razón para embarcarse en esta empresa, y por tanto sin que nadie lo quisiera, se había convertido en la rival de Basty, porque su intención de convertirse en una Drachelier, la ponía en directa comparación con la que fue la Campeón del Cristal Oscuro de Viento, quien a ojos de todos los que la conocieron, incluidos Maurice, Rissa y ella misma, era

sencillamente una héroina, una beldad y material de leyenda de la talla de la Quean Sasure o la exiliada Sasoria.

Así que ahora, para poder convertirse en una Drachelier capaz de seguir la tradición, debía recorrer sus pasos, y según Maurice el primero era el "renacimiento", y él único lugar para lograrlo era Ordalia. Su compañero había tomado un camino distinto buscando a alguien, y Rissa se había ofrecido a ayudar según sus palabras por la emoción de la aventura, aunque como hija adoptiva de Axcevasis y sobrina informal de CeCero, probablemente la verdadera razón de su apoyo era para vigilarlos. Valia la pena, sus habilidades dentro y fuera del campo de batalla valían el riesgo, eso sin hablar de su muy particular forma de obtener información.

¡Ah! Por si nos separamos, ya renté unas camas en la posada del TeUile.

¿Le avisaste a Maurice?

Uuuuuh Morris. Yo lo conocía como Conrad, Barón FohnKurs.

Yo tambien, pero decidió que en adelante quería ser llamado "Maurice".

¿En todos lados o solo por ti?

En todos lados.

¿Así que en la alcoba es Conrad o Barón FohnKurs?

No lo sé. No dormimos juntos.

¡Oh por favor!

Llevamos solo unos meses viviendo juntos, ENTRENANDO.

¿Recuerdas a C’zar? Era todo lo que se le puede pedir a un hombre, y aunque Vassandre y yo lo molestabamos, solo tenía ojos para Ishi, y si ella no hubiera estado perdida y locamente enamorada de Sasoria, hubieran creado su propia orden de guerreros del sexo. Pero, sé esto, tú estas de buen ver le dio una nalgada y claramente cotizas señaló a dos o tres duelistas con los ojos sobre la morena mira, el rubio incluso tomó nota de donde te hospedas, así que no te sorprenda encontrártelo al rato, y tranquila, llego tarde guiñó dos veces el ojo.

Rissa estiró la mano y capturó un pequeño rollo de cuero que le dejó caer el halcón que nadie vio pasar. Mientras revisaba el contenido, Basty miró al hombre y cuando este le sonrió, ella apartó la vista un poco apenada. Una buena señal para él.

¿Te gustó eh?, entonces ¿llegó muy tarde o de plano no llego?

Qué te pasa, nisiquiera lo conozco.

Se llama Iamir, usa un hacha pesada, así que fuerza tiene levantó las cejas picaramente tiene 29 años, resistencia no le va a faltar, oh, es de Norponiente Basty se preguntó como sabía todo eso ...y tiene tres hermanas , así que te tratará bonito. Ah, no tiene novia...

¿Como sabes todo eso? preguntó Basty sorprendida. Deducción, será parte de la misma ciudad, pero norponiente está muy lejos, tiene retratos de las hermanas, así que no habría salido sin un retrato de su chica. Es un buen partido, trátalo bonito porque además de no ser muy rico, hoy lo robaron al terminar, soniró mientras se guardaba las monedas que sacó de aquella cartera, Basty estaba abrumada. Últimamente se sentía así, como fuera de control de su propia vida, y necesitaba recuperar ese control.

¿Le avisaste a Maurice?

No, por sí querías usar el cuarto antes de que llegara. Date gusto, si no están casados, yo no juzgo. Pero ah, recuerda que en las oficinas de mensajeria se inscriben todos los registrados, así que ponte creativa si no quieres que Maurice Conrad, Barón de FohnKurs y el valiente Iamir se batan en duelo por ti.

Perfecto.

¡oh por el Gran Dragón en Kosmos, ¿lo vas a haces?! Dijo Siondrerissa, sorprendida.

Sí, me voy.

Espera, ¿¡qué? ¿a donde?! No te dije que al tipo lo robaron y no tiene dinero. Es demasiado pobre para pagar un hotel.

No, voy a Ordalia.

No, espera, es peligrosisimo. Espera a Conrad.

Es mi renacimiento, no el suyo.

Basty, escucha la campeona capturó la atención de la morena estuve en el contiente volador, vi como el dueño original de Ordalia maldijo a un amigo haciendolo su protector solo porque profanó suelo sagrado pisándolo. Yo que encaré al Cyng de los Sagreon, ¡tuve que huir! Y esos recuerdos no me dejan dormir desde entonces. No sabes lo que te espera. No cometas un error.

No importa. Tengo que ir dijo en voz alta para convencerse a si misma.

¡Voy contigo!

No puedes, te mandaron a vigilar a Conrad. Si vas conmigo, fallas en lo que tu familia considera una amenaza real.

Siondrerissa se sorprendió, y mientras Basty abandonaba la ciudad desapareciendo entre la multitud, la joven ladrona salió corriendo a buscar a Conrad, porque al parecer Basty no entendía los peligros que acechaban en Ordalia, ni el peligro que implicaba intentár renacer. Gracias a su agilidad, resistencia y el apoyo de sus halcones, tardó casi día y medio en cruzar los varios kilometros para encontrar al autonombrado Barón FohnKurs, tranquilamente almorzando en un descanso en el camino. Quizá la única sorpresa que recibió la Campeona de Fuego, fue que cuando le dijo que Basty se había ido sola a Ordalia a intentar el renacimiento, Maurice sonrió sin decir o hacer nada. Ante lo inverosimil de la situación, ella se marchó, o más bien se escondió esperando su siguiente movimiento, pero Maurice, tan pronto terminó de almorzar, en vez de continuar con su viaje, regresó por el camino donde llegó de vuelta a su casa.

Basty dejó la seguridad de Global por los peligrosos caminos de Ciclesia, no llevaba prisa, pero si se movía aprisa pues reconocía que desde los aulladores hasta los pygimps, los monstruos de Ciclesia eran de cuidado, y el hecho de que no se encontrara con los habituales, implicaba que quizá estos sabían de los verdaderos peligros que habían en los derredores de Ordalia.

El último día que durmió entre los troncos caídos del bosque, tuvo una pesadilla que la desanimó, un escenario donde ella fallaba en convertirse en Drachelier, y luego, en un asunto irreal como en todos los sueños, se encontraba con Maurice felizmente casado y con hijos, cuya madre era una Drachelier que sí podía continuar la tradición.

Supo que era un sueño, pero igual le afectó, por lo que entró a las cavernas hacia Ordalia confundida, una situación lamentable porque lo ideal hubiera sido entrar aterrada, en cambio en ese estado, los terrores que experimentaría pasarían desapercibidos hasta que fueran inmanejables. Cuando uno de esos terrores le mordió el brazo, el dolor la hizo volver en sí para al menos defenderse de una horda de abominaciones que vivían bajo el suelo.

Realmente hubiera podido mantener el paso, desafortunadamente el veneno la desconcentró para que una mordida se volviera otra, y esa otra más hasta que sobrepasada, entró al mundo de sus pesadillas. Todo por arrogancia.

Maurice avanzó por las pristinas calles de Global hasta que llegó a uno de sus bordes. Hace años, cuando el Cyng de Sasure quiso convertir el mundo entero en una sola ciudad, no pretendió aniquilar lo salvaje ni lo natural, todo lo contrario, quería organizarla para que hubiera transporte y comida gratis a lo largo del mundo; según su parecer la única forma de atender los efectos complicados de una baja mortalidad natural, la enorme esperanza de vida de hasta 180 años y la potente fertilidad de los afenos (como se llamaban así mismos los ciclesianos), agravados por la inmigración masiva de sus hermanos del continente flotante que lanzó todo fuera de control.

Sin embargo, el Cyng de Sasure solo tenía una idea noble pero irrealizable, un norte para salvar al mundo de la pobreza y el hambre, enemigos tan diferentes a las amenazas fantasticas de su mundo. Un ideal que era la solución de todo, y sin embargo, gracias a la enorme separación de continentes con condiciones de vida muy especificas, totalmente imposible. Al menos hasta que CeEnissa Sasure apareció, llegada del cielo como todos los que vivian en el Continente flotante

Ella hizo posible la parte impensable: mover continentes y reorinetar el mundo entero para que en equilibrio con los Altares pudiera prosperar la naturaleza. Hazaña posible, gracias a un largo viaje a las tierras ancestrales de los profundos, el famoso QuarNaTor, que de hecho era el hogar del amargado Maurice Conrad y el cansado Nimrod Alcastre.

Al escuchar la contraseña, el mercenario abrió la puerta con la precaución que lo caracterizaba. Era una de las pocas estructuras fuera del empedrado de Global, porque todo, excepto pequeños lugares antiguos e importantes para el mundo estaban dentro de la Ciudad. En ese sentido, la casa de Alcastre no lucia la arquitectura hermosa del lugar, sino esa fria eficiencia de la Alianza de Reyes, de donde vino como espada a sueldo.

Conrad, te esperaba antes saludó el muy veterano mercenario, mantenido en pleno vigor por las energias de esta utopia mientras dejaba pasar al recien llegado.

Han sido unos meses complicados.

Las morenas siempre son complicadas agregó ofreciéndole asiento Supongo que si además viven en un mundo tan... lleno de vigor, deben ser una verdadera complicación Conrad escuchó atento y aunque no pidió una aclaración, igual la recibió, porque es lo que Alcastre hacía El mes pasado vino Ismine. Meses antes se encontró con la chica Basty y le dijo que vivía contigo desde hace algún tiempo. Naturalmente yo lo dudé, porque te vi hace un año y no lo mencionaste.

La idea de esta estación es...

Esta estación de vigilancia tiene como objetivo vigilar. Eso hago. Y lo hago bien.

¿Estás solo? preguntó Maurice no queriendo perder el duelo de astucias.

No todos tenemos tu suerte Conrad contestó mientras servía una bebida para sí, y para su invitado cuando Lawrene vive aquí es solo porque algún tipo se obsesionó con ella y está buscando mudarse. Hera solo viene a revisar si se sabe algo de, Lynx, Gregord, Bakman y Kylo. Todos los demás, me temo no serían de tu exquisito

gusto Maurice rio levemente para darle tiempo a Alcastre de contestar pero no lo hizo porque ese tema terminaría la conversación. Y ambos disfrutaban no estár en guardia.

¿Y has sabido algo de ellos? preguntó por cortesía, pues salvo que venían de las mismas tierras los conocía poco.

No. Se fueron con Escudero y con el dinero. Aunque todos podemos creer que se quedaron con botín y barco, la tripulación de la nave que se los llevó tenía medios para comunicerse. Nunca lo hizo.

¿Crees que el palacio quiera repensar nuestra estadia?

El Marcial de Paz, Durgat dice que no. La tripulación de la nave fue elegida porque tenìan vínculos con ellos, así que todo se reduce a que son los monstruos que todos creen y los degollaron antes de darles oportunidad de comunicarse, decidieron quedarse allá o algo más pasó, realmente no tiene caso especular. En cualquier caso, si no como Ministro, como nuesro carismático empleador original, el Marcial tiene el oído de la Quean, así que no comenzarán un conflicto por un barco, aunque sea volador.

¿Tiene algo más que el oido de la Quean?

Lo dudo. Pero sin duda lo está intentando: quitale la corona del paraiso y la viudez, no hay dos mujeres como ella ¿Puedes culparlo?

No Dejando el calzado, Conrad tomó la taza con el pié, dando un trago a la bebida. Robusta, amaderada e imposible de conseguir aquí. No es posible. Sabe a gransur.

Es gransur. Lo trajo Jerome. Hace unos meses vino a su vigilancia y quiso dar la sorpresa, supuestamente lo elaboró un alquimista con mucho tiempo libre. Al principio estaba nervioso de que fuera a explotar o algo, pero... no has explotado bebió Alcastre riendo.

Conrad rio.

¿Cómo esta Jerome?

Más palido. Más delgado. Mucho más fatigado. El viene cada estación, pero justo vino a avisar que se ausentaría, dijo haber encontrado un remedio "al problema", y el alquimista y su sobrina lo ayudarían. Se le extraña, pero este gransur hace un buen trabajo ocupando su lugar.

Lo es. Uno de mis planes era poner una destileria de gransur en mi Maurice se abstuvo de decir, Baronia, tierra, o cualquier palabra que implicara propiedad, pues en este lugar, entre la nostalgia le era sencillo caer en las viejas maneras.

Deberías poner una aquí. La Hacienda LeRoi es gigantesca y tiene de la mejor tierra que hay. Justo detras del lago podrías plantar semillas húmedas.

Te tomas enserio la idea de vigilancia.

Es por nuestra propia seguridad bebió antes de servir de nuevo a su anfitrión y a si mismo ¿Alguna noticia de Frasnorg?

No. Sabiamos que Osumbra sería un viaje largo.

Y caro agregó Alcastre sabiendo que los dos arriesgaron su botin para incrementarlo.

Muy caro terminó Maurice reconociendo que con su amigo se fue su última oportunidad de tener... lograr... poder.

Ambos callaron para evitar decir que ese viaje también estaba muy demorado. Demasiado.

No deberías preocuparte insistió Alcastre va con Linnette, y la mujer donde pone los ojos puede colocar una saeta o los labios. Hikari y Radan salieron vivos de la expedición al continente flotante, eso habla de ellos, al resto no lo conocía de

primera mano, pero aunque la gente de aquí no tire a matar, sabe dar pelea. El punto es que tiene las espaldas cubiertas

No me preocupa. Frasnorg sabe cuidarse solo. Regresará. Por supuesto. El truco es como regrese. Cargado de tesoros es deseable, pero a mi en lo personal nunca me ha gustado su depresiva actitud de quería morirme pero no me morí. "Ah, perdí ambas piernas pero tuvimos la victoria".

A Conrad todo le sonó como algo dicho por su amigo, pero igual lo defendió.

Lo importante son los resultados contestó.

Claro, pero lleva algo demasiado valioso. Una cosa es resignarse a perder las piernas, miembros de la tripulación, el botín y hasta el barco, pero .

Pero es un problema perder a la princesa CeEnissa Sasoria.

Alto. El título correcto es Eiress CeEnissa Sasoria, y a razón de su juicio fue despojada de él, y exiliada, no es buena idea que un extranjero vaya cuestionando las decisiones de un gobierno soberano.

Lo sé. Hablaba en confianza.

Confio en ti, pero no me ves acusando a Ramsey de alcoholico y arribista. Yo lo llamo Marcial de Paz, Durgat. De la misma manera tú deberías evitar ese tipo de comentarios a menos que quieras seguir "encontrándote" a la gente en el camino.

Tú fuiste quien la mencionó.

Su madre es la Quean de todo esto. Quizá tuvo que legalmente exiliarla, pero es una madre, y que muera en las correrías de uno de los extranjeros por los que se echó la culpa para salvar su mundo, no es bueno para nadie.

Creo que exageras todo esto.

Es un puesto de vigilancia. Mi trabajo es vigilarlos para evitar que sean un peligro para ustedes o para los demás.

No es la vigilancia por la que vine.

Alcastre escuchó, y aunque le agradaba la compañía, tampoco quiso hacer cansada la ocasión, así que fue directo.

Ningún avistamiento.

Conrad se tomó un momento para procesarlo, cuando Alcastre se repitió, se alegró, pero solo por un momento, porque inmediatamente insistiò. ¿De cuantas vigilancias?, ¿llegaste lejos?, ¿cuanto tiempo estuviste buscando?

Las tres del año. Y en cada una llegué más lejos que nunca, e invertí el doble de tiempo del usual.

¿Y nada?

Ningún buitre de tres cabezas en el horizonte.

Conrad se sintió aliviado. Casi como si volviera a nacer, pues era la primera vez que una vigilancia salía negativa.

¿Qué tal de Frasnorg?

Ningúna voz en llamas agonizando Conrad no pudo disimular la emoción, pero tampoco pudo articular la pregunta que quería, así que Alcastre decidió darle salida. De hecho, no encontré ninguno.

¿Es enserio? insistió aún estupefacto.

Lo es contestó Alcastre dejandose arrastrar por la buena vibra.

¿Qué significa? levantó la mirada Conrad, contento.

Cálmate. Esperemos al siguiente año.

¿Siguiente año? Bromeas, la pregunta es ¿cuándo te vas y por qué no te estás yendo?

No haría diferencia. Las vigilancias son para observar la frecue

¿Es posible que ya estemos curados? interrumpió Conrad ávido de un respuesta.

No es una enfermedad.

Sabes a lo que me refiero

Hasta donde sabemos, cuando nos trajeron, los videntes del enemigo nos escogieron porque sabían que la natualeza mágica de este lugar podía darle forma a lo peor de nosotros para encarnarse en una suerte de ”bestia mágica". Nuestra estancia los creó como una proyección de nuestro futuro y

Sé todo eso

... y cuando uno de nosotros, un extranjeros moría, la proyección tomaba conciencia.

¡Alcastre!

Mientras...

Mientras no estemos muertos, las proyecciones habitan hondo en la tierra, cerca de El Vacio. No pueden ser destruidas porque no tienen forma material, pero pueden afectar el mundo material gracias a la energía elemental.

Por ello fundamos... continuó el mercenario.

Fundamos esta estación de vigilancia y te nombramos vigilante para que tres veces al año fueras allá, a ver que sucedía con las bestias ahora que en relativa paz no nos estamos matando ¡Dime algo nuevo!

Bueno, lo que no sabes era obvio pero ahora puedo confirmarlo: No fue un accidente, resulta que estas proyecciones funcionan exactamente igual que los recién descubiertos Sagreon, así que es posible suponer sin error, que los videntes querían su propio ejército de bestias mágicas, solo que la joven CeEnissa se les adelantó a usar esa energía para los Sagreon, y todo sin matarnos.

Entonces quizá la energía que las creó se agotó por la aparición de los Sagreon.

Es una de muchas posibilidades. Al final no creo que importe...

Quizá hemos cambiado dijo Maurice sin esconder el entusiasmo.

Alcastre pensó bien sus palabras:

Hemos cambiado. La pregunta es ¿dónde quedó "lo peor de nosotros" que fue la razón por la que nos escogieron? ¿Desapareció junto con las bestias?... ó.

¿o regresó a nosotros?

Alcastre uso esta conversación para medir como se los diría a los demás, sabiendo que todos sentían que un día lo que amaban podía ser arrasado porque la magia los uso de modelos para crear armas de destrucción.

Prefiero ser positivo, así que me quedo con el cambiamos, pues lo cierto es que hace tres años ninguna morena de Ciclesia te hubiera hecho caso.

¿Qué dijiste?

De acuerdo, lo que tengan entre ustedes no me incumbe, pero tienes que admitir que si alguien se queda contigo por tanto tiempo, en algún punto es por ti, y el resto es pretexto.

¿Por qué dijiste tres años?

Vienes a vigilancia cada año. Es tu tercera visita. Siempre dices que llevas unos meses viviendo con ella, pero que crees, esos meses ya son tres años.

Maurice se quedó sobrecogido, ¿acaso había pasado tanto tiempo desde que comenzaron esto? Y si realmente el buitre de tres cabezas que su soberbia y megalomanía

engendraron, desapareció, ¿era porque había cambiado? ¿O porque Basty lo había cambiado? O solo era algo que sucedía.

¿Y qué sigue?

Brindamos por lo que nos depare la vida, antes de que nos alcance la muerte. Chocaron los vasos, y tras agradecer, con dos botellas de gransur colgadas al cuello, emprendió el camino a la Hacienda LeRoi, era su casa, pero no sería un hogar hasta que lo convirtiera en uno.

Escuchó la detonación y con el corazón pesado subió al cuarto solo para encontrar sangre por todos lados, y cubierta de ella, estaba Hagane, con sus facciones ligeras y bonitas sonriendole mientras sujetaba la pistola aún humeante. No tuvo saber que pasó para saber que le había disparado a Conrad, postrado. Luego intercambiaron un par de golpes. Aún recordaba el tono de Hagane diciendo que no la lastimaría, y hasta ese momento Basty jamás se imaginó tomando una vida. Y la verdad es que tuvo miedo, porque en esa pelea, Basty no tenía lo que la chica Hyzilla tenía; las ganas de matar y la total falta de escrúpulos para hacerlo, y su única ventaja era que en ese momento Basty no era su enemiga. Aunque desde entonces nunca lo había admitido en voz alta, sin la intención de matar, Basty no tenía forma de detenerla si ella hubiera querido matarla. Por eso, cuando llegó Frasnorg, el único amigo de Conrad arrastrándose por ser un lisiado, y la quemó viva, al no intentar evitarlo siquiera porque era lo correcto, cada mala noche que tuvo desde entonces, solo la recordaba riendo mientras moría entre llamas. Aquella ocasion, tras años de mala suerte, padecer y pobreza, Basty conoció el verdadero miedo, mismo que no sería reemplazado hasta saber que pese el hoyo en la cabeza, Conrad no estaba muerto.

La campanilla de la risa la despertó con un fuerte calor en el pecho. Le ardía el cuerpo pero no tanto como los intestinos. Se volteó y en esa posición, arqueando mientras escupia más saliva que en toda su vida, no pudo poner atención a la mujer que estaba a un lado, mirándola con un especie de protector de barbilla que amortiguaba el sonido de sus palabras al mismo tiempo que los espasmos tapaban los oídos de Basty.

Aún asi, sintió como la mujer le levantaba el cabello para evitar que se estropeara con vómito, por lo que concluyó que sí podía preocuparse por su cabello, en virtud de la buena lid de los nativos de Ciclesia, Basty no tendría nada de que preocuparse, porque la crueldad de Hagane Hyzilla, era una excepción en su mundo, y una que se reservaba solo a la familia que fue consumida por ella.

Tras terminar de no vomitar pues nada salió, recibió de la chica semienmascarada un brebaje que bebió rápidamente y que con la misma velocidad detuvo todas sus dolencias.

Tranquila Basty, solo dale un momento al brebaje para que neutralice la prueba.

¿Cual prueba? preguntó Basty aún con los ojos tan fruncidos como sus intestinos.

Mi culpa se escuchó al fondo.

¿Dónde estoy?

Bajo tierra. A salvo.

¿Co... carraspeó mientras sus entrañas se decidían entre salirse o no.

Jerome te encontró, envenenada por Faucerax. Mi tio te curó.

Graci... no soy mal agra... pero la... cura es... pe....peor quel... veneno.

Eso que sientes no es el veneno, mucho menos el remedio, esa fue la prueba. Aunque tienes razón, sí es por mucho peor que el veneno de Faucerax, pero pues... inevitable en realidad dijo la voz al fondo.

Mal naci...me envene... Basty trató de levantarse, pero la mujer la derribó con cuidado.

Tranquila Basty.

¿Cómo sabes mi nom? hasta ese momento notó que al derribarla, la mujer le había colocado una especie de grillete, y cuando la miró, encontró una mirada que temía conocía y temía, la mirada de Hagane, por lo que sin quererlo comenzó a gritar.

Te dije que la prepararas desde antes escuchó al tio decir como un eco antes de que se desmayara, y Hagane le pusiera otro grillete.

En la batalla por Ciclesia, la matriarca de la familia Hyzilla, Rodelia, robó el arma que Basty y los demás ingenuamente crearon, y acompañada por los cadáveres de sus hijas muertas; Hagane y Kiryu, trató de hacerse por el poder. Casi al final. Basty debió atraer su atención y recordando las rutinas con las que programaron al Cerbero, esquivó la muerte, pero aún ahora recordaba la mirada de las difuntas, odiandola desde más allá de la vida. Esa mirada era lo más perturbador que había visto, hasta que un día, durante los meses de entrenamiento, mientras ella trataba de levantar su peso con los brazos sobre los hombros de Conrad, por primera vez vio la cicatriz del disparo que le quedó en aquella ocasión. Y cuando sus ojos se clavaron en ella, Maurice la dejó caer, recordanando que de no ser por su amigo el invalido, la loca Hyzilla lo hubiera matado.

Las alucionaciones se mezclaron con la realidad y escuchó los sonidos de combate. Casi recompuesta salvo por la confusión natural de despertar, buscó a su alrededor y tan pronto como encontro a la mujer luchando con fiereza al fondo entre la oscuridad, encontró a un lado su lanza, y al empuñarla, a un costado sin hacer el menor ruido, encontró al tio, completamente extraviado, sentado.

Al ver que aquel no la había visto, Basty se movió con mucho cuidado, un segundo antes de reincorporarse y poner sus acrobacias al servicio de largarse, el tio dijo:

Cierra los ojos y agitando una botella con un líquido brillante, esta se convirtió en un destello que iluminó toda la cueva.

Basty si cerró los ojos, pero igual quedó parcialmente ciega, sin embargo, cuando un temible Estrangulador se lanzó contra ella, alcanzó a empalarlo y evitar que sus largos brazos la alcanzaran mientras lo mataba. El otro estrangulador murió de un disparo en la cabeza que le dio la mujer, y las manos de otros dos se desprendieron cuando un hombre de negro solo visible por una capa corta color rojo les cortó los brazos.

Jerome, Basty, ¿están bien?

Deslumbrada, pero bien contestó ella, porque el hombre avanzó para eviscerar a un estrangulador que se acercaba.

Yo le dije que cerrara los ojos dijo el hombre sentado con una botella que hacía un ruido claramente peligroso.

¡Tio! Escucha Basty, todo tiene una explicación, en cuanto los repelamos.

Está bien dijo Basty tranquila. No te quites la pulsera.

Está bien, Desina La joven se sintió aliviada, y el grupo continuó la defensa que terminó, cuando el tio lanzó la botella y los estranguladores que no explotaron fueron aniquilados por Jerome.

A Basty le dio gusto encontrarse con Desina Hyzilla. Solo la trató una vez durante la Batalla por Ciclesia, hija de la infame Rodelia y Tarso, el Campeón del Cristal Luz de Viento, era la media hermana de las mujeres a las que tanto temía, pero ella se opuso a su familia y fue instrumental para la victoria.

Su tio, era un alquimista llamado Geltz, quien tan ciego como paranoico de unos parasitos que podían robar la voluntad a través de la boca, obligaba a su grupo a usar las mascarillas cuando conocieran a alguien que no haya sido previamente desparasitado, y como Basty había superado la prueba, no tuvo ojeciones en que los acompañara porque todos iban al mismo lugar. A la Ordalia.

El viaje fue enteramente distinto, Desina era una excelente combatiente y Jerome era un maestro de la espada, así que aunque Geltz podía ser una carga, la joven lo trataba con cariño y el tipo sabía muchos trucos, pues los grilletes, pese su espantosa forma, en realidad eran pulseras magnéticas que contrarrestaban a unos diablillos que causaban un estado de paranoia y confusión con sus zumbidos. Así que los cuatro avanzaron a buen ritmo por la oscuridad de bajo tierra hasta que encontraron la peligrosa montaña que ahora debían escalar.

Tras una semana de confiarse la vida unos a otros, Geltz decidió que si iban a subir, debían conocerse, por lo que organizó una fogata para que pudieran dar a conocerse a sus compañeros porque estaba seguro que adentro, la montaña los pondría uno contra otros, y aunque ninguno de los tres era particularmente bueno en expresarse, él comenzó:

Mi nombre es Geltz. Un parasito me robó mi vida y mi vista, pero tengo una buena vida. Tengo una familia y soy un alquimista. Estoy aquí porque la niña de mis ojos cree que puede sanarme, pero yo sé que lo que realmente quiere en su corazón es deshacerse de la maldición de su sangre, y así me cueste la vida, lo va a lograr Desina lo abrazó con los ojos cristalinos, mientras el tio le hablaba a los otros dos Aunque parezca que no, ustedes dos me agradan, es solo que me pone de nervios la tensión sexual entre ustedes, traten de entender, no la veo, pero la siento, y vaya que eso dice todo ¿no? Basty se echó el cabello para atrás y Jerome no se inmutó hasta que Geltz continuó pero al márgen de eso confío en ustedes. Sin importar cual sea la Ordalía no los voy a traicionar, y tan seguro estoy de que lo vamos a lograr, que cuando lo hayamos logrado, traje estos globos. Solo pisen la hebilla, jalen la palanca y una reacción los inflará. Desde la cima hay un hoyo imposible de bajar, pero podremos usarlo para salir cuando lo hayamos logrado.

Aunque a los demás el discurso no les pareció necesario o catártico, y la idea de los globos causaban más pesimismo que seguridad, Desina sí tomó la palabra.

Mi nombre es Desina Hyzilla, hija de Rodelia y Tarso, hermana de Hagane, Kiryu y... y Nefertari. Vi morir a toda mi familia a causa de una locura en nuestra sangre. El mundo sanó y yo tambien lo hice, ahora quiero una familia, pero no sí eso pone en riesgo a los demás, vine a Ordalia a renacer, pero también quiero que mi tio recupere su vista, y creanme cuando les digo haré lo que sea para que ustedes también puedan renacer, no solo porque lo necesitan, sino porque lo merecen sonrió sus muy bonitas facciones cuando le dio la mano a Basty aunque Jerome continuó fuera del alcance.

El silencio reinó un rato hasta que Basty decidió hablar.

No sé que decir, me llamo Basty y por algún motivo me fascinan los extranjeros todos rieron sin destruir la solemnidad del momento, incluso Jerome, que para su buena suerte era extranjero. Mientras la llama química de Geltz ardía iluminando a sus compañeros, encontró en la sonrisa esquiva de Jerome a todos los hombres que se habían ido, desde Dram hasta Durant.

Mucho más fácil de verse encontró en el rostro de Desina el rostro de Hagane pero sin odio, y en las heridas en los ojos de Geltz las heridas de Maurice, pero sin el hartazgo que lo caracterizaba, así que aclarándose la garganta, como si quisiera explicarle algo a los que no estaban pero de algún modo se hicieron presentes, volvió a comenzar.

Mi nombre es Bastehazet. Escape de un buen hogar en una rebeldía ridícula y cuando el hambre me hizo regresar, encontré que mis padres habían muerto y su casa había sido arrasada por monstruos. La realidad es que si no me hubiera ido estaría muerta con ellos. He sido una huérfana desde entonces, y he amado tanto que a veces creo que simplemente no merezco el amor que me dieron. Vine a renacer porque... no estoy segura. Pero, pueden confirmar que en la cima de la montaña, les daré la mejor ayuda que pueda darles. Se los juro.

El grupo tomó a bien la confesión, y Desina le dio un abrazo. Sin embargo, cuando este terminó, notaron que Jerome se había ido. Claro, el primer instinto de las jovenes fue salir a buscarlo, pero Geltz las detuvo: Es confiable. Vino con los extranjeros como mercenario y perdió a sus hombres peleando por nuestro mundo. Lo conocí cuando llevó a uno de ellos infectado del parasito. Pudimos matarle, pero no salvarlo Es un hombre con una maldición que necesita renacer y tan cierto como que sigue honrando a sus compañeros, tendrá nuestra espalda.

Todos estuvieron de acuerdo, y se prepararon para el último descanso antes de enfrentar el avispero que terminaba en la prueba donde arriesgaban la vida por la oportunidad de renacer.

En ese descanso, Basty no quiso dormir. Los fantasmas de su vida habían estado muy activos y prefería no descansar que tener que enfrentarlos, así que tras unos minutos, sintiendo la pesadez de la hora, se levantó y fue a buscar a Jerome, quien hacía la guardia, recostado sobre una piedra.

¿Por qué dejaste tu hogar?

Jerome no era de muchas palabras, pero quiso contestar. Una rebeldía rídicula.

Pese lo astuto de la respuesta, Basty supo que era cierto.

¿Te arrepientes?

Tenía una casa pero no un hogar. Aunque no me gustó perder a mis compañeros, mi hogar se hizo aquí, bajo las ordenes de Emile, con Sigma, Allister y Chefsito.

¿Los extrañas? preguntó mientras se sentaba en una piedra a la altura de sus piernas.

Cómo tu extrañas a los tuyos.

Apuesto que no te divertías con ninguno de tus compañeros como lo hacía yo.

Jerome estaba por contestar cuando entendió la insinuación. Seguramente tienes razón.

¿Te arrepientes de algo?

De muchas cosas, pero no me culpo de ninguna. Sucedió lo que sucedió ¿y tú?

Basty miraba hacia la montaña cuando procesó la pregunta.

Sucedió lo que sucedió. Aunque siempre me preocupó más lo que deje pasar.

No parece que sea un error que cometas seguido.

Es un error que no cometo dijo gateando hacia Jerome, quien de pronto se dio cuenta lo muy atraido que estaba hacia la morena, y lo poco calificado que estaba para la situaciòn. Pero Basty no estaba preguntando, cuando se aseguró que él no pudiera levantarse se acercó a su rostro.

A Basty le gustan los extranjeros ¿Cierto? preguntó Jerome en un último intento de alejarla sin querer alejarse.

¿Sabes que le gusta a Bastehazet ?

No.

Te muestro . La morena lo besó con cierto salvajismo y necesidad. Tanta que Jerome no pudo fingir que no le interesaba, pero cuando la joven le besó el cuello, tuvo un calosfrió al sentir su cabellera acariciando su rostro. Embebida lo apartó y llevó a Jerome a su pecho mientras sobre él, le mordía la oreja, y justo cuando Basty sintió el calor del momento, el cabello golpeando su rostro la hizo abrir los ojos para encontrar largos, negros y femeninos cabellos alrededor de todo su rostro.

Aterrada, sintió el movimiento de la larguísima cabellera descender acariciando su cuerpo. Antes de gritar horrorizada, unas manos la tomaron y la forzaron a ver hacia abajo. Era Jerome, tratando de que no entrara en pánico, a pesar de que aquel, desde abajo, tenía clavados los ojos atrás de ella, y aunque como el veterno que era, le era muy sencillo no demostrar sus intenciones, sus ojos hablaban de un horror que no cabía en la descripción de un hombre con una maldición, como lo describió Geltz.

Así Jerome la atrajo hacia a él y cuando estuvieron cara a cara: Muy a mi pesar, hay "una mujer" en mi vida. Pase lo que pase, no levantes la mirada. Todo estará bien.

Basty no dijo nada, por lo que cuando el extranjero la tendió en el suelo boca abajo, apesar de los mechones de cabello que le recorrían el cuerpo, ella se quedó inmóvil, aprentándose los labios sin sentir a Jerome. Una horrenda noche que terminó cuando Geltz despertó y tocó la campana que terminaba el santuario que, creyó, todos disfrutaron. Preparados para partir, Jerome no hizo seña alguna que delatara el incidente, y los cuatro se prepararon para el ascenso.

Las dos grandes guerras de la era fueron el Día Pétreo y la Batalla por Ciclesia, los cuatro habían sobrevivido a ambas, y aún así, el ascenso fue precisamente lo que esperaban de tan codiciado precio. Pelearon como lo héroes que eran y se mantuvieron firmes en ayudarse para llegar hasta la cima, donde vieron la piramide que sería el final.

El júbilo de llegar se eclipsó cuando leyeron las grandes letras que decían: "enfrenta tu miedo". Jerome se puso intranquilo ante la idea de que hubiera algo más aterrador que su maldición. Desina tenía tantos temores de donde escoger que solo se despabiló porque Geltz avanzó sin desempacho.

Hubieran querido trazar un plan, pero inmediatamente escucharon el rugido proveniente de la pirámide. De manera poco característica Jerome agregó:

No podían temer un conejito esponjoso ¿verdad?

No creo que sea un conejo, sonó más como un dragón contestó Geltz Jerome nisiquiera se molestó en contestar.

Pero no puede ser, solo hay un Dragón en Ciclesia y es el Gran Padre de .

¡No le des ideas! Dijo Jerome ayudando a Geltz que estaba desdoblando una aparato Magithecna.

Tio, no puedes...

Claro que no puedo, pero tu sí, es un dragon, para quitarle su ventaja vas a tener que tomar el aire

Desina se veía asustada de enfrentar el miedo a volar porque la última vez que lo hizo casi se mata. Geltz sabía que eso le exigía que la niña se jugara la vida, pues era lo único importante para él, y Jerome combatió el instinto de sacrificarlos para poder llegar a donde pretendía. Así que ante la escena, Basty sencillamente miró a su alrededor buscando lo obvio, y no supo si era dicha o no, encontrar a Siondre subiendo el final de la montaña.

Jerome subió unos escalones de la piramide con el aparato en mano, mientras Geltz preparaba a Desina. Pero Basty llegó al encuentro de la joven que se abrió paso sola en este pequeño infierno.

Eres tú.

Basty, diles que regresen, aún podemos escapar, un dragón es demasiado para todos.

El miedo que tienes que enfrentar es el tuyo.

¿De qué estás hablando?

No lo ves, tú le temes a los dragones.

Yo no le temo a los dragones, yo temo algo distinto.

¿Que és? Preguntó Basty mientras las llamas del aliento iluminaban todas las entradas del santuario.

Yo temo tener que volver a abandonar a un amigo como lo hice con Roland.

Esta es tu prueba.

Siondre iba a preguntar como es que sabía eso sí era ella la que quería convertirse en un especialista mata dragones, pero cuando apareció el dragón de escamas plateadas, Siondre reconoció a su amigo, maldito por el Gran Dragón de Kosmos para proteger tierra sagrada, como Ordalia.

Siondre supo la verdad, y preparó sus cuchillos, tanto como su indumentaria, porque tendría que moverse rápido, así que subió la piramide con gran velocidad y el resto se alivió de recibir la asitencia de la mismísima Campeona del Crista Luz de Fuego. Y el rugido inicial con el que los recibió en su boveda fue suficiente para que olvidaran a Basty, quien pisó la hebilla, jaló la palanca y vio el globo inflarse. Llevándola hacia la superficie mientras veía las evidencias de la batalla que sus amigos enfrentaban; sin duda una digna de sus merecidos renacimientos.

Maurice estaba sentado en el pórtico de la Hacienda LeRoi, una muy prestigiosa finca que aún abandonada brillaba atardeceres color bronce. Aunque tras la pelea entre CeEnissa madre e hija durante la Batalla de Ciclesia, la Eiress CeEnissa, contratante de Frasnorg, las trilizas Hyzilla y él mismo, ganó, solo para rendirse, porque para hacerlo, y de paso salvar al mundo, tuvo que hacer cosas terribles y con el lujo de ser cuestionables por aquellos que sobrevivieron gracias a ellas, la consideraron culpable de todo, y la exiliaron. La Corona precidida por su madre honró los cuantiosos pagos prometidos a todos sus

mercenarios, por lo que de la noche a la mañana, el exBarón de Falton, consiguió las riquezas por las que vino, pero su estancia de casi dos años aquí, lo había cambiado, tanto, que además de manco como llegó, se estaba quedando ciego.

Así que en un arrebato que nadie le creyó, decidió dejarse de delirios de grandeza y se quedó en Ciclesia, y como una recompensa personal, CeCero, el Campeón del Cristal Luz de Tierra, le regaló este codiciado lugar.

Realmente le pudo haber sacado provecho y convertirlo en una máquina de dinero y un lugar de increíble prestigio. Pero el único amigo que ha tenido en su vida, Frasnorg, recurrió a él con una oportunidad: ir a tierras aún más lejanas a obtener poder. Porque la droga de Conrad era el prestigio, pero la de Frasnorg era lo oculto, así que juntaron el dinero de ambos para financiar una expedición en la que el pelirrojo fuera a conseguir un poco más antes de finalmente volver a casa.

Con una buena tripulación que incluía a la Eiress exiliada entre ellos, Frasnorg partió en barco sin creer que Conrad realmente no fuera a acompañarlo, pues sabía bien que este dinero, mas lo que ganara, tenía como objetivo llegar a manos de Mergo, el hijo adoptivo que el Barón dejó en su puesto. Asi que sin entenderse, y sin decirse que se apreciaban mutuamente, se despidieron. Conrad no sabría que la motivación real de Frasnorg era una mujer prohibida, de la misma manera que el pelirrojo ignoraba que al margen de la maldición que cargaban, lo manco y golpeado que estaba, el alguna vez Barón de Falton, no quería ser una carga cuando irremediablemente se quedara ciego, pues su visión progresivamente empeoraba, así que ahora que la granja se reducía a unos bellos tonos metálicos, sabiéndola vacia por no tener con que pagar sueldos, no tenía que preocuparse por reconocer siluetas. Solo de esperar. Y sin embargo, había una silueta en el camino principal, avanzando.

Sus ojos estaban permanentemente deslumbrados, pero no quería que nadie lo supiera así que disimulaba con una actitud confiada y taciturna, de tal suerte que dejaría hablar al recién llegado para saber que asunto tenía aquí, pues de lo único que estaba seguro es que no se trataba de Basty.

Mirando hacia el recién llegado pero sin hacer un solo sonido. Espero bien vestido y aseado hasta que el otro con un saludo de mano se acercó y se identificó.

Tendrás que disculparme la voz era artículada y familiar No vi como anunciarme y aunque pretendía esperar, el atardecer metálico sobre los campos me hipnotizó. Primero me acerqué a ver unas pilminas floreciendo en la entrada, de ahí vi el viejo arból de irlias, y desde él, el lago refulgiendo en tonos rojizos ¿Qué te digo? Cometido el delito de invadir propiedad privada, no le vi sentido regresar.

Ni tendrías porqué, esta es tu casa CeCero.

Muchas gracias por la cortesia, Maurice.

En todo caso lamento que veas tu Hacienda en tan mal estado.

No, la LeRoi ahora es tuya. Me encanta verla, pero mi historia con ella terminó, y bueno, pese su fama, la realidad es que mis primos la tuvieron verdaderamente descuidada y solo mi querida Ettel le dio los dias de gloria que merece.

Vamos, te invito a la casa, no tendrá mucho pero tiene gransur, un licor de mis tierras que te encantará.

Gracias Maurice, desafortunadamente no bebo y si no te importa, mi visita es rápida y me gustaría disfrutar el campo durante la puesta de Mollis Quadratum.

Conrad jamás se acostumbró al nombre que tenía el sol en este lugar, pero admitía que los destellos rojos de su halo realmente le daban belleza al foliaje.

¿Qué puedo hacer por ti? preguntó con la cortesía que se espera del dueño, aún para el antiguo dueño.

Nada, digo, no te preocupes, estoy bien, de hecho vine a traerte esto. Como el caballero que era, sabiendo la incapacidad de su anfitrión, CeCero produjo un libro e inmediatamente lo abrió donde Conrad lo necesitaba. El ex Barón no quiso mostrar que debía acercarse demasiado para ver las letras, así que tras escudriñarlo y dejar que su invitado pasara la hoja, dijo: No estoy seguro de entender.

Sí, no es el lenguaje más amable, pero la idea general es que describe a unos viajeros que vinieron a aprender los secretos de nuestros Altares, y que cambiaron conocimientos por ellos, siendo la parte interesante que uno de ellos enseñó el camino de los "nobles del viento".

¿El contacto es anterior a los Dracheliers?

El contacto fue en el Primer Ciclo, mucho anterior a la mismísima Orden de la Luz, pero cuando la Quean Saranisa la fundó, siempre se ha entendido que lo hizo con los Sabios y los mejores Maestros de su tiempo, por lo que se considera entre eruditos de la materia que los místicos ya existían, ella solo los reveló al mundo. Entonces supones que si usaron ese intercambio de conocimientos como base, podemos rastrearlo.

Estoy seguro. Solo recibieron las bases, de ahí desarrollaron el resto, y pienso que sí al igual que ustedes, hallaron un obstáculo, fueron ellos quienes los ayudaron a superarlo.

¿De donde venían los viajeros?

La referencia textúal dice que vinieron del mañana, pero pienso que se trata de un lugar. Solo hay que averiguar donde esta "el mañana".

¿Podría tratarse de las tierras del mañana? Es una traducción algo forzada, pero sí. Podría ser, ¿conoces un lugar llamado así?

Conocí a un hombre que venía de allá.

¿Puedes contactarlo?

No. Pero al menos ya hay un camino ¿Dice algo sobre los nobles del viento? No mucho, aunque hay un grabado CeCero lo buscó y se lo mostró, afortunadamente por el dibujo a dos páginas, Conrad pudo apreciarlo con facilidad. Parecía un monstruo de grandes fauces luchando contra animales con forma humana; un zorro, una rata, un ave, una serpiente y un conejo ataviado con joyas, volando en el aire... con una lanza.

¿Crees que Camile sepa algo?

Odio usar la apriencia como evidencia, pero es el único ser que conozco con orejas parecidas a las de un conejo. Así que no estaría de más preguntarle, y aún si no fuera el caso, tiene conexiones fuertes con Dustind, el embajador de los elfos y Cricxes, que es un renombrado maestro de la Escuela del Secreto Oscuro. No se me ocurre nadie mejor para que nos oriente.

Gracias. Esto en verdad nos ayuda.

De nada. Te dejo el libro, no trae nada más pero no estaría mal que lo revises completó mientras colocaba una caja de madera a un lado.

No, mejor llévatelo, no podría devolverlo sin un incidente aclaró Maurice. Axcevasis en un gruñón, pero no tiene nada real en contra de ti.

Dudo mucho que pelearnos por algo irreal sea mejor.

Tienes razón, pero, de hecho, él fue quien me comentó del libro.

¿Estás insinuando que él te envió ayudarme?

Él te ayudó. Yo solo estoy aquí porque dominar todos los conjuros de la Escuela del Secreto Oscuro, no ayuda en nada a dejar el orgullo de lado.

Claramente.

Y qué curioso que lo señales porque por experiencia propia, sé que poseer una Hacienda tampoco.

Maurice rio.

Gracias, no me creo lo de que quiera ayudarme, pero te creo que quieras creerlo.

Eso es lo que no entiendes Maurice. A lo mejor no podrían ser amigos, pero te respeta. Y sabe que ayudarte es ayudar el legado de una amiga a la que adoramos.

Maurice se trabó en seco evitando preguntar si sabía algo de Vassandre.

Se que les gusta esa idea de que en Ciclesia todos son buenos vecinos, prestos para ayudar y leales con todos. Así que supongamos que es cierto y que Axcevasis se traga el odio que siente por mi para hornar a Vassandre porque son amigos y eso CeCero quiso interrumpir pero no lo hizo pese que supuso que seguía Explicame porque diablos me regalaste esta Hacienda, claramente codiciada por tus demás amigos, alumnos y vecinos nuevamente CeCero no se atrevió a interrumpir y no digas que es confianza, cuando de antemano sé que mandas a Siondre a vigilarme Esta vez fue Maurice quien no lo dejó interrumpir ¡¿Era más cómodo saber donde estaba que tener que buscarme?! gritó furibundo.

Te aseguro que es una confusión.

Ninguna confusión. Solo son amables porque les hace falta valor para decirnos que no somos bienvenidos.

¡Hey! sin levantar la voz, todo el suelo se estremeció como en un temblor ligero. Un importante recordatorio de porqué el estudioso original de las magias prohibidas fue considerado el más poderoso de todos los campeones y porque uno de los planes de los videntes fue tratar de enloquecerlo para qué destrozara Ciclesia por ellos.

Te aseguro que es un malentendio Maurice quiso hablar, pero CeCero le solicitó que lo escuchara tú sabes quien es mi padre, y creo que sabes que nos hizo a mi hermana y a mi. Si los videntes bajo su mando no pensaron dos veces en trastornarme matándola a ellla, debes imaginarte como atacaron a los demás. A Siondre le inocularon con un veneno de nostalgia; la pobre vive alucinaciones tan vìvidas como constantes sobre las cosas que pudieron haber sido y que por la insistencia, la convencen de que serán. Un prospecto enloquecedor que ha sobrellevado desde antes de que terminara la guerra.

¿Qué tiene que ver con esto?

Mi padre esta en otro nivel respecto del conocimiento del universo, así que no podemos neutralizar el veneno. Ella está en tratamiento, pero lo más importante es mantenerla ocupada en cosas que no detonen las visiones.

¿Y por eso la mandan a espiarme?

Necesitamos mantener ocupada y concentrada a una joven brillante que se hizo una carrera impersonando a su padre, quién dirigía una especie de red de inteligencia clandestina repleta de contactos que detectan falsas pretenciones con la menor seña. Asì que teníamos que darle un trabajo a su medida, pero no la mandamos a seguirte a ti, sino a el Marcial Durgat. Obviamente no le dijimos que todo era un tratamiento, solo le

hicimos creer que era importante vigilarlo. Para nuestra mala suerte, Ramsey puede ser una persona de acciones cuestionables.

No creo que la pienses una estúpida ni que me creas tan estúpido para creerlo.

Ninguna de las dos. Cuando pusimos en marcha nuestro plan le avisamos a la Quean, es como una hija para ella, así que aceptó gustosa y se se sumó, con el beneficio extra de pedirle a Ramsey que cooperara. Él desde luego aceptó por complacerla a ella.

¿Y porque terminó "encontrándose" con Basty?

Porque antes de acordar con Ramsey, él se vio con Nimrod Alcastre, quien reconocerás es un personaje sospechoso y difícil de seguir. Antes de informarnos para detenerla, ella se enteró que todos ustedes evitó decir exrtranjeros tenían un puesto de vigilancia para mantener controladas a sus Proyecciones. Dime ¿cómo se ve todo eso? Respecto de Basty, enviamos a un alumno del Liceo a hablar con ella, pero lo asaltaron en el camino y no la vio. Luego tú, en vez de ir a apoyar a tu pareja, te fuiste directo al nido de todas las consipraciomes.

No es algo fácil de creer murmuró Maurice, aún dudándolo.

No, pero por qué crees que vine en persona. Primero di la rama de olivo, y después iba a comentarte este asunto tras un momento continuó Admito que no es lo más sencillo de entender, pero quería que lo supieras porque no la localizamos ni a ella ni a Basty.

Fueron a la Ordalía.

Varios túneles están colapsados. Axcevasis envió a un equipo de busqueda, yo vine a avisarte, porque si esto no es más que una confusion, entonces es algún plan de mi padre.

Y con todo eso, tu preferiste venir a avisarme Ustedes son la apuesta menos sensata en toda situación. En el momento que sepamos algo, te avisaré.

Nada de eso contesta porqué me regalaste la Hacienda.

CeCero lo sabîa, solo no quería hablar de eso, pero ya había cometido muchos errores de discresión en este momento.

Los LeRoi son una rama de los Lucan. Mis primos eran un frente económico para ejercer control, mientras los videntes eran el cáncer oculto para matar a lo que se oponga. A mi hermana la entrenaron a palos para convertirla en la guerrera que conociste, a mí en cambio, me educaron en ciencias y artes en esta Hacienda para ser una bomba en el corazón de Ciclesia. Pero antes de ser campeones, mi hermana y yo nos libramos de nuestro padre, y él nos dejo ir porque sus poderes de videncia le permetían controlarnos creyendo que estabamos libres de su influencia.

Cuando conocí a Ettel quise alejarme de todo y comenzar de nuevo. Mis primos habían muerto en un accidente y compré la Hacienda a la Corona, porque quería trabajar la tierra y formar una familia en estos atardeceres de bronce. Cuando supe que sería padre, tomé el arado para que mi hijo naciera en un lugar hermoso donde su padre podía crear y no solo destruir. Pero mi padre sabía todo esto, como sabía que atacaría y que tendría que aprender la magia prohibida y usarla para detenerlo. Tuve el poder para proteger al mundo, pero el temblor resultante solo derribó un lugar. De todo el mundo. Solo destrozó un cuarto de resguardo donde mi esposa y mi hija estaban. Un cuarto que existía porque mi padre lo mandó a construir. Un cuarto en el que estaban porque yo

compre la Hacienda a la Corona, aunque solo haya sido porque mi padre ordenó matar a sus sobrinos para que pudiera hacerlo.

Maurice se sintió apesadumbrado. Pero CeCero no le dio descanso. En el lago detrás del árbol de irlias descansan las lápidas de mi familia. Sus cuerpos ya son parte de los Altares Elementales y sus espíritus regresaron al Torrente de Jade. No puedo vivir aquí. Y cuando nos conocimos en plena guerra, vi en ti a un hombre despreciable que trajo la guerra a mi mundo por dinero. No me agradabas. Pero peleaste con Eccecila. Ella estaba ciega, pero sabía ver dentro de las personas. Me dijo que le recordaste a mi. Frustrado pero inquebrantable. Atado al pasado pero haciendo lo posible para tener algo. Por eso te di la Hacienda. Para que tuvieras una nueva oportunidad, como la que me dio mi hermana… inmerecida o no, porque cuando el fin esta cerca es sencillo entenderlo, pero cuando solo sabes que está ahí, puedes darte el lujo de esconderte en el recuerdo.

Ambos se quedaron en silencio, y este solo terminó cuando CeCero dijo que iría al lago una vez más y de ahí partiría. Maurice se quedó hombros abajo meditando, hasta que miró el libro que no podía aprovechar, encontrando una caja que dejó su huesped. Al abrirla descubrió que en su interior habían unos lentes, la respuesta a sí Eccecila lo conocía .

Conrad se quedó toda la noche estudiando el libro sin extaerle más información pero dusfrutando leerlo porque con los lentes podía hacerlo.

En la madrugada llegó ella. Aún antes de abrir la puerta, él la recibió con preguntas:

¿Llegaste a Ordalia?

¿Cómo supiste que estaba aquí? preguntó Basty sorprendida.

¿Renaciste?

¿Que te parece si lo hablamos mañana?

Quiero saberlo ahora ¿Renaciste? No.

¿Por qué? inquirió él sin siquiera mirarla.

Renacer fue la prueba de Vassaandre no la mía.

¿Tan siquiera llegaste a la prueba?

Llegué, pero no hubo una prueba para mi.

¿Cómo sabes?

Apareció un dragón.

¡Quieres ser un drachelier! ¿¡Que esperabas?!

No era mi prueba . Basty mantuvo la compostura.

¡¿Cómo estás tan segura?!

Sasoria y yo fuimos íntimas. Ella me contó de sus viajes a Ordalia. Subió sola. Dos veces. Siempre sostuvo que subía para purgarse. Pero nunca lo logrò. Nunca mencionó una batalla, un acertijo o revelación. La Ordalía te enfrenta a tu peor miedo. Y la más grande heroina de Ciclesia solo tenía un miedo: No hacer lo correcto cuando tuviera que hacerlo. Por eso la Ordalia nunca la juzgó, porque aunque jamás se convirtió en la Guerrero de la Luz que creía merecer ser, hizo lo que hizo. Sin pretextos.

¿Qué tiene que ver contigo?

No había prueba para mi. Los dragones no me dan miedo. No solo es el dragón. Es una prueba, pudo ser otra cosa… Conrad se quitó los lentes con un paño sobre la mesa eres calculadora, pudo ser el miedo a una batalla salvaje

Sobreviví a la Batalla por Ciclesia en la primera línea.

Bien, siempre has competido, pudo ser miedo a perder, Fui miembro de Los Perdedores, crees que nos decían así por nada. Pudo ser el miedo a morir.

No lo es. Tendrás que creerme.

¿Qué no tienes miedo?

Tengo miedos, solo la prueba no era para mí.

¿Cómo sabes? Gritó Maurice arrinconándola contra la pared.

Solo lo sé bajó la cabeza amonestada.

¡¿Cómo sabes?! ella no quiso mirarlo, pero él le buscó los ojos por una respuesta ¡¿Cómo diantres sabes?!

Por qué si fuera mi miedo, de esa puerta no hubiera salido un dragón, ¡hubieras salido tú diciendo la verdad!

Conrad se dio media vuelta, pero fue ella quien no lo dejó huir.

Me conoces como nadie más lo ha hecho. Sabes quien soy. Conoces mi límites pero no te has dado por vencido. En cambio solo te quedas ahí buscando formas de evitarme la verdad.

No se de qué hablas.

Claro que sí, lo supiste desde el principio y aún así te destrozaste los muslos durante tres años haciendome llegar a los tres metros. Vassandre llegó al doble salto en 7 días. Ya no es un asunto de habilidad ¿Por qué no solo lo dijiste?

Porque aún podemos intentar muchas cosas fue al libro pero ella lo cerró y encaró su más grande miedo.

Dilo . Rogó.

No se de que hablas.

Claro que sí lo sabes. Dí que ser Drachelier es mi premio de consolación porque sin importar que pase, cuando ella regrese te irás, y claro, con ella de regreso nadie me necesita para medio enseñar lo que ella domina Maurice estaba por suavizar las cosas cuando ella se fue a la garganta y que sí ella no regresa, de todas maneras todo lo logrado muere con nosotros.

La pausa fue larguísima, pero terminó cuando ella continuó:

Mi vida ha sido un desperdicio, lo acepto. A diferencia de Alfarin e Ishidar yo no morí para ahorrarme averiguar la amarga verdad. Lo que no entiendo es por qué sí lo sabes, insistes en eso, ¿por que desperdiciar tu vida? ¿Es por qué estás aburrido? ¿Es porque te gusta insultarme? O es porque tienes algún afecto por mí y quieres dejarme algo para cuando te vayas.

Maurice no dijo nada. No podía, lo habían descubierto. No me puedes amar, está bien, lo entiendo. No va con tus ambiciones. Nunca seré la legendaria drachelier Vassandre, la heroina del estandarte de tu familia, llevada ahí por ti. Tiene sentido. Lo que me mata es que no hayas continuado con tu plan, no puedo descansar pensando lo que te pasó por la cabeza en el momento que te ofreciste a enseñarme ¿Por qué te detuviste?

Porque no te quise lastimar.

Malnacido ¿Genuinamente creíste que era mejor que me enterara frente a un Templo dedicado a renacer?

A estas alturas no importa.

Ah ¡pero claro que importa! Porque haremos un acuerdo.

¿Qué clase de acuerdo? preguntó Conrad curioso.

Basty empujó con su pecho a Conrad, llevándolo contra la pared.

Te voy a dar el hijo que quieres dicho desde tan cerca, el corazón de Conrad se saltó un latido . Lo vamos educar en lo que sabemos uno más, y con los labios gruesos de la morena tan cerca y el silencio previo al precio, finalmente se puso nervioso, pero ella no lo dejó hablar y cuando ella regrese, te podrás ir... y te lo podrás llevar.

Todo lo que quería. Todo lo que pensó estaba frente a él, solo necesitaba saber el precio.

¿A cambio de que? preguntó un poco temoroso de la respuesta.

Basty se acercó hasta que lo tuvo ojo a ojo, labio a labio.

Beso como nadie, no solo porque tengo práctica, sino porque lo disfruto. Es lo mejor que vas a probar. No mintió, tomado por sorpresa se sentía como electricidad, como energía pura; como Vassandre pero con pasión y necesidad, por lo que justo cuando se estaba dejando llevar por su lengua, ella se separó. Habiendo sobrevivido al truco una vez, él solo pudo insistir.

¿Cuál es el precio?

Ese. Lo vas a tener todo. Todo lo que quieres. Pero no te voy a volver a besar.

Basty lo azotó contra la pared, viéndolo con una mirada hipnotizante. Lo mantuvo en silencio mostrándole el calor de su cuerpo contagiando al suyo.

¿Tenemos un acuerdo? preguntó Basty.

Cuando Conrad quiso contestar. Ella lo calló ahogando sus labios en su cuello. Separándose solo para volver a preguntar, pero ahogándolo de nuevo con su oreja en los labios. En el tercer intento él ya no dijo nada, y ella se paró de puntitas.

Demuéstralo retó Basty.

Maurice había deseado tanto este beso que se lanzó por él, pero ella se hizo para atrás.

No, no, no, no. El acuerdo.

Conrad no supo que hacer, pero ella le quitó el cinturón y se repitió. Demuéstralo

Alexandros era el palacio de Global, la ciudad que abarcaba toda Ciclesia. Era una estuctura impresionante, ligeramente desnivelada hacia "el frente" pero sostenida con firmeza por dos gigantescas columnas que lo convertían en una figura asimétrica pero imponente en el horizonte de los Ciclesianos, el "altar central" lo apodaban. No era para menos, en contraste, localizados en los puntos cardinales, los cuatro altares elementales, identificados por los garguantescos cristales que crecían en ellos, constituían el centro de una filosofia, donde eran una serie de conciencias benignas que permitian el equilibrio y

en consecuencia los Ciclos. Por ello, al ser llamado altar central, se reconocía que Alexandros era un gran logro en la cohesión humana por el equilibrio, y era tan reverenciado, que mucha gente aseguraba que durante la Batalla por Ciclesia, se movió y combatió al temible Cerbero.

A diferencia de los demás, Conrad sabía que era cierto, que aquella impresionante estructura se movió y combatió, porque su ama, CeEnissa Sasure, Quean de Ciclesia se lo ordenó. Eso era lo más sorprendente de todo pues si bien no sabía si Alexandros era tan suntuoso como el Palazzo de Toscana, porque a pesar de ser la capital de su tierra, jamás lo había visto, estaba seguro que no lo dejarían entrar en él, como lo hacían aquí, porque esta estructura, como los altares elementales y todo lo que realmente importara en Ciclesia, tenía guardianes, pero no dueños, así que en teoría un vagabundo podría echarse a dormir en las escaleras del palacio, si no hubieran posadas gratuitas en cada ruta para hacerlo. Todas ofreciendo comida caliente para todos.

Aún así, no estaba de más ser reconocido. Aunque los Afenos y la gente del QuarNaTor no tenía diferencias en la apariencia, la falta de brazos lo hacía inconfundible y gracias al testimonio de CeEnissa Saoria durante el juicio, todos los extranjeros quedaron como héroes al público, en especial uno: Ramsey Durgat, el ahora Marcial de Paz de Global

Aunque ambos venían del QuarNaTor, Conrad no lo conocía mucho, porque mientras que Durgat llegó a Ciclesia con la CeEnissa madre. Conrad y Frasnorg llegaron con la CeEnissa hija. Una gran diferencia, Ramsey vino porque la que sería Quean reconoció en él un héroe y quiso salvarle la vida, la hija en cambio reconoció en Conrad y Frasnorg, a unos genuinos salvajes dispuestos a todo por poder, y los uso para salvar el mundo; un apabullante contraste entre las nobles intenciones y los ideales, contra la realidad: el poder quiere más poder.

Alguna vez escuchó a unos bardos convertir todo el asunto en una lucha entre la Justicia y la Ley, la madre esperando lo mejor de todos mientras que la hija sabiendo que la felicidad no es llenadera para la ambición. Aunque Conrad no creía que la reducción fuera correcta, sabía que la hija sí esgrimió ese argumento, como sabía que era cierto, porque por eso estaba aquí y en eso descansaba su plan.

Cuando le dijo al paje quien era y a quien venia a ver. Al entrar este al salón, pudo por un momento ver una junta presidida por la Quean, ante asistentes de clara importantancia como ministros y nobles. Se preparó para el rechazo, pero mucha fue su sorpresa cuando el paje lo escoltó al salón donde el Marcial de Paz Durgat lo recibiría.

En una sala tan suntuosa como se podría esperar de tan importante personalidad, Conrad repasó sus palabras.

Conrad FohnKurs. Te ves bien dijo el Marcial dejando su abrigo mientras se sentaba.

Lamento la interrupción, pero agradezco el tiempo. No, gracias a ti. Me salvaste. Es un infierno pequeño allá adentro.

¿Una junta inútil o aburrida?

Ni la una ni la otra. Esa mujer sabe lo que quiere y todo momento que pueda ver su mechón cenizo acariciando su hermoso rostro es una dicha, pero el resto de los asistentes son insoprotables. Escucha esto: ella quiere asegurar el abasto de comida en una década, y el ignorante de Zerday le ofrece comenzar una serie de campos de siards que estimulen el crecimiento agricola ¡es un granjero olor a heno! Ella quiere solucionar el empleo: El idiota de Gerdens ofrece sus fabricas para capacitar empresarios locales ¡El tipo es peor que un ladrón! Reorganizar los liderazgos locales, Su Excelentisima

imbecilidad, Lusziano, porque será un imbécil pero es Cianselor de la Corona, presentó un acuerdo con los nobilis para abrir nuevas posiciones. Tres silabas, co-rrup-to. Y el peor de todos: Ella quiere aumentar el nivel de educación, y el lelo de Rezagante ya tenía listo un plan de educación aplicable a todo Global. Te apuesto a que el infeliz aún es virgen ¿Puedes creer a estos tipos?

Suenan como buenas propuestas ¿Cual es el truco?

¡Que son excelentes propuestas! Conrad enarcó la ceja sin entender así que Ramsey se aclaró pero estos tipos no hacen esto por el bien del mundo o la Corona.

¿Por qué lo hacen entonces?

Para desposarla

Tiene sentido.

Y que conste que no los culpo, la tentación es abrumadora.

Ser el Cyng de Ciclesia completó Conrad.

¿Qué, de qué hablas? preguntó Ramsey confundido.

De casarse con la Quean para ser el Cyng

No Conrad, te hablo de ese algo en esos ojos azules tras su mechón cenizo que vale más que cualquier reino.

¿Dices que lo hacen porque están enamorados?

Perdida y estúpidamente enamorados.

¿Cuál es el problema entonces? preguntó sorprendido. El problema es que tengo mucha competencia y que soy Marcial de Paz… sin una guerra, la única forma de lucirme a mi disposición es hacer lo mejor por este mundo y eso implica darle la razón a tipos que quieren lo mismo que yo.

Estoy confundido.

¿Por qué?

¿No quieres la corona?

No.

Pero quieres ¿desposarla?.

Asi es.

¿Por qué?

Porque justo antes de la Batalla por Ciclesia, estaba por irme con todo el dinero cuando ella dijo que necesitaba que detuviera al Guerrero Invencible de abandonar el Reino del rayo. En serio, no hay nada, literalmente nada a lo que le tuviera más miedo que enfrentar a… Le dije que no, que me iría y que si quería, podía llevarmela conmigo, eso era todo. Pero ella, en vez de detenerme, me besó, me dio las gracias y se fue a arriesgar la vida por el mundo. Si al igual que el buen Escudero me preguntas porque regresé a hacer lo que pretendía de mi, no tengo respuesta. Pero sé que mi motivación para sobrevivir al Guerrero Invencible, a la sorceress del Rayo y al Guerrero invencible del rayo, fue para poder mantenerla viva y preguntarle porqué creyó que le cubriría las espaldas.

¿Qué te contestó?

Me besó. Y quiero que sea mi esposa para que nadie más pueda volver a sentir a sus labios.

Conrad sí podía entender eso. Y por qué lo entendía le apenó tener que hacer lo que vino a hacer, pero estaba decidio; lo iba a hacer.

Ahora que mencionas el Reino del Rayo... Como recordarás, Frasnorg se infiltró con los videntes cuando Ramsey asintió, continuó además de averiguar que nos trajeron para que a nuestras muertes nos convertirnos en monstruos como le pasó a

Tautman, Talwar, Tomyar, Dexius, Tagget y... Conrad estaba nervioso y no podía recordar el nombre del otro.

El otro.

Sí, el otro.

Descuida, yo tampoco lo recuerdo al pobre ¿a quien habrá hecho enojar?

No lo sé… el punto es que para eso nos trajeron los videntes. Querían convertirnos en Sagreon.

Pero Sasoria se les adelantó, ja, imaginate ver el futuro y que te joda la Eiress del trono que quieres usaurpar.

Eso es lo que todos piensan. Pero además de querer el trono, por querer el trono, ¿no te parece curioso que en ninguna de las batallas, hayan usado a los monstruos que crearon?

No lo había pensado contestó Ramsey ¿Alguna idea?

El primero de ellos, La-Boca-Que-Envenena fue Tautman.

Gran hombre, mejor sargento.

Y lo encontramos en las entrañas del Basilisco Global, profundo bajo tierra. Como todas las demás "proyecciones" nuestras, aún después de la guerra.

¿No te dijo Alcastre que desaparecieron?

Sí. Pero sí no fueron usados y ahí estaban. Pienso que quizá si fueron usados.

Explicate Ramsey no dejó de acomodar sus botas, pero sin duda estaba intersado.

Convenientemente Basty y los suyos no recordaron que sucedió cuando la hija de tu querida Quean los llevó a El Vacio, un momento antes del Día Petreo y el robo del Cerbero.

Pobre Rodelia, creyó que lo peor que le podía pasar a una Hyzilla era toparse con CeEnissa Sasure defendiendo a su hija como le pasó a su hermana Azarea, cuando lo peor era enfrentarse a la hija defendiendo el mundo de su madre. Ironico.

No tanto como esto: Azarea venía por la Corona y Rodelia por el mundo. Los videntes por el poder ¿Estás de acuerdo?

Sí.

Y por eso usaron su mejor arma, a las Proyecciones para invadir algo que ustedes esconden en El Vacio.

¿A donde quieres llegar?

Sé que la Quean, tú y quien sabe que más esconden algo en El Vacio, y si quieren que continue siendo un secreto tendrán que pagar por mi silencio.

El rostro de Ramsey se endureció.

¿Todo está bien Conrad?

Perfecto. Es un trato entre caballeros, ustedes me dan un monto razonable y no tienen que preocuparse por nada.

¿El dinero es para algún fin?

No es que importe pero tengo gastos.

¿Regresó Frasnorg?, ¿falló la expedición?

Eso que importa.

Necesito saber para que es, para saber de cuanto dinero hablas.

Como dije, tengo gastos.

¿Quieres armar una banda de mercenarios? ¿Quieres poner a funcionar la Hacienda LeRoi? Conrad pausó y Ramsey lo supo Bien, no es mala idea levantar la Hacienda, requiere trabajo pero no demasiado dinero.

¿Estamos negociando?

No. Lo que pretendes es un poco de dinero y prestigio. Eso está bien.

¿Concederás mis demandas?

No. El Vacio es un lugar infinito donde el tiempo no transcurre. Y están ocultando algo ahí.

No precisamente. Una vez adentro de El Vacio las probabilidades de que dos perdidos cualesquiera se encuentren, rayan en lo imposible, ahí en la soledad, la gente enloquece y se deforma. Por eso abundan los monstruos aquí, escapando de tanto en tanto. Así que Sasoria construyó un faro para que cualquiera perdido en El Vacio pueda seguirlo y así como alternativa a perderse para siempre, encontrar a otros.

Están amazando un ejército.

No. De hecho esa idea la tuvo el tirano del ciclo anterior, el famoso Doble Emperador. El objetivo de este lugar es que los perdidos puedan llegar a un lugar, donde vivir, prosperar y bueno, morir, porque es mejor que ser un monstruo.

Loable, y precisamente por ello, lo que pido es poco por guardar el secreto. Pero no importa el secreto. Se llama Ivaliance. Cualquiera puede ir, lo compicado es volver. De hecho, ya tiene una población grande, pues no solo captó a los que se perdieron ahora, sino a los que se perdieron hace mucho e incluso los que se perderán Ramsey enarcó las cejas tratando de darle sentido pero prefirió decir No te preocupes, yo tampoco lo entiendo del todo. Lo que si te puedo decir es que Sasoria arregló que los cañones del Cerbero funcionaran como un desfasador a El Vacio, así en vez de morir, todos los afectados llegaron allá, y en vez de solo enloquecer y deformarse, viven allá. Ivaliance es otra cosa que le deben a las CeEnissa's. Incluso el sirviente de Frasnorg, el muchacho Dram y los perdedores están allá. No podemos traerlos, pero definitivamente es el futuro que vislumbró la hija de nuestra Quean, y es uno por él que hará lo que sea.

Conrad se encogió de hombros porque se dio cuenta que su plan no funcionaría, así que continuó.

Si lo que necesitas es algo para comenzar a reactivar la granja.

Mi padre fue un insignificante granjero, no voy a terminar mis días trabajando la tierra, y aún si pudiera conformarme con eso; soy un maldito lisiado, no puedo arremangarme las mangas y ponerme a trabajar.

Entiendo Ramsey se levantó y se puso el abrigo. Conrad continuó con la cabeza abajo, hundido en su miseria al haber fallado en este, su último plan, y no salió de sí hasta que Ramsey golpó la mesa con una mochila.

Aqui hay suficiente oro para que contrates empleados y vivas con dignidad como un Hacendado. Es más, la tierra es excelemte, administrate bien y en unos años podrias codearte con los Nobills. Juega bien tus cartas y quien sabe.

Vengo a chantajearte, me expones como un ímbecil ¿y ahora me das oro? No necesito tu lástima.

No es lástima Conrad. Es una oportunidad.

¿Por qué? retó enojado de escuchar nuevamente la palabra. Por varias razones. Pero tengo que regresar a la junta, no porque me interese sino porque tengo que salvar a mi chica de esos tiburones.

Dame una razón o dejo el dinero.

Eres una joya Conrad, estás tan seguro que el destino te debe algo que se lo reclamas a todos. Pero mira, si necesitas una razón, que sea porque vas a ser padre.

¿Cómo lo sabes?

Soy el Marcial de Paz, el fin del mundo no es pretexto para dejar de ver todo el panorama Buena suerte Conrad, la vas a necesitar.

¿Por qué?

Porque nadie sabe de que está hecho hasta que tiene la oportunidad de cambiar.

La voz más dulce dijo:

¿Llegamos tarde?

De ninguna manera, gracias por venir. saludó Basty con un bebé en brazos cubierto, mientras por las columnas del templo entraban dos meihg, siempre delatados de su ocupación por las ropas de la Escuela del Secreto Oscuro. Él traía su sombrero y el rostro maquillado como se acostumbra, pero ella portaba unas hombreras doradas que la hacían parecer más alta, y sin el maquillaje su hermoso rostro se lucia en cada fina facción que tenía. Todos la miraban, pues aunque traía el sombrero, lo adornaba con un par de largas orejas parecidas a las de un conejo.

Te ves increíble dijo la recien llegada meihg, a la mamá, quien desde el embarazo se le rizó el cabello, haciendola lucir mucho más guapa de lo normal.

Tu también, Camile

Es lo que le digo señaló a su acompañante no me aprecias lo suficiente Crixces.

El meihg venía preparado, se acercó a ella.Tenían la misma estatura, así que ella solo bajó la cabeza. Basty no escuchó lo dicho, pero vio en el rostro de Camile, el efecto de la poesía con la que un mortal conquistó a una inmortal, una historia de amor por derecho propio. Camile sonrió y besó a su pareja. Aunque el maquillaje de ceniza impedía ver sus facciones, ella las conocía, y las amaba.

Prometo no cambiarte por nadie... el día de hoy suspiró ella enamorada.

¡¿Qué?!

Solo fue un soneto... ponte listo Crixces dijo mientras amenazaba con la mirada y los dedos ¿dónde está Conrad?

Está en esa sala, ya preparado. Y por favor, recuerden, es Maurice.

¿Qué mania de estarse cambiando los nombres? ¡Uno nace con un nombre y se muere con el mismo! Basty y Cricxes se miraron en silencio por el secreto que debían guardarle Amor, ve por Maurice. Yo me quedó con el bebé.

Basty no pudo disimular la preocupación, por lo que siguió con la mirada a su amigo hasta el umbral de la sala, mientras la meihg tomaba al bebé en brazos.

¿No es peligroso? Basty lo cedió, incapaz de apartar los ojos de la sala.

Sí, lo es. Es puramente teórico. Jamás se ha usado así.

¿Pero te dieron permiso de usarlo?

Se lo dieron a él. Es mi derecho mostrar el rostro por ser la mejor de mi clase, pero todavía no llego a su nivel. Y la verdad es que sospecho que solo lo dejaron

para contarlo como un experimento realizado, pero sí en algo te consuela, salió de la mente de Lepnor.

Y él es el mejor ¿cierto?

Nieto de Arces, el Guerrero de la Luz que blandia la magia en este ciclo. Educado por CeCero y Axcevasis. No fue el mejor de su generación porque otra alumna sacó 110, de 100 posible. Pero sí, el tipo era un genio. Tenemos mucha suerte de que la Quean Sasure siga encontrando notas de sus Conjuros, solo por eso su escuela tiene futuro, porque de lo contrario, lo de hoy es indiscutiblemente El Acuerdo Sagreon. Eso he escuchado.

Sasoria realmente quebró las leyes del universo. No me imagino que pasó por su cabeza para idear la noción de otorgar conciencia a la magia para estabilizarla.

Ella era así; sorprendente. Tan inolvidable para ti como para mí.

No la conocí aclaró la meihg a su confundida amiga.

Sí, cierto se corrigió Basty nerviosa me refiero que la recuerdas de lo que te hemos contado. El punto es que al menos los sacrificios no fueron en vano. Nunca lo son dijo la idrila levantando al bebé que sonreía.

Unos sacrificaron más que otros comentó Basty nostalgica.

Sí, estoy de acuerdo, pero escucha este fascinante dato: pese que son elementos claramente antipodos, osea contrarios, Infernos de fuego y Saya de hielo, sí la pareja de alguien que ya tenga el Sagreon Saya, solicita a Infernos, este le concede El Acuerdo, aún si de otro modo no tuviera los requisitos.

Disculpa, ¿Qué significa? . Preguntó Basty confundida.

Qué son ciertos los rumores. La Magia prohibida de fuego que no dejaba de quemar y la magia prohibida de hielo que no dejaba de congelar, tomaron su forma Sagreon de los campeones C’zar e Ishisaya. Así que aún pese la muerte, él sigue protegiéndola. Así que todos los sacrificios valieron a pena porque es un amor para los eones. Los sagreones al menos bromeó.

Un amor para los eones...

No hay de otro Basty solo sonrió levemente y fue por eso que la meihg le dijo:

¡Anímate! Lo que trato de decirte es que todos los Sagreon que conocemos, en su calidad de atemporales, bien podrían ser la expresión de nuestras virtudes, de nuestros romances. Aquí en este momento, este niño podría ser la expresión del heroísmo ¡El mísmísimo Titanus!

¿Podría ser lo contrario?

¿Un canalla?, ¿un loco? Sí eso es lo que te preocupa debiste escoger mejor al papá terminó la meihg sacando la lengua.

¿Estoy haciendo lo correcto? preguntó Basty sin advertencia.

¿De que hablas?

De todo esto.

Sí.

¡Idril!

Soy una idrila, es como si yo te dijera ¡human!, y esperara que me contestes.

Solo dime ¿Estoy haciendo lo correcto?

Al verla tan nerviosa, Camile decidió intervenir.

Son unos padres tratando de darle un extra a su hijo. No solo no es malo. Es lo que los padres hacen.

¿Qué tal si estoy alterando su destino?

Hey, tranquila. El Destino es lo que decimos para admitir que no tenemos ni idea que pasa. Me quieres de madrina, y como líder de las idrilas está en mi darle la bendición del viento. Y quiero hacerlo. No hay nada de malo.

Porque queremos educarlo como Drachelier. Pero que tal que su destino era la afinidad tierra y ser un Samaritano.

Le haces un favor, nadie quiere ser Samaritano.

¡Camile!

Oye, bromeo para que veas que no es importante. Hoy se le presenta a Mollis Quadratum, el sacerdote entonces llamará al Altar que lo acogió y cuando su padre lo levante virará hacia donde esta su afinidad. Somos amigos, y quieres que sea su madrina; le voy a conceder la bendición del viento del bosque, y el padrino también. No sabemos sí eso altere realmente su afinidad pero es mejor que su papá tratando de orientarlo hacia el altar del viento como un salvaje Basty rió menos culpable además quién puede ser un Drachelier depende de ustedes. Que sea un gran Drachelier depende de él, no de Conrad-Maurice, no de ti, no de mi ni de su padrino. Hablando de eso, ¿dónde está el Padrino? Mollis Quadratum ya casi alcanza el cenit.

No lo se, pero Dustind llegará.

Claro que llegará. Porque se lo pedí yo, y nunca me niega nada. Nada.

Te estima mucho.

¡Lo traigo loco! Es un milagro que Cricxes no se encele. No me cuida. Te digo que no me cuida. Pero descuida, vendrá porque él sabe que las idrilas heredamos los bosques que los elfos dejan.

La emigración lleva años, y en realidad nunca ha sido muy común verlos, pero nunca entendí porque se van.

En este Ciclo, su Lordeon Ackerond se alió contra los Guerreros de la Luz como en su momento lo hizo Astoros el elfo oscuro, por si no fuera suficiente, en el palacio encontraron la Ultima Voluntad y Testamento de Vroinia, una magus que narra su participación en un genocidio dirigido por Asuryan, un elfo con una larga historia de delitos en este y otros mundos, contra los lufianos.

Vaya. Supongo que eso lo explica todo.

Si en algo te consuela, las idrilas seremos mejores guardianes que ellos.

Sigues hablando en plural ¿Hay otras?

Sí, llegan de la niebla, confundidas, pero idrilas. Apenas vamos por una centena, pero en solo 6 años. Es un milagro que pagan con sus memorias, ninguna recuerda nada. Aparecen perfectas. Sin madres sin padres, somos la hijas del viento.

Y las lideras.

Las acojo. Cada una de ellas es mi hermana, tus tías le dijo al bebé mientras sonreîa La Escuela del Secreto Oscuro quería que todas fueran educadas por ellos.

Pero tú no.

No es eso. Es lo que siento, y lo digo así, porque solo es una corazonada; que el que nuestra existencia responda a la partida de los elfos, está relacionado Camile perdió los ojos en el horizonte como si pudiera pensar un recuerdo, mas al esquivarla como siempre, continuó pero de todas las charlas que he tenido con el señor embajador al respecto, no he obtenido nada, solo me escucha, me concede lo que le pida, y me mira. Me mira con...

Con aprecio.

No, es algo más, te lo juro es...

Admiración contestó el Dustind, embajador de los elfos, llegando de la nada con sus mejores atavios, y esa actitud tan grácil como eterea que podría ser confundida con desdén si sus ojos no se clavaran en los ojos de la idrila. Me encantaría que hubiera más razones para hacerlo Su Excelencia, pero le prometo que mi vida es larga y mi leyenda apenas inicia. Indudablemente. Pero le he repetido, llamame Dustind. Y yo le he dicho a Su Excelencia que me llame por mi nombre. No puedo, juré que no contestó entre dientes y ya que Basty lo escuchó, intervino.

Son los padrinos de mi hijo. Creo que pueden tratarse como hermanos. Sí puedo contestó Camile veloz para continuar ¿puedes tú, hermano? Dustind casi se quiebra por dentro. Volverla a escuchar decirle hermano era un regalo que no creyó tener ni merecer, especialmente después que la perdió dando su vida por Ciclesia. Como el conejo sacrificándose por el viajero, Idril murió para darle una oportunidad al mundo en el Día Petreo. Y tras el dolor, en su lugar llegó Camile. Sin ningún recuerdo, sin raza, y por tanto, sin razón para decirle quien fue, porque habría que confesarle que la elfo perdió la inmortalidad, y esa es una tragedia que pocos superan.

Gracias Basty.

¿Basty? ¿No Bastehazet? ¿No dama o algo así de rebuscado? ¡¿Qué ocultan?!

Nada contestó Basty.

Ah por favor, si Dustind tuviera un hijo lo llamaría señorito o algo así. Si tuviera un hijo, desde este momento le solicito que fuera su madrina, para que pueda llamarla tia.

¡Bastehazet! ¡Habla! gritó Camile frustrada. Ambos pretendimos a la misma persona. Eso es un vínculo que acerca. oh ¿pretender? ¿Románticamente? ¿Esperen la misma persona? cuando ambos asintieron, ella continuó ¿Quién?

CeEnissa Sasoria.

Aprovechando la confusión de Camile, Basty le preguntó a Dustind: ¿Piensas que hago mal en "influir" en el destino de mi hijo?

Mi pueblo cree que el Destino es esa fuerza que sucede cuando creemos que podemos ejercer control sobre la creación. Aquellos que fluyen con la vida encuentran su destino, aquellos que tratan de manipularla, sufren cuando se encuentran con el destino el rostro de Basty se deformó con temor y casí le arrebata el niño a Camile permitame exlicarme. Creo que lo que hacen aquí hoy, sí se aferran a ello, les causará dolor a ustedes. Qué lo hagan o no, es el destino del infante.

Mi vástago no necesita un destino, es de sangre fuerte, así que sera un hombre fuerte, y como tal se forjará el destino que quiera dijo Conrad mientras llegaba al grupo, bien vestido, radiante, listo para tomar a su hijo en brazos.

Los brazos de Conrad le daban un volúmen y vitalidad a su normalmente delgada figura, que opacaba por completo que se veía incluso más joven. Camile le sonrió a Crixces por la proeza, pues el restar, era una magia puramente teórica, venida de la mente de un genio que encontró en El Vacio una forma de manipular el tiempo a través de fluctuaciones. La Escuela del Secreto Oscuro veía el poder de una esfera basada enteramente en esa premisa, pero los Sagreon eran simplemente demasiado tentadores para dejarlos pasar, así que en vez de investigar, solo permitió que uno de sus profesores menos carismáticos tomara los riesgos sobre un extranjero que si se desintegraba tratando de desfasarse a una versión más jóven de él mismo, nadie extrañaría. Pero los

directivos de la Escuela no pensaron en Basty, que no podía dejar de verlo con ese nuevo semblante, uno que si hacía gala de Conrad, Barón Falton de FohnKurs. Así que no se sintió mal de que no compartiera un instante con ella, completamente embebido en su hijo, pues esta era la primera vez en la vida de su hijo que lo cargaba, sin embargo, si pudo leer en su mirada, todas las cosas que veía en el futuro para su hijo.

Antes de poderse estremecer por todo lo que implicaba, El Samaritano al pie de la piedra de la resonancia los llamó a la Ceremonia de presentación, la cual presidió contando sobre el origen de Ciclesia por la gracia de Mollis Quadratum, y como regaló los Cuatro Altares Elementales para que la vida pudiera prosperar, reconociendo como el gran logro humano a Global, la Ciudad mundial que bajo la Quean CeEnissa Sasure conoció una propseridad sin precedentes.

Acto seguido dio la palabra al padrino, Dustind, que en nombre de los elfos que abandonaban ciclesia por creer que su tiempo en ese mundo había terminado, encomendaban al niño a Kitsune, el druida del viento que durante toda su historia los había guiado, y por quien, pese que eran eternos, consideraban que nada lo era, y por tanto debían seguir adelante. Al hacerlo, tuvo a bien mencionar que cuando se sintiera perdido, confiara que el viento lo llevaría a Camile, pues no solo era su madrina, sino también la líder de las idrilas, un pueblo que parte intrinseca de Ciclesia, recibía una antigua tradición como guías y protectoras.

Sobrecogida por las palabras, y sin recelo, la idrila le concedió la bendición del viento blanco que aleja el dolor y las penas, prometiéndole que estaría para él siempre que lo necesitara. A diferencia del solemne gesto del elfo, los movimientos de la idrila desataron una ráfaga que se evidenció por las hojas caídas flotando alrededor. Llegado el momento, el Samaritano pidió que su madre lo acercara, dejandole caer, tierra, agua, soplándole y pasandole una vela, le recordó que por los altares era, y a los altares volvería, momento en el que pidió al padre que lo presentara.

Maurice Conrad tomó a su hijo y lo levantó alto en el cielo, donde Mollis Quadratum brillaba. Aunque creyendo todo el rito una superstisión y siendo su intención virar hacia el este donde está el altar de viento, la refugente luz del sol lo mareó, de manera que tratando de no caer dio un paso y de pronto su hijo, por su resonancia, estaba mirando hacia el este, donde el viento suspira.

Con una sola mano Conrad lo sostuvo y lo mostró ante conocidos y curiosos con orgullo. Entre los aplausos uso su otro brazo para sujetar de la cintura a Bastehazet y atraerla.

Fue un momento dichoso que marcaba el principio de algo prometedor, por lo que dejándose llevar, cuando devolvió el niño a su madre, Conrad se acercó para darle un beso, pero Basty solo puso la mejilla.

Porque dicha o no: Tenían un acuerdo.

La Hacienda LeRoi había crecido. Conrad se mostró astuto, y en vez de trabajar la tierra directamente empleando gente, apoyó con el dinero de Ramsey los primeros intentos de hacer granjas de siards. Aunque el plan del terramante Zerday tardó años en mostrar ser un éxito, durante todo ese tiempo, las tierras quedaron en renta por la Corona, y el

excelente dinero resultante, aunque era celosamente fiscalizado por el Ciancelor Belove después del escándalo de corrupción de su antecesor Lusziano, exiliado junto con el industrial Gerdens por tratar de arrebatarle el poder a la gente en favor de los acaudalados, Conrad lo uso para mantener un exquisito sequito de viaje, y así, con el pretexto de llevar a Basty a todos los rincones de Ciclesia para continuar entrenando el camino del Drachelier, en realidad gastó casi todos sus ingresos en que nobilis de talento y prestigio (más lo segundo que lo primero) educaran a su hijo en todos los artes que los hicieran sentir que era uno de ellos.

Esas onerosas inversiones le valieron un lugar en las mesas de todos los Nobilis y Ministros con influencia, y si bien el niño tenía el carácter para aprovecharlo, cada uno de estos enmascarados sobornos sumaban a los apoyos que Conrad necesitaba para que, aquellos distinguidos hombres y mujeres, permitieran que el hijo de un extranjero fuera reconocido con un título, honorario, pero suficiente para que todos los afenos supieran que se trataba de uno de ellos, por encima de sus pares. Así, a sus ocho años, Basselfred fue nombrado Knecht de Global, y nadie volvió a mencionar que su padre era un extranjero.

Aunque no era exactamente lo que acordaron respecto de la crianza del niño y los marginales avances en el camino drachelier dejaban mucho que desear, Basty estaba orgullosa de su hijo, así que no hizo reclamo, considerando que no era indiferencia por parte de Conrad estar completamente enbebido en su hijo. Además estaba admirada de ser madre de un Knecht, pues era una indicación de nobleza no por sangre o tierra, sino por mérito, algo con lo que viviendo en las calles jamás hubiera soñado.

Como Knecht, el niño debía permanecer como un noble errante, a cambio del derecho de asistir a las reuniones de la Corona, y afortundamente, aunque en ambas uno podía preguntarse que hacía o que aportaría un niño en ellas, la frivolidad de los tiempos de paz permitían ignorar el tema. De todas las cosas, esta fue la que más daño le hizo al itinerario de Basty, pero aunque ella no estaba creciendo, enfocó todos sus esfuerzos en entrenar a su hijo como Drachelier y él sencillamente había nacido para ello, pues tal era su afinidad con el aire, que muchas veces escuchaba la voz del viento, y aunque la pecularidad era aplaudida y gratificada, Basty temía las intenciones de esa voz etérea y encantadora que hablaba con su hijo.

En una ocasión, mientras Conrad había regresado a la Hacienda para recuperar la tierra, ahora que los siards cultivados habían levantado el vuelo, flotando a lo largo y alto de Global para traer sus beneficios al mundo, sabiendo que Conrad quería utilizar la indemnización para comenzar los preparativos que le permitieran financiar una escuela élite para la enseñanaza del camino del Drachelier dirigida a Nobilis. Basty llevó a su hijo a conocer a Akron, un antiguo amigo de aventuras y que aunque no lo había visto por años, lo sabía aún casado con Lexes, la última temponauta, después de que los otros siete hubieran perecido en accidentes mágicos tratando de desarrollar su escuela.

Aunque Akron hizo lo que pudo para disuadir a Basty de ver a su esposa, ella, con el pretexto de saludar a una vieja amiga, insistió porque necesitaba una respuesta que solo ella podía dar; saber sí aquella voz en el viento que escuchaba su hijo era a causa del conjuro de restar que le había permitido a Conrad los últimos ocho años tener brazos, pues fue con esas manos logradas con energias cronales que sujetó al niño durante su ceremonia de afinidad, y aunque su madrina Camile aseguraba que seguramente aquello era la imaginación del niño sumada a que los espiritus del viento sí tenían una voz, en Lexes había una persona capaz de confirmar que no había un elemento cronal.

Lamentablemente, tal como Akron dijo, Lexes estaba en muy mal estado. Su mente se había deteriorado a causa de las energías que blandía y la muerte del último otro practicante de la esfera de magia que no nacería, solo la había empeorado. Estaba por disculparse, cuando Lexes tuvo un buen momento, reconoció a su amiga y charlaron sobre los viejos tiempos.

Basty, ¡que gusto verte! ¿Vinieron las demás?

¿Las demás? preguntó Basty sonriendo. Ishidar.

Basty creyó que nada le dolería más que recordar a la mujer que tuvo que dejar morir para salvar al mundo. Pero cuando contestó, no sabía lo que le esperaba. No pudo venir.

Claro, tiene a su hermanita que cuidar, espero les vaya bien en la granja de tho’catrices.

Basty sonrió con dolor, y su hijo le dio la mano para consolarla, sin saber lo que venía.

¿Y donde está Alfarin? preguntó Lexes sin malintención.

¿Quién? contestó el niño porque su mamá no podía.

Tú mami antes de que Basty pudiera aclarar el malentendio, Lexes continuó mientras ariciaba la cabellera rizada del joven me alegro que Alfarin se haya quedado con Conrad, estaba tan enamorada, hubiera sido una crueldad no haber sido la madre de este jovencito.

Akron se acercó a Lexes para abrazarla y detener su ignorante crueldad, pero al hacerlo escuchó al niño decir.

¿La torre está que?

... en llamas contestó Lexes.

Mamá dijo el niño con el rostro marcado por el miedo.

¿Qué sucede Bassel?

La torre; la Quean, los knecht Bessel tomó un paso para atrás y aún sujeto por Lexes la escuchó decir con el rostro deforme por el horror en sus ojos.

Si subes la columna morirás.

¡Hijo!

Soy un knecht de Global suspiró Basselfred. Para cuando Basty trató de sujetarlo, el chico salió por la ventana rompiendo los vidrios, y con la agilidad del drachelier para el que se le entrenaba, montó su tho’catriz.

¡Basty! la madre solo volteó porque necesitaba saberlo la voz tiene razón, ¡solo puedes salvar a uno!

Sin tomar su tho’catriz, salió inmediatamente de la casa y subió al tejado. Justo después del salto, una gran explosión impactó contra Alexandros y Basty fue derribada del cielo.

Despertó unos minutos después, confundida, herida y lastimada de una pierna. Afortunadamente, su tho’catriz la vio caer y noble como solo su divina especie es, esperaba protegiéndola de uno de los muchos peligros que acaecían en la ciudad. Sin pensarlo, herida montó directo hacia las gigantescas llamas en el centro y solo a medida que cabalga pudo ver el daño total de lo que sucedía. Avanzó sin resistencia hasta que a las puertas del castillo encontró a tres hombres peleando contra sombras para despejar la ruta de salida de los sirvientes del castillo. Reconoció a uno.

¡Ramsey!

¡Basty! ¡Huye! ¡Son los malditos videntes!

¡Basselfred está adentro! . Gritó la madre.

Cuando ambos voltearon para buscarlo, uno de los hombres, Telbeccus les señaló la parte de arriba, a demasiados metros en el aire donde claramente se podía ver a la Quean Sasure peleando junto a un niño. Solo quedaban unas escaleras por debajo de la cima de la columna.

"¡Te abrimos camino!" Gritó Ramsey antes de que lo cortaran por el costado. Fue solo un reflejo el que le permitió levantar el arma para salvar la cabeza, pero aunque el atacante lo reconoció, no lo volvió a atacar por que aunque indudablemente lo quiera muerto, lo Convocaron para matar a todos en el castillo. Ramsey solo estaba de paso, a unos pasos del castillo. Sangrando, los tres héroes pudieron ver al Sagreon conocido como el Guerrero Invencible del Rayo entrar a hacer la voluntad de su convocante.

Harvey Garret llamó un ejambre de siards a su alrededor para sanar a Ramsey, pero la herida estaba hecha con odio, el tipo de heridas que no sanan con facilidad, menos en una batalla.

¡Quédate con él, voy a entrar! Basty no alcanzó a correr cuando un hombre de sombrero la derribó y la protegió con su cuerpo del derrumumbe producto de un inusal temblor en la tierra del que brotaron ojos que pronto comenzaron a flotar.

Raylan era un hombre viril que abanonó la calidez del cuerpo de Basty para levantarse disparando y destrozando los ojos cristalinos que brotaban de la tierra.

¿Dónde está? preguntó sin fallar un tiro.

Sus rivales de amores señalaron arriba donde la Quean CeEnissa Sasure y su knecht Basselfred estaban por llegar al final de la columna que Lexes advirtió. Desesperada su madre se jaló, pero Ramsey la detuvo porque frente de ellos, se levantaban unas figuras oscuras salidas del caldero de otro Sagreon.

¡Es mi hijo!

Sí movió la cabeza afirmando Y no vas llegar a él si no nos sigues.

Harvey gritó:

No lo va a lograr dijo mirando a Telbeccus para que lo ayudara a razonar con él, pero Ramsey solo lo jaló para hablarle de frente.

¿Alguna vez le dijiste que darias la vida por ella? Telbeccus asintió pero antes de decir nada Durgat continuó No me hagas quedar como un mentiroso...

¿Que no se supone que si mueres te levantas como uno de esos? preguntó Raylan, el vaquero.

Soy un extranjero, Ariadne te contó que llegué por Ivaliance, Telbeccus lo sabe, mis días terminan como un fiambre que no muere a los pies de una sirena. Déjame llegar a ella.

Tras esas palabras, el vaquero lo ayudó a incorporarse y Ramsey agradeció con una plegaria a su maestro de nombre Dehaka por enseñarle a dejar el miedo atrás, y como lo prometió, en un estallido de técnica, abrió camino como si hubiera nacido con 6 hachas por brazos. Eso fue suficiente para que cruzaran el patio, desde donde tomaron el elevador, gracias a que Rezagante y Dosca evitaban el ascenso de los Sagreon que asolaban el castillo, apenas llevaban diez pisos en los que Basty no quitaba la vista de su hijo, cuando afuera del castillo se materializó el Sagreon de una colosal serpiente que destrozando todo con su gigantesco cuerpo, mordió justo en el piso encima de la columna, colapsándola.

Los ladrillos descendieron junto con polvo en forma de escombro. Y aunque Basty miró alrededor no encontró a su hijo. Pero lo que sus ojos entrenados de

Drachelier no le dejaron ver, como madre lo sintió. Con un salto imposible para su pierna rota entró a la nube de polvo a ciegas.

Las piedras y vidrios golpeándola no importaron en la esperanza de abrazarlo, romper la caída como había entrenado por 12 años o al menos usar su cuerpo para amortiguar el golpe. Al final, contra todo pronóstico, cayendo hacia la muerte llegó al centro del escombro colapsado para encontrar a la Quean cayendo con su hijo.

Aunque el futuro de Ciclesia se decidiera en una sola acción, Basty sabía que no viviría en culpa por hacer lo que como madre debía, pero Sasure también era madre, y por ello le lanzó a su hijo, perdiéndose entre los escombros.

Basty trató de romper la caída, logrando poco a cambio de su siard de viento. Pero sin dudarlo hizo los últimos giros de su vida, uno para ser colchón para su vastago, y otro para protegerlo del escombro cayendo.

Quebrada, Basty miró a su hijo tratar de reincoporarse, buscando correr hacia su Quean como el valerosos knecht que era. Aunque el dolor le impedía entender la locura de algo tan inutil como un título, la Drachelier se prensó del brazo de su hijo, segura de no permitir que desperdicie su vida. Es todo lo que podía mover, un brazo, pero no lo soltaba a pesar de que el niño se jalaba con locura. Sin poder hacer más, le gritó esperando que la autoridad de su progenitora lo sacara de aquel trance.

¡Basselfred! El niño se detuvo por un momento con los ojos llenos de lagrimas, así que ella continuó temiendo desmayarse Se terminó.

pero el joven revisaba los escombros buscando entre ellos un rastro. Se terminó.

El niño se abrazó de su madre llorando.

pero mi hermano y luego rompió en llanto hasta desmayarse. Y fue con esa palabras que finalmente tuvo sentido la profecia de la temponauta:

"solo puedes salvar a uno".

El asunto con Ciclesia es que al ser mundo de héroes, constantemente surgen nuevas pruebas para curtirlos. Medirlos. Probarlos para ver sí realmente pueden destacar en un mundo de valientes. Tras el asalto de los Sagreon a Alexandros, Global estaba nuevamente bajo ataque, por unos impostores que decían ser las sombras de Séptimo, el vidente.

El ataque sorpresa al había causado bajas. El grupo que llegó a advertir del ataque pagó caro su interferencia: Harvey Garret había sido desintregado por Los-OjosQue-Buscan al defender el castillo de sus atacantes. Tellbeccus Maco, uno de los primeros Garantes del Acuerdo Sagreon, dio su vida para que como extranjero finalmente pudiera despertar a su proyección, el Alas de Pergamino y con ello permitir que Ariadna Konda, su amiga de toda la vida, pudiera enlistar a varios Sagreon más, quienes liderados por Filo de la Lealtad y Fantasma de Seis Dedos pudieron sostener la batalla que parecía completamente perdida al menos hasta que Levitán, Cyng de los Sagreon apareció en persona para eliminar de su vista a todo aquel en que hiciera mal uso de sus vasallos.

De hecho, la Quean Sasure solo sobrevivió porque el enemigo llamó al Sagreon Díavolo, quien mucho antes que esta pelea, había sido enlistado por su hija para cuidar a su madre, y tomando La-Ley-a-la-Letra como fue su nombre antes de ser un Sagreon, intervino a su favor. Asi que la Quean, furiosa, tras la batalla de Alexandros, junto con la Guerrero de la Luz, Siondrerisa y otros héroes, partió a llevar la guerra a sus cobardes enemigos.

Pero aunque Sasure tenía un ejército de pretendientes para salvarla, Basty solo tuvo a su hijo para arrastrarla fuera del peligro, y luego esperar. La guerra sucesiva tomó a Ciclesia con la guardia baja, pero fue peleada por sus mejores héroes, excepto dos: Basty, cuyo cuerpo había quedado tullido, y Conrad que se quedó entrenar a su hijo, el único que tenía una oportunidad de ser Drachelier, ahora que su madre estaba postrada.

Aún en su malogrado estado, la preocupación de la Drachelier seguía siendo su hijo. Sumergiéndose constantemente en las evidencias de todo lo que había vivido. Sabía que no había bendición alguna en el consejo que la misteriosa voz le daba a su hijo.

Según los Samaritanos, Sabios y otros sanadores que la revisaron, este conflicto interno era la razón por la que no sanaba, y ya que nadie le daba respuestas satisfactorias sobre la condición de su hijo y lo acontecido, su salud empeoraba cada vez más.

Conrad no la tenía mejor. Su hijo estaba disperso entre la situación de su madre y la voz en su cabeza, por lo que su entrenamiento se estancó justo donde esperaban que lo destrabaría para su madre. Además, toda la prosperidad de Global se vino abajo, y los viejos fantasmas de la pobreza y la violencia se asomaron de nuevo para todos, especialmente para alguien con tan grandes ambiciones.

Así, a la vuelta de página, la descompuesta relación que algun día tuvieron Basty y Conrad, a todas luces había empeorado porque a juicio de ella, el tiempo que tuvieron para cumplir lo acordado, él lo había desperdiciado en sus locuras, motivo por el que se recluyó, entregandose devotamente a la oración, hasta que el mismísimo Gran Dragón de Kosmos o los enemigos que tanto poder tenían, le ofrecieran una solución a cambio de lo poco que le quedaba.

Basselfred también tuvo su primer trago amargo, pues ante la situación, la Quean había dejado como último edicto que los Knechts del reino administraran justicia, velando por el pueblo y observando la Ley, pero pese la habilidad con la que defendió a su Quean, el joven Drachelier solo era un niño. Así que la primera vez que tuvo que herir un ladrón para evitar que se llevara algo de la Hacienda, tras vomitar, no encontró a nadie más a quien decirle como sentía excepto a la voz que solo él escuchaba.

Un día su madrina dejó el frente para visitar a su ahijado. Aunque llegó buscando enlistar la ayuda de los dracheliers, cuando supo del estado de su comadre, no dudó en blandir su poder para salvarla. Camile, ahora era una Garante capaz de llamar a la sagreon Dama-del-Retrato, la visión enloquecedora de Santa Maria Angelina patrona de los amantes, esperando que con ella, el amor hiciera el milagro. Pero tras la Convocación, la Sagreon como vino se fue.

Fue un golpe devastador para todos, porque según Camile, no podría volverla a llamar hasta la siguiente luna, y la guerra había llegado hondo hasta Ivaliance, donde dragones asolaban el frente y debían partir sin tener razón de cuando o de sí volverían. Basty le pidió a su comadre que hablara de frente sobre si tenía salvación, Camile le contestó que no creía que sus heridas sanarían, todo lo contrario.

Conrad también le pidió a Crixces que usara restar en la madre de su hijo, pero aquel le dijo que en el estado mental que estaba, la magia le daría un cuerpo que su mente

no podría mantener. Y que aunque seguía sin saber cuanto le duraría el milagro a Conrad, estaba seguro que en el caso de Basty, proceder con restar solo haría más breve si vida.

¿Hay algo más que hacer, Camile?

No, milagros de esta magnitud se murieron con Ishisaya.

Lo que sea.

¿No es un poco tarde para eso Conrad? contestó aireada al imaginar lo miserable que había sido Basty a su lado, y lo mal que terminaría sus días pues aquella le contó sus intenciones aunque no me gusta, antes de que me vaya quiere hablar contigo.

Camile salió con su ahijado mientras Conrad entró a ver a Basty, quien sorprendenetemente, en vez de desaliñada y enferma como la esperaba, parecía radiante.

Hola saludó él.

Parece que este es el fin del camino.

No digas eso. Aún podemos hallar a alguien que pueda ayudarte.

Basty rio mientras se peinaba el largo cabello sentada en la cama. Conrad siempre cometía el error de pensar que porque por sus lesiones ya no podría dar una marometa y reducir a un enemigo, era un especie de vegetal, pero no era el caso.

Le dije que te dijera, pero ya conoces a Camile, cree que porque somos finitos, todos somos unos niños Conrad no dijo nada, no era ignorante a los desplantes e indiferencias que le había hecho, no por gusto, sino por estar ocupado cimentando el futuro de su hijo, un futuro que Maurice llamó ella para sacarlo de esas ensoñaciones diurnas que a menudo lo engañaban, y la verdad es que como la única que lo llamaba así, funcionó.

¿Qué no me dijo?

Que se va junto con un grupo de Ciclecia a Ivaliance a apoyarlos.

Eso si lo escuché.

¿Entonces escuchaste porqué vino?

Porque necesitaba unos dracheliers.

No Maurice, vino por ti. Porque Vassandre le dijo que te buscara.

El corazón de Conrad se saltó un latido y miró a la mujer frente de ella, quien a pesar de que lo había sacado de sus ensoñaciones diurnas, lo había lanzado a lo más hondo de sus anhelos.

¿Te vas a quedar callado?

No, es solo que, no recuerdo para que me dijiste que ¿Para qué? ¿Acaso importa?

No realmente, no pese su mejor juicio no pudo evitar decirlo.

Entonces queda arreglar el final de nuestra sociedad. Lo obvio es obvio, el niño se queda conmigo, con ella cerca no eres capaz de cuidarlo.

Conrad no asintió porque sabía que era cierto. Así que ella continuó.

Entonces lo único que resta es mi indemnización sabiendo que Maurice no le replicaría, continuó fallaste en nuestro acuerdo. No avancé en mi conocimiento de la senda al ver que Maurice se encogió de hombros remato ni lograste que nuestro hijo desarrollara su potencial.

Entiendo que estes enojada, pero si hay una cosa que hice fue acrecentar el potencial de nuestro hijo.

¿Cómo?, porque el camino se lo enseñé yo.

De pronto convenientemente olvidaste años de tutores y maestros.

No los elegías por lo que pudieran enseñarle, sino por su influencia.

¡Y gracias a eso, pese que su padre es un extranjero y su madre una común él es un knecht de Ciclesia!

¡No lo viste defender Alexandros! ¡Basselfred se hubiera convertido en un knecht como se convertirá en mucho más! ¡Has estado tan ocupado planeando escenarios que te devuelvan tu prestigio que dejaste de lado lo que le convenía a tu hijo!

Eso sí no lo permito amenazó Conrad con el dedo.

Llevas años con brazos, y no fuiste capaz de usarlos para algo diferente que "tus planes". Sugerencia, sí la vida sigue siendo generosa contigo como no mereces y llegas a tener oportunidad con Vassandre, ¡úsalos! No son adorno.

Basty estaba molesta, así que con cuidado se pasó a la cama. Por su parte Conrad no hizo por ayudarla, porque solo quería salir de ahí, y para hacerlo con la cabeza en alto necesitaba aclarar algo.

¿Qué te debo?

Un hijo.

Como dijiste, Basselfred no está listo para ésta misión. Se quedará contigo.

Basty agitó la cabeza, y con todo lo difiícil que le era decirlo lo dijo.

Quiero que me des otro hijo.

Maurice se detuvo por completo. Incredulo, la miró en silencio pensando si acaso escuchó bien.

Camile y Crixces van a conseguir algunos suministro, partirán hasta dentro de siete días, estoy ovulando. Dame lo que quiero y te puedes ir con las manos limpias.

¿Estas loca? contestó él, tomado por sorpresa.

¿¡Por qué!?

En tu estado no podrías... y yo no puedo...

Por mi no fingas preocupación, y si no puedes algo, seguro yo puedo encargarme de eso.

Yo no puedo con ese compromiso.

¿Por qué no? Asi como dejas a un hijo dejarás al otro.

Enloqueciste.

¡Todo lo contrario! Soy la única cuerda, tu estás enfermo, y a mi hijo lo enloquecen voces. Si no hago esto yo seré la loca.

Sigues con lo de la torre.

¡Él dijo que vio a su hermano, que lo salvó de la caída! Y Lexes me dijo que no podría salvarlos a los dos.

Lexes está loca.

!¿Y Basselfred!? Basty estaba enloquecida Si necesito tener otro hijo tuyo para salvar a mi hijo lo voy a hacer, y no te atrevas a decir que no es lo que quieres porque en ocho años jamás me has rehusado. Seré tu premio de consolación, pero hasta que llegues a Ivaliance puedo hacer contigo lo que me plaza.

No.

¡¿Por qué diablos no?!

No puedo ser respon

¡Nunca lo has sido!

Escuchame mujer, ¡no voy a regresar! ¡nunca!

¿Crees que no lo se? Todo el día la tienes en la mente. En estos años solo te he podido robar de ella una cogida a la vez.

No entiendes dijo él casi sin aliento.

¡Claro que sí! Podrás imaginarla, pero cuando estás conmigo, no te falta nada.

Escucha ¡Se está acabando! antes de que Basty le ganara la astucia, Maurice levantó el brazo Lo siento desde hace meses. Se está acabando al decirlo miró sus manos, entorpecidas y borrosas cuando restar se termine, seré un manco y un ciego. No voy a sobrevivir donde maquinas de guerra como Vassandre o Camile necesitan ayuda.

Conrad, Baron Falton de FohnKurz se desinfló por completo. Y muy a su pesar Basty le tuvo lástima.

En verdad que no te odio. Nisiquiera estoy enojada contigo, pero aunque puedo ver por ellos, no puedo consecibirlos sin ti. No tengo nada para ofrecer. No puedo dar nada ni ser responsable.

No te pido que lo seas. Será mi hijo. Yo lo sostendré en su ceremonia de afinidad y nada le faltará. Basselfred le hablará de su padre, y quizá un dia puedan saber que murió bajo la legendaria Vassandre, en verdad te deseo que fuera bajo ella como quieres.

Maurice miró a Bastehazet y justo mientras su vista se adaptaba por los continuos saltos que daba entre la ceguera que le comenzó en este mundo y los ojos que gozó toda su vida, por primera vez se dio cuenta que Basty estaba usando maquillaje, que se veía hermosa y que no sabía como se sentía abrazarla. Asi que lo hizo.

En sus brazos Basty se quebró. Todo esto era demasiado dificil para ademas estar enamorada, asi que para estar segura que lo tenía, lo besó y con ese delicado encanto, logró que le hiciera el amor.

Nueve meses después nació Algerdein, un varón saludable que aunque su padre no pudo presentarlo en la ceremonia de afinidad, cuando su hermano lo levantó fue llamado hacia el altar de tierra, y su madre supo que tendría el caracter para salvar a su hermano.

Al regresar de la pequeña fiesta. Tras despojarse de sus ropas finas, Maurice volvió a la Hacienda a colocarse el arnés. Arar la tierra era dificil pero no imposible sin brazos, y ya que los unicos dos tho’catrices que tenían se sentían demasiado por encima de la labor, le tocaba a él preparar los campos para el cultivo. La pieza central de su plan para alimentar a su familia y a todos los huerfanos, heridos y desplazados que vivian en la LeRoi para sobrevivir a la guerra.

EPÍLOGO

Basselfred con 14 años, veía a su hermano Algerdein de 8 años correr en el pasto cuando "ella" lo llamó. Hipnotizante como siempre se perdió en su voz, escuchándola hablar de cosas que los mortales solo podían pretender entender. Una sonrisa se dibujaba en su rostro mientras le recitaba al oído esas palabras que solo eran para él.

Como siempre, se hubiera quedado inmovil escuchando hasta que solo le diera silencio, pero su hermano lo agitaba con fuerza, pues una mujer yacia a sus pies herida. Sin pensarlo dos veces, Basselfred giró en el suelo y se puso frente a ellos, buscando a los atacantes. El relinchar de los caballos, que conocía gracias a las historias de su padre sobre su hogar, le indicó la distancia del jinete e inmediatmente mandó a su hermano por ayuda mientras él llevaba a la mujer de ojos verdes y piel morena hacia el campo.

Aunque las hortalizas estaban altas, no esperó que le dieran protección, solo llegó al espantapajaros y depositó a la mujer a sus pies un segundo antes de que todas las

plantas se cortaran por la mitad. El mismo destino que hubiera tenido el joven, de no haber dado un salto hacia atrás para caer sobre el espantapajaro tambien cortado y de sus brazos extraer una lanza para defenderse.

De entre los cultivos cortados con imposiblemente perfección, apareció una bestia de seis patas y sobre sus lomos estaba un caballero completamente armado, luciendo en su rostro amarillo una sonrisa enfermiza.

La voz de sus sueños le dijo que frente a él estaba el Sagreon conocido como el Guerrero invencible del rayo, cuyo nombre no era una exageraciön, y que solo quería a la mujer. Conociendo a Basselfred, la voz no se atrevió a decirle que la entregara para salvar su vida, pero si le dijo que enfrentarlo tendría un precio.

Cuando Algerdein llegó a su padre Maurice, este salió corriendo a auxiliar a su hijo. El Sagreon era conocido por su capacidad de matar a decenas de oponentes de un solo golpe y fue capaz de casi matar a Ramsey Durgat, el combatiente más veloz que se conociera gracias a su estilo dehaka de pelea. Así que Maurice esperaba lo peor, y encontrar la sangre de su hijo regada en el suelo, solo fue una horror opacado por contemplar la herida que le tulló el brazo. Casi como si el karma no permitiera al jóven dejar atràs la historia de su padre.

De todas maneras Maurice se paró enfrente, se sabía incapaz de defender a Basselfred ante semejante oponente, pero igual no dio un paso atrás. Con el joven tratando de colgarse de las piernas de su padre para levantarse, el sagreon se preparó para atacar hasta que tuvo que rechazar el ataque de Basty callendo del cielo, quien apenas logro quedar de pie. Igual, ninguno de ellos era oponente que pudiera evitarle exigir su venganza y tomar su premio, al menos hasta que vio una luz resplandeciente en el cielo, y ante la inminente amenaza debió escapar.

Basty cayó de rodillas por el esfuerzo, desmayandose. Tan pronto el peligro salió de la vista, Maurice viró hacia su hijo y encontró a una mujer atendiendolo.

Atiéndela por favor demandó la mujer.

Tardó en reconocerla, pero las amistades que se conocen en la guerra, especialmente una como la Batalla por Ciclesia, dejan las memorias presentes como cicatrices, así que la dejó ayudar, mientras ponía su cabeza en el pecho de su mujer para saber si estaba en peligro.

Coralaine ¿qué haces aquí?

Te juro que no pretendía traerles problemas. Me descuidé y casi me atrapa.

¿Por qué te sigue el Caballero Invencible del Rayo?

Me sigue desde antes que me conocieras por primera vez, una historia larga que terminará mal. Alguna vez no me importó que me atrapara, pero ahora debo pelear y bueno, casi me mata dijo sin siquiera preocuparse de sus propias heridas . ¿Cómo está?

Ha estado herida, se desmayó por el esfuerzo.

Hay querido, no te hablaba a tí, pero gracias de todas maneras, y préndele una veladora a la Dama-del-Retrato, en verdad les ha hecho un milagro.

¿Espera qué? preguntó incredulo Maurice.

La drachelier, lo siento... no recuerdo su nombre.

Bastehazet.

Pues de no ser por el reyen de la Dama-del-Retrato estaría muerta. Desde hace mucho.

Sí invocaron al Sagreon, pero no funcionó.

Coralaine miró a Basty un momento y con sus ojos pudo ver los hilos de esencia dorada que incluso ahora la curaban en su interior.

Claro que lo hizo. Desde entonces ha filtrado todo el amor que le das para sanarla. Quien lo diría FohnCurs.

Ahora me llaman Maurice.

Mucho mejor, siempre creí que estabas loco por hacerte llamar de la otra manera. Descuida, ella estará bien.

Gracias, ¿y él? preguntó preocupado.

¿Es tu muchacho? Conrad asintió es increíble, casi lo para en seco, y eso es algo que ese Sagreon no perd Coral se dolió No se si pueda salvarle el brazo, pero puedo salvarle la vida.

Haré lo que sea.

Me voy a desmayar. Las heridas son muchas, pero cuando pueda despertaré. No hay garantía de que no regrese el Caballero Invencible del Rayo durante ese lapso. No dejes que lo enfrente, porque no es un caballero, pero sí es un rencoroso.

Enviaré al muchacho lejos.

No hay lugar donde él, su hermano o tu esposa puedan huir.

Coralaine desfalleció por un momento y Maurice fue hábil en poner su muslo para que ella no se golpeara.

No me puede alcanzar Maurice. Porque si me toca en ese estado, el intercambio de energia me matará y eso será todo para Ciclesia.

¿De que hablas? preguntó creyéndola contusionada.

No dejes que me alcan Coralaine volvió a desmayarse no dejes que se termine ahora. No tan rápido...

¿De qué hablas?

Coralaine despertó una última vez pero ya no pudo decir nada solo miró a Maurice a los ojos y por un momemto aquel pudo ver un destello flamígero que le hizo entender todo.

Algerdein le ayudó a subirse a su hermano, madre y amiga a la espalda.

Y mientras hacia la guardia más importante de su vida, finalmente puso en orden cada palabra que escuchó en su estancia en Ciclesia y le dio sentido:

"Mientras sea Rector no vas a tener permitido volver, y cuando ya no lo sea, aunque por algún triste motivo me sobrevivas, no creo que vaya a importar"

"Es una de muchas posibilidades. Al final no creo que importe".

"...porque cuando el fin esta cerca es sencillo entenderlo, pero cuando solo sabes que está ahí, puedes darte el lujo de esconderte en el recuerdo".

"Es el futuro que vislumbró la hija de nuestra Quean, y es uno por él que hará lo que sea."

Axcevasis. Alcastre. CeCero. Ramsey. Todos hablaban del final como si olvidaran que ciclesia tenía tres ciclos de héroes y villanos. Pero no era charla ociosa, era la realización de saber que un Ciclo no era como una Era, decidida por la historia y los historiadores tras ella. Un Ciclo era un evento de renovación que terminaba con todo, para que todo pudiera volver a comenzar, y aunque en el gran orden de las cosas aquello era benigno, no lo era para todas estas personas que peleaban contra la guerra, el hambre y desesperación sin saber que dentro de Coralaine existía un Sagreon que tras su muerte arrasaría con todo, para que todo pudiera renacer de sus cenizas. Un destino que los elfos querían evitar, que los sabios sabían inevitable y el que CeEnissa Sasoria combatió

fundando Ivaliance, para que alguien recuerde la historia de millones que vivieron y murieron para que todo se reduzca a los héroes combatieron al mal.

Maurice como siempre hizo guardia estoica al sueño de todos. Solo tras los destellos de sus propios ojos, podía escuchar los cascos de la motura, que no se acercaba gracias a la refulgente luz que los amenazaba desde el cielo; la voz de su hijo mayor Cuando él despertó no resintió haber perdido un brazo, solo le bastó saber que los demás estaban bien para portar la herida como una medalla. Entonces despertó el hijo menor, y entonces veló el sueño de su esposa. Luego el de su amiga, y tan pronto aquella pudo levantarse, confirmando todas sus sospechas con una mirada, sin decir más pues nada podía cambiar, se marchó.

Por eso es que todo terminó así. Porque cuando Frasnorg finalmente regresó del infierno y un lugar aún más obscuro, era Conrad tras diescisiete años quien había encontrado la paz que necesitaba y con la que consoló a su amigo para que pudiera superar el suicidio de la Eiress de Ciclesia, Cerbero de Hel y terror de Osumbra: CeEnissa Sasoria, después de una vida devotada al servicio de su gente y su madre.

Así fue como en los puertos, Maurice despidió a su hijo Basselfred y Algerdein, poniéndolos a cargo de su amigo Frasnorg para que los llevara al QuarNaTor a conocer a su otro hermano, Mergo, que sin su sangre cargaba su legado. De beso despidió a su esposa, una Drachelier en un nuevo nivel gracias a que Fergu, el acompañante, guía y amante de Coralaine por haber salvado la vida a su compañera, desde más allá del Torrente de Jade le eseñó por la vía de la oración que sostenía, los secretos que la Orden de la Luz guardaba. Pese que no quería separarse de sus labios, Maurice la despidió para que Frasnorg pudiera presentarla con Shin Igami y en virtud de su amistad abrirle las puertas a las Tierras del Mañana.

Aunque todos se preguntaron porque Maurice Conrad no tomó el barco que sacó de Ciclesia a las personas que quería, y todos especularon diferentes respuestas desde no volver hasta hacerse del poder, buscar a Vassandre o porque sabía que terminaría ciego, la escueta carta que le envió a su hijo adoptivo se lo dejó claro a él: se quedó a trabajar la tierra como su padre, para alimentar y entrenar a todos los otros hijos que se hizo en Ciclesia. Que sí, quizá su fin como el de todos en Ciclesia era inevitable cuando el Ave del Renacimiento se levante y el Ciclo deba comenzar, pero llevaba años quedándose ciego porque era un ser oscuro en un mundo de luz, así que ahora que lo aceptaba; la luz ya no le lastimaba, y las intermitencias del restar le daban y quitaban los brazos al azar, pero no la paz que nunca ambicionó, pero se ganó.

PD: Vassandre nunca volvió.