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“Tengo un deseo de salir corriendo a ayudar”
lo más que me interesa es también ver cómo podemos crear algún tipo de fundación u organización que podamos ayudar, ya sea económicamente, consiguiendo equipos o el acceso más rápido a los especialistas.
Ferdinand Pérez comunicador
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pósito tan claro y definido que yo quedé impactado”, recordó el comunicador, que ya coordina una reunión con el comediante.
Alexandra Acosta Vilanova >aacosta@elvocero.com @Ale_AVilanova
Ferdinand Pérez se mira al espejo y no se reconoce. Es lo que podría decir cualquier sobreviviente de cáncer tras finalizar su tratamiento, sostiene el productor, quien más allá del cambio físico, experimenta las ganas de vivir más “brutales” que jamás ha sentido.
“Son días de mucho miedo y dolor. Hay días de mucho sacrificio, de mucha satisfacción al ver cómo progresa el tratamiento y cuánta gente va uno conociendo en el camino, que inspira a seguir luchando. Esto le cambia la vida a cualquiera. Esta es una contestación que te va a dar todo el mundo. Te cambia la vida. Primero te friza cuando recibes la noticia, no sabes qué hacer, no lo puedes creer. No tengo a nadie en mi familia con cáncer. Era algo que nadie esperaba”, contó el presentador, quien ayer se reintegró a Jugando Pelota Dura, de TeleOnce.
Pérez completó siete quimioterapias y 33 radioterapias en un periodo de 45 días para combatir el cáncer de cuello y garganta. El tiempo de tratamiento “fue una experiencia sencillamente increíble”. Leyó, conversó con médicos, enfermeras, pacientes y reflexionó sobre todo lo que le quedaba por hacer. Pronto comenzará a gestionar documentales educativos junto a pacientes, sobrevivientes y expertos de la enfermedad.
“Lo más que me interesa es también ver cómo podemos crear algún tipo de fundación u organización que podamos ayudar, ya sea económicamente, consiguiendo equipos o el acceso más rápido a los especialistas. En eso estoy trabajando, que va a ser algo bien, bien pensado y que no sea una duplicidad de esfuerzos”, anticipó, considerando las organizaciones especializadas en apoyar a pacientes con cáncer.
Entre los esfuerzos, a Pérez le “fascinaría” trabajar con Raymond Arrieta, quien el pasado mes completó 15 ediciones de la caminata Da Vida, a favor del Hospital On- cológico.
En el penúltimo tramo de la jornada “me encontré con él y estuve llorando como media hora. Había un ambiente extraño, pero bien bonito. En ese grupo que iba a caminar, había una paz y un pro-