Paraguay enfrenta el desafío de avanzar hacia un desarrollo económico sostenible, diversificando su matriz productiva y generando empleo de calidad. En este proceso, el sistema financiero cumple un rol clave como puente entre el ahorro y la inversión productiva. Si bien el crédito ha crecido en los últimos años, persiste una brecha entre ese crecimiento y el financiamiento efectivo a sectores con alto potencial, como la industria manufacturera, los servicios basados en el conocimiento y las pymes innovadoras. Estos sectores, pese a su aporte al PIB y sus bajos niveles de morosidad, siguen enfrentando obstáculos como asimetrías de información, altos costos de transacción y escasez de productos financieros adecuados.
La información presentada en este informe fue analizada por la Unión Industrial Paraguaya (UIP) a partir de los datos recolectados en la Encuesta de Financiamiento Industrial 2024, elaborada por su Centro de Estudios Económicos, con el apoyo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
LA BRECHA CRÉDITO-PRODUCTIVA
La brecha crédito-productiva mide la discrepancia entre la participación de un sector económico en el crédito bancario (cartera) y su participación en el PIB. Se calcula como la diferencia entre la participación en el PIB y la participación en la cartera crediticia.
• Si el crédito se asignara de manera eficiente, esta desigualdad no debería existir, ya que el equilibrio entre ambas participaciones reflejaría una asignación óptima de recursos, donde el crédito fluye hacia actividades proporcionales a su contribución económica. Estos desajustes generan asignaciones no óptimas, es decir, asignaciones prioritarias o subasignaciones, dependiendo de si el sector recibe más o menos crédito en relación con su aporte productivo.
• Además, pueden provocar una concentración del crédito en pocos sectores, lo que restringe la diversificación productiva, incrementa el riesgo de burbujas e impagos y frena el crecimiento de sectores no tradicionales, con sus respectivas consecuencias sobre la competitividad, la innovación y la informalidad.
Gráfico 1: Participación por actividad económica en la cartera de crédito total y en el PIB (dic-2024)
“Cerrar la brecha de financiamiento es clave para liberar el potencial industrial y diversificar la economía”
del Banco Central del Paraguay
LA BRECHA CRÉDITO-PRODUCTIVA
En Paraguay, se observa una disparidad crédito-productivas en todas las actividades económicas, donde las que tienen un importante peso dentro del PIB cuentan con una participación considerablemente baja en la cartera crediticia y viceversa. Esto refleja un desbalance económico, a excepción del sector de la construcción, que se encuentra relativamente más equilibrado (brecha de -0,5 p.p.)
De esta manera, existen seis actividades económicas subasignadas, donde los principales sectores subfinanciados son la industria (-12 p.p.) y los servicios (-8,5 p.p.)
En el otro extremo, existen tres actividades prioritarias en la asignación de créditos la agricultura (7,6 p.p.), el comercio (6,2 p.p.) y la ganadería (4,4 p.p.) mayormente sectores tradicionales de la economía paraguaya, pero sin tanta preponderancia en su aporte económico actual.
Estas situaciones en Paraguay son excesivas y asimétricas. Esto profundiza la vulnerabilidad económica y financiera, limita la diversificación productiva, dificulta la creación de empleo y reduce la generación de valor agregado.
Gráfico 2: Brecha crédito productiva por actividad económica (2024)
Subasignado
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Sector prioritario en asignación
Sector prioritario en asignación
Sector prioritario en asignación
“La industria necesita crédito proporcional a su aporte para transformar la matriz productiva del país”
SECTORES CON MENOS MOROSIDAD SON LOS MENOS ATENDIDOS
De hecho existe otro desacople en el sistema financiero paraguayo; entre la participación sectorial en la cartera de crédito y la tasa de morosidad de cada actividad económica. La morosidad constituye un riesgo que el sistema financiero debe enfrentar, por lo que, en teoría, a menor riesgo debería corresponder una mayor provisión de crédito.
Esto no se cumple a raja tabla en la economía paraguaya, debido a que sectores con alta morosidad reciben gran parte del volumen crediticio total, como es el caso del comercio, que, con una morosidad de 2,77% recibe casi el 18% del crédito total bancario. Por otro lado, el sector industrial es el sector productivo con menor morosidad, pero con apenas el 7,5% del total de créditos.
Así, comercio y construcción absorben una parte sustancial del crédito y también concentran una alta morosidad, mientras que la industria, siendo el “mejor pagador”, permanece subfinanciada.
Gráfico 3: Relación entre la participación en la cartera de crédito bancaria y tasa de morosidad por sector (2024)
“La industria, con menor morosidad, merece mayor prioridad en la asignación del crédito”
Fuente: Centro de Estudios Económicos de la Unión Industrial Paraguaya, con base en datos del Banco Central del Paraguay
FALLAS DE MERCADO Y SESGOS BANCARIOS
Según la Encuesta de Financiamiento Industrial elaborada por el Centro de Estudios Económicos de la Unión Industrial Paraguaya, se observa que:
• En línea con los datos macroeconómicos y financieros, la probabilidad de acceder a crédito bancario es significativamente mayor en el sector primario (72%) y en la construcción (65%), mientras que resulta considerablemente más baja en los sectores de servicios (41%) y de la industria (38%).
• La probabilidad de acceder a un crédito bancario es mayor en empresas grandes y medianas, en relación a micro y pequeñas, medido por facturación y cantidad de empleados.
• La condición de exportador también aumenta la probabilidad de acceder al crédito bancario.
• Sin embargo, al comparar una empresa del
sector primario con otra industrial, controlando por tamaño y facturación, la empresa del sector primario sigue teniendo 3 veces más probabilidad de recibir un crédito, lo que refleja un sesgo del sistema bancario. Sin embargo, una manufactura grande y exportadora puede disminuir mucho esta brecha:
Tabla 1: Probabilidad de acceso al crédito controlado por variables
Fuente: Centro de Estudios Económicos de la Unión Industrial Paraguaya, con base en Encuesta de Financiamiento Industrial
Riesgo moral: menos precaución al prestar porque el Estado asume parte del riesgo en ciertos sectores.
Asimetrías de información: (tierras) facilitan la valoración de garantías y heterogeneidad en industria.
Costos de transacción elevados: negocio más complejo, proceso de evaluación más costoso.
Sesgo institucional y cultura financiera: experiencia histórica con ciertos sectores.
Probabilidad de que una micro empresa del sector primario acceda a un crédito
36% 12%
Probabilidad de que una micro empresa del sector manufacturero acceda a un crédito
EL ROL DE LA BANCA PÚBLICA DE
DESARROLLO: LA AFD
La Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) ha logrado un avance significativo en el acceso a créditos para vivienda, duplicando su aprobación entre 2014 y 2024 y mejorando las condiciones de tasas y plazos. Este esfuerzo ha permitido que más familias accedan a soluciones habitacionales.
Sin embargo, persisten desafíos estructurales. Mientras cerró la brecha en el crédito agropecuario (-55%), no logró compensar con un impulso equivalente al sector industrial, que apenas creció un 5%, lo que refuerza las fallas de mercado existentes y la estructura productiva predominante. Se requiere fortalecer significativamente el apoyo a microempresas, clave para la manufactura. Aunque se destacan nuevos enfoques en educación y forestal, estos representan montos menores.
5 | La paradoja del financiamiento en Paraguay
Fuente: Centro de Estudios Económicos de la Unión Industrial Paraguaya, con base en datos de la Agencia Financiera de Desarrollo.
“La banca pública debe liderar el impulso crediticio de la industria para equilibrar el desarrollo”
