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UTILIZACIÓN DIDÁCTICA DE LA AEMET

de aprendizaje diversificadas para dar respuesta a cada uno/a de ellos/as. Esto implica romper con la enseñanza única dirigida al alumno medio. Dicha enseñanza puede, en el mejor de los casos, ser adecuada al alumno medio, pero, ¿No tiene el mismo derecho el alumno con altas capacidades o el alumno con dificultades de aprendizaje a aprender de acuerdo a sus capacidades y necesidades?

3. Aprendizaje cooperativo: Una metodología donde tenga un lugar destacado el aprendizaje cooperativo o entre iguales.

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Está comprobado que el aprendizaje alumno/a-alumno/a es más efectivo que la enseñanza maestro-a/ alumno-a y, además, conlleva un beneficio en términos de desarrollo para ambos actores/as.

4. Adaptación al pensamiento: Una metodología respetuosa con el pensamiento de cada etapa evolutiva.

A este respecto, recordar que la etapa del pensamiento abstracto se inicia alrededor de los 11 años de edad.

Esto implica que prácticamente toda la etapa primaria el niño/a necesita apoyo visual y manipulativo para aprehender los conceptos que se trabajan.

Resulta, pues, del todo inconcebible, encontrar aulas que carecen de recursos manipulables, en donde el material de trabajo se limita a libros y fichas.

5. Metodologías activas: relacionado con los rasgos anteriores, el niño en la etapa infantil y también Primaria - necesita aprender haciendo, manipulando.

Esta es la única manera verdaderamente efectiva de propiciar el desarrollo de la tan buscada autonomía en el alumnado.

Ejemplo de ello puede ser la metodología

Montessori, que cada día gana más adeptos por su potencial creativo, motivador, posibilitador de aprendizajes de manera autónoma, etc.

6. Conexión con el entorno: esto es, integrar las necesidades y hechos de la comunidad y educar para la implicación en la misma favoreciendo la responsabilidad cívica y social, además de valores como la solidaridad, compromiso social, la ecología, etc.

7. Y, por fin, Educación del Ser: donde se tome en consideración los tres aspectos que conforman al individuo: la mente, el cuerpo y la emoción. Tradicionalmente, la enseñanza se ha centrado exclusivamente en lo cognitivo. Sin embargo, se hace preciso cambiar la visión del niño/a para acompañarlo en el desarrollo de su ser completo, posibilitando el desarrollo de las que Claudio Naranjo denominó “competencias existenciales”.

Educar a alumnos/as competentes para la

Vida: éste es el gran reto que se nos plantea. Y no valen las excusas. Todos/as y cada uno/a de nosotros/as disponemos de la autonomía pedagógica para formarnos y llevar a nuestras aulas metodologías que lo favorezcan.

Será un regalo para ellos/as y también constituirá para nosotros/as mismos/as una oportunidad de trascender aquel modelo que poco más nos dejó que un montón de conocimientos que hoy nuestros niños/as ya no necesitan retener pues los encuentran a golpe de clic.

Sólo aquello que no pueden encontrar en internet será lo que recuerden.

BIBLIOGRAFÍA

 KABAT-ZINN, J. “Mindfulness en la vida cotidiana “Paidós, 2009.  DORIA, J.M. “Inteligencia del alma” Serendipity, 2009.  MORA, F. “Neuroeducación: solo se puede aprender aquello que se ama” Alianza, 2013.  NARANJO, C. “Cambiar la educación para cambiar el mundo” La llave, 2013.  OLIVERA, Á. HELLINGER, B. “Inteligencia transgeneracional. Sanando las heridas del pasado: Constelaciones familiares”

Grupo Cudec, 2010  TORO, J.M. “Educar con co-razón” Desclée de

Brouwer, 2014.  TORO, J.M. “Mi alegría sobre el puente: Mirando la vida con los ojos del corazón (A los cuatro vientos)” Desclée de Brouwer, 2015.

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