Arquidiócesis de Guadalajara, A.R.
N.º 45 • XXXI DOMINGO ORDINARIO, Ciclo A
5 de Noviembre de 2023
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No hagan lo que ellos hacen Jesús acusa a los fariseos y a los escribas de no ser coherentes con sus enseñanzas Jesús hace una denuncia pública de la hipocresía de los fariseos responsables de interpretar la ley de Moisés en la sinagoga y ante el pueblo judío. La frase “en la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos” (v. 2) podría significar que los fariseos eran los que con�nuaban la obra de Moisés o los que hablaban con la autoridad de Moisés. Jesús no cri�ca la ley, sino la prác�ca de los escribas y los fariseos que no estaba en concordancia con sus palabras. Cri�ca la falta de coherencia entre fe y vida. “Atan cargas pesadas y di�ciles de llevar” es una metáfora que explica que las exigencias de los líderes religiosos al pueblo eran di�ciles de cumplir y que ni ellos mismos las cumplían. Ellos mismos no cumplían sus propias reglas. Querer ser vistos y admirados por los demás Los fariseos realizaban sus prác�cas religiosas para ser vistos por los demás. Una de sus prác�cas vanidosas para ser admirados era la de ensanchar sus filacterias, que eran cajitas o fajitas de cuero con fragmentos de pergamino que contenían pasajes del An�guo Testamento. Estas filacterias se colgaban en la frente o en la muñeca de la mano izquierda. Otra de sus prác�cas era la de extender los flecos de sus mantos. Estos flecos o borlas eran adornos azules en las togas o mantos de oración que les recordaban la Torá. En la actualidad podemos tener otras prác�cas religiosas externas que se realizan para demostrar la “devoción”, y ser admirados por los demás. Hay que examinarnos si hacemos algunas de ellas. Son
prác�cas religiosas que cons�tuyen muestras de soberbia y vanidad no acordes con el Evangelio ni con el ejemplo de Jesús. El ejemplo de Jesús: la grandeza del servicio “El que es el mayor de vosotros sea vuestro siervo, porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido”. No es fácil comprender las palabras de Jesús en relación con la grandeza, ya que para nuestro entender el que es servido y �ene a los demás bajo sus órdenes es el grande o jefe, pero en el Reino de Dios la grandeza consiste en servir a los demás, en hacerse humilde y darse a los demás. La manera de ser grande que enseñó Jesús a sus discípulos es diferente a nuestra lógica y a las prác�cas más habituales de este mundo. Jesús demostró con su ejemplo de vida que vino a este mundo a servir y no a ser servido.
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