Amiguito 9 - 2018

Año LXXXIII. Guadalajara, Jal. 04 de Marzo de 2018

Núm. 9

LAS SIETE PA LA DE JESÚS EN BRAS L A C RU Z

ÍA SANTA MARAS DE MATTI o

04 de marz

“NO CONVIERTAN EN UN MERCADO LA CASA DE MI PADRE” MINI HISTORIA:

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“NO CONVIERTAN

EN UN MERCADO

COMENTARIO AL EVANGELIO

LA CASA DE MI PADRE”

E

l Catecismo de la Iglesia Católica, que −en palabras de San Juan Pablo II− es regla segura para la enseñanza de la fe e instrumento válido y legítimo al servicio de la comunión eclesial, en su número 593 enseña lo siguiente: “Jesús veneró el Templo subiendo a él en peregrinación en las fiestas judías y amó con gran celo esa morada de Dios entre los hombres. El Templo prefigura su Misterio.

Cuando anuncia la destrucción del Templo, anuncia su propia muerte y la entrada en una nueva edad de la historia de la salvación, donde su cuerpo será el Templo definitivo”. † Los bautizados formamos el Cuerpo Místico de Cristo y, por eso, también somos templo de Dios.

Así que, no hagamos de nosotros mismos ni de los demás, objetos de compraventa.

Tomado del Misal de Buena Prensa.

A

04 de marzo

miguit@s, hoy conmemoramos a Santa María de Mattias, fundadora. Nació en 1805 en Vallecorsa, Italia.

Provenía de una familia acaudalada de cristianos devotos. Desde niña mostró interés por las Sagradas Escrituras, le impresionaba mucho el hecho de que Jesús hubiera derramado su sangre por amor a la humanidad. Por las costumbres de la época, vivió su niñez y adolescencia relativamente aislada, con poco contacto y relaciones exteriores.

Inspirada por una prédica de San Gaspar del Búfalo en Vallecorsa, hacia el año 1834 fundó la congregación de Religiosas Adoratrices de la Sangre de Cristo, con la meta de evangelizar y mejorar las condiciones de vida de los pobres.

“Benditos de nosotros si podemos dar la vida y toda nuestra sangre por la fe, por la salvación de aunque sea una sola alma”, escribió Santa María de Mattias.

Estaba convencida de que la reforma de la sociedad, nacería del corazón de las personas y que, los hombres se transforman cuando llegan a comprender cuán valiosos son a los ojos de Dios, cuando

caen en la cuenta del inmenso amor del que han sido objeto: Jesús dio toda su sangre para rescatarnos.

Su carácter retraído desaparecía cuando se trataba de mostrar su amor por Dios. Este ejemplo, condujo a muchas jóvenes a alguna de las más de setenta casas de religiosas que fundó en Italia, Inglaterra y Alemania.

Además de promover la educación de las niñas, reunía a las madres y jóvenes para catequizarlas, haciendo que se enamoraran de Jesús e impulsándolas a vivir cristianamente según su estado de vida.

Debido a su labor de difundir el conocimiento del amor de Dios por la humanidad, el Papa Pío IX la llamó a Roma para encomendarle que dirigiera el Hospicio de San Luis, donde murió en 1866.

Vivió toda su vida con el único deseo de agradar a Jesús, que le había robado el corazón desde su juventud y con el compromiso gozoso de difundir al máximo el conocimiento del amor de Dios por la humanidad.

El Papa Pío XII la declaró beata en 1950 y Juan Pablo II la canonizó en 2003.

Santa María de Mattias nos enseña el valor de saber que Dios nos ama.

AMIGOS DE DIOS, NUESTROS AMIGOS

SANTA MARÍA DE MATTIAS

LAS SIETE PALABRAS DE JESÚS EN LA CRUZ Quinta palabra

PARA CUANDO SEAS GRANDE

“Tengo sed” (Jn. 19, 28)

U

no de los más terribles tormentos de los crucificados era la sed; la deshidratación que sufrían debido a la pérdida de sangre era un tormento durísimo. En el caso de Jesús, no bebió nada desde la tarde anterior. No es extraño que tuviera sed; lo extraño es que lo dijera. † La sed que experimentó Jesús en la Cruz fue una sed física; expresó en aquel momento estar necesitando de algo tan elemental como es el agua y pidió, “por favor, un poco de agua”, como hace cualquier enfermo o moribundo.

Jesús era solidario con todos, pequeños o grandes, sanos y enfermos, que necesitaban y pedían un poco de agua.

Es hermoso pensar que cualquier ayuda que podamos prestar, nos hace recordar que Jesús también pidió un poco de agua antes de morir. † Pero no podemos olvidar el detalle que señala el Evangelista

San Juan: Jesús dijo: “Tengo sed”. “Para que se cumpliera la Escritura”, dice san Juan (Jn. 19, 28). Jesús habló en esta quinta Palabra de “su sed”, aquella que vivía Él como Redentor.

Poco más de dos años antes, Jesús se había encontrado junto al pozo de Sicar con una mujer de Samaria, a la que había pedido de beber.

“Dame de beber”. Pero el agua que le pedía no era la del pozo, era la conversión de aquella mujer.

Después, San Juan, que relata este pasaje, quiere hacernos ver que Jesús tiene otra clase de sed, es como aquella sed de Samaria.

La sed del cuerpo, es limitada. La sed espiritual es infinita, decía Santa Catalina de Siena.

Amiguit@s, Jesús tenía sed de que todos recibieran la vida abundante que Él había merecido. De que no fuera en vano la redención. Sed de manifestarnos a su Padre y que creyéramos en su amor, pero sobre todo, de que viviéramos una profunda relación con Él, porque todo está aquí: en la relación que tenemos con Dios.

NOSOTROS

Y LA COMUNIDAD

U

de lo que tengo. Venga mañana y le mostraré lo que yo veo. Al día siguiente regresó el hombre y se encontró un hermoso mural de Cristo resucitado, realizado con todas las piedras que él había clasificado según su parecer. Y el hombre que realizó el mural le dijo: –Yo veía este gran mural, entré en una profunda reflexión acerca de cuáles eran las piedras que usaría; decidí iniciarlo sin sacar ninguna, cuando lo terminé, me di cuenta que necesitaba cada una de ellas y que ahora, si quito alguna de las piedras, el mural estaría incompleto. Esto me enseñó dos cosas: Una, que el valor particular de cada una de ellas, según mi parecer, no es el mismo valor que le da Dios a ellas; y en segundo lugar, si yo fuera una de estas piedras que forman el Cuerpo de Cristo, para que yo me vea bien en este mural, sólo tendría que quedarme en el sitio que me corresponde, porque de lo contrario, no sería la figura exacta de lo que el autor quería.

El hombre se marchó con una nueva enseñanza y con una nueva forma de orar: –Señor, muéstrame cuál es mi misión y sobre todo, enséñame a amarte en cada uno de mis hermanos.

Amiguit@, uno no es demasiado joven ni demasiado viejo para cumplir la misión de Dios en el mundo.

Todos tenemos recursos que ofrecer, dones y habilidades. No olvides que, el amor a Dios es la razón para amar al prójimo y el amor al prójimo es la garantía de que nuestro amor a Dios es verdadero.

MINI HISTORIA

n hombre que no sabía qué hacer para sentirse dentro de una comunidad, en la cual le costaba ver el amor entre los hermanos, porque veía las características particulares de cada uno, y eran muy distintos como para ser los unos para los otros, se sentó a orar, pidiéndole al Señor que le mostrara la forma de amar a su comunidad.

Luego de un tiempo y con el anhelo de recibir la respuesta del Señor, se encontró con otro hombre que miraba un grupo de piedras de diferentes tipos: unas de cemento, otras de rubí, otras de plata, otras de arcilla, todas muy distintas entre sí. Y el hombre le preguntó: – ¿Qué ve usted, amigo mío?

– Un grupo de piedras −respondió él.

–Y… ¿Qué aprecia en ellas?

–Veo que hay unas muy bonitas, que hay que cuidar, otras que hay que limpiar, y otras que yo tiraría.

Y el hombre respondió: –Muy buena apreciación particular

EL CAMINO HACIA LA CUARESMA “El hombre ha nacido con sed y, busca saciarla en todas las direcciones. Sólo una nos garantiza esa saciedad: Cristo”

A

miguit@s, el domingo pasado, Jesús nos invitaba a subir al monte Tabor, hoy nos ofrece su agua viva, que es Él. Pero tenemos que pedírsela como hizo el pueblo de Israel con Moisés y la samaritana; pedirla con fe y esperanza. Su agua, que brotará del Costado abierto en la Pascua sacia nuestros anhelos de felicidad completa. Continuemos en nuestra preparación con las siguientes acciones:

SECCIÓN RECREATIVA

† Lunes 5 de marzo: deja que la palabra de Dios ilumine tu vida y, permite que los dones de los que te rodean te sorprendan. Obedece a tus padres con alegría. † Martes 6 de marzo: perdona a esa persona a la que le guardas rencor y, ten paciencia con todos los que te rodean. † Miércoles 7 de marzo: Revisa, ¿has hecho a un Dios a tu medida, un Dios de leyes cómodas? Que tus gestos hablen más que tus palabras, predica

también con tus actos. Estudia con todas las ganas. † Jueves 8 de marzo: une a tu familia, a través de gestos y palabras de amor. Abre tu corazón a los demás, no lo endurezcas ante el dolor o el sufrimiento del otro. Ayuda a quien lo necesite. † Viernes 9 de marzo: permite que hoy Dios ame a los demás a través de ti. Busca un momento para acercarte al Sagrario y adorarlo. Suelta un poco tu comodidad y ayuda en casa. † Sábado 10 de marzo: acoge la entrañable misericordia de Dios, transmítela a los demás. Da una limosna a un necesitado o prepárala para cuando tengas la oportunidad de entregarla. † Domingo 11 de marzo: acepta el incomprensible e inmenso amor de Dios por ti. Sé faro para los demás, ilumina con tu buen humor y alegría. Antes de ir a misa, prepárate leyendo el Evangelio de hoy.

¡Hola amiguitos!, se puede aprender a

ser mejores personas

en cualquier momento y lugar; con tus amigos, con tus hermanos, con tus papás, abuelos o tíos.

Inviten a sus papás a leer juntos Paideia, la columna de Semanario, y verán que es posible.

DIRECTORIO: Fundado por José H. Alba en el año de 1932.

Franqueo pagado. Publicación semanal. Permiso SEPOMEX 003 0732. Características 2145522112. Certificados de Licitud de contenido y de Título número 889 y 01119. Registro Reserva 04-2003-070111165300-101. Tiraje: 40,000 ejemplares. Costo $56.00 PESOS CIENTO. Director responsable: Pbro. Antonio Gutiérrez Montaño. Colaboración: Celina María Zepeda Gutiérrez. Ilustrador: Raúl Alonso Hernández. Oficina de El Amiguito: San Felipe 578, Col. Centro. Tel. 36-13-14-21. Diseño e Impresión por: Creator Comunicación, S. de R.L. de C.V.; Isla Flores 3344. Col. Jardines de San José. Tels. 3002-6470 y 71.