Boletín: "Viento y Luz" Edición especial mayo 2020

Viento Y

luz

Edición Especial Mayo 2020

Nunca estás solo si Dios está en tu vida para decirte que sos lo mejor que tu voluntad solo está agobiada.

Si tenés ganas de llorar, hacelo ahora sacá todas tus tristezas solo ahora, hoy porque mañana amanecerás diferente dispuesto a empezar de nuevo con fuerzas, con fé y optimismo dispuesto a amarte y amar la vida. y recuerda no estás solo Dios camina a tu lado y te sostiene siempre.

Aporte de Silvia Robert

Testimonios de las comunidades Sede en Alsina 165, Jacinto Arauz ivcoloniairis@gmail.com 02925 493219

COLONIA IRIS

Los días en cuarentena según la comunidad…

La vida transcurría fervorosa y agitada hasta que un día se decretó la cuarentena. De repente hubo que quedarse en la casa y apelar a la creatividad: ¿qué hacer para entretener a personas de todas las edades?

Para algunos fue la posibilidad de quedarse en su casa y hacer aquellas tareas postergadas por falta de tiempo, descansar, dormir, leer, escuchar música, disfrutar de almuerzos en familia, compartir actividades...

Para otros fue la oportunidad de contar con tiempo para llamar a sus seres queridos con los que hacía tiempo que no se comunicaban.

Cada uno desde su lugar trata de vivir como puede. No es lo mismo estar en una confortable casa con toda la tecnología, que estar privado de todo ello y tener que cumplir con las actividades escolares cuando la panza hace ruido por el hambre.

Tampoco es lo mismo la cuarentena en el campo; aquí todos los días hay cosas que hacer: dar de comer a los animales, controlar que los molinos saquen agua, arreglar alambrados que se rompen, ayudar a una vaca que no puede parir, preparar la tierra para la próxima siembra, etc. etc.

En el campo se está en contacto con la tierra y su magia: se siembra una semilla y se obtienen sus frutos. Para que eso ocurra tiene que llover, que no aparezcan plagas que la exterminen y que ninguna contingencia climática ocurra (pedradas, tornados, etc) llevándose la esperanza de cosechar lo plantado. Aquí se vive confiando: -confiando que lloverá -confiando que la pandemia pasará -confiando que aprenderemos a ser mejores.

Silvana Grand

Este tiempo de cuarentena nos sorprendió a todos. El domingo 15 de marzo fue un día de incertidumbre, a la noche anunciaron que los niños no debían concurrir a la escuela por el término de 15 días.

Los trabajadores desconocían su condición, no sabían con quién dejar a los niños y un torbellino de noticias del exterior nos invadían junto al instructivo de cómo lavarnos las manos.

Las casas cambiaron, los empleos cambiaron, las escuelas cambiaron, el mundo cambio.

Y vino un tiempo de estar en familia, en casa y con uno mismo. Tiempo de reflexión, de conectarnos con el lugar donde vivimos.

Tuvimos tiempo de limpiar, de mirar una película, de leer un libro, de pintar, de orden los placares y acomodar el patio.

Todos en distintos tiempos, todos en distintas condiciones.

En este mes celebramos Pascuas, fue un hermoso momento en familia, lejos de ser un tiempo de vacaciones y consumismo fue un tiempo de intromisión, amor, paz y meditación.

También estamos próximos a conmemorar el Día del Trabajador, muchas personas cómodas en sus casas con la tranquilidad de cobrar un sueldo a fin de mes, algunos deseando reabrir su negocio tan pronto como se lo permitan y otros muy preocupados por la situación porque no saben cuál va a ser su condición económica a corto plazo.

Todos tenemos una condición totalmente distinta a la de nuestro prójimo, distintos vínculos familiares, distintos estados de salud, distinta tolerancia a la situación y distinta capacidad de adaptación a los cambios por eso debemos ser tolerantes como hermanos entendiendo que Dios tienen un propósito en nuestras vidas y que algo bueno está por venir, muchos no podemos verlo en este momento pero en el tiempo justo vamos a empezar a gozar de los beneficios de esta vivencia.

Les dejo mis saludos. Dios los bendiga! Y que esto acabe en el momento y del modo que Dios disponga... Sus modos y tiempos son perfectos Estefanía Chambon

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Testimonios de las comunidades

Lo que yo siento en cuarentena es que por más que tenga muchas cosas que hacer, algunos días se hacen largos y aburridos.

También que es buen momento para aprender a hacer cosas como cocinar, planchar y para hacer cosas que nunca podíamos hacer porque no teníamos tiempo, como estar más o compartir más cosas con nuestras familias.

Camila Keil

estamos acompañados con los mensajitos que nos mandan. ¡Dios nos cuidará!

Nucha y Aldo Negrin Trabajo como Fonoaudióloga en el Hospital Penna. En este tiempo de cuarentena siento mucha incertidumbre y ambivalencia. Por una parte me siento útil ya que al ser servidora de la salud pública puedo colaborar en la preparación de insumos para afrontar la pandemia, pero también implica una exposición distinta que la del resto de los ciudadanos que pueden pasar la cuarentena en sus hogares por tiempo completo. Creo que la sensación que el mundo está afrontando es de miedo y preocupación.

En este momento dediqué tiempo de lectura bíblica con mucho acompañamiento de un pastor de la Iglesia Metodista de Almagro, Capital Federal y con el material audiovisual de la Iglesia Valdense.

Evelyn Schonhoff

Esta pandemia que se extiende en todo el mundo nos sorprendió bastante, en un primer momento parecía que no iba a llegar hasta nuestro país y sentía que todo los cuidados que nos pedían eran exagerados... pero...poco a poco fui tomando conciencia de la gravedad y que al no haber vacuna ni medicación lo único que tenemos al alcance es cuidarnos...no salir de casa o salir lo menos posible solo lo indispensable como hacer las compras por ejemplo. Lo que más extraño es no poder salir a caminar y poder viajar libremente para ver al resto de la familia como también me parece imposible no poder almorzar o cenar o pasar un rato con los que están más cerca. También pienso en Evelyn que está sola y muy expuesta ya que trabaja en un hospital y además debe viajar en transporte público. También me preocupa Patry y Pao que deben atender las farmacias. Por otra parte siento que Dios nos cuida y que debemos confiar en que todo saldrá bien... que debemos cuidarnos y que quedándonos en casa nos cuidamos y cuidamos a los demás.

Stella Chambón Aquí estamos aislados, solo vamos al pueblo a realizar las compras y a la farmacia, nuestra vida no cambio mucho porque en el campo siempre hay trabajo y podemos andar al aire libre siguiendo con los quehaceres rurales, solo extrañamos muy mucho no tener a nuestros hijos y nietos el domingo en la mesa, es nuestra costumbre pasar el domingo juntos, espiritualmente siempre

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Traducción: Nosotros te cuidamos

Testimonios de las comunidades Sede en Rivadavia 1568, Laprida ievartalejos@yahoo.com.ar 02284 15 567274

Artalejos LAprida

Así vivimos la cuarentena Bien agradecidos por tener salud cada día.

Jugamos al tejo, leemos mucho, cocinamos, ordenamos nuestro hogar; cumplimos 50 años de casados y jugamos a las cartas. Compartimos muchos momentos de a dos en estos momentos de cuarentena.

César e Iris

Que experiencia tan linda, no la imaginé.

Nos quedábamos sin reuniones en la iglesia y extrañaba lógicamente. Fue así que Alfredo nos comentó de reunirnos por whatsapp como grupo tener la reflexión compartiendo mensajitos. La verdad que de esta manera se me hace más llevadera la cuarentena obligatoria y por eso doy gracias.

Cuando comenzó la cuarentena, me enNormita contré algo desconcertada, y me resultó dura.

Yo acostumbraba a salir todos los días, y estar Estamos viviendo esta pandemia con preocon la gente que me alegraba los días. Me re- cupación pero bien informados, lo necesario. sultaba triste no hablar con nadie personal- Quizás nos toca de otra manera al tener a mi mente, y los días se me hacían cada vez más hija trabajando en salud. No por tener más largos. Luego, después de unos días de estar información sino por estar más atentos y con totalmente sola, surgió la posibilidad de que más cuidados. Mi hija que tiene una pieza arrivinieran a quedarse a mi casa mi nieta con ba con escalera afuera, solo baja los sábados a su novio y su perrito. Mi actitud y mi humor la mañana y domingo en la tarde. Por prevencambiaron por completo, y ahora me siento ción mi esposo y yo no salimos. Con respecto feliz y acompañada lo que me ayuda muchí- al grupo de la Iglesia Valdense, me hace muy simo, durante el tiempo que pasé sola, fue bien escuchar y poder compartir estos motener la compañía de la comunidad, a través mentos. Es sacar un peso para mí, hablar con de las celebraciones virtuales y vía whatsapp. otras personas, siempre agradecida Norita Adriana

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Testimonios de las comunidades

Sede en Villarino 30 Bahía Blanca iglesiavaldensebb@gmail.com 2915060796

bahía blanca

¿Qué extrañamos de estar juntxs?

“Yo extraño mucho el padrenuestro, todos la virtualidad nos abre caminos, caminos que juntos tomados de las manos entrelazadas... debemos aprender a recorrer para que esos Y obvio las rondas de mate.” vínculos ya creados no se pierdan.

Norma Baridón Otra pregunta que se me viene a la cabeza desde mi profesión (acompañante terapéuti“Tomando la propuesta realizada por Brisa ca) es que siempre se habla de poner el cuerBudareto, quien nos invitó a enviar al boletín po o tener presencia y…¿¿ es esto literal?? A algo escrito por nosotrxs de lo que extrañe- lo cual me respondo que no, ya que esta panmos de estar en comunidad, encontrándo- demia nos muestra que no es tan importante nos, unx al lado del otrx charlando, saludán- el cuerpo en presencia, sino el espacio psíquidonos, abrazándonos, etc. Es que me siento co que le damos al otrx, como así también el a escribir estas líneas y reflexionar a través que permitimos que el otrx cree. de mi práctica profesional, la cual me lleva Y si hay algo que aprendí en la iglesia es a indagar en primer lugar acerca del vínculo, justamente que tenemos un vínculo que trasese que tenemos con aquellas personas que ciende todo tipo de fronteras y una presencia vemos a diario y de las cuales de seguro ex- que no es física sino espiritual que es nuestra trañamos un sinfín de situaciones, pero que fe en Dios.” creo, es en estas circunstancias, en las cuales Servetto Dalmás, Ma. Cristina.

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Ilustración de Eleanor Davis

Reflexión

Allí donde nuestros ojos no ven Leemos en nuestras Biblias: Juan 20:19-31 “…danos la palabra, el gesto, el cariño, que te muestren simple, así como sos.”

Zamba para que te quedes Juan Gattinoni Cuántas veces en nuestras vidas nos decimos “hasta que no lo vea, no lo creo”. Esperamos constatar con nuestros ojos que tal situación es “real”, que está sucediendo. Este pasaje bíblico seguro que ya lo han escuchado y leído varias veces, y en general solemos quedarnos con la expresión final de Jesús “¡Dichosos los que creen sin haber visto!”.

Quisiera que nos centremxs, tal vez, en la reacción más humana y de descreimiento que se plantea en este pasaje, representada en la figura de Tomás: ¿cómo es que él necesitó ver las heridas para constatar que ese que decía ser Jesús lo era realmente? ¿No alcanzó con ver lo que hizo, que fue a su encuentro y se presentó como el hijo del Señor? ¿No le creyó a los discípulos cuando le dijeron que él era el resucitado? ¿No fue suficiente que Jesús los bendijera? No. Tomás, incrédulo, necesitó ver para confirmar eso que sentía.

En este tiempo de aislamiento que por días y semanas nos impide vernos con nuestros seres queridos, que estamos obligados a guardarnos, es en este momento donde se ponen en juego los gestos, donde tenemos que creer en aquello que nos une, las experiencias vividas, y por eso buscamos el contacto, necesitamos hablar telefónicamente, mediante videollamada, con un mensajito. Jesús nos recuerda que nuestra fe es compartida y también sostenida en el apoyo del otrx, y nos muestra que tenemos que agradecer de poder estar resguardados y sentirnos contenidos en esta situación.

Cuando nos reencontremos todxs, nuevamente, será una especie de renacer, de volver a conocernos (de volver a re-conocernos) como cuerpos en comunión, a través de un abrazo, de una caricia, en un apretón de manos, en el abrazo contenido y la palmada sobre el hombro, del cariño expresado en un sentimiento, de las historias y la memoria en común. Los gestos que nos hacen humanos, que nos hacen hermanos, que nos transforman y se resignifican bajo la misericordia de Jesús.

Pero si aún así hoy debemos y necesitamos ver para creer, lxs invito a cada uno, a cada una, a tomarse un momento para mirar a nuestro alrededor, ver dónde nos encontramxs, con quién estamxs, qué hemxs hecho por un otrx en este tiempo de confinamiento: sentir su presencia.

Que el espíritu esté presente en nuestras vidas y nos permita ver allí donde nuestros ojos no ven.

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Laura Michelin Salomon Geymonat

Reflexión

Poner todo en común Aporte de Dora Janavel ... Todos los creyentes que eran muchos, pensaban y sentían de la misma manera.

Ninguno decía que sus cosas fueran solamente suyas, sino que eran de todos…

Hechos 4 :32 Seguimos viviendo en plenitud este tiempo de Pascua.

Jesús resucitado está presente entre nosotres, como en aquel día de Pascua lo estuvo en medio de los apóstoles, les da su paz, nos da su paz y después sopla sobre ellos, y también sobre nosotres diciendo “Reciban el Espíritu Santo“ (Juan 20:22).

En este espíritu de alabanza y celebración, nos encontramos con esta descripción de Lucas, realzando otra vez las virtudes de la primera comunidad, insistiendo sobre el esfuerzo de poner todo en común.

Jesús no se lo había pedido, pero como resultado y consecuencia de la conversión profunda y verdadera que se operó en sus vidas, en un gesto espontáneo buscan de poner todas sus cosas “en común”, para qué con lo poco o mucho de cada uno , no hubiese entre ellos ningún necesitad. De esta manera deseaban suprimir todas las barreras entre hermanes, en espercial las del dinero.

Es bueno recordar que esto fue logrado en medio de una comunidad formada por gente humilde y necesitada.

A dos mil años de distancia, el problema se ha agudizado hasta niveles terribles y dolorosos con singular crecimiento de pobreza , el hambre, la desnutrición, la falta de atención a la salud y la educación y tantas otras necesidades.

En estos días tan particulares, atravesados por la pandemia del COVID 19, donde se hace tan notoria la desigualdad y podemos ver que los mas poderosos, los que mas tienen son muy pocos y no ponen en común ni siquiera una pequeña parte de sus riquezas para apalear la situación, debemos recordar las palabras de Martin Luther King: Dios no ha intentado nunca que unos vivan en una riqueza superflua y desordenada, mientras otros solo conocen una pobreza absoluta…

Dios quiere que todos sus hijos tengan cubiertas sus necesidades básicas, y ha puesto en el universo lo suficiente y más para que esto se consiga …

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Cuando la tormenta pase Y se amansen los caminos y seamos sobrevivientes de un naufragio colectivo

Reflexión

Esperanza

Valdrá más lo que es de todos Que lo jamas conseguido Seremos más generosos Y mucho más comprometidos.

Con el corazón lloroso y el destino bendecido nos sentiremos dichosos tan sólo por estar vivos.

Entenderemos lo frágil que significa estar vivos Sudaremos empatía por quien está y quien se ha ido.

Y le daremos un abrazo al primer desconocido y alabaremos la suerte de conservar un amigo.

Y todo será un milagro Y todo será un legado Y se respetará la vida, la vida que hemos ganado.

Y entonces recordaremos todo aquello que perdimos y de una vez aprenderemos todo lo que no aprendimos.

Cuando la tormenta pase te pido Dios, apenado, que nos devuelvas mejores, como nos habías soñado.

Ya no tendremos envidia pues todos habrán sufrido.

Ya no tendremos desidia Seremos más compasivos.

Parte del poema Esperanza de Alexis Valdés Marzo 2020

Boletín de las Iglesias Evangélicas Valdenses del Presbiterio Sur Argentino Alsina 165- L8208AEA Jacinto Arauz e-mail vientoyluzdigital@gmail.com