Boletín: El Pescador - julio 2017

Page 1

AÑO XIV– Nº111 JULIO 2017 DISTRIBUCIÓN GRATUITA

IGLESIA EVANGÉLICA VALDENSE

EL PESCADOR REFLEXIÓN

Mateo 10:26-33

‘Así que, no temáis; porque nada hay encubierto, que no haya de ser manifestado; ni oculto, que no haya de saberse. Lo que os digo en tinieblas, decidlo en la luz; y lo que oís al oído, proclamadlo desde las azoteas. Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno. ¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos. A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos. Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.’ Veo a Jesús un tanto preocupado, poniendo a sus discípulos al corriente de lo que les sucederá cuando él se vaya, les ha lanzado ‘un jarro de agua fría’: "No tengan miedo a los que matan el cuerpo; temed más bien a aquél que puede destruir el alma . . .’ Y claro, los discípulos se han quedado con miedo, medio paralizados, o paralizados del todo . . . Pero Jesús sale al cruce de sus emociones: ‘No tengan miedo de la gente... ¿No se venden dos pájaros por poco dinero? Sin embargo, ninguno de ellos cae a tierra si vuestro Padre no lo permite. Así que no tengan miedo; ustedes valen más que todos los pájaros’. Con este pasaje. Jesús quiere salir al paso de nuestros miedos, nuestros complejos, y fomentar en nosotros la confianza en Dios Padre, que es providente; es decir, mira siempre por nosotros para nuestro bien. Esta confianza en Dios Padre pulveriza

todos nuestros temores, nuestras cobardías, nuestros reparos. En este acobardamiento ante la dificultad confluyen, casi siempre, y de forma solapada, dos elementos que, como los ratones expertos, van corroendo lentamente nuestras iniciativas. Estos despiadados roedores son: la vanidad, y la pereza. A veces estamos tan poseídos de nosotros mismos que, ante la dificultad, y el miedo a no salir triunfantes de la prueba, preferimos abandonar, diciendo cualquier pretexto inventado con el que solapadamente escondemos nuestro orgullo. Y en otras ocasiones, es la pereza la fuerza que nos frena y nos impide salir de nuestro letargo e inercia. Jesús hoy quiere que nos animemos, que no nos achatemos ni cohibamos ante el tiempo difícil, sino que le encaremos confiados en que contamos con la seguridad de que Dios Padre nos protege en todo momento. No olvidemos que ‘valemos más que todos los pájaros’. Y hablando de la confianza en un Dios que nos cuida y nos protege, quiero traer a colación las escenas que he observado en una plaza de deportes, donde las madres han llevado a sus niños a jugar allí. Los niños correteaban sin ningún pudor, con intención competitiva, de vez en cuando miraban para atrás, hacia la madre, para comprobar si les daban el ‘visto bueno"’, y en seguida continuaban la carrera; o se subían a los toboganes o a los subibajas, arriesgando su estabilidad... No, ellos no tenían miedo al peligro; se sentían protegidos por sus madres, que no quitaban la vista de sus niños, y así se sentían seguros. Así ha de ser nuestra confianza en Dios: total y absoluta. Que podamos también nosotros y nosotras corretear por la vida sin preocuparnos angustiosamente por el riesgo de vivir, porque tenemos la certeza de que Dios Padre, Padre y Madre, no deja de mirarnos, de cuidar nuestros pasos, de abrazarnos, de consolarnos . . .


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.