Hablemos de ZONAS ÁRIDAS Arrigo Coen Anitúa (†) www.antiquaprintgallery.com
Quiero, ante todo, dejar sentado que, pese al uso (y aun al buen uso, el dizque “culto”), yo prefiero conjugar el verbo desertar –que el español tomó del francés déserter, a fines del siglo XVII– como si lo hubiésemos recibido directamente de un latín medio desertare, y digo: yo desierto, tú desiertas, es decir, diptongando la e breve latina, y no: yo deserto, tú desertas, etc., como todo el mundo dice. Y es que aplico la regla de tomar por modelo, en cuanto a la desinencia, la terminación del sustantivo o del adjetivo afín al verbo que se conjuga. Hay un verbo latino, desero, deserere en infinitivo, cuyo supino o participio pasivo es desertum; significa ‘dejar’, ‘desamparar’, ‘abandonar’, ‘destituir’, en textos ciceronianos; Plauto lo usa como ‘perder’ en la frase deseruit hunc fama, ‘perdió su reputación’; el mismo Cicerón le da sentido también de ‘faltar’ en nisi me lucerna desererat, ‘si no me faltase (o no se me acabase) la luz’; para César y Quintiliano es ‘desertar’: deserere ducas, ‘abandonar a los jefes’. Del lexema deser salen desertio, ‘deserción’, ‘desamparo’, ‘abandono’; desertor (lo mismo en latín que en español, salvo donde cae el acento), ‘el que abandona o desampara’, ‘soldado que deja su bandera’, ‘el infiel a un amor’ (en femenino, desertrix); desertum en Virgilio, y más comúnmente su plural deserta ‘desierto’, ‘yermo’, ‘soledad’; el adjetivo desertus (es el participio adjetivado), ‘desamparado’, ‘abandonado’, ‘destituido’ y (sobrentendido locus, ‘lugar’, ‘paraje’), ‘solitario’, ‘inculto’, ‘desierto’. En geografía física se entiende por desierto una ‘región árida –de escasa o nula vegetación–, la extrema dureza de cuyas condiciones climáticas hace muy difícil, casi imposible la vida ordinaria’. En el marco de esta idea general, solemos asociar el término desierto con calores extremos, áreas dilatadas de arena y ausencia de manifestaciones de vida; pero la ciencia divide las zonas desérticas en cuatro tipos, a saber: uno, el que persiste en las áreas polares de la Tierra, cubiertas de nieve y hielo, o bien estériles tundras. La voz tundra es del ruso, idioma que a su vez la tomó del finougro; está emparentada con el suomi (o finlandés) tunturi, ‘colina ártica’, y con el lapón tundar, ‘colina’, ‘cerro’, ‘montículo’. La tundra es una planicie, a nivel o ligeramente ondulada, en la que no se dan árboles, y es típica de las regiones árticas y
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CORREO del MAESTRO
núm. 204 mayo 2013