delatripa No 2

Page 1


Número 2.Abril 2013

Narrativa y algo más

Revista editada en Mérida, Yucatán. Es una revista de circulación mensual. Dirigida porAdán Echeverría (romeolobos@yahoo.com.mx). Consejo Editorial: Angélica Santa Olaya,AlejandraAké Sustersick, Joelia Dávila, Cristina Leirana, Roberto Cardozo, Jorge Manzanilla, Mario Pineda Quintal y Édgar Damián.

Narrativa y algo más Número 2.Abril 2013. Es un proyecto de la Catarsis Literaria El Drenaje,

Contenido

Sobre

Luz y oscuridad

Denisse

delatripa: narrativa y algo más

No al fraude poético:

Firmas en defensa de

la Alhambra

lunes, 1 de abril de 2013

CARTA ABIERTA

Al Patronato de laAlhambra y el Generalife

A los escritores y poetas hispanoamericanos y españoles

A los ciudadanos de Granada

A la opinión pública

Los abajo firmantes, poetas y escritores hispanoamericanos residentes en España, poetas granadinos y españoles, poetas de diversos países de América Latina, escritores, profesores y estudiosos de la literatura hispanoamericana, gestores y trabajadoresdelacultura,ciudadanosinteresadospor las letras, declaran:

Tras fallarse el pasado 11 de marzo de 2013 la segunda edición del Premio Alhambra de Poesía Americana, convocado por el Festival Internacional dePoesíadeGranada(España),laEditorialValparaíso y el Patronato de laAlhambra y el Generalife, premio dirigido a "autores nacionales de cualquiera de los paísesdeAméricaquenuncahayanpublicadounlibro en España" y con el propósito de "promocionar el conocimiento de la creación literaria americana en España",segúnseleeensusbases,yqueconsta,según las mismas, de dos categorías (obra publicada y obra inédita),

INSTAMOSPÚBLICAMENTEalPatronatodela Alhambra y el Generalife a que retire su apoyo al mencionado premio, por los motivos que a continuación se exponen:

1.- El plazo de admisión del Premio Alhambra terminaba, según anunciaban sus bases, el pasado 1 de marzo de 2013; en dichas bases se añadía que "se aceptarán los envíos que, con fecha postal dentro del término de la convocatoria, lleguen más tarde". Sin

He aquí el gran secreto: el pensamiento se hace en la boca. (Tristan Tzara)

embargo,elfallodelPremioseprodujoel11demarzo de2013,esdecir,apenas10díasdespuésdefinalizado el plazo de admisión. Surgen entonces varias preguntas: ¿Se aceptaron, como decían las bases, los poemarios que pudieron haber llegado con posterioridad a dicha fecha? ¿De cuánto tiempo dispuso realmente el jurado de este Premio para leer los "más de 200 originales" -recibidos desde diversos paíseshispanoamericanos-que,segúnelcomunicado publicado el 10 de marzo por laAgencia de Noticias Europa Press, se presentaron al Premio?

Sólo este dato sería suficiente para cuestionar la credibilidad del mencionado Premio, pero hay otros más inquietantes.

2.- En esta segunda edición, el Premio Alhambra dePoesíaAmericanahasidoconcedidoaÁlvaroSolís (México),enlacategoríadeobrapublicada,yaCarlos Aldazábal(Argentina),enlacategoríadeobrainédita. El primero, Álvaro Solís, es miembro del grupo literario mexicano Círculo de Poesía, grupo que coeditóenMéxicoen2011laantologíatituladaPoesía ante la incertidumbre (Madrid, Visor, 2011); una antologíacoordinadaporFernandoValverdeyDaniel Rodríguez Moya, directores del Festival de Poesía de GranadaymiembrosdeljuradodelPremioAlhambra. Además, Círculo de Poesía editó en México en 2012 el libro Los ojos del pelícano, del que es autor Fernando Valverde.

El segundo, Carlos Aldazábal, es director de El surí porfiado, editorial que publicó en Argentina en 2011 la mencionada antología Poesía ante la incertidumbre; siendo Aldazábal uno de los poetas incluidos en esta edición argentina de la antología. El surí porfiado publicó también en 2012 el poemario Los ojos del pelícano, del que es autor Fernando Valverde.

Si compartes el contenido de esta carta y la petición que se hace al Patronato de laAlhambra y el Generalife, sólo tienes que enviar un mensaje ("Estoy de acuerdo con el contenido de esta carta") con tu nombre y apellidos, profesión, nacionalidad y país de residencia, a la siguiente dirección unamodestaproposicion@gmail.com

delatripa: narrativa y algo más

3.- En el momento del fallo del premio, Fernando Valverde y los dos premiados formaban parte del consejo editorial del portal de poesía de internet que mantiene el grupo Círculo de Poesía, aunque en los últimos días de marzo han sido sorpresivamente sustituidosendichoconsejoeditorialporWaldoLeyva (Cuba), Omar Lara (Chile) y Benjamín Prado (España).

4.- En su Primera Edición, el PremioAlhambra de Poesía Americana fue concedido, en la categoría de obra publicada, al mexicano Mario Bojórquez, miembro también del mencionado grupo Círculo de Poesía.

5.- Según las bases de este Premio, el jurado del mismo "estará compuesto por los directores del Festival Internacional de Poesía de Granada, el director de la Editorial Valparaíso, un representante de la Alhambra y un autor de reconocido prestigio de la poesíaenespañol";esdecir,tresdeloscincomiembros deljuradoseránsiempreValverdeyRodríguezMoya, directores del Festival de Poesía de Granada, y Javier Bozalongo,directordeEdicionesValparaísoytambién asesor del mencionado Festival de Poesía. De este modo, las bases del Premio garantizan e imponen al jurado la opinión siempre mayoritaria y el criterio siempre decisivo de los miembros de la directiva del Festival de Poesía de Granada.

No es el propósito de esta carta opinar sobre la calidad literaria de las obras premiadas. Tampoco objetamos que un grupo de personas afines convoque premios literarios con la intención de difundir su propia obra y la de sus amigos.

Lo que nos parece carente de ética, e inaceptable, es que esta convocatoria parcial e interesada se lleve a cabo, sin la menor reserva, al amparo del nombre y el prestigio de una institución pública tan respetable como laAlhambra.

Consideramos que laAlhambra, lugar cargado de significación simbólica no sólo para la poesía española, sino también para la poesía hispanoamericana (pensemos en Borges, en Oliverio Girondo,enÁlvaroMutis,pormencionarsóloalgunos de los poetas más relevantes que le han dedicado sus versos) debe retirar su apoyo a este Premio y a sus

promotores.Enelcasoquenosocupa,nosetratasólo dequeelmencionadoPremiosupongaunengañoala ciudadanía granadina y española, sino que constituye tambiénunmenosprecioyunaestafaatodosaquellos poetas hispanoamericanos que, desde uno u otro lado delAtlántico,yprecisamenteporlaatractivapresencia de laAlhambra, han creído con ilusión y buena fe en la limpieza y honestidad del Premio Alhambra. Nos parece necesario que la Alhambra se coloque cuanto antes al margen de estas componendas y manipulaciones que pueden llegar a empañar, que de hecho empañan ya, su buen nombre.

En España y América, 30 de marzo de 2013. Fuentes de información de esta carta:

-Página Web del Festival de Poesía de Granada: http://fipgranada.com/ index.php?option=com_k2&view=item&id=139:ii-premioalhambra&Itemid=147

-Página web de la EditorialValparaíso: http://valparaisoediciones.es/content/4-editorial-valparaiso

-Comunicados de la Agencia de Noticias Europa Press: http:// www.europapress.es/cultura/exposiciones-00131/noticia-juradofalla-segunda-edicion-premio-alhambra-poesia-americana20130310124009.html

http://www.europapress.es/andalucia/noticia-argentino-carlos-aldazabalmexicano-alvaro-solis-premio-alhambra-poesia-americana20130311180940.html

-Página web de la revista Círculo de Poesía: http://circulodepoesia.com/ nueva/

-Página web de la Antología Poesía ante la incertidumbre: http:// www.poesiaantelaincertidumbre.com/sumario.html ; http:// www.poesiaantelaincertidumbre.com/ediciones.html

-Página web de la Editorial El surí porfiado: http://elsuriporfiado.blogspot.com.es/

Firmantes:1-MagaliAlabau,poeta,Cuba-EstadosUnidos;2-LuisAlberto Ambroggio, poeta y académico, Argentina-Estados Unidos; 3Miguel ÁngelArcas, poeta y editor, España; 4-Jorge LuisArcos, poeta y ensayista, Cuba-Argentina; 5- Marta Badía, filóloga y guía cultural, España; 6-Mar Benegas, poeta, España; 7-Javier Benítez, poeta y profesor, España; 8-Arturo Borra, poeta, Argentina-España; 9-Hernán Bravo Varela, escritor, México; 10MarioCampaña,poetayensayista,Ecuador-España;11-Yoandy Cabrera, poeta y crítico literario, Cuba-España; 12-Adriana Canseco, investigadora literaria, Argentina; 13-Francisco Cenamor, poeta y profesor de teatro, España; 14-Rocío Cerón, poeta, México; 15-Jennifer Clement, poeta y novelista, México; 16-Carmen Córdoba, estudiante, España; 17-Benito Del Pliego, poeta y profesor, España-Estados Unidos; 18-Jordi Doce, editor y escritor, España; 19-Vicente Echerri, escritor, Cuba-Estados Unidos; 20-Adán Echeverría, escritor y editor, México; 21-Julio Espinosa Guerra, poeta y narrador, Chile-España; 22-Abilio Estévez, poeta y novelista, Cuba-España; 23-Mónica Francés, poeta y actriz, España; 24-Juan Andrés García Román, poeta y traductor,España;25-JoséLuisGärtnerMartos,escritor,España; 26-JesúsGe,poetaymaestro,España;27-LauraGiordani,poeta, 4

Esta carta en defensa de la Alhambra fue presentada con sus 54 primeros firmantes -originales- ante el Patronato de la Alhambra y el Generalife (Granada, España) en la mañana del día 1 de abril. El próximo lunes, 8 de abril, volverá a presentarse con la totalidad de las firmas incorporadas hasta ese momento.

delatripa: narrativa y algo más

Argentina-España; 28-Víktor Gómez Ferrer, poeta y editor, España;29-WillyGómezMigliaro,poeta,Perú;30-FelipeLázaro, poeta y editor, Cuba-España; 31-Ernesto Lumbreras, poeta y ensayista, México; 32-Luis Luna, poeta, España; 33-Rubén Martín, poeta, España; 34-Erika Martínez, poeta e investigadora literaria,España;35-YaizaMartínez,poeta,escritorayperiodista, España; 36-Maurizio Medo, poeta, Perú; 37-Pepa Merlo, narradora, España; 38-Eduardo Milán, poeta y ensayista, Urugüay-México; 39-Eduardo Moga, poeta, traductor y crítico literario, España; 40-Antonio Muñoz, profesor e investigador literario, España; 41-Andi Nachon, escritora, Argentina; 42Andrés Neuman, poeta y novelista,Argentina-España; 43-Jesús Ortega, narrador y gestor cultural, España; 44-Diego Palmath, poeta, Perú-España; 45-Joaquín Peña-Toro, artista plástico, España; 46-Cristina Peri Rossi, poeta y novelista, UrugüayEspaña; 47-Antonio José Ponte, escritor y editor, Cuba-España; 48-Raul Quinto, poeta, España; 49-Ramón Ramos, periodista, Italia-España; 50-Isel Rivero, poeta, Cuba-España; 51-Milena Rodríguez, poeta e investigadora literaria, Cuba-España; 52OrlandoRodríguezSardiñas,poeta,críticoliterarioyacadémico, Cuba-Estados Unidos; 53-José Carlos Rosales, poeta y profesor, España; 54-Álvaro Salvador, poeta y profesor, España.

Actualización Firmantes: [07. 00 horas / 1-4-2013)]: 55. Manuel Arana, poeta, España; 56. Luis Alberto Arellano, poeta, ensayista y traductor, México; 57. Daniel Barredo Ibáñez, poeta e investigador, Colombia-España; 58. Pilar Blanco, poeta y profesora, España; 59. Sofía Castañón, escritora, España; 60. Antonio Cienfuegos, ex-poeta, catedrático, El Salvador; 61. Santiago Delgado, profesor, España; 62. José Miguel Espejo Balanza, poeta, España; 63. Víctor Miguel Gallardo Barragán, editor y escritor, España; 64. David Leo García Gil, poeta, España; 65.GermánGuirado,poeta,España;66.ClaudiaLópezMeurinne, editora, México; 67. Román Luján, poeta, México; 68. Julio Mas Alcaraz, poeta, economista y cineasta, Reino Unido; 69. David Mayor Orgillés, escritor y profesor, España; 70. Antonio Mochón, profesor, España; 71. Paco Moral, poeta, España; 72. Gracia Morales, poeta, dramaturga y profesora, España; 73. Ángel Paniagua, escritor, España; 74. Carmen PascualGuerrero,estudiante,Austria-España;75.JulioPavanetti, poetaygestorcultural,Urugüay-España;76.ElviraRamos,poeta, España; 77. Daniel Saldaña París, escritor, México; 78. Erick StradaQuispe,poeta,Perú;79.MaríaTerrón,estudiante,España; 80. Enrique Villagrasa González, periodista, España; 81. Felipe Zapico Alonso, poeta, actor y profesor, España.

Actualización Firmantes: [00.01 horas / 2-4-2013]: 82-Diana Álvarez Concepción, escritora y redactora de contenidos, España; 83OscarAyala,profesoryeditor,España;84-JesúsCárdenas,poeta y profesor, España; 85-José Antonio Cerezo Hellin, profesor, España; 86-Antonio Collados Alcaide, profesor, España; 87Antonio Luis Cortés, profesor, España; 88-Antonio Cubelos Marqués, escritor, España; 89-Javier de la Mora, escritor y editor,México-España; 90-EnriqueFalcón,poeta,España;91-Rosa Ana María Fiorentino, docente, Argentina; 92-Jairo García Jaramillo, profesor e investigador, España; 93-Sergio Hinojosa, profesor,España;94-ÁlvaroIranzo,cantautoryescritor,España; 95-Manuel Iris, poeta, México-Estados Unidos; 96-Benjamín León, poeta y profesor, Chile-España; 97-Segio Loo, escritor, México; 98-Carlos López, profesor, Guatemala-México; 99Antonio José López López, profesor, España;100-RafaelLlorca Signes,poeta,España;101-RaquelMartínGómez,poeta,España; 102-Isabel Martínez Barquero, escritora, España; 103-Jorge Merino Molinero, obrero, España; 104-Cristina Morales, escritora, España; 105-Ana Patricia Moya, pluriempleada, España; 106-María José Olmedo, psicoanalista, España; 107-

Judith Ortiz, escritora y poeta, España; 108-José Alfonso Pérez Martínez, poeta, España; 109-Javier Pérez Walias, poeta y profesor, España; 110-Felipe J. Piñeiro García, escritor, España; 111-Gonzalo Sanz García, realizador audiovisual, España; 112ÁngelTalián,escritor,España;113-JuanManuelZermeño,poeta y ensayista, México.

ActualizaciónFirmantes:[17.00horas/2-4-2013]:114.-VerónicaAranda Casado, poeta y traductora, España; 115.- Edgar Artaud Jarry, poeta y profesor-investigador, México; 116.- Aníbal Cristobo, poeta y editor,Argentina-España; 117.- Daniel de Cullá escritor ypoeta.,España;118.-ErnestoGarcíaLópez,Poeta,antropólogo, España; 119.- Mariano Hernández de Ossorno, poeta y artista, España; 120.- Rafael Indi, poeta, España; 121.- Miguel Iñiguez Puche, metalúrgico, España; 122.- Miguel Ángel Manzanas, escritor, España; 123.- David Mena, escritor, España; 124.-Ana Pérez Cañamares, poeta, España; 125.- María Salvador, estudiante, España; 126.- Mª Paz de la Torre Casas, profesora, España

ActualizaciónFirmantes:[17.00horas/3-4-2013]:127-JoséLuisChacón Lafuente, psicoanalista, España; 128-Jorge Díaz Martínez, poeta y crítico literario, España; 129-Inés Guerrero Espejo, profesora, España; 130-Tamara León, escritora, México; 131-José Javier León Sillero, profesor, España; 132-Alejandro Lérida, poeta y maestro,España;133-MariCarmenMartínGranados,profesora, España; 134-José Luis Martínez Clares, escritor y maestro, España; 135-Dionisio Munguía J., poeta y editor, México; 136Rosa Prieto Grandal, profesora, España

Actualización Firmantes: [15.00 horas / 4-4-2013]: 137.- Eloisa Alba García, poeta y músico, España; 138.- Alberto Arias Pereira, escritor,España;139.-PaolaBurgosPulido,empresaria,España; 140.-RodrigoCastillo,poetayeditor,México;141.-LuisChacón Ortiz, estudiante-poeta, Costa Rica; 142.- Álex Chico, poeta y profesor,España;143.-SilviaGallegoSerrano,poetayprofesora, España; 144.- Yohanna Jaramillo, poeta y promotora cultural, México; 145.- Iñaki López de Aberasturi, poeta y profesor, España;146.-JuandelaCruzLorenteJara,librero,España;147.ÁlvaroLuquínNavarro,poeta,México;148.-MyriamMoscona, poeta y periodista cultural, México; 149.- LuisAlberto Navarro, poeta e investigador literario, México.

Actualización Firmantes: [21.00 horas / 5-4-2013]: 150.-Víctor Cabrera, editor y poeta, México; 151.-Eduardo Castro, escritor y periodista, España; 152.-Jorge Esquinca, escritor, México; 153.Valeriano Fauve, escritor, España; 154.-Mariana Lozano Ortiz, editora,España;155.-CarmenMartínez,gestoracultural,España; 156.-Isabel Mellado, músico y escritora, Chile-España; 157.Antonio Muñoz Serrano, escritor, España; 158.-Inmaculada RamosTapia,profesorauniversitaria,España;159.-AgustínRuiz Robledo, profesor universitario, España; 160.-Alina Vanessa Victoria Frías, estudiante, México

Actualización Firmantes: [21.00 horas / 6-4-2013]: 161-Naomi Ayala, poeta, Puerto Rico-Estados Unidos; 162-José Luis Aznarte Cabezudo, profesor, España; 163-Noni Benegas, poeta y crítica literaria, Argentina-España; 164-María Elena Blanco, poeta, ensayista y traductora, Cuba-Austria; 165-Juana Castro, poeta, España; 166-Ernesto Frattarola Alcaraz, poeta y asesor lingüístico, España; 167-David Huerta, poeta y profesor universitario, México; 168-Juan María Jiménez, poeta y periodista, España; 169-Rosa Medina Doménech, profesora universitaria, España; 170-Cristina Mellado Ramos, profesora, España; 171-Silvia Pérez Criado, estudiante, España; 172-José Prats Sariol, profesor universitario y crítico literario, CubaEstados Unidos; 173-Amir Valle, escritor y periodista, CubaAlemania; 174-Moisés Vega, poeta, México.

delatripa: narrativa y algo más

delatripa: narrativa y algo más

Otro certamen literario

En estos días circula una carta anónima de denuncia sobre el supuesto fraude, para

variar, en un certamen literario. Carta que busca la firma de escritores para robustecer la petición deretirarelnombrealPremioAlhambradePoesía Americana, por no considerarlo merecedor de identificarlo con el monumento más importante deAndalucía.

La razón es que, este 2013, el premio fue otorgado a Álvaro Solís. Sí, otra vez un escritor mexicano vinculado con los jurados más allá de las coincidencias. Dirán los aludidos que sólo ha sido casualidad, como también lo es que el galardonado forme parte de Círculo de Poesía, la revista electrónica en la cual confluyen, desde hace años con proyectos literarios, los mismos jurados.Coincidencia,dirán,queSolíspertenezca al mismo grupo de Mario Bojórquez, ganador de la primera emisión del citado certamen.

Mucha gente no presta atención a estos asuntos, al considerar que es de esperar que los concursos literarios sean fraudulentos; sin embargo,esválidalaindignacióndelosque,apesar de todo, mandan su obra esperando un dictamen justo. Esa indignación la comparto por ser éste un aspecto más de las mafias que se tejen dentro y fuera de México, y que impiden el correcto uso de los recursos públicos y privados destinados al fomento cultural sin distingo.

Por lo anterior decidí volver a publicar el siguiente artículo, escrito a fines de marzo de 2012; versa sobre el papel perverso que Círculo de Poesía ha jugado desde la creación de este premio. Sin nada que perder, porque no vivo del quehacereditorial,nideunabecadelFONCA,ni

concibo la amistad por encima de la verdad, denuncio públicamente algo que me parece una práctica repugnante.

El círculo sin poesía

En un primer momento Círculo de Poesía (http://circulodepoesia.com/nueva/) me pareció sumamente propositiva: sus contenidos frescos siempre me dieron la impresión de que no todo estaba podrido en los medios impresos y electrónicos de carácter literario. De manera afortunada vi publicados mis textos más de una vezensuseccióndepoesía;locualsedebió,debo suponer, a que encontraron algún mérito literario en ellos.

Sin embargo, debo decir que todo resultó un engaño y exijo el retiro de mi colaboración, pues he descubierto que su Revista está plagada decorrupciónyclientelismo.Setratadeungrupo mafioso que utiliza a Círculo de Poesía como un aparador, empleando su amplia difusión para construir una intrincada red de amiguismo y compadrazgo, para acaparar espacios y premios literarios.

Círculo de Poesía es la charola que permite asusmiembros,abrirselaspuertasenlossalones de la hipocresía literaria latinoamericana.

A medida que los compromisos se hacen mayores y que los amigos del Círculo son más influyentes, la crítica se censura. Esto lo puede apreciarcualquiervisitantedelportalcuandonota que sus comentarios fueron eliminados o ignorados. Incluso, cuando la polémica por lo publicado es de un matiz furibundo, se corta de

delatripa: narrativa y algo más

7

tajo. Resulta una contradicción abrir un espacio para los comentarios que sólo publica las alabanzas y elogios. Una apertura falsa al lector

Por citar ejemplos que me han llevado a redactar esta crítica sin tapujos, traigo a colación que en el caso del libro Vientos del siglo. Poetas mexicanos 1950-1982, presentado en la feria del libro del Palacio de Minería, los compiladores decidieron que dichos vientos sólo alcanzaron hasta 1982, año de nacimiento de Alí Calderón, fundador de Círculo de Poesía. Al respecto nos dice Margarito Cuéllar, uno de los compiladores, en la nota del portal:

"La muestra o reunión de poemas, más que antología, reúne textos de 55 poetas nacidos entre 1950 y 1982. De Efraín Bartolomé a Alí Calderón, el volumen ofrece en 544 páginas una lectura amplia, y hasta donde es posible representativa, del entorno nacional en el campo de la poesía actual."

Cabe preguntarse si eso no representa más bien un panorama o la muestra de un grupo que controlayacaparapartedelosespaciosymedios editoriales; con la salvedad de que en ese libro se encuentren autores que no formen parte de estas mafias y a los que pido no se sientan aludidos.

Puede responderse a esta crítica “que toda antología tiene sus riesgos, sus exclusiones e insatisfacciones para los lectores”. Sin embargo, lo que toda antología devela es su objetivo al ser conformada. En este caso, responde a una necesidad de legitimar a un grupo y de anclarlo en una tradición de supuesta ruptura y como representación de una temporalidad.

Es lamentable que la UNAM se preste a brindarestetipodeespaciosparalosfinesquehe

expuesto, y no me refiero sólo a los salones y patios neoclásicos del Palacio de Minería, sino al espacio editorial, pues la publicación surgio con el auspicio de la universidad; cabría decir que no espropiamentelaUNAMlaresponsable,sinolas personasacargodelosdepartamentoseditoriales. Prueba de ello es que recientemente se destapó uno de los escándalos más sonados de plagio y cacicazgo editorial dentro y fuera de la UNAM por parte de Sealtiel Alatriste, quien se vio obligado a renunciar a su cargo.

Como verán, en ese Círculo no cabe la casualidad ni el mérito, como ocurrió con el galardón más reciente otorgado a Mario Bojórquez: la primera edición del premio Alhambra de Poesía Americana en la categoría de obra publicada.

Mario Bojórquez es miembro del consejo de Círculo de Poesía, lo que indica su relación coneljuradodelpremiogranadino,yaquejuntos han compartido en varias ocasiones la mesa de presentaciones. García Montero, uno de los miembros de dicho jurado, tiene una sección titulada "Arte poética" en Círculo de Poesía. Por lo que toca a los demás jurados españoles del premio: Raquel Lanseros, Fernando Valverde y Daniel Rodríguez Moya son autores que comparten, junto con Alí Calderón, las páginas de Poesía ante la incertidumbre,mismapublicación queloshallevadoaunalargagiradelecturaspor España y América. En México, particularmente, hansidoacompañadosypresentadosporelahora galardonado miembro de Círculo de Poesía.

El círculo está completo y, al parecer, estos poetas se mueven en todo menos en la incertidumbre.

delatripa: narrativa y algo más

Memorias de chun kuns

Crónicas de una niña en zapatos de charol

Mexicali era un pañuelo. Ahora con el tiempo lo miro así. Un puñado de

cuadras, esquinas reconocibles en mi memoriadeniña:unadondecomprabanmispaletas de jamaica, otra en donde me puse mis primeros tenis de lona blanca (que por cierto, duraron poco); aquélla en donde estaba la farmacia, en otra más una panadería francesa repleta de postres que alimentaron mi glotonería; frente al camellón, abarcando dos esquinas, estaba la iglesia que olía a madera reciéntallada;lacasadelasmonjasasimismo fue instalada en un recodo, la rememoro austera pero linda; en otra arista, sobre la avenidagrande,habíaunbanco.Puedoseguir numerándolas y terminar pronto, la lista sería corta.

Y no era el mundo al que mi niñez se circunscribía,enrealidadlaciudadterminabaen una orilla, en cualquiera de los cuatro puntos cardinales, donde el polvo y los chamizos le habitaban y no se podía ver más allá. Lo que estaba más lejos de ahí, como el aeropuerto, era el fin del mundo.

IIMiabuelahablabadeunMexicaliaúnmás pequeño, uno en donde había coches descapotados que cohabitaban con carros tirados por caballos, como en una película de vaqueros. Unos cartoncillos en sepia son las fotos que conservo. Sus labios de corazón, y siempre de sombrero, frente al edificio de la entonces Colorado River Land Company, en la esquina de la calle F y avenida Reforma,

sentada sobre una piedra. Las mismas palmerassonelescenariodelasquinceañeras de hoy que en ese mismo edificio se hacen fotografiar. Hay cosas que nunca cambian.

En este pequeño pueblecito era costumbre que las hijas de familia estudiaran en Estados Unidos, el inglés era el pretexto. Una de esas tardes,frenteauntéheladoconmuchoshielos y trozos de limón, sentada en la silla de su porche, platicaba que la frontera era apenas una verja, y pasar de un lado a otro sin pasaporte era un hecho cotidiano. La gente de migración reconocía a las personas y no requería de un visado. Los avatares que significan hoy en día conseguir visa, apenas hacen creíble esta imagen. Hay cosas que sí cambian.

Quisiera tener más elementos para dibujar esa ciudad a la que arribó mi abuela siendo una niña de once años, pero sólo imagino lo quelasfotosmepuedencontar,yunaqueotra cosaquerememorodeaquellastardes,cuando desatabarecuerdosmeciéndoseensupoltrona. Así, en goteros, puedo armar historias, breviarios de la ciudad y reconstruir el rompecabezas de su existencia.

No se me olvida que en su casa no había coolers, que mi abuelo tuvo que construir un segundo piso en la bodega de adobe de su agencia aduanal. El propósito de hacerlo fue parausarlodurantelasnoches,llenodecatres, y con un abanico industrial al fondo que hicieraviento.Ellugarnoteníavidrieras,sino mosquiteros. Mi abuela, para mitigar el calor

de su progenie, colgaba frente a las ventanas unas sábanas mojadas. Cuando escuchaba estas tragedias, yo imaginaba unas franelas roídas, flotando como fantasmas del verano, danzando al ritmo del viento y produciendo esperanzas nulas de frescura. Como víctima del clima, no puedo creer que semejantes recursos pudieran resolver cincuenta grados deinfierno,sobretodocuandolasnochesson tan viscosas como la melcocha. En los meses de agosto, el calor cuaja los humores y la densidaddelambienteapaciguahastaelvuelo delasfalenas,queparecenmoverseencámara lenta. Siempre escucho decir a los viejos que el calor es más intenso ahora, que el amianto de las calles, sumado a la densidad de autos y lainversióntérmicalohanintensificado,pero hasta donde sé, un desierto es un desierto. Y dentro de uno caben todos los calores imaginables.

Esaseranhistoriasdeterrorparaunamente asustadiza, para alguien que nació con un acondicionador de ambiente marca Westing Houseensurecámarayqueensusagostosde muchos grados centígrados, secaba su frente sudadaenlasrejillasqueexpedíanairefresco y olor a humedad.

III

Recorrer todos los días mi camino al colegio de monjas, era tomar el rumbo a la nada. Durante ocho años, llegar a la escuela porlasmañanaseraunviajealcampo,unpicnic sin ensalada de papa y pollo frito. Y es queporesosrumbosnohabíaurbanismo,sólo caminos vecinales y mucha arena. Filas de eucaliptos, sembradíos, peste de zorrillo y, como fondo, el timbre de La Jabonera. Pero al final de cuentas, arena sin ciudad.

Más allá del universo que se construía dentro del cerco de la escuela, no había nada.

delatripa: narrativa y algo más 10

Peroenesevacíopodíaentrartodo:undesfile desoldados,paseosencamello,campamentos de húngaros anticipando un circo, elefantes famélicos,campamochasencuyacolaseabría un abanico de colores, como la del avestruz.

Salir al recreo y mirar un horizonte de lomas interminables es una especie de lienzo para la imaginación de una niña. Volar papalotes en el paraje es darle uso a esos grandes terrenos, pero mirar cómo a lo lejos las dunas son un mar iracundo, en donde las carabelas de Colón arribaban cargadas de dinamita y vino, es darles esa posibilidad infinita.

IV

Alcrecerytenerlaperspectivadelespacio en relación con otras orbes, reconoces la peculiaridaddeMexicali.Laciudadseplantea a sí misma, a partir de la línea que la divide con el gabacho. Ahora uno puede ver satelitalmenteelcrecimiento,perodeniña,unomira sólo las esquinas, los puntos que marcan los semáforoseneltransitarcotidianodelarutina familiar. Aquellos lugares fuera de ese espectro, no existían, el mundo se resumía a los elementos familiares reconocibles.

Hasta la fecha, para mí siempre, sólo hay Norte y Sur. Si quiero ubicarme en algún bulevar,oteoparalocalizarelcercolimítrofe. Soy una norteada.

En esa construcción (simbólica, dirían los expertos en ciencias sociales), uno puede enlistar elementos que constituyen la memoria individual y con ello activar la de otros. Por alguna razón, mis reminiscencias se mueven con los olores, con el color del cielo de alguna tarde sin importancia, con las atmósferas. Cuando desaparece un edificio a consecuencia de un terremoto, o cuando un local es rehabilitado para un uso diferente al original.

No hace poco, en una de las esquinas familiares a mi infancia, construyeron una hamburguesería. Este local se encuentra en unaplazaqueensustiemposofrecieramuchos comercios, en particular un supermercado regenteadoporchinosycuyonombrecargaba consupenitencia:ElAhorro.Porsuubicación, en medio de la creciente ciudad y en el cruce de avenidas importantes para el tráfico local, el mercado resolvía las necesidades inmediatas del ama de casa que no deseaba "pasar al otro lado" para comprar medio kilo de tomates o un estropajo, y así evitar una visita al Mercado Municipal, que no tenía estacionamiento ni buena iluminación.

El Ahorro olía a carne cruda, más bien apestaba.Suspisosteníanaserrín,nobrillaban como los del Shoping Bag de Caléxico, tampoco empacaban las cerezas en canastitas de red, ni regalaban estampillas verdes con las que mi madre canjeaba para conseguir una guaflera. Fallaban las llantas de los carritos y había que escogerlos al entrar. Las especiales del día se promocionaban en cartulinas con letras gruesas, hechas con un marcador gigante. No había revisteros con Harper´s Bazar y los empacadores eran niños chorreados,nuncajubiladosconmejillasrollizas. Digamos que en mi mundo de niña con refri en la recámara, ElAhorro, más que un paseo de compras, era un mal viaje.

Actualmente en la hamburguesería todo luce agringado, entrar al local me produce cierta congoja. Quisiera oler de nuevo las chuletas de puerco en las vitrinas, y recorrer los pasillos de esa tienda, mientras resuena por todas partes el chillido de las llantas del carrito. Mis hijos se perdieron la experiencia, no tienen nostalgia de ella. Ellos sólo quieren comida prefabricada. El tiempo les dará añoranzas; por ahora, me quedo con las mías,

yqueseactivaneventualmenteypormotivos a veces inexplicables.

En una de mis visitas a este local, me di cuenta que conservaba el sótano. Hoy usado como estacionamiento para la franquicia chatarrera. Sin que todavía muchas cosas arribaran a mi recuerdo, interné mi carro en la bóveda, a la cual se ingresa bajando una rampa en picada. Ahí estaba, un bodegón de concreto,grande,alto,convigasequidistantes.

Muchos recuerdos, olores, sabores y un colorintensovolvieronamícomoestampida. V

Nunca he sentido mayor placer que comprar zapatos.Alos seis, los mejores eran los de charol. Los negros me parecían elegantesparalosfestejosnavideñosolasbodas, losrojossemehacíanatrevidosyjuguetones, pero los blancos eran señoriales. Sin moños, y lisos, me hacían sentir como princesa. Sacarlos de la caja, de su resguardo en papel de China y oler la piel era demasiado placentero, como mirar el brillo de sus pequeñas hebillas; escuchar el sonido de mis pasos a través de sus taconcitos breves, y ver el sol repetidoenmiszapatos.Mispiernasdelgadas y largas emergiendo de un par de luces blancas, y decorando ese cuadro: unos calcetines níveos, de encaje y, por supuesto, un vestido esponjado (ampón, les decía) con el cual dar vueltas para ver volar la falda.

Ése era el atuendo del domingo y era igual al de mis hermanas. Las tres, clonadas, una tras otra en el asiento trasero del carro, con el mismovestido,losmismoszapatos,elpeinado exacto.Igualitasaloscochinitosdelacanción. Las hermanas mayores odiaban vestirse así, pero a mí, nada me importaba, porque la posibilidaddevermereflejadaenmiszapatos y mirar las aceras de la calle, la luz de las

ventanas,laspalmerasdeljardínyeleucalipto gigantesco sobre mis charoles blancos, no tenía igual; mirarlos por esa ventana lustrosa me hacía diferente.

Por el pasillo de la casa, mientras se alistaban padres y hermanos, caminaba sin parar sólo para mirar mi cara sobre la punta laqueadayescucharelclapclapqueproducía. Nunca me preocupé por el corto tiempo en el que se convertían en despojo; el uso intenso les quitaba poco a poco el brillo; los juegos, los raspones de la bici o simplemente mi desparpajo al caminar, les impregnaban heridas. Pero siempre hubo la posibilidad de tener otros nuevos, igual de brillantes y olorosos…

Los domingos, luego de misa: ¡todos a comer china! Nomás de pensar en ello, se me llena la boca del sabor a sangría embotellada, ylaimagendeunamesalargaconlosprimos, vecinos,oquiensedejaracompartirlacuenta. Entonces, pletórica de olores, me arriba a la memoria una remembranza envuelta en bermellón. Pienso en ese lugar como un gran dragón que nos tragaba durante un par de horas,paraluegoescupirnosalatardetediosa, con la barriga llena de arroz y chop suey.

Unabóvedasubterráneasuccionabanuestra existencia; seducida por la belleza de aromas ycoloresbrillantessobrelosplatonestrazados conideogramasininteligiblesparacualquiera que no fuera de Shangai (o de donde vinieran esos personajes que brindaban el gozo del domingo).

Hoy,laescalinatarojaconlaquehacíamos las entradas triunfales ya no está. No se desciende en ellas como en las películas; una loza grisácea e inclinada es la entrada. Las paredes del subterráneo perviven con una desnudez fría de hormigón; no visten más de

delatripa: narrativa y algo más 12

papel aterciopelado, ni sostienen murales de seda con la muralla bordada en hilos de oro. Yanohayniñasconzapatosdecharolblanco. Un vacío completa el lugar. Al acomodar mi carro, noto que sólo un par de usuarios se atrevieron a sumergirse en ese socavón de concreto.Mepreguntosirecuerdan,comoyo, lo que ese recinto cobijaba; desconozco si en sureminiscenciaexistentodavíalos chun kuns que comían cuando niños, luego de ir a misa.

Bajo el mercado El Ahorro se instaló el restaurante, según me dicen, se llamaba Sun Time. No recuerdo el día en el que dejó de operar, mucho menos el por qué. Tengo clara la rutina del domingo: la gran pecera al final de las escaleras, que servía de lámpara incandescente al terminar el descenso.Al finalizar los peldaños se abría completo el galerón interminable,unacasadeespejosquereplicaba hileras de mesas y comensales.

Yendo y viniendo, menudos meseros de ojillosoblicuos,ataviadosderojo,acarreaban platones de cerámica tan coloridos como la verduleríaquecontenían.Humeantescharolas provocaban,consuperfume,quetodosbabeáramos a la espera de la orden. El hambre atiborraba las comandas, lo mismo que la sed y el deseo. La comida china es seductora, completa los goces a través de los cinco sentidos. Al terminarla, te abate un sueño de opio,profundoydensocomolosplaceresmás culposos. VI

Mexicali sí era un pañuelo. En mis ojos de niña con zapatos nuevos, todos estaban ahí, sonrientes, saboreando las carnitas, cuchareandolasopadealetadetiburón,remojando las perdices en el ácido del jugo de limón con pimienta.

Los beatos comentaban la homilía; las madres, el peinado de las hijas; los parientes resentidos,lavidadelosdemás;mientrasmis padres tarareaban a Julio Iglesias ("… me olvidédevivir…").Granfiladecarrosrecién lavados,aguardabanenelcalorón.Enmásde una ocasión miré a un cura servirse un vaso de cerveza fría, mientras su dentadura feroz mascaba la carne grasosa de puerco, poco despuésdepredicarsobrelavidaausterayde sacrificios.

En una de nuestras visitas, una monja del colegiosesumóalaprole,invitadapormamá. Después de agradecer al señor por sus alimentos, comió arroz blanco y consomé, lo acompañó con agua y té de jazmín caliente.

Mientras a escondidas mi mano sostenía una galleta de naranja y almendras que mi abuela se robó de la mesa de a lado, guiñando un ojo,cómplice;teníamosmuchahambreypoca compostura.

VII

El orden de las cosas se hizo tradición: "la uno para cinco", ordenaba mi padre. Recibíamoslasbebidasconunarepresiónanticipada: nadiedebíabeberunagotaantesdelacomida. En mi osadía consideraba comida esos filamentos fritos, enredados entre sí (nulos, les dicen por acá), que la mínima mesera, calladaydetersosemblante,nossirviera.Con mirarlos, el hambre se mitigaba. El primer tragodeSangríaSeñorialmeayu-dabaapasar ese crocante, pero los enormes ojos de mi madre encajaban su reprobación en los míos.

Llegaban las carnitas, una delicia cubierta de caramelo lustroso. Su textura tierna y blanda, siempre han sido la entrada ideal y, sobre la fuente en la que las entregan, el ímpetu de su color las vuelve un espectáculo, sobretodosielcomensalsumergelosbocados

depuercoenelintensoamarillodelamostaza oriental (extraída de una raíz parecida al rábano, me han explicado).

Minutosdespués,cubiertoenelsutilbrillo deunasalsaabasedeciruelasysoya,elpollo almendradohacíasuaparición;elperfumedel apio que le acompaña seduce las papilas, la boca se nos llena de saliva al verlo sobre la mesa. Unido a este plato de colores suaves, arrimaban un cerro de arroz cantonés, confeti de verduras, y carnes venidas de cielo, mar y tierra. Era mágico verlo desaparecer entre cucharazos de los tragones.

De todos estos placeres de la comida del Sun Time (y de todas las comidas chinas de mi vida), encuentro virtudes especiales en un pequeño platillo en particular Greguería de color y aromas, regalitos envueltos en una masa fina como el papel, entregan a la boca, tras la mordida, amasijo de sabores intensos. Merefieroalosrollitosprimavera,conocidos como chun kuns,quesiemprehansidomotivo de disputas fami-liares y acaloradas discusiones sobre lo que encierran sus entrañas.Losmalintencionadosdicenquelos rellenan de sobras. Sigo pensan-do que son injurias, juicios falsos, artilugios para quedarse con ellos.

La primera vez que probé uno, después de quemarme la lengua lo que siguió fue pura algarabía. Antes que la chimichanga de la comidaregionalmexicanafueraconocidapor mí, tuve el gusto de trozar la delgada capa frintangueada del taquito cantonés. Un viaje sin retorno del que no siempre quiero volver.

No menos afortunada es la tortita de frijol desoyagerminada,vegetalesyhuevo,llegaba con el resto de los platos: el fuyón. Otra fiestecita filamentosa pletórica de ingenio y sabor.

Essabidoquelascartasdelosrestaurantes chinospocotienenqueverconlacomidaque el pueblo de China (líder de la economía mundial en este siglo), acostumbra cosumir. Perolaevocaciónaestaculturamilenaria,que conlleva a los mexicalenses a desenmarañar, con tenedor en vez de palillos, un plato de chopsuey,esnuestramarcaregistrada.Quien es cachanilla reconoce en los menús chinos algo de su identidad, más identificable que la planta que da nombre a nuestro gentilicio.

VIII

Entre temblores, economías precarias y el desdén, Mexicali reconfigura su fisonomía cadadiezaños.Sonmiscálculos.Mepermite afirmar esto, la suerte de habitarla en sus muchosrumbos.Unimpulsoambulatoriome ha hecho transitar avenidas, caminos de ida y vuelta, calles y bulevares.

Sinromperelpatróndearmarseasímisma sobre el tope fronterizo, se ha expandido amorfa y grandilocuente. Le han brotado puentes sin tener más que ríos de carros. El tránsito intenso atiborra su existencia. En medio de la rutina y semáforos fuera de sincronía, el habitante percibe que desaparecen o surgen edificios en lotes baldíos, o franquicias que le brindan ese cascarón cosmopolita.Unamáscarahuecadelprogreso.

Después del último terremoto, muchos locales y espacios públicos y privados fueron desapareciendo poco a poco. Nos costó reconocer que el siniestro produjo cambios sustanciales (por dentro y por fuera); nos fuimos quedando chimuelos de muchas referencias que antes fueron pistas para ubicarnos espacialmente. Algunas fachadas marcabanlavueltaparalocalizarlatortillería, olospilaresdeuncentrocomercialindicaban elfindeunacoloniayeliniciodeunacalzada.

ElgranmercadoElAhorroysurestaurante hundido,desaparecieronconsutileza(ynocon lostemblores).Alrededordemí,pocaspersonas lo recuerdan. El crecimiento de la ciudad trajo consigo otros lugares donde disfrutar de losarrolladosdeprimavera(chunkunes)ynos fuimos olvidando de las fauces coloradas y los muros con exóticos tapices.

Recuerdo que, siendo joven quinceañera, amanecí con la noticia de un incendio pavoroso. El mercado, olvidado por todos, con poca mercancía en sus pasillos, aniquiló su existenciaenmediodelasllamascontroladas por los bomberos. Cuentan que fue, muy entrada la noche, cuando las calles de la avenida se acallaban, las hirvientes lenguas consumieroneledificio.Hubopocostestigos. Par de años antes, el local de comida oriental cerró sus puertas de hierro para siempre, y el mercado, reducido a medio local, operó sólo un tiempo más.

Después del siniestro, pasar por la avenida y ver el despojo en el que se convirtió El Ahorro, me resultaba doloroso. Como lo fue enterarmequelosresidentesdelsótanodemis placeres, media docena de doberman´s que resguardabanellugar,murieroncalcinadossin la menor oportunidad de escape. Dicen que ladraban sin parar, atorando sus hocicos en la herrería de los portones.

Ahora los lugares de comida china, en su mayoría, son locales de un lujo oriental muy lejano a la costumbre; no usan el rojo intenso para vestir las paredes, y pocos cuelgan de sustechoscandilescongarrasdedragón.Han segmentadosumercado,aligualquelaciudad lo ha hecho con su trazo urbano.

Por mucho tiempo, en esta polvorienta ciudad, se propiciaba lo que en muchas otras ciudades del país ha sido imposible unir, a

travésdelacomida,almásheterogéneogrupo degentequeenterrandoeltenedorysaboreandomanjaresenlosmuchoslocalesdecomida cantonesa,compartenunmismoespaciofísico (y espiritual, ¿por qué no?). Digamos que a travésdelacomidachina,yporeltiempoque toma consumirla, los restaurantes se convertieron en una zona temporalmente autónoma.Enesebrevenichoeraposibleque nadie se fijara en el número de la orden que tomabas: si la uno para dos, para cuatro, o la especial para cinco…

El paisa con sombrero y tenis adidas, el gobernador con su séquito de guaruras simulados, la linda familia clasemediera, el burgués empresario de guayabera, el bichicome,losabuelospensionados,losbuchones, los pochos, las fresas, los chakas, los juniors, las chachas, los cholos... una gama interminable en plena intersección sobre las mesas cubiertas de platones garigoleados, sin faltar lajarradetéheladoolascaguamasbienfrías.

Actualmente, pocos son los locales que siguen incluyendo los platillos de mi niñez. Como resultado del sincretismo (como dicen los especialistas en cultura) se han incorporado a las tradicionales recetas, una gama deingredientesquehanarribadoaMexicalia través de los migrantes de regiones cercanas a nuestro estado.

Cuando observo que el pollo almendrado ahora tiene cacahuates, me doy cuenta que, a través de la comida, en el espíritu de los chinos, algo lucha por mantenerse vivo, con deseos de continuar. Su entereza es capaz de adaptarse a los cambios para permanecer. Llegaronhacemásdeunsigloparaquedarse. Y, como las abuelas, entraron a nosotros "por la panza".

Los zapatos blancos de charol cada vez se usanmenosenlasniñas.Igualquelosvestidos esponjosos, que ya pasaron de moda. Yo no vi bailar a mi hija dando vueltas con su falda al aire, pero los rollitos marrones, rellenos de colores y perfumes, han pasado por sus dientes, y son, al igual que para mí, sus favoritos en las comidas de domingo.

En una noche temprana de invierno, sobre unacallecualquiera,sinimportarlahoranila aceraporlacualcaminaba,yenbuscadenada en particular, miré una luna blanca, como las que sólo se ven en Mexicali. Una rueda inmensa, amorosa y bella, rotunda y amarilla como un gran Roquefort. Recordé a mi padre ysucuentosobreelchinoquevolóenbicicleta hacia la luna, en busca de queso. Era una de las tantas historias que narraba mientras esperábamos a mamá frente a un consultorio, o en la frutería.

Cuando su hermoso relato fluía, su acento mexicalense se convertía en un híbrido del español con un particular énfasis en las eles. Elpersonajedelcuento,conunnombreimpronunciable incluso para él, moría de hambre juntoasushijos,yensussueñossehacíarico con la venta del queso de luna. En sus fantasías, el personaje ideaba la forma de llegar a ese tesoro con su única y valiosa posesión: la bicicleta…Loscuentosnuncaterminaban,mi madre solía llegar antes del fin. Siempre imaginé a es chinito volando por los aires, rumbo a su gran tajada de queso perforado.

Mirar su tez, de un pajizo tenue y aterciopelado, su cabello color de noche intensa, lustroso y geométrico; su cuerpo menudo y su expresión, a veces difícil de descifrar, son parte de la mexicalidad. Tengo el cuidado de

no intimidarlos cuando los miro mientras sorbo la sopa de hongo de oro; pero si estoy cerca de ellos, no dejo de observarles.

Al medio día, por los callejones de la colonia Nueva, como flores de cactáceas, efímerasperointensas,emergendequiénsabe donde, muchos paraguas festivos que sostienen las manos diminutas de las mujeres de Shangai, que acuden puntuales por sus retoños a la escuela. Llegan y desaparecen en fila. Silenciosas, se muestran plenas junto a sushijos.Eslaalegríadetodamadrequetiene la sopa lista y los fideos recién cocidos esperando en la mesa.

Paramuchosdenosotros,residentesdeesta ciudad, escuchar los rumores cantoneses sin

asombrarseestancomúnycotidianocomola salsa de soya. Cuando hablan los chinos cantan. El sonido de su voz es música ininteligible pero familiar y cotidiana. En nuestra paranoia de ignorantes, hemos llegado a pensar, en muchas ocasiones, que hablan de nosotros.

Pienso eso en una noche púrpura, cuando cruzan frente a mi un grupo de jovencitas de ojillosdiminutosycabellosrectangulares.Me avergüenzo. Recapacito y me imagino a mí en China, sola en una ciudad cuya lengua no medicecosas.Pienso,¿cómosobrevivirlejos demilugardeorigen?Mirespuestanoexiste, no lo puedo imaginar. Ellas sí.

Sobre la poesía

Las reflexiones entorno de la utilidad de la poesía no son nuevos. Ya en el siglo I a. C.

políticos como Cayo Cilnio Mecenas, consejero deAugusto, llegaron a la conclusión de que si se pretendíafundarunImperiomilenario,nosepodía únicamenteconlasarmasylasleyes,senecesitaba el soporte de la tradición; pues sólo ella puede enraizar generacionalmente en el pensamiento humano. La idea era, siguiendo el ejemplo de Grecia,refundarRomaytodalatradiciónlatinaa partir de la poesía. De allí el ahínco con que Augusto reclamaba a Virgilio la escritura de la "Eneida", y la venganza que concibió Ovidio al arrojar al fuego "Las Metamorfosis", como si el destino de Roma dependiera de estas epopeyas.

Otroscasosquepuedenmencionarsesonlos de Dante Alighieri y San Juan de la Cruz. El primero, en su Divina Comedia, presenta una postura político-religiosa a favor de los Güelfos, tan ferviente que construyó un infierno tan vasto paraalbergarasusenemigos.Porsuparte,elautor de"Cánticoespiritual"ofreceunavisiónseductora de la contrarreforma. Cabe destacar que este movimiento religioso llegó a tener tal fuerza en España, que solía decirse que Dios habla en castellano.

IIPeropensándolobienlasreflexionesentorno de la utilidad de la poesía sí son nuevos. Los personajes de los anteriores ejemplos nunca pusieron en duda el oficio del poeta, sabían que el poema tenía una utilidad precisa: ella creaba ideas que pueden enterrarse en la mente del escucha y florecer; lo único que cambiaba era el

Marco Antonio Murillo

nombre con que se designaba a dicha utilidad: fundadora de pueblos, viaje órfico, diálogo con Dios. El poeta moderno tiene la situación diferente: con la sobrevenida del Capitalismo y laRevoluciónIndustrial,otrosvaloresquenoson trascendentales, y que se relacionan con el materialismo,lavelocidadylacaducidad,sonlos que comienzan a regir el mundo, poniendo en dudalospreceptosantiguosquegobiernanelarte. Elarte,porsulado,tienelatareadeponernombre alosnuevosinventosydescubrimientos,esdecir, hacerlos presentes en la historia.

El escritor, que hacia el siglo XIX ya comenzaba a profesionalizar su oficio, siente el deber de justificarse ante el utilitarismo de la sociedad. ¿Qué es la poesía? ¿Para qué sirve la poesía?

III

JorgeLuisBorges,apelandoalaideadeque lapoesíaesfrecuentadaporpocoslectoresyque, sin embargo, llega a ser trascendental, decía que la poesía es inmortal y pobre. Para Eliseo Diego la poesía era una conversación en la penumbra; RubénBonifazNuño,porsuparte,remataasíuno de sus mejores poemas: para los que están armados, escribo. Pero mi definición favorita es unacontenidaenestafrasedeRilke,quetieneun poco de presunción y de piedad: Todas las cosas a las que me entrego/ se hacen ricas y a mí me dejan pobre. MarcoAntonio Campos, acaso más práctico que los anteriores, señala lo que no es, o más bien lo que la poesía no hace:

Texto leído en el marco de las celebraciones por el día mundial de la poesía. Facultad de Ciencias Antropológicas, UADY

delatripa: narrativa y algo más 17

Declaración de inicio

Cada uno de mis poemas pretendió ser un instrumento

útil de trabajo. Pablo Neruda (Estocolmo, 1971)

Las páginas no sirven. La poesía no cambia sino la forma de una página, la emoción, una meditación ya tan gastada. Pero, en concreto, señores, nada cambia. En concreto, cristianos, no cambia una cruz a nuevos montes, no arranca, alemanes, la vergüenza de un tiempo y de su crisis, no le quita, marxistas, el pan de la boca al millonario.

La poesía no hace nada.

Y yo escribo estas páginas sabiéndolo.

IV

La poesía no hace nada. Fuertes declaraciones. Para entender el poema de Campos, se debe regresar un poco en el tiempo. Buena parte de la poesía moderna asignó un rol bastante romántico al poeta, el cual consistía en ser partícipe en la construcción de las sociedades modernas: la poesía educaba al pueblo, guiaba al pueblo. Las grandes revoluciones del siglo XX, fueron vinculadas con la poesía: la Revolución Rusa y Maiakovsky, la Revolución Cubana y Nicolás Guillén, la Revolución de Nicaragua y ErnestoCardenal.Ésteúltimotieneunpoemaque integra exactamente el rol que la poesía social asignaba a quien pretendía escribir versos:

Epitafio para Joaquín Pasos

Aquí pasaba a pie por estas calles, sin empleo ni puesto y sin un peso. Sólo poetas, putas y picados conocieron sus versos.

Nunca estuvo en el extranjero. Estuvo preso.

Ahora está muerto. No tiene ningún monumento...

delatripa: narrativa y algo más 18

Pero recordadle cuando tengáis puentes de concreto, grandes turbinas, tractores, plateados graneros, buenos gobiernos.

Porque él purificó en sus poemas el lenguaje de su pueblo, en el que un día se escribirán los tratados de comercio, la Constitución, las cartas de amor, y los decretos.

VLa poesía no hace nada. Con el posmodernismo, los paradigmas que guiaron cierta poesía moderna están siendo puestos en duda, así como los supuestos resultados que ella obtuvo en los diferentes movimientos sociales en los que sus portadoresparticiparon.EduardoLizaldeescribió al respecto en un epigrama: ATENCIÓN ACTIVISTAS (tal vez quiso decir poetas) el principal deber / de un revolucionario / es impedir que las revoluciones / lleguen a ser como son. En otro poema, sus declaraciones son más duras, escribeen"Chufas": Toda la mala poesía destruye las ciudades / me temo que es alguna de las nuestras Apesardetodo,lospoemasdefiliación social no fracasaron, muchos de ellos los seguimosleyendohoyconunaextrañaalegría,lo que fracasó, acaso, fue la ideología política que el autor detentaba.

VI

¿Qué es, entonces, la poesía? Y ¿Para qué sirve? Personalmente no creo que para alguien dedicadoaesteoficioconseriedad,oasulectura, leseaalgoquehayaquédefinir,obien,justificar. Y si se desea meditar o reflexionar sobre ella, no debe hacerse a partir de valores con que actualmente medimos a las ciencias o algunas ramas de las humanidades; tampoco juzgarla con los viejos valores que una vez la rigieron, puesto que a través del tiempo ha ido cambiando y adaptándose a las necesidades intelectuales del

ser humano. La poesía, que es de cada quien, a medida de cómo la interprete, a medida de qué ejecución realice su voz propia, tiene tantas formas para revelar raíces, y tantas definiciones, como poetas. El poema, por tanto, no debe ser juzgado por la temática que maneje, ni por la

afiliación política o religiosa que contenga, sino más bien por la ejecución del poema, si fondo y formasenutrenentresí.Portanto,lapoesíanoes un deber ser sino que ella dice, y debemos como lectores escucharla.

delatripa: narrativa y algo más

Luz y oscuridad:

Una aproximación visual en la estructura de Primero sueño

Denisse Sánchez-Erosa

El Primero Sueño espublicadoporprimeravez en 1692. El engranaje del cual se vale sor

Juana para un discurso de 975 versos, es la mitología, pero su expresión y resignificación van más allá de un dominio de léxico o de un repaso lúdico a la historia de las ideas.

Su perspicaz conceptualización trasciende lo estéticodellenguajeparallevarnosporunviajeque amalgama, no sólo concepciones propias, sino también íconos y símbolos, en donde los silencios tienen igual o más valor que los sonidos. Así, es observable que la oscuridad se impone ante la destellante y segadora luz, permitiendo, gracias a suinfinitanegrura,traspasarloslímitesinstau-rados por la idea misma de libertad. Mabel Moraña nos menciona en su ensayo Viaje al silencio: exploraciones del discurso barroco, que

Este juego barroco de opacidad y transparencia, de luz y sombra, realidad y apariencia,entrelazalaobradesorJuanaconotras antinomias estructurales de su época, las engendradas por el autoritarismo patriarcal y dogmático, transfiriendo así a la dinámica discursiva, los profundos debates que anuncian elnacimientodelpensamientomoderno(Moraña, 1998 :159).

La luminosa realidad inmediata se opone a la oscurarealidadprivada;eltextoabreconlaimagen de una elevada masa, en torno a la cual se gesta un juego de dualidades en el que cada polo lucha por obtener el dominio de un mismo espacio: la mente del hablante lírico, que se encuentra entre el día y la noche, entre lo onírico y lo real. La luz del día está relacionada con lo tangible, lo corporal, lo orgánico; la materialidad misma representada por las funciones fisiológicas que abren y cierran el escenario onírico del poema. Siendo entonces la acción fisiológica del dormir2 el paso al desprendimiento de esa materialidad.

Luz Aurora Pimentel nos habla de la posibilidad de dos niveles o planos, el primero es el nivel de ensoñación, el segundo es el de la realidad (netamente material); no obstante, las formasdeordenamientoqueseutilizanen El sueño, son básicamente las mismas: en PS, sucede que las marcasdeensoñaciónnohacenexplicitoelcambio de un nivel a otro, nos encontramos ante un discurso que se manifiesta en su totalidad como unviajedescriptivológico(Olivares,2007:40); así, si nos enfocamos en la naturaleza de la metáfora de PS, que entraría en lo que Eliade denomina Hierofania,yqueconsideraquelasmanifestaciones de lo Sagrado poseen una forma o estructura. Nos encontramos con que, citando a Ricceur, (…)eneluniverso delo sagradolacapacidad para hablar se funda en la capacidad el cosmos para significar. Por lo tanto, la lógica del sentido procede de la misma estructura del universo sagrado. Su ley es la ley de la correspondencia, correspondencia éntrela creación in illio tempore y el orden actual de apariencias naturales y actividades humanas.

El binomio luz-oscuridadentanto queactúa como elemento antagónico, es a la vez , complemento, que se esboza en la configuración de lo icónico. Luego entonces su función es entretejer las redes discursivas, en la estructura de la obra. el orden se comienza a demarcar, en principio de forma horizontal, siendo que la oscuridad se extiende sobre la masa terrenal, para ascender , en forma transversal, al plano de lo etéreo, celestial, místico. La luz es siempre un impedimento, para avanzar en el viaje, comprendiendo el acceso a la fuente de como objetivo unico de la voz lirica; se comprende que, parallegaradichoobjetivo,y,comoconÍcaroesla

1 El desprendimiento del alma, de la carne; viaje astral, relacionado con vertientes ocultistas y religiones paganas.

delatripa: narrativa y algo más

misma luz cálida y cegadora refractada la que invariablemente conduce a la caída; la luz, es presentada como elemento de tipo negativo en el universo que se configura ante la mirada del lector del PS; asi la luz, no puede desligarse de otro aspecto intrínseco a su propia naturaleza enérgica: el calor; el que, como activador de los procesos fisiológicos, lleva consigo la inquietante alerta.

Así,laoscuranocheno puedesercompletada en este plano: el globo ocular divisa estrellas, cuando aun no se sumerge en el plano ideal para comenzar un verdadero ascenso; el cuerpo, el motor, entra en proceso de letargo, el corazón, reloj, celador, se torna omnipresente, tales analogías, entre lo natural y lo cultural, entre lo orgánico y lo mecánico, entre cavidad-habitad, son otro de los recursos de la metáfora de lo Sagrado, en la que "hay unan triple correspondencia ente el cuerpo, las casas y el cosmos, la cual hace a los pilares de un templo y a nuestras columnas vertebrales simbólicas unas de las otras, así como hay correspondencia entre un techo y un cráneo ,la respiración y el viento, etc". (Ricceur, 1995:75)

Entonces, podemos observar que, las dinámicas gestadas en el espacio de Primero sueño obedecencomoenelprocesofisiológico,ycósmico, y por interrelación lo cultural, a una suerte de circularidad; es un espacio en movimiento constante, en el que la voz narrativa encuentra su instante de estaticidad, que depende de donde se posicione para observar; un elemento icónico por excelenciaenestaconfiguracióneslaformaesférica la cual cabe destacar que posee una eminente carga astronómica y religiosa y se encuentra intrínsecamenteligadaalautilizacióndelanumerología, la esfera es un símbolo de orden trascendental, lo cual hace comprensible el significante peso que posee en la configuración del universo onírico refuerza la visión plástica en Primero sueño como bienmenciona Olivares"(…)laesferacuyocentro está en todas partes y cuya circunferencia en ninguna (…) la forma envolvente comprensiva de la esferaanula encierta forma las contradicciones deljuegodeoposición"y así…"nos encontramos

delatripa: narrativa y algo más

con que subir es bajar y bajar es subir; su centro equidistante de toda superficie es susceptible de metaforizar la totalidad" (Olivares, 2007: 9).

Tal es, la forma en la que se ordena el código espacio -temporal en PS, el cual es atravesado por la voz lírica que conduce al lector a través de este inhóspito territorio normado por los códigos de correspondencias.Siendoquelasreferenciasvisuales desprendidas del universo mitológico-cultural, permiten la configuración del espacio, podemos comprender, la función icónica de una pirámide, que al principio del Poema ubica al lector-viajero aliniciodeltrayecto(yalfinalloexpulsaalimponer nueva presencia de forma invertida) pese a que se esté desarrollando una idea, un modo de conocer el mundo en tanto se está disertando sobre él.

Literatura consultada

Garza Héctor Noé. El Ocaso de la Esfinge: Hacia una nueva interpretaciônDePrimeroSueño,Tesisde DissertationPara Optar Por El grado de Doctor Of Philosophy, Texas Tech University, Dicembre 2002.

Moraña, Mabel. Viaje al silencio. Exploraciones del discurso barroco. México: UNAM, Facultad de Filosofía y Letras, 1998.

Olivares Zorrilla, Rocio. La poética matemática de Sor Juana. Edición digital: Alicante: Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, 2007 en Sor Juana Inés de la Cruz. Estudios : Pimentel, LuzAurora. El espacio en la ficción. La representación de los espacios en los textos narrativos, México UNAM 2001.

Mal Pacheco, Carlos. Piramidal, funesta sombra: alquimia y ocultismo en Primero Sueño de Sor Juana Inés de la Cruz. The University ofArizona

Lorenzano Sandra (Ed.) Aproximaciones a Sor Juana. México: FCE Universidad del Claustro de Sor Juana. 2005

Torres, Daniel "Los efebos en la poesía colonial hispanoamericana" enLapoesíaenlaliteratura española y latinoamericana, pp. 49-60.

Noguerol Francisca. Mujer y escritura en la época de Sor Juana Inés de la Cruz.América Latina Hoy Abril, año vol. 30. Universidad de Salamanca, España. PP. 179-202. 2002

Fedro Arias De La Canal (Comp.) Las Fuentes Profanas de Primero Sueño y otros ensayos sorjuanistas. Asociación De Afirmación Hispanista A.C. México 1998.

MontesaBernetRaquelVoluntaddeconocimientoyescepticismo en Primero sueño (Universidad de Murcia).

delatripa: narrativa y algo más
delatripa: narrativa y algo más

Como somos cromosoma

A Tany, siempre a ella…

Una estación ferroviaria antigua. Poca gente espera el tren. Una manada de vagones oxidados; paredes descascaradas y la tarde lame con su lengua amarga.

H.- Fuma.

M.- Con maletas.

H.- ¿Cuánto falta?

M.- Media hora más o menos.

H.- ¿Estás?...

M.- Te dije que sí.

H.- ¿Y si?

M.- ¿Regresáramos al verano?

H.- Sí.

M.- Esto es definitivo. ¿No lo ves?

H.- Quiero olvidarlo.

M.- Pronto.

H.- No esto, el verano.

M.- Yo también.

H.- Pero no por lo que tú. Quiero olvidarlo para no.

M.- Yo igual.

H.- Mientes.

M.- Como quieras.

H.- ¿Hace cuánto?

M.- Toda la vida.

H.- ¿Tanto?

M.- Unos años.

H.- ¿Tanto?

M.- Un par de meses.

H.- ¿Tanto?

M.- La verdad.

H.- ¿Tanto?

M.- Unos días.

H.- Tanto…

La marcha Ángel Fuentes Balam 25

M.- ¿Por qué viniste?

H.-Paravermarcharelúltimovagón.Estostrenes son muy viejos ¿sabes?; datan de la segunda guerra. Transportaban comida y medicinas. Ayudabanenlacontiendadelosotros.Enese entonces llegaban hasta la playa. Al puerto.

Más allá de donde tú y yo.

M.-Ajá.

H.- Cuanto más joven, más venía a admirarlos. Desdechico.Nuncaimaginéqueaquí.Siento que no me hago viejo, sino que enjuvenezco.

M.- Todas las mujeres te querrán entonces.

H.- Y sólo quiero ahora, escuchar las óxidas ruedas echar quejidos a coro sobre las rieles.

M.- Entonces no.

H.- Este es el día. Siempre lo fue.

M.- Te pedí llorando que faltaras.

H.- Falto. Por eso te vas. Si hubiese sobrado.

M.- Igual me hubiera ido.

H.- Te pedí llorando que no me dejes.

M.- Igual me hubiera ido.

H.- ¿Podrías?

M.- Con decirte que en verdad, sobrabas.

H.- Sobraba en tu vida.

M.- No a eso me refiero.

H.- ¿Y?

M.-Queocupabasdemasiado.Siemprefuistemuy grande y yo pequeña (por naturaleza); quedaba empolvada en un rincón de la casa, olvidada como otro adorno. El polvo y el

delatripa: narrativa y algo más

olvido me asfixiaron. Cuando iba a caer, no me tomaste. Me sentía vacía. Espejo sin mercurio. Todo era sobre ti.

H.- No aguanto… ¡Todo lo hice porque!

M.- ¿Me amas?

H.- Más que a nada.

M.- Entonces, vete.

H.- Contigo me iré.

M.- No digas estupideces. No puedes irte.

H.- Lo haré.

M.- No quiero que vengas. Silencio.

M.- Por favor Te lo ruego… vete.

H.- Él no es mejor que yo.

M.- ¿Cómo sabes?

H.- Lo sé.

M.- No tiene nada que ver. No busco eso. Nadie es mejor.

H.- Él nunca será como yo.

M.- Haces esto más difícil.

H.- Cómo podría ser más fácil.

M.- Simplemente queda con lo bueno… con lo bello. Con eso quiero marchar.

H.- Lo bueno. Me pides quedar con lo bueno. Lo mejor que me ha pasado jamás, eres. Henos aquí, a punto de perdernos para siempre. A minutos de desintegrar de la historia ese verano. Olvidemos los momentos malos por ti. Olvidemos al otro como si fuese una hoja seca: bella un tiempo, frágil siempre, vuelta polvo. Nos haremos invisibles, disueltos en elácidogástricodelosintestinoslaberínticos del tiempo. Lo bueno ¿qué es lo bueno? ¿El momento en que la hoja se desplaza por el viento o cuando ya destrozada por un pie ajeno recuerdas su forma torcida y mágica? ¿Escuchas? Es el sonido de tu adiós.

M.- ¿Recuerdas la playa, cuando en la arena, recostados, nos cubría el rostro una manta? Me dijiste eres toda mía. Me dijiste eres mi océanoinfalible,tenecesitodijiste…Mesentí

delatripa: narrativa y algo más

segura y plena. Pero poco a poco nos fuimos hundiendo,caíamoshaciaaltamar.Laolanos arrastraba, pero tú no me viste. Respiraste y no estaba allí para resucitar en tus pulmones. Te aferraste a otras cosas, maderos con los que pretendías restaurar una barca perdida hace años. Lo entendí. Intenté construirla junto a ti. No me permitiste subir. Sólo me mostraste cómo construir mi balsa. Pero te acompañé. Te di todo y más. Navegaste lentamente pero yo no estuve ahí. Ahora. Construí mi propia balsa, porque en la tuya, nadie más cabe. ¿Lloras?

H.- Lloro. Todas esas cosas.

M.- Ya no importa.

H.- ¡No, escúchame!

M.- Entiende.

H.- Esa barca era para ti. Navegué para buscar maderos más fuertes, más hermosos, con los que pudieras estar satisfecha, construir no un barco, sino una isla donde podríamos dormir la siesta de las seis todo el día sin miedo a que uno de los dos despertase, escuchando el ruido de las olas acompañar la respiración común. Entiende que todo era para ti. Sólo te faltó esperar más.

M.- Lo único que quería era hundirme contigo.

H.-Ahí estaba.

M.- ¡No!

H.- Lloras.

M.- Lloro.

H.- Todo era por ti.

M.- Basta.

H.- Basta.

M.- Es el sonido del adiós.

H.-Ya viene.

M.- Sí.

H.- Nunca se extinguirá ese verano.

M.- Nunca.

H.- Voy a morirme sin ti.

M.- No. Encontrarás a alguien que te ame.

H.- No soy como tú.

M.- Lo que pasó con.

H.- No digas nada.

M.- (…)

H.-Nolosoporto.Esmejorarrancarmeunórgano vital.

M.- Lo sé.

H.- ¿Lo sabes?

M.- Te he llorado como a ninguno.

H.-Ahora no.

M.- Ningún dolor

H.- Es para siempre

M.- (…)

H.- Se acerca. ¿Te ayudo?

M.- No hace falta… por favor…

H.- No lleves la… no, nada.

M.- La llevo.

H.- ¿Por qué?

M.- Por el verano.

H.- No quiero esto.

M.- Perdóname.

H.- Perdónate.

M.- Me iré.

H.- ¿Cómo pudiste olvidarnos?

M.- No lo hice.

Llega el tren lento. La gente aborda. Mujer suelta las maletas. Hombre las recoge. Niega con la cabeza. Mujer con la mirada baja, las toma. Subirá al tren.

M.- No olvidaré ese verano.

Se cierra la puerta. El tren comienza su andar. El hombre lo mira. Cuando ya no es visible, saca una carta, la dobla y hace un barco de papel que después puede romper.

Llanto repentino en verano

H.- Somos un par de gaviotas tranquila, el mundo no nos escucha. Planeamos sobre el mar café (que hirviente) avanza robusto a la orilla, la arena el lugar donde estampamos la huella.

¡Mira: unos cadáveres son peces perdidos, balsas podridas conchas seniles anhelando una perla! Si todo el mundo pudiera escucharnos oír caracol en la oreja el lamento que damos graznando el adiós más azul, mas adiós que podamos. Somos un par de gaviotas refulgentes, grandes gaviotas tranquila, el mundo no puede escuchar, tranquila, que nadie nos puede escuchar, tranquila el mundo no nos escucha.

El hombre se sienta en las rieles. Se cubre la cara. Suenan gaviotas. Sonará el tren. Lentamente anochece. Antes de que la oscuridad se coma todo, por el costado donde el tren ha partido, aparece la Mujer avanzando muy despacio, como para no despertarlo de su sueño. Deja caer las maletas. Él responde al sonido. Se miran. La mujer corre hacia él, pero desaparecen en la oscuridad antes de dar el último beso.

Oscuro

Cabeza de tortuga

Desde aquí alcanzo a escuchar a las palomas que revolotean en su patio.

Como cada domingo aguardo su señal.

Tuve que correr hacia la puerta y salir de inmediato, abandonando sobre el piano, los merengues que, el capricho de Obdulia embarazada, me hizo comprar Y aún trasminado por el tufo a orines y mierda, mientras subía al auto, retrocedí hasta el momento en que crucé frente a esa casa y lo descubríencalzoncillosycamisetasinmangas -flaco, pequeño, calvo, pálido-, haciéndome señas desde su diminuto jardín de caricatura, en el que a duras penas sobrevivían un rosal sin hojas y un trío de raquíticos helechos en macetones de barro.

Suelo dejarme llevar por lo imprevisto. La situación, además, ofrecía posibilidades: un anciano fantasmal, un chalet casi en ruinas, la orfandad del domingo. Qué podía perder Atraído por el riesgo traspuse la verja, olvidando los antojos de mi esposa.

La mirada inquieta del viejo llamó mi atención. Algo había de extraño en ese parpadeo impaciente bajo las exiguas cejas grises. Con una confianza desmedida, el hombre me tomó del brazo y, al tiempo que hablabaalgoacercadeunahermanaenferma, guió mis pasos hacia el interior. En ese momento reconocí el olor artificial de los diabéticos.

La casa, tal como había imaginado, era amplia. La humedad avanzaba en los techos sostenidos por gruesas vigas de madera. Un tufo rancio llegaba de manera intermitente

hasta mí.Al fondo, tras un largo corredor, se apreciaba un patio con veleta. Sin soltarme, esquivando un trío de pesados sillones Luis XV colocados alrededor de una mesa con jarrón chino, llegamos a la sala. El Stainway deteriorado, lleno de pálidas fotografías, floreros de cristal cortado y miniaturas de porcelana, ocupaba casi toda la estancia.

-Espere usted aquí -señaló una mecedora el viejo y desapareció tras unas puertas abatibles de cristal esmerilado.

Puselabolsademerenguessobreelpiano, muy cerca de una diminuta dama victoriana con falderos y sombrilla a la que estuve a punto de tumbar. El polvo me obligó a toser con insistencia. Me senté y vino hasta mi pensamientoObdulia:aestasalturasdebíade estar furiosa por la tardanza; estas últimas semanas,acausadesuestado,sehabíavuelto insoportablemente irritable. Mientras me balanceaba,errélavistaporlosajadosysucios tapices de las paredes; alcancé a distinguir paisajes bucólicos: escenas de caza, días de campo, familias de campesinos ocupadas en la vendimia. La araña cenicienta, pendiente encimademicabeza,eradeherreríaartesanal, pródiga en florituras. Algunos retratos amarillentos, colgados como al desgaire, evidenciabantiemposdebonanza.Bastabadedicarle unos minutos a esos semblantes adustos para descubrir en sus miradas, la expresión inquietantequeheredaríanasudescendiente. Mi oído distinguió entre los sonidos del patio, el gorjeo apremiante de las palomas, el chirriar acompasado de un hamaquero, la intermitencia de una gotera cercana. Tan

entretenido estaba, que me sobresalté cuando la voz del viejo resonó en la estancia.

-Oiga, ¿puede venir?

Me puse de pie y, al acercarme, observé que al hombre se le había desabrochado la bragueta de los calzoncillos. Su miembro, flácido y rugoso, asomaba balanceante. La imagen me produjo morbo y repulsa. Sus piernas delgadas, lampiñas, con rojizas picaduras de mosquitos, complementaban el cuadro. Hubiera podido excusarme y salir de ahí en ese momento. No lo hice en parte por desconcierto y porque el viejo se aferró con firmeza a uno de mis brazos. No tuve otra opción que dejarme conducir hasta un cuarto cerrado que olía a orines matizados con aromas a talco de bebé y agua de colonia.

Apenas mis ojos se acostumbraban a la penumbra cuando una voz rasposa, de mujer, preguntó:

-¿Lo trajiste?

Me alarmé. Pasó por mi mente la posibilidaddeestarenpeligro.Alarguéunamano y mis dedos se toparon con los hilos de una hamaca.Elviejo,queadvirtióenseguidaestas aprensiones,mesujetóconmásfuerza.Parecía mentira que de alguien tan endeble pudiera provenir tanto nervio.

-Esmihermanamayor-dijo,tranquilizante¿Serías tan amable de ayudarnos?

En ese momento la ambigüedad del ofrecimientomesedujo.Aquéclasedeayuda se refería, ni siquiera pasó por mi cabeza preguntarlo.Cedíalimpulsoyasentí.Obdulia podía esperar.

-Hace días que no da del cuerpo -confió tras una pausa.

Antes de que pudiera reaccionar, como si yo fuera un niño, el hombre me guió hacia el centro de la habitación. Me soltó y se dirigió en voz alta a su hermana.

-Esther, ¿escuchas? Está delante de ti.

Fueronsólounossegundos,peromiimaginación trabajó a toda su capacidad. Aquella vozimperiosa,elsexooscilantedelvejestorio, sus manos rugosas, todo parecía surrealista. Justo cuando iba a preguntar qué debía de hacer,unosdedoshuesudosyfríosatenazaron mis caderas.

-¿Listos? -dijo el viejo.

La voz carrasposa, que evidenciaba una espesa aglutinación de flemas en la garganta de su dueña, respondió.

-Listos.

Fue entonces cuando el hombre emitió sonidos que no entendí, pero conforme subieron de volumen se esclarecieron. Eran onomatopeyas. Emulaban los pitazos de un trenyelrodardevagones.Ycomosillevaran implícito algún conjuro, me convertí en la locomotora de un ferrocarril de carne que se dirigía hasta una puerta, por cuyo dintel se filtraba una titubeante iluminación.

La luz amarillenta de una bombilla me reveló que estábamos en un baño diminuto. Traté de no acercarme a las paredes: los mosaicosestabanrecubiertosporunacapade moho y grasa. Me fijé en la anciana, cadavérica;elmapamundidesurostro,elextravío en la mirada, ese nido revuelto de canas y la boca babeante, evidenciaban una demencia senil avanzada.

-Ayúdeme a sentarla en el inodoro, se resiste a defecar en el pañal.

Unaoleadadeorinessaturadosdefármacos llegó a mi olfato. Debí respirar por la boca para evitar la náusea que amenazaba con transformarseenvómito.Amiderecha,enuna palangana llena de agua turbia, nadaba una tortuga. De cuando en cuando, el quelonio asomabasufeacabezadeglandeparaobservar nuestras maniobras.

-La tenemos desde la infancia -se apresuró a decir el hombre.

Fingí sonreír.

A la vieja había que sostenerla con fuerza, comounfardo,paraquenosefueradebruces contra el suelo. Al cabo sus ojos, antes semicerrados, se abrieron, y el semblante se le enrojeció más de una vez, al tiempo que emitía pujidos y ventosidades. Fue cuando sucedióalgoque,dadaslascircunstancias,me pareció accidental. El viejo rozó sus piernas contra las mías y sentí su erección. Quise apartarme, pero en aquel baño estrecho y

maloliente, donde las cucarachas pululaban conlibertad,unpasoatrássignificabasoltara la vieja, dejarla a merced de su propio peso.

Traté de convencerme que el frote que sentía sólo era casual. El hedor que minaba el lugarcortómisreflexiones.Cadavezeramás difícil evitar la náusea, el sudor empapaba mi camisa y me sentía incapaz de continuar.

-Aguante -exclamó el viejo como si adivinara mis pensamientos.

Bajé entonces la vista y me encontré de nuevoconaquellalisacabezaqueemergíadel agua, al tiempo que una mano, ¿la del hombre?,¿ladelahermana?,seabríapasoen mi bragueta hacia mi endurecimiento. Una sonora descarga de excrementos me hizo recordar a Obdulia y la razón de estar ahí. Comopude,acomodéalaancianaenelbacín y, sin decir nada, olvidando los merengues sobre el piano, me precipité a la salida.

Taibo II y la novela policiaca

En el momento en que la novela policíaca vio la luz, consiguió una serie de adeptos

atraídos por la fórmula del enigma y la búsqueda desuresolución.EdgarAllanPoeesconsiderado el padre de la novela detectivesca con una serie de cuentos, entre ellos Los crímenes de la calle Morgue. Posteriormente Arthur Conan Doyle presentó al famoso detective Sherlock Holmes. En sus historias se dieron a conocer los clásicos métodosdetectivescosconformadosporlaspistas y la deducción.

Inmediatamentesurgióunaespeciedejuego entre el lector y el autor. El primero intenta por todoslosmediosresolverelmisterioantesdeleer la última página de la novela. El autor, por su parte,quieredemostrarsuinteligenciayhabilidad paraevitarprecisamentequeelreceptordescubra toda la verdad antes de leer el final y las explicaciones del narrador acerca de quién cometió el crimen y por qué lo hizo.

La novela clásica de detectives obtuvo un público cautivo y a su vez el desdén de la crítica, que considera que este tipo de novelas no da muestras de un excelente empleo de la prosa, además de considerar que el éxito comercial no es compatible con el capital simbólico necesario para pertenecer a las altas esferas literarias.

Ante este panorama, algunos escritores se dieronalatareadedefenderelgénero,entreellos Chesterton y Chandler los cuales sustentaron la defensa,enlasiguienteobservación:paraescribir una buena novela de detectives es necesario una grandosisdecreatividadquepermitaplantearun escenario, personajes y una trama creíbles. Igualmente es de suma importancia un manejo

perfecto de la narrativa para mantener el suspenso, el interés del lector y proveer las pistas necesarias de manera sutil.

Quien considera que escribir novelas policialesesmuyfácil,estáequivocado.Estetipo de relatos implica un enorme esfuerzo narrativo. Es verdad que son muchos los que han escrito novelasdetectivescas,pero pocoshanlogradoel reconocimiento y éxito.

Loslectoresadeptosalmisteriosonasuvez exigentes. Demandan tramas complicadas y que signifiquen un reto a su intelecto. Para esta clase de receptor un relato demasiado obvio y simple es sinónimo de aburrimiento y poca imaginación por parte del autor

El escritor Van Dine redactó una serie de reglasparaescribirunabuenanovelademisterio. Entrelasmásdestacadasseencuentranevitarque el asesino sea el muy utilizado mayordomo o chofer, la intriga amorosa no es compatible con la novela policial, la resolución del crimen debe involucrar métodos realistas y, por último, una regla que considero esencial: el asesino o criminal debe ser un personaje que haya sido una constante dentro del relato, pues es inverosímil sacar un culpable a última hora. Porque el lector se sentiría defraudado.

Al lado del enigma, las pistas y los métodos lógico-deductivos, hay un elemento esencial en lanoveladetectivesca:eldetective.Estepersonaje es el epítome del heroísmo, de la rectitud, de la honestidad e inteligencia.

En los antecedentes históricos de la novela de misterio se han creado detectives inolvidables

delatripa: narrativa y algo más

La novela de detectives tiene un nicho bien establecido: el enigma es la base de todo. Las preguntas ¿cómo?, ¿porqué? y ¿quién fue? Pero llego un momento en que el misterio en sí no fue suficiente para interesar al lector, las atmosferas en la novela detectivesca clásica eran muy artificiales, poco apegadas a lo que sucedía en la sociedad y con la ciudad. La realidad es que la violencia y la corrupción comenzaron a ser frecuentes en dicha sociedad. El público lector estaba ávido de encontrar estos elementos reales en la novela policíaca.

Los escritores vieron en el relato detectivesco la oportunidad perfecta para combinar la incógnita del crimen y al mismo tiempo plasmar la realidad, denunciar los abusos y hacer patente el mundo en el que vivimos. Es en este momento cuando nace la novela negra en manos de escritores como Dashiell Hammett y Raymond Chandler.

La clásica novela detectivesca tiene raíces europeasespecialmentebritánicasyfrancesas. La novelanegraseoriginaenEstadosUnidos,nación joven en comparación con los viejos países europeos.Enelgéneronegro,elmisteriocomparte la importancia con la realidad, con el lenguaje crudo, violento.

La figura del detective también evoluciona dentro de la novela negra. Muchas veces el detectivedebedejardeladolahonestidadyrectitud para poder obtener información o hacer justicia.

delatripa: narrativa y algo más y poseedores de las características antes mencionadas, empezando con Dupin, el detective de Poe, siguiendo con Sherlock Holmes (definitivamente el más famoso) cuyo padre es Conan Doyle, Maigret el detective-policía del belga Simenon, y terminando con dos figuras memorables: Poirot, un detective pulcro, peculiar, que hace gala del uso de sus células grises, Miss Marple, una viejecilla muy curiosa que siempre resuelve el crimen antes que la policía. Estos son creaciones deAgatha Christie.

Atrás quedó esa realidad fantasiosa donde se descubre al asesino, se le entrega a la policía y es sentenciado. Se da paso a este entorno que muchas veces nos supera, un mundo donde se muestra que existen policías corruptos, que puedensercompradosporlacantidadcorrectade dinero,redesdecriminalestanfuertesquenosólo setratadedescubrirquiéncometióelcrimen,sino encontrar la forma en que realmente se haga justicia.

En la novela negra, los finales no son perfectos,apesardequeellectorsabequiéncometió el crimen y por qué. Esto no es sinónimo de que el criminal acabe tras las rejas cumpliendo una sentencia.

Laconstantequepermaneceenlafiguradel detective, es esa soledad perenne donde puede tener aventuras amorosas, pero la estabilidad del noviazgo le está negada. Esta soledad se puede asociar con la realidad de millones de habitantes que conviven en las grandes ciudades y quienes dealgunauotramaneratienenunauradesoledad y desconfianza hacia sus semejantes.

La novela negra tiene como objetivo denunciar y evidenciar la corrupción y violencia que se vive en el día a día. Los escritores de este géneroencontraronquelafórmulaentreunadosis de realidad y misterio era única. Los lectores volvieron a quedar atrapados no sólo por este intento de descubrir al asesino, sino que a su vez también se enfrentaron y descubrieron una parte de la sociedad escondida y olvidada.

Enciertaforma,puededecirsequeelenigma a resolver pasó a un segundo plano, para dar cabida a lo real, al bajo mundo, a las redes de corrupciónqueexistenenmayoromenormedida en los países, especialmente en las grandes ciudades.

Los Estados Unidos es el lugar donde la novela negra surge. Posteriormente Latinoamérica repara en éste género y lo hace suyo a su manera. En México Paco Ignacio Taibo II es

considerado el punto de partida de lo que en América Latina se denominará la novela "neopolicial".

TaiboIIencuentraenlopolicíacoelvehículo perfectoparadenunciarlarealidadmexicana,que, como él mismo acepta, puede resultar aún más sorprendente que la misma ficción. El Distrito Federal es un elemento importante y esencial en sus novelas. Se narran espacios conocidos para quienes habitan esta ciudad, que sirven de referenteparaubicarseenciertopuntodelaciudad de México, una ciudad y país de los ochenta, donde se entremezclan elementos ficticios con historias reales, como las elecciones presidenciales de 1988.

Como sus colegas,Taibo II también crea un detective, pero no es cualquier personaje. Es un detectivealamexicana,muyacordeaunaciudad de México caótica y violenta: tuerto, medio cojo, con un humor negro, lo que le permite sobrevivir en esa jungla de asfalto.

Sus clientes son personas que saben que acudir a la policía es inútil, pues muchas veces las autoridades forman parte de los negocios ilícitos o brindan protección a los criminales a cambio de una buena cantidad de dinero. Héctor BelascoaránShayne,nombredeldetectivecreado por Taibo II, sabe que muchas veces tendrá que violar la ley o incluso hacer justicia de propia mano para que una muerte no quede impune.

Por ejemplo en Regreso a la misma ciudad y bajo la lluvia se dice:

Para ser mudo traía demasiados papeles. Mirenomás-dijoHéctormostrándolealChato loquehacíaunpardeminutoslehabíasacado delabolsa-.JudicialdelestadodeMichoacán, qué a toda madre. Déjeme adivinar…Usted es el que va a acompañar las armas que van a desembarcarenMichoacán.Ustedeselquelas va a capturar. Usted es el que va a decir a la prensa que los cardenistas estaban contrabandeando armas quién sabe con qué oscurosmotivos.No.Esonolovaadecirusted,

eso lo va a decir alguien que fotografíe mejor. Usted sólo va a llevar las armas hasta la costa, yahívaajugarainventarundesembarco.(162)

Taibo II también hace evidente en esta mismanovela, comoeldetectiveseenfrentasolo contra un monstruo de siete cabezas. La realidad esquepodrácapturaraunodeloscriminales,pero siempre habrá alguien más dispuesto a terminar el trabajo, ha sustituir al capturado, un ejemplo es este párrafo de Regreso a la misma ciudad y bajo la lluvia:

"Usted no la puede parar Ya se entregó el papelito a unos periodistas. Aunque no haya armas, se va a hacer el borlote contra los cardenistas. Se los van a joder igual. Unas armas por ahí como quiera aparecen; éstas porque se veían bonitas, y el barco, y todo, y no son armas mexicanas." (163)

Belascoarán es cínico, es un solitario con muchasaventurasamorosasperopocaestabilidad, a su vez es una persona idealista: desea que se haga justicia, que la verdad se descubra y los malos sean detenidos, pero está perfectamente conscientedequeenunpaíscomoMéxicoesmuy difícil lograrlo solamente por la vía legal. Por lo mismo muchas veces tiene que jalar el gatillo, amedrentar al enemigo, amenazarlo o golpearlo.

Las novelas de Taibo II presentan la dura realidadmexicana,peroconironíayhumornegro impresionantes. Así como los mexicanos se ríen delamuerte,conlasnovelasdeTaiboIIsepuede uno reír de cómo el crimen organizado, la violencia, el poder, el dinero y la corrupción son losquemandan,porquequienesposeentodoesto son los que tienen la última palabra.

Un posible recurso es acudir a Belascoarán Shayne,quenocejaráhastaencontraralculpable y hacerlo pagar de una u otra forma, aunque definitivamente esto no significa que vaya a ser bajoelamparodelaley.Belascoaránessinónimo deajustedecuentas,eslaposibilidaddeesclarecer el crimen, de saber por lo menos qué fue lo que paso.

delatripa: narrativa y algo más

Las novelas de Taibo II son un retrato del Distrito Federal, del carácter de los mexicanos, de cómo se dejan llevar por la broma y el humor para sobrevivir en esa realidad poco halagadora.

Sus historias entremezclan la seriedad y la burla.Evidentementeesverdadquelacorrupción está enraizada en todo el sistema de gobierno, en las empresas y en la gente en general. Es duro darse cuenta de la influencia tan grande que el dinero y el poder tienen. Con unos billetes todo se arregla, se consigue cualquier cosa, y un negocio, por más ilegal que sea, puede obtener una fachada respetable a cambio de la suma correcta.

Los relatos de Taibo II tienen pasajes que danunapequeñamuestradelaculturamexicana, como el párrafo en Regreso a la misma ciudad y bajo la lluvia acerca del mariachi:

Hay mariachis completos, medios mariachis, con uniformes negro y botón plateado,con uniforme vulgar; sin uniforme, concorneta,sincorneta,concornetaysordina, contololocheygordoconcontrabajo,contres violines,unodedecoraciónosimplementecon dos.Deamenizarfiestas,deacompañamiento, de lucimiento nomás, con pistolas de verdad o de mentira,con transporte propio o de vil infantería. Pululan por las afueras de una remodelada plaza de Garibaldi atacando a los paseantes. (165)

Sus novelas permiten tomar consciencia de la condiciones en que se vive y al mismo tiempo reírdeestarealidadabsurdaquesuperalaficción. Los mexicanos se burlan de lo que les afecta, de las cosas a las que temen, como la muerte. Es una válvula de escape que les permite hacer más ligera la carga del día a día.

EldetectiveBelascoaránseríedesímismo. Sabe que es la única forma de sobrevivir en una ciudad traicionera como el Distrito Federal. Es un detective diferente, "sui generis "en relación conlospersonajesescritosporEdgarAllanPoeo

AgathaChristie.Obviamenteelespacioenelque vive y se desenvuelve es una gran influencia. El tono burlón, sus malas palabras, la melancolía y la soledad son ingredientes inherentes en el carácter de Belascoarán y también forman parte del ambiente citadino de la ciudad de México.

Sólo en una ciudad donde todos parecieran estarle robando el oxigeno al vecino, es posible conocer a un personaje como el detective. Esta ciudad da origen a las historias descritas en las novelas de Taibo II. La ciudad de México es el espacio ideal para dar vida a un personaje como BelascoaránShayne.

Es como un viejo lobo de mar o prisionero de guerra lleno de cicatrices, pues la vida lo ha marcado, lo ha tenido al borde de la muerte. El detective tiene momentos de duda, de desesperanza, cuando se cuestiona si tiene algún valor la labor que realiza.

Belascoaránsabeperfectamentequeesmuy difícil que la situación cambie en el país.Apesar de todo esto sigue adelante en su empresa. Juega en los mismo términos que los criminales y las autoridades:laleydelmásfuerte,laleydelTalión: ojo por ojo, diente por diente.

El detective es la única esperanza de esta serie de habitantes que no son escuchados por la autoridad. Él sabe que probablemente tendrá que tomar la justicia en sus manos, pero no es eso lo quelepesa.Supesarsedebealafaltadeesperanza de que mejore la sociedad. Belascoarán es un hombre solo contra el mundo.

Probablemente Taibo II también esté cumpliendo con un deber: la denuncia de esta situación corrupta y violenta, dejar en evidencia a las autoridades. Es una cruzada para que el lector se percate del entorno que lo rodea. Es entretener al mismo tiempo que concientiza al receptor

Éste es el sello de la obra deTaibo II, lo que la hace diferente de la novela negra en sí. La

realidad mexicana es muy distinta de la situación quesevivióyseviveenlacunadelgéneronegro: los Estados Unidos.

Sus novelas no son una copia de las obras de Dashiell Hammett o Raymond Chandler. Por el contrario, él toma la novela negra y la sitúa en la ciudad de México, le agrega un detective mexicano con un carácter acorde a la ciudad y una serie de crímenes también a tono con la realidad mexicana.

PacoIgnacioTaiboIIesunescritordesuma importancia para la literatura mexicana. Sus novelas están dirigidas a los mexicanos. Incluso se tiene que tener cierto conocimiento de la geografía defeña para ubicar perfectamente los espacios descritos en su obra.

Sus novelas son una combinación perfecta deinvestigación.Hayuncrimenporresolver,una búsqueda de pistas e indicios pero, al mismo tiempo, habla de una ciudad, de una sociedad envuelta en la corrupción, el abuso de poder y la violencia. Es la ciudad de México de la década de 1980, años en los que ya estaba patente lo putrefactoenlasautoridadesylasociedadmisma.

BelascoaránShayneeseldetectiveadecuado para el Distrito Federal. Sabe sobrevivir, sabe defenderloqueconsiderajustoyporellomuchas veces ha estado a punto de perder la vida.

En conclusión, Belascoarán es el detective a la mexicana, un personaje que encaja perfectamente en esa sociedad de más de veinte millones de habitantes del Distrito Federal. Son necesarios el cinismo y el humor negro para seguirse levantando cada mañana, y Belascoarán Shayne los tiene.

Por último, hay tres aspectos esenciales a puntualizar: 1) El Distrito Federal es un espacio poderoso,especial,insólito.Esesteambienteuna gran influencia para la novela negra de Taibo II. El tránsito, los personajes pintorescos que van desde los vendedores ambulantes, los boleros y abogadosdecuartaestánretratadosensusrelatos, son algunas de las piezas que conforman la maquinariadelaciudaddeMéxico.Estemonstruo que cambia a quien convive y vive en él.

2) El personaje principal: el detective Belascoarán Shayne es un reflejo de la ciudad, la convivencia diaria con la corrupción y abuso de poder,conviertenalpersonajeenunserinsolente, desenfadado, que no se sorprende que criminales y policías se encuentren coludidos. Un detective que sabe que aún llegando al fondo del asunto no significaquesevayaaplicarlaleyyeldelincuente pague. Un personaje que ama y odia su ciudad, unambientedondesepuedenencontraralmismo tiempo los personajes más miserables y los idealistas que desean un cambio en la sociedad.

3)Lanovelanegraeselmedioefectivopara presentar un retrato de lo que pasa en la ciudad de México. Es un género que atrae al lector con el misterio y que al mismo tiempo denuncia la corrupción y la violencia. Los seguidores al género son muchos, por ello existe la posibilidad que al momento de la lectura, el receptor tome consciencia de lo que pasa a su alrededor. Mediante el humor y de una manera cínica, las novelas de Taibo II son una denuncia social al sistemacorruptogubernamental.Elescritortiene la intención de llegar a la conciencia del lector y que éste decida hacer algo, cambiar su realidad.

delatripa: narrativa y algo más

delatripa: narrativa y algo más

El diploma de Margarita

Los gritos insistentes del reloj despertaron a Margarita. Sobresaltada lo buscó en el

suelo, junto a la pata rota de la cama que se apoyaba, desde hace años, en un pedazo de tabique como reumático viejo en su bastón.

Margarita apagó la alarma.

-Ya, ya, cállate ya.Ya te oí, carambas...

Margaritasedirigióalrelojcomoaunviejo conocido. En las niñas de sus ojos dos diminutas imágenes de la veladora prendida en el altar de la virgen de Guadalupe se repetían, una vez más, como los días de Margarita; indiscutibles, interminables...

Lamujer,caladaporelfrío,seenvolvióen una cobija y arrastrando el comienzo de la mañana en los pies, colocó el reloj junto a la veladora.

-Más honor que estar junto a la virgencita nopuedestener...Perolomereces.Sólotienes que portarte bien, como quedamos.

Desde hacía mucho Margarita arrancaba trozos de tiempo a ese pedazo de hojalata; tarea en la que era una experta luego de once hijos que le reclamaban, como pajaritos hambrientos, un bocado de aquellos minutos robados y estirados a fuerza de fe.

El viejo reloj continuó su castrense andar, impasibleyparsimonioso,recordándoleacada segundo, que no era ella quien marcaba el ritmo de los pasos. Todo lo contrario, Margarita obedecía órdenes que no admitían respingosnirezongos;lasórdenesdeltiempo quenoregalatreguas.Sinembargo,Margarita logró establecer un pacto piadoso con su verdugo. Se comprometió a no enterrarlo en-

Angélica Santa Olaya

tre la milpa, salvándolo de una muerte lenta y herrumbrosa,acambiodequeélalargara,con lentitudpremeditada,ladistanciarecorridaen cada tic-tac para que Margarita pudiera atender a todos y cada uno de los pollos famélicosquepiabanasualrededor. Detodos el menos escandaloso, pero más demandante era Maricela, de cinco años, quien no podía moverse por la parálisis cerebral que la acompañaba desde que nació. Esta enfermedad es un animal enfurecido que no suelta a su presa, decía Margarita, cuando hablaba del mal que carcomía la vida de su hija, mientras anudaba el viejo rebozo que utilizaba para llevarla cargada a todas partes. Incluso a Tempan, que estaba a cuatro horas del rancho.

Losresquiciosdelaviejapuertademadera aún no habían sido violados por la luz de la mañana. En el cuartucho de Margarita sólo las flamas del altar montaban guardia. Los niños dormían apiñados en catres reumáticos rodeados de trebejos. Para ellos la alarma del relojeraunmurmullolejanoqueseintroducía de pronto en la película de sus sueños y que se alejaba con lentitud ignorado por el guardián del descanso. Ese vigilante en duermevela que conocía las diarias intromisionesdelviejorelojyquesiempre,alamisma hora, cumplía la misma función; desoír sus llamadas a la vigilia.

Margarita tomó la veladora y la llevó a la mesa.Conlafaltadesueñocolgándoledelos ojos como dos cortinas desgastadas y percudidas, puso a hervir el agua para el café y salió a echar unos granos a las gallinas.

delatripa: narrativa y algo más

-Buenos días, comadre.

-Buenos días, comadrita. ¿Cómo amaneció?

-Posaquí,comadre,comosiempre,yasabe. Tenemosqueganarlealsolpa'quenosalcance el día.

-No nos queda di otra.

-Oiga comadre, quero pedirle un favor

-Como no comadre, si se puede, como no.

-Quero pedirle que pasado mañana le eche un ojito a mis chamacos. Tengo qu'ir a Tempan.

-¿Y eso?

-Voy a ver si encuentro al gobierno pa' que mi ayude a comprarle una silla con ruedas a la Chela. El otro día pasaron en la tele un anuncio de algo que se llama los Derechos de la mujer. Dijeron que si uno pide ayuda, la Patria se la da. Y yo pensé, pos si nomás se trata d'eso tengo la boca pa' pedir ayuda que hartafaltamihace...yaveusté…Yosoymujer y mi Chela igual… Quero ver si el Gobierno nos ayuda un poquito... Los gastos están rejuertes y mi espalda está cada vez pior con laChela…noesquemeduelatrairmicapullo a cuestas, pero el cuerpo cada vez me da pa' menos…YposyotambiénsoyhijadelaPatria ¿no?, y la Chela también...

-Pos estaría bueno comadre, ya va siendo hora que descanse de cargar a esa muchacha. Nomás la veo como se le tuerce el lomo poco a poquito por llevar a su chamaca de un lado a otro… igualito que una vara de maíz cargando una mazorca de huitlacoche que sigueapeñuscadaalacaña.¡Aycomadre,dispense usté la comparación!

-No se apure comadre, es la verdá… mi Chela es como una mazorquita enferma pero

pa' mi vale igual que todas las demás. Si Dios melamandó,pospegadaamipechoestará… pero con tantita suerte y hasta mi ayudan pa' que la lleve al dotor y me la miren. Qué tal que se me va curando comadre, ¿s'imagina?

-Diosmediantecomadre.Vayaustéallásin pendiente,yolosmiraréenloqueustévuelve.

-Graciascomadre,esperonodilatarmemás de la cuenta. Mañana nos arreglamos.

Margaritasemetióalcuartuchoalescuchar el burbujear sordo del agua en el pocillo y tomó la bolsa del mandado. Cuando puso un pie fuera del límite de la puerta para ir al tendejónporunosbolillos,sepreguntócuántas veces había realizado el mismo movimiento a lo largo de su vida. No pudo responderse. Muchos pasos quedaban aún por andar. Pasó una mano por su frente para espantar las preguntas y siguió caminando.

Se consoló en el recuerdo del viaje del día siguiente,aTempan,pidiendoaDiosparaque el día pasara pronto. Incluso estuvo a punto de hablar con su reloj para suspender el pacto de los pasos largos por un día.

- No sea que se me vaya a malacostumbrar y luego cómo lo paro.

Se rió consigo misma de su pensamiento y alejó de su cabeza a las alebrestadas aves del desasosiego. Por primera vez en mucho tiempo Margarita no se sentía sola. Compró la veladora más grande que encontró en el estanquillo para demostrarle a la virgen de Guadalupe que del tamaño de la veladora era su fe. Hincada frente al altar le pidió a la imagen que la ayudara a decir las palabras correctascuandoestuvierafrentealGobierno. Margarita se acordó de que tuvo que salirse de la escuela cuando iba en segundo año para ayudarasembrarlamilpa.Nohabíaterminado de aprender a leer y a escribir y eso la hacía

sentirse insegura ante un acontecimiento de ese tamaño. Iba a hablar, nada más y nada menos, que con el Gobierno.

-¡Virgencita, ayúdame a incontrar al Gobierno! ¡Sólo él puede ayudarme a curar a m'hija!¡Ayúdameahablarbien! Túsabesque amínomepesacargarconmiChelapa'todos lados, pero también tengo que atender a los demás hijos y mi espalda a veces parece que quere quebrarse como dice mi comadre. Si yomequebro,¿quenlosvaavervirgencita...?, yavesqueelJosésemefuehacecincoañosy estoy sola con tu ayuda nomás. Pos si esa jue tu voluntá yo no me quejo, sólo te pido que me ayudes a que la Chela se mejore y pa'eso hay que tener dinero. ¡Acompáñanos en este viaje virgencita y te prometo la veladora más grandota que mi'ncuentre en Tempan!

Al día siguiente, con los ojos tan relumbrantes como el barniz de su jarro de café,Margaritasaliódesucasuchaconrumbo a Tempan, con los dientes saliéndosele de la boca y la Chela arrebujada en las hilachas del rebozocomounamariposaresecaqueseniega a dejar el capullo.

-PosyonosésielGobiernoesalto,chaparro, gordo o flaco, pero güeno tiene que ser. ¡Cómo no, si es el señor de la Patria...! Y la Patriaesgüena,dicen,porqueescomonuestra mamá… ¿Verdá mi Chela?

Platicaba con Chela para aligerarse el camino. La niña la miraba con los ojos muy abiertos sintiendo, a través del rebozo, los latidos llenos de esperanza en el corazón de sumadre. Losmaizalesyloscamposdefrijol le parecieron a Margarita más pródigos que nunca.Elverdor,anchoyhúmedo,leinundaba las ganas y le atizaba los pasos.

Luego de cuatro horas de caminata y un tramo recorrido en autobús, llegó al Palacio

Municipal porque alguien le dijo que ahí estabaelGobierno. Alfinaldeloscuropasillo de aquel edificio, carcomido por una viruela amarillenta, encontró una ventanita, mugrosa y manoseada, con tres barrotes medio oxidados que la separaban de una mujer que tejíaalotroladosinpercatarsedesupresencia.

- Güenos días.

-¿Qué es lo que quiere?

Lerespondiólamujerfrunciendoelceñoy sin dejar de tejer.

-Quero ver al Gobierno.

-¿Peroaquiéndelgobiernoquierever?¿A qué persona?

Y seguía tejiendo…

-Pos…nosé...alGobierno. Alquesaleen la tele y habla de los Derechos de la mujer.

Lamujer,porfin,levantólamiradaysonrió burlona.

-¿Para qué lo quiere?

-Pa' que me ayude con m'hija...

Margaritaseseparóunpocodelaventanilla paramostraraMaricela. Laniñaobservóala empleada desde el refugio de los pechos de su madre. La mujer, ojos alargados de gato calculandoelarañazo,reconcentróuninstante la mirada escudriñando a Maricela con morbosa curiosidad.

-En la tele dijo que nos puede ayudar.

Insistió Margarita.

-Hoy no hay nadie en las oficinas porque es viernes, fin de semana, y ya es la una de la tarde. Venga la semana que entra.

Margarita, decepcionada, volvió a su rancho.

delatripa: narrativa y algo más

-¿QuépasócomadreincontróalGobierno?

- Tóvia no comadre, tengo qu'ir la semana que viene.

- No se me desavalorine comadre. Va a ver como pa' la próxima tiene más suerte.

Margarita regresó a la semana siguiente y tampoco encontró al Gobierno porque "era puente". Luego fueron vacaciones. Después el Gobierno "tuvo un imprevisto". Margarita fue tantas veces a Tempan que ya ni se acordaba cuántas habían sido.

El frijol y los maizales del camino, daban señas de querer malograrse en cada nuevo viaje que hacía; cada vez más amarillos y resecos. Escuchó decir a un paisano que iba en el autobús que había caído una plaga en los cultivos. Sin proponérselo, el entusiasmo se convirtió en buen ánimo a secas y el buen ánimo en una cansada tristeza que se iba deshojando como las hojas del maizal.

-Señorita, l'único que quero es que el Gobierno mi ayude con mi Chela. Nomás eso… ¡Ayúdeme pa' ver al Gobierno por favor! Ya no tengo más centavos pa' venir otra güelta.

-A ver... -dijo la mujer del tejido con las manos llenas de fastidio- déjeme sus datos para dárselos al licenciado a ver si pueden ayudarla. Véngase dentro de quince días. Va a haber un evento y casi segurito la recibe.

Lebrillaronlosojillosdetrásdelasgafasy le entregó un papelito garabateado con algunos números. Los ojos de Margarita se alegraron luego de varios días de incertidumbre. El regreso al rancho con su preciosa carga le pareció más ligero que los otros. En el camino iba contenta pensando que tendría quevenderunaodosgallinasparaelpróximo pasaje a Tempan. Cuando llegó al rancho

corrió a buscar a su comadre Juana para contarlequeelGobiernoeralicenciadoytenía una cita con él.

-¡Ese trabajo se oye muy principal comadre! ¡Ora sí segurito mi ayudan! Va a ver...

Las manecillas del reloj desde el altar dieronlavueltacompletaalacarátuladieciséis veces.Margaritadesgranabaelotessentadaen una silla de madera medio desvencijada cuando recibió un sobre tan blanco como las ilusionesqueasomaronporlasrendijasdesus ojos al ver el sello del Gobierno. El mismo dibujoquevioenlatelesemanasatrás.Corrió altendejónapedirlealhijodedoñaLupeque le leyera la carta.

El papel decía que debía ir nuevamente al edificio que ya conocía tan bien a fuerza de tanta ida. Decía también que le iban a pagar el pasaje. Su corazón latió apresuradamente y en su estómago apareció un hueco que Margarita decidió llenar otra vez con esperanza, con mucha esperanza. Por fin los largos y pesados viajes que había realizado tendrían su recompensa.

A esas alturas, sólo Dios sabía de su inmensocansancioydelanubedemosquitos que bullía dentro de su cabeza cuando se acordaba de los hijos que había tenido que dejar solos mientras ella iba a Tempan con Maricela.

-¿A dónde va con tanta prisa comadre?

-Voy a comprarle unas flores a mi virgen deGuadalupecomadre. ¡Yamimandóllamar el Gobierno!

-¿Deverascomadre?¡BenditoseaelSeñor!

MargaritavistióaMaricelaconlomejorcito que tenía y durante el trayecto no dejó de pensar en cómo le iba a dar las gracias al

Gobierno. No encontraba las palabras que pudieran expresar el enorme agradecimiento y esa sensación de jolgorio que la invadían como si estuviera borracha, pero nomás de alegría.

Maricela, sintiendo la algarabía de su madre, a fuerza de tener su corazón casi siempre pegado al de ella, sonreía intuyendo ensunubedeaparenteinconscienciaquealgo bueno sucedía. Sus ojos, normalmente quietos, se desplazaban de un punto al otro del rostro de la madre intentando encontrar más pistas en torno a su sonrisa. Finalmente, luego de mucho darle vueltas al asunto, Margarita concluyó que solo diría "Gracias" desde el fondo de su corazón.

-Virgencita, sólo te pido que me quites del cogote esta bola de pelos que traigo aquí atoradayquenomidejapasartragodesaliva con tanta emoción. Desatórame la voz virgencita pa' poder decir nomás esa palabra sin parecer una calandria enferma.

Cuando llegaron a Tempan había mucha gente en la plaza y un montón de sillas alrededorcomocuandosearmabalafiestaen el rancho y todo el pueblo se reunía en la cancha de basquetbol de la escuela, el único lugar con piso de cemento. En el centro, y al frente del edificio de Gobierno, habían colocado un templete con una mesa larga y un micrófono.

Margarita pensó que le hubiera gustado no tener tanta gente de testigo. No era necesario que todos se enteraran. Era cierto que se trataba de algo muy importante y que tenía ganasdegritaratodoelmundoqueMaricela, por fin, iba a ser atendida por los doctores, pero no era para tanto.

Lamujerdeltejidoylasgafas,peinadacon un chongo y oliendo a perfume, se acercó a

ella y la llevó a sentar en una silla de metal frío y gris frente al templete. Poco a poco empezó a llegar más gente. Junto a ella se sentaron otras mujeres que venían de otros pueblos y rancherías. Luego de un largo rato llegaron otras personas a quienes Margarita y suscompañerasdefilasólopodíanverlesbien los pies al pasar frente al micrófono para acomodarse detrás de las sillas.

-¿Cuál de todas esas personas será el Gobierno?

Se preguntó Margarita impaciente por conocer el rostro de su benefactor.

Una de las mujeres a su lado le dijo, señalandoalfrente,queunadeesaspersonas, detrás de la mesa larga, era la esposa del gobernador. Margarita se levantó de la silla y la miró casi con la boca abierta y sin poder ocultar su asombro.

-¡Así merito me figuraba que era la Patria! ¡Bien catrina!

Pensó para sus adentros con una sonrisa como las que adornaban su rostro cuando algún guiso le salía muy sabroso y se lo chuleaban la comadre y los hijos. Se entristeció un poco porque no iba a conocer al Gobierno, pero se consoló pensando que, de cualquier manera, su señora esposa había sido muy amable al ir, personalmente, a darle la ayuda que tanto había esperado y, sobre todo, necesitado. Su corazón dio un vuelco cuandocayóenlacuentadeloimportanteque era ese día. Sus ojos repasaron su propio vestido opaco de tanto lavarlo y por un momento sintió vergüenza de su atuendo sencillo y pobre.

-¡Pero le voy a tráir unos tamalitos!

Pensóemocionadamirandoalaesposadel gobernador con el agradecimiento escapán-

delatripa: narrativa y algo más

dole prematuramente por las pupilas y los dientes blancos mostrándose al sol.

La ceremonia comenzó. Un hombre de traje, representante de los Derechos de la mujer, habló por el micrófono para que todos supieranquehabíamuchasmujeresahíporque era el día internacional de la mujer. Durante casi una hora le dio vueltas al tema de las mujeres y sus necesidades para finalizar diciendo que había que terminar con "la feminización de la violencia, la pobreza y la antidemocrática discriminación de la mujer".

-Poslodelapobrezasiloentiendo,ymuy requetebién… lo demás qu'en sabe qué será, pero suena muy bonito.

PensóMargaritamientrasnoperdíadevista ninguno de los movimientos y palabras del hombre al micrófono. Sus manos, coronadas por blanquísimos puños, iban y venían arriba y abajo pintando rebuscadas líneas en el aire como invisibles y falsas palomas de la paz. Margaritachorreabagruesasdegotasdesudor que ella recogía con un paliacate de su propia frente y de la de Maricela que, hambrienta y asoleada,empezabaaretorcerseensucapullo de tela raída.

Una a una, fueron pasando a hablar ante el micrófono las personas que se encontraban sentadas arriba. Una señora, con peinado de nidovacío,dijoqueveníadelaSecretaríapara la Mujer. Margarita se alegró al escuchar aquello pues sonaba como algo bueno.

-Una mujer entiende a otra mujer.

Se confirmó a sí misma, asintiendo con la cabeza y sonriendo a la mujer que dirigía sus alteradas palabras al eucalipto que indicaba el final de la plaza. El sol continuaba punzando la coronilla de Margarita que se colocó el paliacate en la cabeza y tapó con su

manoderechalosojosdeMaricela. Lastripas deambas,madreehija,comenzabanarepelar pidiendo alimento.

- Ya merito Chela, ya merito... aguántate otro ratito nomás…

Fueron llamando a algunas de las mujeres que se encontraban junto a ella para darles la manoyunpapel. Eltiempopasabalentocomo sombra por encima de las cabezas relamidas de sudor. Margarita hubiera querido conocer el reloj del Gobierno para hacer trato con él, peroalrevés,paraqueeltiemposeapresurara porqueMaricelayellaseencontrabanalborde del desmayo por la falta de agua y alimento. La sed llevó sus ojos a las botellas de agua sobre la mesa de arriba y la desesperación amenazó con invadir su calma. Desvió la mirada hacia el orador en turno para distraer su lengua seca.

De pronto, escuchó su nombre a través de los altavoces: Margarita Miguel Manuel.

-¡Soy yo virgencita!

Nolopodíacreer. Las piernasletemblaron al levantarse de la silla, no sabía si por la emoción o por el entumecimiento. Maricela dejó de retorcerse en el rebozo. Margarita comenzóasubirlasescalerasconunaligereza mayor de la que su pesada carga parecía permitirleaunquelaexcitaciónhacíaquecada escalón le pareciera como si fueran diez. Sus pies, ardorosos e hinchados, avanzaron, uno auno,porlospolvorientospedazosdemadera que la separaban del sueño hecho realidad. Escuchó a su alrededor un ruido que le llenó la cabeza de un rumor como de árboles movidos por un fuerte ventarrón. Eran aplausos. Los que estaban arriba también aplaudían sonrientes mirándola acercarse a ellos.

-¿Por qué aplauden?

PensóMargaritasinencontrarelmotivode la fanfarria. Le pareció estar dentro de un sueño, de ese sueño que todas las mañanas tenía que interrumpir para comenzar sus arduas labores. Pero este sueño era diferente porque tendría un buen despertar. Por un momento dudó, incluso, que le estuviera sucediendoaellaysedetuvouninstantepara comprobar que no estaba dormida. Miró a la gentequeleaplaudíadesdearribacomosiella fueraalguienmuyimportanteynopudoevitar unapizcadevanidadensusonrisatorcidapor la vergüenza. Cuando por fin llegó a la mesa de los sonrientes y entusiastas batidores de palmas, la esposa del gobernador se levantó ceremoniosa y, con una sonrisa más grande aún que las anteriores, le entregó una figura doradaqueaMargaritalerecordóaqueltrofeo queunavezledieronenelranchoasuahijado Pedro por jugar al fútbol y un fólder amarillo que tomó con manos temblorosas. No pudo articularunasolapalabraporlaemoción.Toda la plaza volvió a aplaudir entusiasmada. Margarita sólo atinó a levantar, temblorosamente, la comisura izquierda de la boca. Maricelatambiénsonreíaymirabaasumadre.

Cuando se encontró de nuevo en la parte baja del templete, Margarita abrió las hojas de cartón amarillo y encontró un papel con letras grandes en color negro y algunos garabatos ininteligibles. Cuando intentaba regresar a su silla se le acercó una mujer y la jaló por el brazo.

-A ver, póngase aquí y sonría, le voy a tomar una foto.

-¿Pa' qué?

-¿Cómo pa' qué? ¡Para que salga en el periódico mujer! ¡Va a ser famosa!

Le dijo la mujer sin dejarla responder.

-¡Click!

Maricela se retuerce por el jaleo.

-Oiga...¿mepodríahacerfavordelérmequé dice aquí?

PreguntóMargaritaalamujerdelacámara con la mirada doblada por la pena que le causaba confesar que no sabía leer. La fotógrafa tomó el fólder y lo abrió.

-Dice Di-plo-ma.

-¿Y qué más?

-Su nombre, Margarita Miguel Manuel.

-¿Y qué más?

-Pues nomás eso.

-¿Nomás? ¿No dice otra cosa...?

-¿Cómo qué?

-Pos no sé... ayuda... dinero... doitor…

-No, sólo tiene dos firmas, muy importantes, una es del gobernador… -la mujer se detiene para subrayar la importancia de las rúbricas y mira a Margarita que sólo asiente conlacabeza-y,además,elsellodelgobierno del estado.

Margaritanosabequémásdecir,opedir…

-Compre mañana el periódico. Va usté a salir en primera plana.

Margarita llegó al rancho como llegar a un velorio. Los niños ya estaban dormidos. Su comadre Juana había preparado unos frijoles refritos con queso y café para recibirla. Cuando Juana vio los pies de Margarita, arrastrándose como cuando se levantaba en lasmañanasparaponerelaguaenelpocilloa calentar, supo que no había buenas noticias.

-¿Qué pasó comadre? ¿Cómo le jué? ¿Conoció al Gobierno?, ¿La ayudó…?

delatripa: narrativa y algo más

Margarita se desatoró el rebozo y puso a Maricela en la cama, con lentos y pausados movimientos, junto con la estatuilla y el diploma, acomodándolos en una línea horizontal. Los miró a los tres por unos segundos como si fueran una misma cosa y luego se quedóinmóvilconlamiradaperdidaenalguna grieta de la pared. Finalmente, lanzó un suspiro que se confundió con el vaho del café que, haciendo caracolillos en el aire, salió al frío del patio por la ventanuca abierta. El humo, afuera, se diluyó con el sereno y desapareció.

-Nocomadre. Niloconocíymásbiencreo que ni lo incontré... Crío que nosotros nunca vamos a conocerlo comadre... Eso sí lo tengo muy clarito. Eso me pasa por ver la tele en vez de trabajar. Lo que sí, mañana empiezo a vender tamales pa' comprarme otro rebozo porque,mirenomás… esteya'stáenlaspuras hebras de tanto trajín.

Dijo Margarita tomando el rebozo que todavía medio cubría a la Chela, lo dobló y lo depositó nuevamente en la cama con mucho cuidado...

- Comadre... gracias...

-Denadacomadre…Pero,¿novaacomer algo? Mire, le hice unos frijolitos refritos…

-Nocomadre…Deveritas…Selojuroque no tengo hambre…

Suvozfueapenasaudible. Sesentódepositando su cansancio en el filo de la cama con gran lentitud. Como si estuviera dormida con los ojos abiertos mirando hacia ningún lado. Tomóelfolderamarilloyloaventópordebajo de la cama para que calentara el sueño de las arañas tejido con los mismos frágiles y polvorientoshilosqueelsuyo.Selevantócon loshombrosvencidos.Tomólafiguradepasta

dorada y acompañó a su comadre Juana a la puerta.

-DeleestoamiahijadoPedro. Dígaleque se lo manda el Gobierno por ser tan güeno metiendo goles. Y gracias otra vez…

Dijo con tristeza poniendo la estatuilla en lasmanosdesucomadre. Lapuertasequejó, queda y largamente, al cerrarse tras los pasos silenciosos de Juana.

Margaritaregresóalrincóndondedormían sushijos,acomodólacobijasobreelmuégano de chiquillos y comenzó a desabotonar el arrugado capullo de Maricela que, al sentirse liberada de la tela, estiró sus brazos hacia ella y la miró con sus grandes ojos de mariposa a la espera del primer viento favorable.

Los frijoles se enfriaban sobre la mesa. Margarita los miró con indiferencia y tomó entre sus manos, casi con cariño, el reloj que laesperabaenelaltar. Loacaricióbrevemente con la yema del pulgar derecho y echó los hombros hacia atrás, como queriendo desafanarse de algún peso invisible, mientras poníaatiempolaalarmaparaeldíasiguiente.

El reloj, conmovido, acalló el ritmo de su andar para convertirlo en un acompasado murmulloquearrullara,unavezmás,elsueño de Margarita y sus chiquillos hasta que, otra vez, los capullos en las ramas intentaran desplegar las alas en medio de la oscuridad. Tic, tac… Tic, tac… Tic, tac…

Cualquier semejanza con la vida real es mera coincidencia.

delatripa: narrativa y algo más

Estudios sobre narrativa canaria

de

El Hadji Amadou Ndoye

Hace unos meses suscitó diversos comentarios en la prensa canaria el libro

delintelectualsenegalésAmadouNdoye.Leyendo algunas reseñas se incide en lo insólito de este estudio exhaustivo, llevado a cabo durante los últimos lustros de forma constante por el recientemente doctorado por su tesis "La novela canaria de los 70".

Hasidolapacientelabordeestemetódicoy cartesiano analista certero de nuestra realidad cultural la que arroja este fruto maduro, cuya edición aparece ya agotada a los pocos meses de su eclosión.

Construir unos universales a partir de experiencias y aportaciones singulares y concretas comoparecenserlasnovelasdecuatronarradores canarios, para la narrativa en particular y para la literatura en general, no es tarea fácil. Pero en la humildad,AmadouNdoyehaencontradolallave para abrir las herrumbrosas galgas del viejo caseróndenuestraidentidad.Enelamor,también, porunatierraqueélhahechosuya,yquesientey conoce en la voz de nuestros poetas. Hablar a travésdelhombreinsular,delhombresojuzgado, amordazado y extranjero de su propia realidad, es este y no otro el mensaje identitario de la obra de este autor.

En el trabajo periodístico de José Almeida "Galería de canariólogos", se vierten opiniones que alentaron o desencadenaron el interés de nuestro autor por la narrativa canaria: "Canarias ha sido tradicionalmente una tierra de poetas, de muy buenos poetas como Tomás Morales, Saulo Torón,AlonsoQuesada,AgustínMillaresSall,etc. aunqueyocreoquetambiénhahabidonarradores

que no se han valorado lo suficiente..." y cita a Ángel Guerra, Benito Pérez Armas o Francisco Pimentel. Añade unas causas a esa prevalencia del discurso poético: "no se valoraba bastante la narrativa incluso por motivos editoriales ya que era más fácil editar una colección de poemas que editar una novela..."

CifraAmadou en los años 70 la fecha en la que comienza a pensarse en una buena narrativa en las islas. Y añade que hay que estar atentos porque pueden surgir textos interesantes.

El presente libro cuando aún era proyecto editorial es analizado por Ndoye así: "me he ceñido a un aspecto concreto de cuatro novelas de cuatro escritores canarios. Por ejemplo, me he interesado por la conducta del canario en la reveladora novela "Nos dejaron el Muerto" de Víctor Ramírez; por los símbolos y la poesía que aparecen en "El Camarote de la Memoria" de Agustín Díaz Pacheco; y por el tema del DescubrimientoenlanoveladeJ.J.ArmasMarcelo"Las Naves Quemadas"; por último me he detenido en "Faycán", de Víctor Doreste, que a mi modo de verencierraleccionesquetodavíasonválidaspara las Canarias en los años 90, aunque este texto se haya escrito en 1944..." En estas líneas muestra nuestro autor la futura estructura que tomará el libro actual.

Amadou Ndoye investido con collares de guijarros de interminables mareas del Oeste africano, intérprete de cábalas y teorías del número, se propone empujarnos al exorcismo de nuestrasengastadaslimitacionescaracterológicas insulanas.Yasí cada obra de la narrativa canaria deberá ser vista como un punto de ruptura para

dejar atrás un pasado e inventar en él un futuro imaginario,unaconfiguraciónsustraídaaltiempo.

El narrador canario y sus fantasmas

Canariedad y Negritud ha titulado Alfonso O´Shanahan la introducción a estos estudios. Se pregunta que "por qué un africano senegalés, por más señas, se interesa específicamente por esos años,(los70)yocreoqueesporqueenesetiempo emergelaconcienciaafricanadelasislasdemano de dos procesos descolonizadores (Guinea Ecuatorial y Sáhara Occidental, cita) al tiempo que sucede una explosión de libertad popular ("El Manifiesto de El Hierro" está datado en 1976). Nosotros añadiremos que fueron los años de una auténtica "insurrección popular". Creo que se pedía "más amor y menos colonialismo" en una acertada frase del pintor tinerfeño Maximiliano Benítez.

AmadouNdoye,citaO´Shanahan,es"nueva estirpedehispanistas,surgidoalcalordelDepartamento de Español de la Universidad de Dakar, enelqueuncanario,JuanManuelGonzálezMartel,dejósusemilla,supongoquetrasmaravillarse (...) hacia el Sur, existe un universo fabuloso que ignoramos, el mundo del África Negra".

Así erige a Ndoye y Martel en hitos de una relación que en el pasado tuvo otro prodigioso encuentro, el que se produjo entre nuestro poeta García Cabrera y Leopold Shengor. Termina nuestro prologuista con un dibujo de la inconveniencia de la ignorancia mutua entre dos pueblos que comparten común espacio en la fachada atlántica. Destacando la audacia que supone el pasodadoporAmadousentándoseentrenosotros para ocupar un sitio vacío.

"Faycán" (Víctor Doreste), "El camarote de la memoria" (Agustín Díaz Pacheco), "Nos dejaron el muerto" (Víctor Ramírez) y "Las naves quemadas" (J. J. Marcelo Armas).

Siguiendo esta vertebración que ha escogido Amadou para su libro crítico, el autor ha hecho aparecertraslosencabezadoscapitularesunaserie decitasconductoras.Faulkner,LeandroPerdomo anteceden a lo queAmadou titula "El viaje de retorno al rompecabezas de la identidad canaria". Del amplio estudio señalaré los fragmentos que más han llamado mi atención. Así la novela "Faycán"constituyeunalegatoafavordevalores y viejas tradiciones, cuya lengua acogedora de topónimos hace de faro para otear la noche del tiempo.

Los protagonistas de "Faycán" son perros que viven en cuevas como lo hicieron los guancheshastadespuésdelaconquista.Elretrato corresponde al canario sojuzgado y desposeído, socializado e imbuido de una conciencia de esclavo. Y "cuyas cicatrices manan más sangre quelasmismasllagas".VíctorDoresteseremonta alorigentapándosebajoelvelodelcuento.Noes azar,cadamáscaradesempeñasupapeldentrode su estrategia.

Sobrelasfuentesdeoralidadenlasquebebe Doreste, Amadou reflexiona sobre las Canarias deposguerra,dondeseperpetuabanlasrelaciones de oralidad, en un esquema campesino, entre miembros de los grupos sociales. Confirma con ello que algunas de estas características de estilo tienen su origen en tradiciones orales y se han perpetuadoconlostiempos.Lapreocupacióndel Victor Doreste cuentista le parece muy africana, seguir una cronología de aconteceres.

Elquecuentadespliegavariospapeles:dramaturgo,cuentista,actor;dice:Laverdaddelarte

adaptalassituacionesalasmetasquesehafijado. Los perros se humanizan casi como en aquella copla: ¡que calle el hombre, que ladre el perro!

Aprovecha así para disertar un poco sobre el cuento, afirmando que el cuento es un sociograma que permite la participación de la Asamblea en su conjunto y no sólo el protagonismo de los actores-autores. Sobre la duplicidad psicológica del canario entre dos personalidades distintas y a veces opuestas.

Laactualidadyvigenciadeltextoesevidenciada por Amadou cuando nos habla de la autenticidad y valores de autores como Víctor Doreste. Resalta la conciencia contestataria, su lucha contra la fatalidad, denuedo por estar cerca de las fuentes orales remotas, su conciencia de la época.ContraeldesprecioculturallaNóminanos parece enormemente positiva en tiempos como éstos en que se piden cribas a troche moche para los nuevos narradores isleños.

"El Camarote de la Memoria" de Agustín Díaz Pacheco aparece con el subtítulo de "La historia simbólica y poética de varias marginaciones" y allí nos son desvelados los más insospechados secretos sobre esta novela borondina"elcanarioluchacontraunosenemigos invisibles,peligrososeinasiblescuantoqueviven, respiran, duermen con su dueño (...)" como decía Galdós el hombre lleva dentro de sí mismo su propioinfierno.Contradiccioneseinestabilidades le sacuden y zarandean a despecho suyo para mantenerlo fuera del ser. Así el capitán Montelongo,enlanovelanodispondrádehombressino de "una colección de incertidumbres, un nudo de desconfianzas". Así el isleño como aquel protagonista,surgirádelaoscuridadyavanzarásigiloso sorprendiendo a sus interlocutores cuando sale a escena. A lo largo del relato se expone que las sombras,tinieblas,surgenalcompásdelalectura. Todo lleva la marca de la nocturnidad. La noche encubre lo que uno esconde hasta a sí mismo. Hijosdelanoche,citaAmadou,losprotagonistas

delatripa: narrativa y algo más 48

caminan,seinternanenlosmeandrosyrecovecos de su aventura, aparentemente indolentes, sin importarles demasiado la utilidad de sus fines; pero hay otra razón, el capitán pensará que: "lo importanteenestatravesíahasidoiralencuentro deltemporalycapturarlaluz.Laalturayelabismo delaluz".Hapensadoenelviajedelinsularhacia el mundo de los "hombres libres". Los procedimientos poéticos de que se vale Díaz Pacheco sonapreciadosporAmadoucomoreminiscencias de la originalidad surrealista canaria. La poesía hace que los personajes se incorporen a una realidad cósmica donde fluye una corriente de animismo que permitirá proyectarnos al tiempo mítico para resucitar la unidad perdida entre historia, personajes, fuerzas exteriores e impulsiones íntimas. Hombre e isla abrigan el mismo sentimiento.

Ser de la penumbra que anuncia tensiones y contradicciones que sacuden a la sociedad, el novelista, el intelectual, tiene un ingrato e incómodo papel: destruir mitos tranquilizadores y falsos. "Cuando el presente contempla ignoranciayenajenación,nosepuedepintarlarealidad comolohacenlosvendedoresdesol,pisosyplayas".Servilismos,miedos,cobardías.Enquistados enelétnicoinconscientecolectivosehacenconsecuenciasenlocotidiano.SumisiónyTransgresión. "Entre el Miedo y la Valentía" titula Amadou su análisis de Víctor Ramírez: es difícil escapar del condicionamiento del miedo. El narrador alerta de que en las llamadas islas afortunadas "no todo el monte es orégano y que las apariencias engañan". Ndoye hace patente que el narrador mantiene bajo su tónica de humor los deseos de superación y justicia y por ello apoya toda iniciativa a "sacudir la modorra" de sus conciudadanos.Luegodestacará,superadalacatarsisde la intimidad, las conductas sorpresivas, el aflojamiento de los lazos a la norma y la disciplina social. Añadiendo como conclusión que en el getho de la marginalidad se descubre a unos hombres atenazados por férreos correajes de una

sociedad opresiva. Sombras de la platónica caverna que ante la luz respirarán salud e inocencia al descubrirse a sí mismos.

La obra de Juan JesúsArmas Marcelo "Las Naves Quemadas" mantiene el subtítulo "Una aproximación singular al tema del descubrimiento" ya que la obra es vista por nuestro autor como una lectura parótica de la historia. Novela de trastrueques y desajustes cronológicos, personajesentrecruzados.Asídestacaentresusrasgos: la parodia, la irrisión y la distancia irónica.

Tratando de acercarse aun más a J.J.Armas Marcelo,Amadou Ndoye menciona los orígenes acomodados de antiguos terratenientes antepasados deArmas Marcelo. Su paso por el colegio de los jesuitas y su visión del colegio como un lugardetortura,como"unaprensalaminadorade cerebros de donde ha brotado la anemia moral e intelectual del archipiélago". Así hace notar que Armas Marcelo ve en su propio destino "lo que sufrieronunoscanarioscélebresquetuvieronque

aguantarantesdeéllahostilidadeincomprensión deenvidiososypaisanos".Segúnelescritorreina una mentalidad cainista en la isla donde el que destaca recibe dentelladas. Si hay que destacar algo especial en la literatura de este escritor será: su ludismo literario, el ingenio verbal y la vasta cultura.

El libro de Ndoye, como hemos enunciado, responde a un objetivo didáctico. Dar a conocer una visión de nuestra narrativa desde la perspectiva más objetiva posible desde el vecino país de Senegal.Yaunque el mundo de las ideas tiene menos fronteras que las físicas, o incluso las del idioma,nosotrosnosquedaremosconelvalorque supone para las letras canarias esta aportación ensayística desde el extranjero, que sin duda ayudará a que el fenómeno de la creación y el estudio crítico de nuestros autores aparezca en el tono de calidad y dignidad que Amadou Ndoye haencontradoenlaliteraturacanariaalaqueestos textos pertenecen.

La portada de un libro: la portada de un ser.

Uno asiste a la librería o biblioteca y se encuentraunsinfíndelibros,títulosytemas

que no perdemos de vista. Algunos lucen divertidos, coloridos, científicos, misteriosos, góticos o sociales. Pero ¿qué es lo que hacemos? Solo observándolos desde fuera, juzgando por la portada que poseen, sin ver más allá de lo que significa ser un libro, y tener un género.

Enlassociedadesmodernas,dondelalectura se está quedando dos centímetros detrás de la tecnología, la vida gira alrededor de las apariencias. Un lector regular podría ver un libro con la portada en blanco y tomarlo para ojearlo y hacer un veredicto de si vale la pena leerlo o no,

en cambio un ser que apenas se incluye en el mundo moderno de tomar un libro tiende a irse más por la imagen, el color, o por el número de halagos u opiniones de otros escritores famosos sobre éste. Nos sumimos en un círculo vicioso, enunabismoorbital,enalgomenosqueunmundo literario. Encontramos ideas pobres y vanas en libros con portadas vistosas, sin embargo aclamados por el público. En cambio, tomamos un libro sencillo, humilde y prometedor que nos brinda todo lo que la imaginación es capaz de revivir al leer cada una de sus páginas.

Me considero una fanática de las portadas vistosas.Estonosignificaque esteseamicriterio

principal para elegir un libro, ni mucho menos el hecho de que solo lea libros con portadas "bonitas".Alcontrario,sueloelegireldeelmejor autor, el mejor prólogo o incluso el mejor título. Perosiendosincera,alrededordelaslibrerías, uno se encuentra con un sinfín de libros con portadas creativas y contemporáneas, ¿Cuál será la razón por la que se esmeren tanto en la cubierta en la cual el lector solo presta la mitad de la atención? (suponiendoquesuinteréssealahistoriadentro).

La respuesta a esta pregunta es muy ambigua: el materialismo,definidocomo:Doctrinafilosófica que consiste en admitir como única sustancia la material, negando la espiritualidad y la inmortalidad del alma humana¹.

Aquel monstruo que en el siglo XXI viene destruyendo todo lo que la cultura y la sociedad dócilmente ha ido creando. El autor de que la imagensehayaconvertidoenunfactorimportante en una obra literaria. Si nos remontamos a las épocas de antaño, las ediciones de grandes libros clásicossefabricabansobrepergaminos,después surgió la xilografía y a su vez las portadas de cuero, con un solo grabado indicando el nombre delaobraydelautor,algunasveceselvolumeno la fecha, no más. Esto no significaba que fuera a ser un libro poco interesante, o nada importante, pues su contenido, lo que llevaba escrito dentro, expresado en sus hojas blancas era lo que importaba, y siempre seguirá importando.

La verdad, siempre se olvida que el libro es por lo que tiene adentro. Lo que está escrito. Porque todos sabemos que no todos los libros porquetienepáginasyletras,merecenleerse.Por

eso cada uno elige. Pero creo que lo que no hay queolvidarnuncaes:loquequierecomunicarnos el autor con el tema del libro.²

Lacomunicacióndellibrotambiénimporta. Escucharlo, sentirlo, comprenderlo. El libro es otro ser que nos provee de conocimientos, y con sumo cuidado, se le debe de dar un lugar importante en nuestras prioridades. Un libro no es cualquier cosa, y no puede ser juzgado solo porsuestética.Vivimoslaeradelamoda,elestilo falsoyredundante.Peronoquieroenfocarmesolo en lo nocivo y contradictorio, aun cuento con un poco de esperanza sobre los buenos selectores de libros, los que miran más allá de un simple color sobreunafachada,aquelloscuyovalorsentimental lo invierten en lo que transmiten las letras, combinadasentresí,parapoderexpresarcualquier idea, aquellos que le echan el ojo a un autor, a un prólogo, los que hojean, los que recuerdan que los libros también tienen alma, nacimiento, los que entienden que los grandes libros jamás mueren.Auntengoesperanzaenaquelloseditores que son conscientes y no cometerán el pecado de sacar a la luz basura sin esencia solo porque está bien envuelta; puede que sea severa, pero quien más expresará la verdad si no empiezo por mi.

Debemos construir un mundo donde las apariencias no importen, que uno pueda sonreír sin que le juzguen el primer diente. Quiero un mundo donde alguien considere a un libro como otro ser más, no como un objeto, sino como el medio para viajar sin contaminar mucho. Eso es lo que quiero.

¹Materialismo. (s.f) Word Reference Online web dictionary. Recuperado de http://www.wordreference.com/definicion/materialismo

² Trueba, David. (29 de Junio de 2008) Para ser fiel a la esencia de un libro a veces hay que ser infiel a su letra. El diario montanes. Recuperado de http/ /:http://www.eldiariomontanes.es/20080729/local/cantabria-general/para-fiel-esencia-libro-200807291836.html

delatripa: narrativa y algo más

delatripa: narrativa y algo más

La escritura de la apariencia

Cierta tribu tiene una interesante costumbre: los niños crecen escuchando historias de la

Madre Océano, presencia femenina que guarda la magia y la entrega a los hombres cuando alcanzan la edad para serlo. Una vez en su vida los niños son llevados a la costa. El sacerdote cubrelosojosdelniñoconunavenda;lainefable presencia de la marea es el canto de los sentidos. Alniñoselequitalavendaconlospiesdescalzos en la arena; a la vista del oleaje, la magia le entra por el aliento.

Somos la cultura de la añoranza. El mar se ficciona,sequiereiraél,peronosenavega.Basta una fotografía en sepia, un óleo reproducido en masa por una imprenta, la aplicación en tercera dimensión del camino, y la promesa de que el océanoexiste,quealgúndíaloconoceremos,que alguienyaloconoce.Parecequeestáyconesoes suficiente. Pero el sacerdote sangra, violado porque no se instruye en el involucramiento, no en un ir sino en la torpeza de lo exclusivo, que imagina la destrucción. No hay nadie, pues, que nos quite la venda.

El horizonte de lo subjetivo es curvo como la tierra y la vista, apenas alcanza a percibir su

¿Quién eres? Que aunque yo aquí tan poco del mundo sé, que cuna y sepulcro fue esta torre para mí; y aunque desde que nací (si esto es nacer) sólo advierto este rústico desierto donde miserable vivo, siendo un esqueleto vivo siendo un animado muerto.

La vida es sueño.

ángulo. Los instrumentos cartográficos son la condición humana. Pero nadie navega por nosotros. El mar es mar en tanto humedad y sal, y la ficción no le alcanza, lo desborda. La añoranza, podríadecirse,eslaquenosllevaaél,peronunca el mar será la añoranza, en tanto que el mar es el mar porque el porte de las olas lo dice.

La escritura no puede decir nada si la experienciaseficcionaporelrelato.Elregistropierde su fuerza en tanto que el mensaje se reproduce a granescala,sinmedidadeloindividual.Laindustrialización del registro es la muerte de la comunicación; no existe manera de tocar las fibras sensibles del otro si no estoy convencido de lo quedigo,sinoconozcomínimamenteloquedigo; el convencimiento es la acción-reacción de las ideas volcadas a la materia.

La literatura posee el papel social de perpetuar el sujeto humano. Es quizá su función más honorable:lenguaehistoriaactúancomoregistro de la actividad y del pensamiento. El registro es, precisamente, el motivo más fuerte. El valor del documento es el registro de que así fue y la inscripción material del deseo, así quisiera que fuera. La literatura es, entonces, la función

aplicadadelalenguaalainscripcióndeloshechos y al deseo que se filtra por ellos.

El símbolo es el arca, una presencia en ausencia. La experiencia está y no está; es representada.Laliteraturaseexponecomounsímbolo de lo subjetivo, que en el momento de acceder a la convención comunicativa deja de serlo, para pasar a la representación del objeto, objetiva en tantoamateria,mensajeysentidoqueelreceptor traduce, porque toda lectura es una traducción al lenguaje arquetípico del pensamiento.

La explicación está vacía si no se cree, la palabra sin palabra pierde fuerza contra la guturalidad orgánica, contra un grito de dolor o de placer. Intenten explicarle a un niño qué es el frío.Elfríoeselfrío.Latemperaturaeslamedida, masnoeslaexperienciaquecala;elcálculo,mas no la reacción. Para el espectador no hay hecho, hayunhechofáctico.Nohayelquitarselavenda, hay una maquila industrial del suspenso.

II

Los medios masivos de comunicación son herramientas de difusión de alto impacto que exponenunjuegodesímbolosquecreaimágenes e ideas instantáneas de la realidad. La sociedad del espectáculo, como la percibe Guy Debord, se hace de una idea de suceso que se presenta en un melodrama sin presencia.

Elactocomunicativonoexistesinunmedio por el cual se presente el mensaje. El medio por excelencia es el lenguaje, en tanto que define la condición del pensamiento que se explica y el deseo que se manifiesta. La escritura sucede a la lengua. Antes de ella solamente se encuentra el ritmo, recurso de la música, la poesía y el habla; suerte de hiper-lenguaje por detrás, encima y en lalenguamisma.Laimagen,esnosólounrecurso de la escritura sino también el elemento que se perpetúa, testigo de la cultura. No por nada los estudios iconográfico-arqueológicos buscan la comprensióndelaimagen,pueséstaeselsímbolo

de lo perpetuo. El hombre es un hacedor de símbolosylahistoriografía,eldesencriptamiento de ellos.

Todo tratamiento críptico del lenguaje hace medioyhacecontenido.Laescrituraaborigenen lascavernasesunamuestradecontenidoycontenedor en un solo objeto. En las pinturas de las cavernas está contenida la idea, por ejemplo, del brío en la vista de un protohombre que está por aventar la lanza. La imagen tiene características evidentes (trazo, proporción, color), al mismo tiempo que es brío. El primer semiólogo es el hombre primitivo que lo interpreta, y más importante aún, que asume el brío para sí como una actitud. Con esto entendemos el tratamiento arquetípico de la imagen. Por mucho tiempo existió la preocupación por perpetuar ciertas actitudes culturales que tenían una función ritual al mismo tiempo que una función práctica. Para esto se buscaban medios eficientes que se entendían en el rito, pero también tenían un efecto importanteenlocotidiano.Noescorrectoafirmar que el rito y el acto fuesen por separado. En este horizonte existía el juego sagrado, mas no el entretenimiento.

La concepción eurocentrista judeocatólica ha separado estos conceptos: por un lado están las iglesias y por otro lo secular. Cumplimos el rito como asistimos a la cita con el doctor, con la frialdad de las agendas. El entretenimiento hace másllevableeltiempo,comolatelevisiónenuna sala de espera.

Laculturadelentretenimientosearmadela cultura del espectáculo. Ni la guerra, ni la migración, ni las catástrofes naturales, ni la "deshumanización"delhombresonresponsables del vacío axiológico. Es el abuso estereotipado del mensaje que se distancia del arquetipo en cuanto tiende a hacer entender que ya todo está hecho,contrarioalimpulsodehacer,comoelbrío que invoca la pintura, o la construcción significativa de la escritura ideográfica.

Se define al arquetipo como una caracterización que representa algo que regresa a lo primigenio, al origen; un mito con doble capacidad:memoriayestímulo.Delotroladoestá el estereotipo: imagen de poca vigencia en la huella mental pero de efectiva transmisión, pues se hace de otros estereotipos que figuran una visión unidimensional del mundo, donde todo se resuelve en una precaria asignación de papeles que no se mueven. No hay impulsos interiores, no hay secretos, se mantiene un orden estético que no perturba y que todos aceptan como una convención, cruel pero satisfactoria, que hay que mantener.

Ya hace casi dos siglos Federico Schlegel sabía que el problema de la sociedad moderna es que no hay mitos, no hay un "todos nosotros", un origen común, una idea de colectividad. El problema se hace más grave cuando la cultura del espectáculopretendellenaresevacíoconelorden estético del estereotipo, que no es otra cosa que laestandarizacióndelapersonalidad,quesuprime toda idea de diferencia.

El melodrama ausente existe para dar la sensación de que algo pasa en alguna parte, para alguien. En esto participan la televisión, el Internet,laradio,lapublicidadurbanaylaindustria, pero también la academia y la industria editorial. Todos juntos han fomentado el culto al consumo que, irónicamente, orilla al neocapitalismo a su destrucción.

III

La creación literaria privilegia la idea de tema y la enseñanza de técnicas de escritura inscritas a la idea poco vigente de los géneros literarios. El estudiante promedio descubre demasiadotardequeeltemapertenecemásauna recepción arquetípica de la experiencia que a su invención o dominio. En este sentido, podríamos decir que el tema se descubre y se reinterpreta. Losgénerosliterarios,sabemos,respondenauna

delatripa: narrativa y algo más 54

didáctica que ha perdido sentido desde que los movimientos vanguardistas -y antes de ellos Mallarmé, Apollinaire, Valery, Baudelaire y Rimbaud, por dar nombres-, dieron aire a la literaturadelossentidos,quelomismosepercibe y se interpreta, mas no se clasifica.Así, la crítica literaria fue rebasada por su objeto de estudio: la literatura. Desde entonces ha tenido que reinventarse, en un proceso doloroso de disolución que la obliga, si no a fijarse como género único, pues,cómohedicho,laliteraturahacetiempoque renunció al género para entenderse como texto, al estilo de Barthes, o como creación al estilo de Baudelaire, sí a practicar la crítica de la crítica, en donde, me parece, está su lugar posible.

En México está vigente la discusión sobre la enseñanza de la creación literaria. El crecimiento exponencial de los talleres creativos y la aplicación de sus modelos en las escuelas de escritura creativa, que se cuentan con los dedos, se debe, en buena medida, a que resultaba incongruente que la escritura se enseñara en las facultadesdeliteraturaqueprivilegiandemanera casi absoluta la crítica literaria, la historia de la literatura y la lingüística.

En dichos lugares permanece el discurso de quela"venacreativa",la"visióndealteridad",el "talento"ola"inquietuddelescritor",nosepuede enseñaryqueestoesalgoqueelliteratodescubre, si tiene suerte, por su cuenta. La mayoría de las universidades se inscriben a la tradición de las ciencias de la literatura, mientras la creación literaria privilegia la experimentación y la aplicación de los postulados de estas ciencias en la práctica.

Lacríticaquelauniversidadtradicionalhace alaescuelasdeescrituraescorrectayambasvisiones se presentan como caminos posibles para el escritor.Sinembargo,meparecequeladiscusión se basa en premisas falsas.

El problema real reside en la idea falsa del tema y la inserción de temas por medio del

bombardeo estereotipado de los medios de comunicación. Es irrelevante que el escritor se desarrolle en el estudio de las ciencias de la literatura o la técnica de creación, lo más importante es que lo haga con una visión de subjetividad crítica que le permita sentirse parte del mundo. Leer mucho y escribir mucho vienen por obligación. Si bien voy con Borges en la existencia de temas arquetípicos: el amor, la muerte, la locura y el restablecimiento del orden, piensoquenohaymaneradequeelescritoratine en alguno de éstos si no es por la vivencia. Es imposible enseñar temas en las escuelas, el tema ya debe estar ahí y debe ser el individuo el que lo busque; si no lo encuentra ha de ir a vivir o dejar de intentarlo.

Slavoj •i•ek, en Bienvenidos al desierto de lo real, ofrece una crítica interesante al respecto: Larealidadvirtualselimitaageneralizarel procedimientoofreciendounproductocarente de substancia: proporciona la misma realidad sin substancia, sin el núcleo duro de lo Real; exactamente del mismo modo en que el café descafeinado huele y sabe a café sin ser café de verdad, la realidad virtual se experimenta comorealidadsinserlo.Alfinaldeesteproceso de virtualización, sin embargo, lo que sucede es que comenzamos a experimentar toda <<realidad real>> como si fuera una entidad virtual.1

El escritor de hoy vive asediado por esa realidad virtual de la que es víctima y cómplice. Ninguna telenovela, ninguna película comercial, ningúnanunciopublicitario,ningunaobrateatral carecedeunguiónotextodramáticoqueleestructure. La moda de las películas "históricas" o las adaptaciones de novelas al cine, lo mismo exige un trabajo literario que le de forma. Es común que un escritor participe en producciones estandarizadas de la cultura del espectáculo, en la mayoría de los casos porque se trata de

aportaciones medianamente bien pagadas. Sin embargo, no se puede negar que con esto se contribuye a la mediatización de la sociedad y a laconcepcióngeneralizadadelarealidadvirtual, contra la que, idealmente, el progreso del conocimiento humano debiera hacer frente.

No concibo la experiencia mediada. Está, ciertamente,lateoríayelregistrodelaexperiencia de la literatura en la historia. Se experimenta la literatura en la sucesión del tiempo y se debe, se necesita,hacerunregistrodeella.Peroelregistro jamás será en sí la escritura, acaso un retrato que nunca será real.

Salvo de la deconstrucción a la literatura misma. No hablo de poesía, hablo del poema; no hablo de narrativa, hablo del relato; no hablo de dramaturgia, hablo del teatro, entendidos como una misma cosa en el texto.

La impostura de temas es consecuencia del bombardeo de los medios de comunicación y del absurdo envilecimiento del melodrama, que reduce la experiencia a un relato de lo que debiera sentirse; un placebo panorámico del yo. No se descubre que el tema está debajo de la vivencia, nosedescubrequelaestructuraeseltextoynoal revés, y que ni la academia, ni la escritura "independiente" son lo suficiente sin la sublevación de los sentidos, responsable de sí en tanto que no suscribe, expresa, en tanto que no firma, explica. Esto es una mitología del lenguaje que crea lenguaje.

IV

En Literatura de izquierda, Damian Tabarovsky entiende la ausencia de mitos como el "trauma sin trauma". Carecemos de un trauma original.LahistoriadeEstadosUnidos,esmásla del saqueo, la rapiña y el oportunismo que la de un pueblo que se tensa y se destensa en un viraje histórico que le moldea la geografía y el rostro

1 •i•ek, Slavoj. Bienvenidos al desierto de lo real. Akal, Madrid, 2008. P. 15

histórico. Las naciones americanas son relativamentejóvenes.Susmitosfundacionales,sustraumas,aúnseestánincubando,yfaltanporlomenos un par de siglos para que éstos tengan un efecto deidentidadenlosciudadanos,sianteselproceso de globalización no hace desaparecer la idea misma de nación. Ante esta identidad nula o identidadenformación,laculturadelespectáculo tiene doble efecto: llenar el vacío con la manipulación del melodrama instantáneo que se presenta en las tele y radio-novelas, en los shows deentretenimiento,enlasseriestelevisivas,enel cine y en la publicidad. Para esto recurre a historias lineales que presentan situaciones y personajes modelo cuyo manejo narrativo responde a una ideología nacional del héroe. El espectáculo de ideología, por supuesto, no es nuevo -el uso propagandístico del cine fue muy importante en la Alemania nazi, con cintas como El despertar de una nación (SA-Mann Brand, director Franz Seitz, junio de 1933), Hitlerjunge Quex,(delmismoaño,queseestrenó en 1938 en la España nacionalista con el nombre El flecha Quex, dirigida por Hans Steinhoff,) y Hans Westmar (Franz Wenzler, 1933)- pero una característica importante del cine de ideología es que ha sabido transformarse con el tiempo a la vez que ha sabido transformar la concepción de nación de los espectadores. The Patriot (Roland Emmerich, 2000) o Saving Private Ryan (Steven Spielberg, 1998), son dos ejemplos cuya carga ideologizante es evidente, pues ambas presentan el ideal del héroe norteamericano. Ejemplos más actualesson Ávatar (JamesCámeron,2009)y The Avengers (Joss Whedon, 2012), cuyo contenido me interesa especialmente.

Hay que decir que se trata de una película de acción de aceptable calidad. La historia se relaciona con las de otros filmes de superhéroes, particularmentecon Iron Man y Iron Man 2 (John Fabreau, 2008 y 2010, respectivamente), The Incredible Hulk (Louis Leterrier, 2008), Captain

delatripa: narrativa y algo más

America: The First Avenger (JoeJohnston,2011) y Thor (Kenneth Branagh, 2011). Todas ellas se basan en cómics de la casa editorial Marvel. The Avengers relataelencuentrodeloshéroesdeestas seis películas en un escenario de guerra donde Nueva York se encuentra amenazada por una invasiónextraterrestrepromovidaporLoki(Tom Hiddleston), el hermano adoptivo deThor (Chris Hemsworth). La necesidad de un grupo que enfrentelaamenazaextraterrestrellevaaIronMan (Robert Downey Jr.), Hulk (Mark Ruffalo) Thor, elCapitánAmérica(ChrisEvans),alagenteClint Barton (Jeremy Renner) y la espía Natasha Romanoff (Scarlett Johansson) a crear el grupo de justicieros Los vengadores. Más allá de lo predecible de la trama, asunto que ya señala TheodorAdornoenelartículo Televisión y cultura de masas refriéndoseal"Anhelodesentirsesobre terreno seguro", que cancela toda posibilidad de sorpresa, es interesante que la película ha asimilado la globalización y coloca claramente a Estados Unidos como la "punta de la lanza" en la respuesta del mundo ante una amenaza de extinción. Nick Fury (Samuel L. Jackson), director de S.H.I.E.L.D., -organización que emula a la CIA-, quien tuvo la misión de cuidar elTessarac, objetoalienígenaconunpotencialenergéticosuperioratodatecnologíahumana,eselcomandante de los vengadores, Fury es un afroamericano que remite de inmediato al actual presidente de Estados Unidos. El Capitán América, hombre desfasado de su tiempo debido a una suerte de criogeniaalaquefuesometido,esquienliderala batalla final contra los extraterrestres. Es de notarse que los héroes responden a una identidad específica: Thor se relaciona con los mitos nórdicos; Hulk está en el exilio en India cuando Natasha Romanoff, una espía rusa que ahora trabaja para S.H.I.E.L.D., le trae de regreso a Estados Unidos; Iron Man¸ cuya personalidad es el multimillonario Tony Stark, es el tipo carismático y seguro de sí mismo, cuyo carácter puede ser visto como el ideal del ciudadano

norteamericano: hombre que vive holgadamente ensupropiorascacielos,conunarubiadeamante, dispuesto a gastar su fortuna para salvar a la humanidad. La aparición de Natasha Romanoff en escena es digna de apuntarse: ha sido secuestrada por una mafia rusa absolutamente caricaturizada. Mientras la interrogan, amarrada a una silla, recibe una llamada de S.H.I.E.L.D. "Estoy trabajando", responde, dando a entender queellaeralaespíayquefingíalacapturaantela ineptitud de los rusos, quienes son ridículamente apaleados mientras la espía escapa. Natasha, además, ha sufrido una "conversión", pues dejó el lado de los rusos, a todas luces despiadados asesinos y crueles torturadores, para trabajar del ladodelosestadounidenses.Esobvialareferencia a la guerra fría y al "triunfo" del ideal capitalista sobreelcomunista.Laamenazafinaldelapelícula es que el ejército norteamericano decide disparar un misil a Nueva York, pues consideran que la "guerra"estáperdidayquevalelapenasacrificar la ciudad por el resto de la humanidad. Iron Man, cuyo papel de magnate carismático ya he apuntado, desvía el misil fuera de la atmósfera terrestreyloestrellacontralasnavesalienígenas, justoatiempopararegresaralatierraatravésdel portal multidimensional, abierto para que los extraterrestres invadieran el planeta.

Todo lo que he apuntado tiene una carga simbólica muy poderosa. Es claro que Estados Unidosseconsideraasímismalaculturaqueguía al resto del mundo, la única capaz de salvarla de la destrucción. Cuando los héroes descubren que S.H.I.E.L.D., pretendía usar el Tessarac para fabricararmamento,NickFuryaderezalamuerte del agente Phil Coluson (Clark Gregg), manchando unas estampas de los superhéroes con sangre del agente, como si éstas hubieran estado en su saco al momento de la muerte del agente con esta sutil maniobra de "estimulo" los héroes, representaciones de los "pueblos del mundo",

2 También creador del Capitán América.

dejandeladosusdiferenciasparaluchardenuevo juntos contra la invasión. La llegada de Barack Obama a la Casa Blanca fue espectacular en el sentido de que mandaba el mensaje al mundo de que la cultura racista por excelencia, Estados Unidos, dejaba atrás sus viejos hábitos y se abría al mundo globalizado. El mensaje oculto es que tanto en The Avengers como en la realidad, un afroamericano es el único capaz de estimular a los héroes del mundo a que no desistan de su destino, aún cuando en el destino esté implicada la fabricación de armas. Un Capitán América es el único capaz de comandar a los héroes en la guerra.

Un guionista es un escritor.Tanto Zak Penn y Joss Whedon -guionistas-, como Stan Lee y Jack Kirbi2 -creadores del cómic- están profundamente influidos por la cultura del espectáculo y por la ideología norteamericana del héroe. Más grave aún, son cómplices -quizá inocentes por omisión- de esta ideología. No es de extrañarse el constante bombardeo de este tipo de mensajes en televisión, radio y, ahora, en Internet, son suficientes para explicar el corto campo de movimiento del escritor moderno.

VEl otro efecto de la cultura del espectáculo es justamente opuesto a lo que se propone: a fuerza de vulgarizar el mensaje, y en constante repetición de ideas moralinas de la realidad, termina por degradar toda posibilidad de lo alterno.Elmelodramainstantáneoespartedeesto, peromásaúnloeslamercadotecnia,queinstruye a la publicidad una retórica de los valores de consumo, al grado de que esta "ciencia del mercado",quebuscamoldeareldeseoeimpostar una sensación de necesidad en el consumidor, ha adquirido la función reguladora de las carencias del ciudadano. Se presume el psicólogo, el confidente y el sanador de los males sociales y losmalesindividuales.Bastaelsiguienteejemplo:

Lapublicidadnosolamenteabusadelvacío moral de este siglo, también hace más grande el hoyo y lo llena de compulsiones guiadas al consumo. Por mucho tiempo el comportamiento social estuvo ligado al rito. Independientemente de aplicación de éste en la cotidianidad y las implicaciones culturales en la forma de entender la realidad y relacionarse con ella, podemos observar que antes de la Ilustración y las revoluciones industriales las culturas aplicaban sus preceptos morales en relación a la divinidad y a un pensamiento interior de la relación con el mundo, mediado por Dios o dioses en algunos casos, otras veces mediado por la misma cultura, y también mediado por el pensamiento holístico primitivo, que comprende que cada acto humano tiene una consecuencia en su entorno. En este sentido, ante Dios, ante la comunidad o ante el mundo mismo, uno era responsable de sus actos y había que responder por ellos ante un aparato de poder, cuya existencia se aceptaba como convención. No pocos criticaron estas convenciones, que en su extremo absurdo fueron la base ideológica de la monarquía, de las dictaduras, de los fundamentalismos religiosos, la guerra y el exterminio, pero no cabe duda que también funcionaron como instrumentos de cohesión social y autorregulación ética.

Estos pensamientos, en lo que corresponde a la cultura occidental, fueron sustituidos por el debermoraldelcientíficoescéptico.ElsigloXIX

y parte del XX se pueden caracterizar así. Las revolucionesideológicasdelXXserevelaron,en parte,contraestepensamiento,peroelverdadero culpabledesufin,fuelaculturadeconsumo,que absorbió éste y todos los ideales pretéritos que la humanidad pusiera en práctica, para volverlos mercancía.

Es natural que el humano busque llenar a todacostaelvacíoquedejólaculturadeconsumo. Somos seres sociales que avanzamos en tensión de nuestras prácticas, necesitamos una dosis equilibradadepensamiento,pasiónyacciónpara dar sentido a nuestros actos. Pero es tan macabra lamaquinariadelconsumo,queinventóunaforma poderosísima para evitar que otras formas de organizaciónnoafinesllenaranelhoyo:lacultura del espectáculo.

Dice Guy Debord:

Elespectáculo,queeslaeliminacióndelos límites entre el yo y el mundo mediante el aplastamientodelyoasediadoporlapresenciaausencia del mundo es igualmente la eliminacióndeloslímitesentreloverdaderoylofalso mediante el reflujo de toda verdad vivida bajo la presencia real de la falsedad que asegura la organización de la apariencia.3

Así, la "organización de la apariencia" es lo que da la sensación, ya no al ciudadano ni al consumidor, sino al espectador, de que hay algo, en algún lado, que sí está sucediendo, y por lo tanto, que el vacío interior que le corroe es un estado temporal. Allá afuera está la gente que sí vive, que sí pone en práctica sus ideas y sus pasiones y que vive el drama que anhelamos. El verdadero drama es que no hay ya más dramas. Barthes plantea el "idiolecto" como el conjunto delléxicocultural,alcualapelalapublicidadyal cualalimenta4.Enestesentido,yoplanteouncontra idiolecto, el vacío ético, estético, moral, ideológico y de memoria histórica que la sociedad de

3 Debord, Guy. La sociedad del espectáculo, http://www.observacionesfilosoficas.net/download/sociedadDebord.pdf, al 20 de octubre de 2012.

4 Barthes, Roland. Lo obvio y lo obtuso, Paidós, Barcelona, 1986.

delatripa: narrativa y algo más

consumoylaculturadelespectáculoseencargan de mantener por medio de imágenes retóricas vacías.

En la imagen publicitaria que presenté:

1.Hablamosdecerveza,unproductoquese asociaconlomasculino.Seguramenteestapublicidad no sería efectiva si se dirige a espectadores femeninos. (Llamaré espectador al consumidor por lo antes mencionado). Pensemos: "Es fácil sermujer",aúncuandosepuedacambiarlamujer voluptuosa por un macho fálico, la asociación de la cerveza como una bebida "de hombres" es un concepto muy fuerte. Por supuesto, las mujeres también beben cerveza, he aquí un ejemplo de los"símbolosdiscontinuosydepocaestabilidad"5 queaestasalturassehansedimentadoennuestro pensamiento y condicionan nuestra percepción.

2. El abuso de una idea estereotipada de lo erótico(mujercaucásica,faccionesafiladas,corte de cabello común, rasgos finos, proporción del cuerpo) más una idea de amor ligada a una forma estandarizada de ser hombre, dan por resultado un juego connotativo que tiene su efecto en la sociedad machista mexicana.

3. El cartel ofrece una definición de amor El juego de la connotación y la denotación se da con la simple sobreposición de la palabra "amor" a la fotografía de una mujer de determinadas características. Esto, en relación con lo "masculino"daaentenderqueloshombresdamosdefiniciones rápidas de las cosas, quizá a diferencia de las mujeres, en la idea de "qué complicadas son". En el amor, para el macho, es incluso más simple esa definición.

4.Lasexualidadsereduceaunacompulsión, deseo quizá imposible de satisfacer si no se está borracho. La imagen dice, en sentido oculto: "Si no estas ebrio no te puedes excitar."

5. En la vista de las latas de cerveza, una de ellas simula que "se cayó", como sucede cuando "los hombres beben".

6. He mencionado el sentido lingüístico de Amor Todavía más explícita es la frase por ti. Se trata de una suerte de eslogan que se ha repetido enotrascampañaspublicitarias.Biensabemosque elobjetivodeestasfrasesesqueelespectadorlas relacione con el producto en todo momento. Ahora,aquísedalasensacióndequelamarcade cerveza hace la bebida con dedicación personal al espectador y en otro nivel, que esa publicidad enparticularhasidopensadapara"hombrescomo tú", esto dice entre líneas: "nosotros sí te entendemosynonosandamosconideas,estofue hecho para ti". Esto redondea un uso dirigido del significado-sigificante. Significante: "Por ti". Significado:"Estapublicidadfuehechaporti,para ti, que eres un hombre que entra perfectamente enestemodelodehombre.Túsíentiendesdequé se trata esto."

7. Es pertinente señalar que las frases del tipo "Evita el exceso" también tienen efecto tipo eslogan. Sabemos que cuando lo dicen se hace publicidad de alcoholes o productos venenosos que es nuestra responsabilidad consumir. Funciona como una forma de expiar la culpa de los comerciantes, como lo apuntó Max Scheler en El resentimiento en la moral 6 La publicidad es excesiva en todos sus aspectos: estereotipo, compulsión,juegoretóricoysobreexplotacióndel sexocomounaherramientamercadotécnica."Aún así, amiguitos, hay que evitar el exceso, todos ustedes, nunca nosotros".

El uso retórico de la imagen es síntoma del vacío axiomático de los significados en nuestro tiempo.Ante el hueco formativo y estructural de la educación, los medios han tomado el lugar como nuestras institutrices. Estamos ante un cartel publicitario de fuerte carga simbólica: es para nuestro tiempo, ¿qué tan efectivo sería un

5 Íbid.

6 Scheler, Max El resentimiento en la moral en "José Gaos, Revista de Occidente", Madrid 1927.

delatripa: narrativa y algo más

espectacular de las mismas características hace 50 años, aún ya en centro mismo de la sociedad de consumo? La cultura del espectáculo ha pulverizadolosvaloressocialesatodoslosniveles y ha puesto en su lugar la idea globalizada de lo que es el individuo, un espectador dominado por estereotipos. La publicidad está dirigida y trae consigo una carga moral e ideologizante que, irónicamente, desmo-raliza y desideologiza.

VI

La literatura actual está infectada de estereotipos vinculados a la sociedad del espectáculo. El conocimiento de los temas arquetípicos, a través de la lectura de obras canónicas y no canónicas en cuyo tratamiento se encuentrelaesenciamismadelproblemahumano, sesustituyeporlaexpectación,cuyaconsecuencia evidenteeslaindustrializacióneditorialdellugar común. Se puede culpar a la industria editorial y al sistema corporativista que necesita la compulsión del melodrama aparente para perpetuar losvaloresdeconsumoenelespectadormoderno. La aceptación fácil de este supuesto es peligrosa, pues evade el verdadero problema: ¿qué se está dejando de hacer y qué se está aceptando como actitud natural en el escritor contemporáneo?, ¿qué intereses se superponen a la búsqueda naturaldeunainquietudestéticaque,enprincipio,no debería regularse por otro estímulo más que la ambición estetico-espiritual y no la ambición económica, no la ambición espectacular? La búsquedacomúndelescritorjoven-pongamosun campo absolutamente arbitrario: de los 15 a los 35añosdeedad-respondealafamayalprestigio socialde"serpoeta"sobreunaideatrascendental de la propuesta estética, que obliga a un compromisodisciplinadodelossentidos.Lasociedad del espectáculo merma el deseo del artista: se desea ser famoso, "estrella de la literatura", cuya idea patéticamente falsa es alimentada por la

academia, por la industria editorial, las instituciones culturales, los medios de comunicación y, -he aquí lo más grave- por los mismos escritores, víctimas y cómplices del vacío éticoestético-ontológico de la sociedad moderna.Así, la escritura de la apariencia sirve para elevar a uno mismo a una categoría nada trascendental de "literato", cuyo estado último, cuando menos, debería alcanzarse luego de un proceso lento e íntimamenteligadoalaexperiencia,quesignifica un empirismo no forzado, sí experimentado. La misma idea de la "estrella de la literatura" es una impostura de Hollywood, en el estricto sentido de que los valores del éxito y de la permuta del héroe en la sociedad son el mensaje principal en las películas y series televisivas, así como en la publicidad. El rockstar literario responde al estereotipo del héroe de Disney lo mismo que al bohemiodeprincipiosdelsiglopasado,oalpoeta maldito de finales del siglo XIX, al rockero de la década de los sesentas, incluso al concepto de magnate carismático que entrega su fortuna para salvar al mundo, caracterizado por Tony Stark, "Iron Man" en The Avengers. El poeta de hoy se sienteunvengadorenelmodelomenosentregado del concepto: dispuesto a renunciar al proceso naturaldeaprendizajeempírico,implícitoparael escrito, por cumplir el capricho de "ser el poeta", de trascender y modificar la realidad por medio del discurso, cuando, como apunta Maples Arce en su brevísimo ensayo Del sentido y dignidad de la poesía: "La poesía es al mismo tiempo operación vital y síntesis imaginativa. El poeta piensa en un amplio compás la realidad, lo psíquico y social, y gracias a ello consigue fecundos y maravillosos efectos a favor de una idea"7; Maples Arce señaló que ningun dogmatismo es bueno para la poesía, así como ninguna pose es buena para el poeta; el dogma y la pose nulifican el aprendizaje, y ambos funcionan como estereotipos.

7 Maples Arce, Manuel. "Del sentido y dignidad de la poesía." en www.http://elojollenodedientes.blogspot.mx/, al 25 de noviembre de 2012, en versión impresa en Invitaciones y valoraciones, Cultura, México, 1956

El escritor también es víctima del espectáculo, es espectador, y más grave aún, es cómplicedelasociedaddelespectáculocuandopresta suoficioparalaculturadelentretenimiento.Todo publicista es en estricto sentido un escritor, pues aborda la retórica de la imagen y abusa de las formas poéticas de la lengua para el aumento del comercio, modificando las leyes elementales de la economía.8

Sobre esto, la literatura está condenada. Un camino transitable es la literatura de la experiencia, que responde a la problematización del vacío axiológico con una negación radical del estereotipo,conelestudiodelarquetipoylaexploración de los temas en la experiencia empírica de estar vivo. Por supuesto, el gran tema deberá ser elmismovalorperdido,labúsquedadelarealidad que añoramos, el dolor de lo que teníamos y perdimosporlanecedaddevulgarizarelmensaje afuerzaderepetirlohastahacerleperdersentido. La literatura de la experiencia, o bien, escritura de la experiencia obedece a la necesidad de encontrar el valor humano en la actividad cotidiana de estar vivo, y se desprende de la nada sensatabanalizacióndelsentimientoporpartede los medios masivos. Ante la presuntuosidad y el cliché, el escritor responde con una sinceridad desgarradora y con la dinamita del lugar común, puesposeeellenguaje,queensupropiaevolución descarta, de entrada, el estatismo, y sugiere una actitudcreacionista,enelsentidomásestrictodel término. Una manera de hacerlo es proponiendo la narrativa de uno mismo, disolviendo de una buena vez las barreras idióticas entre los diarios ylanovelas,entrelossímbolosylospoemas.Así lo apuntó Ralph Waldo Emerson:

El secreto del genio es no soportar que la ficción exista para nosotros; que realice todo lo que sabe; que ante el alto refinamiento de la

vida moderna, en las artes, en las ciencias, en loslibros,enloshombres,seextraigalabuena fe,larealidadyelpropósito;quealprincipioy alúltimo,enmediode,ysinfinal,sehagahonor a la verdad, por el uso.9

Siempre que la exploración de la realidad esté mediada por la banalización del hombre espectacular,noseaceptaráelerror,noseaceptara el dolor y la podredumbre humana y se seguirá haciendo literatura previsible, llamativa, coloreada con brillantina y con ninguna sinceridad, pues el escritor aún no será sincero con sí mismo, y de esa manera jamás lo será con los lectores. El escritor de hoy posee un doble reto:porunladohacerseresponsabledelahistoria delaliteratura-quenodeberácargarcomosifuese un bulto demasiado pesado-, y por otro la lucha constantecontralabanalizacióndellenguajeyla banalización misma de la función de la literatura en la sociedad; por un lado la capacidad transmutadora del lenguaje, y por otro el estatismo; por un lado la escritura, y por otro apagar la televisión.

Literatura consultada

Adorno, Theodor Televisión y cultura de masas en http:// facticiu.blogspot.mx/ al 23 de septiembre de 2012. Barthes, Roland. Lo obvio y lo obtuso, Paidós, Barcelona, 1986.

Debord, Guy La sociedad del espectáculo, http:// www.observacionesfilosoficas.net/download/ sociedadDebord.pdf, al 20 de octubre de 2012.

Emerson, Ralph Waldo. Goethe; or, the writer, http:// www.rwe.org/complete-works/iv---representativemen/goethe-or-the-writer.html,al18/11/2012.

Reséndiz,Rafael. La mediocracia, la democracia y el poder en http://hyperlab.politicas.unam.mx, al 23 de septiembre de 2012.

Scheler, Max El resentimiento en la moral en "José Gaos, Revista de Occidente", Madrid 1927.

•i•ek, Slavoj. Bienvenidos al desierto de lo real Akal, Madrid, 2008.

8 Oferta y demanda. Se modifica particularmente la demanda

9 Emerson, Ralph Waldo. Goethe; or, the writer, http://www.rwe.org/complete-works/iv---representative-men/goethe-or-the-writer.html, al 18/11/2012. Traducción personal.

Remedio para septiembre

Era nuestra moda andar de mala suerte en el último septiembre. Ni mi esposa ni yo

habíamos encontrado la forma de corregir nuestro destino en dicho mes. "Las malas vibrasdelmundoestánendirecciónanuestra casa", le aseguré cuando ya era obvio nuestro embrujamiento; nuestro cesar de buenos ánimos, la impaciente desdicha arrastrada junto con nosotros, quizá dentro de nosotros.

-A ver si salimos vivos de septiembre -fue lo primero que dije al despertar. Había dormido mal de un lado al otro de la cama.

Conlosojosiluminadosporunaidea,dijo:

-Hoy se acaba todo.

Era 24 de septiembre y pensábamos que la mala suerte se nos prolongaría por la eternidad. La vida nos había ajustado feo, desdibujados nos veíamos en los reflejos de los autos. El infortunio era rutina y las malas noticias nos caían a racimos. Estábamos, por decirlo, cerca de rasguñar las oriundeces de lamiseriaynuestrossueñosdereciéncasados desaparecían con el correr del tiempo.

-Prepárate, que nos salimos a la calle -dijo aún iluminada.Ymuy alegre se levantó de la cama y comenzó a vestirse con sus prendas coloridas, convencida de sus palabras.

Le había prometido amor y felicidad, y solamente había cumplido una de las dos promesas,comosielamornofueradelamano conlafelicidad,puesyolaamabaconlosojos cerrados aunque nunca en nuestro joven ma-

delatripa: narrativa y algo más

trimonio había notado que sus ojos se crisparan de ilusiones, no como aquella mañana. Durante años lo había imaginado de otra manera. Es sabido que de joven jamás se deja de imaginar un porvenir perfecto. De pronto el mundo cambia, se hace tropezado de obstáculos.

Lupe es hermosa, cuello largo, estatura media, piel blanca, orejas pequeñas y pecas pronunciadasenpechoycara,conelpositivismo que todo esposo espera fiel de su matrimoniada.Aguantaba mi mal humor de largas épocas y me apoyaba sin esperar a cambio lo mismo de mí. A veces pregunto cómo se enamoró de alguien como yo: berrinchudo, bravucón, siempre decepcionado y juicioso del mundo. No hay por qué hacer ojos ciegos de las cosas negativas, son las que justifican las actitudes de una mala vida y las que la gente está acostumbrada a ver primero; las buenas las consideramos obligaciones de la moral.

Eraviernes,nuestrodíadedescanso.Llevábamos trabajando casi un año, bajo régimen de doble salario mínimo, en distintas zapaterías pertenecientes al mismo dueño. El jefe tuvo la misericordia de otorgarnos el mismo día de descanso, por ser esposos. El estar casado da ciertas ventajas aunque a veces se extraña la soledad, sobre todo cuando se está deprimido.

No objeté a su repentina propuesta e inmediatamentevestímisharapos,lasprendas tristesconlasquesolíaenfrentaralasociedad.

Dayan Gamboa

Lo que fuera no podía empeorar las cosas. Creía que en ese septiembre nada más nos faltaba perder el alma porque mucho de lo demás ya lo habíamos perdido. Sus abuelos habían muerto y lloró más de la mitad de los días que llevábamos del mes. No pudo asistir aningunodelosdossepulcros.Tambiénlloré, luego de no haberlo hecho en no sé cuántos años. Se nos inundó el pueblo, sin razón nos negaron la renovación de alquiler y teníamos hasta mediados de octubre para desocupar el departamento.Variascosasmásnosocurrieron en un ambiente vuelto de buenas a primeras totalmentelúgubre.Enlopersonal, mesentía distante, aludido de fracasos profesionales, desmoralizado,incógnitoantelosdemás,ante mipropiafamilia.Mejornoentrarendetalles, ya es difícil recordar el origen de las heridas frescas. Recordar duele, tanto como si estuviéramos de frente con el debatido día de muerte.

Sin desayunar salimos a las calles y caminamos velozmente por la zona colonial de nuestro querido San Cristóbal. El cielo estaba nublado por completo; nos habíamos desacostumbrado a amanecer con sol. Parecieron siglos los días que sin ver la luz.

Poco a poco, mientras transitábamos por el pueblo, me comenzó a brotar la curiosidad por saber qué es lo que ella tenía en mente. Estabacalladaperosonreíadiscretamente,me guiaba con su mano adonde le placía ir y yo, flojo,medejabamangonear.Dábamosvueltas por allá y por acá sin detenernos.

-¿Adónde nos llevas? -confundido, por fin lepregunté-.Llevamoscaminandomásdeuna hora y no entiendo nada.

-A que se nos quite la malaria de septiembre, pollo -dijo con la voz relajada.

Me llamaba pollo como mi madre, y a que mellevabacuatroañosdeedad.Yolallamaba reina; mámascha en la mayoría de las veces, palabra que se me quedó grabada al leer Crimen y castigo.

-Mientrasnonosllevesalpanteóntodoestá bien -dije en tono de gracia.Andaba de buen ánimo a pesar de todo, o más bien, acostumbrado a todo.

-Para nada -dijo riéndose. Y se detuvo frente a un vendedor de rambután, esos hombres que se encuentran en cada esquina del pueblo aparejados con su carreta de frutas.

-Disculpe, ¿la construcción más cercana u hombres que estén pintando casas? -le dijo al indio.

-Allá por el puente Amarillo están, ajarespondiósinmostrarsorpresaantelaextraña pregunta-, hombres con mezclas trepando edificios.

-Bueno -dije con la cara enternecida que siempremeponenlosindios-.Muchasgracias.

-Tomen para el camino largo -y puso en mis manos dos piezas de rambután, fruta fresca de aspecto elocuente y áspero, con cabellos rojos, dulce como las uvas de Baja California; fruta tropical Malaya que aquí consideramosalgonaturalenlavidacotidiana.

Después de dar las gracias de nuevo, con el clima aún templado, despeinándonos, arrancamosrumboalpuenteAmarillo,aunas veinte cuadras del Centro Histórico.

-No me acostumbro a su textura -le dije, mientras abríamos las frutas para devorárnoslas-. Son como pelotas de juguete.

Ella continuó callada y misteriosa y a mí me comían las ganas de interrogarla hasta el más mínimo detalle. La veía tan segura de sí

delatripa: narrativa y algo más

mismaqueporuninstantemesentícontagiado y convencido de que al terminar el día estaríamos curados de todo mal. Pero no quise hablarle del asunto, en parte por miedo a que su idea me decepcionara y en consecuencia los buenos ánimos con los que había amanecido se desparramaran de mis ojos. Me encontrabaentanbuenascondicionesesedía, quecontrarioamicostumbre,habíacaminado más de hora y media sin quejarme del cansancio y la sed. El silencio sí me incomodó, por ello traté de poner en el aire algún tema delcualhablarmientrashacíamoselrecorrido anunciado.

-Ni te pregunté -comencé-. ¿Cómo dormiste?

-Bien. De hecho muy bien -contestó parca y a la vez gozosa. Se tomaba las manos con ansiedad y miraba a todas partes buscando algo que no encontraba-. ¿Tú?

-Lo de las últimas noches. Pesadillas.

-Hoy dormirás mejor -dijo-. Estoy segura. Al menos mientras no... -. Y calló.

Las pesadillas han sido una astilla con la que he cargado en la cabeza desde pequeño. Cuando tenía unos siete u ocho años, temía a la oscuridad y sobre todo a dormir lejos de la camademispadres.Cuandollegabalanoche, me acostaba en el cuarto que compartía con mi hermano mayor, y muchas veces, como si todo fuera parte de un truco de magia, amanecía sentado en una silla del comedor con mispadresacosándomeporlaespalda,desesperadostratandodedespertarme.Cuandopor fin entraba en razón, me daba cuenta de que mi cara estaba empapada de lágrimas. Lo mismo me pasaba cada que tenía el mismo sueño, pesadilla que a pesar de lo constante que eran en mi infancia, nunca he podido recordar a cabalidad. La primera imagen que

delatripa: narrativa y algo más

borrosaseasomaamimenteesalgoasícomo unamasagrandedealgoqueseveníafrentea mí, mansa y sin peligro alguno; después, en otroacto-enelmismosueño-,aparecíanunos popotes blancos y cortos que bailaban flotantes en el universo. Estas dos imágenes sin duda me causaban una desagradable sensación. Desde hace más de quince años no he vuelto a alucinar con dicha pesadilla aunque nunca me dejo de preguntar por qué escenas deesetipo,dócilesysinmalicia,mepudieron provocar tanto llanto y antipatía. Ahora mis pesadillas de verdad son horrorosas, aunque ya no soy capaz de llorar con desenvoltura frente a las demás personas. Ese septiembre preferídormirpoco,perocreoqueelinsomnio provocado fue peor que soñar

-Ojalá -le dije recordando abstraídamente mi pasado sin prestar atención a su frase incompleta-.Siesquevemoslaluzdeoctubre.

Ycaminamossinvolverahablar.Tomados delamanohacíamosequilibrioparanoresbalarnosenlasbanquetastodavíaempapadasde lalluviaanterior.Sentísumanotibia,descansada, rozando suavemente con la mía. De a momentos me daba apretones de optimismo.

Las calles estaban semivacías, hecho común los viernes por la mañana. Se podían distinguir los albores del otoño impactando en la naturaleza. Los arboles amarillentos se comenzaban a poner rojos en la punta y los suelos ya se miraban tapizados por una alfombra de hojas secas. El viento golpeaba con turgencia invernal.

Enelcamino,nostopamosconlosfestejos de aniversario de la iglesia de la Merced y sentimos retumbar en nuestros oídos los inacabablespetardosquetronabantardíamente en el cielo quebradizo. San Cristóbal de las Casas, país de los cohetones que nunca dejan descansar;todaslasmañanas,todaslasnoches

de todos los días, de todos los años. Los adolescentes de la banda musical se pavoneaban con las alas abiertas sobre los muros frontales de la iglesia, presumidos, rendían danza a las jovencitas, como emperadores descubriendo los alcances de su imperio.

No hablamos de aquello que acontecía y pasamos de largo tomados de la mano; con ella andando por delante, jalándome con tal fuerza que fue imposible si quiera detenerme a observar cómo se desenvolvía el mundo a nuestro alrededor.

De pronto, después de pasar por una calle quehabíancerradomanifestantesinofensivos del OPEZ-MLN (Organización Proletaria Emiliano Zapata-Movimiento de Liberación Nacional), por fin pudimos ver el puente Amarillo muy cerca. Entonces ella aceleró su andar y se supo consagrada.

-Ahí están los trabajadores -le dije cuando estábamos a escasos cincuenta metros de llegar-. ¿Ahora qué?

No contestó. Vio algo y ahora sí su cara se transformó en una flor que ha logrado ver sus pétalos abiertos. Casi comenzó a correr para llegar adonde ya había fijado sus ojos. Fácilmente me di cuenta de su gran emoción y pensé que su idea en verdad podría ser gloriosa. No me atreví siquiera a dudarlo.

Sin que yo lo esperara, paramos a las puertas abiertas de una funeraria que estaba en remodelación o en creación. Los trabajadores, trepados en escaleras, pintaban y remachaban las paredes con cemento fino.

-¿Ahora qué? -le dije un poco ofuscado cuando entré en razón de que habíamos caminado tanto para llegar hasta ese lugar poco más que irrelevante, a mi forma de ver. Ahora sí dudé y mucho-. Te dije que no nos

llevarasalpanteónynostraesalaspuertasde una funeraria.

-Ahora nada -me dijo con la mirada llena de esperanzas, como si mi enfurecimiento no lehubieracausadoningúndesajusteasuplan. -Pasas por debajo de una de esas escaleras y nos vamos a desayunar.

Me tomó del brazo y me trató de llevar por debajo de una de las escaleras mientras los hombres de trabajo nos estudiaban entre mirada y mirada.

-¿Qué? Te volviste loca, Lupe ¿De dónde sacas que pasando debajo de una escalera se nos quitará la mala suerte? Que yo sepa es tradiciónlocontrarioyademásnocreoeneso.

Inequívoca, holgada, y hasta cierto punto con las facciones inteligentísimas, dijo:

-Lo soñé.

-Perdistelarazón-soltésumano-.Miraque caminar tanto por un simple sueño.

Le di la espalda y comencé a caminar de regreso, encolerizado. Fue cuando sentí el cansancio, la sed, el hartazgo de casi todo un mes doblándome los hombros.

-Sí,sí.Tienemuchalógica.Hazmecasopor favor, y te digo.

Estabaalbordedesoltarunsinfíndemalas palabras pero me contuve. Volví mi cara a su frente para escucharla de manera superflua. En mente tenia, oírla y después volver a casa como si nada hubiera pasado. "Sabe que no me gusta perder el tiempo en mi día de descanso, menos caminar a lo bruto", pensé.

-A ver -le dije y traté de ponerle una buena cara, como cuando me hace enojar y para no asentarme en el mal genio, recuerdo la época en que nos conocimos y todo era un sólido mar de enamoramiento.

-Todotienelógica,pollo-dijobruscamente sabiendo que tenía poco tiempo para convencerme-. Mira, las escaleras no son las que dan mala suerte, sólo absorben la que carga la gente. Supongamos que una mujer de mala estrella pasa por debajo de una, la escalera le absorbe lo malo por completo y cuando pasa otra, la descarga sobre ella.

-Ajá-dijeestático,siguiéndolelacorriente inmerso en mi eterno escepticismo-. ¿Qué más?

-Está claro -siguió-. Hace casi un mes, tú pasaste debajo de una escalera, riéndote, burlándote de las creencias de las personas. Enesemomentolaescaleratebañódelamala suertedeotro.Asífunciona,unosdejanyotros toman.Ahoraloquetienesquehaceresvolver a pasar por debajo de una para que ésta absorbatodolomaloquetraes.Ysanseacabó, volvemos a ser los de antes.

"Cuánto me ama para imaginar todos esos disparates", volví a pensar. De un momento a otro me dispuse a recobrar la ecuanimidad. "Quefácilesbuscarrespuestasenlossueños. Como dicen, soñar no cuesta. Todo tiene lógica aunque suene estúpido".

Recordé aquel mar de enamoramiento inolvidable, y mi cara se compuso un poco. Entonces,meacerquédenuevoaella,letomé las manos y besé su frente. Todo esto recordando nuestro primer encuentro romántico; eserecuerdoqueningúngolpedelavidapodrá robarme.

-Es muy claro, mámascha -dije sosegado.

Lasoltécuidadosamenteypasépordebajo de una de las escaleras. Los hombres me miraron y faltó poco para que se soltaran a reír después de escucharnos hablar.

-A éstos se les zafó una canica -dijo uno a otro.

Cuando pasé lentamente por debajo de la escalera,sentícómomishombrosrecuperaron su ligereza, perdiendo súbitamente todos los kilos de septiembre. Quedé debilitado, las piernas me flaquearon y la cabeza retembló. De inmediato supe que nada volvería a ser igual. Nunca más, ni de chiste, pasaré por debajo de una escalera otra vez, aunque fuera el único camino libre de mi ruta.

Fuihaciaellaylebesélasmejillasenseñal de agradecimiento. Los hombres, flotando indolentes en el aire ya no pudieron contener las ganas y se soltaron a reír olvidándose por un segundo de sus obligaciones.

-¡Locos! -dijeron.

-Cuidado -les dije viéndolos seriamente a los ojos-, que falta poco para Octubre y trabajan sobre el peor peligro.

Callaron y sin chistar volvieron a sus deberes.

Conformes, Lupe y yo nos sonreímos, dimos la vuelta y con el cielo, de pronto despejado frente a nosotros, caminamos de regreso a casa guiados por las manos de la luz.

El gran día

El día ha llegado, la intensa lluvia y el edificio en solitario lo indican. Se dirige al clóset, saca de entre su ropa el saco negro, almidonado, listo para usarse. Hace meses que viene planeándolo. Semirafrentealpedazodeespejoenlapared.Sonríecomonunca. Se ajusta el pantalón gris, abotona lentamente la camisa blanca, anuda la corbata y al final se acomoda el saco negro que su madre leconfeccionóunasemanaantesdemorir.Seasomaporlaventana, laciudadlucetanpequeñaeinsignificantedesdeallí,nohayrostros conocidos,muchomenosamigos,sólogotasfríasqueseconvierten en lágrimas. El gran día ha llegado, se adentra al ficticio elevador del séptimo piso.

Hastío

Jesús Guerra

Era una de esas tardes morelenses donde el calor se sentía fortísimo. La quema de los pastizales le daba un plus; provocando un sofocante efectoinvernadero.Noimportaba,despuésdetodo;Sarayahabíatomado su decisión. Ese viaje no podía esperar más. ¿Qué tenía que perder? Su familiahabíadesaparecidoenlosincidentesdetristememoriayuncambio de giro o una nueva vida resultaba harto ocioso e inútil. Mirando su infusión de mate y ante el giro acompasado del ventilador, el zopilote sobrevolando su casa y el tronido del no break, Sara estaba junto a la ventana,esperandoeltiempojustoparaquelascorrientesdeairelallevaran a otras latitudes más frescas. Con las alas del alma bien extendidas.

La aburrida violencia

Compré la novela A wevo, padrino de Mario González Suárez por suerte nuevayasolo$50.00.Aesteautormelohanvendidocarovariosamigosymedios de comunicación. La edición de Mondadori está bien hecha como todo lo que editan. Lo leo y veo que le falta síntesis, lo que cuenta en las primeras 30 páginas puedecontarseencincoomenos.Empiezaaserpredecibledesdeelprimerpárrafo, o más bien parece ir hacia un lugar común. Como sea, le falta fuerza narrativa, no me atrapa la historia y el personaje es inverosímil, se trata de un taxista que se mete en malos pasos, pero también es un filósofo existencialista que utiliza la duda metódica en cada paso que da y en cada situación en que se ve envuelto. Es casi como si fuera el escritor y el personaje al mismo tiempo. Por un lado es de unaagudezamentalquesorprendeyporotrodeunaingenuidadlazarilla.Vive en un puerto del Pacífico mexicano en un ambiente de juerga, muy tercermundista, por lo menos el ambiente sí es creíble. El lenguaje y la sintaxis me agradaron. Arrabalero, el autor, se ve que conoce el ambiente bajo, pero le falta la mínima tensión. Es una obra de violencia, drogas, venganzas y personajes al límite, pero nolograenganchardesdeelinicio.Estoyseguroquesileoelfinal,puedoadivinar toda la trama, con la ventaja de no perder el tiempo. Habrá que leer alguna otra obra, porque lo que es ésta no la terminaré nunca.

Las edades de la pirita

Acercamiento

al

prólogo

de otra antología de Fabre:

scribirpoemasestaninútilcomolavidamisma. Lautilidaddelavidacomoladeescribirpoemas es sustentada por cada individuo y cada uno de nosotros le da el grado de importancia a cada acto, creación, oficio o trabajo realizado durante la vida. La Poesía se sustenta en su propia invención, pero la importanciadelaPoesíaesdeterminadaporcadauno de los poetas, lectores de poesía o editoriales que la publican. El hecho concreto de escribir versos es importantesóloparalosinteresadosyparanadiemás. Así, las antologías de poetas pueden ser medidas en importancia desde el punto de vista del antólogo, de lospoetasseleccionados,delospoetasnoantologados y desde la visión de un crítico. Mi opinión sería la de poetanoantologado,peromegustaríaaclararqueello no implica una visión de "resentido" -como les gusta llamar a los que no estamos de acuerdo con algo política y socialmente aceptado, y como si ello demeritara nuestra crítica. Entonces, al ser poeta no antologado, puedo decir que mi crítica es más libre y más objetiva que la de un crítico literario o de algún participante directo de la antología; pues no tengo interesesdeningúntipo.Losobjetivosquememueven para hacer este texto son mi interés y amor por la poesía.

Valdría la pena aclarar también que este acercamientomáspuntualhaciaelprólogode La edad de oro. Antología de poesía mexicana actual (UNAM, 2012)surgióapartirdelosdiálogosconalgunospoetas incluidos en ella después de divulgarse ciertos comentarios que fueron tomados como "irresponsables"demiparte,enunacharlacasualenFacebook, loquemehacepensarqueahoraunotienequecuidarse de lo que opina en un ambiente tan de chisme, de comunicación inmediata y poco serio en cuanto a críticaliterariaserefierecomoloeslaredsocial,pero enfin:cadaquiénledaimportanciaaloqueleinteresa. Lo bueno de esta experiencia es que puedo, motivado por esas incomodidades ocasionadas involuntariamente,escribirestetextoquenuncaconsideraríacomo

un ensayo profesional o académico, si no una crítica sobre la visión impostada que Luis Felipe Fabre tuvo que crear para convencer al lector inexperto de que los poetas que conforman esta antología son eso: los poetas que dan rostro a la poesía mexicana actual.

No pretendo generalizar aunque en algún momento lo pueda parecer; en donde diga "poesía mexicana"o"poetasmexicanos",estoyhablandosólo de alguna poesía mexicana y de algunos poetas mexicanos.

Desde hace algunos años vengo diciendo y escribiendo que en la poesía mexicana y en algunos poetasmexicanosnoexistelainvenciónnilamutación yquelamayoríadeéstosimitan,copianyhastaplagian por su falta de genio o don creativo. Afirmo nuevamente que para mí No existe la llamada Poesía Mexicana.Ydespués de esta afirmación se confirma, para mal, que Fabre vuelve a usar un concepto ya tan gastado pero poco analizado o estudiado a fondo; dando por hecho que todo mundo sabe qué es lo que conforma, parte por parte, cada órgano que hace funcionar al ente de innumerables cabezas que es la PoesíaMexicana.Luego,comoparasalvarseunpoco, afirma en una entrevista que lo hace "sólo para molestar"; entonces, ¿él puede buscar la provocación y la molestia, pero uno no? En teoría, cuando lanzas una piedra diciendo que es para molestar, aceptas implícitamentelareacciónqueestásbuscandoenella. En mi caso, más que molestia, siento cansancio de leer siempre sus mismas declaraciones, y trato de entender su afán de mostrar las propuestas "más transgresoras y atrevidas" del momento, cuando en realidad son propuestas que forman parte de toda una tradición poética mexicana que al parecer no ha llegado a sus ojos, y lo único que sí demuestra es su desconocimiento de muchos otros autores que coinciden en el desarrollo de temáticas y estructuras, pero al parecer, no en los puntos de reunión en los que "ha descubierto" a sus autores de la poesía mexicana actual.

delatripa: narrativa y algo más

Preguntas aparte: ¿México se ha convertido en el país de las antologías poéticas? ¿Se le ha ganado a España en publicar más antologías de poetas vivos? ¿Sirve de algo en verdad publicar tantas antologías de los mismos poetas con casi los mismos poemas? ¿Será sólo un incentivo más para que el Estado les siga resolviendo la vida material, o será que las instituciones quieren ver el producto sin importar la calidad de las antologías?

Párrafo histórico:Tenemos como ejemplo principal que en el 2002 salió publicada la antología El manantial latente / Muestra de poesía mexicana desde el ahora: 1986-2002. Selección y prólogo de Ernesto Lumbreras y Hernán Bravo Varela (marcaré en negritas los conceptos que ocupan los antólogos en lossubtítulosparavercómosereafirmanyconfirman su obsesión por ser Los Poetas de este tiempo, del aquí y el ahora de México e Hispanoamérica). Esta antología publicada también con la intensión de transgredir y molestar (como mencionó uno de los poetas antologados a otros poetas no antologados durante una plática en una cantina enfatizando que esa era una de las intenciones de Lumbreras y Bravo Varela),fue,desdemipuntodevista,unfallidointento por registrar la producción poética de ese momento, reafirmando, por el contrario, la falta de paciencia poética, la inocencia e inexperiencia por parte de los antólogos y el abuso de la condición de "jóvenes poetas"-circunstanciacronológicainventadamáspor CONACULTA que por la Poesía.

El manantial latente quebró de por vida la confianza que se pudo haber tenido en los poetas antólogos mexicanos. De por sí, las compilaciones anterioresdesde Poesía en movimiento hasta Asamblea de poetas y La rosa de los vientos crecieron mochas; quiero decir que por lo menos el 50% de poetas antologados dejaron de escribir o nunca decidieron dedicarse a la poesía en serio, y creo que lo mismo pasóconlossuscritosen El manantial latente.Aunque al final de la antología los amables y comprensivos antólogoshacenunalistade"Todoslosposiblespoetas que en algún momento de su vida escribirán algún buenpoema"ynomemolestadecirqueestoyincluido enesalista,yquealpasarya11añosdesupublicación, ahíhayquedarleméritoalosvalerososcompiladores, pues sí que estoy en mi mejor momento poético, cosa

delatripa: narrativa y algo más

quenopodríadecirdealgunospoetasprematuramente antologados. Y así se fueron sucediendo otras antologías casi con los mismos personajes poéticos, variantes más variantes menos. 2005: antología El decir y el vértigo / panorama de la poesía hispanoamericana reciente (1965-1979) Selección de Rocío Cerón,JuliánHerbertyLeónPlascenciaÑol.Prefacio: HernánBravoVarelayEduardoMilán.Oveodobleo algunos nombres se repiten de antología en antología (por cierto, sabemos que Milán es un producto de Paz y que este producto ha acogido a estos poetas antologados como casi hijos o ahijados suyos; en fin, otro caso que merece texto aparte). Esta antología nos muestra a los poetas hispanoamericanos, van otra vez con esa manía del tiempo: reciente. Y por supuesto no sólo sería cuestionable el autonombramiento y la exclusión más aventurada, pues en este caso hablan portodaHispanoamérica,sinolaspropuestasestéticas. Pienso siempre si el ser aceptado, leído y antologado no genera en verdad un peligro para los poetas que están recién escribiendo su obra. Pero en fin, en ese sentido no se puede culpar a los poetas, pues en muchoscasossuvanidadrespondeporellosysabemos desde hace mucho que ninguna antología, por insistente que ésta sea o por la mayor calidad poética o editorial que tenga, podrá, nunca, garantizar la calidad de la propuesta estética del poeta. 2008: antología Divino tesoro / Muestra de nueva poesía mexicana (1965-1979). Coincidencia o no, creo en verdad que el tiempo los aterra. ¿Y quién hace la selección y el prólogo? ¡Sorpresa! Luis Felipe Fabre. ¿Y a quiénes selecciona? Pues no a los mismos, pero sí a casi los mismos. Ustedes pueden verificar cada una de estas antologías y la repetición de nombres queasuvezapareceránrelacionadosendiversosroles públicos: jurados de premios; comité dictaminador paraotorgarbecas;editoresdelaseditorialesendonde se publican y promueven las ediciones de estas antologías; funcionarios de instituciones en donde se apoyanestasmismasantologíasyporsupuestoenese afán de presentarse mutuamente como Los Poetas Mexicanos de la Poesía Mexicana.

Preguntasaparte:Enesascoincidencias,detanto repetirse poeta por poeta y poema por poema y antología por antología: ¿Cómo no creer que conforman un grupo? Tal vez se trate de una acción involuntaria, tal vez no exista una consigna o un

manifiesto que los congregue como grupo, tal vez ni siquiera sea ése su objetivo ni necesidad en absoluto, peromeparecequesiunoesatentoyatacabos,puede encontrar ciertos lazos que van más allá de una relación amistosa. Que si el punto de coincidencia principal es la amistad, eso no debe siquiera cuestionarse. Lo que es cuestionable es si acaso el hecho de ser amigos y poetas les da el pase automático para autoerigirse de esa forma sin tomar en cuenta a todos los grupos de amigos poetas que tendrían el mismo derechoycapacidadparaautoerigirsecomolospoetas mexicanos actuales de todos los tiempos, pero que curiosamente, no tienen la necesidad de hacerlo.

Esta reflexión viene al caso porque cada que abroundiálogoconunodeestospoetasquepodríamos llamar "Poetas de la Casa del Poeta" o del FCE o del CONACULTA o del INBA, me dicen que no pertenecenaningúngrupo.Quenoestamosenlaépoca de Los Contemporáneos y que yo no soy estridentista ni infrarrealista. Cierto. Pero, ¿no es un poco sospechosa su forma de actuar o su desempeño como persona en el disfraz del poeta? Sin embargo, el verdadero diálogo está en la lectura y en el descubrir la calidad en lo que escriben algunos poetas de ese otro "no grupo". Muchos de ellos realmente tienen una propuesta poética decorosa y profunda. Nacieron para escribir poemas. Pero también es necesario reconocer que, como en todos lados, y como dice el mismo Fabre al referirse a algunos poemas de Papasquiaro, existe basura, así que espero no se ofendan si en algún momento señalo algunos elementos de este tipo en algún poema, que la aseveración será siempre al texto y no al escritor.

Terminaré esta introducción diciendo que hay como otras cinco antologías que pretenden reunir a lo más actual o representativo de poetas mexicanos o hispanoamericanos pero que no aportan mucho a las ya mencionadas. Ello radica en que los criterios de selecciónvaríandeacuerdoalpoetademodaquesalte de algún sitio de la Novedad Editorial, el Premio Nacional o la Beca en curso, o de acuerdo a lo que el programa editorial sudamericano vocifere como actual, e incluso de acuerdo a los comentarios de amistades directas y de encuentros poéticos a los que el antólogo haya sido invitado. Porque, eso sí no podrán negarlo: en este baile de vanidades, mientras

mejortratesalpoetaenjefedelmomento,mejorserás tratado, y así hasta crear eslabones casi eternos que suelen romperse sólo cuando los intereses personales separan a cada poeta de su anterior "no grupo" de poetas.

Ahora sí, vuelvo a la antología La edad de oro / Antología de poesía mexicana actual. Fabre cuenta en su prólogo que uno de los motivos que lo llevan a crearlarecienteantologíaesporqueunsudamericano comentó que "A la poesía mexicana le falta calle". Jorge Esquinca (otro maestro poeta del "no grupo") ya había mencionado la misma anécdota en la Casa del Poeta como por el año 2011 cuando dicha institución organizó unas mesas de discusión sobre la poesía mexicana actual. Curiosamente, durante esas sesiones la mayoría de los invitados habló sobre la obradeLosContemporáneosyLópezVelarde,loque me hizo pensar que existe una severa confusión sobre loqueeslapoesíamexicanaactual,ounaprohibición a hablar de ello en público, como le pasó a Bautista en una de esas sesiones cuando empezó a referirse a autores vivos y con obra reciente, y con una frase fulminanteAntoniodelTorolohizocallaralmomento, lo que ocasionó que Bautista no volviera a emitir comentario alguno. En dichas mesas Esquinca dijo queenArgentina,alguien,(nuncahandichoquiénfue el poeta que lo dijo y si era argentino o no), comentó que "A la poesía mexicana le falta calle", y yo, riendo dentro de mí me dije que claro que cualquiera que leyera El manantial latente o a Jorge Esquinca, sea sudamericano o no, pensará lo mismo. ¡Claro que les falta calle! Pero esto que se toma como una afrenta o undefectonoesnilounonilootro.Sóloesunacruda verdad que no tendrían que esmerarse en cubrir o afanarse en demostrar lo contrario, simplemente deberíanasumirsuestiloyestudiarlo,noparaforzarse a cambiarlo, si no para enriquecerlo en una estética particular. Pero, ¿qué sucedió? Que a Fabre se le ocurrióqueconunaantologíadealgunosamigossuyos podría demostrar lo contrario y afirmar con orgullo que él había sido el descubridor de poetas mexicanos en cuya propuesta Sí existía la calle necesaria como para callarle la boca a quien se atrevió a decir lo contrario. Sin embargo, parece que su selección fue dictada más por capricho personal que por un interés verdadero de investigar sobre la producción poética

delatripa: narrativa y algo más

del país en donde es evidente la preocupación y la diversidad de abordar dicho tema. Desde los años 70, odesdeantes,existenpoetasconCalleynosóloenla poesía sino con la calle misma, en la carne. Aquí es donde uno confirma que a Fabre no sólo le hace falta calle sino también lecturas. Eso se soluciona con que tuvieralahumildadypacienciadeleeralotro90%de los poetas mexicanos cuya actualidad está implícita en la atemporalidad.

Dice Fabre en su prólogo: Porque aunque haya todavía quienes se empeñen en negarlo (o tal vez sea un tanto invisible para sus practicantes), durante la mayor parte del siglo xx hubo un modelo poético imperante en México que se identificaba a sí mismo con las dimensiones "más sublimes" de la lengua: un lenguaje de "altos vuelos" sustentado en una confianza desmedida (y un tanto anacrónica) en los poderes de la lírica.

Pero no hay negación, es claro que él y sus antologías reafirman esa aseveración. Otra vez oí al poeta Esquinca defender a la vieja frase francesa de "La poesía por la poesía". Y el mismo Esquinca me aseguró que sólo leía a sus amigos. Me imagino que él,creyéndosedelasfamiliasimperialesnomezclaba su sangre poética con ninguna otra poética. Y como EsquincaesamigodeFabre,medapieparamalpensar que esa práctica de no leer a quien no es su amigo se transmitió como un consejo que, desde mi punto de vista, lleva a la ignorancia y a la terrible actitud de proveerse sólo de lo que, por conocido, es bueno, sin arriesgarse un poquito a conocer aquello que dicen quenodebeleerse,quenovalelapenaleerseoquees muy difícil de leerse; aquello que se encuentra en las editoriales lidereadas por gente que, dicen, es intratable, por gente con la que no hay que juntarse porque suele tener opiniones críticas ante el sistema cultural vigente.

Más adelante Fabre continúa justificando su selección diciendo que la antología actual es muestra de que ya rompió el cascarón, y se revela: Podría leerse, incluso, un cierto "clasismo" más que un "clasicismo" (en un país tan clasista como éste) en las exquisitas maneras de aquel modelo poético. Un intento por demostrar, poema a poema, una pretendida superioridad sobre otras posibilidades verbales. ¿A

la poesía mexicana le faltaba / falta calle? Sorprende que siendo el lenguaje coloquial tan lúdico en México, la poesía fuera tan tiesa, tan acartonada, tan formalita. Un asunto de buenos modales. De gente bien educada. Culta.

Pero por favor, basta leer cualquier ensayo escrito por él en la revista Letras Libres para darse cuenta de que lo que según él denuncia y rompe, lo cuida y asegura para su bienestar propio. No existe contradicción más grande que querer ser un punk con encajes.

Preguntas aparte: ¿Creerá Fabre que en verdad es un rebelde? ¿En serio se siente ya muy de la calle? Llama polémicos a un grupo de poetas totalmente consentidos por un sistema político y social corrupto. ¿En dónde está la polémica de El manantial latente si es muestra de docilidad pura? Ni siquiera dan para armar una polémica. Ante la sujeción de parámetros estéticosnoexistediscusión,porquetodoestátanbien acomodado que no altera ningún orden. Tal vez, más que polémica, lo que ocasionó El manantial latente fue que el otro 90% de poetas mexicanos sonrieran conscientes de que el poeta tiene que vivir en su espacio poético y no en el tiempo de los antólogos. Ése es un pensamiento romántico que me permito creer.

Algunospoetasdeestaantologíamecuestionan en demasía el por qué generalizo tanto, pero no son autocríticosconFabreyaélsílepermitengeneralizar en el prólogo: Ahora bien, lo anterior no quiere decir que las nuevas generaciones no lean a los poetas mexicanos de otras generaciones. ¿A qué poetas mexicanos de las nuevas y otras generaciones se refiere? Aquí asegura que todos los poetas vivimos en un país de poetas lectores en donde todos nos leemos unos a los otros cuando él mismo no lo hace y miente para beneficiarse y beneficiar a sus antologados. Como podemos comprobar casi de inmediato,sóloveanlalistadelosbecariosdelSistema Nacional de Creadores y la lista de los jurados y se darán cuenta de que siempre hay un mínimo del 10% de los mismos escritores y poetas.

Fabre descubrió recientemente a Papasquiaro y a los infrarrealistas y ya cree que con ese descubrimiento ya está del otro lado de la poesía mexicana

delatripa: narrativa y algo más

yqueyaproponecosasnuevas.Yesoquelosdescubrió -como muchos lo hicieron- gracias a la fama inevitable de Bolaño y no por la poesía de los infras.

Como lo escribí en otro texto, para mí el único poeta, de este nuevo no-grupo, que ha demostrado serlo es Gerardo Deniz, y eso que el viejito recibió en sumomentotodalaayudadePazyahoratodalaayuda del grupo de Paz. Pero a trabajo dado, merecimiento otorgado. Aunque se le haya otorgado un premio Aguascalientes sin pedirlo.

Nunca he creído y no practico el culto a la personalidad. Y no sé por qué, las extravagancias personalesenalgunospoetassetomacomoalgobello e imaginativo y en otros poetas molesta e indigna, cuando sólo deberían tomarse como eso: extravagancias personales.

El ejemplo que pone Fabre: En este sentido puede entenderse la popularidad de Gerardo Deniz entre las nuevas generaciones de poetas (Minerva Reynosa incluso se ha tatuado un par de versos de Deniz en el pecho a modo de collares: un fabuloso tatuaje hay que decir).

Preguntas aparte: ¿Cómo no va a ser popular Gerardo Deniz si tiene a todo el aparato cultural mexicano apoyándolo y este mismo aparato cultural mexicano sepulta al 90% de los otros poetas no populares? Un ejemplo claro y concreto: la Coordinación Nacional de Literatura del INBA mantiene, además del sitio donde se difunden sus actividades cotidianas, un Catálogo Bibliográfico de Escritores Mexicanos. Se sorprenderán cuando lo consulten y descubran la cantidad de escritores que hay en el país. Pero más sorprendente será revisar la cartelera de actividades de dicha institución y encontrarciertosnombresqueserepitencíclicamente, concentrando los recursos de una coordinación que supuestamentedeberíaservirparaapoyarydifundira los escritores de todo el país (en tanto que ostentan lo Nacional en su nombre) en beneficio de algunos cuantos, casi siempre del Distrito Federal y cuya inclusión obedece, la mayoría de las veces, a lo políticamentecorrectomásqueasupropuestaliteraria. Comosuelesuceder,lasalegríasdeunoscuantos serán las desgracias de muchos. Pero eso no parece importarcuandoereselbeneficiadodelapolíticacultural, y es entonces cuando surge la polarización en-

tre abusivo y resentido; lo que Sabato llamaba "el moño": tiene que existir un Pinochet para que exista un Ché Guevara. Yaquí lo curioso es que muchos de los poetas beneficiados por un estado corrupto como el mexicano se crean estar del lado del Ché. En fin, una paradoja a resolver con la misma vida.

Veo otro ejemplo de justificaciones: Entre los mexicanos antologados en El decir y el vértigo se encuentran ya Eduardo Padilla (1976) e Inti García Santamaría (1983): dos poetas que inauguran una nueva fase de la poesía mexicana.

Creo que ni el ensayista más adelantado podría explicar qué quiso decir Fabre con eso de: nueva fase de la poesía mexicana.

Es verdad que se puede arriesgar "sólo para molestar", como él dice, pero aquí hace quedar mal a estos dos poetas que, como él mismo ratifica, habían sido seleccionados anteriormente y uno de ellos aparece en las dos antologías. Si para ellos la nueva fase de la poesía mexicana es ser radical, entonces quéhacemosconpoetasdelatalladeRamónMartínez Ocaranza o del mismo Orlando Guillén, en verdad radicales. Y si fueran radicales en vida y no sólo en obranuncahubieranaceptadosalirpublicadosenuna antología. Aquí veo un defecto de discurso al querer asignar palabras que los poetas no llenan, y no por defectodelpoetanombrado,sinoporquelanaturaleza del poeta es otra; lo que sucede es que Fabre necesita definir sus conceptos de actualidad para justificar la seleccióndeestospoetasynootros.Lonovedosopara él es querer darle calle a los poemas "descubriendo" formas y vistiendo de disfraces a los poetas que él está antologando.

Los poetas antologados son:

Paula Abramo / (Ciudad de México, 1980)

Alejandro Albarrán / ( Ciudad de México, 1985)

Rodrigo Flores Sánchez / (Ciudad de México, 1977)

Inti García Santamaría / (Ciudad de México, 1983)

Maricela Guerrero / (Ciudad de México, 1977)

Yaxkin Melchy / (El Telar, 1985)

Óscar de Pablo / (Ciudad de México, 1979)

Minerva Reynosa / (Monterrey, Nuevo León, 1979)

Daniel Saldaña París / (Ciudad de México, 1984)

delatripa: narrativa y algo más

Yaunquesehayanmolestadoconmigoalgunos de los poetas antologados cuando me referí a ellos como clasemedieros o pequeño burgueses, por más que leo su ficha biobibliográfica no veo que ninguno sea campesino, ni obrero, ni indígena, ni pordiosero. Creoqueleshaidomuybienensuscarreraspoéticas. Yquesienalgúnmomentohanparticipadoenalguna marchasocialopolíticaessóloporapoyaratanbuenas causas con su amable conciencia. No encuentro el insulto en una condición socioeconómica real.

LoquehaceFabreacontinuaciónesexplicarnos por qué seleccionó a estos nueve poetas y por qué sus estéticastienenlacallenecesariaparaserconsideradas como la poesía mexicana actual:

Ambas escrituras parecen provenir de otro sitio:... / poemas de García Santamaría, por su parte, proponen un lenguaje al borde del autismo pero provisto de una ternura adolescente.

Toda poesía proviene de otro sitio. Se podría uno decidir por el autista o por la ternura adolescente. Y si decidimos, ¿el poeta García Santamaría quedará bien representado en sus poemas?

El título de uno de sus libros podría entenderse casi como una poética: Corazoncito. El tono juvenil (casi infantil) de sus poemas resultó más que refrescante en un momento en el que el tono engolado de la poesía mexicana se empeñaba en agonizantes estertores.

Y dale con generalizar ¿no que eso no se hace? le pregunto a los dos poetas antologados que me regañan porque generalizo. Entonces, ¿cuando Fabre hablabiendeustedes,sísepuedegeneralizar,ycuando se les critica no se puede generalizar?

Y podría Fabre ser más preciso y explicar en qué momento el tono engolado de la poesía mexicana se empeñaba en agonizantes estertores. ¿Sucede en la Condesa o en la Roma o en Polanco o en el Pedregal? Porque para mí el invento de la poesía mexicana de ciertoscírculospoéticosnohadejado,desdesuinicio, de tener ese tono engolado y de reproducir esos agonizantes estertores.

Creo que aquí, en lenguaje popular, se le podría decir al prologuista: "No me ayudes, compadre".

QuitándoletodoslosletrerosqueFabrelespuso, los poemas seleccionados se salvan solos o mueren solos. No hay de otra para el poema publicado, lo

delatripa: narrativa y algo más

escribaquienloescriba.Lodesmedidosonlosletreros y explicaciones gratuitas con que Fabre equivocadamente los quiere presentar, forzando a los poemas y a los poetas a vestir una ropa estética que no tienen. SientroaleeraGarcíaSantamaría,mehagocómplice de los poemas del poeta y dejo totalmente el comentarioenelprólogo.Nialbordedelautismo,niadolescente, ni radical, ni inauguración de nuevo lenguaje, ¿por qué no sólo el disfrute de un poema, y ya está? ¿Por qué debo encontrar lo que Fabre dice que hay ahícuandopuedoleersinprejuicioalgunoyencontrar muchas otras cosas, algunas quizá contrarias a lo que él asegura que están en el poema?

Así sucede con cada uno de los poetas antologados.Lasexplicacionesdelantólogosóloensucian y abruman la personalidad y la estética de cada uno de ellos. Por eso insisto: lo molesto no es la antología en sí, sino la absurda necesidad de proclamar a todos losvientosquesetratadelapoesíamexicanaactualy que nos quieran convencer, cuando sabemos que no es necesario, de que estos poemas tienen calle:

Tal es el caso de Yaxkin Melchy (1985) e Iván Ortega López (1990), cuyos poemas, a la vez que retoman elementos de poéticas transgresoras, por momentos juegan a parecer anotaciones delirantes hechas en un cuaderno de clase de química o biología una mañana cualquiera en la secundaria. Anotaciones delirantes: "Hace falta locura en el mundo mexicano", escribe Yaxkin Melchy al comienzo de uno de los poemas aquí antologados. Pero donde dice "mundo" habría más bien que leer "poesía", pues más que en el mundo mexicano (que está ya bastante desquiciado), donde realmente hace falta locura es en la poesía mexicana: tan lúcida, tan inteligente, tan racional, de Sor Juana a Paz, pasando, claro, por Gorostiza: "¡oh inteligencia, soledad en llamas!" Y por lo que puede leerse, Yaxkin Melchy está dispuesto a aportar toda la locura que haga falta.

No sé si los poetas antologados leyeron el prólogo antes de que se publicara este libro, pero si son tancríticos,autocríticos,rebeldes,callejeros,radicales e irreverentes, ¿por qué aceptaron tales absurdos al ser definidos de esa manera en el prólogo?

Está claro que uno no va a encontrar locura en Paz o Gorostiza y menos en Sor Juana; ¿quién cree Fabrequesomosloslectores,unosverdaderosidiotas

o que sólo leemos, como él a sus amigos? En verdad esas aseveraciones con respecto a lo que escribe Yaxkin son absurdas hasta la risa. Se lee uno todos los manifiestos vanguardistas desde principios del siglo XX hasta llegar a los más latentes que, en caso mexicano son los manifiestos infrarrealistas, y ahí encuentraslalocuraquepideYaxkin.Escomoquerer ir al Palacio de BellasArtes a patinar en la sala mientras dices tus poemas. Lo novedoso no está en pedir la locura, lo novedoso estaría, en verdad, saltar a la locura real, sin las fotos o videos en youtube tan pertinentes y decentes, porque, al final de cuentas, si no lo fueran, hasta el youtube los borraría si lograran demostrar toda la locura del mundo. Vuelvo a decir que esto no es culpa del poeta nombrado o hasta ridiculizado involuntariamente, esto es una falta de lecturasdeFabre.Yaxkinnomereceunapresentación tan socarrona.

Lamentablemente para Fabre, 30 poetas más o menos, nacidos entre las décadas del 50 y el 90, son los que proponen, dicen, dictan modas, marcan derroteros e inauguran estéticas en todo México.

¿Realmente cree que todo el mundo poético son sus antologías y las que hacen sus amigos? ¿En verdad se puede llegar a estar tan enfermo de vanidad y de cinismo crónico?

Se agradece que la antología se pueda disfrutar sin su prólogo y que a cada poeta se sostenga por sí mismo, sin tanto letrero absurdo ni tanta desquiciante explicación de quiénes son y adónde van y de dónde vienen. Por ejemplo: Un poeta renovador siempre es una excepción y por lo tanto un solitario. ¿Cuántos poetas renovadores coexistiendo en un mismo tiempo y en un mismo país son necesarios para hablar de una época excepcional? Aquí van nueve y hay más.

¿En serio es una broma? ¿Cree inocentemente Fabre que uno va a aceptar este comentario y dejar que les coloque una corona de cartón por ser poetas "renovadoresysolitarios"?¿Esenserioqueunotiene que quedarse callado y aceptar esta ridiculez? Y después se enojan conmigo porque escribo "tonterías y falacias" (lean bien, Flores y Albarrán: de mí se burlan y cuestionan lo que digo y permiten que Fabre los defina con malabares y luces de artificio que sólo adornan la superficie de lo que ustedes están en vías deconstruir,porqueunaépocaexcepcionalyunaobra

excepcional podrá percibirse hasta que ambas hayan sido verdaderamente construidas y no mientras se encuentran en el proceso de gestación, como sería el casodeambosentantoquesucarrerapoéticaempieza, o va a la mitad, pero en lo absoluto está concluida). Se podría notar, en cada uno de los poemas aquí antologados, la intención de renovar estructuras y juegos lingüísticos, pero más allá de que lo logren o no, habría que tomar en cuenta que no son los únicos que lo han o lo siguen intentando. Y eso de ponerlos románticamente como poetas solitarios, por favor, ni quevivieraneneldesierto.Esverdadquenoconozco personalmente a los nueve, pero puedo decir que los que conozco nunca han sido solitarios o por lo menos no en el sentido de La Gran Soledad Renovadora. El abuso de la grandilocuencia lleva al ridículo.Ycon el párrafoanteriorsecompruebaladesmedidalógicaque desde El manantial latente se ha tratado de imponer. Otros ejemplos, para terminar de mover la cabeza y dejar solos a los poemas y al lector:

Yo quisiera destacar dos rasgos que encuentro, en mayor o menor medida, en los poemas de estos nueve autores: la desconfianza ante la escritura poética y la incorporación del contexto del poema al interior del poema.

Creo que otros poetas mexicanos, franceses, ingleses, españoles, chilenos, argentinos y etécetera yalohanhechodesdehacecomo100años.Noveolo destacable. Si quieren ejemplos les puedo dar por lo menos50referenciasbibliográficasparaqueentiendan que es mejor un redescubrimiento constante de estas formas,queasumirqueseestádandoporprimeravez El Descubrimiento.

Esta desconfianza ante el fenómeno lírico resulta más que acusada en la obra de Daniel Saldaña Paris que incluso dice o simula decir: "Quisiera escribir sobre la escritura, como un bardo que se muerde la cola. / Pero no llego: muerdo…" Sus poemas (ya de por sí condensadísimos, al borde de la implosión) siempre están a punto de no serlo, de ser algo menos o algo más, y en ese filo se tensan.

Qué curioso, para Fabre todo está al borde de algo,enSantamaríaalbordedelautismoyenSaldaña Paris al borde de la implosión. Será que por eso tanto estar al borde lo hace no concretar nunca su propia visión de la poesía mexicana. Estar en los bordes no

delatripa: narrativa y algo más

te permite ser ni ver el fondo, y casualmente el 90% delospoetasmexicanosestáenelfondo.Fabredebería de decidirse por fin a dejar de estar al borde y saltar de una vez.Tal vez así se salvarían un poco su texto y sus antologías.

En cuanto al otro rasgo común que aprecio en la obra de estos poetas, la incorporación del contexto del poema al interior de este mismo, supone dejar de entenderlo como algo fuera -por encima- del mundo para (volverlo a) comprender como un lenguaje en relación con el momento y el lugar desde donde se escribe.

¿Así o más retórica de relleno?

Por supuesto que se trata de una escritura política: si incorpora el contexto al interior del poema es también para reverberar en el afuera del poema, en el contexto.

Si es una escritura política entonces significa quealospoetasdelaCasadelPoetayanolesmolesta (o ya entendieron) la poesía social o los panfletos.Ya habla bien de Fabre que acepte que la poesía no es sólo para la poesía. Un acierto.

Es en este sentido que considero a "Carta" de Rodrigo Flores como uno de los poemas más emblemáticos de este momento y por ello esta antología abre con él. Allí el poema, o lo que tradicionalmente se entendería como poema, es negado y en su lugar lo que se nos ofrece es el mero contexto del poema ausente: Flores plantea en ese casi no-poema una lectura de poesía donde el público escuche detrás de paquetes "sanguinolientos" (que no sanguinolentos) de carne para hacer visible el contexto del que la poesía generalmente no da cuenta.

Escuriosoentenderqueduranteañosciertotipo de poetas estilo Fabre han negado la validez de este tipo de poemas, y ahora que alguien cercano, por no decir del grupo, desarrolla este tipo de poemas ya se convierta en algo para aplaudir, agradecer y leerlo. Floresllegóaestetipodepoemascasi100añostarde. Otros poemas del mismo Flores recrean mejor su realidad, con un humor negro más llevadero y más verosímil; no necesita explicarnos lo que es evidente en una descomposición social, como en ese poema "Carta",queesunbuenejerciciodenotarojaenprosa, pero sin vislumbres de poesía:

De hacer visibles los cuerpos, los cuerpos reventados, los cuerpos intervenidos por la

delatripa: narrativa y algo más

muerte y la violencia. Barrio protestaba contra la dictadura militar. Yo sé y no sé contra qué o contra quién protestaría; incluso sé y no sé si se trataría de una protesta. Un amigo me dijo que le parecía "gratuitamente escandaloso". Tal vez. Me gustaría conocer tu opinión. ¿Cómo has estado? (…)

Mi opinión es que es claro el cómodo sillón desde donde se escribe este texto. Y hasta se podría serirónico:¡ay,loscuerposreventados,ay,quémiedo, qué tristeza, qué dolor...! y cosas así de moco tendido que llegan a volverse efectistas más que poéticas. Como digo, cuando el poeta Flores no quiere dar testimonio de una preocupación mediática por lo socialmente humano, es mejor poeta.

Yhablandodeefectismosmediáticos,unpárrafo más de la justificación de Fabre:

Más que la escritura como testimonio o como denuncia, se trata aquí del poema como fecha. Elijo el término fecha, porque no estoy del todo seguro de si se trata de una apuesta por la historia o por el puro hoy. Y en la fecha se tensan ambas posibilidades. En cualquier caso es un desmarcaje de aquella concepción del poema (tan cara a cierta poesía mexicana) como un instante suspendido e iluminado, fuera de la historia y del calendario, pero desde ya inscrito en la eternidad.

"...desde ya inscrito en la eternidad." Más modestianosepuedepedir.Ydespuésnoquierenque uno los critique (pero "si se ponen de pechito", como dicenenlacalle).Aquíélsolitosemata:¿Cómoseguir unavanidadasí?Nosécómosepuedeestardeacuerdo con un tipo tan enfermo de tiempo y tan ególatra: ETERNIDAD.

Óscar de Pablo, por su parte, lleva ya varios libros explorando nuevas posibilidades de aquello que en otro momento solía descalificarse con adjetivos como "panfletario" o "comprometido". En su poesía es claro un compromiso político aliado a una conciencia histórica (en su caso sí) que es también una conciencia de la historia de la forma,delatradiciónpoéticayechandomano de ella con singular fortuna. O la poesía de Paula Abramo, donde la autora hace confluir a la poesía mexicana con cierta tradición poética brasileña: aquella donde la

experimentación formal es también una preocupación social: la del "Poema sucio" de Ferreira Gullar -que Abramo tradujo espléndidamente-olade"Elperrosinplumas" de João Cabral de Melo Neto. En ella el rigor y la exactitud formal son una ética. Pero también es político el estruendo de los poemas en prosa a todo volumen de Minerva Reynosa: post-feministas, post-punks, post-pop. Estruendo: no es casual tampoco que AlejandroAlbarránhayatituladoprecisamente Ruido a su primer libro. Un estruendo que oponer a la poesía del silencio: tan aséptica, tan apolítica, tan pura. Frente a esa poesía, el contexto, el ruido del mundo, el sonido de fondo, un paisaje brutal aunque inasible entrevistovelozmentedesdelaventanilladeun tren en marcha: ese imparable poema de Maricela Guerrero llamado Kilimanjaro.

En ciertos poetas, conocidos algunos, otros no, es preferible -como lo señalara Cardoza y Aragónquedarse con alguna que otra bella página que hayan escrito. Con estas afirmaciones da pie para volver al mismo cuestionamiento: ¿por qué sería válido para nosotros entender y creer que por tratarse de los amigos de Fabre de pronto ya es bueno que escriban panfletosypoesíasocialypost-todo?¿Yqueentonces todos los otros poetas mexicanos que han escrito exactamente con esas características desde hace más de 50 años no tengan validez aunque estén vivos y puedanserleídosyentrevistadosyconmayorderecho a ser denominados con la etiqueta "poesía mexicana actual"? No encuentro la novedad ni la actualidad en loquemencionaFabrecomoaciertosenestaspoéticas. Si él ignora la gran tradición panfletaria o de poesía social o anárquica o post-todo, es porque apenas está descubriendo en la poesía mexicana lo que para otros lectoresyaesunatradición.Habríaqueprestarlevarios librosparaquesepongaalcorrienteydejededescubrir cosasyahechas(aunqueseaporpiedadyquenoquede en ridículo). Los poetas antologados merecerían más respeto y más atención. No están inaugurando nada, vuelvo a decir, son producto de algo que se viene escribiendo desde tiempo atrás en México y en todos los países del mundo. Disfrutar la lectura de sus poemasyseguirdecercasuslibrosrecientesyfuturos es obligación amable para que no nos pase como a

Fabre: por no leer lo que no se vende en el FCE o lo que no publica CONACULTA o lo que no leen nuestros amigos, ignoramos lo otro que también se escribe en México.

Y es que esta antología toma partido sólo por algunas de las posibilidades de la poesía mexicana: las que a mí me parecen más interesantes, propositivas, vitales, las que intentan asumir formalmente su época, representadas por estos nueve autores aunque compartidas por muchos más.

Vaya, algo un poco más sensato pero igual de inexacto. ¿Cómo no le van a parecer las más propositivas, vitales y las que intentan asumir formalmente su época si son las que él presenta? Si estáqueriendovenderunaideaestéticaopoética,está perdiendo clientes.

Casi podría decirse que la poesía mexicana se ha polarizado (no quiero sonar maniqueo, pero el país anda así, aunque claro, todo dentro de una conciencia y una retórica de la pluralidad): por un lado, esta serie de escrituras que se erigen más allá de lo que fuera la poética dominante, que se radicalizan, se cuestionan, y exploran más allá de sus límites; y, por otro lado, poéticas que se han asumido como albaceas del legado de la poesía más conservadora e institucional, que han hecho suya la encomienda de salvaguardar lo tradicionalmente considerado como poético (llevándolo a extremos involuntariamente ridículos y accidentalmente caricaturescos), o que, en su defecto, han intentado utilizar ciertos recursos "posmo" pero la noción de poesía en que se sostienen sigue siendo la del antiguo modelo poético.

En esto sí que peca de inocente. En verdad, ¿cuándoabriólosojosFabre?Parecedesconocertoda lahistoriadelapoesíamexicanayengeneral,amenos que esta antología se vaya a ocupar como texto escolaranivelsecundariaoalgunaspreparatoriasdelOpus Dei, porque si no, no encuentro la razón de estos párrafos didácticos y "lúcidos".

El lector interesado en neoconservadurismos ramplones puede encontrar un ejemplo sin desperdicio en la sección mexicana de Poesía ante la incertidumbre: la fallida antología de poesía iberoamericana que quiso vender la claridad verbal y la emoción poética más chata

delatripa: narrativa y algo más

como una postura que oponer a estos tiempos oscuros: "La emoción no puede estar de moda. La emoción es intemporal y universal. Y la poesía tiene que emocionar Ante tanta incertidumbre, para nuestra sorpresa, una gran parte de los nuevos poetas en español se han adscrito a una tendencia tan experimental como oscura…"

Ycomoledijealosdospoetasantologadosque se ofendieron tanto con mis comentarios al aire en el Facebook: cómo sucede que Fabre o ellos mismos en algún momento puedan criticar duramente y burlarse sin tregua de otros poetas y cuando uno los critica ya no les gusta. Ser objetivo y aguantar las críticas creo que es parte de la formación del poeta. En el párrafo anterior Fabre nos ilustra cómo no se debe hacer una antología, como si él supiera hacerlas muy bien.

Para terminar, Fabre casi nos felicita por leer su antología y nos hace cómplices de sus desaciertos:

Por otra parte, tal vez una de las pruebas de la fuerza de estas nuevas poéticas aquí representadas lo constituya un curioso fenómeno: la escritura de algunos poetas de generaciones anteriores se ha transformado también a partir del cambio de paradigma estético operado desde la escritura de los más jóvenes: una influencia a la inversa de lo que sucede tradicionalmente. ¿Se trata de una "cirugía estética", un vano afán de rejuvenecimiento en una cultura donde el modelo a seguir es la juventud? ¿Podríamos hablar de una poesía-botox? ¿Es una moda o es algo más profundo? Debo confesar que en última instancia, a mí la moda no me parece mal. La moda como un modo, superficial si se quiere, de, como otrora se decía, ser moderno, es decir, de habitar el hoy Y es justo la marca del "hoy", la fecha, lo que faltaba a la poesía mexicana tan preocupada por la eternidad. Sí, las modas pasan. Habría que añadir: como todo. Y también: las modas vuelven. Algunas.Aveces. Pero hoy por hoy no me interesa preguntarme: ¿qué de todo esto perdurará? Sino, más bien: ¿qué está pasando? Y lo que está pasando es este ahora convulsivo de la poesía mexicana al que, por momentos, me siento tentado a llamar Edad de Oro: una época de liberación poética que tiene lugar justo en pleno desastre del país, pero sin negar el desastre, más aún: asumiéndolo. Sí, qué ganas de declarar una Edad de Oro de la poesía mexicana, aunque sea de broma, aunque sólo sea por molestar.

delatripa: narrativa y algo más

En mi caso, como dije antes, más que molestia, me da pena ajena, y yo, en vez de la Edad de Oro la llamaría Las Edades de la Pirita: la poesía mexicana tanpreocupadaporlaeternidad.Fabredenunciaciertas preocupaciones sobre la poesía mexicana, pero él mismoparecemáspreocupadoporconservarsecomo el Dorian Fabre de la poesía mexicana. Dice cosas tanviejascomo"sermoderno","paradigmaestético", "habitar el hoy", "época de liberación poética"… Parece que estoy leyendo a Justo Sierra. En fin, que habrá quien se crea todo su prólogo y toda su grandilocuencia gracias al apoyo constante de las grandes instituciones culturales y universitarias de México.

Y hasta aquí mi texto, serio pero no académico, sobre esta antología fallida en su vanidosa formación y prólogo y con bellos aciertos entre los poetas y poemas seleccionados.

Contesto con verdadero placer a los dos poetas quesesintieronofendidosyviolentadospormidiálogo con el poeta Pedro Damián en Facebook, pero leí en otromomento-creoqueeradeBrecht-algoasí:"sele llama violento al río pero no se llama violentas a las orillas que lo contienen". Habría que preguntarse si no es violenta la actitud que siempre ha tenido Fabre y algunos de sus amigos en contra del otro 90% de poetas mexicanos con sus absurdas afirmaciones y cabría denunciar seriamente sus abusos y pedirle en este caso a la UNAM que cuide más los libros que imprime, porque está entrando al juego de la mercadotecnia de la pose y la discriminación. Agradezco la atención prestada y recomiendo la lectura de Las edades de la pirita, pero sólo los poemas, porque todavía hay tontos que creen que el Tiempo es Oro.

Por fortuna, ahora, hoy, actualmente, recientemente,lanuevaformadeleerloslibrosdelaUNAM también es virtual, y se agradece.

Epílogo

Para que Luis Felipe Fabre no diga que sólo quiere molestar y que en verdad se haga un trabajo serio y completo de investigación sobre poetas sociales, panfletarios, rebeldes, radicales, punk, bizarrosysinestarsolamentealbordesinoenverdad

dentrodesussituacionesdevida,nosóloenapariencia nienpose(porqueunaverídicapoesíadelacallesurge cuando la calle se transforma en poesía), quisiera regalarleestalistadepoetasquecuriosamentevienen trabajando desde hace años toda la estética que Fabre acaba de descubrir

Y no es malo que Fabre tenga sus primeras experienciasconestetipodepoesía,loqueesexcesivo es que crea que son actuales y que sólo nueve poetas lasdesarrollanenMéxico,cuando,siesrealsuinterés por ello, a continuación encontrará propuestas para las que se esperaría, se diera el tiempo y el verdadero oficiodelecturaeinvestigaciónparaversiseleocurre seguir la sugerencia que alguno de los poetas antologados me hizo: hacer una antología de poetas resentidos(noapagarésusarcasmo,peronoloolviden: elresentidoapareceenrespuestadelaactitudabusiva).

Y ojalá también los nueve poetas antologados lean a estos otros poetas para que no se sientan tan solos creando poemas que ya otros vivían desde hace muchos años, antes de que los nueve publicaran sus primeros libros (o incluso algunos coincidirán en la edad, pero no en la necesidad de forzarse a escribir con calle, siendo ésta su naturaleza real):

RobertoLópezMoreno,LeopoldoAyala,Oscar Altamirano, Enrique González Rojo, Edgar Artaud Jarry,(yaconocenaJaimeReyes),JuanMartínez,José Vicente Anaya, Ramón Martínez Ocaranza, Pedro

Damián, Ektor Zettaek Balam, Orlando Guillén, Lalo QuimixtoChacala,FranciscoZapata,RamónMéndez, Ricardo Castillo, Rogelio Dueñas, Jaime Coello, Israel Miranda, El Colectivo Morvoz, Colín, José Fons Textosterona, Ángel Carlos Sánchez, Colectivo La Tarántula Dormida, Jesús Bartolo, Andrés Cardo, Adriana Tafoya, Saúl Ibargoyen, Colectivo Órfico, Mauro Hernández Fuantos, Jerónimo E. Gómez Cuadra,ReneéAcosta,RojoSienaEditorial,Colectivo La Rabia del Axólotl, María de Jesús Villalpando, Gerardo Grande, Javier Raya, Semanario Deportivo dePoesía,MáximoCerdio,TulioChavarría,Jeremías Marquines, Mikel Lecumberri, Rojo Córdova, Pita Ochoa, José Peguero, Fernando Trejo, Arturo Alvar Gómez,GustavoAlatorre,DanielTéllez,JoséManuel Recillas, Ruperta Bautista, Andrés López, Metáfora HojadePoesía,ÁngelNungaray,IgnacioRuizPérez, SoniaSilva-Rosas,AntonioSalinas,LaJerga,Revista Clarimonda, Éric Marváz, Estrella del Valle-Arizpe, David H. Rambo, Mauricio Jiménez, Javier Moro Hernández, Balam Rodrigo, El Piñón, Adán Echeverría, Iván Cruz, Sergio García, Pterocles Arenarius, Mardonio Carballo, Juan Carlos Bautista, ArturoTerán,GabrielCruzMayorga,HeribertoYépez, Marceal Méndez, Sergio Loo... y cuando terminen de leer les enviaré otra pequeña lista con más poetas mexicanos actuales. Porque querer vender pirita en vez de oro es un daño espiritual.

delatripa: narrativa y algo más

delatripa: narrativa y algo más

Nos vemos en el slam por Mario Pineda Quintal

Eleven La Quilla

Nosésiesunadiósdefinitivoallugarounanueva búsqueda de espacio entre las casonas y los negocios ubicados en el centro histórico de la ciudad de Mérida. Solo sé que el Foro Cultural de Autogestión "La Quilla" cerró las puertas de su local con una sensación de despedida y las últimas actividades programadas las realizarán fuera de éste.

PorlovistoyleídoensupáginadeFacebook y blogspot, los responsables de este proyecto no ponen fin a la labor de apoyar los movimientos musicales, visuales, literarios y escénicos que recientementevanemergiendooyasonveteranos en la cultura alternativa del estado. Sin duda son buenosorganizadoresdeeventosydifusorespara las creaciones artísticas.

Quizás, esta sea una nueva etapa para "La Quilla". Ya sin espacio, pero llevando todo su ambiente alternativo e ideas autogestivas hacia lugaresdondeunagresivobailedeslamoelgraffiti son desconocidos o "delictivos". Claro, no olvido que ya venían haciendo presentaciones fueradecasa.Lostoquinesdesusúltimosaniversarios fueron organizados en sedes alternas y si el dato no me falla, también han participado en festivales o jornadas culturales organizadas en varios municipios del estado.

Si en ese camino va el proyecto, algunos o muchos van coincidir que no hay pérdida, "La Quilla" seguirá existiendo, obvio, de manara itinerante, y seguirán intactos sus esfuerzos por dar o buscar espacios para escenarios y lienzos de los artistas con "inamovibles sueños" en el ola alternativa deYucatán.

Pero para mí, la desaparición de su foro físico,esunhechodesafortunado,asabiendasque enlablanca,ymuchasvecesdoblemoralistacapital,loslugarescomoése,sonpocosyenocasiones nulos. En los locales que ocupó "La Quilla" en los barrios de Santiago, Santa Ana, Mejorada y SanCristóbalnohabíauncadeneroarruinandoel ánimo fiestero pidiendo credencial de elector o poniendo la cadena de su mascota para controlar el dizque acceso. Podías estar en lugar portando unaseconómicaschanclasyvistiendolaropaque más acomode a tus ideologías.

Nadie llegaba a reclamarte porque tu humanidad se desparramaba en el piso o salía y entraba al foro como tratando de poner un record cruzando puertas. Comprabas cerveza cuando la necesitabas o querías, sin tener atrás de ti a un mesero con jodona amabilidad. Las cuotas de recuperación eran pagables para la banda, y en ocasionesconeltipoquecobraba,podíasllegara un acuerdo para un dos por uno o tres por dos.

Ensusescenarios,ladiversidadmusicalera constanteysepresentaronbandaslocalestocando géneros como ska, reggae, hip hop, punk, metal, rock,surf,electrónica,cumbia,reggaetonyotros sonidos, hasta ruidos. Y cuando las rolas pedían losempujones,patadasycodazosdelslam,nadie llegabaadecir¡párenle,amadrearseasuscasas!. Enlasparedesnofaltabanlasfotosylaspinturas, menos las proyecciones de buenas películas o documentales para la reflexión.

Como experiencia personal, disfruté "La Quilla" cuando sus direcciones en los flyers te llevaban a los barrios de Santa Ana, Mejorada y SanCristóbal.Misvisitasalprimerlugarsucedían

delatripa: narrativa y algo más

cuando empezaba a enrolarme en el mundo alternativodeMérida.Ahíconocíavariasbandas locales que hoy son de mis favoritas, amigas y amigos artistas, ya sea escritores, pintores y actores. Animado por las exposiciones de fotos en sus paredes, planeé y monté una con dos amigas.Lallamamos"Egos"yconteníaimágenes de fábricas y luces, así como un fotoreportaje de haciendas henequenales. En varias ocasiones, entre semana, era el único sentado en el sillón viendopelículasquepresentabanenciclosdecine. Además,conocíaRocco,vocalistadeladormida banda Maldita Vecindad.

En Mejorada, me dieron chance para otra exposición y esta vez la monté con dos amigos, llamándola"FloraExpresión",quemostrabafotos dehojas,floresyárboles.Tambiénseleyeronmis pornoversos en una presentación escénica con

ambiente erótico y algo pornográfico. Le di el primer beso a la chica que ahora es mi esposa mientras sonaba el ska de "Los Ayudantes de Caska". También asistí a sus ciclos de cine, pero con más público en la sala.

En San Cristóbal, no tuve exposiciones ni lecturas.Ibaadisfrutarlamúsicajuntoconamigos y mi novia. Por primera vez estuve en una tocada de Sr. Bikini y me di cuenta que ya había nuevos rostros en el ambiente, más jóvenes y nuevas bandas.

Hechos comunes en "las Quillas", varias veces llegué caminando sobrio y regresé caminando borracho, compartidas de chevas con amigosyrecuerdosinolvidablesdebuenarte.No sé que vaya a pasar, sólo espero que "La Quilla" siga en el camino y nos dé más slam en todos los sentidos artísticos.

delatripa: narrativa y algo más

Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.