Religiosidad Popular
CADA UNO SEGÚN SUS POSIBILIDADES
que frecuentemente se trabaja el dinero en avaricia, en egoísmo, en descuido de valores superiores. Pero Jesús prescinde de ellos y mira los que buscan un sano desarrollo, y un progreso dentro de una sana coordinación con los intereses de los demás. Se adivina que Jesús está hablando de su padre, él nos da un cuerpo, un alma, unas cualidades, un ambiente propicio para un sano desarrollo humano y espiritual, él espera buenos resultados; no va a exigir imposibles, pero sí buenos resultados. El que tenga más que dé más. No quiere pereza, no quiere egoísmos, quiere logros compartidos. Y como recompensa: “entra a gozar la alegría de tu Señor”. San Judas recibió mucho; no dinero, no bienes materiales, recibe ser compañero y discípulo de Cristo, recibe un corazón generoso dispuesto a atender y ayudar a los necesitados. Y que haya dado buenos resultados, los devotos de San Judas decimos que sí.
El día 28 de agosto nos presenta el misal la parábola de Jesús que nos cuenta de un señor que entrega dinero a algunos de sus empleados para que lo trabajen. A uno cinco a otro dos y a otro uno. Son millones o algo semejante. Con lo recibido se abren grandes oportunidades. Solemos hablar mal de los ricos y es
Y tú ¿qué ofreces?, ¿sientes que tienes mu cho?, pues poner empeño en ser un buen apoyo en tu contorno familiar y comunitario. ¿Sientes que tus capacidades son limitadas?, piensa en dar según tus posibilidades, no se te pide más, pero cuidar que no sea menos. Desperdiciar las oportunidades de hacer el bien, Dios no lo quiere.
Por P. Héctor Núñez Gutiérrez, cmf 97
