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Lunes 2 de marzo de 2020
Ángel Metropolitano
REPORTE EDITOR: Diego Salazar COEDITOR: Juan Martínez
TÉCNICA CUESTIONADA El entonces Presidente otorgó miles de permisos para la extracción de hidrocarburos a través de la cuestionada técnica de fractura hidráulica, conocida como fracking.
Sin importar las repercusiones ambientales
Fracking, la herencia maldita del gobierno de Felipe Calderón
De todas las administraciones, la de Felipe es la que se distingue por la mayor cantidad de permisos para la explotación del subsuelo nacional otorgados al sector energético trasnacional <<J. Jesús Lemus
A
la cauda de corrupción, violencia y problemas sociales que la administración del presidente Felipe Calderón dejó a los mexicanos, se suma también la devastación del territorio,
expuesto no solo en la entrega de miles de concesiones a la industria minera, sino de permisos para la extracción de hidrocarburos a través de la cuestionada técnica de fractura hidráulica, conocida como fracking. De todas las administraciones pasadas fue la de Felipe Calderón la que se distingue por la mayor cantidad de permisos para la explotación del subsuelo nacional otorgados al sector energético trasnacional, sin importar las repercusiones sociales y ambientales que al día de hoy se siguen, y que se mantendrán vigentes por lo menos durante los próximos 50 años. Según los datos expuestos públicamente por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) de la Secretaría de Energía (Sener) del gobierno federal, al día de hoy existen en todo
el territorio nacional 2 mil 482 pozos petroleros explotados bajo la técnica del fracking, a los que se suman otros 136 pozos que se ubican en el lecho marino del Golfo de México. De todos estos, el 73 por ciento (unos mil 911 pozos) se han entregado en concesión a empresas trasnacionales, dejando a la paraestatal Pemex solo la explotación de 707 pozos. Las empresas más beneficiadas con la entrega de concesiones petroleras durante la administración del presidente Felipe Calderón, que siguen operando al día de hoy, son principalmente trasnacionales de Irak, Venezuela, Kuwait y Arabia Saudita. Bajo las inmejorables condiciones de inversión ofrecidas por el gobierno de Felipe Calderón, a fin de sostener la meta de crecimiento