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desarrollo territorial

DESAFÍOS de la comunicación en la PLANEACIÓN del desarrollo territorial

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Por: Nelly Cristina Mesa Preciado Egresada del programa Comunicación y Relaciones Corporativas Especialista en Gestión Pública Estudiante de Derecho (7mo semestre)

En Colombia, posterior a los comicios realizados en octubre de 2019, donde se eligieron autoridades locales y departamentales, es preciso que en coherencia con la Constitución Política, la normatividad y los principios de la administración pública, hoy las entidades territoriales construyan el instrumento que les permitirá definir los programas y proyectos para ejecutar durante su periodo administrativo: plan de desarrollo; el cual no podrá convertirse en el contrato de pago de compromisos políticos de los recién posesionados mandatarios, sino que su contenido deberá ser de carácter técnico, participativo, viable y ajustado a cada contexto.

En este sentido, planificar el desarrollo de frente a las brechas generadas por la corrupción, las condiciones socioeconómicas en desigualdad, el calentamiento global, entre otras; y a un panorama de incertidumbre debido al caso fortuito de la pandemia del Covid-19; se convierte en un reto para los servidores del Estado, y aún para todos los ciudadanos. Sin embargo, no se debe persistir en el problema, pues los desafíos de la globalización exigen aumentar la calidad de los territorios como actores dinámicos de la economía, donde es posible acoger la comunicación como aglutinador de todos los sectores implicados en el desarrollo, logrando permear en conjunto la actividad pública y política. Es necesario que sea un proceso participativo, flexible, con gran capacidad de interacción para que responda a las necesidades de los ciudadanos.

La comunicación es interdisciplinar, logra concentrar diferentes prácticas humanas relacionadas con el diseño de la sociedad y la vida en comunidad; como componente para el desarrollo no podrá existir si antes no percibe a cabalidad la realidad humana, sirviendo como recurso para superar los obstáculos que impiden tal desarrollo de manera integral y una justa distribución de los recursos a todos aquellos que conforman el Estado.

Así, la comunicación como una herramienta de gestión admite nuevos imaginarios, fruto del proceso de la participación ciudadana basada en el conocimiento profundo de cada territorio. De esta forma, marca la diferencia en el desarrollo, priorizando los procesos que conlleva, permitiendo a los ciudadanos deliberar y expresar su opinión acerca de los asuntos de su propio bienestar; debatir ideas y participar en los cuestiones públicas, ampliando entonces las prácticas de empoderamiento.

Articular los planes de desarrollo con la comunicación, se convierte sin duda en la adaptación de sueños y esfuerzos cimentados en la realidad territorial, ante las potencialidades, debilidades y fortalezas de la población y los diferentes sectores; lo que significa construir futuro en el marco de la educación, la paz, la competitividad, la equidad y la sostenibilidad, para reducir las brechas anteriormente mencionadas.

A modo de conclusión, considero que los comunicadores incursionamos en la esfera pública y política como garantes para el desarrollo, a través de este campo privilegiado que nos permite cuestionar al Estado y promover la participación ciudadana. Si no sabemos a dónde queremos llegar cualquier camino nos servirá, pero mantener el norte definido, garantizará por sí la eficiencia de nuestro quehacer, siendo creativos y reflexionando sobre el impacto que tendrá en el mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos que, en definitiva, son los protagonistas de cualquier acción para el desarrollo.