3 minute read

VERANO, UNA SUMA DISTINTOS RESULTADOS

UNA RELACIÓN estable puede reforzarse en las vacaciones. Foto: Marco val, ya que simplemente puede ser una muestra de que ese vínculo no tenía una base sólida (afinidad, proyecto en común, confianza) que le permitiera afianzarse, puntualizan.

“La continuidad de la relación amorosa dependerá de las circunstancias que surjan en la vida de los implicados y de la capacidad de adaptación y flexibilidad que éstos tengan para establecer nuevas reglas”, concluyen.

Advertisement

La Chispa Veraniega

El ambiente vacacional y veraniego también puede revitalizar algunas relaciones establecidas, según muestra una encuesta de OnePoll para la firma especializada en viajes de vacaciones organizados BeachBound, BB, (www.beachbound. com), según la cual el 42 % de los estadounidenses se han vuelto a enamorar de su pareja después de irse de vacaciones juntos.

La encuesta efectuada a 2,000 adultos analizó la llamada “magia de las vacaciones”, especialmente en compañía de otras personas, comprobando que tres cuartas partes de los encuestados consideran que las vacaciones son excelentes para aquellos que buscan mantener viva la chispa en su relación.

En general, las vacaciones son

A DESTACAR un momento alegre, lo que hace que la persona promedio se sienta más feliz y sienta que su mundo personal es más grande después de regresar, según BB .

Durante la época veraniega se producen cambios en nuestro cerebro que intensifican algunas emociones relacionadas con la faceta amorosa, pero los ”amores de verano” surgen en entornos idílicos difíciles de mantener el resto del año, según los expertos de la plataforma de psicología ‘online’ TherapyChat.

La mayoría de los encuestados están de acuerdo en que viajar es más divertido si se efectúa en compañía de un ser querido, un familiar o la pareja, o en un grupo pequeño, y que viajar con alguien los hace sentirse renovados y es una de las mejores maneras de fortalecer los vínculos personales, añaden.

Una experiencia vacacional en un ‘resort’ o un ‘spa’, donde la pareja solo tenga que preocuparse por decidir si va a la playa o la piscina, es ideal para quienes buscan oportunidades para reconectarse y escapar de la vida cotidiana, al ayudarles a que se redescubran a sí mismos, según

Llegados a este punto, la psicóloga Pilar Conde, directora técnica de CO, recomienda el diálogo: “Hay que hablar de lo sucedido, si se quiere tratar de salvar la relación”, enfatiza.

“Cuando hay voluntad de mantener la relación, la terapia de pareja también puede ser una herramienta de ayuda muy válida”, señala.

Según esta psicóloga “no siempre hay que ‘culpar’ a los conflictos veraniegos del deterioro del vínculo amoroso, ya que puede ocurrir que uno de los integrantes de la pareja venga pensando desde hace tiempo en dejar la relación”. En ese caso, “será difícil que modifique su decisión”, explica.

“Hay algunas medidas que se pueden tomar antes de salir de viaje de vacaciones para evitar roces y conflictos", según Conde.

La primera medida consiste en planificar las vacaciones para evitar sorpresas indeseadas, sobre todo, si a uno de los integrantes de la pareja le gustan los planes ordenados.

Destaca Conde que cada persona tiene un ritmo y unas prioridades y que “es necesario flexibilizar los tiempos de salida y los preparativos, y después los horarios y actividades durante las vacaciones” para evitar problemas innecesarios.

Algunas cuestiones (“yo quiero hacer esto, tú lo otro”. “A mí me encanta levantarme temprano para no desperdiciar el día y tú te pasas la mañana durmiendo”) pueden parecer triviales, pero pueden generar desacuerdos importantes, según esta experta. La situación puede empeorar debido al reparto de roles, sobre todo cuando hay que cuidar de un tercero, ya sea un niño o un anciano, que viajan de vacaciones con la pareja.

Dura Prueba Para La Pareja

Pero otras veces, el regreso a la rutina y las ocupaciones, tras haber pasado por primera vez unas vacaciones con nuestra nueva pareja, está acompañado de una sensación de incomodidad, de malestar, quizá de fracaso, por los desencuentros vividos en los días veraniegos, señalan desde las Clínicas Origen de Psicología y Psiquiatría, CO, (www.clinicasorigen.es).

Esos desacuerdos vacacionales pueden haber destapado que “en la convivencia no todo es color de rosa”, explican.

Conde propone cultivar la escucha atenta, la comunicación y la negociación, como pilares para construir unos días de vacaciones en los que todos ganen, y que puedan disfrutarse en un clima romántico y especial.

“Todo irá mejor, si ambos miembros de la pareja exponen sus preferencias, y si los respectivos puntos de vista, necesidades y expectativas de cada uno, son escuchadas y valoradas. En el equilibrio y el diálogo está la clave del éxito”, recalca.

“Si se viaja con hijos o familiares, se generarán muchas responsabilidades añadidas, pero si se reparten los roles, cada integrante de la pareja podrá disfrutar de un tiempo para disfrute individual, y también del amor, estando juntos”, concluye.

This article is from: