Efemérides

E f e m é r i d e s

1 5 a ñ o s d e l C a l e n d a r i o C o f r a d e

Efemérides, conmemoraciones, aniversarios, cualquier termino es preciso cuando hablamos de un acontecimiento a recordar; centenarios, décadas, decalustro, lustros o un simple decimoquinto aniversario como este año cumple la edición del “Calendario Cofrade” que edita nuestra cofradía cada Navidad con el objetivo de ser el día a día de cada casa “mora”, “daimieleña”, o afín a nuestra cofradía donde se quiera pasar una página más, acompañados siempre de Nuestro Padre Jesús Nazareno, en alguna de sus distintas representaciones dentro de nuestra iconografía. Es por ello por lo que hemos creído conveniente resaltar esta conmemoración, por poco significativa que pueda parecer en cuanto a años se refiera pero no en sentimiento, emoción, ilusiones o tristezas vividas, mas si cabe en estos momentos tan complejos que estamos o hemos atravesado ya muchos meses atrás. En la pasada edición, así como en las catorce restantes se ha querido reflejar el sentimiento cofrade por mediación de imágenes captadas gracias a la siempre labor desinteresada y colaborativa de fotógrafos que siempre han cedido su buen hacer y todas sus herramientas para que otros podamos visualizar, conmovernos o incluso rezar ante una fotografía que nos acercaba un poquito mas a la fe, por ello gracias. Es ahí donde entra la intención con la que nace este artículo, la de compartir con todos los que hemos tenido un “Calendario Morao” en casa, lo que ha supuesto ese año para cada uno de nosotros. Por norma general siempre que llega el 31 de Diciembre personalmente hacemos una valoración de lo que ha supuesto ese año para cada uno de nosotros, lo calificamos de “bueno”, “malo” o de “un año más, esperemos que el siguiente al menos sea como este” y por ende hemos pasado paginas mensuales del calendario que según la suerte de la vida, hubiéramos rajado con la rabia e impotencia que merecía aquel momento o por el contrario hubiéramos enmarcado como si de un diploma de carrera se tratase con el fin de guardar aquel día, semana o mes como uno de nuestros mejores momentos. En el “calendario morao” se han marcado días, que iban acompañados en la parte superior de una fotografía con una frase (que a veces parecía estar escrita para nosotros mismos) una fotografía que seguramente aun recordaremos con nostalgia o por el contrario repulsión, por ser la protagonista de representar un mes que nos traía consigo un fallecimiento inesperado, una despedida amarga, una enfermedad que no, ese año no esperábamos, una pérdida de empleo o una mala noticia en general.

Seguramente muchos de nosotros aun recordemos la fotografía de Nuestro Padre Jesús Nazareno por la Plaza de España que presidia los meses de Marzo y Abril de aquel dichoso 2020 donde todos esperábamos marcar ese mes como el esperado por recibir una nueva Cuaresma y Semana Santa y sin embargo nos trajo consigo una pandemia mundial que veíamos improbable en pleno siglo XXI. Pero quedémonos con los calendarios que guardamos en el mejor de nuestros escondites, esos que casi nadie sabe, por ser el calendario que regaló un nuevo miembro a la familia, un apto en esa oposición tan costosa, el alta que tanto tiempo llevábamos esperando escuchar o el “Atentos, Arriba” bajo una luna llena que invita a salir a un sol reluciente de Viernes Santo que todos añoramos.

Por tantos días alegres y amargos que aguardan quince años de “Calendario Cofrade” y por todos ellos, los que lo hojeaban y remarcaban sus días importantes, los que con rotulador rojo carioca marcaban los cumpleaños de los nietos para que el olvido no jugase una mala pasada, aquellos que vivieron y presenciaron los momentos en primera persona que este año nosotros estamos disfrutando en formato papel, en una edición especial que conmemora ya no quince años de “Calendario Cofrade” , si no quince años de compartir muchas vidas en una misma.

Iván Martín de la Sierra

Vicesecretario de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno