EDITORIAL
Vis a vis Uno de los aspectos que más nos
vemos
llama negativamente la atención
temerariamente objetos por la
a docentes y equipo directivo del
ventana o destroza mobiliario, al
instituto
encubrir
es
la
demasiado
que
alguien
ese
acto
arroja
se
está
generalizada opinión entre el
entrando en complicidad abierta
alumnado
con el mismo.
de
que
en
determinadas ocasiones hay que callar; cada cual a lo suyo: si se
Somos conscientes de que en
produce un desperfecto en una
ocasiones
clase o se tira un tetrabrik con
abiertamente de lo que haya
puntería por la ventana o se
sucedido
arranca un dispensador de gel de
también con posible miedo a
cuajo, nadie ha oído, nadie ha
consecuencias de un posible vis a
visto,
han sido los de la otra
vis entre los ejecutores del acto y
yo no estaba en ese
sus delatores. O del miedo al
momento … hasta que alguien lo
rechazo del grupo. Por eso es tan
dice: No somos unos chivatos .
necesaria
clase ,
el
no
está
la
decir
nada
relacionado
concienciación
acerca de lo importante que es el La introducción de ese lenguaje
bien común, el cuidado mutuo, el
carcelario
no
se
suma
a
otras
consentimiento
de
la
expresiones o actos o gestos con
injusticia o de la violencia. ¿Hay
resonancia de prisión: saltar la
algo peor que, en caso de que se
valla, retar a pelea para la salida…
produzca una pelea, el corrillo de
es cierto que del edificio a determinadas edades no se puede salir sin permiso, pero esa es la única similitud que debería tener un
instituto
con
un
centro
penitenciario, aparte del hecho de que en estos últimos también se pueda estudiar y haya un patio donde desconectar o pasar un rato de ocio. Nuestras aulas no son celdas y aquí no tiene cabida el matonismo ni los códigos a lo
prison break.
Chivato es una palabra con acepciones muy negativas: quien se chiva acusa en secreto y a traición, delata, es un soplón, no respeta los códigos del grupo. Pero
en
un
instituto
quien
informa de algo para procurar el bien común no debería ser en ningún caso considerado alguien que actúa contra la clase, sino al contrario: que da la cara por lo mejor para todos. Evidentemente hay casos y casos y no hay que ser más papista que el papa, pero si
curiosos animando a que se zurren o incluso grabándolo con la cámara? Ojalá
seamos
capaces
de
ir
ganando la batalla a ese lenguaje burdo que se cuela en las aulas porque al final las palabras designan realidades. Un alumno o alumna que ayuda a despejar una situación negativa es mucho más valiente que cobarde. Y en ningún caso merecería el repudio de nadie.
3