La Gualdra 538

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SUPLEMENTO CULTURAL NO. 538 /// 15 DE AgOSTO DE 2022 /// AÑO 11 DIR. JÁNEA ESTRADA LAZARÍN guillermo Velázquez (y Los Leones de la Sierra de Xichú). Foto de Vincent Velázquez. “Si ya debíamos mucho a Guillermo Velázquez —juglar de fiesta y quebranto, embajador del huapango arribeño—, porque siempre es un placer ver encarnada en él la tradición, porque su esencia ya es un acto de amor, de cuidado y autocuidado, de posicionamiento político, porque su voz es preciosa y precisa, es decir, es literatura, con este libro-disco (No hay destino sin camino. Ecos del páramo. Memoria de muy allá para olvidos de hoy en día) le vamos a deber aún más”. Conrado J. Arranz Mínguez [Escuchar los cantos del pasado para interpretar los ecos del ahora, por Conrado J. Arranz Mínguez, en páginas centrales]

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Directorio

Editorial

Jánea Estrada Lazarín Dir. La Gualdra lagualdra@hotmail.com

i El Universal, Ciudad de México, 16 de agosto de 1964, portada. Hemeroteca de El Universal.ii De la Rosa, Natalia, “El Dr. Atl y la revista América: un programa estético y editorial antiimperialista”, BiblioGráphica, Volumen 4, Número 2, Segundo semestre 2021, UNAM, p. 89. En: https://bibliographica.iib.unam.mx/index.php/RB/ iiiarticle/view/104Ibidem,p.90.

La Gualdra es una coproducción de Ediciones Culturales y La Jornada Zacatecas. Publicación semanal, distribuída e impresa por Información para la Democracia S.A. de C.V. Prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta publicación, por cualquier medio sin permiso de los editores.

El 15 de agosto de 1964, a las 13:30 horas, dejó de existir el artista Gerar do Murillo -mejor conocido como el Dr. Atl-; la noticia se difundió en medios nacionales el 16 de agosto, el periódico El Universal publicó la noticia en la por tada de su diario junto con otras notas que hablaban de la labor de López Ma teos y una en particular, de haberla leí do el artista recién fallecido, seguro le habría hecho sonreír sarcásticamente: “México inició trascendental etapa de su vida democrática”,i porque además del talento creativo que poseía el na cido en Guadalajara en 1875, tenía una gran capacidad para el análisis político; de hecho, a inicios del siglo XX, duran te su estancia en Europa, hay indicios de que participó en actividades con el Partido Socialista Italiano (fue en Italia precisamente en donde inició sus es tudios de vulcanología). Gerardo Mu rillo era un lector incansable; además de arte y el origen y la evolución de los volcanes, estudió derecho y filosofía y se interesó particularmente por los movimientos políticos internacionales, de ahí que se relacionara con artistas e intelectuales vinculados, por ejemplo, con el anarquismo y el socialismo. Una de las facetas poco conocidas del Dr. Atl, es la relacionada con su la bor como editor; al respecto, la doctora Natalia de la Rosa, ha escrito un tex to para BiblioGráphica -revista editada por la UNAM- que es una delicia, sobre todo para aquellos que nos dedicamos al estudio de la historia social del arte y sus artistas. En su artículo, Natalia afir ma que Gerardo Murillo, cuando vivía en París (entre 1912-1913), “organizó el periódico L’Action d’Art con un grupo de intelectuales anarquistas”, y que a su regreso a México “en 1915, en pa pel de estratega y dirigente de la causa carrancista, el artista y revolucionario coordinó dos publicaciones periódicas, La Vanguardia. El Diario de la Revolución , fundada en Orizaba, y Acción , publica da en Guadalajara, seguidas por Acción Mundial , en 1916 y 1917, periódico acti vo desde la Ciudad de México” ii Ya he mos dicho que el apelativo del Dr. Atl le fue asignado en uno de sus viajes a Pa rís, por Leopoldo Antonio Lugones, uno de los poetas argentinos representati vos del modernismo hispanoamerica no. “Atl” por su referencia al agua, “Dr.” por haber estudiado en Roma filosofía (en su primer viaje a Europa financiado por el gobierno porfirista); su legado va más allá de la obra pictórica producida y mucho nos queda por seguir investi gando en torno a todo lo que realizó en su larga y fructífera vida, como lo con cerniente a sus libros publicados, “[…] el poemario Sinfonías del Popocatépetl , el Catálogo de la colección Alberto J. Pani , los dos tomos de las Artes populares en Mé xico y el libro Iglesias de México , publica das entre 1920 y 1922. El conjunto fue complementado con ¡Arriba!, ¡Arriba! , descrito por Antonio Luna Arroyo como una suerte de autobiografía”,iii solo por mencionarReflexionaralgunos.entorno a lo que este artista hizo durante décadas también nos lleva necesariamente a hacerlo con respecto a lo que en la actualidad se encuentran haciendo los creadores de estas nuevas generaciones; el Dr. Atl además de pintor fue editor, vulcanó logo, escribía sobre política (y no solo eso, se involucraba directamente) y ha cía poesía; nunca dejó de investigar, de estudiar, de aprender, y todo eso se evi denciaba en lo que hacía; porque cuan do un pintor se informa, lee, escucha música y va al teatro se nota, y cuando no,Cuandotambién.alguien quiere ser artista y se decide a serlo, debe entonces asu mir que la formación debe ser integral y no solo enfocada a conseguir el do minio de la técnica; el conocimiento de otras disciplinas y el estudio sistemáti co deben ser la constante para cultivar un lenguaje creativo auténtico. Realizar una licenciatura, por ejemplo, no con vertirá en artista (como por arte de magia) a quien estudie arte, pero sí le ayudará a empezar a abrir los múltiples caminos de su vida profesional. Hoy recordamos al Dr. Atl, en el aniversario número 58 de su fallecimiento, como ejemplo de lucha, constancia y estudio para las nuevas generaciones. Que disfrute su lectura. Jánea Estrada lagualdra@hotmail.comLazarín Princesa Por Pilar Alba Ciudades desiertas, de José Agustin Por Miguel Ángel de Ávila González Escuchar los cantos del pasado para interpretar los ecos del ahora Por Conrado J. Arranz Mínguez Castoriadis o el escándalo de la imaginación humana Por Sigifredo Esquivel Marín Arte en vuelo: un festival deengráficaelaire Por Maliyel Beverido Crimes of the future, de David Cronenberg Por Adolfo Nuñez J. Bella ciao, ciao, ciao: MONDINA Por Rebeca Mejía El misterio esencial de Borges Por Mauricio Flores

Carmen Lira Saade Dir. General Raymundo Cárdenas Vargas Dir. La Jornada de Zacatecas direccion.zac@infodem.com.mx

2 LA GUALDRA NO. 538 /// 15 De AGOstO De 2022 /// AÑO 11

gLa538ualdraNo.

Roberto Castruita Diseño Editorial Juan Carlos Villegas Ilustraciones jvampiro71@hotmail.com

• He pensado en el suicidio muchas veces, pero siempre lo he pospuesto. Me he dicho a mí mismo, para qué preocuparme, ya que tengo esa arma tan efectiva, el suicidio, y al mismo tiempo nunca la he utilizado, al menos creo no haberla usado jamás.

• Creo que la única manera encontrar las palabras correctas es dejar de buscarlas. Yo creo que debemos vivir en el presente y luego, quizá esas palabras nos sean dadas, o quizá no. Debe mos avanzar mediante el ensayo y el error. Debemos cometer nuestros propios errores, y luego, acaso, corregirlos. Y esa tarea puede llevarnos, bueno, toda la vida.

Borges: el misterio esencial, un com pendio de la memoria borgiana, ante sala de excelencia para su memoriosa obra.

“Entonces pensé”, siguió Borges, “en un hombre que termina agobiado por que su memoria es perfecta, y escribí esa pesadilla que ha agradado a tanta gente […]. Memorious en inglés es una palabra rebuscada mientras que en castellano memorioso suena como una palabra común”. “Así que el título en este caso que daría mejor traducido al inglés. En castellano, memorioso suena casi como algo que diría un gaucho. Pero bue no, el cuento en sí es, a pesar de que sea yo quien lo haya escrito, un buen cuento”. (“Funes el memorioso” fue publicado por el autor el 7 de junio de 1942 en La Nación e incorporado a Ficciones, dos años después, aunque el autor dijo que sus mejores cuentos estaban en El informe Brodie y El libro de arena, publicados posteriormente). Tiempo después, en Indiana, Bor ges le dirá al propio Barnstone que si de señalar una “única obra” que re presente la cima de toda la literatura “elegiría” Divina Comedia, “y eso que no soy católico, no creo en la idea de cas tigos y premios divinos. Pero el poema en sí es perfecto”. Expresar lo que siento Sobre la obra propia y su persona diría no ser un pensador sino un hombre de letras. “He logrado adquirir, al cabo de muchos años, cierta destreza en el manejo del castellano, no demasiada, pero soy más o menos capaz de expre sar lo que siento, de una forma más o menos armoniosa. Y luego la gente lee mis cuentos y encuentra en ellos co sas que yo jamás había pensado, y eso confirma que soy, después de todo, un escritor…”.(Cuentan Hadis y Barnstone que cuando Borges [1899-1986] acudía, acompañado de su madre, Leonor Acevedo, a recibir los innumerables reconocimientos otorgados en dife rentes sitios, se volvía a ella para “su surrarle perplejo”: ¡Caramba, madre, me toman en serio! Y recuperan también los editores aquel pasaje de cuando el autor de Historia universal de la infamia firmaba ejemplares en una librería del centro de Buenos Aires. “Un lector se le acercó con un ejemplar de Ficciones y le espetó: '¡Maestro! ¡Usted es inmor tal!'. A lo que Borges respondió: Bueno, joven, ¡vamos!... ¡No hay por qué ser tan pesimista!").

Borges: el misterio esencial. Conversaciones en universidades de los Estados Unidos, Edición y fotografías de Willis Barnstone. Traducción y notas de Martín Hadis, Lumen, México, 2022, 318 pp. * @mauflos

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• Para mí la muerte es una gran esperanza. La esperanza de la aniquilación, de ser olvidado. A veces me siento desdichado. No puedo evitarlo. Y entonces me digo: ¿Pero qué motivos tengo para sentirme desdichado, si la muerte puede llegar en cual quier momento?

6 Por Mauricio Flores* Borges, el incansable lector, el erudito.Elconversador que embelesa y conmueve, quien en un par de horas, la audiencia expectante y cau tiva, es capaz de recorrer la historia universal de la literatura y volver con modestia a la propia. Borges ante los universitarios. Borges, siempre Borges, ahora re cuperada su voz de la oportuna tra ducción al castellano de Borges at 80: Convertations, libro (inconseguible) del que se tenía data hace cuatro décadas, a cargo de uno de los estudiosos más acuciosos de la obra del autor de El Ale ph, Martín Hadis, en Borges: el misterio esencial. Conversaciones en universidades de los Estados Unidos. Se dejará conducir el lector con esta novedad editorial, no hay duda ni habrá arrepentimiento… Adónde. A los espacios universitarios de Esta dos Unidos que, entre los años 76 y 80, Borges habitara con una decena de charlas “entre amigos”, sabedor el autor de Ficciones del perfil bien infor mado de las audiencias: investigado res, maestros, estudiantes. Tales los apartados de este libro, que se complementa con fotografías y edición de otro conocedor borgiano, Willis Barnstone, donde se recuperan con acatamiento editorial cada uno de los diálogos establecidos entre los participantes. “Percibo la amistad”, diría Borges (Universidad de Chicago), “percibo una sensación muy real de bienvenida. Me siento querido por la gente, siento todo eso”. Sería en esos ambientes, igual Cambridge, Massachusetts, Boston, Harvard, Nueva York, Indiana…, que Borges desplegaría con plena libertad cada uno de sus intereses: los límites entre la realidad y la imaginación, los sueños, el otro y el doble, el heroísmo de sus antepasados militares, la cába la, el inglés antiguo, la memoria y el tiempo.Yaciego años atrás, Borges enta bla diálogo en Massachusetts con otro estudioso de su obra, Jaime Alazraki, autor de Borges y la cábala. Ahí revelará detalles y esencias de uno de sus más conocidos cuentos, “Funes el memo rioso”, concebido como “una metáfora del“Recuerdoinsomnio”.que yo había pasado va rias noches sin poder dormir, y enton ces hice lo posible por olvidarme de mí mismo, por olvidar de la habitación en la que estaba, por olvidar del jar dín que estaba afuera, por olvidar los muebles, por olvidar los muchos de fectos de mi propio cuerpo y no pude conseguirlo”.

El misterio esencial de Borges

La voz de Borges

Op.Cit.

• No creo en las guerras. Creo que todo eso es un error. Los paí ses son una equivocación, una superstición. Creo que el mundo debería ser uno solo, como lo pensaron los estoicos. Debemos ser cosmopolitas, ciudadanos del mundo.

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N o hay destino sin camino es una obra del presente —ese que se va agotando antes de poder siquiera nombrarlo—, del fu turo y, sobre todo, del pasado. Su pre sente es en realidad 2017, cuando el Seminario de Tradiciones Populares de El Colegio de México, dirigido por la investigadora Yvette Jiménez de Báez, le encargó a Guillermo Veláz quez, sumido por aquel entonces en una crisis creativa ahondada por el contexto de violencia y corrupción que se vivía en México —según lo cuenta en la introducción—, un trabajo en el que dialogase con la gran voz universal, y a la vez local, de nuestro país, Juan Rulfo, quien por aquel año hubiera cumplido los cien de nacido. Por diferentes veri cuetos de índole burocrática en los que no merece la pena entretener se, y a pesar de prácticamente estar terminada la obra aquel año, esta pudo ver finalmente luz a finales de 2020, ya en plena pandemia global, y gracias al compromiso y excelente cuidado editorial de Ediciones Del Lirio. Si ya debíamos mucho a Gui llermo Velázquez —juglar de fiesta y quebranto, embajador del hua pango arribeño—, porque siempre es un placer ver encarnada en él la tradición, porque su esencia ya es un acto de amor, de cuidado y au tocuidado, de posicionamiento po lítico, porque su voz es preciosa y precisa, es decir, es literatura, con este libro-disco le vamos a deber aúnAtendermás. esta obra como reco mienda el autor y el editor al inicio, es decir, “leer y escuchar simultá neamente el texto versificado y el audio, de preferencia con audífonos y sin interrupción”, es acercarnos un poco más a aquellas formas diferen tes de contar relatos sin seguir una cronología. Desde el punto de vista temático y estructural, el tiempo también se diluye o difumina. Dos ejemplos. El primero, es que la obra se estructura en XII partes —núme ro de los ciclos, de las horas de día y noche, de los meses del año, de la división perfecta del cielo—, la última de las cuales, “Tetracanto”, fue creada mucho tiempo antes, en concreto entre 1974 y 1975, cuando don Guillermo llegó a la Ciudad de México en busca de su destino tras abandonar el seminario, e influido por las lecturas de León-Portilla y de Garibay escribió esta canción en una antigua casa de la calle Guatemala, sin saber por entonces que bajo ella —y bajo él mismo que escribía un canto de guerra florida, de vida y decisión— se encontraba el Templo Mayor, el huey teocalli, el centro cere monial de la gran Tenochtitlan. “Algo vibró”, nos dice don Guillermo, y con ese tono escuchamos la primera de las doce —también 12— seguidillas que la componen: “Son cuatro os curidades / las que me pueblan / y cuatro claridades / las que me espe ran”. El segundo, es que por aquellos años de escritura, todavía distantes del actual presente, aún no se sabía nada de la pandemia y, sin embar go, escuchamos ya su eco en una de las décimas: “[…] / Padecemos de orfandad / en un tiempo en que a raudales / las 'realidades virtuales'/ confluyen a entretenernos, / y he mos dejado de hacernos / las pre guntas esenciales”. No hay destino sin camino ofrece infinitas lecturas analíticas, depen diendo de los intereses de cada uno de los lectores. Se puede considerar desde la perspectiva de la tradición del poema extenso o de largo aliento

Por Conrado J. Arranz Mínguez

La gUaLdRa No. 5384

Guillermo Velázquez. Foto de Vincent Velázquez.

Música Escuchar los cantos del pasado para interpretar los ecos del ahora

15 de agosto de 2022 5 Música

*Guillermo Velázquez, No hay destino sin camino. Ecos del páramo. Memoria de muy allá para olvidos de hoy en día, México, Ediciones Del Lirio, 2020.

en Latinoamérica; o a partir de los intertextos y el diálogo con la obra de Juan Rulfo, con la que Guiller mo Velázquez y la edición son pro fundamente cuidadosos; se puede analizar a partir de la oralidad, de la preeminencia del sonido que pro duce la palabra, de los ecos, de las figuras retóricas fonéticas que em plea; por supuesto, también a partir de la tradición de una estructura tan maravillosa como la de la déci ma —estrofa cultivada por Lope de Vega, Calderón, Góngora, Sor Juana, Juan Ruiz de Alarcón, Guadalupe Amor y numerosos poetas populares actuales— y su trascendencia como lengua común en Latinoamérica. El hecho de poder leer el volumen de forma simultánea a la escucha de la voz de los personajes que inter vienen en él, sobre un fondo musical creado por el Grupo Tribu a partir de instrumentación mesoamericana, y solo interrumpido por interludios o entremeses —porque es teatro tam bién o sobre todo y ojalá la veamos algún día representada— de sones huastecos o arribeños, o de música urbana, nos involucra en una expe riencia sensorial profunda, yo diría que no apta para cardiacos, porque una escucha así nos produce mis terio, incertidumbre, tristeza, ra bia, pero también fe, ánimo festivo, amor, catarsis. El libro de don Guillermo nos pro pone un recorrido, que bien podría ser el camino del héroe que dibujó Campbell para explicar la estructura del mito único, un mito único que, en este caso, en realidad, sería una gran epopeya mexicana que par te de lo que somos ante lo terrenal y ante lo espiritual, es decir, tal y como lo concibieron los antiguos nahuas y mexicas, ante el Topan, “lo que está por encima de noso tros” y el Mictlán, “la región de los muertos”, para conducirnos a nues tro presente: encontrar la libertad para vivir (esta sería la última fase que describe Campbell) en una tie rra en la que la injusticia, los millo nes de desaparecidos y la necedad de nuestros gobernantes a veces nublan nuestros sentidos, nuestros caminos, nuestros diálogos, nuestro ánimo. Gran epopeya mexicana por que, aunque la voz de don Guiller mo es una voz poderosa, presente, en la distribución de papeles dentro de esta obra, él no es solo Guiller mo, ni siquiera es “YO” en la distri bución de los personajes, sino que es “YO MISMO”, es decir, que podría ser “cualquiera”, es decir, cualquiera de nosotros —tú— que la estamos leyendo, o escuchando y, por tan to, que podríamos también estarla diciendo o recitando o cantando o simplemente vivificando. A pesar del largo recorrido que No hay destino sin camino supone por múltiples emociones, a veces do lorosas, a veces festivas, hay una suerte de catarsis, con fiesta y ritual incluido, que deja resonando una emoción: la esperanza. “Esperanza” es una palabra extraña, incluso algo contradictoria, porque en principio transmite algo pasivo, al suponer la espera. “Esperanza” viene del latín sperare, pero claro, el que espera es porque cree que algo o alguien va a llegar, es una espera activa. Ade más, Esperanza es el propio nom bre de la madre de don Guillermo, que encarna una voz, la suya propia —magnífica además, poderosa—, que en realidad podría ser la de to das nuestras madres, también las de las madres que esperan a sus hijos e hijas desaparecidas. Y parece que esta gran epopeya, que parte de la duda —“Allá o acá, ¿dónde estoy? / —escarba la duda en mí—, / ¿estoy vivo?, ¿ya morí?, / ¿entro?, ¿sal go?, ¿vengo?, ¿voy?, / ¿sí soy quien pienso que soy? / ¿existo afuera o adentro?, / […]"—, busca también una respuesta a qué hacer mientras esperamos en este llano incendiado, en este llano en llamas que es nues troPuesMéxico.bien, esa tensión entre la pasividad y la actividad es la que va dibujando el camino del héroe que plantea Guillermo, un héroe que nace, como él mismo reconoce en la introducción, en una época de cri sis personal, un héroe que ansía del sentido de la palabra para la vida, de un sentido no individual, sino co munitario, es decir, del sentido que compartimos todas y todos, del úni co posible para prosperar. Creo que esa esperanza es motor esencial del libro, como también reconoce Maxi miano Trapero, investigador espe cialista en literatura tradicional, conocedor de la historia y trascen dencia de la décima para el mundo hispánico, autor del prólogo. Canto y narración, antigüedad y modernidad, perdurabilidad y notiempo, la última reflexión de esta reseña es a la luz de los antiguos hacedores de la palabra en estas tierras y también en torno a la dé cima. Don Guillermo ofrece con esta obra la oralidad del relato, liberando a la palabra de su estructura gráfi ca, multiplicando su significación gracias al sonido, la textura, el tono, las pausas, la música. La instrumen tación mesoamericana que perma nece como fondo musical durante la mayor parte de la grabación es una invocación del pasado, de la “me moria de muy allá”, que no podría entenderse solo mediante la escri tura. León-Portilla, en El destino de la palabra, parte de la relevancia del tonalli, la “duración de luz y calor”, el destino; afirmaba así que todo lo que existía tenía de forma esencial un tonalli. Pues bien, el destino de don Guillermo Velázquez es cantar y contar, igual que aquellos otros po bladores que para encontrar su des tino daban forma a los relatos por medio de los cuicatl, “canto, himno, poema”, y los tlahtolli, “palabras, discurso, relación”, en definición de León-Portilla.Motivadopor esta obra en su conjunto, por el proceso creador de don Guillermo, por las búsquedas de lo esencial a través de múltiples recursos, me gustaría ver la lírica de los cuicatl y la narración de los tlahtolli esencializadas en la décima, estructura métrica que, junto a la copla, prefieren los músicos popula res de América, para contar y cantar. Las décimas de don Guillermo, ade más, no son siempre convenciona les. En ellas, a veces, como encabal gamientos corifeos, tienen cabida las voces de diferentes personajes, vivos o muertos, del más allá o del hoy; otras, se parten —normalmen te por el “puente”, nudo temático de la estrofa— para que surga una voz infantil. El diálogo con Juan —no Preciado, sino Rulfo—, se produce de forma poética, no hay otra lectu ra estética posible. Juan, y sus per sonajes, también podrían hablar en décimas, como lo hacen los perso najes de Guillermo, que están toma dos de la realidad, porque el pasado es realidad presente, porque nece sitamos la “memoria de muy allá, para [los] olvidos de hoy en día”. Así, escuchamos la voz de doña Chana la partera, doña Dimas la curandera, el arriero, un niño, un coro de mujeres, y también la de doña Esperanza, la mujer/madre de “yo mismo”, su hijo e hija, que están encarnados por la propia familia de don Guillermo, doña Chabe, Vincent, Victoria. Como podemos ver, No hay des tino sin camino tiene todo para que perdure en el tiempo, para que sea tiempo incluso, y eso que solo puedo trasladar aquí un humilde escrito, con el cual es imposible de atrapar por completo la esencia. Creo que su perdurabilidad, su potencial para convertirse en un canto, universal y nacional al mismo tiempo, están motivados por dos factores esen ciales: la redondez significativa de la obra y la relación de esta con la naturaleza, a través de los símbolos; y el hecho de que las palabras mero deen de una forma constante otros aspectos que son imposibles de asir. Feliz escucha y lectura.

6 Por Miguel Ángel de Ávila González

La gUaLdRa No. 5386

Ciudades desiertas, de José PrincesaAgustín

dió Susana. Que te lo traiga tu abue la. Contéstame: ¿por qué te fuiste así de México?, ¿por qué no me dijiste nada? Oye, Eligio, orita no me estés molestando, déjame dormir, dijo Su sana. Nuevamente reclinó la cabeza y cerró los ojos. Ni siquiera en tu traba jo dejaste dicho nada. Ni a tu mamá le avisaste, a nadie, qué poca madre; contéstame, con un carajo. Susana re abrió los ojos, controlándose, y se in corporó en la cama, sin ver a Eligio. Se puso en pie después y un poco como zombi avanzó unos pasos […] ¿Enton ces nada más sigues cualquier impulso pendejo que se te viene a la cabeza? Dime la verdad, Susana, esto lo pen saste muy bien. ¿Ya no me quieres? Dímelo derecho, y ya estuvo. No, no te quiero, dijo Susana, enfática”. Poco después, ella huye con el po laco hacia Chicago. Eligio nuevamente va a buscarla y encuentra a los dos en un albergue, golpea al polaco y obliga a Susana a punta de pistola a acom pañarlo en el automóvil. Una fuerte nevada los obliga a detenerse en el camino:“Susana guardó silencio unos ins tantes. Su rostro pareció apagarse, toda su energía hizo implosión, como hoyo negro, y miró a Eligio, dubitativa. Bueno, dijo, la verdad es que Slawo mir sí me atrajo, y sí, sí, añadió con voz baja, sí me acosté con él, si eso te pone feliz, finalizó agresivamente. Cómo que me hace feliz, nada de esto me hace ninguna gracia, respondió Eligio; se hallaba muy pálido y había encendido otro cigarro. Pero por qué lo hiciste, dímelo, ¿no pensabas en mí paraSusananada?”.vuelve a escapar. Eligio, acompañado de una joven norteame ricana, retorna a la búsqueda de su esposa, pero en esta ocasión no la en cuentra y resignado a no volver a verla nunca más, regresa a México, donde tiempo después aparece Susana, em barazada, y le dice del amor que tiene por él y que es lo que le ha hecho re gresar:“Mi amor, dijo de pronto Susana, y Eligio se quedó muy quieto. ¿Sí?, pre guntó. Ya sé qué quieres que te con teste. ¿Qué? ¿Me lo preguntas otra vez? ¿Por qué regresaste conmigo? Porque te quiero, Eligio, te quiero. ¿De veras?, preguntó Eligio acariciando suavemente las nalgas enrojecidas. Te quiero, respondió ella, incorporán dose para quedar cara a cara con él. Yo también te quiero, Susana, añadió Eligio, radiante, te quiero con toda mi alma”.Un amor desesperado y frenético mueve nuestro personaje y le obliga a ceder en su orgullo y a someter sus impulsos machistas ante la mujer que quiere, es así que acepta incondicio nalmente su retorno. La novela muestra las caracterís ticas de la Generación de la Onda, la cual se diferenció por este estilo liber tario que dejaba a un lado el pudor, la mojigatería y el conservadurismo. De manera similar, mostraba la realidad de quienes querían expresar al mundo, una forma desenfadada de vivir. José Agustín, Ciudades desiertas, Best Seller Edivisión, 4ªMéxicoImpresión,1985.

PalabrasdeRíoLibros

6 Por Pilar Alba Se quedó profundamente dor mida como las princesas en los cuentos; soñando con castillos y príncipes azules, con reinos lejanos y personas bondadosas. Así, dormida, abandonó su cuerpo, no sentía sus miembros: las piernas y los brazos caían al lado de su tronco. Sus sueños la protegieron de lo terrible de su realidad, la alejaron de las atroci dades que le cometieron. Los drago nes que aparecían en su sueño en la realidad eran los que la convencieron de ir a la fiesta, los que la llevaron con engaños a esa casa, los que le dieron la bebida que la alejó de este mundo por completo. Aprovechando su in conciencia la arrastraron, le quitaron la ropa, laceraron su cuerpo, corrom pieron su carne. Embrutecidos reían con las palabras que de pronto emitía de manera inconexa: flores, estrellas, nubes. Transformaban su rostro y cre cían en su furia cuando ella hablaba de duendes, demonios, fantasmas. Se aprovecharon de ella hasta lo que Esta novela muestra la crisis y alienación de un joven matri monio conformado por Eligio y Susana, aparentemente una pareja ideal; ella es escritora. Eligio conoce poco sobre las actividades de su esposa, por indiferencia y porque está ocupado tratando de rescatar su propia carrera de la mala racha por la queConatraviesa.eldeseo de comenzar todo de nuevo en un lugar desconocido, muy lejos de su vida actual, Susana deci de aceptar la invitación de Gustavo Sainz a participar en un programa de escritores que otorga una beca en la universidad de Arcadia en los Estados Unidos por cuatro meses y un buen día parte hacia allá sin decir una sola pa labra a Eligio,Eligio.alenterarse dónde se en cuentra su mujer, decide ir a buscarla. Susana se ha instalado en el programa y ha entablado relación con varios de los participantes, principalmente con un escritor polaco de pocas palabras por quien ella se siente especialmente atraída. Susana se sorprende cuando ve a Eligio, este le pide explicaciones y ella se niega a dárselas. Discuten larga y violentamente:“Lasacudióhasta despertarla, lo cual le llevó un buen rato. Levánta te, Susana, dijo Eligio, tenemos que hablar. Primero tráeme un café, pi pensaron era su último aliento. La dejaron descubierta, no tuvieron la decencia de cubrirle el cuerpo. Poco a poco ella fue despertando, cuando la encontraron no había aún recuperado el conocimiento por completo. Des pertó en el hospital con dolores por todo su cuerpo, nadie se atrevió a de cirle algo cuando preguntó por lo que le había pasado. Nadie, tampoco, quiso acercarse a darle un abrazo de consue lo. Solo ella a su corta edad y desde el despertar de su sueño lo supo profun damente: no, ya no era una princesa. No, ya nunca más volvería a serlo.

FilosofíaArte

Castoriadis o el escándalo de la imaginación humana Arte en vuelo: un festival de gráfica en el aire

Cornelius Castoriadis (1922-1997). Imagen tomada de colloqui.org.

6 Por Sigifredo Esquivel Marín

Papalote del Festival Arte en Vuelo.

15 de agosto de 2022 7

6 Por Maliyel Beverido

Hay autores que a uno lo acom pañan toda la vida, y antes de leerlos ya de alguna u otra forma uno ha compartido o, al menos avizorado, sus ideas e intuiciones capi tales. Son autores fundamentales por que vertebran el pensamiento y sirven de guía de ruta crítica en la vida. Tal es el caso de Cornelius Castoriadis, cuya vas ta obra me ha acompañado desde que era adolescente. Uno de mis primeros artículos publicados a los 18 años fue en torno a la imaginación crítica en diálogo con Octavio Paz y Cornelius Castoriadis. Mi primer libro se titula Pensar desde el cuerpo (Conaculta, 2006), donde opera un descentramiento del sujeto moder no a partir del cuerpo, la imaginación y la inmanencia. Luego mi segundo libro lleva como título Imágenes de la imagina ción (Tierra Adentro, 2008). Por supues to uno de los autores de cabecera de tales obras ha sido el pensador griego avecindado en París a partir de 1946. Más allá de las diferencias que no son pocas ni menores, comparto la pasión política de Castoriadis por hacer de la praxis una forma teórica y práctica de la autonomía como epicentro de la crea ción humana. Autonomía, imaginación y libertad son tres aristas para enten der y atender la condición humana en su apertura sin fin. Y constituyen el nú cleo del pensamiento castoriadiano: La institución imaginaria de la sociedad (Seuil, 1975), Las encrucijadas del laberinto (Seuil, 1978-1999), La creación humana (Seuil, Antaño esta era la época ideal: por un lado las vacaciones y por otro los vientos previos a las lluvias de verano convergían para que la cha macada invadiera cualquier loma, campo o hasta azotea para empinar papalotes. Papel de china, varillas de carrizo, hilo y algún listón o retazo de tela y el cielo se llenaba de colores. Yo los hacía, con otros niños de mi barrio, o se com praban en casi cualquier tendajón. Pero eso fue hace mucho, mucho tiempo. Este domingo de julio no hubo partidos en el Campo Deportivo Adolfo López Ma teos de Coatepec, Veracruz, el municipio ha dado su consentimiento para que se lleve a cabo la segunda emisión de Arte en Vuelo, una iniciativa del Taller de Grabado Experimental que suma esfuerzos diversos para rescatar una tradición y, literalmente, poner en alto la gráfica regional. Hace tres años el Taller de Grabado Experimental de Coatepec convocó a la primera edición de este festival. Impri 2002-2011), por mencionar solamente algunos títulos de obras paradigmáticas, dan cuenta de una poderosa articulación original y consistente a lo largo de toda una vida no exenta de polémicas y con troversias. Heredero del griego de Éfeso, Castoriadis hizo del pensamiento crítico una guerra sin cuartel contra el sistema de dominación en su conjunto. De una cultura vasta y formación integral en fi losofía, economía, lógica, matemáticas y psicoanálisis tuvo interés genuino por todos los campos del saber y del queha cer humano; admiraba y amaba el arte y la literatura, empero veía en sus creacio nes más nobles también el juego de la sobredeterminación socio-política que configura un texto como hiper-texto con textual abierto al juego de múltiples sig nificaciones. Marxista, anarquista, acti vista radical tuvo una militancia política siempre en la izquierda (auto)crítica, de ahí que tomase distancia de todos los partidos y dogmas oficiales, fue uno de los primeros en denunciar el totalita rismo del régimen soviético y también fue uno de los primeros en anticipar la debacle civilizatoria ocasionada por la crisis ambiental. Pionero en varios ámbitos y frentes. E incluso el eslogan “la imaginación al poder” del 68 reco ge en gran medida su ideario político e intelectual. A diferencia de muchos intelectuales que opinan sobre la ac tualidad del mundo de manera frívola, pesimista o decadente, sus opiniones siempre certeras y polémicas daban en el blanco de la controversia del momento, pero lo hacían más allá del presentismo chato de la doxa reinan te, quizá por eso fue un autor tan in comprendido como marginado por sus contemporáneos. Y es que abrió fuego contra todo y contra todos desde la atalaya crítica como despliegue de auto creación humana. Mi admiración por el autor me ha llevado a realizar, a inicios del 2022, un homenaje para celebrar el centenario de su nacimiento junto con investigadores(as) de América La tina y Grecia, el ostracismo que sufre su obra aún sigue, por desgracia, vigente, y Castoriadis sigue siendo un pensador marginal, pese a que su obra es una de las más poderosas y sólidas empresas por repensar la condición humana en su conjunto desde la esfera de la ima ginación radical como autonomía fun dacional. Asumimos –aquí el plural es clave– que es urgente y pertinente ha cerle frente a la estupidez mediática que se disemina como nueva barbarie planetaria. El riesgo y audacia del pen samiento castoriadiano tiene parangón con otro grande de las letras universa les como lo fuera William Blake, uno teoriza lo que otro canta. Entre el decir filosófico y el poético se teje una pode rosa urdimbre que bien vale la pena se guir (des)hilvanando. ¿Acaso no ha sido la imaginación el telar de la creación humana en el espejo del tiempo?

mieron linoleograbados sobre papel de china y con ellos se elaboraron 150 pa palotes que se repartieron gratuitamen te. Cerca de 500 personas acudieron a la cita y los papalotes, vale decirlo, volaron enseguida. Por su belleza y originalidad algunos se los llevaron tal cual, pero la mayoría los elevó aunque sufrieran caí das y Medesgarros.cuentaAlejandro Suárez, coordi nador del taller, que en aquel 2019 con taron con el apoyo de la Casa de Cultura, del Instituto Veracruzano de la Cultura y del Ayuntamiento. En 2020 y 2021, por la pandemia, no se pudieron realizar otras emisiones, y con el cambio de la admi nistración municipal temían no poderle dar continuidad al proyecto. Sin embargo, tuvieron la fortuna de encontrar nueva mente interés y voluntad en la Regiduría 4ª del Municipio para retomarlo, pues se trata a la vez de una entrañable tradición y de un nuevo acercamiento al arte. Este año también se hicieron 150 piezas, en cuya producción participaron más de 20 personas, entre los grabado res, impresores y el artesano papalotero Sergio Castillo (que insiste en que apun te que vive en la calle Octavio Paz), uno de los pocos que quedan la región. Las impresiones se realizaron en el Taller de Grabado Experimental, el Taller de Gra bado de Miguel Hernández de Casa de Cultura Coatepec y en la Ceiba Gráfica. Mientras las familias llegaban y se distribuían los papalotes, la agrupación de son jarocho La Cañada estuvo ani mando el ambiente. A pesar de un cielo medianamente gris, los más hábiles rá pidamente alcanzaron las alturas. Algu nos además llevaron cometas de tela o le compraron a don Sergio otras piezas. Era lindo ver a tanta gente bromear, reír y colaborar sin bips ni bites, soltando al aire una frágil obra de arte que se con fundía con el vuelo de las aves. Quizá esta ocasión podría echarle la culpa al viento, que soplaba solo por arriba de unos 5 o 7 metros a los que yo nunca llegué. Lo cierto es que a pesar de que corrí de un lado a otro mi papalo te tan solo se sostuvo por medio minuto encima de mi cabeza. Pero esos 30 se gundos fui feliz.

Crimes of the future, de David Cronenberg

6 Por Adolfo Nuñez J.

6 Por Rebeca Mejía El nuevo filme del extravagante ci neasta David Cronenberg se siente como la suma de todos los ele mentos que vuelven tan singular a su obra. Crimes of the future (2022) es una película que reúne y resignifica las temá ticas que han obsesionado al maestro del body horror, con el control de los cuerpos, nuevos y viejos, como dilema central. La cinta toma lugar en un futuro dis tópico donde la especie humana, como resultado de un medio ambiente cada vez más industrializado, ha comenzado a mu tar y a generar nuevos órganos internos. Saul Tenser (Viggo Mortensen) es un artista conceptual que genera nuevos y extraños órganos, los cuales remueve ante un pú blico a manera de performance quirúrgica, con ayuda de su compañera Caprice (Léa Seydoux).Adichas exhibiciones asiste una extra ña joven llamada Timlin (Kristen Stewart), quien trabaja en un departamento del go bierno dedicado a analizar y registrar esos nuevos órganos, y que está obsesionada con el trabajo de Tenser. A su vez, el pecu liar protagonista es contactado por un gru po de personas lideradas por Lang (Scott Speedman), quienes han desarrollado un nuevo sistema digestivo y que buscan ob tener notoriedad con la ayuda del artista.

tiempo, persuadida por una gran ami ga, tocara ocasión para ver MONDINA el pasado 27 de marzo, un monólogo que trata sobre la vida de una arroce ra en Italia, escrito y protgonizado por Gala Guerrero. El talento de la artista es indiscu tible. No solamente el monólogo está bien escrito al ser capaz de transportar al espectador a Italia en la década de los veinte del siglo pasado en la vida de Greta una niña de catorce años que sueña con ser escritora, pero que debi do a su posición familiar, se ve obliga da a asistir a una granja de cultivo de arroz en donde conocerá el lado crudo de la vida que la obligará, muy a su pe sar, a convertirse en una mujer. Los instrumentos que utilizó la ac triz para mostrarnos la habitación de Greta, el vagón de un tren y su desti no final en la granja fueron muy bien pensados y utilizados, evidenciando además el gran trabajo en equipo entre la producción y la dirección del monólogo.Hastaahora los comentarios se han centrado en la pertinencia del monó logo de preguntarse qué es ser mujer en un contexto pasado, pero que se liga al contexto actual en donde la pregun ta ha tomado más de un significado. En cualquier caso, fue muy estimulante ver cómo una joven actriz se adueñaba del escenario de una manera tan his triónica. Segura de sí misma y sabien do salir adelante con la historia y su personaje inspirados en la canción Be lla ciao. Verla actuar, hacer acrobacias e incluso cantar me recordó a aquellas estrellas que admiré en los musicales: artistas con más de un talento. Sin duda Gala Guerrero dejará ver mucho más de sí misma conforme continúe con la práctica de sus habilidades en el escenario.Suprotagonista dejó entrever que quizá fuera posible volver a ver el mo nólogo en el teatro y así será el próximo 31 de agosto, en el Teatro Ramón López Velarde, a las 20:00 Hrs., para que esté muy pendiente y se deje cautivar por la presentación de Gala Guerrero.

CineTeatro

La gUaLdRa No. 538 // 15 de agosto de 20228

La obra Mondina, de Gala Guerrero, se presentará el 31 de agosto en el Teatro Ramón López Velarde, a las 8 PM.

Cronenberg crea una narrativa reple ta de alegorías donde aborda a la cirugía Hace poco tuve ocasión de hacer un leve maratón de musicales que incluyeron clásicos como Cantando bajo la lluvia (1952) y Nace una estrella (1954) que tienen como protagonistas a ac tores como Gene Kelly y Judy Garland. Viéndolos actuar, cantar, bailar y en general apropiarse de escenarios y la pantalla de esa manera tan íconica me hizo pensar en los artistas actuales y en cómo es cada vez es más común que se apoyen de efectos especiales o de la tecnología para realizar sus per formances.Mepregunté si no hemos comenza do a extrañar en general ver de mane ra más cercana a personas que tengan talento en más de un área y que, diga mos, sean un artista escénico mucho más completo. Aunque tenemos múti ples opciones al alcance de la mano en nuestros hogares gracias a las platafor mas, lo cierto es que de mi parte eché de menos espacilamente el teatro, lu gar en donde a dos años de la vida en pandemia no había vuelto. Fue una grata sorpresa que mi pri mera visita al teatro después de tanto como el nuevo sexo, la ecología en contra posición con la polución humana. Además, reflexiona sobre una cultura que transfor ma el dolor en espectáculo y en una socie dad que se adapta a los cambios del medio

Bella ciao, ciao, ciao: MONDINA donde se desarrolla, entre muchos otros temas.Eldirector subvierte las reglas del géne ro de horror y fantasía en su formato más tradicional, y apuesta por un tono más enigmático con claras conexiones al cine neo-noir, a medio camino entre el género de ciencia ficción, un misterio de detecti ves y un relato sobre conspiraciones. La cinta se logra percibir como una re flexión metafílmica de la propia obra de Cronenberg, ligada de manera inevitable a sus películas más emblemáticas como Crash (1996), The fly (1986), Naked lunch (1992) y Videodrome (1983), por mencionar algunas.Unode los temas principales en el cine del realizador canadiense ha sido las mo dificaciones al cuerpo en función de los tiempos y hábitos que hay dentro de una sociedad. En ese sentido, el filme bien se puede interpretar como una represen tación hiperbolizada del mundo actual, en una época donde las personas buscan nuevos medios para decidir sobre sus pro pios cuerpos y donde las instituciones con creencias anticuadas desean controlarlos a como dé lugar. Crimes of the future es una de las pelí culas más autoconscientes, reflexivas y urgentes del director. Se trata de una obra inteligente, estimulante y llena de signifi cados que serán develados en más de una revisión. Una vez más, el legendario David Cronenberg vuelve a examinar los mismos órganos de siempre, pero que en esta oca sión dejan ver un universo nuevo en su interior.

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