IATR 2024 GIBRAN de ROBERTO RAMOS-PEREA

Page 1


GIBRÁN

ROBERTO RAMOS-PEREA GIBRÁN:

La ordalía de “El Profeta”

Editions Le Provincial

San Juan de Puerto Rico

2024

GIBRÁN: la ordalía de EL PROFETA

Drama neo romántico en dos actos

original de ROBERTO RAMOS–PEREA, está completamente protegido bajo la Ley de Derechos de Autor, en Puerto Rico, Estados Unidos y países con relaciones recíprocas. Queda totalmente prohibida su reproducción por medios mecánicos, electrónicos, digitales,cibernéticosy/o fotográficos.Los derechosdereproducción,representación profesional,aficionada, estudiantil o universitaria, cine, radio, televisión, vídeo privado, lectura pública, citas más allá de extensión razonable, así como adaptación y traducción a idiomas foráneos, son de absoluta propiedad de su autor y/o su sucesores directos o depositarios autorizados y están sujetos a regalías. Para información o petición de derechos debe dirigir correspondencia a Roberto Ramos-Perea. Correo electrónico: ramosperea@gmail.com O por escrito a Editions Le Provincial. POBOX 260968 San Juan, Puerto Rico 00926-2633. O con la Librería Norberto González, Rio Piedras, Puerto Rico.

© Roberto Ramos–Perea 2024

Derechos Reservados conforme a la ley, registrados en la Oficina de Copyright. Biblioteca del Congreso. EU. Washington. DC.

Ramos–Perea, Roberto; GIBRÁN: la ordalía de EL PROFETA

Drama neo romántico en dos actos.

San Juan de Puerto Rico: Editions Le Provincial, 2024. 90 p.

lPrimera Edición: Roberto Ramos–Perea GIBRÁN: la ordalía de EL PROFETA Drama neo romántico en dos actos

300 ejemplares a cargo del Instituto Alejandro Tapia y Rivera, distribuidor.

Portada y diagramación: L. J. N. Bertrand. Dijon, France Editions Le Provincial. San Juan de Puerto Rico.

Fotografías cortesía de Teatro Sol y Luna e Instituto Alejandro Tapia y Rivera.

LA ORDALÍA HACIA UNO MISMO…

C uando decidí escribir la vida de este hombre, jamás sospeché el grado de compromiso que tendría que hacer con su humanidad. El poder desvestirlo de su mitificación, de la ignorancia que hay sobre su vida y del banal endiosamiento de su obra, fue un acto de justicia personal mía que le agradezco a la vida.

No quiere decir esto que enfrenté este trabajo como un enemigo, sino todo lo opuesto. Amigarse con el objeto de escritura hace el camino suave y ligero. Escribir esta biografía que planifico desde hace casi diez años, ha sido tarea ligera y generosa para mí. Y encontrar el tesoro al final del arcoiris de la amistad con lo que se escribe, es pleno y dichoso.

Y lo que más me asombra es haberle conocido como sabía que habría de conocerle. Gibrán es todo en sí mismo porque es también todos nosotros. Y hablarle desde esta perspectiva simple de hombre que escribe lo que vive, es siempre una puerta abierta al amor verdadero. Y en este sentido, en esta verdad, única y privada en la que nos reconocemos hombres-mujeres y poetas, estrecho a Gibrán en mis brazos y le llamo hermano con alegría.

¡Cómo nos engañan nuestra necesidad de dioses, héroes y de mitos a los cuáles venerar! Nos idiotiza la razón y al alma libre se le detiene el camino. ¡Maldita sean mil veces los mitos, los héroes y los dioses, sobre todo aquellos que no nos explican nada de nuestra sencilla humanidad! Malditas sean mil veces las religiones que han alimentado nuestra ignorancia fabricando esos dioses y gurus salvadores, mitos y leyendas que han empobrecido tanto la maravilla de ser humanos… y benditas sean mil veces más, las angustias que como las de Gibrán, nos muestran que la vida es toda búsqueda, toda caminos.

¿Qué amar de Gibrán, si amar más se puede en la vida de un hombre, que el propio camino de autoconocimiento?

Siempre que le pienso regreso al momento más genuino, más pausado, más mágico y trascendental de su vida… ese luego de que

Gertrude le da la bofetada y le manifiesta su decepción… y pocas líneas después él le pide que le acompañe hasta la muerte. Momento sublime que hace de cada hombre su propio tirano y su salvador.

Hay que leer a Gibrán para saber cuán vulnerables somos. Hay que salvarlo del comercialismo superficial y barato al que ha sido condenado por su propio éxito. Salvarlo de la intelectualidad yerma y envidiosa que le llama superficial y vago… salvar, no sólo sus libros, sino las angustias y alegrías que escribieron esos libros y los espíritus que con él escribieron las luces de su letra.

Y hablando de espíritus, de aquí y de allá, ahora que ya ha pasado el proceso de crear y sentir, que es el más amoroso de todos, me queda la enorme gratitud de haber trabajado con gente que merecen no solo mi gratitud más alegre, sino mi admiración más honda.

Si se fijan, no sólo nos cabe el honor de presenciar a uno de los actores más importantes del país en la figura y talento de Gerardo Ortiz, sino que son pocas las veces que el público va de mano tan segura a emociones tan complejas. Todos los que hemos visto su carrera, sus actuaciones y nos hemos emocionado con su furibunda cascada de voz, su alma de trueno y su sensibilidad de pétalo, sabemos que Gibrán no pudo haber tenido mejor médium.

Trabajar con Gerardo Ortiz es haber trabajado con uno de los mejores actores en toda la historia del teatro del país, la que he vivido, la que he visto y la que he tenido la oportunidad de investigar. Y esos "mejores actores" de la Historia de Nuestro Teatro, no pasan de cinco o seis. Mejores, no en el sentido de que nos gusten, sino porque trabajar con ellos es trabajar desde la esencia misma del teatro que es la entrega. El Teatro es entregarse, de pecho, desnudo, sin prisa y sin exigencia al personaje. Sencillamente me alegro de haber pensado siempre en él, pues no había por este barrio un mejor Gibrán, ni siquiera en la mente de Gibrán.

Trabajar por igual con Evelyn Rosario, amorosa compañera de Gerardo, y echarlos juntos al ruedo de sentimientos tan hirientes y desechos como los que ambos les toca interpretar, hace de mi fascinación una pequeña ordalía. Hemos llorado con su Micheline y más hondo aún con su Gertrude, porque esta señora del teatro sabe lo que es actuar desde el amor.

Angela Mari, compañera mía, tortura y delicia mía, me regala el sueño roto de Mary Haskell. Y yo sé que tiene tantos sueños rotos como el que más, y por eso Haskell y Angela se han unido en el gesto poderoso de la femineidad, en la entrega absoluta de la ternura y en la poderosa inteligencia del amor comprometido. La señorita Mari ha enamoradocon pasión de loco- mis manuscritos y mi producción una vez más.

Para Almustafá, el simpático y amable profeta, alter ego y conciencia del sabio Gibrán, encarnarse en Willie Denton es un frutoso acto de cariño. Jamás me lo imaginé tan dulce, tan amoroso, y que la sabiduría tuviese, por brillante contradicción, un rostro tan joven, y esa propuesta suya es algo que celebro. Y de nuevo, desde los momentos más ricos de "Avatar", Willie me vuelve a regalar la lógica de las vidas pasadas.

Los soluneros, Vivan y Armando, no llegan por primera vez en el barco de Orfalis. Vienen conmigo en el entusiasmo de hacer teatro que valga la pena en un país donde teatro es cualquier cosa. Gracias desde lo más hondo del corazón, porque en ellos encuentro amigos. Amigos y cómplices de los que lo son de veras, además de excelentes actores y profesionalísimos productores. Los demás chicos de producción, venimos desde el milagro de Avatar con grandes expectativas. Todos, los de Avatar y los de Gibrán , todos que son uno, sabemos que el teatro tiene la ineludible misión de abrir en dos el alma. Hasta ahora, nuestra alma sigue sangrando de este extásis de poesía y espiritualidad.

Y por eso en recuerdo de Gibrán Kahlil Gibrán… autor del libro más leído en todo el siglo XX: ElProfeta... y en recuerdo de Mary Haskell, de Micheline y de todas las que le amaron con veneración, será una deber presentarle vivo, en esa agotadora búsqueda de sí mismo, en medio del incensante trueno de su alma... *

Todo lo escrito en esta pieza está basado en las 12 biografías de Kahlil Gibrán que se pudieron conseguir para este trabajo, así como correspondencia electrónica con estudiosos de su obra en Estados Unidos y el iluminador estudio de sus inseparables ObrasCompletas . Muchos de los textos están sintetizados y extraídos de las cartas entre Gibrán y Mary Haskell, (salvadas del envidioso recelo de Barbara Young), y depositadas en la Universidad de Carolina del Norte, y las diversas cartas entre

Micheline, Charlotte y Mary. La biografía que sirvió de base para nuestro trabajo lo fue Kahlil Gibrán: a biography escrita por su mejor amigo, Mikhail Naimy (1939) y las más recientes Kahlil Gibran: His Life and World escrita por sus sobrinos Jean y Kahlil Gibran (1998), Kahlil Gibran: Man and Poet de Suheil Bushrui (1998) y Prophet: The Life and Times of Kahlil Gibran de Robin Waterfield (1998). A los seguidores de su obra les recomendamos la película TheBrokenWings, sobre la novela de Gibrán, una de las joyas del cine Libanés, filmada en la década del sesenta.

Dedico esta obra a mi adorado segundo hijo, Hugo Sebastián, que asuscortosmesesdevida,memirabasonreídomientrasescribíaesta pieza, ahora suya… con el espíritu de vida que hay en todos los que buscan.

ComoelespíritudeGibrán.

Roberto Ramos-Perea, 1 de marzo de 2001.

GIBRÁN: la ordalía de EL PROFETA

Personajes para seis actores:

Khalil Gibrán

Mary Haskell

Charlotte Teller- Barbara Young

Mikhail Naimy- Obispo 1

Obispo 2- Ameen Riani- Almustafá

Micheline (EmileMichel.)- Gertrude Stern - La Diosa del Fuego

GIBRÁN

I. Música.

Bailedelasmujeres.

GIBRÁN: Me preguntas cómo me volví loco. Fue así: Un día, mucho antes de que naciesen varios dioses, desperté de un profundo sueño y hallé que se habían robado todas mis máscaras, las siete máscaras que yo modelé y usé durante siete vidas. Y ya sin máscara, corrí por las calles gritando: "¡Ladrones! ... ¡Ladrones! ... ¡Malditos ladrones!" Hombres y mujeres se rieron, y algunos, corrieron a sus casas temerosos de mí. Y cuando llegué a la plaza, un joven parado en un tejado gritó:

EL HOMBRE EN LA TORRE: ¡Es un loco!

GIBRÁN: Y cuando alcé la vista para mirarlo... el sol besó mi desnudo rostro por vez primera. Por vez primera vez el sol besó mi desnudo rostro y mi alma se inflamó de amor por el sol, y nunca más deseé mis máscaras. Y como en éxtasis clamé: ¡Benditos, benditos los ladrones que robaron mis máscaras!

Terminaladanzacon untruenoviolentoylaneblinadeOrfalese.

Explanadaenruinas.Almustafá,enlatorre,veelbarcoconsusvelas violetas,llegaryatracarjuntoalaexplanada.

GIBRÁN: (Iluminado.) Almustafá, elegido y amado, el que era un amanecer en su propio día, -Soy yo Almustafá- …esperó durante doce años, en la ciudad de Orfalis, -¿Nueva York?- el arribo de la nave que había de conducirle de regreso a su isla natal. –Mi Líbano.

ALMUSTAFÁ: ¿Puedo partir en paz y sin tristeza? Nada me sería más placentero que llevarlos conmigo, pero ¿cómo hacerlo? Estoy preparado para partir, y mi anhelo al igual que las velas desplegadas, tan sólo al viento aguarda.

SeacercanMARY,CHARLOTTE,NAIMYyMICHELINE.

CHARLOTTE: Almustafá amado.

NAIMY: Almustafá elegido.

MICHELINE: Khalil… poeta.

MARY: Gibrán…. Khalil Gibrán... Profeta.

ALMUSTAFÁ: Soy un buscador de silencios, ¿pero he encontrado acaso tesoro alguno en los silencios que pueda ofrendarlo con confianza? Si este es el día de la cosecha, ¿en cuáles campos he arrojado la semilla y cuándo olvidé sembrar?

NAIMY: No te alejes de nosotros.

MICHELINE: Has sido una culminación luminosa en nuestro crepúsculo.

CHARLOTTE: Y tu juventud nos ha ofrecido el material para soñar.

MARY: Eres nuestro hijo bienamado. No permitas que nuestros ojos sufran de hambre por tu rostro.

MICHELINE: Mucho es lo que te hemos amado. Mas fue el nuestro un amor sin palabras, y con velos quedó cubierto.

NAIMY: Sin embargo, ahora el amor viene a llamarte y se yergue para quedar develado ante ti.

CHARLOTTE: Y siempre ha acontecido que el amor desconoce su propia profundidad, hasta que llega la hora de la separación.

MARY: Llevas largo tiempo explorando las distancias para ver el arribo de tu nave. Ahora ha llegado y tu destino es partir. Nuestro amor sería incapaz de sujetarte, pero antes de que nos abandones, te suplicamos que nos cuentes algo de tu verdad. Y esa verdad tuya se transmitirá a nuestros hijos, y ellos harán lo mismo con los suyos para que tu verdad nunca fenezca. Te pedimos que nos descubras lo que existe dentro de nosotros, y nos hables de lo que hay entre el nacimiento y la muerte.

ALMUSTAFÁ: Pueblo de Orfalis, ¿de qué pudo hablarles si no de lo que aún palpita en sus almas?

GIBRÁN: ¿Puedes hablarles de todo eso? ¿Tienes autoridad moral para…, ¿sabes si dentro de ti…, vida, obra y autor ¿son acaso lo mismo? ¿Quién soy en el corazón de los demás? Oh vida, ¡cuánto quisiera que los que me han amado me dijesen la verdad! (Abrelosojosdepronto.) ¡Mischa!… (Naimy se acerca presuroso.)

NAIMY: ¿Qué te pasa? ¿Qué tienes?

GIBRÁN: ¡Mischa, querido… ! ¡Soy una falsa alarma!

Música.

CHARLOTTE: Almustafá bienamado, háblanos de la conversación…

ALMUSTAFÁ: Ustedes hablan cuando no pueden habitar por más tiempo en la soledad de vuestro corazón. Entonces vuestro corazón va a morar en vuestros labios.

MARY: (Gibránlarodeaconinterés.)

Abril de 1904. Asisto a una exhibición de arte. Los amigos me han presionado lo suficiente para que deje mi escritorio de Principal de un colegio de niñas en Cambridge y me acerqué a la Galería donde un joven árabe, Jubrán Khalil Jubrán, ha expuesto sus dibujos.

GIBRÁN: Mary Haskell. Es un honor para mí tenerla aquí.

MARY: Gracias.

GIBRÁN: Podría explicarle mis dibujos, si lo desea.

MARY: Con mucho gusto. ¿De qué país es usted? ¿De Francia, de Italia tal vez?

GIBRÁN: Vengo de El Líbano.

MARY: El Líbano. La tierra de los cedros y de “El cantar de los cantares”.

GIBRÁN: ¿Quiere sentarse?

MARY: No, de ninguna manera. He venido a estudiar su arte, querido. Vamos, explíqueme este dibujo. (Caminan por la exposición. Al fondouncuadrosuyo.)

ALMUSTAFÁ: Cuando encuentres a tu amigo en la senda permite que el espíritu que existe en ustedes mueva sus labios y conduzca su lengua. Permite que la voz que existe dentro de tu voz hable al oído de su oído. Porque su alma guardará la verdad de tu corazón.

MARY: ¿Por qué sus figuras siempre están desnudas?

GIBRÁN: Porque la vida está desnuda. Un cuerpo desnudo es el más noble y verdadero símbolo de la vida.

MARY: (Sonríe.)¿Y por qué en sus pinturas abundan los signos de muerte y dolor?

GIBRÁN: (Silencio.)En menos de un año, Miss Haskell, he perdido dos hermanos y una madre, a quienes quería más que a mi vida.

MARY: Puedo entender la lágrima que brota de su rostro por la lágrima que brota de mi corazón. Yo también acabo de perder a mi adorada madre. ¿Se da cuenta? Hemos encontrado dos profundas hermandades. La del arte y la del dolor. (Silencio.)¿Le gustaría exhibir sus cuadros en mi escuela?

GIBRÁN: Usted me abre el cielo.

MARY: Este niño libanés, a quien mi corazón adoraría para el resto de mi vida…

GIBRÁN: Esta mujer, que es un ángel…

NAIMY: Almustafá, Háblanos de la Alegría y la tristeza.

ALMUSTAFÁ: Tu alegría es tu tristeza sin máscara. Y el mismo manantial de donde mana tu risa, ha estado frecuentemente lleno de tus

lágrimas. ¿Y podría ser de otra manera? Cuanto más profundo penetre la tristeza en tu ser, más alegría podrá contener.

Cojines,canapés,comodidad.

EntranMichelineyCharlotteconelté.SeguidosdeMaryyGibrán.

MARY: Mucho comprometiste nuestro amor con tu exhibición en este colegio, Khalil.

GIBRÁN: Después de algún tiempo de soledad, no sé cómo agradecerles este fresco y amoroso calor de la amistad.

MARY: Agradece a estos dos angelitos que se esmeraron en que todo quedase perfecto.

GIBRÁN: Gracias, ángeles. Micheline… angelito.

MICHELINE: (Riendocoqueta.) De nada. Mary se empeña en formarnos a todas a su imagen, por eso nos llama “ángeles”. Nosotras le llamamos “el roble”, porque tiene las raíces muy hondas en la tierra y para ella nunca existen límites ni problemas. Sufragista, luchadora obrera y feminista. Además, escaladora y aprendiz de astrónoma. Todo un verdadero encanto del nuevo siglo. Nunca encontrarás mujer más práctica en el mundo. Anda, sé agradecido y besa la mano de esta miserable aspirante a actriz… (Gibránlabesaconafecto.)

MARY: Y a Charlotte…

GIBRÁN: Charlotte… (Letiendelamano.)

CHARLOTTE: (Ella se la toma y la vira para leerla. Juguetona.) Una línea de la vida muy corta. Deberías dejar de fumar. Y la línea del amor, honda y marcada, cruzada por muchas líneas pequeñas que son los cientos de romances que…, ¡eres un seductor!… Khalil, eres terrible en el amor. (Todosríen.) .

MARY: No olvidemos chicas que estamos ante la presencia de un sumo sacerdote del arte, es lógico que sea admirado y querido.

GIBRÁN: No tanto como quisiera y no tanto para presumir.

MARY: Dinos Khalil, ¿no es la belleza el fundamento de toda obra artística?

GIBRÁN: (Enextrañaposedeseductorexótico,enciendeuncigarrillo.)

La belleza es la armonía entre la alegría y la pena. Para el cuerpo es una aflicción y para el espíritu un regalo. Belleza es el poder que dirige

16

nuestro corazón al trono de la mujer, que es el mismo trono de Dios. (Lasmujeresabsortasporunmomento.Luego,gestosdeasombro.)

MARY: Igualas la mujer a Dios, ¿no es una exaltación exagerada?

GIBRÁN: ¿Quién les dijo que Dios era hombre?

CHARLOTTE: ¡Maravilloso!

GIBRÁN: Dios es Madre y es Padre. La mujer es Diosa Madre y el hombre Dios Padre. Al Dios padre se llega a través de la imaginación y la razón, y a la Diosa Madre sólo se llega a través del amor. (Acariciael rostrodeMichelinequelemiraembelesadayqueposasumanosobre ladeél.CambiodeLuz.Charlottedesaparece.)

MARY: Quiero que la dibujes para mí. Te pagaré. (Gibrántomael crayónymirandoa Michelinesequeda pensandounmomento.Micheline modelaparaélmientrasleeporlobajo, enfrancés,de “Las floresdelmal”.)

GIBRÁN: Su sonrisa tiene la modestia de una niña inocente y su belleza es mi veneno.

MARY: Te ama. No puede evitarlo. Te pagaré.

GIBRÁN: Veinte años y quiere ser actriz. ¿Se puede fingir el amor? Vamos actúa sólo para mí.

MARY: Es una belleza generosa y disponible. Te pagaré.

GIBRÁN: No piensa ni calcula. Se lanza a la vida como un incendio que me quema… sin quemarme.

MARY: Vamos, dibuja. Te pagaré.

GIBRÁN: ¿Por qué me haces esto? (Gibránfumadesesperado.)

MARY: Tú mereces belleza, Khalil. Y quiero darte todo lo que te merezcas.

(Michelinelomiraintensamente.)

MARY: Vamos, bésala. Es un juego. Te pagaré.

GIBRÁN: No dormiré en semanas si lo hago.

(Labesahondoylargo,ellasedejacaersobresupechoconarrobadora sensualidad.)

ALMUSTAFA. Y si la primera mirada es la semilla que la Diosa del amor siembra en el corazón humano… el primer beso es la primera flor del árbol de la vida.

MICHELINE: ¿Qué tienes para mí Khalil, una lágrima o una sonrisa?

GIBRÁN: ¡Cuánto quisiera que pudieras leer árabe para que veas todo lo que mi corazón escribe para ti!

MICHELINE: Empiezo a temer que en el futuro necesitaré una escalera para poder mirarme en tus ojos soñadores. Así de inmenso vas a ser, Khalil Gibrán. Vamos, bésame otra vez para que mi sonrisa encuentre su camino.

(Labesa.Gibrándibuja suentornoconsuslabios.

Hacenelamorbajoel vertiginosoritmode músicaárabe.)

GIBRÁN: Te conozco, Micheline. Te conozco desde antes de haber nacido y te busco desde que nací. Cada paso que has dado es para buscarme, cada voz que sale de tus labios es para llamarme. Micheline

Micheline… Micheline… cada segundo que te toco estamos más cerca de Dios. (Seabrazanconpasión.)

MARY: Adorado Khalil. ¿Nunca has estado en París? Sería una excelente oportunidad para que desarrolles tu arte. Allá podrás empezar a conocer el mundo que te espera. ¿Te imaginas? Rodin, Debussy, Rostand… el mundo en marcha hacia el futuro y tú formando parte de él. Serás mi protegido, Khalil. Yo pagaré por todo, no te preocupes. Recibirás mi dinero con frecuencia, pagaré tu estudio, tus maestros, aprenderás y dibujarás y escribirás. ¿Qué te parece?

MICHELINE: Tengo miedo, Mary. En París, mi Khalil será otro y me olvidará. (Muycercadeél.Música.)Recuerda que te di mi amor y mi cuerpo porque te lo merecías. Atesora todas esas cualidades que te hicieron merecedor del corazón de tu Micheline, para que en el futuro puedas merecer el corazón y el cuerpo de las mujeres que van a amarte después de mí.

GIBRÁN: ¿Tu corazón y tu cuerpo, Mary? Sólo espero vivir lo suficiente para ser merecedor de tu amor siempre y poder hacer por ti lo que has hecho por mí. Y estoy seguro de que dentro de poco podré decir: “soy un artista gracias a la Srta. Mary Haskell, un ángel que vive en Boston.”

MARY: 1908. Gibrán llega a París para estudiar arte. Tiene 25 años.

GIBRÁN: Querida Mary. Micheline está en París. Dice que viene a ver a sus padres. Te hemos escrito haciéndote creer que estamos bien y felices. Hemos visto París juntos tomados de la mano y hemos reído juntos.

MARY: Te pagaré.

GIBRÁN: Tengo mucho miedo. Soy un cobarde.

MICHELINE: Khalil, abre la puerta. Soy yo, tu Micheline.

GIBRÁN: Pero ¿no te habías ido con tus padres? ¿Dónde está tu equipaje?

MICHELINE: En un hotel.

GIBRÁN: Bueno, pues vamos a buscarlo.

MICHELINE: No creo que sea necesario.

GIBRÁN: No vas a quedarte en un hotel teniéndome aquí. Vamos.

MICHELINE: Si dejas que tu corazón sea el hospedaje de mi corazón, te juro que no me importará donde duermo ni lo que visto, ni lo que como.

GIBRÁN: Mi mesa será tu mesa, mi cama tu cama…

MICHELINE: (Casiengritolloroso.)¡Khalil!… No sabes lo feliz que me haría ser tu sirvienta, lavar tus ropas, preparar tu comida, limpiar tu cuarto como las más generosa criada. Khalil, puedes hacer lo que tú quieras de mí, seré la alfombra bajo tus pies, puedo ser el polvo que tú pisas… pero nunca, ¡nunca podré ser tu amante!

GIBRÁN: Eso que has dicho es sacrilegio. Un sacrilegio contra el amor y contra la vida. Micheline, fue el amor el que unió nuestras almas y nuestros cuerpos por toda la eternidad.

MICHELINE: Quiero ser tu esposa, no tu amante.

GIBRÁN: ¡Hay amantes más nobles ante los ojos de la vida que cientos de esposas que se unen por los lazos de los hombres, pero no por los lazos del amor!

MICHELINE: Ya tengo los lazos de tu amor, ahora quiero los lazos del hombre.

GIBRÁN: Los hombres, los malditos hombres. Odio los hombres. Son como las gallinas. Tienen alas pero no pueden volar, tienen lengua pero no pueden cantar. No, Micheline. A mí déjame ser un águila que rompa los cielos con sus alas, y quédate tú con todas las gallinas del mundo.

MICHELINE: Khalil. (Pausa.)Está creciendo. Es la semilla de amor que tú sembraste, ¿por qué ahora no quieres cosecharla?

GIBRÁN: (Largosilencio.) Yo soy un poeta y un artista. Y la poesía y el arte se mueren cuando las aprisionas. Necesitan grandes campos y amplios horizontes.

MICHELINE: ¡¿Y no ves la prisión en que me quedo yo?!

GIBRÁN: Escúchame. Estoy en París estudiando gracias a la ayuda de gente que me quiere. Si ellos se enteran de que me he casado contigo, de que tendré un hijo… eso sería suficiente para que no me ayudaran más.

MICHELINE: Para que ella no te ayudara más.

GIBRÁN: ¡Basta ya, Micheline!

MICHELINE: ¿Y si ella se entera?

GIBRÁN: Esperemos que no. Estamos en un continente y ella en otro.

MICHELINE: Y esa fuerza de vida que tanto amas, ¿no se entera de todo, Khalil? Ese Jesús que tanto veneras, ¿no se entera de todo lo que escondemos? Quien está en otro continente muy lejos de ti… soy yo Khalil. Tú eres poeta y artista y eso según tú, pertenece al cielo, yo soy sólo una mujer… soy de la tierra, de la tierra que da vida al maíz que comemos y a la rosa que adoramos, … si esta pequeña mujercita de la tierra puede darte un hermoso hijo del amor… ¿no crees que también puede darle vida a tu poesía y a tu arte? Dios bendito Khalil, ¡qué estúpida he sido!

GIBRÁN: Micheline. el iluminado Dios y el generoso amor hallarán una solución para …

MICHELINE: Estás enfermo Khalil, enfermo de las palabras. ¿Crees que puedes ocultar quién eres con tantas palabras? Las palabras

bonitas nunca han hecho que lo horrendo sea más hermoso. Y esto es horrible. Me voy, Khalil.

GIBRÁN: ¿Y el niño?

MICHELINE: No sé.

GIBRÁN: Conozco un médico que puede…

MICHELINE:

¿Matarlo? ¿Es eso lo que tú quieres? ¿Matar a tu hijo?

(Música.)

NAIMY: Profeta amado… Háblame de nuestros hijos.

ALMUSTAFÁ: Tus hijos no son tus hijos. Son hijos de la Vida deseosa de sí misma. No vienen de ti, sino a través de ti. Y aun cuando estén a tu lado, no te pertenecen. (Micheline camina hasta la oscuridad, dondesevadespojandodesuvientreenunritualdolorosodesangre ydefuego.Almustafápasasumanoporelvientreyunríodesangre envuelve a Khalil que baja su cabeza arrepentido.) Puedes darle tu amor, pero no tus pensamientos. Porque ellos tienen sus propios pensamientos. Puedes cubrir su cuerpo, pero no su alma. Porque su alma habita en la casa del mañana, esa casa que nunca podrás conocer ni siquiera en tus sueños. Puedes esforzarte en ser como ellos, pero nunca intentes que ellos sean como tú. (Almustafálomiracongranternura. Pasalamanoporsurostroparasecarunalágrima.YaMichelineha desaparecido.) . Porque la vida no retrocede ni se entretiene en el ayer. Tú eres el arco desde el cual tus hijos como flechas son disparados. El Arquero mira el blanco en el camino del infinito, y Él con su poder doblegará el arco hasta donde más se pueda, para que sus flechas puedan ir rápidas y lejanas. Deja que el Arquero te doblegue. Porque Él ama por igual la flecha y el arco.

(Cambiodeluz.)

NAIMY: En el año 1516, los Turcos ocupan las tierras de Siria y El Líbano. Desde entonces, el Imperio Otomano promueve sangrientas guerras civiles y religiosas entre drusos y cristianos maronitas. Miles de cristianos son masacrados por los drusos, con la anuencia de

Turquía en el año de 1860. Desde entonces la paz se mantiene por silencios y contubernios de miedo. Los Turcos dominan todo. Oprimen a Siria, torturan al Líbano y la sangre de los hijos de los cedros baña las tierras por las que caminó Jesús.

(Cambiodeluz.NaimyyAlmustafásevistendeobispos.)

GIBRÁN: Querida Mary. Ha salido de la imprenta mi libro EspíritusRebeldes . Alguna gente en Siria ya empieza llamarme…

OBISPO 1: ¡Hereje!

OBISPO 2: ¡Pervertidor de juventudes!

GIBRÁN: Los intelectuales de Egipto, los religiosos mismos de mi Líbano, los propios cristianos a quienes defiendo tanto me llaman… (Ríe.)

OBISPO 1: ¡Enemigo de las leyes!

OBISPO 2: ¡De los valores de la familia y las tradiciones!

GIBRÁN: ¿Sabes qué? Dicen la verdad. Porque odio las leyes de los hombres y aborrezco las tradiciones que nos dejaron nuestros ancestros. Este odio es el fruto de mi amor por lo sagrado y lo espiritual, que es la única ley que yo admito. Dos obispos católicos me han llamado a una reunión secreta.

OBISPO 1: Joven Gibrán. Su libro es…

GIBRÁN: He hablado por mis personajes.

OBISPO 2: Se habla de excomunión. El Gobierno Sirio ha prohibido la entrada del libro, ¿no le avergüenza?

OBISPO 1: Entienda que lo van a perseguir si usted no toma acción sobre esos 200 libros que han entrado al Líbano de contrabando…

OBISPO 2: Nosotros no queremos presionarle, pero esto es intolerable, inmoral…

OBISPO 1: Los hemos quemado en la Plaza Pública.

(Música. Una hermosa mujer, Diosa del fuego, trae el libro en las manosyenmediodeellosloenciendeenfuegoyhumo.)

GIBRÁN: Malditos hipócritas. Yo condenaré hasta mi muerte la tiranía que ustedes, hipócritas obispos católicos, han impuesto sobre la mujer, sobre la juventud, sobre el arte, sobre la inocencia. Ustedes, explotadores de la ignorancia, concubinos despreciables de los turcos… ¡Muy poco les he dicho en esta que es mi mejor obra! Muy poco…

OBISPO 2: Joven, lo persiguen.

OBISPO 1: Los agentes de la Policía Secreta turca lo siguen en la noche, joven Khalil.

GIBRÁN: Sus persecuciones son la comida de mis principios. ¡El joven Khalil es un hereje porque la verdadera luz de Dios sale de mi corazón!

OBISPO 1: Hablamos de respeto, de fe…

GIBRÁN: Yo hablo de compasión. Un poco de compasión por el criminal y por la puta, vale más que miles de vuestras inútiles letanías.

OBISPO 2: ¡Usted está utilizando sus talentos en contra de su país, en contra de su Iglesia!

OBISPO 1: (Consolador.)Nosotros no lo condenamos. Hemos venido a traerle un mensaje de paz de su eminencia.

OBISPO 2: Busque estos libros, destrúyalos, nosotros llevaremos a Siria su palabra de arrepentimiento. Usted puede servir bien a su país.

OBISPO 1: Estamos dispuestos a ofrecerle un buen puesto en el Gobierno si accede a esto.

GIBRÁN: Nada de ustedes me sorprende ya. Dígale a su eminencia católica que estoy preparando un libro mucho más violento y terrible llamado Alas Rotas . Dígale que lo compre y lo lea. Entonces sabrá quién es Khalil Gibrán.

OBISPO 1: ¡Nunca podrá regresar al Líbano!

GIBRÁN: Regresaré. Porque algún día y a pesar de ustedes, ¡el Líbano será libre!

MiraellibroquemarseenlasmanosdelaDiosadelFuego.Laatrae haciasíconrudezaylabesaenloslabios.Mientrasasusespaldas,uno delosObispossacaunrevolveryledispara,Khalilesheridoenel brazo.Setoca.Miralasangre.Ríe.Lamujerdefuegobailajuntoaél.

Querida Mary: ¿Acaso sabes lo que es arder en un inmenso bracero, con la seguridad de que ese fuego está transformando en cenizas todo cuanto existe de ruin en el mundo… para finalmente dejar el alma desnuda, en su esencia verdadera… Oh, Mary adorada, ¡no hay cosa más bendita que este fuego!

(Lamujerdefuegoloenvuelveendulceabrazoysale.)

MARY: Almustafá, háblanos de la Religión.

ALMUSTAFÁ: Aquel que se cubre con su moral y su dogma como si se tratase de su mejor vestido, sería mejor que andase desnudo. Tu vida cotidiana es tu templo y tu religión. Y si conocieras al Dios que llevas dentro, no tendrías enigmas que descifrar. Mejor será que mires en torno a ti y verás a Dios jugando con tus hijos. Y cuando mires el espacio lo verás andando entre las nubes, extendiendo. sus brazos en el relámpago y descendiendo en la lluvia. Religión… (sonríe.)la religión es la sorpresa diaria de tu alma.

(Músicapopulardelosañosdiez.)

CHARLOTTE: Querida Mary. Te escribo desde París. Estoy buscando un productor para mis obras de teatro y como no tengo donde quedarme, estoy con Khalil. Ambos estamos trabajando mucho y te juro que bien nos merecemos el dinero que nos mandas. Te cuento sobre tu adorado niño libanés. Está pintando mucho. Ahora está pintando un desnudo de mi para regalártelo. No te preocupes querida NADIE, NADIE me quiere como me quieres tú y NADIE te ama como te amo yo… (Besa a Mary en los labios.) , ni siquiera él, que no sabe dividir el oriente del occidente de mi corazón. (Ríe.)

GIBRÁN: Querida Mary: Charlotte es un remolino, siempre tiene extrañas ideas, y corre y corre y corre detrás de su sombra. Esa alma fuerte y hermosa no descansa nunca.

CHARLOTTE: Su talento progresa, su color, su técnica es exquisita. Creo que ha madurado mucho…

GIBRÁN: Déjame volar a mi Líbano. Dame alas, Charlotte. Ah, mi corazón está lleno de cosas aladas. (Abrazointenso, formandoalasyplacer.)

CHARLOTTE: Querida Mary: No confíes en Khalil. Todos sus amigos en París me dicen que es un mujeriego. Este estudio que tú le pagas es poco menos que un burdel. He encontrado cartas entre sus cosas. Una tal Marie, que es actriz…

GIBRÁN: Jamás, querida Mary, esta actricilla llamada Marie llenará mi corazón como lo llenas tú. Solo la cité aquí como modelo. No puedes pensar mal de mí. (Pausa.)Te estás riendo. Sé que te estás riendo.

CHARLOTTE: …otra carta de una estudiante rusa de nombre Olga, otras cartas con olor a perfume de Susanne, de Leah… recuerdos de putas de Pigal, cosas así, quién sabe, no, si te sigo contando terminarás por olvidarlo… ¿Es cierto que lo amas?

¿Es cierto que te ama él? ¡No puede vivir sin el sexo! ¿Y qué me dices de Micheline? Ni por ahí te pudras. (Lobesaysale.)

GIBRÁN: Querida Mary: ¿Sabes?, vine a París con una sola misión. Soy un reformador y París es un hervidero de disidencia. Es fuego lo que sale de nuestro arte, de nuestras discusiones políticas, soy un disidente rabioso, Mary. La libertad del Líbano está cerca. ¡Cómo ansío los montes y los cedros de mi Bisharri! Pero mientras esto llega, tú eres mi único consuelo, aunque estés en el otro extremo del mundo. Cuando camino tú estás a mi lado, como en Boston... y cuando estoy solo te siento respirar junto a mí. Te venero, Mary.

MARY: Khalil regresa a Boston. Diciembre de 1910. Y mi adorado niño corre hasta mí.

GIBRÁN: Quiero casarme contigo. Yo te adoro, Mary.

MARY: (Silencio.Sonrisatriste,desúbito,preocupación.)Por Dios Khalil, no olvides la edad que tengo. No, no lo discutamos siquiera. Estás infatuado, confundes amor con gratitud, no, mejor…

GIBRÁN: Te amo, Mary.

MARY: Quiero que nuestra amistad dure para siempre, Khalil. Y yo jamás cambiaría una maravillosa amistad por un mediocre romance.

GIBRÁN: Mary…

MARY: Además… tú no estás limpio, Khalil.

GIBRÁN: ¿De qué hablas?

MARY: Esas mujeres de París. ¿Cuántas, Khalil? Podríamos terminar hablando hasta de higiene.

MICHELINE: ¿Crees que Khalil te ama de verdad? ¿Qué es lo que ama de ti?

CHARLOTTE: Khalil hablaba y hablaba de ti. Me tenía loca. Estuvo preparando tu declaración de amor por meses. Mary esto, Mary lo otro… toda su boca era Mary, Mary…

MARY: Quiero una vida de aventuras, de romance…

GIBRÁN: Yo… no puedo hacer ciertas cosas. No están en mi cuerpo. Pero tú, cuando quiero acercarme…

MARY: Tal vez quiero casarme contigo. Mejor no.

GIBRÁN: …te elevas a regiones remotas.

MARY: Sí, pero tú vuelas conmigo.

GIBRÁN: Quiero que caminemos juntos.

MARY: Yo… a mi… bueno, me gustan los hombres fuertes, rudos. Las diferencias entre tú y yo, Khalil, son tantas.

GIBRÁN: ¡Hasta cuándo viviremos esclavos de esas diferencias!

MARY: Creo que yo corro más rápido que tú. (Ríe.)Además, adoro a los niños.

GIBRÁN: ¿Por qué hablas de niños? No podría. Los niños…

MARY: Olvídalo. Ni lo sueñes.

GIBRÁN: ¿Es que en el fondo la señora americana es demasiado buena para el niño libanés? Ya no soy el exótico monito con cadena de oro que exhibías en público. ¿Es esto un asunto de raza, Mary?

MARY: Tal vez deberías dedicarte solo al trabajo. Tienes tanto que pintar y que escribir. Es lo que yo haré. Tienes que ser grande, Khalil, yo te ayudaré a que seas inmenso.

GIBRÁN: Mary, tú eres mi ángel. Por favor, te lo suplico, casémonos.

MARY: ¡Voy a pensarlo, déjame en paz!

CHARLOTTE: Khalil debería irse a vivir a Nueva York. Boston ya lo asfixia, me lo ha dicho. Además, tus indecisiones sobre lo de ustedes. Un día sí, otro día, no sé. Vamos, dile que se vaya a Nueva York. Allí está su futuro. Además, si quisieras verlo, tomas el bote y ya estás allí, y viceversa.

MARY: Khalil: Esta es mi decisión. He dejado de pensar en la posibilidad de ser tu esposa, aunque me muera por serlo. Está mal, Khalil. Ya no tengo fuerzas. Estoy vieja. Estoy “usada” por la vida ya. Voy hacia abajo y tú tienes un maravilloso futuro por delante… ¿Qué más quieres de mí? Te doy todo lo que quieres, mi dinero, mi amor, mi inteligencia y mi paz… y quizá una mujer mucho más hermosa y joven te espera. Cuando esa hermosa mujer llegue, ¿te vas a quedar junto a mi sólo por caballerosidad? No, Khalil. Lo mejor de ti no llega todavía, no lo mates antes de que aparezca. Te irás a Nueva York. Te pagaré.

(Micheline,CharlotteyMarysejuntanparaverquévaacontestar.)

GIBRÁN: Gracias, Mary. Me has dado un nuevo corazón.

MICHELINE: Y dinos Profeta, ¿qué piensas del Matrimonio?

ALMUSTAFÁ: Nacieron juntos, y juntos seguirán para siempre. Pero dejen que existan espacios en esa unión. Ámense el uno al otro, pero no permitan que el amor sea una atadura. Llenen sus copas, pero que

cada uno beba de la suya. Compartan el pan, pero no coman del mismo pedazo. Canten y bailen juntos y sean alegres, pero permitan que cada uno se sienta solo. Como las cuerdas de un laúd … aunque están separadas, tiemblan con la misma música. Da tu corazón, pero no para que el otro lo tenga. Y quédense juntos, pero no demasiado. Porque las columnas que sostienen un templo están separadas. Y un árbol no crece fuerte a la sombra de otro.

(Uncafé.Fuman.)

NAIMY: Nueva York. 1912. Khalil llega a la cima del mundo.

GIBRÁN: Querido Naimy: Nueva York, aquí se hace el arte y aquí se vende.

CHARLOTTE: Nueva York. Greenwich Village. Es nuestra época. Khalil. Socialismo. Amor libre, teatro libre…

NAIMY: Verso libre, anarquismo, poesía, política… erotismo, exotismo y esoterismo. ¿Quién sabe la diferencia?

CHARLOTTE: Feminismo, libertad, vivir el momento, Khalil. Estás en el lugar más importante del mundo en el momento más importante del mundo. Y estás conmigo. (Lobesa.)

NAIMY: La comunidad siria de Nueva York te recibe con respeto y admiración. Periódicos, conferencias, reuniones. Pasas demasiado tiempo atendiendo visitas y apenas tienes tiempo para escribir. ¿Recuerdas lo que dejaste atrás?

GIBRÁN: Una mujer americana a quien le ofrecí mi amor y lo rechazó.

NAIMY: Pero te sigue protegiendo.

MARY: Te pagaré.

GIBRÁN: (Sobrio.)Es un ángel. (Fuma.)

MARY: Te pagaré, Khalil. Se grande, pinta, escribe.

NAIMY: (Libros.)Nietzche, Blake, Leonardo, Renán.

GIBRÁN: Renán… la vida de Jesús. ¿Habrá una historia de Jesús más humana y poderosa que la historia del Jesús verdadero? El

revolucionario, el hombre que amó, que tuvo mujer, patria, emoción. Ah, cómo quisiera hablar de todas esas cosas contigo, Mary.

MARY: Escribe, Khalil.

GIBRÁN: ¿Cuándo vienes a mi casa?

MARY: Cuando tú lo pidas, ahí estaré.

GIBRÁN: ¿Es cierto que Dios ha muerto, Naimy? Yo no lo creo, pero Nietzche es el hombre más grande que haya podido salir de un libro. Y tú, Naimy, ¿y nuestro Líbano? ¿Cuándo será libre?

ALMUSTAFÁ (RIANI.) : (Se despoja de sus ropajes y se convierte en Riani.) 1913. En París se llevará a cabo el Congreso para la Autonomía del Pueblo Árabe y se pedirá la soberanía de Siria. Tenemos que escoger un representante de la Comunidad Siria en Nueva York que esté dispuesto al diálogo diplomático con los turcos.

NAIMY: Todos hablan de ti. Eres la mejor opción.

GIBRÁN: ¿Quién pagará mis gastos en París?

NAIMY: Algunos miembros de nuestra comunidad.

GIBRÁN: Y esos que pagan mis gastos, ¿van a obligarme a hablar en su nombre o podré hablar en el mío?

RIANI: Si apelamos a las potencias de Europa, ellas presionarán a Turquía y esta es la mejor oportunidad de conseguir la Libertad de manera diplomática.

GIBRÁN: Por Alá, Riani…el sólo hecho de pedirles la libertad diplomáticamente nos obliga a aceptar que Turquía tiene nuestro consentimiento diplomático para fastidiarnos la vida.

NAIMY: Hay que tener paciencia, buscar soluciones seguras, Khalil.

RIANI: Tarde o temprano Turquía cederá.

GIBRÁN: Tarde prometerá y nunca cumplirá.

NAIMY: Europa vencerá al Imperio Otomano, Khalil, eso es ya un hecho.

GIBRÁN: ¿Por qué demonios apelar a los poderes de Europa y no a la gente de Europa?

NAIMY: Primero las reformas.

GIBRÁN: ¡Primero la independencia!

RIANI: ¡Primero la paciencia, Khalil!

GIBRÁN: ¡Primero la revolución! ¡La paciencia es la maldición de Oriente, Riani! La pasión y la revolución son lo único que construye las naciones. No existe justicia sin la pasión. La pasión es Dios en movimiento.

RIANI: Tus visiones de nuestro problema no nos ayudarán a conseguir la independencia, Khalil. Si es así, lo siento. Yo representaré a nuestra comunidad en el Congreso de París. Con o sin tu ayuda.

MARY: ¿Quieres ir a París? ¿Quieres que te escuchen? Pídelo y allí estarás.

GIBRÁN: (ViendoaRianiyaNaimyalejarsesusurrando.)Ese Congreso será un fracaso. Querida Mary: Me dan la espalda. No me importa ya lo que hagan. Están perdidos.

RIANI: Marzo de 1914. Khalil publica “El principio de una revolución”. Atacas directamente al Imperio Otomano y pides una alianza Cristiano-musulmana en el Líbano y en Siria para acabar la Tiranía. ¿Quién te crees que eres?

NAIMY: Espías turcos te persiguen.

RIANI: Has firmado tu sentencia de muerte.

GIBRÁN: Dios, mío, ¡cómo quisiera estar en el Líbano justo ahora y besarte amoroso bajo los cedros! Cuando yo muera, tú acompañarás mi cuerpo hasta sus montañas.

MARY: ¿Morirte? Los hombres como tú no mueren nunca, amado mío. Deseo tanto verte, tenerte a mi lado.

CHARLOTTE: ¿Te hace falta, Khalil? No te preocupes, yo lo vigilo cuando tú no estás. (Charlotte se le acerca y lo besa con ternura.) Ahora pasamos mucho tiempo juntos, me está pintando de nuevo. Un cuadro al óleo para ti. Dijo que le pagarías por él.

GIBRÁN: (Laabrazayjuegaconellaconsensualidad.) Tú y yo hemos estado juntos en otras vidas.

CHARLOTTE: Y hablamos de lo que nos importa mucho a los tres: la maravillosa reencarnación. (Aél.)¿En cuántas?

GIBRÁN: Oh, no podría contarlas. (Setocan.)Conozco siete de mis vidas anteriores.

CHARLOTTE: Querida Mary: Creo que Khalil y yo hemos sido hermanos en otra vida… en Egipto, sé que fue en Egipto porque he estado muchas vidas allí. Y también estuve en Grecia y en Roma. Te juro que mis sensaciones de esas vidas son muy fuertes.

GIBRÁN: Tuve dos vidas muy cortas en Siria, en Grecia –donde te conocí- En Egipto, en India en Persia… soy un alma muy vieja, creo. Hemos hecho el amor por siglos.

CHARLOTTE: Y lo seguiremos haciendo, querido. ¿Sabremos la verdad algún día? Si tal vez… cuando nos muramos.

MARY: Querida Charlotte: Khalil fue en otra vida el pintor y escritor William Blake, y luego el pintor Rosetti… Estoy muy segura de eso.

CHARLOTTE: Khalil no hace sino hablar de ti. Mary esto, Mary aquello, mi ángel, mi ángel Mary… (KhalilyCharlotte hacenelamor.)

MARY: Iré a verlos muy pronto. Nueva York

está tan cerca, pero el Colegio no me deja. Dime, ¿es cierto que te ama? Siento que sí. Khalil y yo nos hablamos en amorosa telepatía. Vamos, dime si piensa en mí. Dime qué dice. ¿Te habla de nuestros sueños, te lee nuestras cartas? Háblame Charlotte… dímelo tú, Khalil. Díganme qué hay entre ustedes. (Rota.)¡Ella puede darte su cuerpo, pero yo doy vida a tu arte, Khalil! Vamos Charlotte, es presuntuoso pensar que… Está bien. (Rendida.)Les doy permiso para amarse.

(Terminan. Charlotte se levanta, Khalil duerme entre los cojines. CharlottefumadespacioobservandoaKhalil.)

MICHELINE: Y Almustafá habló sobre el Placer y dijo: El placer es un canto de libertad, pero no es la libertad. Es el florecimiento de tus deseos, pero no es su fruto. Algunos jóvenes buscan el Placer como si eso fuera todo, y se ven juzgados y censurados. Yo no los juzgaría ni los censuraría. Haría que lo buscasen. Pues sí, hallarían el Placer, pero no solo. Siete son sus Hermanas, y la menor de ellas es más bella que el placer.

CHARLOTTE: Mary, has sido mi maestra, mi mejor amiga y mi amante, querida y por eso te diré la verdad. Entre Khalil y yo… no hay química. No te preocupes. Si estuviéramos los dos en una isla desierta… yo… no sé. No lo sentiría como un hombre. Pero como te digo una cosa te digo la otra. Khalil es un mujeriego. Las cosas que te dice en las cartas las dice acá a otras mujeres. Como todos los hombres.

MARY: Querida Charlotte: Una vez Khalil me dijo que era posible que un hombre amara a siete mujeres a la vez y pudiera hacerles el amor a todas siempre y cuando todos estuvieran de acuerdo. Que hacer el amor era como cortar una florecita. ¿Crees que hablaba en serio?

CHARLOTTE: Dos chicas sirias. Una de nombre Helena, otra que se llama igual que tú, Mary… la artista Rose O’neill, muy famosa, ¿no has oído hablar de ella? ¡Ha pintado a Khalil! Dice públicamente que nuestro monito sirio es sensual, sexual y peligrosamente bello. Y que me dices de las muchas cartas que ya va acumulando de una tal May

Ziadah, una académica libanesa a quien siempre llama, “querida señorita”. ¿Te atreves preguntarle? ¿No te basta? Yo te digo que no vale la pena. (Sale.)

RIANI: (Entra.)¿Está ella aquí?

GIBRÁN: ¿Cómo estás, hermano?

RIANI: Bien. Quería saber sí… Dime la verdad.

GIBRÁN: Lo que sea que vayas a preguntarme de ella y yo… no es verdad. Ella es como una hermana para mí.

RIANI: Charlotte.

CHARLOTTE: Aquí querido, ya salgo. Querida Mary: Riani, el amigo de Khalil habla poco. No es guapo, pero escribe muy bien, casi tan bueno como Khalil. Me habla siempre en monosílabos. Nos vemos todos los días.

RIANI: ¿Qué quieres de mí?

CHARLOTTE: ¿Yo? Jugar. (Jueganyríen.Sebesanytocan.)

RIANI: Te casarás conmigo.

CHARLOTTE: Si tú quieres. ¿Pero podrás conmigo? Soy violenta.

RIANI: No más que yo. Serás mi esposa.

CHARLOTTE: Sí, pero te advierto… ¡Yo solo quiero jugar!

GIBRÁN: Querida Mary: Todo va tan lento en Nueva York. Luego de leer tus cartas todo me parece tan irremediablemente lento. Conferencias, visitas que me agotan, amigos hipócritas, los juegos imbéciles de Charlotte y Riani… tanta soledad…

NAIMY: 1916. Iera Guerra Mundial. Los Otomanos entran en la Guerra y para mantener a sus tropas, inducen a Siria y al Líbano a la hambruna y miseria. En menos de un año, más de 120,000 libaneses mueren de hambre en las calles. Intelectuales, escritores y disidentes cristianos y musulmanes, son ahorcados en la plaza de Beirut. Plagas, peste, desolación… El Líbano se muere.

GIBRÁN: Nuestro pueblo se muere. Hermanos sirios… ¿hasta cuándo vamos a tolerar este genocidio?

NAIMY: Gibrán, presidiendo la comunidad de intelectuales sirios, (Riani yNaimyjuntoaél.) comienza a levantar fondos para aliviar la hambruna. Pero los sirios en Estados Unidos se muestran apáticos y miedosos al problema.

GIBRÁN: Toda esta apatía de mi pueblo me hace odiar la vida. Y si no fuera por los gritos de hambre de los niños de mi país, les juro que no presidiría esta campaña ni por un minuto más. Si me dieran a escoger morir entre mi gente, o vivir en medio de esta cobarde comunidad siria… les juro que escogería la muerte.

NAIMY: Los turcos comienzan a condenar en ausencia a los disidentes. La cabeza de Khalil Gibrán, la de Riani, la mía, es puesta a precio.

RIANI: ¡Libertad para Siria!

GIBRÁN: ¡Libertad! ¡Nacionalismo ahora!

NAIMY: El ansiado alivio llegó y Turquía fue aplastada por los aliados.

RIANI: Pero la derrota de Siria fue solo un alivio efímero, y la libertad deseada del Líbano se hizo lejana.

NAIMY: No queda sino volver a la idea de conquistar occidente para hacer realidad el sueño de oriente.

GIBRÁN: (Músicamuysuaveyhermosa.) Querida Mary: En medio de esta extraña soledad, nacen en mi mente tantos nuevos proyectos… pero no nacerán si tú no estás aquí conmigo. Escribo. Te escribo. Ah, Mary… a veces te hablo, como si le hablara a mi corazón. Me pongo en tus manos. Un hombre solo puede darse a alguien cuando el amor es tan grande que el resultado de esa entrega sea la libertad total. Te amo con todo mi ser. Todo lo que yo soy rebosa de amor por ti. Ven a mi lado, angelito.

MARY: Adorado Khalil. Espíritu trascendente. Dame más de tus libros… si escribieras en inglés, Khalil, todo el mundo podría leerte. No es que

tu lengua no sea hermosa. Pero tú eres ya un escritor inmenso. Escribir en inglés hará que tu pensamiento caiga en muchos más corazones… espíritu sin tiempo, dame tu voz absoluta.

NAIMY: 1918. Khalil, con la ayuda de Mary Haskell, escribe en inglés y publica ElLoco , que será uno de los más importantes libros del renacer de la literatura árabe.

MARY: América te conoce, Khalil. Toda esa pasión, toda esa sensibilidad. ¿No es el producto de tu propia vida, Khalil? ¿No es tu imaginación una bendición para el hombre?

NAIMY: Y dijo Gibrán a sus discípulos. “La imaginación es arte. La imaginación es el verdadero conocimiento. La imaginación… es la realidad”.

(Aparece Micheline, sentada en una esquina,conunavenda.)

GIBRÁN: A la sombra del templo, vimos mi amigo y yo a un ciego sentado, solo. Y mi amigo me dijo:

NAIMY: “He aquí al hombre más sabio de mi país”.

GIBRÁN: Y nos acercamos a él. (Se acerca a Micheline.) Perdona mi pregunta: ¿pero desde cuándo eres ciego?

MICHELINE: Desde mi nacimiento.

GIBRÁN: ¿Y qué sendero de sabiduría sigues?

MICHELINE: Soy astrónomo. (GibrányNaimysemiransorprendidos.)Observo todos los soles, las lunas y las estrellas… de mi corazón.

GIBRÁN: Ah, Mary adorada… ¡La vida es una profecía llena de futuro, de dulces posibles y de infinitos!

CHARLOTTE: Querida Mary: Nos ahoga el éxito de Khalil. Elloco por aquí, Ellocopor allá. Locos hemos de terminar todos.

RIANI: ¿Verdadero talento, Khalil? Hace todo lo que hacen los arribistas, complacer a todos y a ninguno. Pasarse la mano con editores americanos y convertir su literatura, que ya de por sí es superficial, en puro comercio exótico.

CHARLOTTE: Riani y Khalil se pelean y ahora me aburren los dos. Todo esto fue un grave error. Me siento culpable de haberle hecho creer a Riani que me casaría con él. Es todo un mar de celos y de intrigas. Estos malditos árabes. Lo quiere todo o no quieren nada. ¿No te dije que eran muy jóvenes para nosotros? Te juro que antes de volver a salir con un árabe, prefiero un obrero bruto, pero rubio...Y

38 hasta yo misma quiero dejar de escribir. ¿Por qué me metí en esto? Sácame de aquí, Mary. Llévame contigo. Estoy acabada, acabada como mujer y como artista. Khalil te hará lo mismo. Lo sabes. Mary, ayúdame… ¡Mary, contéstame!

(Golpemusical.Nuevamúsicadesapasionada.)

MARY: Una de mis tantas visitas al estudio de Khalil en Nueva York. Siempre me espera en la comodidad de su religioso espacio. Es tan placentero estar aquí, sentirle cerca, verle trabajar, ayudarle a escribir.

GIBRÁN: Me devora una extraña sed de más allá. Debo dejar que mi mente viaje por el espacio de mis sueños. Elevarme en un intenso trance donde pierda toda noción de mismo y viajar… en un viaje astral sin fin y sin frontera… (CambiodeLuz.Khalilseacuestasobre loscojines.)

MARY: Dime poeta… ¿qué ves?

GIBRÁN: Escucho música. Lluvia, relámpagos. Mi cuerpo no está en mi cuerpo.

MARY: ¿Quién va contigo?

GIBRÁN: Tú, Mary. Tú siempre vas conmigo.

MARY: ¿Qué ves?

GIBRÁN: El rostro de ese hombre que me habla. Ese hombre que nace de mí mismo. Que dice cosas tan ciertas, que dice cosas que yo debería vivir. Me siento tan culpable de no escucharle. De no vivirle. Ese rostro… (Suenantruenosvigorosos,envueltosenvozymúsica.)

MARY: ¿Quién es?

GIBRÁN: (Comienzaallorar.) No sé… esos truenos, esa violenta centella, Mary… ¿los oyes?

MARY: ¿Es Jesús? (Seescuchalavozárabeinterrumpidaporelcentellear.)

GIBRÁN: (Llorandoensilencio.) Ah… ¡su voz es tan dulce! Oh, Mary, ¡si pudieras escucharlo! Su voz dulce en medio de los truenos, esta música… Oh, tu voz, tu voz es un trueno que arrebata, que consume… ah, Mary, este hondo trueno de mí mismo… ¡Truenos! ¡Benditos truenos! (Estruendo.)¡Cómo adoro estos truenos! (Serepitenlos truenosyKhalilextasiadolosescuchaensurugir.)¡Los truenos de mi alma, Mary! Son los truenos de mi alma…

MARY: ¿Quién es Khalil? ¿Es tu misma voz? Dímelo.

GIBRÁN: Es él, Mary… es… ¡¡¡el Profeta!!!!

(Truenogigante y lamúsicaquesedesvanece. Oscuro.)

Música.“UnaoraciónporKhalilGibrán”deTillmanyHoppe. Micheline,Naimy,Mary,sentadosmiranaKhalilencendiendo uncigarrillomientrasescribe.Almustafáenloaltodelatorre.

NAIMY: Ahí está Gibrán. Reencarnado en el cuerpo de un hombre que ama la determinación y el poder, luchando a muerte con el joven Gibrán, a quien él mismo enterró en el valle de los sueños.

MICHELINE: Pero para sorpresa del propio enterrador, Gibrán echó a un lado su mortaja, rodó la piedra que sellaba su sepulcro y se levantó de los muertos con la luz de una nueva verdad en sus ojos y el ámbar de una vieja fe en su corazón.

MARY: Esa noche, recostada en su cama tuve una espantosa pesadilla. Soñé que Khalil se me acercaba y con rostro enfurecido me decía…

GIBRÁN: “Esto ha ido demasiado lejos. Quiero tenerlo todo ahora, o mejor no tengo nada. Estoy harto de tus dudas. De esa “cuestión de clase” que late debajo de nuestra relación. ¿Por qué no te casaste conmigo cuando te lo pedí? Eres una cobarde.”

MARY: Dime, ¿fue sólo un sueño? Sé que nuestra relación es muy dura y poco amorosa para ti.

GIBRÁN: Yo no sé lo que hay en tu corazón.

MARY: El amor más grande, el más limpio. El que no necesita cuerpo, ni palabras. Yo sé que adoras las palabras…

GIBRÁN: Y los cuerpos, Mary… no tienes idea de lo que deseo que hagamos el amor. Es un hecho que no podemos negar ¡Y tú lo niegas todo el tiempo!

MARY: Yo… creo que un hombre que permite que una mujer sea su amante, es un cobarde. Creo que el cobarde eres tú, Khalil. No yo. Yo estoy dispuesta.

GIBRÁN: Mary… yo… ya no quiero casarme contigo. Tú misma dices que hay cosas brillantes a las que me enfrentaré. Bueno, pues ¡Inshalá! ¿Para qué voy a encerrarlas en el matrimonio?

MARY: Yo no creo que el matrimonio sea una…

GIBRÁN: Este nuevo libro, que tú me vas a ayudar a escribir, es el libro…

MARY: ¡Déjame decirte lo que siento!

GIBRÁN: Hablemos de otra cosa, hablemos de mi libro.

MARY: ¡Escúchame!

GIBRÁN: Mary, yo estoy absolutamente seguro de que tú me amas…

MARY: ¿Y no lo sabías antes de hoy?

GIBRÁN: Sí, pero de diferente manera.

MARY: Quiero que nos vean en público. Quiero caminar contigo por las calles, conocer a tus amigos… quiero sentir yo también la fama del amor del que tanto escribes.

GIBRÁN: Me acabas de llamar cobarde porque te ofrecí ser mi amante. Amor, matrimonio, sexo… ¡ahora te entiendo menos! ¿Qué quieres de mí?

MARY: ¡Ser tu esposa, Khalil! Ese sería el más grande honor que pueda sentir una mujer en este mundo. Tu esposa, Khalil. La mujer que te inspira, que te da la vida y la luz como una madre. ¡Yo merezco eso!

GIBRÁN: Mary, esta discusión me hace un daño inmenso. (Setocaelcorazón.)

MARY: Khalil adorado. Mi corazón y el tuyo reposan en tus manos.

GIBRÁN: Yo hubiera querido decir eso antes.

MARY: Siempre lo dijiste. Nuestro amor estuvo en mis manos y ahora yo te lo entrego a ti. Soy tuya, Khalil.

GIBRÁN: No Mary, es demasiado para mí. No. No… es mejor que sigamos… como siempre.

ALMUSTAFÁ: Cuando el amor te llame, síguelo.

GIBRÁN: ¡Pero sí, la amo!

MICHELINE: Y cuando sus alas te envuelvan, entrégate a él. Aunque la espada que oculte bajo sus alas pueda herirte.

NAIMY: Y cuando el amor te hable cree en él. Aunque su voz pueda arrasar tus sueños, como el huracán devasta las ciudades y los bosques. Cree en él.

GIBRÁN: (Muysuave.)Sí, la amo.

MARY: Si te causa más dolor que placer el verme, el estar conmigo, no quiero que me veas más.

GIBRÁN: (Luego de un largo silencio.) ¿Cómo, en el nombre de Alá, puedes decir eso? (La mira intensa.) ¿Qué es dolor, qué es placer? ¿Puedes separar uno de otro, Mary?… tú me das tanto placer que es doloroso, y tanto dolor que es placentero… y es por eso por lo que te amo.

ALMUSTAFÁ: Pero si preso de temor buscas tan sólo la paz del amor y el placer del amor… entonces será preferible que ocultes tu desnudez y escapes de la agitación del amor. Porque nunca será completa tu risa ni tu llanto.

MARY: ¿Cuántas mujeres has tenido, Khalil? Háblame de sexo. ¿Qué piensa del sexo, mi poeta?

GIBRÁN: Llegará el día en que el cuerpo no tendrá leyes en los asuntos del sexo. Sí, he tenido amantes, Mary. Pero solo tres y mucho antes de amarte. ¿Quieres que te hable de ellas?

MARY: (Muycercadeél.)No. Porque sé que son muchas más.

GIBRÁN: (Laabrazadespacioycongranternura.)Nunca miento.

MARY: Has mentido siempre, en todo.

GIBRÁN: No miento cuando digo que te adoro.

MARY: Yo tampoco miento.

Gibránleacariciaelrostro,labesadespacio.Sumanocorreporsu mejilla,porsupecho,porsumuslo,muydespacio,comosiellafuera música.Luegoellaseresiste,suavemente,casicondulzura,yseseparanmirándose.

MARY: Yo sí quiero contarte algo. He sido amada por varias mujeres. (ApareceCharlotte.)Creo que es parte del encuentro total con la vida que tanto adoras.

GIBRÁN: No creo que eso sea incorrecto… aunque no lo entienda.

MARY: (Seuneaellas.)Las mujeres de nuestra época han sido arrancadas del verdadero sentido del amor que se expresa… en la sexualidad. Por esa razón muchas prefieren encontrar una mujer que entienda sus emociones… (SeacariciatiernamenteconCharlotte.) en vez de un hombre que las condene. “Cuando el amor te llame, síguelo”. ¿No fue eso lo que me dijiste cuando nos conocimos? ¿Quieres saber que sentí con ellas?

GIBRÁN: Sí.

MARY: Fue una experiencia muy hermosa, gentil, iluminadora. Pero no era la final experiencia del amor que esperaba. Yo no encontraba reposo en sus caricias, ellas sí. Yo sólo encontraba… excitación. (Silenciolargo.SeacercaaKhalil.Tomasumanoylallevaasurostro.) Pero estar con Khalil… aún si no me acariciara… es reposar de amor y de belleza. (Como en un juego muy dulce.) ¿Quieres hacerme el amor, Khalil? ¿Te gusta mi cuerpo? Me dijiste una vez que estaba demasiado delgada, ahora ya ves. Te he complacido. (Pausa.Sevadesnudandotraslosvelosdelacama.) Es un cuerpo viejo y cansado. Ya no tiene las delicadezas del ayer… pero te desea, te desea tanto, Khalil.

Te desea como no ha deseado hombre o mujer alguno en toda su vida. Ven, Khalil. Ámame, no como un profeta, sino como un hombre. (Gibrán,luegodeunbrevesilencio,dejacaerunalágrima.)

ALMUSTAFÁ: Pero si amas y sientes el brotar de los deseos, déjalos que fluyan y que sean como el arroyuelo ruboroso que entona su canto en la noche, solo así conocerás el dolor de la excesiva ternura. Solo así serás herido por tu propio conocimiento del amor.

MARY: ¿Qué quieres de mí?

GIBRÁN: Necesito que me digas si estoy en el camino correcto, tú alimentas mi espíritu… tú eres mi discípula, mi admiradora, mi confidente. Tú eres mi público, Mary. Es a ti a quien me debo.

MARY: También pago tu renta, tu ropa, todos tus gastos los pago yo… todo lo que gano, dinero que llevo años guardando, ¿es mi dinero lo que nos une, Khalil?

GIBRÁN: No Mary, tú y yo estamos por encima de eso.

MARY: ¡Yo no estoy tan segura!

GIBRÁN: ¡Entonces dime qué demonios querías tú de mi al darme tanto dinero y yo sabré a qué atenerme! Dime la verdad para no

equivocarme. A veces decías que era un regalo, otras que era un préstamo, otras una compra, ¿qué significa “unión” para nosotros?

MARY: Al principio era un regalo, pero luego… (Duda.)era…

GIBRÁN: ¿Luego qué, Mary?

MARY: Sé que eres un hombre orgulloso. Sé lo que te fastidia que una mujer… depender de los otros…

GIBRÁN: ¡Mi talento no depende de los otros!

MARY: ¡No hablo de tu talento!

GIBRÁN: ¡Basta ya de esto!

MARY: ¡Aceptaría que me pagaras con tus cuadros!…

GIBRÁN: ¡Pagar! ¡Cómo quisiera pagarte cada centavo que me has dado en toda mi vida!

MARY: ¡Yo no quiero tu dinero!

GIBRÁN: Préstamo, regalo, compra… No puedo entender cómo puedes decir cosas opuestas al mismo tiempo y con la misma seriedad…

MARY: ¡Si dejaras de escucharte a ti mismo por un segundo!

GIBRÁN: ¡No sé nunca qué diablos es lo que quieres decir!

MARY: (Grita.) ¡Matrimonio! (Pausa.) Estoy loca de atar. ¡Me asombro de que podamos seguir siendo amigos! Eres un egoísta, un narciso desconsiderado…

GIBRÁN: Tú me has herido como nadie lo ha hecho en toda mi vida, Mary. (Pausa.)Lo siento, no quise decir eso. Yo te amo. Y eso es primero que cualquier cosa. ¿Qué debo hacer para que me creas?

MARY: Perdóname por traer el asunto del dinero. Vamos… Perdóname, por todo. Siento mucho haberte interrumpido tu trabajo. (Se abrazan.)

ALMUSTAFÁ: Nada da el amor que no sea él mismo, ni adquiere nada que no sea de sí mismo. El amor no posee nada ni quiere ser poseído. Porque el amor es suficiente para el amor.

GIBRÁN: El Profeta está hablando. Escribe lo que dice, Mary. (Maryescribedespacio.) Escúchalo… entiéndelo, háblalo para mí. Deja que el Profeta me abrace, Mary. Soy él en mi voz, en mi ser… (Abrazaa Khalilporlaespalda,conternura,yleacariciaelrostro.)Oh, Mary… no soy yo quien lo escribe… él es quien me escribe.

ALMUSTAFÁ: Y no llegues a creer que puedes dirigir el curso del amor, pues el amor, si te considera digno de él, será quien dirija tu camino. Porque el único anhelo del amor es el de colmarse a sí mismo…

GIBRÁN: Amada Mary. Escribe lo que dice, escúchalo con mi corazón…

GIBRÁN Y ALMUSTAFÁ: Y cuando ames no debes decir, 'Dios está en mi corazón', di mejor, 'Estoy en el corazón de Dios.' (Seescuchauntruenopoderoso.)

MARY: No te detengas Khalil, continúa… ¡es maravilloso!

GIBRÁN Y ALMUSTAFÁ: Nunca digas, “He encontrado la verdad”, sino más bien…

GIBRÁN: “He encontrado una verdad”. No digas...

ALMUSTAFÁ: “He hallado el camino del alma”. Di mejor…

GIBRÁN: “He encontrado al alma caminando por mi camino”.

GIBRÁN Y ALMUSTAFÁ: Porque el alma camina sobre todos los caminos.

ALMUSTAFÁ: Hombres sabios se han acercado a ustedes para darles de su sabiduría.

GIBRÁN Y ALMUSTAFÁ: Yo vine a tomar de esa sabiduría: Y he aquí que he hallado algo aún más grande… . Es la llama de tu espíritu que siempre toma más de sí mismo.

ALMUSTAFÁ: El velo que nubla tus ojos será rasgado por las manos que lo tejieron.

GIBRÁN: Y la arcilla que cubre tus oídos será arrancada por los dedos que la amasaron.

ALMUSTAFÁ: Y verás.

GIBRÁN: Y oirás.

ALMUSTAFÁ: Entonces no reprocharás haber sabido lo que es la ceguera, ni lamentarás haber estado sordo.

GIBRÁN: Pues en ese día conocerás los propósitos ocultos que existen en todas las cosas.

ALMUSTAFÁ: Y bendecirás la oscuridad al igual que la luz.

GIBRÁN Y ALMUSTAFÁ: Porque ambas son una.

GIBRÁN: No soy yo… es él, Mary… es él que habla por mí.

MARY: Y esta voz que hoy sale de tu alma, Khalil, será uno de los tesoros más grandes de toda la literatura escrita por el hombre. Y en

nuestros momentos de oscuridad, abriremos sus páginas y él nos llevará al cielo y a la tierra que habita en nuestra alma. Generación tras generación tu nombre será amado y venerado como un rayo que da vida, y los jóvenes buscarán en este libro toda la sabiduría que anhelan y estas palabras aún existirán cuando todos ya seamos polvo de estrellas… ElProfetaes el libro más amoroso que se haya escrito jamás.

GIBRÁN: (Muydespacioycongranternura.)Y yo no podría haberlo escrito sin ti, adorada Mary. (Almustafáabrazaybesatiernamentea Mary.)

(Oscurolentoconmúsica.)

NAIMY: 1923. El libro está terminado. Mary lo corrige incansablemente. Lo cuida celosa como un niño recién nacido. El editor presiona. Khalil enferma. El libro finalmente sale y el recibimiento es un murmullo que crece. En los primeros meses se vendieron tres ediciones. Khalil necesita aire para sus pulmones, paz para su pecho. Y se va de vacaciones, conmigo y otros escritores de nuestro grupo literario a un hermoso lago en las montañas. En un momento de soledad, Khalil da un furioso golpe con su bastón en el suelo …

GIBRÁN: Mischa… ¡soy una falsa alarma!

NAIMY: ¿Por qué dices eso?

GIBRÁN: ¡YO NO SOY EL PROFETA! (Silencio.) Yo no soy Almustafá ni he vivido a la altura de lo que es él. Y esto crea en mi un dolor hondo y terrible. Es… una espantosa contradicción. ¿Tiene un escritor que vivir a la altura de lo que escribe?

NAIMY: Nadie te ha pedido que seas tú ElProfeta .

GIBRÁN: La gente empieza a verme así. Gibrán: el profeta. Recibo cartas de gentes que me piden consejos, que me invaden con sus mezquinas desgracias, creyendo que yo puedo darles lo que necesitan para ser felices. Yo no puedo darles nada, yo soy solo un hombre…

NAIMY: No contestes, no atiendas a gente que…

GIBRÁN: Pero también soy Jubrán Khalil Jubrán, y debo vivir lo que escribo. Es una orden implícita de la letra, Naimy. Dicen los viejos

sufis que “uno es el lenguaje de su realidad”. Pero cuánto me duele esa enorme mentira de mí mismo que se titula ElProfeta .

NAIMY: No debes ser tan duro contigo mismo. No lo necesitas. Eres solo un hombre, un poeta, Khalil y tu libro siempre estará por encima de ti, existe solo, como si tú no lo hubieras escrito.

GIBRÁN: (Golpeasupecho.) Pero está aquí, viviendo conmigo, respirando conmigo, obligándome.

NAIMY: Pero ¿cómo podrías haber escrito El Profeta , sin haber vivido todas tus humanas experiencias de tristeza, amor y soledad? Tu libro despierta las mentes dormidas del mundo. Los escritores alertamos, somos la conciencia de nuestro tiempo …

GIBRÁN: Alertar, como si nuestra voz fuese una alarma… si es así, Mischa, entonces … (Bajalacabezaydandounbrevegolpedebastón ensuelo,sequedaensilencio.).

MARY: Mi tía ha muerto y su marido, quien siempre me quiso, me ha pedido que viva con él. Que le acompañe en su soledad. Me dará lo que necesito. Creo que aceptaré. Eso quiere decir que me iré lejos, que te veré poco, o casi nada tal vez.

GIBRÁN: ¿Por qué no te quedas un tiempo más conmigo?

MARY: Ya no me necesitas. Además, él no me lo permitiría. Es muy celoso y no quiere que le hable de ti.

GIBRÁN: ¿Disfrutas estar con él?

MARY: No más que contigo. Pero tú ya no me necesitas.

GIBRÁN: Sigue tu corazón.

MARY: (Sonríe.) . En mi corazón solo vives tú.

GIBRÁN: Nunca olvides… que eres la persona que más he amado en toda mi vida. (Seseparansintocarse.Gibránsequedasolounmomento,invadidoporlamúsica,cierralosojos.) ¿Almustafá? ¿Dónde estás? (Nadiecontesta,comienza acaminarhaciasucama,cansadoy lento.)

BARBARA YOUNG: Mi nombre es Barbara Young. Soy poeta. También escribo para el NewYorkTimes . He leído su libro y quiero conocerle. Usted es un elegido. Escuché de usted por primera vez en una lectura de El Profeta . Su libro cambió mi vida. Las lágrimas no me dejaban pensar en otra cosa que en usted. En su rostro, en sus ojos. Gibrán…

Khalil… Y pensé que todos deberíamos saber un poco más de la vida de este hombre que es un Dios…. (Gibránlacallaconunbesoenlos labios.)Ya no soy una jovencita. Tengo 45 años y una hija. Mi esposo me abandonó hace mucho tiempo. Si me vuelves a besar comenzaré a venerarte más que a Dios. (Gibránlavuelveabesar.)Puedo organizar lecturas para tus escritos, llevar tus asuntos… mira, una invitación de la Sociedad de Oriente. Te han nombrado junto a Ghandi como uno de los mejores representantes de la cultura Oriental en occidente. Puedo tomar tu dictado. ¡Soy mecanógrafa! También creo en la reencarnación, igual que tú. (Pausa.)El mundo está esperando por la continuación del El Profeta . Tú eres el Profeta, ante ti nos arrodillamos, (Lohace,éllaobligaalevantarsedemalagana.)… ante ti suspiramos por el manantial de tu sabiduría… tú eres el creador de una Nueva Era para el hombre.

GIBRÁN: (sacaunabotellaysedauntragohondo.)Jesús.

BARBARA: ¿Qué?

GIBRÁN: Siempre quise escribir un libro sobre Jesús. Pero si lo hago, ¿tendré que parecerme a él? ¿Me llamarás también un Mesías, un dios, tal vez?

BARBARA: Ya lo eres, Gibrán. No importa mucho lo que yo piense. Lo eres para el mundo. Has inventado un ánimo de la época, el “Gibranismo”. (Gibrándejaescaparunacarcajada.) Ahora te siguen, tienes discípulos, gente que se reúne a meditar en tus escritos… Yo soy tu discípula amada, adorado Maestro. Enséñame.

GIBRÁN: Querida Mary. (Maryseiluminalejosdeél.Barbarasesienta yescribe.) Anoche he tenido otro sueño sobre mi hermano Jesús. Va así. Una vez cada cien años, el Jesús de Nazaret se encuentra con el Jesús de los Cristianos en un jardín en las montañas del Líbano. Y después de hablar largo tiempo, el Jesús Nazareno le dice al Cristiano: Querido amigo, es una pena que nunca, NUNCA, nos podamos poder de acuerdo.

MARY: Querido Khalil: Escribe ese libro. Una vez me dijiste que luego de escribir tu libro sobre Jesús, ya podrías descansar en paz. Busca esa paz, Khalil. Diera lo que no tengo por estar a tu lado.

GIBRÁN: Estás a mi lado, Mary. (Tomaaire,sonríe,alegreyanimado.) He leído todo lo que existe sobre él. Ha caminado todos su caminos,

desde Siria hasta Palestina y pienso que Jesús es el más grande artista, el más inmenso poeta de toda la civilización.

MARY: Escribe, Khalil. A Jesús le agradará.

GIBRÁN: Yo no odio las religiones. Siempre he dicho que todas deberían reunirse en una, la religión del amor. Sin Dioses, sin ritos, sin iglesias, nada. Solo amor.

MARY: Sería hermoso, Khalil.

GIBRÁN: Por eso, llamarle Dios a Jesús es hacerlo tan pequeño… porque Dios no podría hacer la poesía que han hecho los hombres. Jesús sí, porque es hombre y, por lo tanto, es la más perfecta poesía. Setenta testimonios, de todos los que le conocieron, le odiaron y le amaron… Ah, Mary… será mi mejor libro.

MARY: Y dijo María Magdalena… “Te ruego que entres a mi casa”

GIBRÁN: Y Jesús contestó… “Tú tienes muchos amantes, en cambio yo soy el único que te ama. Los demás hombres se aman a sí mismos a tu lado, pero yo amo tu alma.”

MARY: (Conlágrimasenlosojos.)“Maestro, por favor… entra a mi casa. Descansa, tengo incienso precioso, lavaré tus pies…” Y el Maestro me miró con sus sonrisa de verdes campos y me dijo…

GIBRÁN: “Todos los hombres se aman a sí mismos a tu lado. Yo te amo, para salvarte”.

MARY: “Aquel día, aquella hora, el atardecer de sus ojos mató la bestia que vivía en mí. Y entonces me hice mujer. Me hice María, María Magdalena.”

BARBARA: (Comotomandoundictado,enlamáquinadeescribir.Impersonal.) Y entonces me hice mujer. Me hice María, María Magdalena… (Gibrán, enfurecido, le arranca el manuscrito.) ¿Qué hice ahora?

GIBRÁN: (HaciaMary,leextiende.) Querida Mary. No importa cuán lejos estés, mis libros no viven si no pones sobre ellos la luz de tu amor.

MARY: (Tomaellibro,loacaricia.) “Jesús, el hijo del hombre”. Es paz, Khalil. Es un libro de paz. (LobesaylodevuelveaGibrán,sonríen.)

GIBRÁN: (EntregandoellibroaBarbara.) Por favor… incluye estas correcciones en el nuevo manuscrito.

BARBARA: (Barbaralasobserva.)Khalil, esta no es tu letra… ¿quién hizo estas correcciones?

GIBRÁN: Alguien que puede hacerlas.

BARBARA: No estoy de acuerdo con ellas. Yo pude haberte sugerido algunas correcciones mucho más…

GIBRÁN: Tú dijiste que eras poeta… ¿No es cierto?

BARBARA: Bueno…

GIBRÁN: Lo dijiste. Por eso, si tú corriges mi libro, entonces sería un libro escrito por dos poetas. Tú y yo. El libro llevaría tu nombre y el mío juntos. ¿No es así?

BARBARA: ¡No podrías darme honor más grande!

GIBRÁN: ¡Pues no voy a dártelo! Por eso las correcciones de ese idioma del demonio que es el inglés, no las harás tú.

BARBARA: Pues entonces, no debes hacerle correcciones de ninguna clase. Es mejor que se quede con las palabras como las has dictado tú, Maestro. Este libro es sagrado. Nadie debe añadirle ni quitarle. Es un nuevo Evangelio, el Evangelio según Khalil Gibrán.

GIBRÁN: (Gruñendo,fumadesesperadoybebe.) Yo no he escrito ningún Evangelio. Es poesía. POESÍA, maldición. ¡Por Alá, YA BASTA de esto, Barbara!

BARBARA: ¡Tú Jesús es un nuevo milagro!

GIBRÁN: ¡No! Es un hombre. Un hombre como yo. Come, bebe, hace el amor y baila como yo. ¡Sí, baila, y cómo baila; le encantan las fiestas, ¡las lindas mujeres y el buen arak como a mí! Claro que sí. Estoy harto y hastiado de ese debilucho afeminado que quieren presentarnos esos evangelios cristianos. No, no, ¡no! Jesús es fuerza, poder, voluntad. Él es… Ah, el más grande socialista, el más completo líder, el más sensible poeta, el más…

BARBARA: (Comosiguiéndole.)El más humilde, el más…

GIBRÁN: ¡NO! Detesto la humildad, y aborrezco aún más la humildad de ese farsante que llaman Cristo. ¡Humildad hipócrita que trata de esconder la inmensidad del más grande revolucionario que pisado esta tierra!

(Almustafá,quetraeunlargopañosobresucabeza,lohaestadomirandodecerca.DeungirodecorajeGibrándalavueltayseencuentracaraacaraconél,quelesonríe.)

Sabía que vendrías. (Sonríe.) Vamos, confírmame todo lo que siento, dime que no es solo un delirio de mi joven espíritu rebelde. ¡Que no naciste de virgen alguna, que no moriste por nuestra salvación y que tampoco resucitaste de entre los muertos, ni ningún mito de esos con que los cristianos han tratado de dominarnos por siglos! Dime que eres un hombre como yo, que enseñaste la reencarnación, que caminaste y viviste en la India, en Egipto, que has sido extranjero, loco, buen amante de las mujeres que te amaron y alegre, alegre como yo ahora. ¡Vamos, yo también soy un hombre, justifícame!

ALMUSTAFÁ: Estoy alegre, hermano querido y te invito a mi fiesta. (AlmustafáyGibrán,sonríen,ríenalegreselunofrentealotro.Enmedio desurisa,Gibránbuscaunabotellaysedaotrotragohondoyrecibe ungolpeenelpechoquelohacesentarse.)

BARBARA: Khalil, Khalil, Maestro…

GIBRÁN: Déjame solo, vete.

BARBARA: Estás enfermo, no puedo dejarte así.

GIBRÁN: Me muero, y quiero hacerlo solo, sin público. Ya basta del público… (Iracundo.) ¡Ya basta de este personaje que se llama Khalil Gibrán! Dime, Jesús, ¡dime cuándo podré ser yo mismo!

BARBARA: No voy a dejarte morir, mi amor.

GIBRÁN: Maldita mujer terca. Si algo he respetado de la mujer es la inmensa capacidad que tiene para no convertirse en una estúpida en los asuntos del amor. Pero en todos tus años, la vida no te ha enseñado nada. ¡Fuera! Y no regreses hasta que te llame.

BARBARA: Khalil… (Sale,angustiada,casienllanto.)

Todoslosdemáspersonajessehanido.Gibránsolo,ensucuarto, miraalcielo.Sedaunlargotragodelamismabotella.Nodicenada. Sevisteconsumantoblanco.Músicahermosadepianoodecello. Unajovencita,Gertrude,tímidayrecogida,seacercadespacio.Trae unpequeñolibronegroensusmanos.Sedetieneenmediodelescenario.

GERTRUDE: Maestro.

GIBRÁN: (Sinmirarla,encendiendouncigarrillo.) ¿Fue tu dulce voz la que llamó esta mañana por teléfono?

GERTRUDE: Estoy tan agradecida de que me permitiera venir a verle. A pesar de lo reservado que es usted, sé que no recibe más visitas…. Maestro, mi gratitud y mi amor.

GIBRÁN: ¿Por qué?

GERTRUDE: Usted no tiene idea del amoroso golpe que su libro le ha dado a mi alma. El Profeta es el mejor instrumento para poner en práctica mis ideales y…

GIBRÁN: Acércate. (Ellaobedece.Ahoramirándolaconintensidad.) ¿A qué te dedicas?

GERTRUDE: Soy escritora, Maestro.

GIBRÁN: Te felicito.

GERTRUDE: El Profeta es el mejor amigo que ha podido conseguir mi convicción y mi aspiración.

GIBRÁN: Acércate más. (Suave,delicado.)¿A qué aspiras?

GERTRUDE. Aspiro a atrapar, aunque sea una pequeña parte del milagro que hace que alguien pueda escribir como lo hace usted, Maestro.

GIBRÁN: No hay ningún milagro. Sólo amar. Déjame verte. (Semiran conintensidad.Muydespacio.)Si ElProfetale habló a tu alma, y tu alma contestó con el asombro del recién nacido, es porque estás ya preparada para sus misterios. El primer misterio es la entrega a su

verdad. La absoluta libertad de tus emociones y de tus… pensamientos… (Sedetiene.Unligerodolorenelpechoyluegounasonrisa.) Estoy agotado. Me gustaría que vinieras mañana. ¿Vendrás?

GERTRUDE: Ya es mañana para mí, Maestro. (Cambiodeluz.Música.)

GIBRÁN: ¿Te parezco viejo?

GERTRUDE: No. En su caso, Maestro, la vejez es la razón de su sabiduría.

GIBRÁN: Medito en afeitarme el bigote. ¿Te gustaría verme sin bigote? Me vería más joven.

GERTRUDE: Como se sienta usted mejor, Maestro. (Gibrán le ofrece uncigarrilloellaloaceptayfumanlosdos.Semiranunratosindecirsenada.)

GERTRUDE: ¿Sufre usted mucho? Su rostro es el espejo de una inmensa soledad.

GIBRÁN: ¿Cuántos años tienes, niña?

GERTRUDE: 20, Maestro.

GIBRÁN: Si no fuera por la soledad, querida escritora, yo no sería quien soy ni tú tampoco. De veras. Si no fuera por esta soledad que ahora tengo, al oír tu voz llegaría a creer que era mi voz la que hablaba; al ver tu rostro, hubiera creído que era el mío reflejado. Ah, la soledad es el remanso de mi aflicción, querida. Mi soledad, es mi mejor gurú. Sí. ¿Has visto esos ciervos heridos que se encierran en la cuevas? Se encierran para curarse, o morirse. Así es mi soledad.

GERTRUDE: ¿Quién pudo haberle herido tanto, Maestro?

GIBRÁN: Ja… (Sonríe.)¡Yo mismo!

GERTRUDE: Maestro. (Selevantasinhablarle,seacercaysinélsospecharlo le da un profundo abrazo, amoroso, tierno. Gibrán no sabe quéhacer.) Niña… (Ellasesepara.) De tu corazón sensible brota la alegría de la humanidad en la que aún creo. Tu abrazo es demasiada luz para este ciego y loco corazón.

GERTRUDE: Maestro amado. Usted es la perfección humana.

GIBRÁN: Por favor… déjame solo. (Cuandoellavaamarcharse.) Pero volverás mañana.

GERTRUDE: Ya es mañana para mí, Maestro.

(Música.CambiodeLuz.)

BARBARA: ¿Estás listo para irnos?

GIBRÁN: Ya no voy.

BARBARA: Pero ya confirmaste.

GIBRÁN: Ve tú, agradece lo que sea en mi nombre y di que me siento mal.

BARBARA: ¿Y por qué no vas?

GIBRÁN: Tengo visita.

BARBARA: ¿De noche? Nunca te hago citas en la noche.

GIBRÁN: No tengo que darte explicaciones, vete. (Cuandovaasalirllega Gertrude. Barbara la mira celosa.) Pasa, querida. (Barbarasequeda unmomentoparamirar.Gibrándeunamiradalahacesalir.)

GERTRUDE: ¿Interrumpo?

GIBRÁN: No, es solo mi majadera secretaria. Te ves muy hermosa, querida.

GERTRUDE: Y usted parece un santo con su elegante mantón.

GIBRÁN: Una vieja costumbre de mi Líbano. El traje blanco, eterno símbolo de pureza y de virginidad.

GERTRUDE: ¿De virginidad?

GIBRÁN: Del alma y del cuerpo. (Hipnotizándola. Mientras enciende algunasvelas.) No hay secreto más conmovedor ni más hermoso en el misterio de la vida que ese vínculo que convierte el silencio de un espíritu virgen, en un conocimiento perdurable… Ese conocimiento nos hace olvidarnos del pasado y enciende en nuestro corazón una esperanza dulce y arrolladora, que nos desnuda hacia el futuro que nos espera.

GERTRUDE: Hermoso, Maestro.

GIBRÁN: ¿Eres virgen?

GERTRUDE: (Luegodeunapausa.Sonríe.)¿Por qué quiere saber?

GIBRÁN: ¿Qué piensas sobre el sexo, querida colega?

GERTRUDE: Creo que es la expresión más pura y hermosa de nuestra alma enamorada.

GIBRÁN: Los seres más sexuados del planeta somos los escritores, los creadores, los artistas. Y siempre ha sido así… (Seacercayleacaricia elrostro.Ellalosiguemirandoconamorosacuriosidad.) ¿Sabes por qué?

GERTRUDE: No.

GIBRÁN: Porque el sexo siempre busca la hermosura, por eso siempre su búsqueda es recatada, delicada y virgen. Y cuando nos arrebata el alma, como un trueno, es como si perdiéramos la virginidad por primera vez… ese deseo, es un trueno de energía nueva que... (Labesa muytiernoenloslabios..)

GERTRUDE: (Extrañada.)¿Qué le da el sexo al amor?

GIBRÁN: ¡Libertad! Entrégate a esa libertad… déjate ir en el océano del amor que… (Gibránlabesaenelcuello,mientrassumanocorrepor susmuslosysuscaderas.)... nos da vida y eternidad…

GERTRUDE: (Se deja ir un poco, pero cuando la caricia se torna de tiernaalujuriosa,seseparadeélconviolencia,aloqueél,másviolentoyposeídoporeldeseo,tiradelamanodeellaquehuye,obligándolaagolpearloconlaotraenplenorostro.)¡Ya…! (Ellasesepara deél,arreglándoseelvestido.)

GIBRÁN: (Élseponedepiecondificultad,agarrándosesupecho,tosey semarea.) Olvida esto, perdóname. Regresa mañana, hoy me siento muy mal.

GERTRUDE: No hay mañana para mí, Maestro.

GIBRÁN: (Sinprestarlemuchaatención.)Cierra la puerta al salir.

GERTRUDE: Usted escribió una vez… “Si el amor es solo la cama de la sensualidad, ese amor está destinado al suicidio”.

GIBRÁN: Ah… mi obra, mi obra, tantas cosas es mi obra que yo no soy ni en sueños. Vamos, ¡esta es mi vida! No tengo más excusa que yo mismo… lo siento si te ofendí. Bah, de todas maneras, ya eres una mujer y eres hermosa y yo soy un hombre y estoy solo… ¿no entiendes?

Tengo deseos, igual que tú. (Parasí.)¿De qué diablos estamos hablando aquí?

GERTRUDE: Conocerle a usted fue… una piedra preciosa que me regaló la vida. Pero ahora esa piedra se hizo polvo. ¡Dios, qué decepción! El mundo se abre bajo mi pies. Cuando le conocí pensé que había descubierto al hombre perfecto, a ese hombre cuya belleza de espíritu, cuya alma brillante, podría separarse del común de los hombres y ser agua para espíritus sedientos como el mío. Pero no… usted pertenece a ese común horrible de los hombres sensuales, de los engañadores hipócritas que predican lo que no viven. Sí, era obvio su espectáculo. Las velas, el incienso, la música, las palabras dulces y profundas… y todo para esto. Ah, si así de bajo cae lo que más admiré de la vida… le juro que ya no me interesa tenerla. (Vaasalir.)

GIBRÁN: (Profundamente conmovido. Hondo, verdadero.) Espera… (Se cae de rodillas al suelo.) Por favor, no pierdas tu fe en la vida, porque entonces la mía tampoco valdría nada. Te suplico, de rodillas… ante ti antes que a nadie. Perdóname. No juzgues la vida por la ligereza de una de sus criaturas, aún si esa criatura se llamase Khalil Gibrán.

GERTRUDE: Mi corazón está hecho pedazos, Maestro.

GIBRÁN: Y el mío, ¿qué crees? ¿Qué más podría decirte? (Pausa.)Solo preguntarte, colega querida, si… ¿caminarías el resto de mi vida a mi lado?

GERTRUDE: ¿Qué quiere decir?

GIBRÁN: Me gustaría que tu inteligencia y tu candor me acompañaran todos los días. Que caminaras de mi brazo hasta que me llegue la hora de partir.

GERTRUDE: ¿Como su esposa?

GIBRÁN: Como la otra parte de mi alma, sí.

GERTRUDE: (Sonríe.)Maestro…

GIBRÁN: ¿Vendrás mañana?

GERTRUDE: Ya es mañana para mi… Khalil.

(Oscurobreve.Khalilsequedasolo y se recuesta en los cojines. Un tragohondodeArak.Searropaen mantónrojo.Músicamuysuavey unaluzmuypequeñasobreél.)

GIBRÁN: Me detuve a las puertas de la Ciudad Dorada con mi cuerpo que es la caja sagrada de mi espíritu. En la puerta de la ciudad traté de separarme del cuerpo porque allí solo podía entrarse en espíritu. Pero me di cuenta de que, si lo hacía, estaría separando mi corazón de la verdad. Entonces entré, con mi cuerpo y mi espíritu hechos uno. La flor y su fragancia son una. Si cerramos los ojos, percibiríamos las cosas en lo más profundo de nuestro ser. Y veríamos el

mundo, el físico y el etéreo, en toda la totalidad que te posee. Si cierro los ojos y abro el corazón a toda su percepción interior, descubriré el principio y el fin de toda existencia; ese principio que siempre se convierte en final, y ese final, que siempre, siempre… es un principio. (Pocoapococierralosojosydaunaúltimaexhalación. Almustafádetrásdeél.Elvuelveaabrirlosojos.) ¿Ya es la hora de partir?

ALMUSTAFÁ: Sí, nos esperan en los montes, bajo los cedros, con una orquesta de truenos y alegrías. (Gibránsonríe.Selevantaayudadopor Almustafáysalenalaexplanada.EntranNaimy,GertrudeyBarbara.)

NAIMY: 10 de abril de 1931, a las 11: 00 de la noche, Khalil Gibrán muere de cirrosis hepática y tuberculosis.

GERTRUDE: Muere dejando sola a mucha gente. (Llora.)

NAIMY: ¿Y por qué dejas tanta confusión sobre tu vida?

GERTRUDE: Demasiado reservado para que nadie supiera que estaba sometido a los dioses del dolor.

MARY: (Encontrandolacajadecartasenlahabitación.) Estas son nuestras cartas. Las mías y las de él.

BARBARA: Sra. Haskell. Usted y yo hemos sido las personas más cercanas al Maestro.

MARY: ¿Usted y yo? ¿Y quién es usted?

BARBARA: Barbara Young. Fui yo quien cerró sus ojos, fui yo quien lo cuidó los últimos años de su vida. (Gertrudeescuchaesoysealeja despacio.) El Maestro no confió en nadie más que en mí. Creo que debemos quemarlas. Yo creo que son demasiado personales. Pueden ser malinterpretadas…

MARY: ¿Mal interpretadas por quién?

BARBARA: Por la gente, ¿no cree? El Maestro no hubiera querido… ya sabe lo reservado que era para sus asuntos. Hay en ellas nombres y

situaciones, que no están a su altura. Quémelas, Mary. Se lo suplico. Son demasiado… humanas.

MARY: Humanas.

BARBARA: Tiene que ser objetiva, Mary. Estas cartas revelan a un hombre. Y Gibrán era mucho más que eso. Gibrán era un Dios. (Pausa.) Dentro de poco, voy a publicar una biografía del Maestro. Y quisiera su ayuda.

MARY: ¿Una biografía? ¿Usted?

BARBARA: Quisiera que me contara algunos detalles de su vida que yo…

MARY: ¿No fue usted la que cerró sus ojos, la que le cuidó? ¿No es usted la que quiere quemar sus cartas?

BARBARA: Mary, yo…

MARY: Usted no conoce los horrores y las injusticias que se han cometido contra los grandes poetas, cuando se queman aquellas cartas y documentos de su vida, que no parecen convenientes a la imagen que hemos hecho de ellos. ¿Pero no es aquí donde los conocemos de verdad? En esta biografía fragmentada y pequeña de una carta, en la que nos narra un sueño, o nos regala un te amo… (Pausa.) Es terrible tener que decidir cómo queremos que un hombre tan inmenso sea recordado. Y es aún más terrible que conozcamos a un hombre por lo que gente como usted pueda decir de él. Estas cartas no se queman. Ni éstas, ni ninguna.

BARBARA: Pero él dio órdenes estrictas…

MARY: Y si usted tiene problemas con eso, lea bien su testamento. Es a mí a quien deja todos sus documentos y sus manuscritos. A mí, que no cerré sus ojos al morir… ¡pero abrí su corazón a la vida!

(Barbarasaleofendida.)

NAIMY: 1939. Dos años después de la muerte de Gibrán, soy acusado por Ameen Riani de inventar una biografía, de relatar conversaciones que nunca ocurrieron, presentando un hombre dividido entre su realidad y su imagen. Una biografía donde hablaba de su alcoholismo y de sus mujeres. La peor acusación que se me hizo fue la de escribir una biografía de mi hermano para ganar fama o porque estaba celoso de su éxito. Yo, que fui su mejor amigo. Yo, que fui de los hombres que más le conoció, ahora se me condena por recordarlo como lo viví.

¿Por qué te persigue esta hipocresía hasta después de tu muerte, Khalil?

GERTRUDE. 1948. Barbara publica un libro en el que llama a Gibrán, “hombre perfecto”, “Dios”, “profeta”, “maestro iluminado”, “ángel”… Ja. La mayoría de las citas de su libro las plagió de las cartas que Gibrán escribió a Mary, diciendo que Gibrán se las había escrito a ella.

BARBARA: ¡No es verdad! Yo solo traté de…

GERTRUDE: Incluso se atrevió a terminar el texto incompleto de Khalil, ElJardíndelProfeta, incluyendo segmentos y frases que no eran de la inspiración de Gibrán.

BARBARA: ¡Lo hice porque lo amaba!

GERTRUDE: ¿Por qué te persigue esta mezquindad hasta después de tu muerte, Khalil?

NAIMY: No hay mejor obra para un autor, que la constante lucha consigo mismo.

MARY: Un poeta es también su contradicción, su angustia, su placer, sus amores. Porque en ellas está la grandeza de lo humano. Dijiste una vez, Khalil…

GIBRÁN: Si he de conocer tus días de sol, tu arcoíris, tus claros cielos… ¿por qué no conocer también tus oscuridades, tus truenos y tus tormentas…? ¡Y cómo adoro tus truenos y tus tormentas!

(Truenoslejanosconhermosamúsica.)

MARY: Tal vez estés mirando desde ese mar de almas que nos ven desde la otra orilla… y yo aquí, llorando de alegría sobre tus cartas, porque siento el perfume de tu risa bañando mi alma.

GIBRÁN: ¡Los truenos de mi alma, Mary! (Ríeagradecido.)

MARY: ¿Qué importa que sepamos todo ahora? Hijo del hombre. ¿No es esta la mejor manera de amarte más?

(Elbarcosealeja. Mary,Naimy, Gertrude,Barbara máslejos, ledespiden.)

ALMUSTAFÁ: Y así el barco inició la marcha hacia Oriente. Y un clamor salió de todo el pueblo como si se tratase de un solo corazón, y fue elevándose hacia la oscuridad y fue llevado sobre el mar como un gran trompetazo. Sólo Almitra guardó silencio, contemplando el barco hasta que desapareció entre la niebla.

(Naimy,Barbara,Gertrude,salendeescena.Marysola,abrazadaasus cartasyllorandoenhermosarisa.)

Y cuando el pueblo entero se dispersó, aún siguió sola sobre el muelle, recordando esta frase en su corazón:

GIBRÁN: Un solo instante, un momento de reposo sobre el aire, y otra mujer me concebirá.

Lamúsicaesalmaentregada. Oscuro.

La Caleta, San Juan y Madrid. Diciembre 2000-enero 2001 2024

GIBRÁNDE RAMOS-PEREA: LAS ORDALÍAS DE UN ESCRITORi

Universidad de Kansas.

Una nueva pieza del dramaturgo puertorriqueño Roberto RamosPerea, escrita el año pasado (2000-2001), incorpora las inquietudes del autor sobre uno de los escritores más conocidos y leídos del siglo XX, es decir, Kahlil Gibrán. La pieza se titula Gibrán:laordalíade“ElProfeta”.

Funciona no sólo como biografía del escritor notable sino también como testimonio al valor permanente de sus escritos. Gibrán es conocido como artista y filósofo, inspiración del movimiento “Nueva Era,” defensor de los ideales humanos y apologista del mundo árabe. ii

Que yo sepa, ésta es una obra única; entre los pocos libros que existen sobre Gibrán,iii no he podido encontrar ninguna referencia a otra pieza dramática sobre él ni en lenguas europeas ni en árabe.iv Además de enfocar la vida y obra del autor libanés, la pieza expresa las inquietudes de Ramos-Perea sobre el proceso creador. Por tratarse de una obra histórica, propongo valerme de la perspectiva expuesta por Herbert Lindenberger en su libro, Historical Drama:TheRelationofLiteratureandReality .

En su estudio Lindenberger observa que el héroe pasa por varias etapas durante varios siglos. Él mismo cita a Northrop Frye, cuyas teorías proponen el deterioro progresivo del héroe como vehículo para examinar la historia de formas ficcionales de las literaturas occidentales desde la Edad Media (65). Lindenberger intenta glosar la teoría de Frye, sugiriendo el principio de que los héroes tienden a disminuirse no sólo dentro de la tradición literaria en general, sino también en un género, en un periodo, en los escritos de un autor particular, y en efecto, a lo largo de un solo texto (65).v Si partimos de la premisa de que Gibrán funciona como una figura mítica, casi divina, resulta al final del texto se presenta como un ser incierto y confuso, muy alejado de las glorias que sus admiradores lo atribuyen. Lo

valioso es la examinación de sus atributos, tanto los mítico-heróicos como los humanos, para determinar lo que vale una vida. Como dice su amiga Mary Haskell al comienzo:

Nuestro amor sería incapaz de sujetarte, pero antes de que nos abandones, te suplicamos que nos cuentes algo de tu verdad. Y esa verdad tuya será transmitida a nuestros hijos, y éstos harán lo mismo con los suyos para que tu verdad nunca fenezca. Te pedimos que nos descubras lo que existe dentro de nosotros, y nos hables de lo que hay entre el nacimiento y la muerte (3).

¿Quién es Gibrán? Llamado “El Profeta,” autor de poesías y libros, entre ellos El Profeta, Gibrán (1883-1931) ha sido una inspiración para muchos durante el siglo XX. La cifra de sus libros vendidos pasó mucho más de un millón.vi Casi cíclicamente, llega a ser el autor predilecto de los jóvenes y para los que buscan una inspiración trascendental. ¿Quién no leyó a Gibrán durante su juventud? Hay generaciones enteras del mundo occidental y del medio-oriente que se han empapado en los escritos sentimentales y penetrantes de sus libros poéticos y filosóficos. Ramos-Perea confiesa su admiración por el poeta en la cita siguiente:

Yo había leído El Profeta quizá a los 14 o 15 años, obviamente sin comprender su trascendencia y mucho menos interesarme en quién era el tal Gibrán. Sin embargo, es un libro al que uno acude siempre. Gibrán ha sido vilipendiado por la intelectualidad “seria,” acusado de superficia l y vago. (¡Como si la literatura tuviera la obligación de ser grave y concreta!)…. La juventud latinoamericana le debe mucho a Kahlil Gibrán. Incluso puedo asegurarte que se leyó en mi época mucho más que Marx y Lenin. Y sus verso s se recitaron mucho más que los manuales del Che. Yo me enamoré con Lennon y Gibrán. Y visitarlo es una hermosa manera de volverlo a conocer.vii

Gibrán Khalil Gibrán (o Jubran Khalil Jubran, conocido después simplemente como Kahlil Gibrán) nació en El Bisharri, un pueblo montañoso de El Líbano en 1883, hijo de un padre recaudador de impuestos, y su esposa Kamileh, una mujer religiosa, cristiana maronita, que inspiró a su hijo con su fervor religioso.viii Un niño frágil y delicado, quedó marcado para siempre por la vida pobre pero agradable de sus primeros años, así como por

el paisaje y ambiente de su pueblo y región. Cuando acusaron al padre de fraude, la familia quedó arruinada, y la madre emigró con los hijos a una zona miserable de Boston en Estados Unidos. A los pocos años, dos hermanos y la madre misma murieron de malnutrición y enfermedades, víctimas de una pobreza aplastante. A los 15 años se le descubrió al joven Kahlil su enorme talento artístico y se comenzaron a exhibir sus pinturas. Llegó a ser, en los años siguientes, no sólo un pintor reconocido, sino también el autor de varios libros, incluyendo dos obras que alcanzaron fama internacional: El Profeta (1923) y Jesús,elhijodelhombre(1928).ix

Conocía a todas las figuras literarias y artísticas de su época en Nueva York y en París (que incluían a José Clemente Orozcox y Gabriela Mistral) y pintaba a muchos. Desde su taller (se llamaba TheHermitage) en la Calle Diez de Nueva York, mantenía una vida social muy activa. Una figura diminutiva (medía sólo un metro sesenta), seguía trabajando a pesar de sus debilidades físicas, exacerbadas por una caída en su juventud y una inclinación seria por el alcohol.xi

A finales de su vida, en condiciones pésimas de salud, la famosa Gertrude Stein viene a quedarse como compañera hasta su muerte.xii Muere el 10 de abril de 1931 (a la edad de sólo 48 años), y después de varias ceremonias en Nueva York y Boston, llevan su cuerpo a El Líbano donde está enterrado en el monasterio Mar Sarkis. Estos elementos escuetos de su biografía, desafortunadamente, no dan una buena indicación de sus años de sufrimiento y privación por razones económicas y físicas, ni tampoco los apogeos de su vida creadora como pintor, poeta, y figura exaltada dentro del mundo oriental (árabe) igual que en el occidental.

Esta pieza de Ramos-Perea, Gibrán,no es una obra aristotélica en el sentido convencional; es más bien una obra poética que refleja la vida y la humanidad de este hombre excepcional. Arranca de sus experiencias tempranas y abarca los elementos más importantes de su vida. Hasta incluye un comentario sobre los conflictos entre sus amigos después de su muerte.

Lo que mantiene la tensión dramática a lo largo de la obra es la dicotomía entre la inspiración poética y humana de Gibrán que lo eleva al nivel de un profeta (casi un dios para algunos), y las vicisitudes de su propia vida, lo que Ramos-Perea llama su “ordalía.” Este conflicto se manifiesta en todos los aspectos fundamentales de la obra – en sus relaciones humanas, su vida sexual y su compromiso político. Al Gibrán histórico, igual que el Gibrán creado por Ramos-Perea, le molestaba mucho la discrepancia entre sus escritos y su propia vida. Al comienzo del texto, Gibrán grita: “¡Soyunafalsa alarma!” (3) para señalar sus inquietudes sobre la función que se le atribuye.

Casi al final de la obra llega a un punto culminante cuando sus incertidumbres lo dejan aplastado. Dice: “Ah…miobra,miobra,tantascosas esmiobraqueyonosoyniensueños.Vamos,¡estaesmivida!Notengomás excusaqueyomismo…” (40). Es esta paradoja lo que le da vida dramática a esta obra, la tensión que existe entre las normas actuales y los ideales que lleva en el alma. Dice Gibrán:“¡YONOSOYELPROFETA!…Yestocreaen míundolorhondoyterrible. Es…unaespantosacontradicción.¿Tieneun escritorqueviviralaalturadeloqueescribe?” (31). En una carta personal, Ramos-Perea me explicó sus propias dudas y ambigüedades:

Pero pienso que son precisamente esas cosas las que hacen que un pensamiento sea profundo. Vivir esa contradicción, que al fin y al cabo todo estamos hechos de ellas. No hay cosa más dramática que la contradicción. Y que la vida de uno como escritor sea to talmente opuesta a lo que uno escribe, es un indicio de que aún existen maravillas desconcertantes en el corazón humano. Que estamos hechos para confundirnos y entendernos a un mismo tiempo y que nunca habrá en la escena nada más poderoso que ese camino de l autoconocimiento. xiii

Esta es una obra para seis actores, pero los seis representan varios personajes. Dos actores tienen funciones únicas: Gibrán y Mary Haskell. Los otros cuatro son duplicados o incluso triplicados, así cumpliendo con la necesidad de incluir personajes imprescindibles en la vida de Gibrán sin aumentar innecesariamente los costos de producción. Además de Mary Haskell, la mecenas de Gibrán durante muchos años de su vida, se incluyen Charlotte Teller y Micheline (Emile Michel), dos de sus amantes, Barbara Young, su secretaria, y Gertrude Stein, que entra al final de su vida como compañera. Por el lado masculino se encuentran Mikhiel Naimy y Ameen Riani, dos amigos sirios y Almustafá, el protagonista del libro El Profeta de Gibrán, una figura inventada que abarca muchas de las características esenciales de Gibrán mismo. Los demás son dos Obispos y La Diosa del Fuego.xiv

La pieza está dividida en dos partes, sin título ni apelación (no son ni actos ni escenas). Es un compendio de historia, biografía, formas epistolares, citas directas de textos de Gibrán (marcadas con comillas), y lo más notable, los espíritus inventivos de los dos autores. Ramos-Perea se vale de una serie de técnicas para elaborar los aspectos dramáticos del texto. Con

la incorporación de música de la época, con bailes, y efectos acústicos (en particular, los truenos) y luminotécnicos especiales, logra resaltar momentos dramáticos en la acción. Lo que capta nuestra atención es la destreza de Ramos-Perea de entretejer los varios enfoques de la pieza: la biografía de Gibrán, sus inspiraciones, sus motivaciones, sus amores y sus aventuras sexuales, su filosofía, su compromiso político y su nostalgia permanente por El Líbano.

Un tema central y un enfoque esencial de la pieza es el amor – el amor físico (eros), el amor fraternal (filios), y el amor espiritual (agape). La primera parte enfoca la complicada relación entre Gibrán y Mary Haskell, su mecenas en un sentido estético y fiscal. Cuando Mary le dice repetidamente “te pagaré,” respalda su apoyo material al mismo tiempo que los dos se adoran mutuamente. Aunque Gibrán le propone matrimonio, ella se niega citando diferencias de edad. Mientras tanto, las amigas, o amantes, Charlotte y Micheline circulan por el primer acto en una acción constante con Gibrán, así como con Mary en una relación lesbiana. Le acusan a Gibrán de ser mujeriego, un aspecto fundamental de este ser “sensual, sexual y peligrosamente bello” (20). Sin embargo, lo más importante no es el aspecto erótico de estas relaciones sino la insistencia en el amor como elemento motivador en la vida humana. Como dice su alter ego Almustafá: “Y no llegues a creer que puedes dirigir el curso del amor, pues el amor, si te consideradignodeél,seráquiendirijatucamino.Porqueelúnicoanhelodel amoreseldecolmarseasímismo…” (29)

Para hacer hincapié en el amor como acto sagrado, Ramos-Perea coordina los parlamentos de Gibrán y Almustafá en un momento dado para que digan a la vez: “Ycuandoamesnodebesdecir,‘Diosestáenmicorazón.’ Dimejor,‘EstoyenelcorazóndeDios’”(30).

Todo el hilo amoroso del texto se compagina con la línea históricopolítica que documenta las atrocidades cometidas en contra del pueblo libanés. Ramos-Perea señala las matanzas de 1516 y de 1860 como episodios catastróficos, seguidos durante la Primera Guerra Mundial por otra matanza de proporciones increíbles que dejó más de 120 mil personas muertas de hambre y enfermedades. Los efectos de estos desastres resuenan en el corazón de Gibrán, dejándolo sensibilizado para con el pueblo libanés y sufriendo una nostalgia tremenda por su patria recordada. Además, en varios momentos claves, se insertan referencias a fechas específicas para ubicar a Gibrán en sus movimientos peripatéticos desde Boston a París a Nueva York.

La segunda parte es la historia de tres mujeres importantes en la vida de Gibrán: Mary Haskell, otra vez, que declara su amor y su deseo de casarse

con Gibrán; segundo, Barbara Young, la secretaria de Gibrán que llega a insinuarse en su vida, tomando control; y al final, en los últimos meses de su vida, la joven Gertrude Stein que llega a ser su compañera leal hasta su muerte, aunque ella sufre mucho la decepción de este profeta espiritual cuando la “ataca” sexualmente. Otra vez, intercaladas entre estas figuras se encuentran las digresiones filosóficas y poéticas (sobre los hijos, la religión, el matrimonio, el placer y el sexo), así como las referencias a los escritos y los libros de Gibrán que le traen fama internacional y que insisten en su categoría de profeta o un dios.

Como si El Profeta no fuera suficiente, la publicación de Jesús, el hijodelhombre le llevó a nuevas alturas de mitificación. Gibrán admiraba mucho a Jesús. Dice: “He leído todo lo que existe sobre él. He caminado todossuscaminos,desdeSiriahastaPalestinaypiensoqueJesúseselmás grande artista, el más inmenso poeta de toda la civilización” (33). Pero al mismo tiempo, Gibrán no se veía como figura apoteósica. Cuando le alaban por haber escrito “un nuevo Evangelio, el Evangelio según Kahlil Gibrán,” él gruñe: “YonoheescritoningúnEvangelio.Espoesía.POESÍA,maldición” (35). Gibrán adoraba a Jesús, pero no por ser “esedebiluchoafeminadoque quieren presentarnos esos evangelios cristianos” (35) sino porque “Jesús es fuerza,poder,voluntad. Eles…Ah,elmásgrandesocialista,elmáscompleto líder,elmássensiblepoeta…”(35).

La figura de Gibrán, la histórica igual que la dramática, disfrutaba de una sensibilidad poética deslumbrante. Su espiritualidad abarcaba zonas misteriosas, más allá de sus fundamentos cristianos ordinarios. Gibrán creía en la reencarnación del individuo, más que en la resurrección de Jesús. Creía que él mismo había existido antes, tal vez siete veces, incluyendo vidas en Grecia, Roma, Egipto, India, Persia, y Siria (dos veces). Mary también creía en la reencarnación, y veía a Gibrán como el alma reencarnada de William Blake.xv Esta transposición de ideas cristianas con creencias orientales, especialmente de los sufis,xvi ayuda a explicar sus obsesiones, como las vemos expresadas en las líneas iniciales de la pieza:

Un día, mucho antes de que naciesen varios dioses, desperté de un profundo sueño y hallé que se habían robado todas mis máscaras, las siete máscaras que yo modelé y usé durante siete vidas.

Pero cuando un joven reclama “¡Es un loco!” Gibrán contesta:

El sol besó mi desnudo rostro por vez primera. Por primera vez el sol besó mi desnudo rostro y mi alma se inflamó de amor por el sol, y nunca más deseé mis máscaras. (1)

Con este comienzo apasionado, Ramos-Perea nos indica varias características de la obra: la disposición hacia elementos exóticos, la existencia clandestina detrás de una máscara, y la adoración de elementos naturales, es decir, el sol, como figura divina. Es verdad que Gibrán tenía una obsesión con el número siete, igual con la desnudez (siempre pintaba figuras desnudas). Esos elementos orientales establecen un modelo, e indican la intención de Ramos-Perea de desenmascarar y desmitificar la figura de Gibrán durante el desarrollo posterior de la obra.

Que yo haya podido determinar, la versión dramática de RamosPerea corresponde bien a la vida histórica de Kahlil Gibrán, incluyendo sus amores y todas las referencias históricas. El único punto de discrepancia que no he podido solucionar es una referencia a que fue disparado en el brazo por un Obispo, después de una altercado relacionado con la publicación de su libro Espíritusrebeldes , considerado herético en El Líbano. A Gibrán le dio rabia la actitud de los Obispos:

Malditos hipócritas. Yo condenaré hasta mi muerte, la tiranía que ustedes, hipócritas obispos católicos, han impuesto sobre la mujer, sobre la juventud, sobre el arte, sobre la inocencia. Ustedes, explotadores de la ignorancia, concubinos despreciables de los turcos… (11)

Se me hace que Ramos-Perea en este momento está ejerciendo su licencia poética, mezclando el episodio del Obispo con un trauma verdadero del Profeta. Cuando niño en El Bisharri, Gibrán se cayó y se le rompió el brazo, lo cual le causó problemas crónicos a lo largo de su vida. Lo demás, incluyendo el epílogo para explicar las varias interpretaciones de su vida hechas por sus amigos, parece corresponder bien con la versión histórica, tal como la vemos en la biografía preparada por Bushrui y Jenkins, por ejemplo. A fin de cuentas, lo que Roberto Ramos-Perea nos ha presentado con esta pieza es la visión de un hombre – no un dios –, sino un hombre con sensibilidades especiales, un hombre que ha afectado la vida de millones de personas. El público quiere héroes, aunque Lindenberger nos ha amonestado sobre “lo precario del heroísmo.”xvii No obstante la tendencia hacia la mitificación, Ramos-Perea, siendo él mismo un gran admirador de Gibrán,

ve en su carácter las flaquezas humanas que, irónicamente, lo hacen más asequible para nuestro entendimiento hoy en día. La inspección de su vida nos lleva, tal vez, por un camino de la auto-realización.xviii Para Ramos-Perea, la tarea de escribir la pieza representó cierto sacrificio. Como él explica:

Cuando decidí escribir la vida de este hombre, jamás sospeché el grado de compromiso que tendría que hacer con su humanidad. El poder desvestirlo de su mitificación, de la ignorancia que hay sobre su vida y del banal endiosamiento de su obra, fue un acto d e justicia personal mía que le agradezco a su vida. xix

Es, entonces, la combinación de lo superior y lo inferior lo que le da humanidad a la figura de Kahlil Gibrán, y la tensión entre estos dos polos lo que le da tensión y vida a la obra de Roberto Ramos-Perea, reflejando, sin duda, sus propias ambigüedades.xx No hay mejor manera para concluir que una cita tomada de la querida amiga de Gibrán, Mary Haskell, quien observa al final de la pieza:

Un hombre no es sólo su obra. Un hombre es también su contradicción, su angustia, su placer, sus amores. Porque en ellas está la grandeza de lo humano. (43)

Universityof Kansas. 20021

(Con esta Ponencia, una de las últimas ofrecidas por su autor, se clausuró el Congreso de Teatro Latinoamericano de la Universidad de Buenos Aires, Argentinadelaño2002,dedicadoenhonoralDr.GeorgeW.Woodyard,elmás importantecríticodelteatrolatinoamericanoenEstadosUnidosyunodelosmás destacados críticos dramáticos del mundo.Woodyard,pormásde40años, fue catedráticodelaUniversidaddeKansasyeldirectordelLatin American Theater Review, la más antigua e importante revista académica del Teatro Latinoamericano.Esautordemásde2,000trabajoscríticosy ensayos, y ejerció el profesorado en destacadas universidades dedicándose a promover entre los historiadoresdelteatro,laimportanciadelteatrolatinoamericano.Alfalleceren el año 2010,susescritosysumemorabiliafuerondonados a la Universidad de

1 La presente conferencia se publicó en el libro: Pellettieri, Osvaldo. Ed. Escena y realidad. Buenos Aires, Argentina: Grupo GETEA (Grupo de Estudios de Teatro Argentino e Iberoamericano). Editorial Galerna/Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, Argentina. 2003.

Kansas,dondeunacolecciónconsunombresirveainvestigadoresyacadémicos delteatro).

Obras consultadas:

Bushrui, Suheil and Joe Jenkins. KahlilGibran:ManandPoet . Foreword by Kathleen Raine. Oxford: Oneworld, 1998.

Cabrera, Brenda. Gibran Khalil Gibran . Montevideo: Dirección General de Extensión Universitaria, 1981.

Gibran, Kahlil. A Treasury of Kahlil Gibran . Edited by Martin L. Wolf, translated from the Arabic by Anthony Rizcallah Ferris. New York: The Citadel Press, 1968.

Gibran, Kahlil (cousin) and Jean Gibran. LazarusandhisBeloved , a one-act play by Kahlil Gibran. Greenwich, CT: New York Graphic Society Ltd., 1973.

Lindenberger, Herbert. Historical Drama: The Relation of Literature and Reality . Chicago and London: The University of Chicago Press, 1975.

Lings, Martin. WhatisSufism?London: George Allen & Unwin Ltd., 1975. Shah, Idries. The Sufis . London: The Octagon Press, 1964 (fourth impression 1984).

Notas:

i Roberto Ramos-Perea (b. 1959, Mayagüez, Puerto Rico) is a playwright, actor, director, journalist, and theatre critic-researcher. He studied acting and playwright at the INBA in Mexico City and at the University of Puerto Rico. He is presently the director of the Ateneo Puertorriqueño, the oldest cultural entity on the island, and the most successful and prominent playwright in Puerto Rico today. From the beginning his plays reflect the deep sense of commitment to Puerto Rican issues that one would expect of a successor worthy of Marqués. Delving into Puerto Rican history and contemporary events, Ramos-Perea has defined a web of political, social and economic injustices. He is the author of more than 30 plays, many of which have been singled out for prestigious awards and prizes, such as the coveted Tirso de Molina prize. Further, his plays have been translated into English and French, and staged in many countries, including the United States, France, Spain, Cuba, Venezuela, Argentina, Mexico, Chile and Japan. In addition to his activity as a creative writer, he finds time to write scholarly and journalistic materials, to direct the Ateneo, to represent Puerto Rico within G.E.D.I. (Grupo de Estudios Dramatúrgicos Iberoamericanos), and to continue the fight for freedom on all fronts, including the freedom of expression and

freedom from censorship. Ramos-Perea often writes documentary or historical plays; a recent trilogy provides three perspectives on the Spanish American War which resulted in Puerto Rico becoming a US territory.

ii “In his Arabic novella The Broken Wings, written thirteen years after his love affair [with Hala, during the summer of 1899, Gibran’s second and last summer in Bisharri], Gibran tenderly recalls Hala as Selma Karamy, forced into marrying a bishop’s nephew. As well as exploring the iniquities of misogyny and clerical corruption, The Broken Wings established Gibran as one of the first defenders of women’s rights in the Middle East.” (Bushrui and Jenkins 58)

iii “Although Kahlil Gibran’s name is widely known throughout the world, his achievements in the West have, to date, received only scant attention by scholars. It is doubtful whether any other writer who has attained such global popularity has been so neglected.” (Bushrui and Jenkins, 17)

iv Un email de un amigo árabe, especialista en teatro, Dr. Farouk K. Ohan confirma: “As far as I know, it’s very rare to hear about Gubran’s collections adapted to the theatre in the Arab world, in either Arabic or English versions.” (24 February 2001) It is interesting to note, however, that Gibran himself wrote a play, Lazarus and his Beloved, which had a public reading but was not published until after Gibran’s death in an edition prepared by his namesake cousin, Kahlil Gibran and wife Jean (see bibliography).

v “I shall improve on Frye’s theory by proposing the principle that heroes tend to diminish not only within a literary tradition as a whole, but also in a genre, in a period, in the writings of a particular author, and, indeed, in the course of a single work” (Lindenberger, 65)

vi “Within a month all 1,300 copies of the first edition [of The Prophet] had been sold, setting in motion a trend that was to continue steadily up to the present day, and may perhaps be maintained for years to come. … By 1957 it had sold its millionth copy, been translated into twenty languages, and become one of the most widely distributed books of the century.” (Bushrui and Jenkins 224-225)

vii E-mail de Ramos-Perea, fecha 12 febrero 2001.

viii “Fluent in Arabic and French, artistic and musical, Kamileh ignited Kahlil’s imagination with the folk tales and legends of Lebanon, and stories from the Bible.” (Bushrui and Jenkins, 25)

ix The title is significant because of Jesus’ own reference to himself, as quoted in the Scriptures, not as “the son of God,” but as “the son of Man.”

x “Gibran struck up a close friendship with the revolutionary painter [José Clemente Orozco], whose stunning murals reflected his concern over human rights violations and aimed to awaken the masses to the horror and futility of war. The exuberant Mexican felt a deep affinity with his Arab friend, and the two artists found they had much in common. They were exactly the same age; both were immigrants living in Manhattan, Gibran in his “Hermitage,” Orozco in his “Ashram”; both had been sponsored by American women – in Orozco’s case by Alma Reed, a journalist, archaeologist, and prime mover in the Delphic Group; and both had spent their lives championing the causes of their oppressed peoples, in Central America and the Middle East respectively.” (Bushrui and Jenkins, 242)

xi “Having rejected the ministerings of the medical profession, Gibran’s chief source of pain relief came from alcohol. Although he tried to conceal the extent of what had by now become an addiction, his resort to desperate measures to ease his “tempest of pain” was becoming increasingly obvious to those who visited him. Early in 1930 the Chilean poet Gabriel Mistral, a great admirer of Gibran’s work, noticed that during the course of their evening together Gibran excused himself for a moment and stepped behind an oriental screen to ‘take a swig out of a bottle which, in the unfortunately arranged mirror, didn’t look like a medicine bottle!’”(Bushrui and Jenkins, 275)

xii “Although she was by no means a soulmate, the presence of a partner brought the ailing poet some succor. In her late twenties and an office worker in the garment business, “his last amour” had a keen interest in literature. Like so many others, after reading The Prophet she desperately wanted to meet the poet. Gertrude was fortunate in knowing Isaac Horowitz, an acquaintance of Gibran who arranged for her to visit “the Hermitage.” The dying man was attracted to the intelligence and vivacity of the young woman and an intense relationship developed, continuing right up until his death. “He was a great soul encased in a small body.” Gertrude was to later recall: “That his personality could not always keep up with the greatness of his inner beauty is nobody’s business.” [Bushrui and Jenkins 281)

xiii Email de Ramos-Perea, 12 febrero 2001.

xiv La obra se estrenó el 23 de marzo 2001 por la compañía Teatro Sol y Luna en el Teatro del Ateneo de San Juan, Puerto Rico, con la actuación de los siguientes: primer actor Gerardo Ortiz como Kahlil Gibrán; Angela Mari, Evelyn Rosario, Vivian Casañas-Cruz, Willie Denton y José Armando Santo. Es el mismo grupo de trabajo que hace un año llevó a escena la exitosa obra Avatar: los años perdidos de Jesús .(De libros y autores, 21 march 2001)

xv “In Gibran’s magnum opus The Prophet, there are strong parallels with [William] Blake’s work. Gibran’s prophet, Almustafa, is in some ways comparable with Los, the prophet of eternity in Blake’s epic poems Milton and Jerusalem.

Blake himself certainly identified with Los as Gibran at times appears to have done with Almustafa.” (Bushrui and Jenkins, 109)

xvi “Sufism is nothing other than Islamic mysticism, which means that it is the central and most powerful current of that tidal wave which constitutes the Revelation of Islam” (Lings, 15).

xvii “the precariousness of heroism” (Lindenberger, 67).

xviii En el mismo e-mail (12 febrero 2001), Ramos-Perea dice: “Gibrán siempre fue una invitación al viaje hacia uno mismo.”

xix Cita sacada del prólogo, “La ordalía hacia uno mismo,” escrito por RamosPerea para la versión publicada del texto.

xx “Pero la vida y la obra de un autor pueden ser opuestos muy destructivos entre sí. Es un hombre condenado por su propia obra a expresar y a vivir a la altura de una espiritualidad literaria, mientras su vida era atraída por un atosigante narcisismo y un vicio de seducción” (Ramos-Perea, email, 12 febrero 2001).

La obra GIBRAN: la ordalía de El Profeta de Roberto Ramos-Perea ganó el Premio a la Mejor Obra de la Dramaturgia Puertorriqueña del año 2001

otorgado por el Círculo de Críticos de Teatro de Puerto Rico.

ROBERTO RAMOS–PEREA

(Foto © Juanky Álvarez.)

Nació en Mayagüez, Puerto Rico, el 13 de agosto de 1959. Dramaturgo, actor, director de escena, guionista, historiador, sociólogo y crítico del teatro y el cine Puertorriqueño. Cursó estudios superiores de Dramaturgia y Actuación en el Instituto Nacional de Bellas Artes de México, D.F. y prosiguió esos estudios en la Universidad de Puerto Rico. Es Director General del Archivo Nacional de Teatro y Cine, Presidente del Instituto Alejandro Tapia y Rivera y Director Artístico de la Compañía

Nacional de Teatro. Fue periodista en los diarios El Reportero, El Vocero, El Mundo, Puerto Rico Ilustrado y la Revista VEA.

Ha estrenado y publicado más de cien obras teatrales en Puerto Rico, y en países como Japón, Estados Unidos, España, la República Checa, Polonia, Brasil, Cuba, Venezuela, Argentina, México, Chile, Santo Domingo y sus obras han sido traducidas al inglés, al francés, al checo, al polaco, al portugués y al japonés. Ha dirigido más de un centenar de puestas en escena en Puerto Rico y en el exterior y ha sido premiado por instituciones nacionales e internacionales como el Ayuntamiento de Sevilla, Casa de las Américas de Cuba, el PEN Club de Puerto Rico, la Fundación Ricardo Alegría, la Medalla Víctor Hugo, el Instituto de Literatura Puertorriqueña y el Ateneo Puertorriqueño.

En 1992, el Ministerio de Cultura de España le otorgó el Premio Tirso de Molina a su obra Miénteme más. El Premio Tirso de Molina es el más alto premio que se le ofrece a un dramaturgo de habla hispana en el mundo. La obra se estrenó y se publicó en España. En ese mismo certamen, su obra Morir de Noche, quedó entre las seis finalistas escogidas para el premio.

Ha dirigido y escrito las películas puertorriqueñas Callando amores (1996), Revolución en el Infierno (2004), Después de la Muerte (2005), Iraq en mi (2007), La llamarada (2015), Bienvenido, Don Goyito (2017) y Vejigantes (2022), así como el largometraje documental Tapia: el primer puertorriqueño (2009).

Ha publicado el volumen de cuentos Sangre de niño (1976) y los ensayos Perspectiva de la Nueva Dramaturgia Puertorriqueña (Ateneo, 1989), Teatro Puertorriqueño Contemporáneo 1982–2003 (Publicaciones Gaviota, 2003) y 4 ensayos jodidos y una obra de teatro (Ediciones Puerto, 2012).

Publicaciones Gaviota edita su Teatro Escogido en siete volúmenes.

Editions Le Provincial y Gaviota también publican sus más recientes obras: Bruja de Dios (2012), Puerto Rico Urgente (2013), La Dama de las Camelias/Marianela (2014), y sus piezas de teatro histórico Gozos de Inquisición (2014), Iluminado Negro (2015), Por Maricón (2016), La amante del Gobernador (2017), Tuya siempre, Julita: los amores de Julia de Burgos y Luis Lloréns Torres, cartas y poemas inéditos (2018), La maestra yanqui (2018), Laura mía (2019), Ave sin rumbo (2020) y Magdalena: puta, esposa y guerrillera.(2024) ). EDP University edita su teatro breve Censurado (2016). Trabaja actualmente en el DICCIONARIO DE LA LITERATURA DRAMÁTICA PUERTORRIQUEÑA DEL SIGLO XIX, el DICCIONARIO DEL CINE PUERTORRIQUEÑO y los estudios casuísticos Historia de la Censura Teatral en Puerto Rico y Apuntes para la Historia de la Pornografía Puertorriqueña. Ha publicado además, como historiador teatral Historia de la Nueva Dramaturgia Puertorriqueña (Intermedio de PR, 1987); Obras Encontradas de Celedonio Luis Nebot de Padilla (Ateneo Puertorriqueño, 2008); Obras Completas de Manuel María Sama (Ateneo Puertorriqueño, 2007), el amplio estudio Literatura Puertorriqueña Negra del siglo XIX escrita por negros (Publicaciones Gaviota, 2012), y los tratados biográfico Tapia: el primer puertorriqueño (Publicaciones Gaviota, 2016), y Baldorioty: el caudillo. (2024)y en preparación para prensa termina los libros “Los negros no piensan”: historia de la intelligentsia puertorriqueña negra (Publicaciones Gaviota, 2024), y Clara Lair: la amante del Gobernador. Biografía crítica y obras recogidas de Mercedes Negrón Muñoz (Publicaciones Gaviota, 2025). Actualmente vive en San Juan de Puerto Rico, y es aficionado al esoterismo y a la astronomía.

Obras dramáticas de Roberto Ramos–Perea en Editions Le Provincial

(Antes Ediciones Gallo Galante.)

-Los 200 no

-La mueca de Pandora

-Teatro de Luna

-Teatro Secreto

-Avatar. Los años perdidos de Yeshua Ben Joseph.

-Nosotras lo hacemos mejor

-Vida de un poeta romántico

-Bruja de Dios

-Gozos de Inquisición

-Puerto Rico Urgente

-Iluminado Negro

-La dama de las camelias / Marianela

-La vida en Marte y otras crueles realidades

-Vivir de Imagen

-Tuya siempre, Julita. Los amores de Julia de Burgos y Luis Lloréns Torres. Cartas y documentos inéditos.

-La maestra yanqui

-Laura mía

-La amante del Gobernador

-Magdalena: puta, esposa y guerrillera

-Gibrán: la ordalía del El Profeta

Obras de ROBERTO RAMOS–PEREA con Publicaciones Gaviota y el Instituto Alejandro Tapia y Rivera

Editores y distribuidores. San Juan de Puerto Rico.

Revolución en el Infierno. (teatro/cine.)

Módulo 104: Revolución en el Purgatorio. (teatro.)

Cueva de Ladrones: Revolución en el Paraíso. (teatro.)

Cine Libre (historia y sociología del cine puertorriqueño)

Todo contra Dios (historia y sociología del teatro puertorriqueño)

La Cuarterona de Alejandro Tapia y Rivera.

Edición crítica de Roberto Ramos–Perea. (teatro.)

Malasangre: la nueva emigración (teatro.)

Por maricón. El proceso por sodomía contra Francisco Sabat y José Colombo-1843. (teatro.)

Literatura puertorriqueña negra del Siglo XIX escrita por negros.

Tapia: el primer puertorriqueño. (tratado biográfico)

Baldorioty, el caudillo. (tratado biográfico)

Teatro puertorriqueño contemporáneo.

TEATRO ESCOGIDO UNO: Teatro secreto Tuya siempre, Julita, Mistiblú, Morir de Noche, Miénteme más y Besos de fuego

TEATRO ESCOGIDO DOS: Teatro nocturno Después de la muerte, Inferno, Fausto Rave y Don Juan Tenorio: drama latinoamericano.

Ave sin rumbo (teatro.)

Aqua funesta (teatro.) Muerto en vida (teatro.)

Editions

Le Provincial

San Juan de Puerto Rico 2024

Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.