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Fundación Artemisan. Un cambio en la imagen
Fundación Artemisan
Un cambio en la imagen del mundo de la caza
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El sector de la caza se enfrenta hoy a retos impensables hace unos años. Tras mucho tiempo concentrado únicamente en su propia actividad, el nuevo escenario del siglo XXI ha llevado al mundo cinegético a ser consciente de que la batalla por el futuro se juega también en otros campos. La investigación, el ámbito jurídico y la comunicación eran hasta hace bien poco frentes donde no prestábamos la suficiente atención. Pero hoy ocupar esos espacios ya no es una opción para el sector: es una obligación.
Con esa idea nació en 2018 la Fundación Artemisan, que desde entonces se ha convertido en uno de los referentes del sector. Se trata de una organización privada sin ánimo de lucro, cuyo objetivo es promover la gestión y conservación de especies de fauna y flora a través de la investigación, comunicación y defensa jurídica, prestando especial atención al aprovechamiento sostenible de especies cinegéticas para al beneficio de los Ecosistemas y el mundo rural. Para ello cuenta entre sus miembros con un amplio número de organizaciones del ámbito cinegético, incluyendo Federaciones de Cazadores, propietarios privados, empresas y particulares. Existe un Patronato, benefactores, socios y amigos de la entidad, todos ellos comprometidos con la conservación de la Biodiversidad.

Artemisan defiende dos principios por encima del resto; la actividad cinegética y otros aprovechamientos del medio natural contribuyen significativamente a la conservación de los ecosistemas y al desarrollo económico y social; y la ciencia aplicada y su difusión deben ser la base para el desarrollo de la gestión cinegética.
Con esos principios trabajamos sin descanso, impulsando proyectos de investigación y abriendo nuevos canales de comunicación con los medios de comunicación generalistas, trabajando para transmitir de la mejor manera posible la realidad de lo que supone la actividad cinegética en nuestro país. Para ello apostamos por un enfoque multidisciplinar, de forma que en nuestra investigación no sólo participan científicos, sino también gestores, cazadores, agricultores, propietarios y empresas, en muchas ocasiones a través de asociaciones y federaciones, sin descuidar el papel clave de la Administración. Asimismo, apostamos por sumar y no restar: no hemos venido a duplicar los esfuerzos, por lo que siempre que es posible colaboramos con otros grupos de investigación.
Proyectos I+D+I
Tenemos especial interés por proyectos de I+D+i de tipo demostrativo, con enfoques de trabajo ‘de abajo hacia arriba’, implicando a los distintos actores desde el principio y cuyos resultados puedan ser aplicados. Buscamos así nuevas soluciones para viejos problemas.
Fruto de todo este trabajo son algunos de los proyectos que ya estamos desarrollando. El primero de ellos, el Proyecto RUFA, una nueva estrategia para la conservación de la perdiz roja y otras aves esteparias. En el 2018 se crearon los grupos perdiceros de Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura y son ya muchos los cotos con los que estamos realizando conteos en primavera y en otoño, y viendo la evolución de los diferentes modelos de gestión.
Gracias a un proyecto concedido por la Comunidad de Madrid y nuestro trabajo en un total de ocho Comunidades Autónomas, hemos creado una red de cotos sociales en los





que desarrollaremos el proyecto durante los próximos años. Sabemos que es posible recuperar nuestra especie más emblemática, trabajando en una agricultura sostenible, suplementando agua y comida y con un efectivo control de predadores. Es necesario animar a los cotos a trabajar en esta línea que muchos ya abandonaron.
Asimismo, hemos completado el Proyecto interFIELD, donde hemos contado con un grupo internacional de expertos en medidas agroambientales a través del que hemos realizado una propuesta para la nueva Política Agraria Común.
Otro de los hitos ha sido la realización con la consultora Deloitte de un estudio sobre el impacto socioeconómico de la caza en España, que nos ha permitido disponer de datos actualizados sobre lo que supone la actividad en nuestro país. Todos ustedes habrán escuchado de algunos de los dirigentes políticos en las últimas semanas hablar de cifras de la caza transformadas en PIB, empleos… son los datos de nuestro informe Artemisan.
Además, hemos impulsado un informe sobre la evolución de los territorios del entorno de los parques nacionales de Cabañeros y de Monfragüe que avala, ante la inminente prohibición de la caza en 2020, la necesidad de que se mantenga la actividad cinegética en estas zonas.
El desarrollo de indicadores de caza sostenible en ciervo y jabalí en ecosistemas, la actualización del «Documento de Conceptos Clave sobre el período de reproducción y migración prenupcial de especies de aves cinegéticas en la Unión Europea», el Grupo Operativo Supraautonómico Agricultura Sostenible y Biodiversidad y el estudio de la calidad nutritiva del lomo de ciervo silvestre en colaboración con Asiccaza, han sido otros de los proyectos llevados a cabo en este tiempo por la Fundación Artemisan.
Otros proyectos
A corto plazo hay otros proyectos sobre la mesa, como MIXOlepus (estudio del brote de mixomatosis en liebre, medidas de prevención de la enfermedad y gestión sostenible de sus poblaciones ), el Plan Integral de Recuperación para la Tórtola europea en la Península Ibérica (PIRTE), un proyecto de Recuperación de poblaciones de Urogallo, la creación de un Observatorio Regional Cinegético en varias comunidades autónomas y uno de los proyectos en los que estamos dedicando más esfuerzos económico y de personal, el proyecto Caza y Cultura, donde implicaremos a gente de la cultura y las artes en diferentes estrategias.
Todo este trabajo se apoya en una comunicación innovadora y en una apuesta decidida por colaborar en la mejora de la imagen del sector, luchando contra todas y cada una de las crisis de reputación que surgen. Por eso, siendo conscientes de la realidad a la que nos enfrentamos y de la influencia de las Redes Sociales, estamos llevando a cabo diversas iniciativas para mejorar la imagen que transmite el sector de la caza a través de las Redes Sociales, apostando por la formación y por la creación de sinergias y redes internas coordinadas.
Vivimos un momento clave en el que se están sentando las bases de lo que será la actividad cinegética en el futuro. Es momento de dar un paso al frente, de tomar la iniciativa y empezar a trabajar en un ámbito cada vez más global sin perder de vista que los espacios que no ocupe el mundo de la caza, lo ocuparán otros. Que si no somos capaces de contar lo que hace la caza, lo que supone y significa… otros lo harán por nosotros.
Hoy estamos construyendo el futuro de la caza. Y en ese trabajo el sector puede estar seguro de que la Fundación Artemisan está dispuesta a dar la cara y a aportar su profesionalidad. •••
José Luis López Schümmer,
presidente de la Fundación Artemisan