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Autrán el hombre, además de dentista
from Impresiones nº100
by editorialmic
Dr. Manuel Cueto. Amigo de Fernando Autrán.
I M P R E S I O N E S
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Hablar bien de alguien siempre es fácil. Si ese alguien es un buen amigo la tarea se hace amena, divertida y, por supuesto, honrosa. Al Dr. Fernando Autrán lo ha nombrado el Consejo General de Dentistas, nuestro mayor órgano colegial, Dentista del año, de este año 2021, y que un órgano nacional que nos representa a todos haga un nombramiento así, es porque la persona nominada tiene muchos, muchos méritos, para acreditarle como el mejor. Como conozco a Fernando desde hace muchos años -no los digo para que no parezcamos tan mayores-, yo tengo también el conocimiento profundo y la certeza de sus méritos, que son muchos. Unos académicos y, sobre todo, humanos. Como seguramente en la cena de entrega del premio el próximo 16 de diciembre se citarán sus méritos académicos y empresariales, no vamos hacer aquí mucho hincapié en ellos. Nos gusta más contar, hablar, de Fernando como hombre, como esa persona que conocemos sus amigos en las distancias cortas. Uno de los primeros viajes que hicimos juntos, luego vendrían muchos más, fue a Cuba, para impartir una conferencia en la Facultad de Odontología de la Universidad de la Habana que celebraba su primer siglo de existencia. Los actos académicos transcurrieron bien, los gastronómicos no tanto. Pero nuestra estancia en las playas de la isla, nuestras cenas, maravillosamente amenizadas con un amplio repertorio de chistes donde rivalizábamos Fernando y yo, a ver quién contaba el mejor, fue el mejor recuerdo que tengo de aquel viaje académico. Allí contamos el chiste de ¡Ay que Tutto!: (si te asustó el ruido) haber escogido mu’ete, que ha quedado en nuestro acervo como una referencia simpática para cualquier situación inesperada. Ahora tengo que hacer referencia a la razón de por qué Fernando es mi amigo y desde hace tantos años. Como no puede ser de otro modo, surge durante otro viaje que creo que nos dejó para siempre marcados, y para bien. El viaje a la USC. Un grupo de colegas decidimos ir a formarnos en temas de Estética Dental a esa universidad californiana. Las horas de estudio eran muchas e intensas, pero nuestras cenas fueron imprescindibles para la supervivencia psicológica, porque eran el momento de expansión que teníamos tras las maratonianas jornadas de trabajo. Recuerdo momentos inolvidables de aquellas horas de clase: el ánimo que teníamos y la alegría que derrochábamos era poco entendida por aquel elenco de profesores que miraban con incredulidad nuestros, por qué no decirlo, arrebatos de carcajadas por razones que ahora no recuerdo, pero que eran liberadores y ejemplo del buen rollo que entre todos nosotros existía. De esa animada convivencia surgió la idea de seguir viéndonos y encontrándonos ya en España en el futuro y continuar, así, profundizando en la amistad que se estaba forjando. Sí, la primera reunión del grupo me correspondió a mí en Asturias, porque así me había comprometido a hacerlo en Los Ángeles, después de una cena donde dimos cuenta de un buen numero de unos excelentes -decían que los mejores de la ciudad- Dry Martini. Así nació el grupo que denominamos GESCODA (Grupo de Estudios Estéticos…). Una organización, por supuesto, sin ánimo de lucro, cuya principal objetivo era, y sigue siendo, desarrollar la amistad entre dentistas que se dedican a la Estética Dental y otras actividades odontológicas, por medio de viajes culturales y de investigación gastronómica alrededor del mundo. Cierto es que nuestros desplazamientos internacionales se han visto ligeramente mermados desde 2019 por culpa de un infausto virus de procedencia lejana que ha afectado de un modo inopinado a nuestros viajes de profundización en la amistad. En el momento actual, estamos desarrollando ya un plan de choque para solventar el déficit surgido y volver a lanzar unas propuestas presupuestarias de lo más avanzadas, que nos harán recuperar el tiempo perdido.

Ni que decir tiene que en el mantenimiento del grupo, la labor de Fernando ha sido siempre fundamental, porque siempre está presente en TODAS las reuniones aunque su agenda es apretada por la infinidad de actividades desarrolladas: clínicas, docentes en sus Autran Academy en Madrid y Barcelona, de sus colaboraciones con las Universidades de Murcia y de Almería, y en la organización de cursos y conferencias con los personajes más famosos de la profesión a nivel mundial. Una actividad intensa desarrollada con unas ganas y una pasión increíbles, e impulsadas por ese cerebro en constante ebullición que nuestro homenajeado pone en función todos los días del año para que no cese esa brillante labor clínica, docente y empresarial. Pero la faceta más entrañable de Fernando es la de coleccionista de trenes. No sé si saben que disponía en su casa de una maqueta de ferrocarril de varios metros cuadrados con todo tipo de locomotoras, convoyes de ferrocarril y de paisajes en miniatura que era fascinante ver cómo funcionaba. Pero no, lo dicho es cierto, pero era broma. La faceta más entrañable es la Fernando Padre y Esposo. Detrás de él está, como todo el mundo sabe, Eva Arteche, su mujer. Ella siempre esta al lado de Fernando, en la clínica antes, después en la Academia, y en todos sus proyectos y desarrollos empresariales. Excelente anfitriona, sabe dirigir con excelente mano izquierda y desde la más absoluta discreción esa empresa que el Dr. Autrán y ella han creado. Obviamente, los hijos de ambos, Marc y Fernando, han cerrado ese núcleo familiar sólido desde el que se puede crear cualquier cosa, y que hace que el Fernando luchador tenga un lugar al que regresar después de sus múltiples viajes y quehaceres. He intentado mostrar algo de la parte más íntima y familiar, que yo conozco como amigo de este homenajeado, pero seguro que aún quedan muchas más cosas que contar, como que es un loco de los zombies y está intentando escribir un libro sobre ellos, que le apasionan los coches y los relojes, que disfruta del buen champagne… Pero eso se lo dejo a otros. Sólo quiero resaltar que la amistad entre nosotros es intensa, así como entre todos los amigos de Gescoda. Que tenemos un amigo que resalta, por su trayectoria, pero que en las distancias cortas es una persona amena, divertida y cariñosa. Quiero citar que yo, que soy el que escribo, y tus amigos: J. Alonso, Pedro Ariño, Ana Bañales, Jesús Creag, Patricio Novales, Roberto Ortigosa, Pedro Rivas y nuestras respetivas esposas estamos muy contentos de ser amigos tuyos y deseamos con todas las ganas que disfrutes de tu premio (que te lo mereces, insisto) porque para nosotros el premio es contar con tu amistad. I M P R E S I O N E S