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Plan de Salud Bucodental 2022

I M P R E S I O N E S

Paulo López-Alcázar López-Higuera, gerente del Colegio

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El pasado mes de junio se aprobó por el Gobierno de España un plan de Salud Bucodental, dotado con 44 millones de euros. La ministra del Ramo, Carolina Darias, ha manifestado que beneficiará a unos siete millones de personas, en concreto, a los sectores más vulnerables tales como - Menores de 0 a 14 años, divididos en dos tramos: de 0 a 5 años y de 6 a 14 años. - Mujeres embarazadas. - Personas con discapacidad. - Pacientes en proceso oncológico cervicofacial. Una de las ventajas que reportará el plan será la de homogeneizar las prestaciones en todo el territorio, superando así las diferencias entre los planes bucodentales infantiles que existen en las diferentes comunidades autónomas, además de incrementar los servicios comunes que se han venido recibiendo hasta la fecha. Así, en el caso de los menores de 14 años, este plan “va a permitir intervenir de manera preventiva con tratamientos como barnices de flúor y selladores de fisuras que impidan la aparición de caries, así como limpiezas y empastes en la dentición definitiva”. Es obvio que la decisión de ampliar las coberturas públicas de la salud bucodental es enormemente positiva, sobre todo si contribuyen a acabar con las diferencias existentes entre las diferentes comunidades autónomas. Sin embargo, ni la dotación presupuestaria propuesta se aproxima ni de lejos a las exigencias económicas que supondría la efectiva aplicación del proyecto ni los diferentes servicios públicos sanitarios disponen de profesionales facultativos suficientes para la ejecución real de dicho programa, el cual exigiría incrementar exponencialmente el número de plazas que existen actualmente en la Sanidad Pública para dentistas e higienistas. Hay que tener presente que en España el 97% de los dentistas colegiados ejerce su profesión en el ámbito privado, en alguna de las más de 23.000 clínicas dentales registradas. Unas cifras que contrastan con las de la Sanidad Pública, donde solo trabajan unos 1.200-1.300 dentistas en Atención Primaria, según datos facilitados por Consejo General de Dentistas. Por consiguiente, si este plan anunciado a bombo y platillo no quiere que se quede en una más de las ofertas electoralistas del Gobierno, es necesario un acuerdo nacional entre el Ministerio de Sanidad y Consumo y las diferentes comunidades autónomas, que, no olvidemos, son las que tienen la competencia en materia sanitaria; que empiece por ampliar el número de profesionales en la Sanidad Pública, y concluya con un acuerdo con los colegios profesionales que permita el desarrollo del plan en estrecha colaboración con los profesionales sanitarios del sector privado, tal y como viene ocurriendo con el PADI regional. Y, desde luego, antes de comenzar, establecer un plan económico que permita dotar al proyecto de los fondos que sean realistas, y se adecuen a los auténticos costes para poder prestar una sanidad bucodental de calidad.

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