le rinde homenaje a la viuda de Leudo, que sigue siendo una señora agraciada, con una entrevista realizada por Darío Silva-Silva (hoy ministro protestante fundador del templo Casa Sobre la Roca), acompañado del fotógrafo Abdú Eljaiek. Y así recuerda la casta modelo aquella experiencia: “Yo era la novia de Coriolano Leudo, y un día mi prometido y maestro de pintura me pidió que posara para una revista que iban a editar Miguel Santiago Valencia y Abelardo Arboleda. Me puse mi mantilla, prenda muy de moda entonces, y Coriolano me dibujó. Allí estoy, en la primera carátula de Cromos. En ese mismo año, 1916, nos casamos. Tuvimos cuatro hijos: María Luisa de Martín, Mercedes de Saavedra, Beatriz de Andrade y el único varón, Manuel Felipe”. Leudo, que nació en 1886 en Santafé de Bogotá y estudió en esta capital con maestros como Epifanio Garay, Alberto Urdaneta y Roberto Páramo, fue un exitoso artista que expuso en el exterior y hasta su muerte, en 1957, enseñó en la Escuela de Bellas Artes de Bogotá de la que llegó a ser director. En Cromos quedó gran parte de su legado de dibujante, pintor y caricaturista (que firmaba Rabinet y Moncrayón) y el Museo Nacional posee algunas de sus obras.
Otras damas de mantilla Ricardo Gómez Campuzano (Bogotá, 18911981), quien también estudió y enseñó en la Escuela de Bellas Artes de Bogotá y fue alumno de Ricardo Acevedo Bernal, replicó a la dama con mantilla en la pintura “Escena bogotana” donde una joven sonriente —como la de Leudo— mira como coqueteándole a una inexistente cámara mientras sostiene con una mano la negra mantilla de encaje. Detrás de ella viene caminando un anciano con bastón y se observa movimiento en la arbolada calle. Hasta 1938 —justo en el cuarto centenario de la fundación de Bogotá— no vuelve a salir otra dama con mantilla en las portadas de Cromos, y esta vez es un óleo de Salas Vega (#1.104) también titulado “Mantilla bogotana”. En un primerísimo plano de la dama, se aprecia la perfección de su rostro ovalado y el color aceituna de sus ojos, resaltado por el labial rojo. La iglesia apenas dibujada al fondo indica que salió de misa y todavía trae algo de recogimiento en
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su cuerpo. Marco Tulio Salas Vega (Pasto, 1904Bogotá, 1967), especializado en escenas campesinas sobre todo de su natal departamento de Nariño, retrató aquí a una fina mujer citadina. Viajó becado de Pasto a Bogotá para realizar estudios de grabado, pintura y escultura con el maestro Coriolano Leudo, a quien seguramente rindió tributo con esta “Mantilla bogotana”. Lo curioso es que como liberal tenía reparos en pintar templos y escenas religiosas. Quizá por ello la iglesia del fondo apenas está dibujada. En Cromos, Salas Vega compitió con dos cotizados artistas: Rinaldo Scandroglio y Santiago Martínez Delgado. Como se ve por este rápido recuento, las carátulas de Cromos en las primeras décadas conforman una verdadera pinacoteca del arte colombiano (que también sirvió de vitrina a artistas extranjeros). La revista impulsó a numeCandidata al reinado de Cartagena siguiendo la moda impuesta por las actrices de Hollywood.