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El amuleto de la perdición

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La línea perdida

La línea perdida

Horacio Ballestrin 6 o primaria

Una noche estrellada, el 10 de octubre de 1970 en la ciudad de Londres, había una niña llamada Alicia. No era muy linda y era un poco solitaria, Alicia caminaba por la oscura calle, cuando de pronto, una vieja pálida, en silla de ruedas y con una extraña caja, le dijo: - Amuletos, vendo amuletos. La vieja sacó de la caja un precioso amuleto que a Alicia le interesó mucho. Cuando Alicia lo iba a comprar, la vieja le dijo: - Este amuleto te hará irresistible, pero si el egoísmo te traiciona, te perderás en un vacío para siempre. Alicia no le creyó, pero lo compró de todas formas, aquel amuleto era hermoso.

Al día siguiente, Alicia se puso el amuleto para ir a la escuela y, cuando se lo puso, vio que brillaba un poco, pero no le prestó atención; pensó que alucinaba. En la escuela, se reunió con sus tres amigas: Ivana, Amanda y Zoe, que al igual que ella no eran populares. Mientras caminaban a su clase, todos miraban a Alicia como si fuera la chica más linda del mundo, incluso las chicas populares le hablaron y la invitaron a comer con ellas después de clase; Jacobo, el chico más guapo de la escuela le coqueteó y la invitó a salir, para Alicia era un sueño hecho realidad, pero pronto su perfecto sueño se transformó en una horrenda pesadilla.

Alicia había pasado un día perfecto, le fue muy bien en su cita con Jacob y se había hecho amiga de las chicas populares, Alicia estaba muy feliz. Al día siguiente, se pasó todo el día con él y sus nuevas amigas, lo que hizo que se empezara a olvidar de sus viejas amigas. La semana pasó y Alicia se había hecho una persona totalmente nueva: era mala, ambiciosa y estaba cegada por el egoísmo.

Al día siguiente, su amuleto paró de brillar, pero no le importó. En la escuela nadie le habló, caminando se encontró a sus viejas amigas, así que decidió arreglar las cosas con ellas y lo logró, pero era demasiado tarde para arreglar lo que iba a pasar.

Al día siguiente, sus padres llamaron para contarle algo: -¡Tus abuelos han muerto!, le dijo su madre. Alicia vio la televisión y en las noticias aparecieron

sus abuelos tirados en el piso. Alicia empezó a llorar, pero luego se fijó que al lado de su abuelo estaba el número 10 escrito con sangre y junto a su abuela estaba el número 9 escrito con sangre. A Alicia le recorrió un escalofrío y, después de seguir llorando, se calmó y fue a la escuela, pero vio a un montón de gente reunida. Ella se abrió paso y vio el cuerpo de Zoe, pero lo más llamó su atención fue que al lado de ella había un 8 escrito con sangre.

La escuela se suspendió hasta nuevos aviso, pero Alicia acordó de verse con sus amigas en el parque, cuando llegó vio a dos de ellas: Miranda y Martina, pero faltaba Carola. Alicia preguntó por ella, sus amigas la vieron extraña, pero igual respondieron que la habían estado esperando por 30 minutos y que no aparecía, también que la llamaron y no atendió.

Alicia propuso que se separaran para buscara y que se reunieran en la fuente. Sin más, todas salieron corriendo en busca de Carola. Después de 5 minutos, la encontró tirada en el piso con el número 7 escruto con sangre; Alicia supo que estaba muerta, fue a la fuente, pero no vio a nadie; así que fue a buscar a Miranda por si estaba atrasada. Alicia encontró a Miranda caminando lentamente, pero luego se cayó y Alicia notó un 6 escrito con sangre, Alicia corrió lo más rápido que pudo para ver si Martina estaba muerta. Efectivamente, estaba sentada en un banca con un 5 dibujado con sangre a lado. Alicia aterrada salió corriendo a la casa de Ivana, que era la que más cerca quedaba, ahí estaban Amanda e Ivana en la casa del árbol, la invitaron a subir y, después de hablar de todo lo que había pasado, Amanda se ofreció a traer comida. Ivana y Alicia siguieron hablando, cuando de pronto, escucharon un golpe, bajaron de la casa y vieron a Amanda tirada en la cocina y el número 4 a lado. Ivana salió corriendo a casa para avisarle a su mamá, pero, cuando Alicia entró, sólo vio el cadáver de Ivana con el número 3 adelante.

Alicia había coordinado por llamada una cita con Jacob para distraerse un poco, pero él parecía nervioso y fue bastante incómoda, hasta que él dijo que quería ir al baño. Unos minutos después, Alicia escuchó un grito que venía del baño de hombres; cuando fue a revisar, vio a Jacob tirado y el número 2 en la tapa del inodoro.

Esa noche Alicia no pudo dormir, así que fue a la cama de sus padres, pero como no cabían, su papá se fue a dormir al sillón, grave error. A la mañana siguiente, cuando Alicia bajó a desayunar, vio a su papá tirado en el piso y al número 1 con sangre. A Alicia le recorrió un escalofrío por todo el cuerpo, su mamá dijo que se quedara allí, que iba a la estación de policía. Después de un instante, el timbre sonó y, cuando Alicia abrió la puerta, vio a su mamá tirada con el número 0 atrás, pero, de repente, su mamá se levantó sombríamente y, cuando Alicia la miró, vio que tenía los ojos blancos y estaba muy pálida. Alicia se asustó y su mamá empezó a hablar: - Yo te lo advertí, si quieres reparar esto, veme en el muelle a las 12:00 am, te esperaré. Sin más, su mamá cayó al piso. 11:59 pm. Alicia salió corriendo hacia el muelle llorando y, cuando llegó, exactamente las 12:00 am, de la nada, la luna brilló más que nunca y apareció la vieja, la cual empezó a conjurar algo mientras las venas se le hinchaban. De la nada, el amuleto empezó a brillar, la vieja abrió la caja y Alicia metió el amuleto. Cuando despertó apareció en una cueva con las otras víctimas y tuvo que trabajar como esclava creando los amuletos con los que hechizaba por toda la eternidad. Se dice que cada 10 de octubre de un año diferente, en una ciudad diferente, se puede oír el grito de la vieja buscando víctimas para engañar.

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