(DES)CONEXIÓN MUSAE ORIGINS
30 Días Sin Redes Sociales PÁG 08
Sabios que hablan desde otro mundo PÁG 18
Ciudades que ya viven en el futuro PÁG 24

30 Días Sin Redes Sociales PÁG 08
Sabios que hablan desde otro mundo PÁG 18
Ciudades que ya viven en el futuro PÁG 24
Un encuentro con uno mismo que cura el estrés
EDICIÓN 01/ MAYO 2024
En un mundo donde lo audiovisual y lo inmediato dominan muchos de nuestros momentos, lanzar una nueva revista escrita parece una aventura, un desafío a la prisa. Pero es precisamente esta vertiginosidad la que hace tan tentadora la idea de desafiarla, de ofrecer un espacio para respirar, reflexionar y disfrutar. Así nace Bonavio, un neologismo que teje lo bueno con la vida, que no pretende ser una guía, sino una carta de navegación hacia el bienestar.
En este primer número, exploramos cómo la tecnología, lejos de ser el villano que nos roba la tranquilidad, puede ser un aliado para reconectar con nosotros mismos y con el mundo. Las aplicaciones que nos enseñan a meditar, los dispositivos que monitorean nuestra salud, los mundos virtuales que nos permiten viajar sin mover los pies de nuestro hogar; todos tienen un papel en esta nueva era del bienestar. Pero Bonavio va más allá, porque sabemos que otros aspectos de la vida, el arte, los valores o la comida son los que sostienen la verdadera buena vida.
Uno de los hilos conductores de nuestra revista es la desconexión, no vista como un simple apagar el teléfono,
sino como una invitación a sumergirse en experiencias que nos sacudan por dentro. Animarse a viajar solo, a conocer nuevas culturas, a dejarse envolver por la magia de lo desconocido, son actos de valentía que redefinen nuestros límites y expanden nuestros horizontes. Cada viaje puede convertirse en una historia de amor con uno mismo narrada a través de sensaciones.
Hablar de sostenibilidad es inevitable cuando se busca una vida plena. En nuestras páginas, discutimos cómo la sostenibilidad debe ser un pilar y no un lujo. La moda ética, la alimentación consciente y el turismo responsable deben ser algo más que tendencias. En Bonavio, sostenibilidad no es una sección más, sino la savia que corre por las venas de cada artículo, cada recomendación, cada imagen.
Así que, querido lector, te invitamos a sumergirte en estas páginas como quien se sumerge en un baño caliente. Deja que las ideas floten a tu alrededor, que las imágenes te transporten y que las palabras te transformen. Aquí empieza un viaje en el que cada página es un paso hacia esa buena vida que todos buscamos.
Redacción BonavioPÁG. 10
VIAJAR SOLO como terapia contra el estrés
PÁG. 08
DESCONEXIÓN DIGITAL Impactos y beneficios
DIRECTORIO:
CASA EDITORIAL
VIGO PUBLICIDAD, SA DE CV
CONCEPTO Y DISEÑO EDITORIAL
AMIC PARLANTE
REDACCIÓN
VALERIA VILLALPANDO
ASISTENTE DE REDACCIÓN
DIANA MUÑOZ
DISEÑO EDITORIAL
VALERIA VOLPE
Derechos de Autor y Derechos Conexos, Año 2024 No. 01, BONAVIO ® es una publicación mensual editada, publicada y distribuida por Vigo Publicidad, S.A. DE C.V., con domicilio en Av. Américas número 1586, Piso 4, Oficina 1, Colonia Country Club, Tel.33 120 03080. Editor Responsable: Jorge Adrián Contreras Ramírez Tel. 449 104 5517. Imprenta Editorial: Argó Impresión y Diseño. Laurel 216, Circunvalación Norte, Aguascalientes, Ags. Reserva de Derechos al Uso Exclusivo: en trámite solicitada ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor; Certificado de Licitud de Título y Contenido: en trámite ante la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Este número se terminó de imprimir el 17 de mayo de 2024 con un tiraje de 30 ejemplares. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta Edición de BONAVIO®, sin autorización expresa y por escrito por parte del Consejo Directivo de Vigo Publicidad, S.A. de C.V. Vigo Publicidad S.A. de C.V., no se identifica con las opiniones expresadas por sus lectores, colaboradores o autores en cualquiera de los artículos o secciones de la revista BONAVIO®, al igual que no se responsabiliza por la información publicada en las encuestas publicadas en su contenido ya que son una muestra de la opinión pública y no representan necesariamente la opinión de la población en general, siendo responsabilidad directa de la metodología implementada en estas las casas encuestadoras que las realizan, por lo que los lectores deben evaluar los resultados de las encuestas por su cuenta.
BONALAB
PÁG. 14
WEARABLES que te salvarán la vida
PÁG. 16
SUPERFOODS 2024
PÁG. 18
9 INICIATIVAS que todas la ciudades debería copiar
LUCIDUM
PÁG. 22
AUSTRALIA en bici por amor a México
MUSAE
PÁG. 30
VOZ VIVA Ecos de otro mundo
PÁG. 32
32 DADOS, CARTAS Y TABLEROS El boom de los juegos
PÁG. 36
EL NUEVO LUJO
Sostenibilidad y exclusividad
PRISMA ORIGINS
PÁG. 40
MODA INDÍGENA COUTURE
IMPRONTA
PÁG. 45
ENTREVISTA Así se diseña el futuro
PÁG. 48
5 PIONEROS de la economía circular
Cuánto tiempo dedicas a las redes sociales cada día? ¿Y cuánto de ese tiempo sientes que te beneficia realmente? En una era donde estamos constantemente conectados, cada vez más personas, incluyendo celebridades como Tom Holland y Selena Gomez, están optando por desconectarse temporalmente de las redes sociales en lo que se conoce como “digital detox”. Esta tendencia no sólo se limita al mundo del espectáculo, sino que también ha sido adoptada por líderes empresariales, ejecutivos de alto nivel y profesionistas de distintos ámbitos, que han reconocido la importancia de gestionar su tiempo en línea de manera consciente y equilibrada.
En 2022, The Guardian publicó un artículo sobre el creciente fenómeno de las personas que deciden dejar las redes sociales temporalmente en busca de una mejor salud mental y emocional. El artículo, titulado en inglés “‘I didn’t realise how badly it affected me until I was off it’: what it’s like to have a social media detox”, rescata los testimonios de individuos que han experimentado beneficios al desconectarse de plataformas como Facebook, Instagram y Twitter (X).
¿Y qué fue lo que notaron? Se sintieron con más energía, con mayor disponibilidad para mantener conversaciones con otras personas, con más capacidad de concentración y con un mayor equilibrio emocional.
Y es que, el pasar tanto tiempo en redes sociales puede exponer a las personas a cosas negativas y traumáticas, como el bombardeo de noticias catastróficas, lo cual deriva en un aumento de estrés porque a las preocupaciones personales y cotidianas se suman los problemas más graves del mundo, o el hecho de compararse con otros usuarios, algo que va desgastando la autoestima y la confianza, aunque en el fondo se sepa que las perso-
nas comparten solo lo mejor que les sucede o que simplemente se trata de una puesta en escena.
Varias investigaciones respaldan que uno de los mayores beneficios que se puede tener de esta desintoxicación digital es la mejora de la salud mental. Por ejemplo, un estudio realizado por la Universidad de Pensilvania, publicado en el Journal of Social and Clinical Psychology en 2018, examinó el impacto del uso de Facebook, Instagram y Snapchat en el bienestar subjetivo de los usuarios. Los resultados mostraron que limitar el uso de estas plataformas a solo 30 minutos diarios durante tres semanas condujo a una reducción significativa en los niveles de soledad y depresión, así como una mejora en el bienestar general de los participantes.
Otra investigación, realizada por académicos de la Universidad de Bath y publicada en 2022 en Mary Ann Liebert, Inc., sugirió que una pausa de una semana era suficiente para tener un efecto positivo. En el estudio realizado con un grupo aleatorio seleccionado para abstenerse de plataformas como X Instagram, Facebook y TikTok, los investigadores observaron una disminución en los síntomas de depresión y ansiedad, junto con un aumento en el bienestar general.
Dejar las redes sociales temporalmente puede ser una experiencia liberadora y transformadora. Nos permite tomar un respiro de la constante estimulación digital, cuidar nuestra salud mental y reconectar con lo que realmente importa en la vida. Si estás considerando dar el paso, recuerda que no estás solo y que los beneficios a largo plazo pueden superar cualquier incomodidad inicial, como la de sentir que te estás perdiendo algo o que te falta información clave sobre algún tema.
Viajar solo es mucho más que una simple elección de itinerario; es un viaje íntimo hacia el autoconocimiento y una oportunidad para redefinir la relación con uno mismo y con el mundo. Esta forma de viajar, que gana adeptos año tras año, se revela como una experiencia profundamente transformadora.
Stephanie Rosenbloom, en sus columnas para The Washington Post, resalta la singularidad de esta experiencia: “La soledad nos da espacio para reducir el ritmo y explorarnos a nosotros mismos y al mundo. Nos da la libertad de hundirnos en madrigueras de conejos; para descubrir y perseguir cosas que nos apasionan y que encontramos personalmente significativas. [...] Solos vemos de otra manera”. La visión de Rosenbloom subraya cómo el viajar solo permite un encuentro más sincero y profundo con los propios intereses y pasiones.
El auge de los viajes en solitario se refleja en datos estadísticos recientes. Una encuesta del motor de búsqueda Kayak muestra un incremento del 36% en búsquedas de vuelos para viajeros individuales en 2023, en comparación con el año anterior. Este dato no solo refleja una tendencia, sino una evolución en la mentalidad de los viajeros.
FOTO: EVERST
Pauline Frommer, directora editorial de Frommer’s y experta en viajes, comenta sobre esta tendencia: “Viajar solo puede ser tremendamente liberador. Te enfrentas a ti mismo de maneras que no son posibles cuando estás con otros. Es un acto de valentía, pero también de indulgencia personal”. La perspectiva de Frommer, compartida durante una entrevista en CNN Travel, enfatiza cómo la soledad del viaje puede funcionar como un catalizador para el crecimiento personal y la autoaceptación.
Además, los viajes solitarios promueven una independencia que se traduce en confianza y autosuficiencia. Según los testimonios recopilados por The New York Times en su artículo “How Much Did You Spend on Your Solo Vacation?”, los viajeros reportan un aumento notable en la autoestima después de manejar por sí mismos las situaciones que surgen en el camino.
El impacto emocional de los viajes en solitario también se observa en la distinción entre estar solo y sentirse solo. Esta experiencia enseña a disfrutar de la propia compañía y a valorar la independencia emocional, como señala una entrevista con viajeros en la revista Travel + Leisure. “Aprender a estar solo sin sentir soledad es uno de los regalos más grandes de viajar solo”, menciona un viajero entrevistado.
Los destinos elegidos por estos aventureros varían desde retiros tranquilos en bosques y montañas hasta el bullicio de las grandes metrópolis, donde la cultura y la historia ofrecen un sinfín de descubrimientos. Cada lugar ofrece una nueva lente a través de la cual ver y vivir experiencias que no habrían sido posibles de otra manera.
El creciente interés por los viajes en solitario también es impulsado por la tecnología, que facilita enormemente la experiencia. Las aplicaciones de viaje y las plataformas de redes sociales permiten a los viajeros investigar destinos, encontrar alojamiento y conectarse con otros viajeros y locales antes de llegar. Esta integración tecnológica transforma lo que antes podía ser una experiencia intimidante en una aventura accesible y segura.
Megan McCormick, presentadora del famoso programa de viajes “Globe Trekker”, comparte su perspectiva en una entrevista con la BBC sobre cómo la tecnología ha cambiado el viaje en solitario: “Antes, partir solo era sinónimo de aislamiento, pero ahora, con un smartphone, tienes mapas, consejos locales, traductores y una comunidad de viajeros al alcance de tu mano. Esto no solo hace que viajar solo sea menos solitario, sino que también aumenta la seguridad y la confianza”.
Otra dimensión fascinante de viajar solo es la posibilidad de sumergirse completamente en nuevas culturas. Sin las distracciones o compromisos que a menudo acompañan los viajes en grupo, los viajeros solitarios pueden dedicar más tiempo a experiencias culturales auténticas, desde aprender un nuevo idioma hasta participar en tradiciones locales. Esta inmersión cultural profunda es celebrada por muchos como una de las ventajas más enriquecedoras del viaje en solitario.
Chris Guillebeau, autor y viajero que ha visitado todos los países del mundo, refleja esta idea en su blog personal: “Cuando viajas solo, eres el arquitecto de tu propio viaje. Esto te permite sumergirte en la cultura de una manera que simplemente no es posible cuando estás atado a los deseos y necesidades de otros”.
La experiencia de viajar solo también promueve encuentros inesperados y formación de amistades en circunstancias inusuales. Estos encuentros efímeros, aunque breves, pueden ser intensamente significativos. Janice Waugh, autora del libro The Solo Traveler’s Handbook comparte en su blog que “los encuentros casuales tienen más probabilidad de convertirse en amistades duraderas cuando viajas solo, porque te acercas a estos con una mente abierta y un espíritu receptivo”.
La narrativa de viajar solo como una forma de autoafirmación y descubrimiento personal se refuerza con cada testimonio. Un estudio reciente de la Universidad de Stanford encontró que las personas que emprenden viajes en solitario reportan niveles significativamente más altos de satisfacción y bienestar emocional en comparación con aquellos que siempre viajan acompañados. Esta investigación subraya cómo la autonomía en el viaje puede llevar a un mayor conocimiento personal y a una sensación de logro.
Con cada historia y testimonio, se hace evidente que viajar solo no es simplemente un medio para ver el mundo, sino una forma de vivirlo plenamente. Cada destino se convierte en un escenario para el autodescubrimiento, cada decisión tomada en el camino refuerza la independencia y cada interacción, por breve que sea, añade una capa de riqueza a la experiencia personal.
En resumen, los viajes en solitario son mucho más que una tendencia; son un movimiento hacia la independencia emocional y el enriquecimiento personal. Son una invitación a desafiar los límites personales y a explorar no solo el mundo externo, sino también los vastos territorios internos de nuestra propia psique. Si estás contemplando tu próximo viaje, considera hacerlo solo. Podría ser la aventura que redefina tu vida.
En el vertiginoso mundo de la tecnología, los wearables han emergido con la promesa de revolucionar la forma en que cuidamos nuestro bienestar. Desde relojes inteligentes hasta pulseras de monitoreo de la actividad física, la industria ha experimentado un boom de innovación, con empresas compitiendo ferozmente por ofrecer las soluciones más avanzadas y precisas.
En un mundo donde el autocuidado se ha vuelto prioridad y donde “el gran motor del cambio es la tecnología”, como dijo el sociólogo y futurista Alvin Toffles, los wearables están democratizando el acceso a información vital sobre nuestro cuerpo y nuestro estilo de vida. Estos dispositivos no sólo registran la actividad física y las métricas de salud básicas, sino que también proporcionan análisis detallados y recomendaciones personalizadas para mejorar nuestro bienestar general.
A medida que la tecnología continúa evolucionando, el futuro de los wearables parece cada vez más prometedor. Con la integración de sensores más avanzados y el desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial para el análisis de datos, la próxima generación de dispositivos promete ofrecer un nivel sin precedentes de conocimiento y comprensión sobre nuestra salud.
Entre los pesos pesados del mercado de los wearables para la salud, destacan nombres como Apple, Garmin, Fitbit y Samsung. Cada uno ofrece su propia interpretación del dispositivo ideal para el usuario preocupado por su salud.
• Apple Watch Series 7: La última iteración del icónico reloj inteligente de Apple ha elevado aún más el listón, con funciones avanzadas de monitoreo de la salud. José Suárez, analista de tecnología wearable, señala que “su capacidad para realizar un electrocardiograma en cualquier momento y en cualquier lugar es un avance significativo en la monitorización personal de la salud”.
• Garmin Venu 2: Con un enfoque centrado en los entusiastas del fitness, el Garmin Venu 2 combina un diseño elegante con una amplia gama de funciones de seguimiento de la actividad física, incluyendo perfiles deportivos específicos, monitoreo avanzado del sueño y análisis de la frecuencia cardíaca durante el ejercicio.
• Fitbit Sense: Fitbit ha consolidado su posición como líder en el mercado de los wearables con el
Sense, que ofrece un enfoque integral para el bienestar, que incluye monitoreo del estrés, la temperatura cutánea y la variabilidad de la frecuencia cardíaca, junto con una amplia gama de funciones de seguimiento del estado físico. Sara Parga, usuaria de Fitbit Sense, comenta sobre él que “ ha cambiado mi enfoque hacia mi bienestar. Su seguimiento del estrés y el análisis del sueño me han ayudado a comprender mejor mi salud mental y a mejorar mis hábitos de sueño”.
• Samsung Galaxy Watch 4: Con su última iteración, Samsung ha combinado elegancia y funcionalidad en el Galaxy Watch 4, que ofrece un conjunto completo de características de salud y fitness, incluyendo el seguimiento del sueño, la monitorización del ritmo cardíaco y la medición de la composición corporal.
Sin duda, los wearables son herramientas poderosas que nos permiten tomar el control de nuestra salud y bienestar de una manera sin precedentes. Con esta tecnología a nuestro alcance, el futuro de la salud está en nuestras muñecas.
En la última década, hemos sido testigos de cómo ha crecido el interés sobre la forma de alimentarse, lo que ha llevado a muchas personas a buscar opciones de alimentación mucho más saludables y sostenibles.
En esto, la industria alimentaria ha jugado un papel relevante: con su producción en masa y sus prácticas poco sustentables, ha sido objeto de un escrutinio cada vez mayor, lo que también ha llevado a un cambio en la mentalidad y preferencias de consumo.
SUPERFOODS 2024: ¿UNA REALIDAD O UN MITO DEL MARKETING?
Los llamados “superfoods” han captado la atención del público por ser descritos como alimentos con propiedades nutricionales excepcionales; sin embargo, es importante recordar que el término “superfood” a menudo es más un resultado del marketing, de que un alimento se puso de moda.
Si bien muchos de estos alimentos on nutritivos y benéficos para la salud (alimentos fermentados, jengibre, champiñones, salmón, trigo sarraceno, legumbres, yuca, pistachos…), no hay que obsesionarse con su consumo. “Aunque tienen un buen perfil nutrimental, ningún alimento por sí solo puede ser la clave para una salud óptima”, observa. Por eso, no está de más recordar eso que decían las abuelas de que “hay que comer de todo” para estar bien.
Eso sí, al igual que la moda, las tendencias en alimentación van y vienen. Sin embargo, algunas de ellas han perdurado con el tiempo, consolidándose como formas de vida y elecciones conscientes, las cuales realmente benefician a los consumidores.
Nuevos electrodomésticos, ingredientes y formas de alimentación asociadas al estilo de vida se consolidan… Éstas son sólo algunas de las tendencias en nutrición que imperarán en 2024.
Cada vez más personas están adoptando una dieta basada en plantas, tanto por razones de salud como ambientales. Reducir el consumo de carne no solo beneficia la salud del individuo, sino que también ayuda a reducir la huella de carbono y a mitigar el impacto ambiental de la industria ganadera. “No creo que [los alimentos basados en plantas] reemplacen al 100 % los alimentos de origen animal, pero sí cada vez más personas los van consumiendo”, menciona Aispuro.
Una tendencia emergente es el aprovechamiento máximo de los alimentos, reduciendo al mínimo el desperdicio. Esto implica utilizar partes de los alimentos que tradicionalmente se descartaban, como cáscaras y tallos, para crear platos deliciosos o para utilizarlos como fertilizantes. “Esos residuos pueden ayudar a generar un abono para las plantas, un fertilizante natural o transformar un ecosistema de lombriz roja”, comenta Humberto Aispuro, profesor del Tec de Monterrey en un artículo publicado en Conecta
El interés en la salud intestinal está en alza, cada vez más personas se preocupan por consumir alimentos y crear hábitos que promueven una microbiota intestinal saludable. Esto incluye el consumo de alimentos fermentados, ricos en fibra y prebióticos, así como la reducción de alimentos procesados y azúcares refinados. “La relación entre la salud física y mental es innegable, y las investigaciones apuntan a que la microbiota juega un papel importante en las emociones; además, en el intestino se da la absorción de muchos nutrientes”, dice Victoria Murguía, nutrióloga.
La búsqueda de alimentos saludables y etiquetados como “sin” (sin gluten, sin lactosa, etc.) sigue siendo una tendencia sólida. Los consumidores están más atentos a los ingredientes y buscan opciones que se ajusten a sus necesidades dietéticas y preferencias personales. “
Por eso, además de cuidar el tipo de alimentos que se consumen, ahora se pone atención a la forma en que se cocina: cocciones al horno o al vapor se están volviendo populares, de ahí que electrodomésticos como la freidora de aire también ganen adeptos.
que todas las ciudades deberían copiar para poder vivir mejor
Por: Editorial Bonavio
La vida urbana, a menudo representada en el cine como un escenario distópico lleno de retos, refleja una realidad que enfrentamos cada vez más conforme avanza el siglo XXI. Según un informe reciente de las Naciones Unidas, para el año 2050 se espera que el 66% de la población mundial resida en áreas urbanas, un aumento significativo desde el 54% actual. Esto implica que en las próximas tres décadas, aproximadamente 2,500 millones de personas adicionales vivirán en megalópolis que enfrentarán desafíos enormes. Ante esta perspectiva, expertos en urbanismo, arquitectura y movilidad, junto con algunos líderes políticos, han estado trabajando incansablemente para mitigar los efectos adversos de un crecimiento urbano no planificado sobre nuestra calidad de vida y el medio ambiente.
El enfoque hacia las “Ciudades Inteligentes” ha cobrado impulso como una posible solución a los problemas de superpoblación en las grandes ciudades. Este modelo aún en evolución ha visto el surgimiento de diversos proyectos diseñados para mejorar la vida urbana, y algunos de ellos ya están mostrando resultados positivos. Aunque existen innumerables iniciativas alrededor del mundo, hemos seleccionado algunas de las más innovadoras y efectivas que demuestran cómo las ciudades pueden transformarse en espacios más acogedores y sostenibles.
Nueva York ha adoptado la iniciativa de cerrar partes de la ciudad al tráfico vehicular los domingos, promoviendo el uso de bicicletas y actividades al aire libre. Inspirada por el éxito de Yakarta, esta medida busca reducir la contaminación y fomentar un estilo de vida saludable entre los ciudadanos.
SOLAR ROADWAYS EN ROTTERDAM, HOLANDA
Rotterdam ha llevado la idea de los caminos solares un paso adelante con un proyecto piloto que convierte las ciclovías en generadores de energía solar. Este innovador uso de tecnología limpia alimenta la iluminación pública y promueve la conciencia ambiental.
INCENTIVOS PARA CICLISTAS EN LYON, FRANCIA
En Lyon, el gobierno local ha lanzado un programa que ofrece subsidios para la compra de bicicletas eléctricas y bonificaciones para quienes elijan la bicicleta como su medio de transporte principal. Este esfuerzo busca reducir la dependencia del automóvil y fomentar la movilidad sostenible.
1. 4. 7. 5. 8. 6. 9. 2. 3. CAR FREE SUNDAYS EN NUEVA YORK
TECHOS VERDES EN ZÚRICH, SUIZA
Siguiendo el modelo de Toronto y Copenhague, Zúrich ha implementado una política que requiere la instalación de jardines en los techos de todos los nuevos edificios comerciales y residenciales grandes. Estos espacios no solo embellecen la ciudad, sino que también contribuyen a la gestión del agua de lluvia y proporcionan aislamiento térmico.
PROYECTO DE BARRIOS
COMPACTOS EN MELBOURNE, AUSTRALIA
Melbourne está transformando su planificación urbana con el objetivo de que todos los servicios esenciales estén a no más de 20 minutos a pie de cualquier hogar. Este enfoque busca reducir la necesidad de desplazamientos largos y fomentar comunidades más cohesionadas y sostenibles.
RECUPERACIÓN DE RÍOS URBANOS EN BRISBANE, AUSTRALIA
Inspirado por el éxito del proyecto Cheonggyecheon en Seúl, Brisbane ha rehabilitado ríos que antes estaban contaminados, transformándolos en atracciones centrales de la ciudad con senderos para peatones y ciclistas, mejorando significativamente la calidad ambiental y estética de sus espacios urbanos.
PROGRAMA CERO RESIDUOS EN HELSINKI, FINLANDIA
Helsinki se ha propuesto alcanzar un objetivo de cero residuos mediante políticas que promueven la reutilización y el reciclaje intensivo. Esta estrategia ha incluido la implementación de sistemas avanzados de separación de residuos y la promoción de la economía circular a nivel local.
TRANSFORMACIÓN DE TERRENOS BALDÍOS EN GLASGOW, ESCOCIA
Glasgow ha iniciado un programa para convertir terrenos baldíos en áreas verdes y espacios comunitarios, promoviendo la participación local en el diseño y mantenimiento de estos espacios. Este proyecto no solo mejora el entorno urbano, sino que también fortalece el tejido social de la comunidad.
INICIATIVA DE HUERTOS URBANOS EN LIMA, PERÚ
Lima está fomentando la creación de huertos urbanos en toda la ciudad para mejorar la seguridad alimentaria y proporcionar espacios verdes en áreas densamente pobladas. Estos huertos no solo suministran productos frescos a los residentes, sino que también ofrecen lugares de encuentro comunitario y educación ambiental.
Buenas tardes”, saludó Bertha cortésmente a los grey nomads de conversación viva que degustaban su comida en una de las estaciones de carretera que se encuentran diseminadas a lo largo de los solitarios caminos en el norte de Australia…
Los grey nomads es como se conoce a los numerosos retirados australianos que eligen viajar en una casa móvil con todas sus posesiones para disfrutar de su periodo dorado. Bertha solía encontrárselos en varios descansos en el camino y se entretenían mutuamente mientras caía la tarde sobre el áspero entorno del norte.
Sin reservas, era habitual que estos amigables ancianos preguntaran a la singular mujer que recorría Australia en bicicleta. Ella les entregaba folletos coloridos que recordaban antiguas pirámides. Este ritual se llevaba a cabo en casi todas las paradas del camino polvoriento. Rostros diferentes bajo canas brillantes; la misma curiosidad hacia Bertha; el mismo desinterés minutos más tarde.
En esta ocasión, ella los observaba de reojo mientras acababa de beber unas gotas del agua que dosificaba con una determinación casi castrense. Esperaba a que el diálogo cesara y a que la
reunión improvisada de compañeros desconocidos se disipara poco a poco.
Se aseguró de no ser vista y se acercó al contenedor donde poco antes esos ancianos habían desechado los restos de su comida monótona. No dudó: sacó una bolsa sellada que contenía tres rebanadas de pan blanco y se las comió. Era la primera vez que consumía restos de comida del basurero, pero no sería la última.
A sus 52 años, Bertha Corte, una destacada ecologista que fue ejecutiva de las Naciones Unidas en su país por más de una década, acababa de hacer algo que jamás había imaginado. Lejos de sentir vergüenza, esta pequeña mexicana todavía lo considera un acto de dignidad. “Me prometí a mí misma que preferiría morir antes que pedirles un pedazo de pan. A nadie. Si ellos me ofrecían, aceptaba, pero fueron muy pocos. Por dignidad decidí no pedir; no soportaría que dijeran ‘allí viene esa mexicana pidiendo’. No quería...”.
Este orgullo fue precisamente lo que en 2012 la impulsó a recorrer 15.547 kilómetros, el contorno completo del colosal australiano, en bicicleta, sola con sus pensamientos y un profundo amor por México que deseaba proclamar a todo pulmón.
Su punto de partida fue Nueva Zelanda. Allí tomó su primer paseo en bicicleta y enfrentó su primer “coraje”. Bertha buscaba libertad para desplazarse de un lugar a otro y la encontró sobre dos ruedas. Al principio, solo deseaba pasear por los alrededores de Wellington y explorar algunos pueblos vecinos. Luego decidió emprender una ruta de 1.000 kilómetros. La aventura que transformaría su vida ya estaba en marcha. A mitad de camino, en un café, tuvo un encuentro tenso con un neozelandés que, creyendo ser sincero, la humilló profundamente al saber que era mexicana: “Ay, qué pena. Porque los mexicanos ya no vale la pena ni perder el tiempo con ustedes. Son una raza perdida”.
Quizá esas palabras no sean literales, pero así resuenan todavía en su mente cuando las recuerda, sin ocultar su enfado. Ya había participado en diálogos llenos de clichés y prejuicios sobre México, pero eso había sido demasiado… y ella iría aún más lejos: sería la primera mujer en dar la vuelta a Australia en bicicleta completamente sola. Y lo haría llevando información sobre su amado país para liberar a los australianos de sus prejuicios e invitarlos a descubrir la belleza más allá de la sangre y la violencia que retratan los noticieros internacionales al hablar de México.
Regresó a México para seguir con el plan meticuloso que había diseñado, que incluía casarse con un amigo australiano. Se preparó pedaleando diariamente cerca de su hogar, en Colima, y reabrió la agenda con todos los contactos de su etapa como activista medioambiental y en la ONU, muchos de ellos ahora en cargos políticos importantes.
Llevaría el mensaje de las maravillas de México a todos los rincones de Australia, y lo haría arropada por los suyos. O eso pensaba. Cansada de esperar respuestas burocráticas, decidió comenzar la primera etapa, la que la llevaría por la zona más poblada y menos áspera del país, sin contar con apoyos.
“Ellos querían ver que sí lo podía hacer, porque me dijeron: sabemos que eres ecologista pero no ciclista. Y tenían toda la razón. Sí tenía mucha condición física porque tenía ocho años haciendo spinning. Me sentía fuerte. Lo único es que tenía miedo: el miedo de vencer la carretera y a las condiciones de la carretera, que no son las mismas de un gimnasio. Dije, ok, me voy a probar a mí y a ellos que puedo hacer esos 3.000 km —el primer tramo de viaje—; ya los había preparado y ya estaba dispuesta a hacerlo. Lo que ni me imaginaba, ya que confié absolutamente en que me iban a apoyar mis compañeros a los que yo había apoyado durante casi ocho años en su ascenso político, es que me dejarían sola. En ese momento pensé: si logro llegar de Sidney a Cairns, ya está”.
Al llegar a la primera meta, el retraso en responder a sus peticiones de apoyo se convirtió en silencio. Un silencio muy incómodo. Ella imaginaba un gran regocijo al verla llegar pero, sobre todo, esperaba encontrar por fin el apoyo que necesitaba para recorrer los más de 12.000 kilómetros que le quedaban por delante; con presupuesto para contar con una comitiva que le proveyera de agua, comida y compañía, y con un revuelo mediático que diera sentido a su proyecto. Los emails y llamadas sin contestar auguraban otro destino. Estaba sola. “Yo estuve esperando muchos días a que me respondieran. Había salido el 19 de febrero de Sidney y llegué el 9 de abril. En total, fueron 51 los días que hice para llegar hasta esta primera parada. Una vez allí, estuve esperando del 9 de abril hasta el día 23 para que respondieran mis amigos en México. No lo hicieron”. Un equipo de ciclistas que contaba con todo el
apoyo logístico para realizar el recorrido de forma segura estaba a punto de salir. Se lo dejaron claro: sin dinero —el que ella esperaba recibir de sus compatriotas—, no podría ir en su grupo. Pero Bertha decidió seguirlos de cerca.
Este desafío marcó el comienzo de su gran aventura, la que relata en El Segundo Tiro, la segunda parte de su libro Un desafío a la mexicana (2019), donde el optimismo se convierte en soledad, y ese vacío en un reto que prácticamente nadie estaría dispuesto a afrontar.
“Yo sabía todo: de dónde iban a salir, cuál era la ruta, cuáles eran las pausas… Y me fui detrás de ellos, pero era una locura. Yo, de reojo, los veía. En el primer poblado que los alcancé ellos salían a las 7 de la mañana. Si yo salía a esa misma hora, ellos terminaban los 100 km que tenían que recorrer a las 2 de la tarde y yo llegaba a las 8 de la noche. Porque ellos iban a todo lo que daban: eran profesionales, casi todos ya viejos, pero que habían hecho toda su vida ciclismo. Pero lo más importante: no iban cargando nada.
Iban apoyados, les hacían de comer… Y yo iba cargando mi vida en la bicicleta”.
Durante este tramo, la soledad y el miedo pesaban más que los 12 kilos que llevaba a su espalda, más otros tantos de alforjas que se fueron llenando según fue descubriendo que iba a necesitar más cosas de las que pensaba para llegar viva a su destino. Llevaba una placa solar para poder cargar el móvil con el que iba documentando su solitaria travesía y, sobre todo, agua. Mucha agua. “Al principio, llevaba una botella o dos litros máximo. Terminé cargando por lo menos seis litros de agua y comida para tres días. En el pri-
mer tramo prácticamente no cargaba comida porque en el siguiente pueblito compraba. Pero poco a poco esos pueblitos desaparecieron y entonces tenía que llevar comida para tres días que eran los que yo tardaba en llegar”.
Lo que también crecía eran los kilómetros que recorría en cada etapa. “Generalmente, yo buscaba los pueblos que estaban más o menos cada 70 o 75 kilómetros. Pero poco a pocotuve que incrementar los kilómetros porque los pueblos empezaron a ser muy lejanos o muy cercanos. Por ejemplo, a 35 kilómetros había un pueblo, pero yo decía: no puedo nada más rodar 35; tengo
En la primera historia, los protagonistas fueron los dingos, perros salvajes de Australia. O quizá es más justo decir que la protagonista fue, una vez más, la valentía de Bertha y sus ganas de sobrevivir. Ocurrió en el camino de Cairns a Darwin. “Era una de esas áreas de descanso en las que generalmente había casas rodantes. Casualmente en esa no había nadie ni nada más que un viejo toldo con su mesa de picnic. No tardé en empezara escuchar aullar a los perros salvajes”. A pesar de que le habían advertido, nunca habría imaginado lo que le tocó vivir aquella noche: “Después de hacer fuego, los empecé a escuchar más cerca y a ver sus ojitos. Con la luz de la fogata y con la luna llena, ellos me veían perfecto. Me dio te-
que aventarme al que sigue. Pero el que sigue ya estaba a 60. Entonces, ya en total en el día eran 95 kilómetros los que tenía que rodar. Así, poco a poco se fueron incrementando de 75 a 90 a 100 a 120 a 150...”.
Carteles anunciando distancias infinitas. Fotos en todos los ángulos y encuadres posibles de su bicicleta gritando a voces la palabra soledad... Imágenes que hablaban con una gran elocuencia y que se iban vertiendo en un blog en el que los relatos comenzaron a distanciarse cada vez más pero, sobre todo, a volverse mucho más intensos. Miedo al hambre y a la sed. A los road trails de más de 50 metros y su furioso rugido rompiendo el silencio del camino. Itzel y Astro, sus hijos, esperaban con inquietud a miles de kilómetros cada actualización. Así se enteraron de las dos veces que estuvieron a punto de perder a su madre.
rror”. Bertha, como haría en otras ocasiones en las que temió por su vida, se defendió con su bicicleta. Se la ató a la espalda para protegerse y usó su bomba de aire y una cazuela para hacer ruido y espantar a los animales. La tensión duró horas. “Empecé a tener mucho frío por el miedo. Me metí en el sleeping con todo y mis tenis, medio tapada, y los veía que ahí seguían. Cada vez que aullaban yo les gritaba más fuerte. Cuando ya no faltaba mucho para amanecer, me quedé dormida”. Bertha solo recuerda abrir los ojos con
la claridad del día y sentir el olor de su propio miedo, que le acompañó unos kilómetros más hasta que pudo deshacerse de él bajo el agua de una ducha que le supo a gloria.
Su última gran prueba era atravesar dos desiertos interminables: el desierto rojo del norte —“Yo no me había preparado mentalmente para ése”— y el Nullarbor. En ambos recorridos se sorprendió por la fiereza de las termitas, la presencia de las alimañas, la basura olvidada en medio de la carretera pero,
sobre todo, por el gran número de canguros muertos que se topó a lo largo de todo el camino, algo que recuerda con desconcierto, pero también con asco por el mal olor que desprendían. Ese olor se quedó impregnado en sus fosas nasales hasta hoy.
Pasando Nullarbor, ya solo quedaba un saltito más. Un saltito de 4.000 kilómetros, pero una anécdota en la epopeya que Bertha estaba dejando escrita para la posteridad. Para este momento ya contaba con un motor para el sprint final, un mantra con la suficiente fuerzacomo para tirar de ella hasta la meta; la frase que un viejo ciclista australiano le había regalado en el camino: “Si logras llegar a Sidney, vas a ser la primera mujer que lo logra (dar la vuelta a Australia en bicicleta) completamente sola”.
Y lo hizo. “Llegué casi a la una de la mañana al puente de Sidney. No había nadie esperándome […] Cuando llegué, me dijeron por dónde tenía que subir; era una subidita bien pesada, que fue, creo, la más pesada. Cuando llegué a la cima, que está como en las rocas, me volteé a ver Sidney desde lo alto y dije —le ruedan lágrimas por las mejillas al recordarlo— ¡Lo logré!”.
Bertha Corte volvió poco después a México, exhausta, y con 15 kilos menos, pero eso no le impidió volver a subirse a la bicicleta para recorrer otros 13.000 kilómetros, prácticamente todo el perímetro mexicano. Esta vez lo hizo tranquilamente, en varias etapas, con alegría, y arropada por los suyos.
En 2020 la pandemia le impidió conquistar un nuevo continente. Tenía planeado dar la vuelta a Europa, acompañada de ciclistas de todos los estados de México, incluida la autora de este reportaje, muchos de ellos amigos que fue haciendo por el camino en sus periplos por tierras mexicanas contando al mundo su historia.
Ésta habría sido, quizá, una de sus últimas aventuras kilométricas ciclistas. Sus inquietudes han cambiado mucho. En la actualidad, Bertha tiene un proyecto artístico interviniendo telas y tejidos que ha ido recabando durante toda su vida. En apariencia, una pasión muy alejada de las bicis, pero con el trasfondo ecologista que ha acompañado los sueños de toda su vida.
Un día cualquiera en Ciudad Universitaria cuando, de repente, la voz de Octavio Paz resuena a través de los altavoces. Estudiantes y profesores detienen sus quehaceres por un instante para escuchar: “El poema es un caracol donde resuena la música del mundo, y metros y metáforas no son sino correspondencias, ecos, de la única música”, se escuchaba decir al Nobel de Literatura. No se trataba de un espectro, sino de una grabación de la serie Voz Viva.
Voz Viva es un delicado secreto. Se trata de un proyecto que comenzó en 1961, pero que se reavivó a principios de 2023, cuando la UNAM liberó la colección y permitió que todos tuvieran acceso a estas joyas, cuya misión es capturar la esencia de los escritores y pensadores más emblemáticos de México y América Latina.
“Siempre que escucho estas grabaciones, siento que el tiempo se detiene”, explicaba a El Universal Myrna Ortega, encargada de la digitalización del proyecto, mientras supervisa el proceso meticuloso de convertir cintas antiguas en archivos digitales. “Es como si los autores volvieran a la vida frente a nosotros”.
Este proyecto, nacido en el seno de la Universidad Nacional Autónoma de México, ha ido evolucionando a lo largo de los años, adaptándose a las nuevas tecnologías para mantener vivo el legado cultural. La serie Voz Viva no solo incluye literatura; se ha diversificado para incorporar música y testimonios políticos, pintando un panorama más amplio de la cultura mexicana y latinoamericana.
Desde las narrativas del Boom Latinoamericano, como las de García Márquez y Var-
otro
El archivo que recoge la voz de Octavio Paz y otros grandes de la literatura mexicana
Por: Editorial Bonavio
gas Llosa, hasta los versos melancólicos de Sor Juana Inés de la Cruz, la serie ofrece un archivo sonoro que es un verdadero tesoro nacional
Rosa Beltrán, coordinadora de Cultura UNAM, recuerda la primera vez que escuchó una de estas grabaciones. “Fue la voz de Carlos Fuentes leyendo La región más transparente. Su voz tenía una autoridad, un poder que transformaba completamente el texto. Fue un momento revelador”, compartía en una entrevista a El País. Estos momentos de revelación son precisamente lo que Voz Viva busca provocar: una conexión directa, casi física, con las palabras y sus autores
La transición hacia lo digital ha sido crucial, permitiendo que estas voces trasciendan el tiempo y el espacio. “Las nuevas generaciones encuentran en estas grabaciones una forma distinta de conectar con nuestra historia literaria y cultural. No es lo mismo leer un poema de Paz que oírlo en su propia voz”, explica a El Universal Benito Taibo, director de Radio UNAM, quien también destaca la importancia de estas grabaciones en la educación y en la preservación de la lengua.
La iniciativa de digitalización ha sido un desafío técnico y logístico, involucrando a expertos en sonido y tecnología para asegurar que las grabaciones no sólo se preserven, sino que también mejoren en calidad. “Cada archivo que digitalizamos es una pieza del puzzle cultural de nuestro país”, dice Ortega, mostrando una cinta recién convertida. “Y cada pieza es esencial para entender quiénes somos”.
El proyecto Voz Viva no solo es una cápsula del tiempo; es un puente entre generaciones, una herramienta para educadores y un recordatorio de la riqueza cultural de México y América Latina. Como lo describe Taibo, “es más que un archivo, es una invitación a escuchar y aprender de aquellos que, aunque ya no están con nosotros, siguen teniendo mucho que decir”.
En una era dominada por lo visual, Voz Viva trata de recuperar el placer de cerrar los ojos y escuchar.
FOTO: ROBERT FALCÓNEl boom de los juegos de mesa y su utilidad en la vida real
Con el tablero puesto sobre la mesa, las figurillas colocadas, los dados preparados y las cartas repartidas, la noche de juegos que ya es toda una tradición inicia. Las partidas pueden durar desde unos minutos hasta horas, dependiendo del juego y el número de participantes.
Quizá para muchos este plan suene un tanto aburrido o anticuado; pero el mundo de los juegos de mesa y sus fanáticos está en pleno crecimiento, hecho que la pandemia propició: el encierro obligatorio provocó que las personas buscaran opciones para entretenerse, pasar el tiempo y convivir con los pocos que podían, y los juegos de mesa se convirtieron en un medio para lograrlo. Ahora, ya no solo son una forma de divertirse en reuniones familiares o citas determinadas, sino también una alternativa de salida y convivencia para muchos grupos de amigos.
Uno de los aspectos más atractivos del mundo de los juegos de mesa es su variedad, lo que no los hace exclusivos de los “frikis”, personas que son muy relacionadas con juegos como Magic, Warhammer o el clásico Dungeons & Dragons.
Por: Editorial Bonavio
Hay juegos para prácticamente todas las edades, con tiempos de duración que van de minutos hasta horas, con distintos niveles de dificultad, de diversos tipos (cooperativos, eurogames, ameritrash, de rol, etc.) y con temáticas muy variadas. Incluso, franquicias o universos cinematográficos y hasta literarios tienen juegos de mesa: Monopoly cuenta con versiones de Star Wars, Pokemon, Rick and Morty y hasta una versión socialista; del juego Risk hay versiones de Juego de Tronos y el Señor de los Anillos; y hasta existen juegos inspirados en la obra de Lovecraft (Arkham Horror) y Orgullo y Prejuicio la novela más conocida de Jane Austen (Marrying Mr. Darcy).
“Me gustan los juegos de estrategia que tienen un factor de azar, ya que te ponen a pensar un poco más y da más variedad al juego”, cuenta Eduardo Flores, aficionado a los juegos de mesa.
Eduardo ha pagado por un juego hasta 2,000 pesos aunque sabe que existen opciones mucho más costosas, y más si se habla de juegos que cuentan con expansiones o ampliaciones: partes que se agregan a la base para variar el contenido o formas de jugar, como lo hace el tan conocido Catan. Esto hace que la inversión para completar un solo juego y ampliar su experiencia crezca.
De acuerdo con Statista, el valor del mercado mundial de los juegos de mesa se estimó en 7 mil 200 millones de dólares en 2017 y para 2023 tenía un alcance de 12 mil millones de dólares. En México, se espera que, en 2024, los ingresos en este mercado alcancen los 104 millones de dólares, con una tasa de crecimiento anual prevista de 1.61%.
“Si has decidido entrar en el mundo de los juegos de mesa, debes aceptar que es bastante costoso; según el lugar en donde te encuentres y podría ser más o menos costoso al encontrar un juego de mesa en tu idioma”, dice en su canal de TikTok el fanático de los juegos de mesa @memebg_. Sin embargo, para muchos es una inversión que se amortiza con el tiempo gracias a que son rejugables, además de que resultan ser una opción mucho más barata frente a otros planes de ocio fuera de casa.
Y hablando de TikTok, el auge de los juegos de mesa también es notorio en internet. Basta echar una mirada a la web para encontrar no solo blogs de tiendas de juegos de mesa o aficionados, sino también videos en Youtube y TikTok de tutoriales, reseñas, lanzamientos, opiniones sobre un tema específico de este mundo y hasta partidas entre creadores de contenido (Twitch se ha convertido en una excelente plataforma para esto).
Pero además de proporcionar horas de diversión, los juegos de mesa ofrecen una serie de beneficios que trascienden el mero entretenimiento. “Fomentan la toma de decisiones y promueven el aprender de los errores. Hay algunos juegos que se asemejan a la realidad y pueden fomentar el desarrollo de habilidades como la negociación”, opina Eduardo.
La mejora tanto de habilidades cognitivas –resolución de problemas, toma de decisiones y planificación estratégica–como de habilidades sociales –comuni-
Ante tantas opciones, quizá se piense que entrar en este mundo es complicado, pero nada más erróneo.
Si no se sabe por dónde empezar, una buena opción sería elegir entre los juegos de mesa más populares. En su canal de Youtube, La Casa de Dam (con más de 58,000 suscriptores), Dam enlista los juegos de mesa más vendidos de todos los tiempos, y sí, en esta lista se encuentran clásicos como el ajedrez, Monopoly (en todas sus versiones), Scrabble, Jenga, Risk, Trivial, Clue, Taboo, Battleship, Conecta 4 y Uno.
Pero también se apuntan juegos modernos, que seguro son fáciles de encontrar en tiendas (tanto físicas como virtuales) y hasta en cafeterías y bares cuyo concepto gira en torno a los juegos de mesa, ya que hasta su personal está capacitado para enseñar a los clientes a cómo jugar el juego que prefieran. Los juegos modernos más vendidos son:
cación, cooperación y trabajo en equipo– son algunos de los beneficios que se relacionan a los juegos de mesa.
Según una investigación del grupo de Neuropsicología, genes y ambiente (NeuroPGA) de la Universidad de Lleida, los juegos de mesa ayudan en los procesos cognitivos en niños y también ayudan a evitar el deterioro de los mismos en mayores de 65 años. Otras líneas de investigación (como la que forma parte del programa de la consejería de educación de la Comunidad de Madrid) apuntan a los beneficios que se tienen en la gestión de emociones.
Ante esto, no es para nada raro que muchos docentes empleen los juegos de mesa como herramienta pedagógica para desarrollar habilidades, formar valores, mejorar la relación entre compañeros y hasta para hacer más digerible algún tema en específico. “He usado juegos de mesa para ampliar vocabulario, como la trivia o el memorama, y para incentivar la creación de cuentos o la improvisación de historias, para lo que he empleado el juego llamado Dixit [juego de cartas con ilustraciones artísticas]. Los juegos de mesa son buenos recursos para enganchar a los estudiantes; para muchos de ellos es más fácil involucrarse en la clase con estos recursos”, comenta Vannesa Alonso, docente de secundaria.
• Carcassone. Un juego rápido de explicar y de jugar en el que hay que colocar losetas para construir un terreno que ayude a ganar el máximo de puntos.
• Catan. Una muy buena puerta de entrada al mundo de los juegos de mesa. Es un juego de estrategia que, por medio de la generación de recursos y la creación de caminos con estos, crea momentos de tensión y competencia.
• Ticket to ride. Un juego entretenido en el que el objetivo es crear conexiones con los trenes para sumar puntos y lograr los contratos de tu partida. Concentración y un poco de suerte son la dupla que se necesita para salir victorioso.
• Pandemic. Para iniciarse en los juegos cooperativos es una buena opción. Y aunque el juego base se puede quedar corto para los más experimentados, cuenta con varias versiones que mejoran la experiencia.
En el mundo del lujo, donde la exclusividad y la sofisticación han dominado las percepciones tradicionales, emerge una nueva faceta que redefine los estándares: la sostenibilidad.
Por: Editorial Bonavio
Esta transformación no es solo una tendencia pasajera, sino un movimiento robusto hacia una práctica más consciente y responsable en la producción de bienes de lujo. Hoy, el verdadero lujo no solo se mide por la rareza o el costo, sino por el impacto ético y ambiental de su creación.
La industria del lujo ha tomado nota de la creciente demanda de sostenibilidad, con marcas pioneras que están cambiando sus procesos productivos para minimizar su huella ambiental. La sostenibilidad, en este contexto, se extiende más allá del simple uso de materiales eco-amigables. Involucra una revisión integral de la cadena de suministro: desde la adquisición ética de materias primas hasta prácticas de producción que reducen el consumo de agua y energía, y políticas de desperdicio cero.
Un ejemplo emblemático es el de la casa de moda Gucci, que en recientes colecciones ha implementado una política de neutralidad de carbono. La marca no solo ha compensado sus emisiones mediante proyectos de reforestación, sino que también ha innovado en el uso de cueros reciclados y bioplásticos. Estas acciones son un claro testimonio de cómo el lujo puede coexistir con la responsabilidad ambiental, sin sacrificar su esencia de exclusividad.
Adoptar la sostenibilidad no solo beneficia al planeta, sino que también tiene un impacto directo en el valor de mercado de las marcas de lujo. Los consumidores de hoy, especialmente las generaciones más jóvenes, están dispuestos a invertir en marcas que demuestren un compromiso genuino con la sostenibilidad. Este cambio en la percepción del consumidor está motivando a las empresas a adaptarse a nuevas realidades de mercado, donde la transparencia y la ética son tan valoradas como la calidad y el diseño.
El análisis económico revela que las marcas que se adelantan en la implementación de prácticas sostenibles disfrutan de un crecimiento en su base de clientes y, a menudo, pueden comandar precios premium. Un estudio de Nielsen encontró que el 66% de los consumidores globales están dispuestos a pagar más por productos sostenibles, un porcentaje que aumenta al 73% entre los millennials.
El aspecto social de la sostenibilidad en el lujo es, quizás, el más revolucionario. Tradicionalmente, el lujo ha sido sinónimo de opulencia y, a veces, de un consumo desmedido. Sin embargo, en la
era de la información y la responsabilidad social, esta imagen está cambiando. Los consumidores no solo buscan productos de alta calidad, sino que también valoran las historias detrás de ellos: quién los hace, cómo y por qué.
Las redes sociales y las plataformas de comunicación han jugado un papel crucial en este cambio. Marcas que antes se mantenían herméticas ahora celebran su transparencia, compartiendo detalles sobre sus esfuerzos de sostenibilidad. Campañas de marketing y documentales que destacan la artesanía local, las técnicas heredadas y el impacto positivo en las comunidades locales están moldeando una nueva imagen del lujo.
Uno de los efectos más interesantes de este cambio es cómo redefine la relación entre marca y consumidor. El lujo sostenible crea un diálogo, un intercambio de valores y aspiraciones que va más allá de la transacción comercial. Esto no solo fomenta una mayor lealtad a la marca, sino que también convierte a los consumidores en defensores activos de las prácticas sostenibles.
El nuevo lujo es verde, ético y consciente. Atrás quedaron los días en que el consumo de lujo se medía solo por el esplendor visible. Hoy, el verdadero lujo está en la armonía con el entorno, en la contribución a un futuro sostenible y en la alineación con los valores éticos de los consumidores. Las marcas que entienden y actúan en consecuencia no solo liderarán el mercado, sino que también serán parte de la solución a nuestros desafíos ambientales y sociales más apremiantes.
Esta evolución del lujo representa no solo una oportunidad de negocio, sino un imperativo moral. En un mundo donde cada elección de consumo cuenta, el lujo sostenible no es solo deseable, es esencial. Así, en la intersección de lo exclusivo y lo ecológico, el lujo se reinventa, prometiendo no solo belleza y calidad, sino también esperanza y responsabilidad para las generaciones futuras.
En la intersección de la tradición y la vanguardia de la moda, los tejidos indígenas están emergiendo como protagonistas dentro del lujo y la alta costura. Más allá de ser simplemente elementos decorativos, estos tejidos llevan consigo historias profundas de cultura, identidad y técnica, entrelazadas en cada hilo por manos expertas que han pasado su saber a través de generaciones.
Carla Fernández, una diseñadora mexicana, ha sido una figura clave en el renacimiento y la revalorización de los tejidos indígenas en la moda contemporánea. Con un enfoque radical en la sustentabilidad y el comercio justo, Fernández colabora directamente con más de 200 artesanos de todo México, preservando técnicas textiles ancestrales mientras innova en sus diseños. “Mi moda es política”, dice Fernández en una entrevista para Vogue México. “A través de mis colecciones, busco cambiar la percepción sobre la moda indígena y demostrar que es contemporánea, relevante y necesaria”.
En Guatemala, la diseñadora Isabella Springmuhl, quien ha destacado en escenarios internacionales, incluido el London Fashion Week, trae a la luz la riqueza de los textiles guatemaltecos. Springmuhl, notable por ser la primera diseñadora con síndrome de Down en participar en dicha semana de la moda, incorpora en sus colecciones las vibrantes telas tejidas por artesanos locales, celebrando así su herencia cultural. “Cada pieza que diseño lleva un pedazo de mi corazón y mi cultura”, expresa Springmuhl en conversación con BBC.
Mientras tanto, en el sur de América, la diseñadora argentina Agostina Bianchi ha sido pionera en el uso de técnicas de tejido artesanal para crear prendas de alta moda. Bianchi enfatiza la importancia del trabajo manual y la identidad cultural en sus diseños. “Los tejidos no solo cuentan historias, también construyen futuro”, menciona en una entrevista para Vogue Latin America, destacando cómo integra métodos tradicionales de tejido en piezas modernas y sostenibles.
Estos diseñadores no solo están transformando la alta costura con su inclusión de técnicas indígenas; también están fomentando un modelo de negocio que respeta y enaltece el trabajo de las comunidades artesanas. Este enfoque no solo ayuda a preservar las técnicas artesanales en peligro de extinción, sino que también asegura un medio de vida justo para los artesanos, poniendo la ética en el corazón de la alta moda.
Este movimiento hacia la integración de los tejidos indígenas en la moda de lujo es un recordatorio poderoso de que la moda no solo es estética; es también un medio de expresión cultural y social. La alta costura está encontrando en las tradiciones textiles una fuente rica de inspiración, narrativa y autenticidad, redefiniendo lo que significa ser lujoso y moderno en el mundo contemporáneo.
Por: Editorial Bonavio
Claudia Quiroz Fernández no es una visionaria común; su fascinación por el diseño del mañana la ha llevado a ser una figura pionera en el campo del futuro estratégico. Fundadora y directora de Think Foresight, y certificada como Future Strategist Internacional en 2019 por el ICFS en Estocolmo, Claudia se ha destacado por su habilidad para prever y moldear el futuro. Es miembro de la Asociación Global de Futuristas Profesionales, del World Future Society en Estados Unidos y de la Federación Mundial de Estudios de Futuros y Prospectiva en la Unión Europea, donde aporta con su perspectiva única en el diseño de escenarios futuros y la estrategia de negocios.
Su trayectoria no siempre estuvo ligada al futurismo. Originalmente, Claudia se adentró en el mundo del diseño en una época donde la estética predominaba sobre la funcionalidad. Sin embargo, su inconformidad con esta premisa la llevó hacia la semiótica y la etnografía, disciplinas que abrieron un nuevo camino hacia el entendimiento de los cambios sociales y los valores emergentes. Este viraje no solo enriqueció su perspectiva profesional, sino que también marcó el inicio de su compromiso con la prospectiva y el diseño estratégico del futuro.
Hoy en día, Claudia se dedica a fusionar su experiencia en diseño con su pasión por anticipar y construir futuros. A través de metodologías de ideación, análisis del entorno y diseño de estrategias, ella ayuda a las organizaciones a “future-proof” sus negocios. Con una mirada siempre puesta en el porqué de los cambios y en cómo nuestras acciones actuales modelan el mañana, Claudia Quiroz Fernández no solo predice el futuro; lo diseña.
¿Cuál fue el momento o experiencia que te impulsó a dedicarte a la prospectiva y el análisis estratégico del futuro?
Siempre me ha gustado saber el porqué de las cosas: tenía la inquietud de saber por qué se interpretan las simbologías y anuncios gráficos, lo que me llevó a hacer una maestría en semiótica. De igual manera, siempre me interesó entender las tendencias, y de ahí vino mi interés por estudiar de una manera más profesional y aterrizar estrategias más futuristas para las empresas que den resultados tangibles.
¿Qué desafíos enfrentaste al ser la pri-
mera latinoamericana en obtener la certificación como “International Certified Future Strategist”?
El primer reto fue crear una campaña de alfabetización sobre el futuro. Primero había que enseñar qué es y para qué sirve. Realizamos varias actividades con jóvenes emprendedores para poco a poco ir superando la cultura y, de esta manera, poder entender que esto podría ayudar, no solo a un proyecto o empresa, sino a una ciudad o región enteras, incluso a un país.
Como fundadora de uno de los primeros despachos consultores en prospectiva en México, ¿qué retos consideras que son únicos para el contexto latinoamericano en el campo de la estrategia y el futuro?
Hay efectivamente pocos despachos en México. Esto es debido a los rankings de competitividad. Es importante analizar qué tan preparado está ese país y su gobierno, sobre todo respecto a su visión de largo plazo, y su capacidad de anticipar e imaginar diferentes futuros o alternativas buenas o malas. Es difícil encontrar visiones así en los países latinoamericanos, pero cada vez se va viendo más.
¿Podrías describir un proyecto o colaboración que haya sido particularmente significativo o transformador en tu carrera?
He participado en las dos grandes visiones en el estado de Guanajuato: el Plan Municipal de Desarrollo León hacia el Futuro Visión 2045 y Plan Estatal
de Desarrollo Guanajuato 2050, y eso ha sido un gran logro para mí. El poder enseñar a algún estudiante esta fase cero de entender qué necesidades hay y qué expectativas vamos a crear. Trabajar en eso ha sido de mis mayores satisfacciones.
¿Cómo integras el diseño y la semiótica en la gestión estratégica?
Entendiendo que un diseñador es un diseñador de soluciones, y para ser un diseñador de soluciones hay que saber entender qué se está gestando. Pero también llegar a una parte concreta lo cuál te llevará al diseño de estrategias y de acciones.
Has trabajado como asesora para diversas organizaciones y gobiernos.
¿Hay algún caso de éxito que puedas compartir donde tu intervención haya marcado una diferencia notable?
Tanto en León 2045 como en Guanajuato 2050 me da mucho gusto haber logrado que se integre la inteligencia de futuros, y estos planes se alineen más allá de nuestras visiones de largo plazo. Los considero un gran logro, pero también grandes retos.
Sabemos que también te has involucrado en el mundo del arte y la cerámica junto a tu hija. ¿Cómo comenzó este proyecto y qué representa para ti?
Inició como terapia, un hobby compartido con mi hija en tiempos de pandemia. Las dos empezamos a aprender de cerámica, algo que siempre me gustó. Quisimos crear un proyecto más allá de solo cerámica y comenzamos a involucrarnos en el tema de una manera más profesional. La visión de mi hija, que estudia Urban Forestry, está más encaminada en el arte y la cerámica, pero las dos compartimos la visión de un mundo más sustentable.
¿Cómo ves el futuro de la estrategia y la prospectiva en México y Latinoamérica en los próximos años?
No me gusta generalizar. Si hablo de una generación joven de instituciones y empresarios, me da gusto decir que cada vez veo más gente que la entiende y la aplica. Eso sí, para encontrar gobiernos con visión de largo plazo ,considero que todavía tenemos un camino largo por recorrer, pero aplaudo que de hace 10 años a hoy hay mucho más entendimiento y utilidad de lo que es el diseño de futuros y su importancia.
Innovador en Materiales
Sostenibles
Arthur Huang, ingeniero y arquitecto taiwanés, es un nombre prominente en el ámbito de la sostenibilidad. Fundador de Miniwiz, una empresa que transforma desechos post-consumo en materiales de construcción, textiles y embalajes, Huang ha estado a la vanguardia del diseño sostenible. Miniwiz ha impulsado numerosos proyectos, incluido un pabellón portátil hecho completamente de desechos reciclados. “Cada desecho tiene un potencial sin explotar, solo necesitamos rediseñar nuestros sistemas para verlo como un recurso”, menciona Huang en una entrevista con Forbes.
2.
ELLEN MACARTHUR
Abanderada de la Economía Circular
La ex navegante británica Ellen MacArthur ha pasado de conquistar los océanos a liderar la transición hacia una economía circular. Tras retirarse del deporte, fundó la Ellen MacArthur Foundation, una entidad que trabaja con educadores, empresas y gobiernos para acelerar la adopción de prácticas circulares. La fundación es influyente en la creación de políticas y estrategias que promueven un cambio hacia un uso más eficiente de los recursos. Su trabajo es reconocido mundialmente, citado a menudo en discusiones sobre sostenibilidad en plataformas como el Foro Económico Mundial.
3.
Por: Editorial Bonavio
TOM SZAKY
Reinventando el Reciclaje
Tom Szaky, CEO de TerraCycle, ha revolucionado el concepto de reciclaje con su enfoque en “residuos no reciclables”. TerraCycle se especializa en convertir artículos difíciles de reciclar, desde cepillos de dientes hasta paquetes de snacks, en nuevos productos. La empresa colabora con marcas grandes para reducir el impacto ambiental de sus productos y embalajes. “Nuestro objetivo es eliminar la idea de basura”, dice Szaky en una entrevista con National Geographic. TerraCycle es un ejemplo claro de cómo la innovación en el reciclaje puede crear soluciones sostenibles y económicamente viables.
que están revolucionando la manera de crear.
En un mundo donde los recursos finitos se están agotando rápidamente, la economía circular no es solo una tendencia, sino una necesidad urgente. Esta filosofía sostenible, que propone un ciclo cerrado de producción donde nada se desperdicia y todo se reutiliza, recicla o compostaje, está ganando terreno. Líderes innovadores en diversas industrias están abriendo camino, demostrando que es posible un negocio rentable y respetuoso con el planeta. Aquí exploramos algunos pioneros cuyo trabajo no solo está transformando sus sectores, sino también modelando un futuro más verde.
4.
Transformando el Transporte
Jean Liu, presidenta de Didi Chuxing, la mayor plataforma de transporte móvil de China, está reinventando el transporte urbano. Bajo su liderazgo, Didi ha implementado programas para optimizar las rutas de vehículos y reducir emisiones. La compañía ha lanzado Didi Green, una iniciativa que promueve el uso de vehículos eléctricos y ha formado alianzas para fomentar la investigación en tecnologías sostenibles de transporte. A través de estas innovaciones, Didi no solo mejora la eficiencia del transporte sino que también contribuye significativamente a la reducción de la huella de carbono en las ciudades chinas.
El Activista Empresarial
Fundador de Patagonia, Yvon Chouinard ha sido un pionero en integrar la responsabilidad ambiental en el corazón de un negocio. Patagonia no solo utiliza materiales reciclados en la mayoría de sus productos, sino que también ha liderado iniciativas como el “Worn Wear program”, que anima a los clientes a reparar y reutilizar la ropa. Chouinard cree firmemente que las empresas deben operar sin causar daño innecesario y ha demostrado que este modelo puede ser económicamente exitoso.