......
.•.,
í
Pt: R IODICO Redacción y
Administración:
Francia 8:1
~~ Año XI
Jff
INDEPENDIENTE a- -o
N°.
c5'9/rracó 23 9foviemhre de 1935
406~~ ~~
Cuestiones Locales Que pas1. en Cadi ?. En Cadí no pa~a na!; dicen que esto lo dicen por Andalucía. Pero, nosotros, en S' Ar.acó, no podemos decir que no p:.sa nada; sino que d esgraciadamente si empre pasa algo. Casi si empre son asuntos políticos, y decimos políticos, porque al surgír algún asunto o cuestión hasta entre particulares rara es la vez que de un a manera o de la otra , no se a neglen p ara co nve rtirlo en político, p rocurando casi siempre que la opinión pública tome cartas en el asunto; y , que sea tema de conversaciones durante algún tiempo. En materia de política local desgraciadamente en S' Arracó n~ tenemos suerte; por una mejora vienen díez <peoras». No contentas nuestras autoridades municipales en «ahorrar>> unas treinta mil pesetitas sobre la construcción del camino vecinal de «Andraitx a San Tefmo», en perjuicios de los verdadeL03 intereses arraconenses; ahora, claro esta, con derecho, por ser nosotros vecinos andritxoles, nos incluyen dentro del repa"rto del recargo de la decima sobres las contribuciones, y esto que en S' Arracó, muchas veces no ' se encuentranbrazos . sufícientes paratrabaja.r, principalmente en las labores del campo. Y si todo ~sto no fuera bastante, h ay que añadir esta ~alpit~nte cuestión que, desde hace va-~ nos d1as es el tema de .todas las conversaciones; no. se expende carne en nuestra plaza de abastos para el consumo público . Hagamos, aunque brevemente un poq uitin de historia: Desde hace muchos años; -quizás d esde lo q ue vá de este siglo acá, hemos
tenido en S' Arracó, con o sin derecho, un matadero municipal; que , hoyen dia, rinde más de tres mil peset.1s anu ales en materia de imposición municipal, en el cual se han venido gacrifícando todas las reses necesarias para el consumo público de S' Arracó. Cuestiones políticas habían hecho que, varias ve ces, nuestros matarifes se h1bia n vi stos obligados a ir a sacrificar las res es en el matadero de Andraitx. Pero esto siempre obedecía a caprichos caciquiles, y una vez pasado el temporal o la -<euforia» caciquil, volvía todo a sn curso normal. Pero ahora, no es una cu estión politica, sino que es una cuestión financiera la que obliga rá otra vez, si la cosa no se arregla pronto, a que nuestros matarifes hayan de volver al matadero de i\ndraitx a sacrificar las reses para el consumo público de S, Arracó. Si, ahora es el Sr. Veterinario municipal que, para continuar viniendo a S' Arracó a visitar las rese& que se han de cacrificar, pide un haber extraordinario de seiscientas pesetas anuales; y, a pesar ' de los númerosos ingresos que Andraitx «chupa» de S' Arracó. el ayuntamiento se ha oegado a conceder tal subvención. Deduccion: qne no se puede matar mas en el matadero de S' Arracó. Aquí pod-riase acabar nuestro articulo, peró, los comentarios, considerandos y resultandos que nos vemos precisados a hacer a tan palpitante cuestión nos obliga · a ser un poco más latgos. En primer lugar diremos que,a nuestro juicio, poco y leal saber, la «responsab ilidad» que para el Sr. F acultativo debía r ep resentar la m ata nza en el mata-
1
PRECIOS POR TRIMESTRE: Pueblo 1'25 ptas . Pueblos de la isla y provincias 1'75 Extrangero 3'50
clero de S' Arracó, debía ser muy poca , nos fundamos para decir esto, con lo poco que se le veia;(hay quien dice, oido en conversaciones generales, que hacen cerca de un año que no ha sido visto por el matadero), y, sin embargo en S' Arracó , se mata regularmente de un a dos an imales diarios durante la semana, el sab a do de ocho a diez. Pero si el Sr. Veterinario esta en su derecho de pedir este extraordinario, bien luce. Pero, a que viene pedir ahora este ~xtraordinario d<:spués de tantos años de prestar dicho sevicio sin renumeración alguna? Si en verdad no tenemos derecho a teoer un matadero propio para las nece.sidades d e S' Arracó, suponemos que su existencia desde tantos años, y el ingreso que dá al erario municipal nos debe dar algún derecho a reclamar la continuación d~l mismo. Seria bueno que todos los arraconenses nos unaramos para protestar y dar los pasos necesarios para poder conservar esta comodidad; ya que de nuestros édiles no hay que confiar mucho, podemos ver el gran interés que tienen para defender los asuntos de S' ,Arracó; al menos si hacían acto de presencia, algo ya seria. En la sesión del ayuntamieuto en que se ventiló tan palpitante asunto para S' Arracó, solo habia un _consejal-gestor presente , de los tres que tenemos en este lugar. Ahora bien, en lo que se refiere a la vigilancia, por parte de las autoridades, de la sabd pública, no dejando matar en S' Arracó, se habrá resuelto el problema? Cu an dos dí as, meses y años hemos com ido car ne sin ser inspeccionada por el facultativo competente!. Y además, no sólo ha de tra tarse de la carne¡ el pescado¿ las verduras?. Creemos nosotros que