¿Por qué me convierto en lo que siento? by BABIDI-BÚ

Ingrid Reichardt

¿Por qué me convierto en lo que siento? Cuentos para entender y gestionar nuestras emociones

¿Por qué me convierto en lo que siento? © del texto: Ingrid Reichardt © de las ilustraciones: Laura Caballé © del diseño y corrección: Equipo BABIDI-BÚ © de esta edición: Editorial BABIDI-BÚ, 2021 Edificio Sevilla 2 - Av. San Frascisco Javier, 9, mod. 23 41018 – Sevilla Tlf: 912 - 665 - 684 info@babidibulibros.com www.babidibulibros.com Impreso en España Primera edición: octubre, 2021 ISBN: 978-84-18996-16-0 Depósito Legal: SE 1545-2021 «Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o scanear algún fragmento de esta obra».

Ingrid Reichardt

¿Por qué me convierto en lo que siento? Cuentos para entender y gestionar nuestras emociones

1ndice

de emociones Alegría.................................................................... 9 Rabia:..................................................................... 15 Miedo..................................................................... 21 Tristeza..................................................................27 Sorpresa................................................................ 33 Asco...................................................................... 39 Amor..................................................................... 45 Frustración........................................................... 53 Celos...................................................................... 59 Preocupación....................................................... 65 Vergüenza, culpa y orgullo................................73 Envidia................................................................... 81 Motivación........................................................... 89 Paz..........................................................................97 Guía de apoyo para las familias.................... 103

Tania siente alegría

Hoy es el primer día de escuela de Tania. Tiene

muchas ganar de ir al colegio para convertirse en una niña grande, pero a la vez está preocupada porque no conoce a nadie. Cuando llega a la puerta de la escuela, ve que todo es muy diferente. Nada se parece a lo que había conocido hasta ese momento. «¡Cuántas escaleras!», piensa Tania. 9

—¡Buenos días, guapísima! Soy Emmi, tu señorita. ¿Cómo te llamas? —Me llamo Tania —dice tímidamente. —¡Qué nombre más bonito! Te acompaño a tu aula, corazón. Cualquier cosita que necesites, me lo dices. ¡Estamos juntas en esta aventura! Esas palabras cariñosas de la maestra hacen sentir a Tania muy bien. Luego, en clase, Tania continua sintiéndose tranquila mientras escucha todo lo que la señorita y sus nuevos compañeros dicen. Sin embargo, ella aún no se atreve a hablar con ningún niño. —¡Hola! Me llamo Ana. ¿Cómo te llamas? —se le acerca una niña rubia en el patio. —Tania. —¿Quieres jugar conmigo al pilla-pilla? Tania asiente y empieza a correr por el patio. Mientras más corre y más se divierte, se da cuenta de que más crece. Es tan alta que todos los niños y niñas de la clase la pueden ver. Y eso hace que quieran jugar con ella. Al final se hace amiga de todos y juega tanto que se lo pasa superbien. Al mediodía, la recoge su mamá y su hermanito Pol que va sentado en el carrito. De camino a casa, Tania les explica lo dulce que es la 11

maestra y lo simpáticos que son sus compañeros de clase. También les dice que tiene muchas ganas de contárselo todo a su osito de peluche preferido, Hug. Enseguida que Tania entra en su casa, va corriendo a su habitación para hablar con Hug, que está sentado en el suelo con los pies cruzados y los ojos cerrados. —¿Cómo te ha ido el primer día de escuela? —pregunta el osito ya completamente atento a las palabras de Tania. —¡Muy bien! He conocido a un montón de personas y me he divertido muchísimo —exclama Tania. —¡Como me gusta oír eso! —Sonríe Hug al saber que Tania está haciendo nuevos amigos. —Sí. Y lo mejor de todo, es que cuanto más me divertía, mayor me hacía. —¿Te hacías mayor? ¿Y cómo te hizo sentir eso? —pregunta Hug con curiosidad. —¡Muy bien! Parecía que todos los niños y niñas me viesen, y por eso quisieran jugar conmigo. ¡Al final los conocí a todos! Además, me sentí tan bien que le hice un dibujo a la señorita. Y le gustó tanto que lo colgó en la pared. Pero, Hug, ¿tú sabes por qué me hice más alta? 12

—Porque sentiste alegría, Tania. Cuando las cosas salen como deseas o simplemente cuando te lo pasas bien, creces. Y hacerte mayor te ayuda a hacer amigos y a trabajar mejor. Más tarde, Tania va al parque de su barrio. Allí se encuentra con niños y niñas de su clase. Enseguida sus nuevos amigos la ven porque Tania se hace mayor. Y juntos juegan y ríen toda la tarde. Tania está contenta y sabe que se siente alegre.

Tania siente rabia:

Tania ha llegado de la escuela. Hoy ha ido

de excursión, está cansada y tiene muchas ganas de explicarle todo a su osito Hug. Pero cuando entra en su habitación se da cuenta de que no está. —Mamá, ¿dónde está Hug? —pregunta Tania. —¡Se lo he dado a tu hermano para que juegue, que le encanta! —dice la mamá de Tania. 15

Tania, al escuchar que Pol tenía a su osito, comienza a hincharse y a hincharse como un globo de color rojo. Y se va corriendo a la habitación de su hermano para recuperarlo. —¡¡¡Hug es MIO!!! —grita Tania a Pol, mientras le arranca el osito de las manos. —Buaaaahhhh ... —llora Pol que no entiende la reacción de Tania. —¿Qué ha pasado? ¿Le has quitado el osito a tu hermano? ¡Tania, tienes que compartir! ¡Dame el osito! —dice contundentemente la madre. Tania siente que está a punto de explotar... Y sin saber cómo pararlo, comienza a resoplar, hacer movimientos bruscos y gritar por todas partes. Hasta que se acaba yendo sola a la habitación. Ahora está muy deshinchada y tiene lágrimas en los ojos. —¿Qué te ha pasado, Tania? —pregunta dulcemente Hug mientras entra en la habitación. —¡¡Es que Pol tiene muchos juguetes!! ¿¿Por qué te tiene de coger?? —Entiendo... ¿Y que más te ha pasado? —Me he convertido en un globo que cada vez se hacía más grande, y más grande... Tan 16

grande que ha explotado —explica Tania mirando el suelo. —¿Te ha gustado sentirte así? —No... Nada... Pero ¿por qué me ha pasado? —Porque te has enfadado —dice el osito—. Cuando creemos que algo que nos pasa no es justo, nos vamos hinchando como un globo, y si no aprendemos a sacar la rabia poco a poco, acabamos explotando. —Pero yo no quiero ser un globo que explote... ¡Yo quiero ser una niña! —se lamenta Tania. —No te preocupes, tengo la manera de que no te conviertas en un globo demasiado grande y que pueda explotar. —¿Y cuál es? —¡Para, respira y explica! Como un globo que no quieres que explote cuando te enfadas, tienes que hacer un stop el tiempo que sea necesario, y cuando creas que ya no tienes que hincharte más..., explica cómo te has sentido, qué te ha pasado. Entonces, toda la rabia del globo saldrá poco a poco con las palabras. —Y si ya he explotado, ¿qué puedo hacer, Hug? —Pedir perdón y aceptar las consecuencias, Tania. 18

Tania respira profundamente y busca a su madre para pedirle perdón. Cuando vuelve, ya se siente mejor. —Hug, ¿y si no recuerdo que tengo que parar, respirar y explicarlo todo cuando estoy enfadada? —Mira, Tania, te regalo el globo de la rabia. Siempre que notes que empiezas a enfadarte, en vez de inflarte tú, hincha el globo. Al día siguiente, Tania está en clase jugando a hacer una torre, cuando Dídac se la tira. TaCada vez que Tania siente una emoción le pasan que empieza no entiende. a A veces siente que se nia sientecosas como enfadarse... hace grande, otras que desaparece. También pue«¡El globo!», piensa. de sentir que se convierte en un globo o en una estatua. O incluso que, de repente, lleva puesta la Antes de Tania para busropahacer de otros…nada, Menos mal que suPARA, osito de peluche, Hug, siempre está para ayudarla a comprencarlo, RESPIRA, para soplarlo, y le EXPLICA a der QUÉ EMOCIÓN está sintiendo y CÓMO puede gestionarla. Así Tania descubre alegría, la rabia, la señorita lo ocurrido. Tania laha conseguido reel miedo, la tristeza, el asco, la sorpresa, el amor, la gular su RABIA. frustración, los celos, la preocupación, la vergüenza, la envidia, la motivación y la paz. Acompaña a Tania mientras crece y experimenta cada emoción, y aprende que todas ellas tienen su utilidad si entendemos POR QUÉ sentimos lo que sentimos.

ISBN 978-84-18996-16-0

9 788418

996160