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ANÁLISIS TÉCNICO

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Art Viviant

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Vestuario Maquillaje Efectos Especiales

El vestuario de “Los Fantasmas de Goya” es un aspecto destacado de la película, que se desarrolla en la España del siglo XVIII, durante la Inquisición y la invasión napoleónica. El diseñador de vestuario, Yvonne Blake, recibió un premio Goya por su trabajo en la película, lo que demuestra la calidad de su trabajo. El vestuario de la película es una fiel representación de la moda y el estilo de la época, y está cuidadosamente diseñado para reflejar las diferencias sociales y culturales entre los personajes. Los trajes de los personajes principales, como el pintor Francisco de Goya y su musa Inés, están elaborados con una gran atención al detalle y a los materiales utilizados, que incluyen sedas, terciopelos y encajes.

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Además, el vestuario se utiliza de manera efectiva para reflejar los cambios de estado de ánimo y los acontecimientos de la trama. En los momentos más oscuros y opresivos de la película, como en las escenas que tienen lugar durante la Inquisición, los personajes visten con trajes oscuros y lúgubres, mientras que, en los momentos de luz y esperanza, como cuando Inés posa para Goya, se visten con prendas más coloridas y luminosas. De esta manera, el diseño de vestuario contribuye a la creación de una atmósfera y el desarrollo de la trama de la película.

El maquillaje del filme acompaña la cuidada precisión histórica que muestra el vestuario, siendo un elemento relevante para recrear el ambiente histórico y social del siglo XVII en España, con un estilo Rococó muy característico. El maquillaje propio de esta época se utilizaba para destacar la belleza natural de las mujeres y resaltar la palidez de la piel como signo de elegancia y refinamiento. En el film se recrea fielmente esta elaboración de maquillaje con sombras en tonos rosados y pastel, labios rojos y mejillas sonrosadas, todos ellos tonos naturales y discretos. Además, se puede apreciar un uso excesivo de polvo en el rostro, que buscaba blanquear la piel para mostrar un aspecto más aristocrático. No obstante, el maquillaje que más destaca en la película es la crudeza de los rasgos de Inés después de salir del encierro por parte de la Inqusicón. Resaltamos el realismo de la piel seca e irritada, los labios, así como el pelo. Una caracterización espectacularmente realista.

La película fue nominada al Goya a “Mejores efectos especiales” por su realismo y certera integración de efectos especiales en la trama y la estética de la película. Se utilizan para resaltar el carácter fantástico y simbólico de la historia, así como para recrear algunos de los elementos visuales más icónicos de la obra de Goya. Uno de los efectos más destacados es el uso de la tecnología de captura de movimiento para crear los personajes de los fantasmas. También se utilizaron efectos visuales para recrear la atmósfera de la España del siglo XVIII y los horrores de la Guerra de la Independencia. Por ejemplo, se crearon escenas de batallas y destrucción de ciudades y pueblos utilizando efectos visuales. Otro efecto especial destacado es el uso de la técnica de “pintura viva” para recrear las pinturas de Francisco de Goya. En varias escenas, los personajes se convierten en versiones vivas de las pinturas de Goya, lo que da un toque surrealista al filme. En definitiva, los efectos especiales están bien integrados y ayudan a crear una atmósfera inquietante y surrealista que complementa la narrativa de la película.

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