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Las consecuencias de la adicción al tabaco
El tabaquismo es una adicción provocada por el consumo de tabaco, fundamentalmente asociada a uno de sus componentes activos “la nicotina”, que actúa de manera agresiva sobre el sistema nervioso central.
El tabaco es una droga legal socialmente compartida y aceptada en nuestro medio. Pero a pesar de que existen regulaciones legales para su consumo, éste no disminuye. Ahora se ven pocas personas consumiendo tabaco en la calle, sin embargo, los indicadores de venta no bajan. El fumar deja de ser un hábito cuando la actividad se vuelve una necesidad o se convierte en una dependencia.
Existen dos tipos de dependencias, la sicológica y la física. La sicológica aparece primero, lleva tiempo en función de muchos factores, de la exposición continua a la sustancia, de la dinámica que le permita acceder a ella y de una serie de cambios sociales que le impone el consumo de la sustancia; mientras que la física se siente cuando el organismo le demanda su consumo.
El consumo de tabaco es la principal causa de enfermedad, discapacidad y muerte en el mundo. Sin embargo, muchos de los consumidores desconocen las graves consecuencias que produce su consumo continuado, tales como:
1. Síndrome de abstinencia (Tener antojos de fumar)
2. Ansiedad
3. Irritabilidad
4. Dolor de cabeza
5. Falta de concentración
6. Insomnio
7. Mayor apetito
8. Lesiones arterioesclerótica con afectación cardiovascular
9. Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, EPOC
10. Aumento del riesgo de cáncer
11. Problemas y riesgos altos en el embarazo
Son muchas las campañas que se realizan alrededor del mundo para evitar o disminuir el consumo del tabaco; pero aún así, es uno de los productos nocivos para la salud que siguen siendo de gran demanda a nivel mundial, afectando la salud no solo de quienes lo consumen, sino también de quienes están expuestos al humo (fumadores pasivos).
Cada año mueren más de 5 millones de personas en el mundo a causa del tabaquismo. Se estima que la mitad de los fumadores mueren de una enfermedad relacionada al consumo de tabaco y que viven en promedio 10-15 años menos que los no fumadores.

Usted no tiene que ser un fumador para que el tabaquismo le cause daño. La exposición al tabaquismo de otra persona (llamado tabaquismo de segunda mano) también es un desencadenante de las reagudizaciones de la EPOC.
Fumar causa aproximadamente 30% de todas las muertes por cáncer en los Estados Unidos, incluyendo alrededor del 80% de las muertes por cáncer de pulmón. Este es la principal causa de muerte por cáncer entre hombres y mujeres, y uno de los cánceres más difíciles de tratar.
Fumar no aumenta solamente el riesgo de cáncer de pulmón, sino que también es un factor de riesgo para los cánceres de: boca, laringe, faringe (garganta), esófago, riñón, cuello uterino, hígado, vejiga, páncreas, estómago, colón, recto y leucemia mieloide.
Los cigarrillos, los cigarros (puros), las pipas y los productos de tabaco sin humo causan cáncer. No existe una manera segura de consumir tabaco.

El tabaquismo es la principal causa de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). También es un desencadenante para las reagudizaciones de esta enfermedad. Fumar daña los alvéolos, las vías respiratorias y el revestimiento de los pulmones. Los pulmones lesionados tienen problemas para movilizar suficiente aire hacia dentro y hacia fuera, así que es difícil respirar.
Usted no tiene que ser un fumador para que el tabaquismo le cause daño. La exposición al tabaquismo de otra persona (llamado tabaquismo de segunda mano) también es un desencadenante de las reagudizaciones de la EPOC.
El tabaquismo indirecto o de segunda mano desencadenará más reagudizaciones de EPOC y causará más daño a los pulmones. Así que usted tiene que tomar medidas para evitarlo.
• Convierta su casa y su vehículo en zonas libres de humo. Solicíteles a otros que estén con usted que sigan esta regla. Saque los ceniceros de su casa.
• Elija restaurantes, bares y lugares de trabajo libres de humo (si es posible).
• Evite los lugares públicos que permiten fumar. Establecer estas reglas puede:
• Reducir la cantidad de humo que de manera indirecta usted y su familia inhalan
• Ayudarle a dejar el cigarrillo y a permanecer sin fumar.
Si hay fumadores en su lugar de trabajo, pregunte acerca de las políticas con relación a si está permitido fumar y dónde se permite.
Compartimos diez consejos básicos para dejar de fumar:
1 No pienses que tendrás que estar toda la vida sin fumar. Preocúpate tan sólo por el presente, ten claro el motivo por el que quieres abandonar el tabaco y supera día a día el deseo de fumar. 2
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Cambia ciertos hábitos de vida. Modificar determinadas rutinas te ayudará a olvidar los momentos que dedicabas a fumar y a hacer más fácil la abstinencia.
Evita tentaciones. Mantén encendedores, cerillos y ceniceros lejos de tu presencia y rehúsa estar con fumadores tanto como te sea posible.
Ten siempre algo para comer o masticar. Fruta fresca, chicles sin azúcar o incluso alguna hortaliza como las zanahorias. Cualquier cosa, menos cigarrillos.
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5 Apuesta por realizar actividades que te distraigan. Dedica tu tiempo libre a hacer aquello que te guste; esto mantendrá tu mente ocupada y te sentirás mejor.
Lleva una vida saludable. Una dieta equilibrada, realizar respiraciones relajantes y hacer ejercicio son hábitos que ayudarán a aliviar tus ganas de fumar.
Redacta una lista de razones para no fumar y recuérdala periódicamente. Los beneficios, tanto para tu salud como para tu bolsillo, son más que evidentes.
No cedas. Ni siquiera por un solo cigarrillo, ya que la nicotina tiene un fuerte poder adictivo y, probablemente, te conducirá a su recaída.
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Busca el apoyo de familia y amigos. Es importante que compartas tu deseo de dejar de fumar con tu entorno más cercano, ellos pueden hacer más fácil tu abandono del tabaco.
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Consulta a tu médico. Evaluará tu estado de salud y determinará, en caso de ser necesario, el mejor tratamiento para dejar de fumar.
No es fácil dejar de depender del tabaco, pero con la ayuda de especialistas en conductas adictivas, terapias, grupos de apoyo, apoyo familiar y charlas, podrás salir adelante y abandonar definitivamente el tabaco.