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¿Podrá Colombia producir urea en el futuro?

REPRESENTACIÓN GREMIAL

Juan David Rojas, coordinador comercial y de Alianzas Estratégicas

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Para poder cultivar hay dos grandes grupos de factores para favorecer el crecimiento y desarrollo de las plantas, los energéticos y los químicos, que, a su vez, se subdividen entre los que se absorben por medio de las hojas y los que se absorben por medio de las raíces como el oxígeno, el agua, compuestos orgánicos o elementos nutritivos minerales (N, P, S, K, Ca, Mg, etc.). Desde sus rudimentos la agricultura ha tenido siempre la necesidad de suplementar el suelo como sustrato nutritivo y, Colombia, un país de tierras agrícolas tan fértiles como las más no es la excepción.

Los fertilizantes, económicamente, se comportan como commodities, y en el mercado el segmento dominante es el de compuestos simples que contienen fósforo, potasio y nitrógeno. Su producción a nivel mundial es un oligopolio altamente concentrado. Por ejemplo, países como Canadá y Rusia son grandes productores de Cloruro de potasio (KCl); en Marruecos se encuentra concentrada la producción de fosfato diamónico (DAP) y de fosfato monoamónico (MAP); en el caso de la urea el mercado se encuentra un poco más distribuido con protagonismo de países como India, Rusia, Indonesia, Pakistán, Estados Unidos y Canadá.

En cuanto a Colombia, la altamente dependencia de la importación de materias primas para producir fertilizantes genera gran volatilidad de los precios en el mercado interno debido a la fluctuación de los precios de importación, afectando a la vez los costos de producción del sector agropecuario.

El país importa el 75% de los fertilizantes concentrados en urea, DAP, MAP y KCl; la mayoría de la urea es importada de Rusia y Ucrania, países actualmente en conflicto; y la producción en el país se encuentra concentrada en su inmensa mayoría en pocas empresas, de las cuales no todas son nacionales, por ejemplo, Monómeros Colombo Venezolanos S.A, empresa de Venezuela que, según Portafolio, a inicios de éste año fue intervenida mediante un sometimiento de control por parte de la Superintendencia de Sociedades; o la gigante multinacional noruega Yara, que tiene presencia en América, Europa, África y Asia.

Los factores que favorecen la concentración en la producción de KCl, DAP y MAP en el mercado global son los recursos. Por lo general, los países que concentran la producción son los que poseen yacimientos o reservas naturales de donde extraen las materias primas. El caso de la urea es diferente, ya que para sintetizarla sólo se requiere amoniaco y dióxido de carbono, según el profesor Manuel Iván Gómez Sánchez, de la Universidad Nacional de Colombia, el reto para poder producirla en Colombia está ligado a la producción mineroenergética (específicamente gas natural) y al desarrollo tecnológico.

También considera que se necesita una importante alianza entre la academia, el Estado y las empresas para que el país pueda convertirse en productor de fertilizantes y reducir así la alta dependencia de los mercados externos.

La urea es ampliamente empleada en el país en la producción de cereales como arroz, trigo, sorgo y maíz, así como en el cultivo de caña de azúcar, papa, pasturas y algunas frutas y hortalizas; todos estos productos que forman parte tanto de la dieta básica de los colombianos así como también son insumos para la elaboración de concentrados o pasturas para la alimentación de animales de ganadería que también terminan siendo consumidos finalmente, lo que podemos concluir es que definitivamente hay un reto de vital importancia en un sector estratégico que requiere de la interacción entre el sector privado, el gobierno y la academia y la pregunta que nos queda es si Colombia estará dispuesta a asumirlo en los próximos años.

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