Darles vida a las paredes
Aprovechar las zonas muertas
Limpieza: deshacernos de objetos
Está claro que una casa son más que “cuatro paredes” pero la salud de la misma se refleja precisamente ahí, en las paredes. No es una mala idea cada cierto tiempo pintar, dar brillo y color, quitar las manchas que el paso del tiempo va dejando como huellas de lo vivido.
Además de con muebles, los espacios muertos de la casa, como por ejemplo podría ser la parte de abajo de una escalera o un cuarto para la lavadora, una galería muy estrecha o un balcón, se pueden aprovechar de otras maneras. Estas zonas pueden servir de trastero, de estudio, de semillero, de invernadero y mil cosas más.
Una manera de revitalizar el hogar es haciendo una limpieza de los objetos innecesarios. Muchas veces se van quedando en el hogar y sin saber ni cómo ni por qué una lámpara que nunca se utiliza preside un salón, unos libros que nadie lee ni leyó jamás se lucen como decoración absurda, o algún mueble bonito, pero poco funcional, ocupa el espacio y no deja fluir ni el aire ni a los niños que juegan.
Tampoco es mala idea revisar las posibles humedades y hacer lo que sea necesario para quitar las manchas antes de pintar las paredes. Para pintar recomendamos, evidentemente, utilizar pinturas ecológicas. Hoy en día están presentes en todas las pinturerías, o incluso se pueden comprar online. Recomendamos este tipo de pinturas que, pese a ser un poco más caras, son menos tóxicas. Otra manera de revitalizar las paredes es con papel pintado ecológico, preferiblemente de lino y biodegradable. Son papeles vegetales tejidos 100 % compostables y sostenibles. A diferencia que los papeles para pared tradicionales, los ecológicos al ser completamente biodegradables no suponen ningún problema para el medio ambiente.
Puertas corredizas Cambiar las puertas comunes por puertas corredizas puede ayudar a aprovechar más las zonas muertas y las habitaciones pequeñas. Al no tener que abrir una puerta, por ejemplo, en un pequeño estudio, el espacio aprovechable es mucho mayor.
Cajas de verduras Las cajas de verduras pueden ser muy útiles además de aportar su granito de arena a la decoración ecológica. Aunque actualmente son cada vez de menor calidad, si buscamos bien podemos encontrar aún de las buenas. Estas cajas se pueden usar para guardar libros de cuentos o discos de vinilo, y las pequeñas (con las que se suelen comercializar las fresas y otros frutos del bosque) pueden servir para almacenar todo tipo de cosas, como por ejemplo lo condimentos de cocina o libretas.
Pallets multiusos Con los pallets se puede hacer prácticamente de todo. Tanto aprovechando su forma para hacer camas, sofás o estanterías, como desmontados y utilizar sus maderas resistentes para crear estanterías, mesas y todo lo que se nos ocurra.
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Cada cierto tiempo toca hacer una limpieza y decidir qué cosas son las que no necesitamos ni cumplen una función en nuestra vida. Puede ser ropa, libros, electrodomésticos, muebles, hasta aquella ventana tan bonita que nos encontramos en la calle, pero nunca vamos a colocar en ningún sitio. Regala todo aquello que no necesites. Llévalo a algún sitio que le puedan dar una segunda vida. Comparte fotos de las cosas que ya no necesitas en tus redes sociales y que quizá alguien necesite y pueda aprovechar. Estaremos contribuyendo a crear un espacio más limpio, aireado y cómodo, y todo lo que podamos compartir para un segundo uso, es una cosa menos que se manufactura, con todo lo que conlleva para el planeta.