Almacenamiento energético: innovación para la red eléctrica de México

Por Angel Hernández Murillo

Cada vez son más comunes las noticias sobre la necesidad de obtener energías de fuentes renovables. Pero la misión, no puede estar completa sin el almacenamiento energético que aproveche la electricidad de una forma más amable con el medio ambiente

Tras años de embates gubernamentales, la red eléctrica en México, según datos del INEGI 2020, tiene sobre sus hombros más de 4.9 millones de empresas que requieren energía para sus actividades diarias. A su vez, de acuerdo con el PRODESEN, se estima un crecimiento de 2.7% anual de la demanda de energía eléctrica en los próximos 15 años.

Las nuevas tendencias en el manejo de la energía eléctrica han encontrado un futuro alivio a esta carga a través del uso de baterías de litio, que ya se utilizan en algunas industrias con resultados notorios: un ahorro de hasta el 40% sobre su tarifa de la CFE, por solo dar un ejemplo.

Sin embargo, el empleo de estos sistemas requiere de profesionales en la instalación para evitar cualquier tipo de accidente. Alejandro Fajer, director operativo y fundador de Quartux, empresa especializada en equipos y soluciones de ahorro y almacenamiento inteligente adaptable al consumo de energía de las organizaciones, comenta que además de tomar la decisión positiva de reducir la huella de carbono, la gente necesita de asesoría.

“Se debe considerar que estos sistemas son peligrosos, muy sensibles, que requieren de un monitoreo y una tecnología muy avanzada en cuanto al software de control. Sabemos que distintas empresas ya están instalando estos sistemas, pero también estamos escuchando historias de terror al respecto”.

El entrevistado recomienda a quien quiera tener los beneficios del almacenamiento de energía, acudir mejor con quien ya tenga experiencia, como la marca a la que representa, porque el público debe tener muy claro que no se trata de paneles solares que, prácticamente cualquiera podría instalar, sino de baterías de alto impacto, con componentes tecnológicos muy avanzados que solo personal calificado identifica.

“Nosotros, por ejemplo, tenemos 120 ingenieros, cuatro centros de control que trabajan 24x7 para justo evitar cualquier riesgo en cuanto a seguridad. Somos una empresa cien por ciento enfocada en la tecnología y el uso de software aptos para operar estos

Almacenamiento de energía, ventajas

Con esta tecnología, que funciona a través de un software inteligente de regulación, se pueden evitar apagones y ahorrar dinero en las horas pico de consumo de la red. Sobre todo, en industrias que requieren altas cantidades de energía para sus productos o servicios, expone

El futuro del litio, y los ricos yacimientos que existen en México (especialmente en Sonora) han llamado la atención de empresas en todo el mundo. Esto puede beneficiar a México a partir del almacenamiento de energía a la par de tecnologías de punta, como las inteligencias artificiales y los dispositivos adaptados a prácticamente todos los aspectos de la vida humana. Las organizaciones necesitan estar preparadas para participar de ese próximo momento.

Finanzas y RSE

Por eso, para alcanzar este punto, hace falta que la iniciativa privada busque y adapte estos sistemas de ahorro a sus lugares de trabajo. Por principio se debe de entender que habrá un beneficio económico a la par de que se avanza en la responsabilidad social que está alcanzando a las empresas más importantes del mundo.

Asimismo, se necesita confiar en iniciativas mexicanas que presenten sus modelos de ahorro para las necesidades de la población local, incluyendo las empresas e industrias que emplean grandes cantidades de energía. Es una meta ambiciosa, pero que cada vez parece más accesible y benéfica para la vida de todas las ciudades del país.

En este sentido, el director operativo y fundador de Quartux, ubica como uno de los principales problemas para avanzar, el que tiene cualquier red eléctrica, sea de México o de otra parte del mundo, y que se relaciona con que no hay un match exacto entre la generación de electricidad con la demanda que existe. Para que se produjera, se necesitaría de ciertos flujos que permitan que siempre haya energía disponible conforme a la demanda, que no falte o no sobre. Ahí es en donde, prosigue, entra el tema de su almacenamiento a gran escala.

Así, la llamada energía inteligente, proveniente del almacenamiento, cobra sentido; se identifica como aquella que se utiliza en la cantidad y el momento requeridos. No representa incrementos en costos, ni que se deban prender plantas extra para abastecer consumos. El usuario reduce su gasto en energía y las emisiones de CO2 de la red son las más limpias.

Una herramienta para todos

Cualquier usuario que sea gran consumidor, puede utilizar la energía inteligente por razones tan sencillas como que es más barata, más limpia y de mejor calidad al ser filtrada por sistemas eficientes que repercuten en un ahorro económico, por un lado, y por otro en una huella de carbono mucho menor que no daña equipos, no “mete” ruido a la red, ni produce intermitencias en la red.

En cuanto al retorno de la inversión, Alejandro Fajer explica que éste depende mucho del proyecto que se requiera. Pero que, como una media, se podría decir que entre dos y cinco años el inversor ve justificado su desembolso en, además, un sistema que tiene una vida útil estimada de 20 años.

El fundador de Quartux, opina que México cuenta con la capacidad de generar el cien por ciento de su energía por medio de fuentes renovables. Sin embargo, el principal cuello de botella para hacerlo es la intermitencia que tienen estas energías; si una red se abasteciera de solo energías renovables y pasara una nube, no hay viento u otro inconveniente natural, crearía un problema enorme en cuanto a que la energía que se necesita no se entregaría.

“Es ahí donde entran los sistemas de almacenamiento que permiten acelerar la transmisión hacia una generación más renovable. Por medio de nuestro software utilizamos los equipos, las baterías, para “jalar” esa energía en los horarios más limpios y dejar de consumir en los más demandados, con una huella de carbón lo más limpia para el cliente y cumpliendo con las necesidades en cantidad y calidad de la energía, concluye.