resultado en pérdidas humanas. Por mencionar algunos ejemplos, está el caso de la demora en la puesta en operación de los gasoductos de TransCanada, Fermaca y Carso y el enfrentamiento entre los miembros de la tribu Yaqui en el 2016 por el paso del gasoducto de IEnova, que hasta la fecha sigue sin resolverse. Con el Gobierno de la 4T, la situación no es muy diferente. La austeridad republicana del gobierno de López Obrador ha creado una complejidad mayor para la entrega de los resolutivos, ya que el personal de la DGISOS no cuenta con más de siete especialistas, y según señaló la secretaria Nahle, el ingreso de EVIs para proyectos energéticos se ha incrementado en alrededor de 30 por ciento. Si bien, esto es una herencia del Gobierno anterior, también es cierto, que a la fecha, la Sener sólo ha entregado 464 resolutivos, 414 para el sector de hidrocarburos y 50 para electricidad y, 42 más para proyectos de centrales solares de gran escala. Esto significa que hoy, la DGISOS cuenta con cerca de 3 mil EVIs sin resolución, de empresas que presentan importantes montos de inversión, pero sin permisos para su ejecución. Por otra parte, la regulación social y el actual Gobierno enfrentan importantes problemas como la ingobernabilidad y la violencia que vive el país, así como la persistente falta de aceptación por parte de las comunidades impactadas, sean indígenas o ejidos mestizos, que no están de acuerdo con el paso de la infraestructura en sus territorios. Tal es el caso de los resultados de la consulta indígena del Istmo de Tehuantepec que se llevó a cabo por la SHCP y el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) en marzo pasado, con objeto de informar sobre la conexión interoceánica, mediante la construcción portuaria industrial, vías férreas y un gasoducto; sin embargo una importante parte de la población hasta el momento ha rechazado el proyecto. Sin embargo, el panorama no es del todo negativo, considero que existen importantes áreas de oportunidades en materia de gestión social, así como acciones loables de la
CO-FUNDADORES: Abril Moreno Directora General de Perceptia21 @Abril_More
Víctor Ramirez Vocero de la Plataforma México Clima y Energía @vicfc7
Gonzalo Monroy Director General de GMEC. @GMonroyEnergy
Arturo Carranza Experto en Energía @Art_Carranza
Erick Sánchez. Experto en Energía @erickussalas
Paul Alejandro Director en Ombudsman Energía México @PaulAlejandros
Santiago Arroyo Experto en Mercado de Hidrocarburos @SaArroyo1
Para más información: @Abril_More @WeTweetEnergyMx
presente Administración, tal es el caso del trabajo emprendido por la Segob, en el caso del gasoducto parado por la comunidad yaqui de Loma de Bácum, en el cual la secretaria Olga Sánchez Cordero ha realizado un especial esfuerzo para la resolución del problema, a través de la habilitación de mesas de diálogo permanente y la participación de diferentes instancias gubernamentales que brinden atención a la población y coadyuven a la reconstruyan el tejido social. En conclusión, si el Gobierno de la 4T toma conciencia de la importancia del fortalecimiento de las instituciones y dado el papel que ha emprendido la Segob en el caso de las comunidades Yaquis, me gustaría señalar una posible solución que es la “creación de un órgano desconcentrado de la Secretaría de Gobernación, que fuera responsable de impactos sociales y ocupación superficial” para la atención de cualquier sector industrial, no sólo del energético, lo que eliminaría la posición de la Sener de ser juez y parte en esta área tan vulnerable. Esta propuesta es de la Dra. Isabelle Rousseau, coordinadora del Programa de Energía de El Colegio de México a la a quien también agradezco la información que me proporcionó sobre la materia de la presente columna. Finalmente, es importante señalar la relevancia de la participación del sector privado en la gestión social de sus proyectos para la sana relación con las comunidades. En este sentido, la comunicación es un elemento vital para un relacionamiento eficiente. Las empresas deben emitir información transparente y llana para la total comprensión de las poblaciones, mantener un diálogo permanente y abierto, involucrar a los habitantes en algunas decisiones de la empresa, así como generar programas que realmente contribuyan con el crecimiento y desarrollo económico y social sostenido de las localidades. Especialmente, deben comprender su cultura, creencias y proteger la dignidad de los pobladores, así como el tejido de la interacción social de las comunidades en las cuales buscan operar los proyectos de infraestructura energética. petroleoenergia.com Noviembre/Diciembre 2019
WeTweetEnergy.indd 105
105
11/12/19 6:02 PM