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Misteriosa, curiosa y muy especial es la dama de la noche…

La dama de la noche o reina de la noche, es una planta originaria de las Antillas Mayores. Estas plantas se encuentran en su forma silvestre en las Antillas Mayores (Jamaica, Cuba, Haití, Puerto Rico, Islas Caimán), Centroamérica y algunos países de Sudamérica. Es una especie verdaderamente rara en el cultivo. Es una or extraña que solo orece en la oscuridad.

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Es una or que, además de su belleza, se caracteriza porque al abrirse se libera un intenso aroma, solo en el transcurrir de algunas horas por la noche, y que se acaba cuando empieza a amanecer.

También conocida como galán de noche o príncipe de noche, a esta planta es muy habitual de verla en muchos jardines aromáticos. Su signi cado espiritual se conecta con la superación de los obstáculos para abrir camino a grandes logros, como también a la prosperidad y tranquilidad en el hogar. Al desprender grandes energías, la dama de la noche nos acerca a lo que más deseamos… Tenerla en nuestro jardín contribuye a que obtengamos grandes conquistas. También se dice que la presencia de ella en el hogar acuña el amor entre dos personas, algo importante para la vida, dado que el amor es fundamental para la felicidad.

Detrás de esta rara y bella or, existen algunas leyendas; de todas, hay una que cuenta la historia de un romance entre una princesa y un joven, ambos de clases sociales opuestas y un enamoramiento que se dio a escondidas del padre de la doncella. Cuando su padre se enteró el joven fue encerrado en un calabozo. A escondidas, la joven empezó a ver a su enamorado; pero cuando el Rey lo supo, envió a matar al joven.

Un año después ella decidió quitarse la vida y, en el lugar donde la habían enterrado, creció esta extraña or que orecía solo una vez al año durante la noche, en el aniversario de la muerte de los dos.

La historia roza con la fantasía y, aun sabiendo que no sea cierta, con esta leyenda le adjudicamos el origen de la planta, con su extraña forma de aparecer y que con su exquisito aroma, invade la oscuridad… ¡Una or del corazón!

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