2 minute read

Lina María Burbano Quiñones

“Soy mujer, montañera y campesina del Macizo Colombiano, del municipio de Sucre en el departamento del Cauca, tengo 29 años. Estudié en la Universidad del Cauca Ciencias Políticas, una especialidad en Políticas Públicas y una Maestría con el mismo título que estoy por terminar. He participado solamente en Recitales poéticos pequeños en la ciudad de Popayán y en la Universidad del Cauca”.

Advertisement

Luna de Marzo

Hoy soy más tierra que nunca, me cobijo con su aroma, me vuelvo a ella con agradecimiento por ser mujer insurrecta, rebelde y alegre como sus tiempos Hoy soy árbol con profundas raíces, mis hojas están teñidas de diferentes naciones, de diferentes pueblos y culturas, mis ramas están llenas del mundo que desde la palabra verdadera se ha impregnado en mi savia. Mis flores están llenas de amor para quien quiera recibirlo: planta, tierra, pájaro, agua, animal, viento, mujer, hombre, niña, fuego, piedra, montaña y para recibirlo mis poros abiertos Soy mezcla y me enorgullece serlo, soy quien en la mezcla llama a la compartencia, a la juntanza, a la raíz y a la flor. ¡Salud! Y que mandan decir quienes saben*, que queremos un mundo donde quepan todos los mundos; porque hay tantos pensamientos como colores en la tierra, y ya ven en la madre naturaleza todo tiene su espacio, tiempo, forma y modo. *EZLN Corazóndefuego Montañas del Macizo, Cauca-Colombia

Memoria

Tengo en mis manos memorias viejas, historias de otro tiempo, saberes venidos de lejos, Unos enraizados en el agua y las alturas de la cordillera central, Otros viajantes desde la verde y profunda selva Amazónica Vinieron a posarse en estás manos maciceñas, que fluyen como agua, suaves como la tierra negra, verdes hojas e incendiarias como la candela del fogón En ellas tengo recetas milenarias que sirven para criar el mundo, la tierra toda con ellas cuido gente, animales, plantas, vida y muerte Hay en estas líneas escritos secretos que espantan enfermedades, dolores y miedos En estas huellas están grabadas las fórmulas del amor, la caricia que cura, el roce que eriza, el golpe que defiende, la fuerza que protege, son llamadoras de la risa que se esconde en las cosquillas Mis manos, son las manos de mi madre, son las manos de mis abuelas, son herederas de fortalezas, quehaceres y también resabios y pesares Aquí, se quedaron los sabores, la medida precisa en las comidas, la calidez de la sopa, el amor del sancocho, la alegría del café, el querer que se siente en la lengua y el calorcito de la panza Son dulces como la panela, quitan la sed cuál chuya de maíz con hojita de naranjo, están llenas de cicatrices invisibles y se rehúsan a ser duras como la tierra del corral, aunque me llame María y tenga el corazón de fuego Estás manos son sembradoras de futuros, hierbas, ofrendas y conjuros Tienen el color de la tierra y la sensibilidad de la mantequilla al calor Aquí se escriben todos los amores, son las que disfrutan del correr del agua, del sabor de la tierra, de la libertad del viento, las que cantan al sol Son rebeldes estás manos que andan buscando aprendizajes, quereres, curiosidades y otras manos para juntas hacer otro mundo posible Corazóndefuego