1 minute read

Enfría temperatura las ventas: rematan diversas artesanías

Debido al mal tiempo que se presentó durante el fin de semana y parte del lunes en la zona arqueológica de Chichén Itzá, vendedores ambulantes del exterior del sitio, en su mayoría provenientes del municipio de Pisté, se quejaron de bajas ventas, lo que los orilló a rematar sus productos para poder llevar el pan a su mesa.

Los comerciantes aseguraron que su estrategia de ventas se enfocan en el “antes” y “después” de la visita de los turistas, pero aprovechan que la gente está saliendo de su recorrido por el sitio para darles “mejor precio”, que no se encuentra dentro de la zona; sin embargo, cuando llueve o hace frío los turistas corren a sus automóviles y no se detienen a comprar.

Advertisement

“En estos días, las personas que entraron a ver el equinoccio no permanecían mucho tiempo y se iban, porque había mal tiempo; nosotros, aun con el clima, veni- mos con la esperanza de poder vender algo, lo que sea es bueno, caminamos desde Pisté para ver si colocamos la mercancía, pues muchos compran adentro, por lo que les tenemos que dar una mejor promoción, pero ahora sí que no hemos vendido nada y eso nos deja sin que llevarle a la familia para comer”, dijo Pedro Chuc May. Según los elementos de seguridad que rodean la zona prehispánica, hay aproximadamente 500 comerciantes en la periferia de Chichén Itzá, los cuales el 60 por ciento son ancianos, por lo que se exponen a enfermarse con tal de vender.

(Darcet Salazar)

This article is from: