



Con la tradicional corrida de toros en la noche más mexicana, los queretanos disfrutan, en Juriquilla, la celebración del Día de la Independencia, acompañados de tres grandes figuras taurinas y en medio de un gran ambiente patriótico
Texto: Carlos Curiel Foto: Armando Vázquez
Querétaro vive una tradición muy arraigada cuando se trata de festejar la Independencia de México: las corridas que se llevan a cabo en la Plaza de Toros de Provincia Juriquilla.
Para este año, el cartel estaba compuesto por el rejoneador Jorge Hernández Gárate, quien celebraría su 20 aniversario desde la alternativa; los toreros Román Collado y Diego San Román, valenciano y queretano, respectivamente, y un mano a mano entre los Forcados de Querétaro y los de Juriquilla.
Antes de la corrida, los asistentes comenzaron la noche en el pabellón gastronómico, donde los puestos de antojitos y comida mexicana ya los esperaban para celebrar también el 37 aniversario de
la Plaza de Toros de Juriquilla, que, cada año, ha visto, en su escenario, grandes faenas y la consagración de distintas figuras taurinas.
Como era de esperarse, la familia Torres Landa asistió al emblemático coso, encabezados por Juan Arturo ‘el Pollito’, quien, antes de iniciar la corrida, felicitó a los toreros que ya se encontraban listos para hacerle frente a la lidia de los de San Miguel de Mimiahuapam.
El pabellón gastronómico fue un éxito y eso se pudo comprobar con la respuesta positiva de los queretanos, quienes respondieron con un lleno en la plaza y una asistencia a la verbena, donde, más tarde, se festejó el Grito de Independencia.
La fiesta brava y el ambiente mexicano resultaron una excelente combinación para vivir a flor de piel la libertad y la hermandad que se respira en este país y que solo esta fórmula es capaz de desarrollar.