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En el aula probamos y mostramos nuestra excelencia educativa

Desde el 2018 el Boletín del Observatorio, correspondiente al mes de enero, está dedicado a recoger reflexiones e hitos seleccionados por los directores de sede, escuela y centrales. No es una Cuenta Anual, pero resulta interesante leer aquello que las distintas autoridades consideran valioso en su área de gestión, fruto del trabajo intenso de equipos de colaboradores que llevan a cabo lo que sus jefaturas estiman relevante para cumplir la misión de Duoc UC.

El escritor y artista británico John Ruskin afirmaba que la calidad nunca es un accidente, ya que es la consecuencia del esfuerzo de la inteligencia, y nosotros podríamos agregar que para una institución como la nuestra, también es esencial el trabajo continuo y coherente de equipos que se mueven en torno a lineamientos claros y en sintonía con los tiempos que se viven. Ninguna autoridad es capaz de lograr calidad sino es acompañado por la voluntad, inteligencia y energía de al menos la mayoría de los miembros de la comunidad. Esto es esencial. Además, en nuestro caso contamos con la permanente ayuda de nuestro patrono San José. Leer el Boletín es comprobar que Duoc UC está compuesto de una suma de voluntades racionales que han organizado el año 2022 en torno a lograr que la misión, visión y propósito institucional se cumpla. Cada una de las áreas de gestión aporta lo necesario para que el conjunto pueda lograr los objetivos planteados y demandados.

Sabemos que nuestra hoja de ruta es el Plan de Desarrollo 2021-25 y este nos plantea variados desafíos por todos acordados. Al mirar el Boletín es posible comprobar que este documento nos inspira a la acción con sentido.

Asimismo, poco a poco avanzamos en una renovada cultura organizacional que estamos promoviendo con mucho entusiasmo y con conciencia plena que un cambio de este tipo es de suyo lento en su aprendizaje, pero que día tras día, los frutos serán más visibles. En varias iniciativas que muestra este Boletín N°58, nos entusiasma saber que el cambio se está manifestando y que avanzamos hacia una cultura que nos muestra una nueva manera de hacer las cosas con el soporte que nos ofrece la tecnología vigente; que pone el foco en la creación de valor; que apoya la descentralización y el trabajo armónico entre los distintos equipos; que no le teme a la innovación, fomentando en las personas su creatividad única e irrepetible; que fluye la participación de todos y todas; que fomenta una ética laboral que sea un ejemplo para las instituciones educativas; que piensa diariamente en nuestra misión, visión y propósito institucional y lo qué debemos hacer para que sea beneficiosa para nuestros estudiantes y sus familias.

No se trata solo de recordar eventos desagregados, se trata de entender que la suma inteligente de estos construye una armónica y eficaz realidad educativa. Cuando incentivamos la extensión en todas las sedes, lo que potenciamos es el contacto bidireccional con la comunidad, porque tenemos mucho que dar y mucho que recibir. Por esto me alegro de muchas iniciativas en este sentido que nos muestra el Boletín N°58.

En materias académicas avanzamos y se percibe claridad en los propósi- tos. Variadas escuelas y direcciones centrales así lo muestran en las distintas columnas escritas. El tiempo actual nos exige dinamismo y rapidez en las decisiones, con más atrevimiento hacia la acción y el hacer con sentido. En esta tarea es sustancial el apoyo de los más de 4.000 docentes que tenemos, ya que es en el aula el lugar en que ocurre lo más esencial para Duoc UC: La formación de buenas y competentes personas.

También deseo destacar los avances en todas las áreas de la institución. Nombrarlas a todas no es factible, pero sí destacar que es a través del trabajo armónico de toda nuestra comunidad que avanzaremos hacia una mayor excelencia, esto último es una característica sustancial que debe ser parte de nuestro ADN y, por tanto, permanente.

Sin duda que esta frase clásica, por todos escuchada, tiene hoy para mí una potencialidad enorme: Representa lo que siento en la misión que se me ha encomendado como Capellán de Duoc UC. Es una misión que viene siempre acompañada de desafíos, pero también de esperanza en un camino que se vive con otros y para otros, que se vive en comunidad.

Después de ser Capellán de la sede Alameda, Plaza Vespucio y San Joaquín, y desde ahí colaborando como Capellán del Área Social, pude profundizar en el valor que Duoc UC generaba entre sus estudiantes. Me quedé con una mirada muy interesante del servicio vivido, para aquel entonces, en los proyectos A+S (aprendizaje y servicio), acciones potentes que favorecía la formación de los alumnos y alumnas, en el compromiso por el bien común, la identidad institucional y el sentido del ser humano.

Parto de un Duoc UC con cerca de

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